Cambios repentinos inesperados [pearlshipping]

Tema en 'Fanfics Abandonados Pokémon' iniciado por Laker, 2 Agosto 2011.

?

¿Qué piensas de este fic?

  1. Es interesante, no tengo queja alguna.

    16 voto(s)
    84.2%
  2. Es regular, debe mejorar más

    3 voto(s)
    15.8%
  3. Es malo, mejor no lo sigas

    0 voto(s)
    0.0%
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    Laker

    Laker Entusiasta

    Libra
    Miembro desde:
    2 Agosto 2011
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Cambios repentinos inesperados [pearlshipping]
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Aventura
    Total de capítulos:
    10
     
    Palabras:
    3335
    Hola a todos, aquí de nuevo con lo prometido, pero antes que nada les pondré este ya que el otro lo estoy puliendo y lo subiré en unos instantes, de momento disfruten:

    Capitulo 7: ¿Empieza la cita?

    La cena continuaba su transcurso, todos deleitaban el maravilloso sabor de la carne roja y blanca, las bebidas no se quedaban atrás, como en toda comida que llevara carne roja o blanca lo acompañaron con un poco de vino tinto, en el caso de Max le encargaron una limonada. El joven entrenador al no tener nada que hacer por estar sentenciado por su madre, se levantó a apreciar la vista que tenían en lo alto de la segunda planta.
    Mucha gente rondaba por el lugar, los que más se podían ver eran los infantes que la mayoría reía y se les notaba una gran felicidad por la noche que estaban viviendo, uno que otro traía a prisa a sus padres para que los llevasen a ver un evento, atracción, juego de destreza o algún puesto de comida.

    - No sé para qué me pongo a torturarme a mí mismo viendo a todos comer. –decía para sí mismo el azabache. En un instante se percató de unos cuantos juegos en los que 2 personas iban por un objetivo: ganar un peluche.- Me pregunto si…
    - ¿Quieres un poco? –preguntó una voz femenina inesperada, poniendo frente de la boca de Ash un tenedor con un trozo de carne.
    - May. –dijo sorprendido Ash.- Ehm, mejor dejémoslo así, no vaya a ser que también te castigue tu mamá porque también escuchó que tenía prohibido comer.
    - No me importa, no puedo permitir que te dejen sin comer. –
    - Pero… -
    - Anda, come que está un poco caliente y si dejas que se enfríe se hará más dura. –insistía con el tenedor la joven castaña.
    - Creo que no puedo ganarte. –dijo su compañero de viaje, al ver que no podía negarle una petición a alguien como May terminó aceptando su insistencia en darle de comer.- Está muy rico, de lo que me pierdo.
    - ¿Verdad que sí? –tomó otro trozo la hija de Norman Balance pero esta vez para ella.
    - Y todavía me lo presumes en mi cara, que mala. –
    - Jaja, no torpe, ¿cómo crees? –sonrió alegremente la oji azul dándole en la boca como un bebé otro trozo de la comida. Todo su plato ya tenía los cortes en trozos chicos listos para nomas ser tomados por el tenedor.
    - Gracias May, que linda. –
    - Por nada Ash, cuando quieras. –respondió un poco sonrojada la castaña, dentro suyo estaba más que feliz, un halago por parte del azabache significaba mucho.
    - Es bueno saber que… -
    - ¿No quieres probar el pastel? –preguntó otra voz femenina interrumpiendo la plática entre May y Ash, frente la cara del chico ya había una cuchara con un pedazo de pastel de chocolate alemán.
    - Misty, ¿tú también? –dijo confundido el campeón de Sinnoh.
    - ¿Qué cosa? –
    - No nada, olvídalo. –
    - Bueno, abre tu boca. –dijo la peli roja acercando más la cuchara a la boca de su amigo.
    - Lo mejor será que no siga co… -
    - Tonterías Ash, conozco bien ese apetito tuyo, así que abre. –
    - (Ya me tratan como infante, ¿qué se traen en manos? De seguro quieren algo, pero no sé qué es.) –pensó Ash en lo que aceptaba la ofrenda por parte de la líder de gimnasio.
    - ¿Quieres más, Ash? –preguntó May acercándole más de lo que comían al inicio antes de que llegase Misty, esta le tiró una mirada maliciosa a la amante de los pokémon tipo agua.
    ­- Creo que así estoy bien, ya no tengo hambre je. –contestó nerviosamente el varón alejándose de ambas chicas, Dawn al ver esta acción no se preocupó de nada, con eso pudo notar que solamente ella le importaba y nadie más.- Tengo que buscar a Brock que de seguro ya y esta muer…
    - ¿A quién le dices muerto? –dijo una voz masculina.
    - ¡Brock! –exclamaron todos asombrados, el criador pokémon tenía su saco en manos hecho trizas, su pantalón todo lleno de tierra y desbordado, su camisa estaba sin mangas y venía descalzo.
    - No hay nada que detenga al gran Brock, ni hasta la criatura más horrible del mundo puede espantarme. –comentó muy confiado el moreno poniendo sus manos en la cintura mientras veía al cielo en señal de victoria.
    - ¡Happiny! –exclamó una voz muy aguda detrás suyo.
    - ¡Ah, mamá! –gritó asustado Brock escondiéndose bajo la mesa de los chicos,
    - Con que nada puede espantarte… me decepcionas. –dijo Max con sus ojos cerrados, él continuaba comiendo tranquilamente.
    - Jajaja. –reían todos por el comentario del niño.
    - Un día de estos verás chamaco. –le susurró el perseguidor de oficiales Jenny y enfermeras Joy jalándole del pantalón.
    - Suelta que ensucias el traje. –contestó el 4 ojos dándole un buen golpe con la cuchara más grande en la mano de este.
    - ¡Oye, eso dolió! –
    - Para que aprendas. Ahora come. –le pasó a su amigo mayor de edad un plato chico con las sobras de lo que quedaba: un trozo de carne roja, una pierna de pollo, media brocheta con cortes de tomate y cebolla.- Ni digas nada que eso te pasa por andar ligando y llegar tarde.

    Dejando atrás la cena con un Brock lastimado y casi hecho trizas como Gary, todos se fueron juntos a rondar por el lugar para ver qué podían hacer, posiblemente después separarse pero por ahora era estar otro rato más juntos sobre todo una parejita que iba hasta adelante muy apegados. A la mayoría no le incomodaba ver esto, solo unas pocas excepciones que simplemente miraban con gran enojo y envidia lo que hacían; en ocasiones reían, jugaban entre sí y una que otra muestra de afecto al darse un beso en la mejilla.

    - ¿Y qué piensas hacer ahora que acabó tu tiempo aquí en Sinnoh? –preguntó un poco preocupada la peli azul, temía que pronto se fuese su novio por ser algo inquieto al viajar de lugar en lugar.
    - La verdad no sé, no tengo planes, por el momento quiero seguir disfrutando esta noche contigo. –respondió muy tranquilo el azabache brindando una sonrisa llena de seguridad.- Y si quieres saber cuándo regresaré a Kanto, aun no lo tengo previsto, quiero que el profesor Rowan me brinde la información de los Elite con el número que me dieron.
    - De acuerdo, pero luego me dirás, ¿sí? Quiero visitar tu pueblo si es que no te molesta.- dijo Dawn como una niña pequeña tomándole del brazo al chico.
    - Pues, ya que lo dices… -comenzando a sonar serio.
    - Ah, no disfrutas de mi compañía, si quieres no voy y ya. –infló sus mejillas la coordinadora con una mueca llena de molestia.
    - Jajaja, sabes que bromeo Dawn, claro que quiero que vengas conmigo. –dijo el azabache tomándole del mentón a su novia para mirarla fijamente con un rostro alegre, al tener otro de sus momentos apropiados le brindó el primer corto pero tierno beso de la noche sobre sus labios.
    - Eres un tonto. –dijo la peli azulada un poco desconcertada pero feliz en su interior.
    - Lo sé, ya me lo han dicho varias veces por ahí. –
    - Pero eres mi tontito. –comentó la sub campeona del gran festival de Sinnoh con una sonrisa.
    - Bueno, esa es la primera vez que alguien me… -
    - ¡Joven Ash Ketchum! –exclamaron unas cuantas voces variadas comenzando a rodear a la pareja con un montón de cámaras, micrófonos, grabadoras, reporteros amontonándose y demás.
    - Díganos señor Ketchum, ¿qué se siente ser el representante de Sinnoh? –preguntó un hombre lampiño y calvo con traje gris y corbata de mismo color empezando a tomar nota en una libreta. Los reporteros que traían su micrófono y grabadora quedaban en silencio.
    - Nada en especial, simplemente es algo que anhele desde que llegué aquí a la región Sinnoh y… -
    - Joven Ash, ¿desde hace cuanto que sale con la hija de la ex coordinadora Johanna? –le interrumpía una señorita de cabellera castaña con otra pregunta, vestía casi lo que sería ser una secretaria con falda negra, blusa blanca y suéter negro al igual que sus zapatillas.
    - Pues yo… -
    - Señorita Dawn, ¿desde cuándo sintió atracción por el campeón del frente de ballata? –preguntó otra mujer similar a la anterior, solo que su cabello era rojo y corto, además de su traje que era totalmente rojo.
    - ¡Son unos pesados! ¡¿Quieren irse y dejarnos en paz?! –dijo molesta la chica peli azul al ver lo incómodo que era la situación, ella no esperaba pasar su noche así con su novio.
    - Esta noche en Sinnoh TV, la pareja del momento pide privacidad en su relación. –dijo una mujer ya conocida antes por su típica vestimenta, falda y suéter amarillo, además de siempre estar en los momentos más llamativos.
    - ¡Ay, olvídenlo! Vámonos Ash. –finalizaba este momento con un gran enojo la chica de tez blanca, tomó a su novio de la mano e hizo a un lado a los estorbosos reporteros que seguían lloviéndole de preguntas a la pareja.

