Aichi Chiryu

Shukusha
[Misato; Yin]

Yin tomó la mano de Misato y salió del agua con su ayuda; y sonrió cuando ella lo ayudó delicadamente a secar su rostro y cabello; no la interrumpió hasta que habló de su siguiente plan de acción —Yo quiero ir a la casa de armamento; quiero ver el sitio dónde murió mi hermano; y preguntar en dónde fue enterrado o quemado —dijo con seriedad —Quiero despedirme de él. Puedo alcanzarte en el dojo después —le sonrió —seguramente derrotarás a quien sea que retes.

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

Yin parecía guardar cierto pesar por el destino de su hermano, incluso si acabo con la vida de su padre o intento matarlo, seguía siendo su familia.

—Esta bien, saluda al herrero de mi parte, de seguro ya debe saber de m presencia.

Despedí a Yin con un beso en la mejilla y me aliste para partir al dojo. Aún sentía cierta pena por no poder haber llevado a Masaki con vida ante los Tao. Así al menos habría experimentado cierto remordimiento por el tormento de Mara.

 

Dojo
[Misato]

Misato se despidió de Yin; él se alejó con una gran sonrisa después del beso en la mejilla.

El dojo era un sitio muy animado; a diferencia de otros dojos; un hombre estaba al centro dirigiendo a un gran grupo de pequeños discípulos; la mayoría de ellos no podían exceder sus trece primaveras.
El hombre levantó la vista al observar a Misato y al instante llamó la atención a sus alumnos —HOY TENEMOS LA FORTUNA DE QUE UNA DE NUESTRAS SALVADORAS NOS HONRE CON SU PRESENCIA — habló con fuerza y gran volumen para que todos sus alumnos lo escucharan y obedecieran. Al instante los niños se giraron y miraron a la entrada y ante Misato todos hicieron una reverencia formal. Incluyendo al instructor.

—¡MISATO! CHRIRYU RESPONDE—gritó el instructor

—SIEMPRE— respondieron los alumnos

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

Camine directo al dojo recibiendo el saludo cálido de la gente de Chiryu en el camino. Al llegar escuché una cantidad de voces siendo dirigidas por alguien mayor...era voces de niños, el dojo parecía un lugar rebosante de vida y bienestar, algo que esté pueblo y todo japón merecía.

Cuando el maestro reparo en mi presencia llamo la atención de los demás niños para saludarme. No pude sino sonreír por lo bien que era ver a Chiryu con un espíritu revitalizado.

—El honor es mío también—respondió inclinandome ante ellos— Me conmueve ver a todos con un espíritu renovado, gracias a los kamis tenemos la oportunidad de forjar nuestro futuro. Mismo futuro que veo en los pequeños entrenando con dedicación.

Observe a cada uno esperando alguna pregunta sobre lo ocurrido en la batalla contra Masaki, esperando alguna historia de una de sus salvadores. Pero antes preferí contar mis intenciones en el dojo.

—Señor lo siento si interrumpo pero he venido a entrenar en su dojo...si no es molestia podría ayudarme con un combate de práctica.

Sabia que el aceptaría, pero ser una salvadora no significaba dejar de lado la cortesía para imponerme. Pensaba en enfrentarme a algunos de los pequeños, quería saber que tan fuerte serían los hijos de está ciudad.

 

Dojo
[Misato]

El hombre afirmó con fuerza —Será un honor mostrarle las semillas que usted y Kenzaburo han plantado en esta ciudad — dijo mirando a sus alumnos — Gojo — mencionó el maestro; y un pequeño niño dio un paso al frente.

​

El niño se colocó frente a Misato, no sin antes hacer una reverencia. Otro de los niños le entregó a Misato su bokken, así podrían practicar.

—Tanto usted como el señor Kenzaburo son héroes en Chiryu, todos aquí buscamos convertirnos en guerreros tan fuertes como ustedes, para poder defender Chiryu — dijo con seguridad el pequeño Gojo.

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama
El maestro, como era de esperar acepto con entusiasmo permitir mi entrenamiento en su dojo.El maestro llamo a uno de sus pequeños discípulos
Entre el grupo un niño llamado Gojo se ofreció a entrenar conmigo, respondí inclinandome ante el alumno mientras recibía un bokken de otro niño del dojo.

