Camino de los fieles

Bolm, brazos cruzados, pareció meditar.

—Raza nuestra muy hostil es, sigo mismo incluso con. Y esta es situación la prueba: la maldición empezó de Zalera, y "muriendo" los varelkrafts íbamos. ¿Hizo qué Krom, líder el? Nos abandonar a mayores e infértiles. Que mantener vivos decía a cuantos pueda, cargas las nosotros éramos. ¡Hmpf! Bastardo es Krom, muy por Héroe que sea. La cabeza perdido ha; nos tras el portón encerró. A nadie cruzar deja campos sagrados los. ... de nuevo si alguien con él acabara, entrar podríamos, a familiares unirnos nuevo de.

Suspiró.

—Yo no familia tengo, aunque. Por eso, perdí esperanzas ya. Ni hogar, no tengo ni quien me quiera. Un hijo puedo no tener, aunque embarazado quiera me dejar... duerme Zoa, y duermen nuevas vidas. Triste de un pobre piromántico solitario historia, ¿eh?


>> Ofrecerle cobijo en el templo.
>> Dejar de hablar.

 

Espella

Je, así que Krom, el héroe actual, había decidido dejar a los "inútiles" atrás. Una decisión sabia en mi opinión, sin duda. Los débiles no le servían de nada en una situación como esta, evidentemente. Respetaba a ese Krom, sin duda.

Pero pensaba sacar provecho de cualquier situación posible. Y el deseo de venganza de aquel Varelkraft podía resultarle muy útil, claro que sí.

—Así que eso fue lo que pasó, se deshizo de ustedes como simple basura y los dejó que siguiesen avanzando por el camino sin final de la muerte. Tsk, entiendo cómo te sientes, con esas ganas de querer vengarte de Krom por lo que les ha hecho, ¿Eh? De acuerdo, te echaré una mano. Vengo de un templo donde podrás tener cobijo y alimento, al menos el suficiente para que no sigas en este estado tan deplorable. A cambio de convertirte en mi lacayo, evidentemente.

>>Te ayudaré a acabar con Krom para que los Varelkraft exiliados no tengan que seguir viviendo en la miseria, sí. Así que espero que estés agradecido con esta oferta que te hago.

>> Ofrecerle cobijo en el templo.

 

El tipo se sorprendió gratamente, levantándose del sitio. Era... curioso. El "fuego" que corría dentro de las rendijas de su cuerpo que, como élite, tenía por el pecho y por todo el torso, estaban medio vacías, con solo un poco de calor brillando dentro de ellas. ¿Sería eso producto de la edad? ¿O producto del estado deplorable en el que se encontraba?

—¿Veras de? ¿Una humana ofrece, me cobijo? Conozco templo que me hablas del... otro al lado del Camino de los Fieles, sí. Temor nos da Varelkrafts a los de acercarnos templo al, porque humanos todos los que lo habitan son. P-Pero tu si ofreces me, no rechazaré hospitalidad tu; gracias mil darte debo, jovencita.

Con algo de esfuerzo, comenzó a caminar.

—Seguida en iré. No preocupes te... podré llegar solo.

Y, así, se marchó con cuidado, caminando con pesadez.

 

Espella

Espella se encogió de hombros, viendo a Bolm marcharse pesadamente. Esperaba que los del templo no lo confundiesen con un enemigo y le matasen. No es que le preocupase especialmente, pero siempre era una pena perder herramientas útiles.

El resto de miembros de la comunidad, sin embargo, sí que no lucían demasiado útiles. Sobre todo, aquel anciano que parecía morirse de frío.

Quizá podría arrancarlo de su sufrimiento y a cambio quedarse con el poco éter que debía quedar de su cuerpo, si es que acaso tenía alguno.

 

El tipo estaba tiritando mucho. Al notar que alguien se acercaba, alzó la cabeza, y, con un hilo de voz, susurró palabras casi ininteligibles.

—P-Piedad t-t-ten... frío... me d-da calor... b-bebida... c-caliente...