    El grupo que les acompañaba quedó impresionado, nunca creyeron que tarde o temprano sucedería algo como esto pero era obvio, el nuevo campeón y representante de Sinnoh por fin había salido, al joven entrenador al parecer ya le habían seguido sus pasos desde que fue campeón del frente de batalla al igual que su novia por no solo ser la hija de una famosa ex coordinadora, sino también por como casi logra el campeonato en su primer intento.

    - La fama cuesta, si eso es ser famoso por ser campeón pues no quiero serlo. –comentaba Max.
    - Eso es normal hijo, recuerda que en Hoenn nos pasa lo mismo por nuestro gimnasio. –dijo Norman comprendiendo la situación que afrontaron Ash y Dawn.- Pero esta vez es muy diferente, ambos se han ganado un prestigio y deberán lidiar con ello si siguen teniendo éxito.
    - Uhm… señor Norman. –decía Brock tocándole el hombro.
    - ¿Sí? ¿Qué ocurre Brock? –
    - Otra vez. –señalando al grupo de reporteros rodeándolos a ellos pero ahora con el doble de personal.
    - Señor Norman, su hija estuvo con el joven Ash Ketchum y ¿jamás tuvieron algo más que solo amistad? –preguntó la reportera castaña.
    - Señorita May Balance, el hecho de que no esté con el campeón de Sinnoh eso nos hace pensar que le gusta alguien más, ¿no es así? –preguntó la mujer peli roja.
    - ¡No empiecen a molestar que esta es una noche especial para nosotros! –reclamó fuerte el líder de Hoenn.- ¡Slaking, aléjalos de aquí! –lanzó una pokebola de la cual salía un enorme gorila gordo y café que con un gran gruñido espantó a todos los reporteros.

    Volviendo a con la parejita del `momento´, estos se dirigían a unas bancas que había frente a una gran fuente con la figura de un Seal al centro sacando agua, se sentaron y comenzaron a conversar, la joven peli azul seguía un poco molesta mientras que su pareja todo lo contrario, estaba normal como si nada, esta era la primera experiencia que tenían con la prensa pero el chico no dejaría que una simple tontería arruinara su cita.

    - Tranquila Dawn, no permitas que eso te siga molestando. –
    - Es que yo no quería que esto sucediera en un momento entre tú y yo. –contestaba en un tono aun molesto la chica, ella estaba al lado derecho de Ash, sus lugares casi no cambiaban por lo visto como cuando caminan.
    - Lo sé, a mí en parte me incomodó pero ¿qué podemos hacer? Ya ves cómo es la prensa de entrometida. –
    - Eso sí. Perdona que me enojara pero realmente me molestó lo anterior. –dijo en tono normal la coordinadora del Pueblo Hojas Gemelas.
    - No hay problema, pero… -tomó la mano de su novia y la miró a los ojos.- en parte me gustó ver que te pusieran enojada, te vez muy linda. –dijo Ash con una cara sonriente.
    - ¿Enserio? –preguntó apenada Dawn por el comentario del adolescente.
    - Claro, tengo a la mujer más hermosa de todas y cuando hace sus berrinches simplemente me dan ganas de darle otro beso. –respondió el azabache un poco sonrojado por lo que dijo, en su corta vida nunca había dicho algo como eso, todo venía desde su corazón. Esto simplemente provocó que su novia se pusiera más feliz y roja que nunca.
    - Gracias Ash. ¿Crees que ahora si podamos conocernos mejor? –preguntó la joven de cabellos azules con un tono pícaro.
    - ¿Conocernos mejor? ¿Cómo? No entendí. –
    - Uhm, tal vez solo así sepas. –

    Ante el último comentario por parte de la chica, esta se acercó lentamente a los labios de su hombre sin abrir los ojos, por parte de su novio él imitó lo mismo captando lo que quería lograr la joven. Cada vez que sucedía esto sus pechos sentían unos fuertes golpes en su interior, todo sonido a su alrededor desaparecía con suma facilidad, el mundo que conocían se dispersaba dejándolos únicamente a ellos como los únicos seres vivos.

    Poco a poco su aliento chocaba en el rostro del otro, era cálido y muy agradable, pero esta no era la mejor manera de `conocerse´ mejor. Al no soportar más la tentación y deseo de volver a sentir contacto, se unieron en un romántico beso… sus labios comenzaban a hacer movimientos muy lentos para disfrutar el sabor que tenían en sí, sus miradas no se podían entre cruzar al tener los ojos cerrados, con sus mentes era más que suficiente para saber cómo se encontraba el otro. Esta acción se volvía cada vez más prometedora, aquellos movimientos labiales se convertían más traviesos, en las pocas veces en que Ash se retiraban para jalar algo de aire aunque fuese corta la distancia Dawn le mordía suavemente su labio inferior en señal de no querer dejarlo ir y viceversa.

    - (Me pregunto si lo estaré haciendo bien, nunca había besado a un chico así.) –pensaba Dawn quien aun se dejaba manipular por sus labios que disfrutaban del contacto con los de Ash.
    - (Sus labios saben tan bien, ese vino sí que dejó su rastro.) –pensó el entrenador morocho detectando el amargo pero delicioso sabor del vino en los labios de su novia.

    Todo lo bueno tenía que terminar, sus pulmones aguardaban por un descanso aunque desearan continuar, nadie en el mundo tiene pulmones de hierro y la fatiga era un factor importantísimo, por lo cual tuvieron que tomar la decisión de separarse. Sus labios se despegaban lentamente, quedaron algo húmedos por tanto contacto y saliva pero eso no tenía importancia, su respiración volvía poco a poco la normalidad como su ritmo cardiaco, sus ojos se abrían y dejaban ver todo lo que reflejó esa acción que gracias a un gran delatador no había necesidad de palabras: sus rostros.

    - Ash, ¿beso bien? –preguntó tímidamente la coordinadora, algo que debía tener en mente con suma importancia era que en dado caso que se dieran más situaciones de este tipo tenía que hacer lo mejor posible para que le agradara tanto a ella como él.
    - No hay necesidad de respuesta, sino no me hubiese dejado llevar por como movías tus labios. –respondió alegre el azabache con un leve sonrojo en sus mejillas.
    - Siempre sabes qué decir, no sé cómo fue posible que una niña como yo te hubiera gustado. –comentó recargándose sobre el hombro de este.
    - Creo que más bien eso es lo que diría de mí. Siempre fui un distraído, únicamente veía a los pokémon y a mi sueño de ser el maestro pokémon, jamás pensé en el amor o algo por el estilo pero… -
    - ¿Qué cosa? –preguntó curiosa la joven mirando cómo Ash mantenía su mirada en la fuente.
    - En los viajes que he hecho aprendí poco a poco lo que eran esos sentimientos muy confusos para mí y… tú has hecho que ahora los entienda mejor. –
    - Ash… -dijo Dawn impactada.
    - Es la verdad Dawn, jamás creí que una persona como tú se fijase en mí. –
    - La respuesta es fácil. Tu forma de ser, eso es lo que más me atrajo de ti, sabes cuando no hay que rendirse y brindas una gran seguridad a todo aquel que le ayudes. -
    - Podría decir lo mismo de ti pero un poco más detallado. Si lo digo ahora creo que nunca acabaré porque todo se debe al momento en que nos conocimos. –dijo el entrenador llevando su mirada al rostro de la adolescente.
    - Quieres ponerme roja ¿verdad? –comentó sonrojada la chica acompañada de su linda sonrisa.
    - Puede que sí, puede que no.-
    - Que malo, ya verás, ya verás. -
    - ¿Veré qué? -
    - No te diré, sólo ya verás. –contestó juguetona la joven guiñándole un ojo seguido de sacarle la lengua.
    - Y dices que el malo soy yo. –
    - Jaja, te agradezco mucho que estés conmigo aquí. –dijo Dawn volviendo a aprisionar el brazo de su novio con los suyos y se recargó nuevamente en su hombro para admirar la hermosa fuente.
    - Dawn, prometo protegerte a toda costa y jamás dejarte sola. –comentó Ash inclinando un poco su cabeza quedando sobre la de Dawn, llevó su mano izquierda a las manos de la coordinadora y trató de cubrirlas lo más que pudo.
    - Con tu cariño me basta, no hay necesidad de ello pero ya que insistes… acepto jiji. –reía satisfactoriamente la hija de la ex coordinadora Johanna.

    ¿Qué sucederá con los tortolos? ¿Volverán los reporteros a molestar? ¿Habrá más sorpresas en lo que resta de la noche? Esta historia continuara…

    Ande pues, ¿qué decían? "Este condenado no piensa poner romance hasta el capítulo 50" Nah, nada de eso, tampoco soy tan exagerado(?) espero que les agradara el capítulo, ya viene el otro en unos momentos, be pacient.
     
    • Me gusta Me gusta x 4
  2.  
    Whiteness

    Whiteness Iniciado

    Virgo
    Miembro desde:
    29 Julio 2011
    Mensajes:
    45
    Pluma de
    Escritora
    uuuuuuiiiiiiiii que parejita jajajajaaja.
    Esas pesadas de Misty y May no se dan por vencidas ¬¬ -mirada asesina-
    Espero que Ash y Dawn tengan una vida feliz como pareja.(sino no tendría gracia jajaja.
    He visto pocas faltas de ortografía y te aseguro que llegarás a no tener ninguna.
    Espero con andias la conti chao!!
    Se despide:

    Fan de lugia.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  3.  
    MewtwoPikachu

    MewtwoPikachu Iniciado

    Acuario
    Miembro desde:
    9 Junio 2011
    Mensajes:
    14
    Pluma de
    Escritor
    oye buena la histo lo que si ocupa guion largo se hace manteniendo el alt y luego presionando 0151 pe ro cono las teclas de el lado derecho
     
  4.  
    Laker

    Laker Entusiasta

    Libra
    Miembro desde:
    2 Agosto 2011
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Cambios repentinos inesperados [pearlshipping]
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Aventura
    Total de capítulos:
    10
     
    Palabras:
    3718
    Capitulo 8: Noticias, sorpresas y más.