—Gracias pequeño— sentí el peso de la espada d madera y observé a Gojo con una sonrisa por tan honorables palabras— Estaré muy complacida y honrada de ver el fruto de tu esfuerzo, por favor muéstrame cuánto has aprendido.
Para mí alegría no solo el espíritu de trabajo de Chiryu había renacido, la semilla de una nueva generación de guerreros estaba por dar a la ciudad una gran oportunidad para ser reconocida.

Luego de una última reverencia me coloque en posición, el combate inició

 

Dojo
[Misato]

Gojo logró bloquear el poderoso ataque de Misato; al instante podía notar la fuerza que tenía el pequeño en las piernas, pues no cedió de su lugar ante el bloqueó; Gojo se logró liberar para después atacar a Misato; tenía una gran velocidad, por lo que pudo burlar la defensa de Misato, conectando el impacto e las costillas, ese ataque fue fuerte; pero Misato podía notar como los brazos de Gojo ya temblaban, aun le faltaba fuerza en la parte superior de su cuerpo.

—Hemos aprendido demasiado de su valentía y del señor Kenzaburo — respondió Gojo con decisión — Yo cargaba leña para mantener los baños calientes; mis piernas siempre han sido fuertes —bajó la mirada —Y cuando Chiryu me necesitó; usé la fuerza de mis piernas para correr lo más lejos que pude —volvió a levantar la mirada —Ya no seré un cobarde, defenderé mi hogar, usaré mi fuerza aunque no sea suficiente; pelearé aunque pueda perder la vida. ¡Porque jamás volveré a huir!

• Misato
• Gojo

• 
  Pv= 68
  Fuerza= 12
  Protección= 3
  
• 
  Pv= 80
  Fuerza= 3
  Protección= 12
  

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

El combate inició y pude darme cuenta de la habilidad de Gojo, habia logrado conectar un golpe que consiguió herirme...demostró un verdadero esfuerzo en su entrenamiento, eso me alegraba.

Gojo prometia defender con honor a su tierra, aún era pequeño y sus brazos aún temblaban, más no su espíritu.

—Huir también puede ser un acto de sensatez—puntualice pensando en mi nueva vida como shinobi, huir y mantenerme con vida significaba una victoria sobre todo si portaba información valiosa—debes reconocer tus limitaciones y trabajar cada día por ser mejor. Eras un niño y no estabas en condición.

Huir, tal como lo había hecho cuando Masaki estuve a punto de morir, supe entonces reconocer cierta falta de disciplina de mi parte, la que advertía el maestro Harima.

—Veo que aún tus brazos tiemblan, sin embargo estoy segura que los kamis te han dado la oportunidad de demostrar a un nuevo guerrero, uno que lucha por su tierra hasta la muerte.

Tome posición y aseste un nuevo golpe al alumno, aprovechando la brecha en su defensa. Aunque era difícil, su fuerte era la velocidad.

 

Dojo
[Misato]

Gojo miró a Misato maravillado; aquellas palabras lo hicieron sentirse bien, lo había escuchado de su madre justificándolo; pero él creía que su madre hablaría con su amor y no con objetividad; pero Misato era una guerrera, y por lo tanto era sabia ante sus ojos —Tiene razón, sensei

Después Misato atacó con fuerza pero Gojo fue más rápido, esquivándola para después atacarla; pero su fuerza no era suficiente para romper la defensa de Misato; parecía que había gastado toda su fuerza en aquel primer ataque, haciendo que el segundo fuera más débil.

• Misato
• Gojo

• 
  Pv= 68
  Fuerza= 12
  Protección= 3
  
• 
  Pv= 80
  Fuerza= 3
  Protección= 12
  

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

Asenti con una sonrisa al pequeño, se veía más motivado ahora que escuchó de mi voz el otro lado de la acción como guerrero en entrenamiento, sabía que debía ser cautelosa al encender la llama de lucha.

El niño no logro asestar un golpe como lo fue en una primera oportunidad.

—trata de no forzar mucho tiempo el agarre; provocará tu cansancio. Hazlo cuando tengas oportunidad y sientas muy cerca la respiración de tu oponente.

