[Capitulo Ocho]: Nueva semana... ¡Quiero Morir!

¿Qué había ocurrido? ¿qué había ocurrido?....¡¿qué?!
—Buenos días Gakupo-san, ¿le sucede algo?— escuché la voz de una mujer. Levanté mi cabeza y miré a la chica, la tomé de los hombros y con preocupación le dije:
— Alguien...alguien robó mi Katana— No sabía como me veía pero estaba tan preocupado que no pensaba en nada más. Ella se veía seria, ¿podría ser que Defoko hubiera tomado mi espada? No...Ella no haría algo así, el día anterior me había demostrado que era muy noble para hacer algo de esa manera.

 

El me tomo de los hombros y en ese momento sentí como si se fuera a repetir una escena que sufrí en el instituto… ellos me tomaron por los hombros y luego intentaron golpearme… eran recuerdos malos, me zafe de golpe de Gakupo-san y lo mire preocupada pero luego escuche — Alguien...alguien robó mi Katana — eso lo dijo en un tono muy preocupado ¿así que a el también le robaron algo preciado? Me pregunte ya que las Uvas de peluche que desparecieron era el único recuerdo que tenia de mi infancia junto a mi familia.

Luego le mire preocupada — ¿habrá sido un ladrón?— dije de nuevo en mi tono neutro ya que no me gustaba mostrar sentimiento alguno.

 

Vi como un tipo de pelo morado entro al aula con un peculiar peinado, pero se le veía preocupado y ansioso, luego como otra persona igual de color morado, pero corto, se le acerco y empezaron a platicar, pero escuche la palabra "Robó" y me sobresalte, no habrán robado a Nova, o si...¿?

 

Ella se soltó de mi agarre como si le hubiera dado un choque eléctrico, tal vez se sintió incómoda. La verdad ya no sabía ni que hacía, esa Katana era casi la mitad de mi vida, un objeto de mis verdaderos padres. Mencionó algo acerca de un ladrón, ¿podría ser? Quizás. Con un gesto de preocupación extrema me recargué de nuevo en la banca.— ¿Por qué?— me quejé, parecía niño, incluso Defoko parecía más madura. Levanté mi cabeza y la miré con una sonrisa nerviosa— Lamento que me veas así, es vergonzoso— admití con la misma sonrisa.

 

él se volvió a recargar en la banca realmente parecía que ese era un objeto importante, — Lamento que me veas así, es vergonzoso— dijo Gakupo-san, — realmente no importa lo que ahora debemos hacer es ir a la otra clase y después si quieres te puedo ayudar a buscar tu Katana y mis uvas — dije tomando mi mochila poniéndole una mano en el hombro —¿ bienes? — pregunte con una sonrisa, salimos del salón y encontramos a una chica de cabello blanco algo pasmada — ¿hola? — pregunte moviendo mi mano en su cara.

 

Ciertamente, estaba horrorizada, que me robaran a Nova, ciertamente era posible, el era tan lindo, que era imposible no quererlo, pero no quería que me volvieran a robar mis cosas importantes, como el la primaria, y que tal se Nova, me abandono?, no seria la primera vez que alguien lo hace, y mas por la forma en la que le trate....No, mejor no pienso en esas cosas, entonces, vi una mano que pasaba por mis ojos, y una cara preocupada, parpadee, y volví a parpadear,
—¿Hola?—Dijo la joven preocupada
—Hola—dije y sonreí, no debía de preocuparme, sabia que Nova no me abandonaría

 

— ¿todo bien aquí? — pregunte ya que la chica estaba muy ensimismada y realmente lo sabía ya que yo era así la mayor parte del tiempo, luego recordé que todas las clases se daban en la misma aula, pero esta vez no me avergoncé así que jale a la chica dentro del salón para que respondiera mi pregunta.

 

—¿Estas bien?—me pregunto la joven antes de jalarme al aula
—Te mentiría si te dijera que si—Dije triste, quería mucho a Nova

 

Mire todo el escándalo con cierto sueño, era raro ver a Gakupo tan alterado y más cuando esta vez no había hecho yo ninguna broma a su persona— ¿Por qué todos hablan de robos? —sonreí un poco tranquilo— no han recibido la carta del juego —estaba recordando sobre las cartas que llegaron esta mañana, estaba seguro de haberle dejado una en el buro a Gakupo, pero parecía no la leyó, yo apenas la acababa de leer, aunque aún sin novedades.

 

—Te mentiría si te dijera que si— contesto realmente parecía dolida pero en ese momento no sabía cómo actuar ya que nunca había sufrido situaciones como esa mis hermanos y yo cada quien se hacía cargo de lo suyo y casi nunca nos contábamos nuestros problemas así que era raro para mí y pidiendo ayuda le di un pequeños codazo a Gakupo-san que estaba tras de mí. —¿Por qué? — fue lo único que pude contestar.