    - Ash, ¿quieres que sigamos aquí? –preguntó Dawn estando en la misma posición.
    - Como gustes, sabes que salí nomas para pasar el tiempo contigo. –contestó el azabache retomando su vieja postura como cuando llegaron a sentarse.
    - Oh, está bien. Entonces, ¿qué te parece si vamos a jugar en algún juego de destreza? –preguntó la chica.
    - Seguro. –
    - ¡Andando! –exclamó emocionada la peli azul jalándolo del brazo a prisa.

    Por doquier habían juegos de destreza, entre ellos el que decidió jugar la ansiada coordinadora fue el de tirar los dardos a una rueda con globos que giraba, el más importante era el del centro por ser el más grande con el escrito de `premio mayor´. No tuvieron costo alguno en participar gracias al azabache por ser el campeón de Sinnoh y la cantidad de gente que atraía por su triunfo.
    Le entregaron 3 dardos a la adolescente, se posicionó en la línea de límite de tiro y lanzó su primer dardo, la ejecución fue algo tímida al no darle la fuerza necesaria haciendo que este terminara contra el suelo cosa que le disgustó.

    - Tranquila. Intenta apuntar en línea recta y flexiona un poco más tu brazo. –decía el azabache estando detrás de su novia apoyándola.

    Siguiendo las indicaciones del entrenador, la siguiente ejecución fue un poco mejor, lanzó con mayor fuerza en dirección al globo de centro pero nuevamente su intento fue fallido al desviarse un tanto y tronar otro simple globo que no tenía nada escrito. Esta vez no se enojó ni nada por el estilo, ahora había quedado decepcionada de sí misma.

    - Mm… -miró detenidamente el azabache la rueda que seguía girando.- Dawn, ¿me dejas intentar? Creo saber qué está pasando.
    - Adelante. –respondía confundida la joven, le entregó su último dardo a su pareja y se quitó de la línea de límite para dejársela a él.

    Ash tomó aire profundamente, acomodó su brazo tirándolo atrás casi como si fuese a lanzar una bola de beisbol, dio un último vistazo a la rueda y lanzó el dardo con todas sus fuerzas apalancándose con el movimiento de su espalda así dando con certeza en el centro obteniendo así el `premio mayor´ al reventar el globo, Dawn quedó impresionada ante la forma en que este lo logró, al recordar la extraña mirada de su novio se preguntó a sí misma “¿qué es lo que habrá visto?” pero la respuesta la obtendría más tarde porque él ya estaba reclamando su premio: un gran Altaria de peluche.

    - Para ti. –dijo Ash entregándole en manos a Dawn el peluche.
    - Gracias lindo. –respondió la chica con una sonrisa aceptando del todo bien el premio.
    - ¿En qué otro juego te gustaría participar? –
    -Uhm… ¡Ya sé! Solo que esta vez espero no fallar jeje. –
    - Tonterías, claro que podrás. Vamos. –

    A unos cuantos metros más delante vieron a mucha gente reunida, al azabache se le hizo raro esta situación pero a su novia no, ella ya sabía lo que pasaba, muchos impactos y golpes se escuchaban entre los gritos de asombro de la multitud, sin duda alguna se trataba de algo que realmente adoraba el entrenador: una batalla pokémon incluyendo mesa de jueces casi pareciendo un concurso en los que suele participar Dawn. Fueron acercándose entre toda la gente amontonada hasta llegar a la primera fila, al arribar ya se había anunciado al ganador que fue una pareja de entrenadores: una chica con un Blastoise y un chico con un Flygon.

    - ¿Algún retador en poderle quitar el invicto a esta pareja imparable? –decía un sujeto con un micrófono sobre el escenario.
    - Nosotros. –dijeron al unísono la peli azul y el azabache pasando sin previo aviso al campo de batalla.
    - ¿Qué esperan? Muéstrenos lo que tienen. –
    - Rayos, se me olvidó que no traje conmigo a ninguno de mis pokémon, se están recuperando en el centro. –decía Ash.
    - No te preocupes, yo traigo a los míos, nomas dime a quien quieres. –
    - ¿No hay problema si elijo a Pachirisu? –
    - Es todo tuyo. –dijo Dawn entregándole la pokebola de su pokémon.- Elijo a… -antes de que pudiese tomar su elección salió Piplup de una pokebola.
    - Piplup, ¿no se supone que no te gusta entrar en las pokebolas como Pikachu? –
    - Pi pi piplup. –le daba la razón el pingüinito al azabache.
    - ¿Entonces qué haces dentro de una? –
    - Lo que pasa es que en estos días no sé qué le dio pero me obedece más y ya se ha estado acostumbrando a la pokebola. –explicaba la coordinadora.
    - Ya veo… bueno, volviendo a la batalla. ¡Yo te elijo Pachirisu! –lanzó el entrenador la pokebola de la cual salía una ardilla blanca y azul.
    - ¿Chipah? –miró confundida la ardilla al azabache, no porque no lo conociera sino por el hecho que él lo llamara y no su legitima dueña.
    - Tranquilo Pachirisu, Ash no trajo consigo a sus pokémon y necesitamos de tu ayuda para una batalla, así que obedece a lo que te ordenen. –
    - Si nos permiten, ya queremos pelear. –interrumpía el varón del otro lado con su pareja.
    - Tranquilos, tranquilos, no se me descontrolen, ellos no saben qué está en juego. –dijo el sujeto que conseguía retadores para la pareja invicta.- Muy sencillo, el que gane esta batalla por ser la última que podemos brindarles, tendrá el privilegio de ganar ¡un collar de oro! –mostrando el dichoso premio ante toda la gente, el collar incluía la figura de un corazón con un rubí al centro.
    - Que hermoso. –decía Dawn mirando el collar que era de su total agrado.
    - Pronto será tuyo. –dijo Ash.
    - Pero Ash, ¿no tenemos desventaja? Flygon es mitad tipo dragón y son pokémon en última etapa. –
    - No te fijes mucho en el tipo o tamaño del pokémon sino en su capacidad, recuerda que con Paul se vio el resultado, Electivire era un pokémon de última etapa y Pikachu no. –
    - Cierto. –
    - Ejem… si me permiten. Esta batalla es sin límite de tiempo, la pareja de pokémon que salga del campo de batalla o no pueda continuar será eliminada. Sin más que decir, ¡comiencen! –dijo el anunciador haciéndose a un lado para darle chance a los pokémon de pelear.
    - ¡Blastoise usa…! –
    - ¡Chispazo! –ordenó Ash a Pachirisu.
    - ¡Chipah! –de las mejillas amarillentas de la ardilla eléctrica salieron miles de ondas eléctricas, tomando desprevenido a la enorme tortuga la electrocutó.
    - ¡Piplup, usa remolino! –dijo rápido Daw aprovechando la situación.

    El pequeño pingüino azul efectuó uno de sus ataques más poderosos formando un enorme remolino arriba de él que seguidamente lanzó en dirección a Blastoise pero Flygon con una garra dragón destruyó el ataque del pingüino, salvando a su compañero de batalla por un golpe que capaz y lo hubiera dejado fuera del campo de pelea.

    - ¡Blastoise, usa giro rápido! –exclamó la oponente.
    - Blast. –la tortuga azul se metió en su caparazón y comenzó a girar velozmente desasiendo el ataque eléctrico.
    - Dawn, pídele a Piplup que use chorro de agua sobre el suelo con todas sus fuerzas. –
    - Está bien. ¡Piplup, usa chorro de agua contra el suelo! –
    - ¿Plup? –dijo confundido el pokémon pero sabiendo que se trataba de alguien como Ash con sus ideas decidió obedecer.

    Piplup disparó su más potente chorro de agua saliendo disparado al cielo, dejando el suelo totalmente mojado en el cual aun seguía Blastoise girando, su cuerpo no podía ser tocado por el agua debido a la velocidad de su giro rápido, solo la esparcía como simples gotas que resbalaban por el cuerpo de Flygon.

    - No te servirá de nada niño. –dijo confiado el acompañante de la mujer.
    - ¿Quién dice que voy tras Blastoise? –
    - ¿Eh? –
    - Pachirisu, usa descarga. –ordenó Ash con su típica sonrisa de seguridad.
    - ¡Pachi! –exclamó el pokémon volviendo a soltar ondas eléctricas que fueron conducidas por suma facilidad por el agua, aquellas gotas que esparcía Blastoise le caían a Flygon, haciendo que este se paralizara por las chispas eléctricas.
    - ¡Blastoise detente! –ordenó la joven rival, la tortuga se detuvo en seco y notó el daño que había causado a su compañero.
    - ¡Pachirisu, acaba a Blastoise usando impactrueno en sus piernas! –
    - ¡Protégete en el caparazón! –

    Antes de que la temible electricidad de la ardilla lo tocara, este se había metido en el caparazón, el ataque le dio de lleno pero el daño era menos, Flygon no podía hacer nada al igual que su entrenador, el estar paralizado era una desventaja.

    - Todos tuyos Dawn. –dijo Ash.
    - ¡Piplup, remolino una vez más! –ordenó la coordinadora, desde el cielo el pingüino se había adelantado a los hechos formando un remolino el doble de grande, en el que sin pensársela 2 veces lo lanzó contra los pokémon rivales acompañados de la descarga eléctrica de Pachirisu, formando un remolino eléctrico.
    - Blast / Gon… -terminaban ambas criaturas rendidas.
    - ¡Damas y caballeros, tenemos nuevos ganadores! –dijo el anunciador dándole la victoria a la pareja.- Muchas felicidades. –les entregaba en manos el collar ya mencionado como su premio.
    - Te dije que lo tendrías. –comentaba el chico morocho tomando el objeto en sus manos para irse detrás de tu novia y ponérselo.
    - Lo tenemos querrás decir. –corregía Dawn a su novio dándole un beso en su mejilla.