De niña tuve el mismo problema, mi orgullo llegó a nublar mi juicio y abusar de mi capacidad, provocando un agotamiento con la simple acción de forzar en exceso el agarre. No era capaz de mantener un equilibrio.

De nuevo sujete el bokken y espere el momento para burlar la velocidad y defensa de Gojo.

 

Dojo
[Misato]

Gojo escuchó los consejos de Misato mientras recibía el impacto directamente; Misato notó que Gojo tenía mejor entrenamiento defensivo, pues resistió el impacto; seguramente al cortar leña sufrió varios impactos imprevistos, los cuales lo hicieron más fuerte para resistir golpes.

Gojo afirmó ante las palabras de Misato y ejecutó tal cual como ella le había mencionando; conectando nuevamente con fuerza sobre Misato. Gojo se mantuvo atento, no celebró; relajó su agarre y se preparó para el siguiente movimiento de Misato.

• Misato
• Gojo

• 
  Pv= 55
  Fuerza= 12
  Protección= 3
  
• 
  Pv= 73
  Fuerza= 3
  Protección= 12
  

Contenido oculto

Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

Logré burlar la defensa de Gojo pero me enteré que su cuerpo podía resistir impactos, seguramente por haber sido golpeado con troncos de la leña que el mismo cortaba.

Observe complacida ver cómo el pequeño intentaba equilibrar el agarre de la espada, la fuerza que debía aplicar al momento de cercanía y debilidad del oponente.

Esta vez solo guarde silencio y me prepare para ejecutar otro ataque.

 

Dojo
[Misato]

Ambos atacaron; y ambos parecieron resistir muy bien el impacto. Pero fue Gojo quién dejó caer su arma para sacudir sus manos. Estaba aturdido por la fuerza —Lo lamento; no puedo seguir — mencionó el niño.

—Cómo verá; mis discípulos aun son jóvenes. Pero gracias ustedes, nuestros salvadores; su espíritu de lucha ha nacido nuevamente en Chiryu —comentó el maestro —Yo sólo soy un maestro en Iado; pero creo que con buena disciplina, podremos crear una gran escuela en Chiryu.

• Misato
• Gojo

• 
  Pv= 47
  Fuerza= 12
  Protección= 3
  
• 
  Pv= 65
  Fuerza= 3
  Protección= 12
  

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Ikoma-kun +50 EXP estadísticas actualizadas

 

Misato Aoyama

El ataque fue lo bastante poderoso para hacer frente a mi fuerza, si Gojo continuaba día tras día su entrenamiento sin duda llegaría a ser el orgullo de su familia y de Chiryu.

El ataque fue tal que el pequeño no tuvo las fuerzas para sujetar el arma, había llegado a su límite en el día, necesitaba descansar.

—Gojo, diste una muy buena muestra de tu fuerza se que si comes y entrenas mucho serás una leyenda—anime al niño dado una suave palmada en su cabeza— Kenzaburo estaría tan orgulloso como yo lo estoy ahora de ver tal fuerza.

El maestro señaló la juventud e inexperiencia de sus discípulos, pero existía la voluntad de resurgir como guerreros honorable de Chiryu.

—Tienen un largo camino por recorrer pero estoy segura por la mirada de los niños que todo quedara en buenas manos.

Mi cuerpo también lo sentía, había recibido una cantidad de golpes que me había dejado tan agotada como cuando enfrentamos a los bandidos de camino a Chiryu.

 

Dojo
[Misato]

Gojo se notaba muy contento con las palabras de Misato; e incluso sus compañeros sonreían, pues que más podían desear aquellos niños siendo que tenían a su ejemplo a seguir frente a ellos.

Todos hicieron una reverencia ante Misato, así como también lo hacía su maestro.

Las atenciones médicas hacia Misato no tardaron en llegar; el dojo contaba con un médico el cual atendió tanto a Misato como a Gojo y varios de los estudiantes que ya habían practicado con anterioridad, de esa manera pudieron convivir un poco más con Misato; enterándose de los últimos momentos de Kenzaburo que hizo llorar a unos cuantos niños. Pero antes de despedirse, juraron ante Misato que se volverían más fuertes y defenderían su ciudad.