Sin duda, parecía que el "fuego" de su interior estaba apagándose, estaba, prácticamente, consumiéndose. Y eso, seguramente, acabaría con su vida.

¿Debería darle una bebida caliente?

 

Espella

—¿Piedad, dices? Por supuesto, ten un poco... —estiró su mano hacia el anciano, acumulando algo de magia de éter en su palma, como si fuese a lanzar una flecha de éter... o de hielo. Sin embargo, pronto el éter de su palma se esfumó—. Bah, seguro que en el estado en el que estás no consigo de ti mas que unas pequeñas motas de éter. No valdría ni lo que usaría para quitarte la vida. Anda, toma, pequeño cadáver con vida.

Y le arrojó, de mala gana y con brusquedad, su única bebida caliente. El anciano no le servía de nada, ni vivo ni muerto, pero supuso que quizá su gratitud podría serle útil en algún improbable futuro. De todos modos, la inmundicia del lugar y sus habitantes le resultaba cada vez más desagradable.

 

Con ansias, el varelkraft tomó la bebida caliente, y fue como si se rejuveneciese por unos instantes. Sonriente, suspiró.

—G-Gracias, mujer buena eres tú. Asumo bella que también, humana aunque seas.

>> ... tal vez osadía sea una, pero, ¿pedir podría te algo más? Madera seca quizás y también, cuantas unas Flechas de fuego, cuatro bien estaría. N-Necesitamos fuego calentar para nos, y no producir podemos fuego consistente de forma. ¿Por favor, podrías...?

 

Espella

—... Piérdete —le dijo bruscamente, dándose la media vuelta y abandonando la ruinosa aldea. No iba a ser la mandadera de nadie, mucho menos de un anciano decrépito que no le valía de nada en lo absoluto. No le quedaron ganas ni siquiera de seguir explorando rumbo a la puerta de la zona oeste de la aldea; en su lugar, pasó al lado del guardia de mala de gana y salió de allí.

Tras eso, se dirigió a la zona norte del barrizal, en el momento que notó que el Varelkraft gigante también iba para allí. Pensaba derribarlo para desahogarse un poco.

 

Así pues, el gigante abordó a Espella, amenazante, rugiendo con ira. Desde luego, no dudaría en aplastarla al más mínimo descuido.

GIGANTE VARELKRAFT
Salud: 3500/3500
Movimientos:
-Barrido (poderoso golpe a media distancia usando su hacha gigante. 250 daño cortante, -80 ST)
-Espiral Ígnea (175 daño de fuego, -65 ST, acumula 80 de quemadura, media o corta distancia, daño en área)
Debilidades y resistencias:
-Resistente a daño contundente (x0,5)
-Resistente a daño de embestida (x0,5)
-Débil a daño de magia (x1,5)
-Débil a golpe por el lateral (x1,5)
-Débil a golpe por la espalda (x2)
Drops:
-Trozo de adamantita (51-70)
Éter obtenido:
-250 (individual) / 470 (dobles)

 

Espella

Sin precaución alguna se lanzó a la espalda del gigante, rodeándole rápidamente y cargando con sus estoques mágicos contra él. Lo único que le preocupaba en ese momento era descargar la frustración que sentía.

>>A la espalda + Aura mágica (Estoque) + Estoque x21

PS: 275/275
PC: 215/255
ST: 105/250 (+15)
Ratio de esquiva: -5 ST
Posición: A la espalda