    La noche al parecer terminaba con `broche de oro´, nuestra joven pareja no deseaba saber más sobre lo que habría el resto de la velada, en parte se sentían cansados luego de un día ajetreado por lo cual se fueron al hotel.
    En este ya les habían ganado en llegar, el grupo ya estaba por irse a dormir, platicaron algo en breve y se dieron las buenas noches con simplemente verse, a excepción de Ash y Dawn que lo hicieron a su manera con un beso en los labios sin que nadie los viera para así irse cada quien a su habitación…

    A la mañana siguiente, todo era silencio total en la prestigiosa isla de la liga pokémon, todos los entrenadores y visitantes aun seguían durmiendo por dichosos festejos hasta altas horas de la noche, no obstante habían unas cuantas excepciones ya que el comité de la liga junto con los organizadores de los eventos se habían puesto a limpiar todo el desorden y basura que estaba esparcida por todas las calles, parecía casi un chiquero en pocas palabras. Empezaron a dar las 8:00 am y como de costumbre las mamás se levantaron temprano para al igual levantar a los demás, tal vez algo no tan placentero para todos pero estar en cama todo el santo día era la solución para comenzar un nuevo día… cada una tomó un camino diferente entre los pasillos del hotel, Delia se encargaría de levantar a las chicas, Caroline obviamente a su esposo e hijo y finalmente Johanna a los restantes del grupo.

    - Muy buenos días chicas, hora de levantarse, el sol ya salió y tenemos un largo camino para regresar a nuestras respectivas casas. –decía la señora Ketchum entrando sin permiso alguno a la habitación de las jovencitas que dormían, al parecer de sueño pesado, especialmente May.
    - 5 minutos más… -respondió con un gran tono de pereza la chica peli roja.
    - Nada de que 5 minutos más, están peor que Ash. –susurró lo último un poco preocupada, al parecer Delia seguía preocupada por su hijo.- Si se despiertan les prometemos ir de compras.
    - No hay ofertas… -dijo una Dawn soñolienta, ella deseaba seguir durmiendo sin importarle la hora.
    - Bueno… entonces no me dejan opción… (Esto no me debe fallar, aunque puede que se enojen conmigo.) –pensó astutamente la señora para poder sacar a las flojas jovencitas de esas camas- Ash, ¿a dónde piensas ir hoy tan apegado a tu amiguita Melody? –simuló una pregunta que provocó lo inesperado.
    - ¡¿Melody está aquí?! –dijeron sorprendidas y a la vez molestas las 3 chicas, entre ellas sabían que únicamente una de ellas podría quedarse con el joven.
    - No realmente, nomas lo hice para que se levantaran jijiji. –reía satisfactoriamente la madre del azabache- Y veo que están muy interesadas en mi hijo, ¿verdad?
    - Eso… no… no es… verdad. –respondió primero Dawn totalmente nerviosa, temía que la madre del joven descubriera los sentimientos que ella sentía muy profundamente hacia el azabache, capaz y le pudiera arruinar su oportunidad de estar con él a pesar de que ya fuese su suegra.
    - No crea eso señora Ketchum jeje. –contestó May un tanto más normal, pero lo que no pudo ocultar fue un leve sonrojo de vergüenza que obviamente Delia pudo captar.
    - Su hijo tiene una meta señora Ketchum, y nosotras no podemos estar interesadas en él para que logre su cometido, con todo respeto. –agregó Misty de una manera más formal y educada, pero aun así el rostro de la madre del chico azabache no mostraba alguna señal de creerles.
    - No me pueden ocultar la verdad, a su edad fui igual. –mostró una simple sonrisa Delia.- Los demás ya han de estar esperando, arréglense y nos alcanzan. –finalizó a toda la conversación saliendo de la habitación dejando al grupito totalmente asombrado.
    - No entiendo… su madre se percató a la primera, ¿cómo es que Ash no haya heredado de menos algo de su madre? –decía Dawn mientras buscaba su ropa habitual ya que todas durmieron en ropa interior. [NA: no se vallan con ideas del más allá .-.]
    - Posiblemente heredó mucho de su padre. –respondía Misty quien buscaba su maleta para ponerse sus shorts.- Pero jamás nos ha hablado de él, y menos Delia.
    - No lo sé pero aún así esa forma de ser no afecta a Ash. –dijo la coordinadora castaña quien sacaba su blusa.
    - Tú sigue fantaseando que posiblemente Ash se fije en ti, todo está a mi favor por ser su primera amiga. –respondió Misty empezando de nueva cuenta una posible larga discusión.
    - Y dale con eso… -suspiró Dawn.- ya eso es pasado, capaz y ya te haya olvidado.
    - Concuerdo con Dawn, si mal no me acuerdo y de las veces que Ash nos platicaba de ti, eras una amargada con él, le regañabas a cada rato pareciendo casi su segunda madre, y no digas que no es verdad ya que Max y yo te hemos visto. –atacaron ambas chicas con comentarios hacia Misty para hacerla perder.
    - Lo habré sido pero es para que dejara su actitud de niño inmaduro, además, no se han preguntado cómo se fijaría en unas niñas menores que él cuando se puede fijar en una de su alcance como yo. –respondió la peli roja con unos aires de grandeza, no se dejaría vencer ni aunque fuese 2 contra 1.
    - ¡La edad jamás importa! –contestaron May y Dawn con un tono de molestia, era cierto que eran menores que el chico pero eso ni tomaban en cuenta.
    - ¡Ya estuvo bueno, bájense a desayunar ya que si no todos vamos a su…! –dijo una voz masculina entrando a la habitación de las chicas, no obstante esto fue un grave error ya que las chicas se encontraban en interiores, la discusión no les permitía ni de menos ponerse la blusa.- ¡Aaaahhhh!
    - ¡Max, pervertido! –exclamaron al unísono las 3 chicas con una cara de vergüenza, el que las viera un niño era peor que un hombre.
    - ¡Estoy ciego, estoy ciego, estoy ciego! –repetía seguidamente el hermano menor de May tapándose los ojos.- ¡No creo que ni Ash quiera a verlas!
    - ¡Estás muerto pequeño gusano! –dijo una May molesta, esto había sido un doble insulto no solo para ella, sino también para Dawn y Misty ya que el niño primeramente les insultó su físico diciendo que se quedaba “ciego” y después como plus usando a Ash.
    - ¡Mamá! –gritó el niño quien fue tomado por las 3 jovencitas mientras cerraban la habitación con seguro, ahora solo se podía oír uno que otro golpe y grito por parte de Max, se había metido ahora sí en grandes problemas, ninguna chica querría escuchar esas palabras tan directas capaces de ofender como lo hizo él.

    Al poco rato las 3 chicas salían de la habitación totalmente arregladas, May su vestuario de Johto, Dawn el que todos conocemos en la actualidad, Misty el que ahora portaba en Kanto, los peinados pues como siempre iguales, ninguna cambiaba su estilo por ser únicas…pronto no tardó en salir Max, lo malo para él fue que ahora portaría en su cara un moretón y unos cuantos chichones en su cabeza, todo esto por andar de fisgón donde no le llaman.

    - Se les pasó la mano. –dijo Max quejándose por el dolor que sentía por dichos golpes que le propinaron.
    - Como dice el dicho, la curiosidad mató al gato –respondió May aun molesta.
    - Todo por Ash, un día de estos verás que me las pagarás… y muy caro… -susurraba el niño para sí mismo pensando su venganza contra May.
    - ¿Ahora que estas pensando mocoso? -preguntó su hermana mayor con una mirada asechadora, conocía perfectamente que Max no se quedaría de brazos cruzados por la paliza que le arremetieron.
    - Nada, nada… nada… -contestó de una manera sarcástica pero con un tono de inocente, tomó rumbo al elevador que yacía a unos cuantos pisos. Al ver llegar el elevador entró en él con una sonrisa bien dibujada en su rostro, no obstante su típica costumbre de acomodarse las gafas cuando sospecha o planea algo.
    - Tu hermano es algo raro. –dijo Misty.
    - ¿Algo? –comentó dudosa la coordinadora peli azul.- Totalmente, sin ofender May.
    - No te preocupes… igual estoy de acuerdo contigo, es raro mi hermano, imaginen lo que fue aguantarlo antes de emprender mi primer viaje. –decía May con unos aires de nostalgia, fue un horror para ella estar encerrada con su hermano antes de su viaje.

    Más tarde ya todos estaban en la sala principal, según las estadísticas los hombres iban a elegir el lugar para desayunar, pero como siempre las damas se les adelantaron y decidieron el lugar a su agrado, claro no podían replicar ya que si no capaz y todas les harían algo como le pasó a Max, cosa que él ya conocía perfectamente que no diría nada, 2 palizas en un día nadie lo desearía. Antes de que pudiesen irse notaban que faltaba alguien más, un entrenador de cabellos azabaches que por él era la razón por la cual se encontraban ahí, todos se preguntaban si lo habían visto o si de menos alguno fue a despertarlo ya que era el de sueño más pesado, además de la chica castaña.

    - Qué raro… Ash nunca se pierde un desayuno. –dijo la señora Delia asombrada, conociendo perfectamente a su hijo, él debía ser el primero en ya estar listo para la comida más importante del día.
    - A lo mejor y se fue temprano a desayunar. –suponía el criador pokemon moreno.
    - ¿Ash levantándose temprano? Si como no… -le contestaron todos a Brock de una manera sarcástica, excepto Delia, Ash levantándose temprano, si claro… nadie le creería ni en sueños.
    ­- Recuerden que capaz y si se levanta temprano, pero únicamente si se trata de una batalla de gimnasio o su desayuno. –dijo la madre del azabache en parte defendiendo a su hijo para que no lo notaran como un chico flojo.
    - Ya mejor cambiemos de tema, si lo creo capaz, a lo mejor y si se nos adelantó, ya quiero desayunar por favor. –dijo Max de mala gana, su estomago ya rogaba por comida, era notable el sonido del hambre que provenía de sus tripas.
    - Hijo, cálmate… mejor vamos antes de que explote Max. –sugería Caroline.
    - Ay Max… todo por no contener el hambre. –replicaba su hermana, inesperadamente su estomago igual comenzó a sonar como el del niño.
    - Mira quién habla. –contestó regresándole la jugada el pequeño y futuro entrenador pokemon burlándose de la castaña quien quedó con un sonrojo de vergüenza ante el comentario de este.