​

Fue después de esos momentos tan conmovedores que Yin entró al dojo. Ya había pasado medio día desde su separación y se incorporó al dojo hasta llegar a Misato. Se le notaba tranquilo, y en su rostro estaba su habitual sonrisa calma.

—Creo que esta ciudad tiene una conexión con tu familia —dijo en voz baja hacia Misato — Toru Aoyama fue tu abuelo ¿No es cierto? —sonrió — Al parecer, el apellido Aoyama tiene una historia aquí en Chiryu

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

El entrenamiento habia concluido con la satisfacción de los pequeños de poder entrenar conmigo. No dude en avivar su espíritu y hacerlos sonreír, Chiryu merecía guerreros honorables capaces de proteger su tierra.

No fue necesario ir a la clínica, en el dojo recibimos la atención necesaria. El resto del tiempo comparti con los niños ciertas historias, como detalles de la batalla contra Masaki e inevitablemente hablar de Kenzaburo y su muerte en el campo de batalla, la noticia conmovió a los niños provocando el llanto en algunos.

—Kenzaburo estaría orgulloso de ustedes, lo mejor que podemos hacer para honrarlo es mejorar para proteger la ciudad que el salvo.

Los niños asi lo prometieron, me dieron su palabra de ser guerreros ejemplares.

—Me hace muy feliz escucharlos niños, sean buenos y cuídense.

El mediodía llegaba y junto a el Yin habia regresado, sonriente como siempre. Preferí evitar muestras de afecto frente a los niños asi que solo lo saludé con mi sonrisa.

Antes de preguntar Yin mencionó algo llamativo. ¿Conexión con mi familia? Luego Yin mencionó el nombre de mi abuelo, el al parecer había vivido algo importante para la ciudad.

—El abuelo vivio interesantes historias pero no era de hablar demasiado para no descuidar mi entrenamiento cuando niña—revise a Aoyama, su katana que ahora me acompañaba desde que mi tierra fue tomada por los Taira y tuve suerte de recuperar—la última historia fue como ayudo a un herrero amenazado por un espadachin.

Iba contar un par de detalles más pero me invadió la curiosidad de saber algo más.

—¿Fue con el herrero donde obtuviste esa información?

 

Dojo
[Misato; Yin]

Yin afirmó con orgullo; se sentía muy honrado de estar junto a Misato y en cada momento lo expresaba de maneras sutiles —Así es; el herrero me ha dicho que le gustaría poder ver a la nieta de Toru Aoyama — Yin estaba emocionado; pero su sonrisa perdió cierto brillo —Me comentó que Masaki venía a Chiryu con frecuencia... —Misato entendió al instante el porqué del cambio en la emoción de Yin.

—Masaki buscaba dar con la vieja familia de herreros que vivía aquí, la familia Ise; pero al parecer huyeron; el señor herrero siempre mantuvo esa información oculta de Masaki —Comentaba Yin; y cada vez que decía aquel nombre, desviaba la mirada — Pero mencionó que jamás se comportó hostil hasta su último encuentro, dijo que Masaki siempre hablaba con formalidad y buenos modales, que jamás lo intimidó con agresividad física sino con simples palabras elegantes, se bastaba con su inteligencia para intimidar; hasta que los conoció...—Yin se estaba desviando un poco de la historia principal; pero era entendible. No había escuchado demasiado de su hermano y cuando lo hizo, descubrió que ya no era la misma persona que conoció — Perdón; me distraje un poco de la historia...

Yin sonrió y comenzó a reír mientras intentaba recuperar el hilo argumental —Si; el señor Toru Aoyama ayudó a los Ise a escapar de las preguntas y sospechas de otro hombre antes de Masaki; aquel hombre se llamaba Bokuso. Este amenazó al ahora anciano en la armería, diciéndole que si no le decía dónde estaban los Ise, arrasaría con Chiryu —Yin negó — Pero Toru Aoyama enfrentó a Bokuso; al parecer, la pelea fue tan intensa que duró días; pero al final, el señor Toru Aoyama salió vencedor. Se dice que el cuerpo de Bokuso fue arrojado al pantano dónde murió y después de eliminar a Bokuso, se llevó a los Ise a un sitio secreto; dónde ya nadie los molestaría —sonrió —No me pude contener a preguntar a dónde los llevó —soltó una fuerte risa — Obviamente no me lo dijo.