 

Defoko me dijo que si la acompañaba a la siguiente clase, me sentí confundido...¿No sabía que las clases se impartían en el mismo salón? Traté de decirle algo pero se había marchado, sin embargo, regresó con una chica de cabello plateado que hasta el momento no conocía. Ella se veía deprimida...¿también le habían robado? Escuché la voz de Mikuo, mirándolo confundido, le pregunté:
—¿qué carta?— esta vez se veía inofensivo, con cero ganas de molestarme y en el fondo lo agradecí, no era el mejor momento. Defoko me dio un codazo y la volteé a ver— ¿qué sucede?

 

Le mire desconcertada, y reaccione de como debería de ser mi expresión ahora, y me recompuse
—Creo que me han robado algo de suma importancia—Mis ojos se volvieron acuosos, —Nova

 

—Creo que me han robado algo de suma importancia— así que a ella también pensé —Nova — ella empezó a ponerse sentimental y realmente no sabía que hacer así que ceje caer mi mochila y la abrase— Gakupo-san a ella también le han robado— dije con la chica en mis brazos tratando de consolarla, estaba tan ensimismada con aquel dilema de las Uvas, La Katana y “Nova” que no había notado al chico que estaba a lado de Gakupo-san.

 

— Verás Gakupo-kun —dije con una sonrisa— a los directivos se les ha hecho fácil hacer una actividad para jugar entre nosotros —saque unos puerros y empecé a masticarlos— el juego de los objetos perdidos —hice un segundo de silencio— cinco alumnos han perdido sus cosas y han sido puestas en las cosas de otros alumnos, los alumnos tienen hasta el final de su día para encontrar quien tiene su objeto preciado —o algo así recordaba— los tres primeros en lograrlo obtendrán alguna recompensa —le miré— en cambio los que tienen algún objeto deben ocultarlo hasta el final del día —suspiré— los que perdieron un objeto tienen derecho a preguntar solo tres veces a alguien sobre quien tiene su objeto, sino quedan fuera del juego, y los que tienen un objeto perdido no pueden decir a nadie que objeto tienen ni de quien es —trate de respirar un poco, incluso para mi esa explicación era complicada— lo bueno es que todos recuperarán sus cosas al final del día, lo malo —sonreí— tu y yo recibimos cartas, estamos en el juego.

 

Me sobresalte mucho al sentir a la joven abrazarme, a pesar de ser extranjera, ni mis padres me abrazaban, pero me dio mucha ternura al ver que ella me llegaba al hombro, y le abrace, pero luego vi a Mikuo y despues de su explicacion, ciertamente me enoje
ESTABAN JUGANDO CON NUESTROS SENTIMIENTOS!!

 

Tan pronto volteé la chica de cabello plateado mencionó que le habían robado algo llamado "Nova". Defoko me lo comprobó. ¿Así que no era el único? Estaba esa chica, creo que Defoko había mencionado algo de unas Uvas y finalmente yo; ¿seríamos los únicos? Esta pensando en la posibilidad hasta que Mikuo comenzó a explicarme todo...¿Había sido objetivo de la dirección? Me sentía usado.
O.O
—¿Por qué yo? — me lamenté y lo miré de nuevo— ¿Y que te robaron a ti?— pregunté. La parte amable de Mikuo me agradaba mucho, era como un peso menos de encima. Pensé: solo tenía tres preguntas, tenía que tener cuidado y observar bien a todos, para saber que había pasado...La recompensa no me importaba, solo quería mi Katana devuelta.

 

Había entrado tarde a clase después de mucho tiempo que se tomó buscando su MP3, pero pasó desapercibido ante los ojos del maestro.. Se sentó en un asiento vacío que ubicó al lado de Kaiko. Volteó a verla y le dedicó una pequeña sonrisa mientras sacaba su libreta y un par de plumas.

 

— ¿A mi? —recargue mi espalda en la silla, inclinandola un poco— parece que me has malinterpretado Gakupo, que este en el juego no significa que yo haya perdido algo —no dije más y me dispuse a seguir escribiendo en mi libreta.

 

vi que todos se exaltaron un poco … bueno mucho ya que a todos le hacia falta su objeto, luego de la explicacion de aquel chico me quedo todo claro -¿Entonces solo tenemos que encontrarlos- dije con despreocupacion, ya que de saber que no era tan tonta como para perder una Uvas de peluche mas grandes que mi almoada era un punto bueno para mi.

Luego mire a todos con una mirada seria pero con sentimiento – ¡entonces a jugar se ha dicho¡- dije soltando a la chica y brincando aunque mis Uvas eran importantes realmente nunca habia jugado con compañeros.

 

—*Tranquilízate Maika, recuerda tu no dices grocerias, tu no dices grocerias, tu no*—Pensaba con desesperación
—Les juro que si alguna vez veo al director, le dare un poco de mi mente—Dije ya mas que molesta, QUIERA YA A NOVA!
Pero solo podía decir, tres veces "¿tu tienes a nova?", Pero no aguantaría a estar tanto tiempo sin mi nova, así que por esta vez, solo por esta, jugaría su juego