    ¿Dónde está Ash? ¿Matarán a Max? Esta historia continuará…

    Lo prometido es deuda, sean pacientes a los 2 capítulos de mañana, bye.
     
    • Me gusta Me gusta x 4
  5.  
    Whiteness

    Whiteness Iniciado

    Virgo
    Miembro desde:
    29 Julio 2011
    Mensajes:
    45
    Pluma de
    Escritora
    Ash?Durmiendo,comiendo o entrenando(es lo único que sabe hacer XD)
    May ha sido un poco dura con su hermano al fin y al cabo es pequeño(aunque se pasó un poco diciendo lo de que se volvía ciego ¬¬ no me extraña que le pegaran).
    Mira que les gusta discutir a las chicas,no se callan ni debajo del agua ¬¬(y menos Misty y May)
    Desde cuándo Ash tiene tan buena puntería?Habrá practicado lanzándole dardos a la foto de su enemigo Paul jajaajaja.(Preferiría que los tirara a las fotos de May y Misty jajajajaja)
    Y la batalla estuvo genial.Ash está pensando mucho últimamente no?XD(desde luego tener novia le ha influido bastante)
    No he visto casi ninguna falta de ortografía y los capítulos son bastante largos.(ojalá a mí me salieran tan largos T_T)
    Espero que hagas la conti pronto chao!!
    Se despide:

    Fan de lugia.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  6.  
    Natsu Dragneel

    Natsu Dragneel Entusiasta

    Escorpión
    Miembro desde:
    27 Julio 2011
    Mensajes:
    121
    Pluma de
    ¿Que paso? ¿por que no pusiste los 2 capitulos ayer?
    Almenos pone 3 hoy esta muy bueno el fic
    tonto Max si yo viero eso felisito a Dawn
    Max pronto morira(creo)
    Ash esta haciendo algo para Dawn, comiendo o durmiendo
    entrenando no creo ya que sus pokemon estan muy cansados y lastimados
    Espero la conti con ansias espero que hoy sean almenos 2 o mejor 3 por lo de ayer

    Atte:Ashpokemon
     
  7.  
    Laker

    Laker Entusiasta

    Libra
    Miembro desde:
    2 Agosto 2011
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritor
    Lo sé man, dije 2 capítulos pero tengo un pequeño problemita además de una promesa que le debo a alguien y quiero cumplirla antes que esto ya que me lo pidió primero, mañana puede que ya les ponga lo que he prometido y en efecto tal cual mencionaste la recompensa deberían ser 4 contis, pero, esas se las traigo cuando llegue de la escuela. Sería si acaso la última vez que me verán subir doble conti por lo mismo, mi periodo de clase, y volveríamos a un capítulo.

    Esto que diré a continuación es al 100%
    Dado a que mis clases ya iniciaron y toda la cosa, las continuaciones son a 1 capítulo (a 2 no aseguro) pero eso sí, no por día, puede que hasta una conti sea cada 2 o 3 días mínimo (máximo 5 días de retraso) por si los profes (de especial caracter -w-) empiezan con sus jodidas jaladas dejan tarea y pues como en mi casa quieren que me ponga al tiro con las calificaciones (maldita seas universidad) con mayor razón no me dejarán usar mi compu. Reiterando, mañana les traigo los capítulos prometidos, 2 del sábado y los 2 del domingo. Les pido un poco de comprensión y trataré de hallar la forma de no dejarlos esperar tanto tiempo.

    De ante mano gracias por leer este mensajito. Hasta luego.
     
  8.  
    MewtwoPikachu

    MewtwoPikachu Iniciado

    Acuario
    Miembro desde:
    9 Junio 2011
    Mensajes:
    14
    Pluma de
    Escritor
    oye amigo ocupa guion largo para hacer la histo se hace presionando alt y luego escribir 0151
     
  9.  
    Laker

    Laker Entusiasta

    Libra
    Miembro desde:
    2 Agosto 2011
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Cambios repentinos inesperados [pearlshipping]
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Aventura
    Total de capítulos:
    10
     
    Palabras:
    3944
    Hola de nuevo, vengo de pasada dejando los capítulos acordados, de momento disfruten de 2 episodios porque los otros que pondré más al rato los estoy revisando (además de adelantar la tarea -w- primer día, primeras tareas...) y espero que les gusten.

    Capitulo 9: Siguiendo caminos.

    La mañana progresaba tranquilamente, no había mucha gente por las calles dado que la mayoría de los que vinieron a presenciar la liga pokémon se devolvieron a sus respectivos hogares, si acaso los que quedaban era personal que ayudó a organizar todos los eventos, armar locales, armar escenarios, entre otros que solo recogían lo que quedaba de la misma. El desayuno pasó como si nada, el grupo había encontrado un restaurant de desayunos de bufetes donde se dispusieron a comer la primera comida del día, no hubo señal alguna del chico azabache y esto solo provocaba algo de preocupación en una persona que estaba inquieta así que emprendieron camino al hotel por si lo veían ahí, tarde o temprano debía aparecer.

    Todos estaban en el lobby sentados en los sillones, esperando pacientemente alguna señal de vida por parte de un joven de cabellos azabaches que se había desaparecido casi toda la mañana, el reloj marcaba 15 para mediodía y nada, los residentes restantes del hotel mayoría entrenadores dejaban las llaves de sus habitaciones y se retiraban.

    ¿Dónde podrá estar? –se preguntaba a sí misma Dawn, ella estaba de pie caminando de un lado a otro.
    Tranquila hija, Ash aparecerá, ese jovencito es descuidado y todavía tiene mucho que aprender, confió en que tú le enseñarás bien. –dijo una voz femenina para tranquilizarla, puso sus manos sobre los hombros de la adolescente y esta la miró.
    Lo siento señora Ketchum, es que… -
    Lo quieres mucho, lo sé. No hay necesidad que escondas tus sentimientos frente a mí, no haré nada, al contrario, me gusta que mi niño haya escogido a una hermosa joven como tú. –sonreía la madre de Ash.
    Jeje, es cierto, lo quiero mucho y no puedo dejar de preocuparme por él. Pero, creo que le debo mucho porque me ha enseñado más cosas de las que yo a él. –dijo un poco más segura la coordinadora al conversar con su suegra.
    Creo que nos llevaremos muy bien. –
    Digo lo mismo señora Ketchum. –
    Puedes decirme suegrita. –dijo Delia guiñándole un ojo a su yerna seguido de una sonrisa.
    De acuerdo, suegrita. –respondió alegre la peli azul, su preocupación se había ido por unos instantes sin que se diese cuenta.
    ¿Suegrita? Mamá, no me digas que de nuevo vas a hacer una escena. –dijo una voz masculina diciendo por sus espaldas.
    ¡Ash! ¿Dónde te habías metido? –preguntó algo molesta su pareja.
    Perdona que no te avisara, fui al centro pokémon. –respondió en su tono habitual el chico, tenía en sus manos cargando el trofeo de campeón de Sinnoh.
    Pi. –dijo una criatura saliendo de su mochila.
    Ash Ketchum, nos tuviste preocupados, ¿qué te he dicho de notificar antes de vagar como travieso? –dijo molesta su madre con las manos en su cintura.
    Ugh, mamá, aquí no que están todos presentes incluyendo a Dawn. –susurró Ash a su madre haciendo un berrinche.
    Aun así no vuelvas a hacerlo, preocupaste mucho a Dawn. –lo regañó su madre ante todos los presentes quienes solo reían por lo acontecido, a excepción de Dawn y su madre.
    Tenía que ser yo… –
    Eso lo discutiremos más tarde, ¿a dónde piensas ir ahora? –
    Pues… lo siguiente no sólo depende de mí, también si me lo permiten la señora Johanna y Dawn. –comentó Ash mirando a ambas mujeres.
    ¿Cómo? No entendí. –
    Ni yo, Dawn, ¿hay algo que quieras compartir? –preguntó la suegra de Ash mirando a su hija.
    Verás, Ash no tenía pensado por el momento regresar a su casa porque quiere ver al profesor Rowan y quiere estar un tiempo aquí en Sinnoh, a lo que voy es, ¿dejarías que Ash viniera a nuestra casa? –dijo su hija juntando sus manos en señal de casi rogar.
    No hay problema, ¿tú qué opinas Delia? También eres bienvenida. –
    Si eso tienen planeado, no queda remedio, pero ¿no seremos una carga? –
    De eso no te preocupes, tenemos suficiente espacio. –dijo Johanna con una sonrisa.
    ¡Gracias mamá! –explotaba de alegría Dawn al escuchar las palabras de su mamá, tanto fue su felicidad que la abrazó.
    (Rayos, esa enana se quedará con mi Ash. Todo por ser líder de gimnasio, debí seguir con él.) –pensó Misty totalmente celosa por lo que sus oídos escuchaban.
    (Disfruta la victoria por ahora amiga, tarde o temprano Ash vendrá a mí.) –decía en sus adentros May fingiendo una cara de felicidad.
    (Quiero helado.) –pensaba Max.
    ¿Y ustedes qué harán? –preguntó el entrenador azabache mirando al resto del grupo.
    Lo mismo que ustedes, regresaremos a casa, Lance nos ofreció irnos en su jet privado ya que tiene un asunto pendiente en Hoenn con Steven. –explicó uno de los líderes más populares y fuertes de la misma.
    Yo volveré en barco a Kanto, pero antes tengo que hacer una parada en ciudad Snowpoint. –dijo la entrenadora de ciudad Cerulean.
    Ya qué, te acompañaré. Sirve que así voy a mi casita y me hago cargo de la familia que de seguro y papá se está dejando dominar por mi madre. –agregó el criador pokémon.
    Profesor, ¿en qué se irá usted? –preguntó Ash al profesor Oak quien leía un periódico que misteriosamente encontró.
    ¿Ah? Perdón. Tengo un asunto pendiente con Birch, si no es molestia Norman me gustaría acompañarles. –dijo el anciano mirando al líder de gimnasio.
    No hay problema profesor, vengase con nosotros, ustedes también Tracey y Gary. –
    Muchas gracias. –contestaron el investigador y el asistente.