Contenido oculto

Armas:
- Estoque +5: 72 Daño de embestida, -10 ST.
>> Hab.: por tres turnos, cada golpe del estoque acumulará 10 de lucidez. -25 PC.
- Bastón de mago: +10% fuerza de hechizos (aplicado ya).
- Hacha ligera +1: 58 Daño cortante, -25 ST.
Hechizos:
- Sable de éter (31 daño cortante, 56 daño de magia, ataca a corta distancia, -10 PC, -10 ST)
- Acelerar (reduce, por dos turnos, el gasto de ST, -50 PC
- Aura Mágica (añade 36 de daño mágico a un arma física por dos turnos, -40 PC)
- Disparo de hielo (38 de daño de hielo, -5 ST, -10 PC)
- Lluvia de éter (48 daño mágico, ataca en área, -10 ST, -25 PC)
- Flecha de éter (38 daño mágico, -5 ST, -10 PC)
- Bola de fuego (46 daño de fuego, -5 ST, -10 PC)
Reducción de daño:
- Daño cortante (-5%)
- Daño de embestida (-5%)
- Daño contundente (-5%)
- Daño mágico (-35%)
- Daño de fuego (-50%)
- Daño de hielo (-10%)
- Daño eléctrico (-5%)
Objetos equipables:
- Brebaje de éter (+33% PS) x 3 uds.
- Pócima de éter (+33% PC) x 1 ud.
- Pequeño cúmulo de éter (+300 éter) x1
- Trozo de adamantita x1
- Trozo grande de adamantita x1
- Mitad de adamantita x1
- Urna helada (añade a un arma física, por dos turnos, 56 de daño de hielo) x 1 ud.
- Urna ígnea (añade a un arma física, por dos turnos, 46 de daño de fuego) x 1 ud.
- Cóctel molotov (46 daño de fuego, daño en área) x5 uds.
- Madera seca (puede arrojarse y prenderse) x3 uds.
- Bebida caliente (sana el congelamiento) x2 ud.
- Guijarro (1 daño contundente, puede atraer rivales) x13 uds.
- Hierba de la fuerza (+40 ST perdida) x 1 ud.
- Ojo de pantera (lánzalo y te teletransportarás al punto al que la lanzaste) x1 ud.
- Cristal desintegrador (rómpelo y te llevará automáticamente al último pozo visitado o al templo) x 1 ud.
- Panacea (reduce el vaciado) x 6 uds.
Anillos:
- Movilidad (menos ST al reposicionarse)
-León (-ST en golpes de armas cuerpo a cuerpo)
-Seider (paso atrás gratis tras usar conjuro de armas)

 

Y con eso bastó para acabar con aquel gigante, pero, antes de caer, pudo darle un fuerte golpe con su arma, en represalia.


RV: -70 Ps.

GIGANTE VARELKRAFT
Salud: 0/3500
Movimientos:
-Barrido (poderoso golpe a media distancia usando su hacha gigante. 250 daño cortante, -80 ST)
-Espiral Ígnea (175 daño de fuego, -65 ST, acumula 80 de quemadura, media o corta distancia, daño en área)
Debilidades y resistencias:
-Resistente a daño contundente (x0,5)
-Resistente a daño de embestida (x0,5)
-Débil a daño de magia (x1,5)
-Débil a golpe por el lateral (x1,5)
-Débil a golpe por la espalda (x2)
Drops:
-Gran cúmulo de éter (1-20)
-Trozo de adamantita (51-70)
Éter obtenido:
-250 (individual) / 470 (dobles)

 

Espella

Aunque recibió algo de daño, en aquellos momentos no le preocupaba en lo más mínimo. Sólo había querido reventar algo, y ahora que lo había hecho, pudo volver con más tranquilidad al templo. No sabía muy bien cuál sería su siguiente movimiento, pero al menos sabía que no quería aparecerse por territorio Varelkraft en un rato.

Aquel anciano simplemente le había sacado de quicio. Se desplazó a la zona nordeste y directamente llegó al pozo del patio de la iglesia, pensando en teletransportarse al Templo.

 

Kiri

Funcionó... No podía creerlo. Mis ojos casi se empañaron, mostrando una debilidad inaceptable, cuando el que se hacía llamar El Orador me dio la razón. ¿Charlotte había confesado...? En cualquier caso, al fin había sido reconocido como un Elegido. Bufé, con desprecio por la afrenta que había sufrido. Pero no tenía tiempo ahora para exigirles nada.

El tipo me dio objetos y equipamiento que llevaba Charlotte. Ahora tenía muchas más cosas con las que defenderme, ¡incluso nuevas armas! Una emoción enorme me inundó. ¿Era orgullo propio...? No. No sabía que era. Quizás solo era paz, al volver al lugar que me correspondía.