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

Yin me confirmó de donde había obtenido la información, la verdad estaba sorprendida con el lazo que está ciudad poseia conmigo, con mi apellido.

Escuché también sobre Masaki y entre más atendía las palabras de Yin por un momento sentí que hablaba de otra persona y no del asesino salvaje que estuvo por arrebatar mi vida y la de Kenzaburo.

—Solo ese día...Yin ese día creo que muchos estuvimos tras esa arma y está acabo por corromperlo para que no fuera tan fácil arrebatarla de sus manos.

Pero decidí no comentar más pues Yin se había desviado de la historia de mi abuelo, según relató el salvo a una familia de herreros muy famosos en Chiryu, incluso había luchado por días...

—Justo debe ser la historia que nunca me contó, debía mejorar mi tecnica en cierto tiempo, era algo torpe aunque no lo creas—dije entre risas por el breve recuerdos. Saber que la misma ciudad que había salvado ya había sido salvada por mi abuelo me henchía de orgullo, oh abuelo de verdad estarías muy orgulloso.

—Chiryu tiene su fe en Inari el kami del arroz, justo es el mismo kami de mi tierra Hiroshima—observe a Yin con una sonrisa—debo decir que estoy muy feliz de ser parte de una historia de esperanza y salvación de un pueblo.

Conmigo portaba la misma arma que el abuelo llevo consigo hasta sus últimas batallas.

—Justo iba a saludar al herrero, quería ver qué tanto había prosperado luego de tanto tiempo.

 

Dojo
[Misato; Yin]

Los alumnos del dojo y su maestro se despidieron de Misato y Yin con honores, Yin se avergonzó enormemente, pues ese honor no debía ser dirigido hacia él; pero aun así lo aceptó marcialmente, para después encaminarse junto con Misato a la herrería.


Casa de Armamento
[Misato; Yin]

El anciano levantó la vista al escuchar que alguien entraba nuevamente, al ver a Misato sonrió profundamente —Es un honor poder recibirla nuevamente en mejores condiciones — dijo mientras se acercaba a ellos.

En el suelo, aun permanecía una mancha ocre.

—Me he enterado de la muerte de su compañero, en verdad lo lamento profundamente —dijo bajando la vista —Si en ese momento hubiese tenido un yoroi... tal vez él seguiría con nosotros.

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Ikoma-kun

 

Misato Aoyama

Antes de salir del dojo todos se encargaron de despedirnos con honores, un muy lindo detalle de todos.

—El honor ha sido mío, continúen esforzándose por favor—me despedí con una reverencia y sonreí al ver a Yin que parecía muy apenado por el trato recibido.
Luego de la despedida nos dirigimos hasta la armería, cada paso que daba recogía aquel día tan fatídico, cuando pude escapar y regresar para ayudar a Kenzaburo.

Al deslizar la puerta observe alrededor y pude ver cómo una mancha ocre aún era visible. Sabía que aún era el rastro de sangre de aquel día, estuve tan cerca de morir...mire de reojo a Yin y pensé en como habría sido para el saber de mi muerte.

Las palabras del viejo herrero me sacaron del trance y sonreí en respuesta a su saludo.

—Tambien me alegro de verlo con bien señor—salude con una breve inclinación, el armero entonces mencionó lo de Kenzaburo sabía lo que había ocurrido con el.

—Aun lamento no haber estado en una posición cercana a el para salvarlo cómo lo hice aquí, pero al final era un guerrero dispuesto a caer con honor—dije algo cabizbaja, la armería inevitablemente revivia mi primera y última misión de Kenzaburo.

—Por eso día tras día entreno para conseguir el futuro que hubiese querido—Concluí con otra sonrisa para no mermar nuestros ánimos, se suponía que debí ser una visita agradable.

—Por cierto escuché que Chiryu ya tuvo un héroe hace mucho—tome a Aoyama y la mostré con respeto al armero el arma que pudo haber sido utilizada para la salvación del clan de herreros.

>>Esta katana acompaño al abuelo hasta sus últimas batallas, ahora yo Aoyama Misato tengo el honor de saber sobre su historia en Chiryu.