    El día continuaba su transcurso, el reloj marcaba las 2:00 pm y todos dandoce un hasta luego partieron a sus respectivos rumbos, en la isla de la liga pokémon una pareja acompañada de sus madres eran las que restaban para irse, el problema era cómo le harían para viajar ya que no habían apartado boletos para algún vuelo o partida en barco al menos, una incógnita sin solución aparente.
    Todos fueron en dirección a los muelles para ver si los taquilleros aun tenían boletos disponibles, muchos de los barcos ya se habían ido, solo quedaba 1 y este todavía tenía boletos pero la desventaja era que en este transporte solo podían subir adultos por los eventos que se manejaban en el mismo y las habitaciones eran nomás para una persona. A decir verdad el barco no era nada malo, era todo lo contrario al ser un monstruo por los casinos, albercas, y 2 restaurant que se podían ver a simple vista.

    ¿Ahora qué haremos? Solo se permiten adultos. –dijo preocupada Johanna.
    Señora Johanna, si gusta suba usted y mi madre al barco, yo me iré con Dawn por aire. –sugería Ash quien por su mirada de gran seguridad reflejaba un plan.
    ¿Pero cómo? Si ni aviones hay aquí, explícate por favor Ash. –
    Además no puedo permitirte ir de esa forma. –agregó la señora Delia.
    No tengo problema alguno, no necesito avión ni helicóptero o qué se yo, para eso me fui toda la mañana. –mostraba el azabache una pokebola, la lanzó en dirección al cielo para que de esta saliera una enorme criatura naranja con alas y una llama en su cola volando sobre ellos. Y mamá, ¿Cuántas veces me has impedido irme solo? He viajado por 4 regiones y nunca me habías dicho nada.
    Lo sé hijo pero es muy peligroso que vallas así y…
    Charizard es uno de mis pokémon más fuertes, recuerda que aun sigue entrenando en el valle Charicifico y su vuelo se ha perfeccionado, confió en él y sé que no tendremos inconvenientes, ¿verdad amigo? –miró a su pokémon y este solo le contesto desde el cielo lanzándole un sorpresivo lanzallamas que sólo lo tocase a él, provocando que callera al suelo todo hecho cenizas.
    ¡Ash! –exclamó preocupada Dawn arrodillándose para tomarle de la nuca a su novio. ¿Estás bien?
    Sí. Esa es su manera de decir que sí… cof… no creas que es rebelde o algo por el estilo, es muy obediente.
    ¡Gr! –asentía el pokémon descendiendo a con ellos.
    Ya que lo pones así, está bien, te permito ir con Charizard pero no sé qué decida Johanna por Dawn. –dijo la madre de Ash mirando a la ex coordinadora.
    Por favor mamá, no vayas a decir que no, quiero ir con él. –decía Dawn haciendo presión en la decisión de su mamá, en sus manos aun se encontraba sosteniendo la cabeza de su novio.
    No hay otra solución y no pueden quedarse aquí, Ash es un buen entrenador y sé que Charizard no nos defraudará, confió en él. –respondió la mujer peli azul con una sonrisa, por su comentario el pokémon naranja se alegró, ya sentía la aceptación de otras personas. Pero eso sí, quiero que se cuiden.
    No te preocupes mamá. –
    Y qué pasa cuando dices que no me preocupo es cuando más lo hago… suspiró la suegra del azabache.
    Ugh… -se levantaba el entrenador después de la quemada, se sacudió las cenizas y se acomodaba su típica gorra. entonces las veremos en Hojas Gemelas.
    Así es, por favor Ash cuida de ti y mi yerna. –decía Delia aun un poco insegura.
    Pika. –dijo el pokémon roedor saltando a los brazos de la madre de Ash, al parecer él no deseaba esta vez ir con su dueño.
    Al parecer Pikachu se viene conmigo.
    Tranquila mamá, no es la primera vez que vuelo sobre el lomo de Charizard, recuerda el incidente con Entei. Y… Pikachu, eres un traidor. –
    Pi. –sonrió alegre el ratón en señal de no importarle lo que dijo.
    Creo que será mejor que los dejemos así, te está atrapando en tu propio juego, mejor compremos los boletos. –dijo la madre de Dawn tomándole del hombro a Delia.

    Dejando a las madres y Pikachu con su crucero, nuestra parejita tomó vuelo en el lomo de uno de los pokémon más fuertes y veloces que traían consigo, al inicio hubo un poco de nerviosismo por parte de Dawn ya que ella no conocía del todo al pokémon y jamás había montado en un pokémon grande a alturas de un avión, la coordinadora se aferró fuerte a la espalda del entrenador y este al ver cómo se encontraba ella le ordenó al dragón naranja que fuera a una velocidad normal. Despedían a sus madres desde el barco mientras el pokémon se elevaba por los cielos y desaparecer en el horizonte.

    No estás acostumbrada a volar en un pokémon, ¿verdad? –preguntó Ash.
    Para serte honesta, no, esta es la primera vez. –respondió un poco avergonzada la peli azul al notarse nerviosa. – Debes disculpar a esta niña miedosa.
    No te digas así, tú no eres miedosa, cuando yo volé por primera vez igual tuve algo de nerviosismo y fue en Charizard, éramos inexpertos, ¿recuerdas compañero? –preguntó a su fiel criatura quien exclamó con un gran rugido.- Conforme pasa el tiempo te vas acostumbrando y el miedo desaparece. No te sientas avergonzada por el miedo que tengas, prometo jamás burlarme o hacer algo inapropiado porque te quiero, Dawn.
    Yo también te quiero Ash, eres el mejor novio de todos. –contestó la joven de hermosos ojos zafiros tomando más calma, reflexionando que presionaba fuertemente la espalda a su novio le bajó a su nivel de fuerza y ahora se aferraba a él de una manera más sutil recostando su cabeza en la espalda de él.

    En el trayecto de Ash junto con Dawn, miraban el grandioso mar azul acompañado de una suave brisa, el rumbo que tomaban era por las costas del Este con tal de evadir los fríos vientos que se desprendían en Snowpoint junto a las ciudades vecinas. Misteriosamente el viento comenzaba a sentirse un poco frío, además de un conocido olor a tierra mojada, efectivamente en algún lugar se encontraban con lluvia o puede que ya háyase terminado.
    Sabiendo que no era una buena opción seguir volando por el mar, Ash le ordenó a Charizard dirigirse al Oeste para ir dando con el abundante bosque que los conduciría a Ciudad Corazonada.

    (Qué extraño… llueve en esta zona del sur de Sinnoh pero en el norte no, ¿será simplemente el clima?) Dawn, ¿de casualidad sabías si hoy iba a ver lluvia?
    Que yo recuerde no, todos los que conformamos el Sur y Oeste de Sinnoh es raro ver las tormentas a pesar que estamos cercanos a las costas, a excepción del Noreste y todo el Norte. –
    Mm… lo mejor será que empecemos a desc…
    Ash, no nos queda mucho de llegar a Hojas Gemelas, mejor continuemos. –sugería la peli azul.
    Está bien. –dijo no del todo convencido el azabache al tener un mal presentimiento.

    Conforme continuaban su trayecto las nubes se veían más negras que nada acompañadas de constante iluminación de los rayos que daban una clara señal de que la tormenta iba a dar inicio, solo quedaba atravesar el bosque de Pueblo Floaroma para que se brincaran el laboratorio del profesor Rowan y llegaran directo a Hojas gemelas. Ash al darle un leve toque a su pokémon con la palma de su mano este captó que debía apresurarse, lo que no contaban es que algo estaba su contra: el clima.

    Charizard, será mejor que desc...

    No pudo terminar de ordenar el azabache que su pokémon descendiese, la lluvia hizo su aparición repentinamente seguido una fuerte corriente de viento que sacó de balance a la pareja junto con el dragón anaranjado. Dawn se sujetó fuertemente abrazando al chico mientras este veía junto con Charizard como manejar la situación. El cielo dio inició todo lo que mantenía resguardado, cualquiera que se atreviese a volar no contaría su día de la mejor manera, tanto la criatura como su amo no sabían qué hacer, mantener estable su equilibrio por los aires era difícil.

    Tenía que ser, debí haberme esperado en Ciudad Corazonada. dijo para sí mismo Ash, dio una rápida mirada a su entorno y miró algo que los salvaría. ¡Rápido Charizard, a la cueva!
    ¡Gr! asintió el pokémon, cayó en picada en dirección a la cueva y la lluvia solo empeoraba más y más.

    Los truenos de igual modo querían hacer su aparición, al estar en un bosque y con la física en que los árboles atraen los rayos, una descarga le rosó en el ala derecha de Charizard provocándole una gran quemada, este terrible golpe de la madre naturaleza permitió que perdieran el equilibrio total y esperaran el impacto de un gran golpe contra el suelo. Dawn solo se limitaba a gritar del susto, Ash estaba nervioso al reconocer que debía actuar rápido que sino las consecuencias serían peores al estar todavía a una altura suficiente como para quebrarse una lesión muy grave.

    (Ni modo, tendré que hacerlo.) pensó Ash. ¡Charizard regresa!
    ¡¿Qué?! exclamó Dawn petrificada al escuchar esas palabras, el pokémon naranjoso volvía a su pokebola la cual era apuntada hacia él por parte de su dueño.

    La caída ahora sí que era lo suficientemente riesgosa para una buena experiencia, siguiendo aferrada al entrenador estos comenzaron a caer en dirección contra la superficie del bosque, la coordinadora no deseaba ver qué sucedería, únicamente puso su cara contra el pecho del entrenador para solo esperar el temible impacto. “Lo siento Dawn…” escuchó a su amado llamarle, este le había separado de su cuerpo.

    ¡Ash! exclamó de miedo la coordinadora, el viento nuevamente volvía a hacer de las suyas separándole de su amado. ¡Ah! –cerró sus ojos la chica, ahora solo le quedaba experimentar el golpe que le aguardaba.