Me fui, pues empezaba a sentirme incómodo, y a través de un pozo regresé al camino de los fieles, al patio de la iglesia. Allí pude aclarar algo mis pensamientos.

—No creas que te perdonaré la vida por esto, Charlotte... —susurré, antes de volver a ponerme en marcha.

 

Kiri

La salida del patio daba a la explanada de las bifurcaciones. Pude ver montañas de cadáveres custodiadas por numerosos Varelkrafts de distinta clase y rango. Había un par de élite, junto a otro gigantesco, y otros estándar. Asimismo, unas panteras recorrían la zona, de forma impredecible. ¿Por dónde era mejor ir...?

Buscando una ruta de escape, descubrí que no era el único allí. Je... Un visitante. Esperaba que no tuviera planes, porque pensaba llevarme todo lo que tuviera. Me escondí con sigilo, tanto de los enemigos como del extraño individuo, para aproximarme lo máximo posible. No fue hasta una distancia prudencial cuando me di cuenta.

—¡T-tú...! —exclamé, en una voz más alta de lo que quizás debí. Por desgracia, me descubrió, acechándole. ¡Mierda, por qué tenía que ser un puto bocazas!

>>¡Rápido, ven! Tenemos que hablar sobre los Elegidos.

>>Sobre nosotros —dije finalmente. Si ese tipo quisiera, podría aniquilarme allí mismo, así que tuve que tratar de llamar su atención, para conseguir que al menos me diera la oportunidad de hablar. Solo esperaba haberlo conseguido.

Contenido oculto

Bruno TDF

 

Sorec

Tal y como aconteciera en la Senda del Pecado, dejé que la acompañante de turno tomara la delantera para no importunarla en los planes que tuviera. A diferencia de los demás Elegidos, yo no tenía demasiadas prontitudes por acabar con los engendros que habitaban el Edén y verificar, como un investigador obsesionado, qué había más allá de ellos. Qué misterios rondaban este mundo. Era posible que los desconocidos que depositaban una suerte de esperanza en mi persona se sintieran ligeramente decepcionados por mi ritmo calmo en esta cuestión, pero mucho me temía que no podía permitir que deseos ajenos influyeran en la velocidad de mis acciones.

Ese era el pensamiento que predominaba en mi mente antes de conocer al chico.

Sentí su voz llamándome desde la distancia, distrayéndome de la ocupación de examinar, con la punta del fusil, el cuerpo de uno de los tantos Varelkraft habían perecido a manos de los terribles poderes de Espella. Me giré con lentitud para detectar, con mi único ojo, dos destellos celeste en el sombrío ambiente.

—¡Rápido, ven! —azuzaba— Tenemos que hablar sobre los Elegidos… Sobre nosotros.

Quizás fuese la última palabra lo que despertó mi interés por la nueva presencia en el Camino de los fieles, con tal fuerza que mi boca esbozó una sonrisa un tanto irónica. A mi ver, ese muchacho se veía un tanto frágil para ser un Elegido. Pero por educación, obvié cualquier comentario al respecto.

Me eché el fusil sobre el hombro y caminé hacia él. Si se había tomado la molestia de captar la atención de un desconocido como yo, que se encontraba ocupado revisando seres que había ayudado a asesinar, no había motivo para estar en guardia con él.

Lo saludé con un movimiento solemne de mano.

—Has logrado despertar mi curiosidad —dije, mirándole a los ojos con atención—. No te he visto en la Senda del Pecado, cuando todos fuimos despertados por la voz… Podría pensar que no eres un Elegido, pero veo en tus ojos que nos estás mintiendo. Por lo que me gustaría saber qué tienes para decir y, principalmente, tu nombre.

>>Yo soy Sorec, encantado.

 

Kiri

Poco a poco, vi al tipo acercarse, con el fusil a cuestas. No estaba en guardia ni nada similar, así que no pensaba que tuviera intenciones de atacarme, pero una vez se acercase... ¿Q-qué le diría? Me sentía intimidado por su mirada. Ugh...

—Hmpf, veo que te interesa lo que tenga que decir, ¿eh? —mascullé—. Así que Sorec... Yo soy Kiri. Probablemente no te suene mi nombre, pero yo... Soy uno de vosotros. Soy uno de los elegidos.

>>Y Charlotte es una impostora. ¿Recuerdas a la ninja? No hizo más que usurparme el puesto la muy... —mi tono comenzaba a levantarse, dejándome llevar por el rencor, así que tuve que calmarme, pues estaba en una situación delicada.

Miré fijamente a Sorec, intentando aguantarle la mirada, pero no fui capaz. Acabé tratando de desviar la atención.

—E-en fin. Eso es lo de menos. Los miembros del templo ya me han reconocido como un legítimo Elegido, y han repudiado a esa maldita. Así que toca ponernos manos a la obra. ¿Qué te parece si cooperamos?

La cara de mi acompañante parecía no mostrar mucha confianza. Cualquiera lo haría, siendo avasallado tan repentinamente, con una información que, probablemente, le diese igual. Si quería ganarme su favor, necesitaba hacer algo. Hm... Antes se había mostrado muy interesado, quizás...

—Piénsalo, son todo ventajas. Podemos buscar despertar a los dioses, y por el camino, buscar a la farsante. Aún debe llevar sus pertenencias con ella —mentí, pues me las habían dado ya en el templo—. Si la matamos... Podremos repartirnos un buen botín, ¿no?

Ugh, "compartir".

 

Sorec

Escuché con considerada atención la historia de aquel individuo que se presentaba bajo el nombre de Kiri, sintiéndome cómo mi sonrisa se ensanchaba ligeramente a raíz de un sentimiento donde se mezclaban la diversión y la desconfianza. Las cosas se estaban tornando interesantes. Muy interesantes. Pero los hechos que se desarrollaron alrededor del ninja me habrían parecido muy improbables en otras circunstancias, pero… este mundo en sí seguía siendo bastante improbable frente a cualquier lógica y, sin embargo, allí nos encontrábamos nosotros dos, en un sitio con monstruos y muertos descerebrados.

—Aunque no he tenido el gusto de presentarme con los Elegidos en su totalidad, sí que recuerdo a una chica con aspecto de ninja —asentí—. Me sorprende que haya logrado desenvolverse, tan campante, entre seres tan extraños como nosotros. Los engaños siempre me han resultado poco afortunados y soy incapaz de perdonarlos —añadí con solemnidad—, así que no veo por qué no podríamos cooperar; aunque el único botín que me gustaría poseer son proyectiles de cualquier índole, todo lo demás será tuyo.

Giré lentamente sobre los talones y señalé con la escopeta hacia el frente, hacia el Camino.

—Deja que te muestre el camino hacia un edificio que hay al otro lado —dije—. Siento curiosidad por saber qué hay más allá de él, hacia donde marchó Espella —me giré para mostrarle una sonrisa enigmática—. Confío en que gozas de las habilidades necesarias para seguirme el paso, pero no te preocupes si no estás a la altura del desafío: tu muerte me ayudaría a confirmar si en verdad eres un Elegido.

 

Kiri

La reacción de Sorec me extrañó cuento menos. No mostró un ápice de desconfianza, lo cual me produjo esa misma sensación a mí. Tampoco es que me quejase de que se fuese a creer la historia sin más, pero... ¿de verdad no iba a cuestionarme? Quizás se encontraba solo y perdido en este sitio, y mi ayuda le había venido como caída del cielo para escapar. Pero tampoco podía negarme yo, pues de ir solo acabaría siendo atacado, y probablemente moriría allí.

—Está bien, entonces. Cuenta con todos los proyectiles que encontremos, no tengo problemas en ello. Yo, de momento, me sirvo con mis dagas. Y no me quedaré atrás, puedes estar tranquilo —finalicé, con orgullo, tras sentirme atacado al insinuar que no estaría a la altura.

Con el pacto hecho, decidí ojear a mi alrededor, para ver si podía encontrar a algún tramo vacío, o alguna zona por la que movernos. Uhm... Veamos, había unos cuantos Varelkrafts, así como panteras, que iban de un lado a otro. Y justo en la entrada más próxima al patio de la iglesia había dos Varelkrafts de élite. Ese debía ser el camino, y de ahí que estuviesen custodiando la entrada.

—Si me permites el consejo, creo que esos dos guardas de ahí protegen la iglesia. Deberemos acabar con ellos, pero parecen muy fuertes para ir a por todas con ambos. Propongo primero acabar con los tres Varelkrafts que pasean por la zona, para tener espacio de maniobra, sin llegar a cruzarnos con el gigante. Y luego, llamar la atención de ambos, uno a uno, para poder emboscarlos y ganar superioridad numérica.

De nuevo, oculté la mirada, para evitar ver la expresión del chico, tras tantos comandos. Me agaché, y tomé algo de barro para cubrirme los ropajes y el pelo.

—¿Q-qué? —inquirí—. Es para ocultarme. El barro es oscuro, llamaremos menos la atención. Además, camuflará el olor, así no nos rastrearán.

Una vez más, hui del contacto visual, comenzando a caminar por la pared este, escondido, hasta que aquel grupo de patrullas Varelkrafts aparecieron, y aprovechamos para emboscarlos.

 

Los Varelkraft, que eran dos lanceros y un lancero, pasaron por la zona de forma mecánica, movidos por la inercia de la muerte-sin-muerte. Todo el embadurnado de Kiri le sirvió, sin duda, para evitar que las panteras que corrían de un lado a otro le detectasen, pero... los varelkraft sí que terminaron detectándolos. Claro está, solo uno lo hizo, y se acercó a Sorec y a Kiri, ¡los otros dos parecían aún distraídos! Podría ser una buena oportunidad...

VARELKRAFT LANCERO
Salud: 1500/1500
Movimientos:
-Embestida (se aproxima hasta media distancia y ataca con 60 daño de embestida. -45 ST)
-Escudo de fuego (por dos turnos, coloca un escudo que daña a los enemigos que ataquen de cerca al portador con 40 de daño de fuego)
-Puntada (50 daño de embestida, media o corta distancia, -30 ST)
Debilidades y Resistencias:
-Débil a golpe por la espalda (x1,5)
-Débil a daño de hielo (x2)
-Resistente a daño de embestida (x0,5)
-Inmune a daño de fuego (x0)
Drops:
- Lanza de Varelkraft (1-10)
- Cúmulo de éter (11-20)
- Trozo grande de adamantita (21-30)
- Cóctel molotov (31-50)
- Nada (51-99)
Éter obtenido:
120 (individual) / 200 (doble)

VARELKRAFT LANCERO
Salud: 1500/1500
Movimientos:
-Embestida (se aproxima hasta media distancia y ataca con 60 daño de embestida. -45 ST)
-Escudo de fuego (por dos turnos, coloca un escudo que daña a los enemigos que ataquen de cerca al portador con 40 de daño de fuego)
-Puntada (50 daño de embestida, media o corta distancia, -30 ST)
Debilidades y Resistencias:
-Débil a golpe por la espalda (x1,5)
-Débil a daño de hielo (x2)
-Resistente a daño de embestida (x0,5)
-Inmune a daño de fuego (x0)
Drops:
- Lanza de Varelkraft (1-10)
- Cúmulo de éter (11-20)
- Trozo grande de adamantita (21-30)
- Cóctel molotov (31-50)
- Nada (51-99)
Éter obtenido:
120 (individual) / 200 (doble)

VARELKRAFT HACHERO
Salud: 1700/1700
Movimientos:
- Giro de hacha (50 Daño cortante, golpea a los enemigos que estén cerca de él y a su espalda, es inesquivable)
- Remate (100 Daño cortante, -50 ST, corto alcance)
- Salto con golpe (se aproxima a un rival lejano, impactando con su hacha. Media distancia, queda a corta distancia, 70 Daño cortante, -70 ST)
Debilidades y Resistencias:
- Débil a golpe por la espalda (x1,5)
- Débil a daño de hielo (x2)
- Resistente a daño de embestida (x0,5)
Drops:
-Pequeño cúmulo de éter (11-20)
-Trozo de adamantita (21-30)
-Cóctel molotov (31-50)
-Nada (71-99)
Éter obtenido:
130 (individual) / 210 (doble)

Posición actual:
- Media del Hachero, Media (por la espalda) de los lanceros (ambos)
Posiciones disponibles:
- Cerca del Hachero y por la espalda de los lanceros (-20 ST para Sorec, -15 ST para Kiri)
- Lejos del hachero y lejos (por la espalda) de los lanceros (-20 ST para Sorec, -15 ST para Kiri)
- A la espalda del hachero y cerca de los lanceros (-25 ST para Kiri, -35 ST para Sorec)

 

Kiri

—Ahí están, Sorec... Tú usas armas a distancia, ¿no es así? Entonces será mejor que te alejes. Yo intentaré ir distrayéndoles mientras les atacas desde aquí.

Comenzamos, pues, el ataque. Aquel Varelkraft Hachero nos miraba fijamente, habiendo reparado en nosotros. Cogí el fusil que había obtenido de Charlotte, y decidí lanzarle una pequeña bala para distraerle, y que se acercara hacia aquí. Mientras, me acercaría a por los lanceros, que aún nos daban la espalda. Si pudiera emboscarlos sin que repararan en nuestra presencia, todo iría bien.

Kiri: Fusil de combate, bala explosiva (Varelkraft Hachero) + Acercarse (Cerca del Hachero y por la espalda de los lanceros) + Dagas x5 (Varelkraft Lancero 1) + Dagas x5 (Varelkraft Lancero 2)

PS: 380/380
PC: 105/105
ST: 160/250 (+21)
Ratio de esquiva: -26 ST
Armas:
- Daga (41 Daño de corte, -7 ST)
- Daga (41 Daño de corte, -7 ST)
- Fusil de combate +1 (53 Daño contundente, -5 ST, medio-corto alcance).
Munición: x24 bala de plomo (+1 daño)
Munción: x15 bala explosiva (convierte el daño en daño de fuego)
- Arco corto (2 manos) (26 Daño de embestida, -5 ST)
Munición: x24 flechas de madera (+2 daño).
Munición: x5 flechas de hierro (+3 daño).
Magias:
- Acelerar (Reduce el gasto de ST para todas las acciones propias o de un aliado en un 50% para los dos próximos turnos. -50 PC)
Reducción de daño:
- Daño cortante: -20%
- Daño de embestida: -20%
- Daño contundente: -15%
- Daño mágico: -15%
- Daño de fuego: 0%
- Daño de hielo: -5%
- Daño de electricidad: -5%
Objetos equipables:
- Trozo grande de adamantita (material poco común para mejorar armas) x 5 uds.
- Trozo de adamantita (material común para mejorar armas) x 1 uds.
- Mitad de adamantita (material raro para mejorar armas) x3 uds.
- Pequeño cúmulo de éter (+300 éter) x1
- Hierba de la fuerza (+40 ST) x 2 uds.
- Cóctel molotov (34 daño de fuego, daño en área) x 2 uds.
- Brebaje de éter (+33% PS) x 3 uds.
- Pócima de éter (+33% PC) x 1 ud.
- Guijarro (1 daño contundente, atrae la atención de enemigos) x 28 uds.
- Urna helada (añade a un arma física, por dos turnos, 40 de daño de hielo) x4 uds.
- Urna ígnea (añade a un arma física, por dos turnos, 34 de daño de fuego) x1 ud.
- Vendas (sana la acumulación de hemorragia) x3 uds.
- Panacea (cura la acumulación de maldición) x1 ud.
- Bebida caliente (cura el congelamiento o la acumulación de este) x6 uds.
- Cuchillo envenenado (21 daño cortante, llegan a larga distancia, acumulan 20 de envenenamiento) x2
- Shuriken (42 daño cortante, llegan a larga distancia, acumulan 20 de hemorragia) x3
Anillos:
- Movilidad (-ST para reposicionarse)
- Halcón (+munición recuperada)
- Oso (-peso en armas equipadas)