    ¿Qué sucederá con Dawn? ¿Sobrevivirá al golpe? ¿Tendrá Ash más posibilidades de salir ileso? Esta historia continuará…
     
  10.  
    Laker

    Laker Entusiasta

    Libra
    Miembro desde:
    2 Agosto 2011
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    Cambios repentinos inesperados [pearlshipping]
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Aventura
    Total de capítulos:
    10
     
    Palabras:
    2774
    Capitulo 10: Consecuencias.

    La lluvia pegaba duro, este día no se veía muy agradable, los pokémon silvestre miraban con malos ojos las nubes, muchos árboles eran azotados por las corrientes de viento que casi pareciera que los arrancara del suelo si no es que fuera por sus gruesas raíces enterradas, los truenos y relámpagos acompañaban a las nubes dando un entorno terrorífico porque el sol a pesar de que no se viera ya no estaba dando tanta iluminación, la noche ya se venía por lo visto.

    – ¿Uh? –pronunció confundida la peli azul comenzando a abrir sus azulosos ojos, la imagen que percibía de su alrededor eran muros rocosos que le rodeaban, se levantó y vio que tenía una frazada azul que le cubría.- ¿Ash? ¿Dónde estás? –se preguntó a sí misma viendo que no había nadie más que le hiciera compañía, su única iluminación eran los rayos que se veían entre las nubes.

    Efectivamente se encontraba en una cueva, su mochila estaba junto con la del entrenador recargadas en uno de los costados de los muros rocosos, no había señal del entrenador, únicamente el objeto que la tapaba del frío era su única compañera.

    – A... Ash... –dijo un tanto asustada la coordinadora, un trueno sumamente tenebroso estremeció el cielo con su sonido junto a la imparable lluvia que parecía no tener fin.
    – Scept. –pronunció una voz un poco ronca y aguda detrás de la chica.
    – ¡Ah! ¡¿Qué eres?! –exclamó Dawn al ver un monstruo verdoso con una varilla en su hocico.- Espera, eres un Sceptile, que raro. No es común verlos aquí.
    – Scept, sceptile tile. –dijo el pokémon de hoja dirigiéndose a la salida tomando de la mano la coordinadora.
    – Espera, ¿qué quieres? –
    – ¡Scept! –pronunció molesto el pokémon, se salía con la suya y se fue junto con Dawn a la vil lluvia.
    – ¡Espera, no sé qué quieres o de quién eres! –dijo Dawn dejándose llevar por el gigantón de mirada seria.

    Al caminar unos cuantos metros entre el montón de árboles, arbustos y demás acompañados de grandes charcos que la mojaban por completo, Dawn continuó siendo conducido por el pokémon. La extraña criatura de las esporas amarillentas en su espalda miró unos arbustos y se metió entre ellos, más delante les esperaban más y más árboles, el suelo no estaba del todo terrible como cuando empezó a ser jalada, casi ni charcos había.

    - ¡Deja de jalarme! –dijo molesta la joven peli azul zafándose de las manos del pokémon, este le dio una última mirada y se hacía a un lado. – Ahora tendré que lavar mi ropa cuando…

    En lo que veía el aspecto que había tomado por la tormenta, la adolescente al mirar donde la condujo Sceptile quedó en shock total, frente sus ojos veía al joven azabache noqueado y empapado, este se encontraba recargado en el tronco del árbol corriendo el riesgo de que le callera otro rayo sin contar las ráfagas de viento que eran frías. El pokémon de mirada seria era de Ash, este había ido con Dawn ya que su entrenador no mostraba señal alguna de reacción.

    – ¡Ash, levantate! –dijo la chica moviendolo un poco, pero nada, su respiración era normal pero al tocar su frente todo resultaba ser lo contrario.- Tiene fiebre, Sceptile, ¿Ash trajo consigo otro pokémon que nos pueda ayudar?
    – Tile. –asintió el monstruo verde.

    Rápidamente Dawn comenzó a sacar las pokebolas que traía consigo el entrenador en sus bolsillos, se las mostró a Sceptile y este le dijo cuál escoger, lanzó dichosa pokebola y de este salía un toro de 3 colas, al ver a la coordinadora y el entorno que tenía a su alrededor lo desconcertó incluyendo que su entrenador estaba en malas condiciones, pensando que el culpable era la chica se preparaba para envestirla.

    – ¡Espera Tauros, no hay tiempo que perder! ¡Ash está en peligro y necesito que me ayudes a cargarlo! -dijo Dawn armada de valor poniendoce al tú por tú con el toro.- Luego te daré explicaciones, soy una de sus acompañantes.
    – Sceptile. –asintió el pokémon verde poniéndole su mano sobre el lomo en señal que era cierto. Cargó a su legítimo dueño y lo puso sobre la espalda de Tauros junto con Dawn para que no se callera.

    En su transcurso los rayos no paraban de caer, unos se impactaban contra los árboles provocando que estos se derrumbaran, pero al tener un pokémon muy ágil como Sceptile quien tenía sus ojos en color azul este como si nada los cortaba en un abrir y cerrar de ojos usando sus brazos como cuchillas con el ataque de hojas navaja. Mientras tanto, Tauros iba un poco más atrás que su compañero debido al riesgo que había si corría más rápido, capaz y podía resbalarse junto con su dueño y `compañera´ de viaje, no obstante el hecho que él no tenía la misma habilidad especial que Sceptile para detectar peligros.

    – No cabe duda que Ash los ha entrenado. –dijo en voz baja la coordinadora poniendo firmemente su mano izquierda en la espalda del chico mientras que con la derecha trataba de sostenerse tanto ella como su novio en Tauros.

    Llegando finalmente a la cueva, Sceptile recostó a Ash sobre el suelo, a pesar de las explicaciones el toro siguió mirando con cierta desconfianza a la coordinadora pero sabía que no era el momento para hacerlo, la vida de su entrenador era lo más importante ahora. Ambas criaturas miraban tristemente el estado del azabache, Dawn buscó algo en su mochila que pudiera usar para bajarle la fiebre.

    – Demonios, sólo tengo pociones y eso no me sirve de nada. Debo actuar rápido. –

    La novia de Ash tomó su mochila junto con la de él para usarlas como una almohada improvisada, sacó sus pokebolas que cargaba para que no fuesen una molestia y lo recostó, lentamente le quitó su chaleco que estaba húmedo y usó aquella frazada azul que le cubría al despertar dentro de la cueva para que ahora el entrenador estuviera tapado. Esto no era suficiente, una simple mantita no haría que tuviese el calor suficiente, lo necesario era hacer una fogata pero como no contaba con los recursos necesarios tuvo que improvisar nuevamente.

    – Menos mal que te tengo, ¡ve Cyndaquil! –invocó Dawn al pokémon con una llama en su espalda.
    – ¡Cynda! –
    – Cyndaquil, necesito que aumentes un poco más tu llama y la temperatura sea estable para Ash. –
    – Cyn. –asintió el pequeño incrementando el tamaño de su lumbre, al estar dentro de una cueva el calor se encerraba entre ellos.
    – Ahora… –tomó el chaleco del chico morocho y…– Sceptile, ¿crees poder cortar un trozo?
    – Scept. –tal cual y lo hizo en el exterior, sus brazos brillaron formando 2 cuchillas con las cuales cortó con toda la precaución del mundo sin herir a Dawn el chaleco, sus cortes dieron una forma rectangular dando como resultado un trapo.

    Nuevamente la coordinadora peli azul fue hacia donde su mochila, de ella con cuidado sin mover tanto a Ash sacó un ancho frasco de comida pokémon, casi no tenía mucha por lo cual no dudó en dárselas a Sceptile y Tauros para dejarlo vacío. Fue a la salida de la cueva y en ella sacó un poco su brazo derecho para que el frasco se llenase con agua fría.

    – Debí haber respetado su decisión pero mi terquedad por querer llegar a casa y tener un momento a solas con él causó esto… –susurró para sí misma la chica, fue a donde el azabache y se arrodilló, introdujo el trapo en el agua y lo exprimió un poco para luego ponerlo sobre la frente de Ash.

    Y así siguió Dawn por un buen rato hasta que la temperatura de su novio bajara, cambiaba constantemente el agua y el trapo sumergiéndolo, no le perdía la vista ni un solo momento al joven que cada vez mostraba un poco de mejoría por la cara que ponía mientras dormía. Sceptile miraba recargado a espaldas de la chica cómo cuidaban de su dueño, Tauros al notar que era buena gente la miró con buenos ojos y se echó cerca de la pareja para ser como un muro en caso de que el viento soplara, y finalmente Cyndaquil estaba en concentración total con su llama para que no bajara ni aumentara de la potencia que le ordenó su dueña.

    –Si quieres puedes descansar, no es necesario que te sobrecargues de tanto trabajo. –dijo la joven de ojos zafiro refiriéndose a Cyndaquil, este solamente se negó a descansar, él aunque no era pokémon de Ash le tenía cariño. – ¿Seguro de querer continuar?
    – ¡Cynda! –asintió el pokémon de fuego en seguir dando lo mejor de él.
    – Te dejaré seguir pero cuando te sientas cansado puedes parar, después de todo yo soy quien debería hacer algo más ya que por mí Ash se encuentra así. –se dijo para sí misma lo último en un susurro, su mirada se tornaba a depresión, no podía negar su error.
    – Sceptile… -pronunció el monstruo verde de las esporas amarillas poniendo su mano derecha sobre el hombro izquierdo de esta, como todo pokémon él pudo detectar con suma facilidad el estado de ánimo de la coordinadora.
    – ¿No estás enojado, Sceptile? –
    – Scept. –negó Sceptile tomando asiento al lado derecho de Dawn, miró a su entrenador y luego a la chica mostrándole una sonrisa, él tenía su confianza en la compañera actual de este.
    – Me gustaría conocer los demás pokémon que tiene Ash, de seguro son tan fuertes como tú. –

    Cada vez la iluminación en el exterior era nula debido a que la noche quería hacerse notar, la lluvia lentamente se fue calmando hasta que fueran solo chubascos, los truenos dejaban de sonar al igual que los rayos desaparecían del cielo, los vientos continuaban con su misma temperatura pero su fuerza cuando soplaba ya era menos. El cansancio se apoderaba de Dawn, sus ojos al igual que su cuerpo rogaban por un descanso, dentro suyo igual tenía la idea de dormir pero estado de salud de Ash era lo que la mantenía despierta y alerta, Cyndaquil terminó agotado de hacer su labor y entró a su pokebola dejando a Sceptile junto a Tauros quienes seguían despiertos al pendiente.

    – Tile… –la criatura de las esporas amarillentas estaba meditando con sus ojos cerrados, entreabrió su ojo izquierdo y notaba que cada vez que el sueño le iba ganando a la adolescente esta trataba de seguir cuidando de Ash. Aprovechando esta situación tomó a Dawn por los hombros y la fue recostando al lado de su amo que ya se veía mejor.
    – Espera Sceptile, yo… –no la dejó continuar el grandote de mirada seria, simplemente la tapó junto con el chico en señal de que él se encargaría. Al no poder cambiarle de opinión junto con el sueño que la estaba devorando se dejó vencer y quedó profundamente dormida.

    Y así sucedió… Sceptile le cambiaba por última vez el trapo al joven azabache, ya no era necesario seguir remojando y exprimiendo, únicamente era bajarle un poco la fiebre esperando alguna señal de mejoría en caso de que despertara, él no sabía nada de medicina o qué podría usar a la mano para ser efectiva la recuperación. La noche siguió su transcurso mientras la parejita de enamorados dormía ante el cuidado de Sceptile, Tauros al poco rato igual terminó rindiéndose por el cansancio, la lluvia ya no era más un problema al desaparecer por completo y el ambiente que se vivía afuera era helado con un aroma a tierra mojada pero muy tranquilo.

    – Uh… –pronunció una voz masculina comenzando a despertar, todo lo veía un tanto confuso con un leve mareo, estaba dentro de una cueva acompañado por 2 criaturas que conocía a la perfección.

    “¿Q… qué sucede?” Se preguntó a sí mismo, todo era muy confuso, no supo ni cómo había llegado a dichoso lugar, las criaturas dormían placenteramente, el viento hacía una melodía al combinar sus ráfagas con el abundante bosque. Trató de levantarse para ver lo qué pasaba o qué era lo que le tenía con una gran incógnita en su mente pero no pudo al sentir algo sobre su pecho que no le permitiría irse y un aire cálido sobre su cuello, miró a su costado y lo primero que vio fue el lindo rostro de una joven de cabellera azul.

    – ¿Dawn? –continuaba confundido el azabache, ahora se preguntaba qué hacía ella también dentro de la cueva con él. – Ahora lo recuerdo…

    Flash Back

    – Charizard, será mejor que desc... –

    No pudo terminar de ordenar el azabache que su pokémon descendiese, la lluvia hizo su aparición repentinamente seguido una fuerte corriente de viento que sacó de balance a la pareja junto con el dragón anaranjado. Dawn se sujetó fuertemente abrazando al chico mientras este veía junto con Charizard como manejar la situación. El cielo dio inició todo lo que mantenía resguardado, cualquiera que se atreviese a volar no contaría su día de la mejor manera, tanto la criatura como su amo no sabían qué hacer, mantener estable su equilibrio por los aires era difícil.

    – Tenía que ser, debí haberme esperado en Ciudad Corazonada. –dijo para sí mismo Ash, dio una rápida mirada a su entorno y miró algo que los salvaría. – ¡Rápido Charizard, a la cueva!
    – ¡Gr! -asintió el pokémon, cayó en picada en dirección a la cueva y la lluvia solo empeoraba más y más.

    Los truenos de igual modo querían hacer su aparición, al estar en un bosque y con la física en que los árboles atraen los rayos, una descarga le rosó en el ala derecha de Charizard provocándole una gran quemada, este terrible golpe de la madre naturaleza permitió que perdieran el equilibrio total y esperaran el impacto de un gran golpe contra el suelo. Dawn solo se limitaba a gritar del susto, Ash estaba nervioso al reconocer que debía actuar rápido que sino las consecuencias serían peores al estar todavía a una altura suficiente como para quebrarse una lesión muy grave.

    – (Ni modo, tendré que hacerlo.) –pensó Ash. – ¡Charizard regresa!
    – ¡¿Qué?! –exclamó Dawn petrificada al escuchar esas palabras, el pokémon naranjoso volvía a su pokebola la cual era apuntada hacia él por parte de su dueño.

    La caída ahora sí que era lo suficientemente riesgosa para una buena experiencia, siguiendo aferrada al entrenador estos comenzaron a caer en dirección contra la superficie del bosque, la coordinadora no deseaba ver qué sucedería, únicamente puso su cara contra el pecho del entrenador para solo esperar el temible impacto. “Lo siento Dawn…” escuchó a su amado llamarle, este le había separado de su cuerpo.

    – ¡Ash! –exclamó de miedo la coordinadora, el viento nuevamente volvía a hacer de las suyas separándola de su amado. – ¡Ah! –cerró sus ojos la chica, ahora solo le quedaba experimentar el golpe que le aguardaba.

    Fin del Flash Back

    – Hice una gran estupidez, de seguro está molesta conmigo. –dijo Ash para sí mismo sin dejar de mirar el rostro de Dawn que se veía muy angelical e inocente al dormir. – Te quiero Dawn. –pronunció el azabache en voz baja, se acercó cuidadosamente al rostro de su chica sin despertarla y le dio un beso de buenas noches en su frente, al hacer esto no solo se había ganado una sonrisa que se dibujaba en la cara de esta sino que también se aferraba más a él y continuar con su larga noche de sueño.

    ¿Qué sucederá ahora con la parejita? ¿Cómo amanecerán? ¿Cómo reaccionarán Sceptile y Tauros al ver mejoría en Ash? Esta historia continuara…

    Eso es todo por ahorita, en unos instantes vengo con el resto de lo prometido.
     
    • Me gusta Me gusta x 5
    • Creativo Creativo x 1
  11.  
    MewtwoPikachu

    MewtwoPikachu Iniciado

    Acuario
    Miembro desde:
    9 Junio 2011
    Mensajes:
    14
    Pluma de
    Escritor
    AMIGO HAzme CASO OCUPA GUION LARGO ya se presiona alt (y se mantiene presionado) y presionas con lo numeros de la derecha y coloca 0151 y te saldra esto : — y tu haces esto mira
    -
    guion largo

    (se ve mas chico porque tu letra es mas grande)
     
    • Me gusta Me gusta x 1
  12.  
    Laker

    Laker Entusiasta

    Libra
    Miembro desde:
    2 Agosto 2011
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritor
    Aviso.

    ¿Por dónde empezar?
    Sé y estoy consciente de mis palabras escritas aquí, pero, los capítulos que les debo seguirán teniendo un retraso pero esta vez un poco más largo. Lo sé, lo sé, pueden pensar que solo estoy poniendo excusas para no traer nada y que tal vez ni he escrito nada de nada, queda a elección de ustedes creerme o no creerme porque para mentir ni bueno soy.

    ¿A qué voy con todo esto? Miren, para serles franco yo he notado desde mi punto de vista que todo lo que llevo en el fic hasta estos instantes ha sido una porquería de escritura, en la lista de fics podrán ver otro trabajo mío y ahí también pude ver mis mismos errores, los estoy cometiendo continuamente y no les he puesto fin. Lo que quiero es dejar de seguir posteando episodios o equis trabajo porque la forma en que narro, la forma en que describo, la forma en que desarrollo el tema, entre mucho más, no me agrada.
    Esto que he hecho es simplemente es una bazofia, a piece of shit, una pérdida de tiempo que les he brindado. Me critico a mí mismo por el hecho de que pude ver algo que nadie más (hasta estos momentos) me hizo ver, carezco de lo que es saber a fondo la gramática de lengua española, aún tengo cosas por aprender y por lo tanto me ausentaré en la escritura para recurrir a mis maestros, miré unos cuantos libros de texto y me encontré con algunos puntos de controversia: ¿cuando iniciar dentro del guión con mayúscula? ¿cuando empezar con minúscula? ¿cómo usar las comillas correctamente? ¿qué y qué no está permitido dentro de un escrito? etc, etc, etc. Aunque el español sea mi lengua materna no la conozco del todo, su gramática es algo que quiero dominar así como ya lo hice con inglés, claro no puedo comparar inglés con español dado a que una es menos complicada y es el idioma mundial mientras que la otra es de las más difíciles en el mundo.

    En resumen, no volveré a subir un capítulo hasta mejorar mi gramática: vocabulario, narración, desarrollo y demás. De mí ya no depende si los mods dejan que este tema siga vivo o simplemente cerrarlo, en dado caso que suceda lo segundo:

    *Moderadores, no tengo inconvenientes si lo hacen, yo no soy el que toma la decisión, ustedes sí porque puede que solo esté abarcando espacio en la página para otro fic que quiera dar luz ya sea por un nuevo user o alguno ya existente con alguna idea en mente. Lo mismo va si quieren borrar este post por si lo consideran innecesario o qué se yo.

    *Lectores/Users que seguían al fic, lamento los inconvenientes pero esto es para una superación personal, no me lo tomen a mal, realmente deseo aprender y si no lo hago ya me imagino cómo me desarrollaría siendo un profesional en lo que quiero estudiar: un güey sin futuro con los errores de diario. Si pude con inglés ¿por qué no en Español? Y neh, no soy proveniente o nacido de USA por padres mexicanos si lo llegan a pensar por todo lo que he dicho -w- soy mexicano de padres mexicanos.

    De antemano gracias por tomarse este tiempesito para leer un aviso, un aviso tal vez largo pero es con lo que haré próximamente por si surgen sus dudas. Nos veremos luego, adiós.
     
    • Me gusta Me gusta x 3
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso