Café, baile y Arte [Rin/Sessh] [Sango/Naraku]

Re: Café, baile y Arte [Rin/Sessh] [Sango/Naraku]

Perdón mis lector@s :(...
Y pues tuve un imprevisto y amm... estoy casti¿gada un mes xD
Sin compu, pero no dejaré que mi fiC muera, ¡NUNCA! veré como poner mi conti, lo juro.
Solo tengan un poco de paciencia, para esto dejaré ujna pista sobre lo que podrá pasar en el siguiente cap. en cada futura continuación y en los post que pongan:D
Espero con eso hacerlñes menos pesada la espera:D

Pista:

1.- Alguien se tomará un café en la azotea del edicio, y se encontrará con cierta persona de su pasado.
2.- La inaguración de la galería de Naraku, esta a vuelta de la esquina y Sango estará presente.

:ekk: Creo que he dicho de más Demonios xD
Espero ponerles la conti pronto.

Besitos a tod@s.:)

 

Re: Café, baile y Arte [Rin/Sessh] [Sango/Naraku]

Claro que no mi querida ZAIKA. ¡Nunca! Morirá:D

Prueba de ello, aquí el tan esperado capítulo.
Más vale tarde que nuncaxD

11.- Es increíble.

El lujoso pethouse se encontraba oscuro y vacío, lo que hizo a Rin respirar normalmente de nuevo. Recorrío el pasillo hacía su cuarto. Sango no estaba, seguramente tampoco quería llegar a casa, para repasar el pasado. Por más sucia y sudorosa que estaba no quiso tomar un baño, se quito la ropa y se puso un ligero camisón de un color naranja cremoso. La seda encajó perfecto a la figura de se cuerpo. Casi sin ánimo regreso a la cocina, cogió una gran taza y vertió el exquisito café en ella.
Una. Dos. Tres cucharadas de azúcar y camino hacia las escaleras que conducían a la azotea del edifico.

*****

Madrid estaba bañada por un manto oscuro y millones de brillantes chispitas de luz, la gente que transitaba por las mágicas calles de la ciudad se veían como pequeños muñecos vivientes.

Por lo menos, hay gente que es más felíz que yo.

Aunque le constaba retenerse, no pudo soportar la quemazón que le causaban las lágrimas atrapadas en sus ojos, desesperadas por salir. Cuando las luces de Madrid comenzaron a distorcionarse, una cuerda atrapó su garganta y sintió como un gran agujero comenzó a cabarce en donde una vez creyó que estaba su corazón, lloró.

Aún así, sabía que la amaba pero le constaba el no pensar que un hombre llorara y más por una mujer.

*****

—¡Es increíble!—Exclamó Kagura. Sorprendida por su entusiasmo y avergonzada a la vez. ¿Porqué la gente a veces dices las cosas sin pensar?
—¿Qué?
—¿Eh?— Carajo.
—¿Qué es lo increíble?— Inuyasha la miraba fijamente desde el otro de la mesa. Llevaban casi todo el día juntos y habían terminado cenando en una pequeña y acogedora terraza a solo unas cuantas calles del penthouse. Le costaba comprender como Kagura se veía tan hermosa bajo la tenue luz del solitario restaurante, esos encantadores ojos, su sedoso cabello ondulado, la tersa piel que la cubría, esos deliciosos labios...
—No nada...— La temperatura subía radicalmente y se posaba en sus mejillas.
La risotada que soltó Inuyasha la hizo sentir más nerviosa.
—Vamos, Kagura, dime.

¿Cómo me puedo resistir a eso?

—Eh... Bueno, es que se me hace increíble.
—¿Qué? ¿La sopa? No la he probado. —De nuevo rió. Sabía por lo menos que no era a la comida a lo que ella se refería. El también lo sentía pero al parecer Kagura se había dado cuenta primero.
—No, claro que no. No me refería a la sopa.

Lo sabía.

El sonrió.
—¿A qué entonces?
—A esto.

Eso sí era algo que no se esperaba.

—No te entiendo— Admitió.
—Es que, hace mucho que no... Bueno que no me divertía, así. Me la estoy pasando muy bien, en verdad. Es increíble. Hacía mucho tiempo que no...
Ella había captado su total atención, sin embargo seguía sin concebir el porqué de su estómago contraído y su cuerpo tensado mientras la escuchaba.
—¿No qué?
—Qué no sonreía — Una oleada de calor se adueño del rostro de la joven y apesar de la tenue luz que emanaban las lámaparas del lugar, Inuyasha notó lo bella que se veía ruborizada.
—Imposible— Le contestó, agachando la cabeza mirando el pedazo del carne que tenía en su plato.
—¿Disculpa?
—Es qué... Es imposible.
—Ahora yo no te entiendo— Espetó ella.
—Tienes la sonrisa más hermosa y encantadora que he visto, imposible que hayas privado al mundo de tal belleza. Eres una egoísta—Agachó un poco más la cabeza para que ella no lo viera sonrojarse.

Ella lo miró de nuevo, pero sentía que ahora algo era diferente. No sabía qué.
El acercó su mano a la de ella. Cuando rozó con sus dedos su palma una corriente eléctrica subió por sus brazos, directo al corazón.

*****
El viento rozó sus piernas desnudas y toda su piel se estremeció. De no ser por el café que tenía en las manos, calentando su pecho, hubiera regresado a cambiarse. Todo estaba oscuro. Mientras Rin caminaba en la oscuridad se perdió contemplando las luces de la ciudad, era una vista divina. Siguió caminando...
—¡Aahh!

*****

Limpió su mojado rostro al escuchar un grito. Pensaba que estaba solo y se asustó. Corrió hacia aquella delgada silueta que ya hacía en el suelo con las piernas enredadas en los cables de televisión, con sangre en sus rodillas y una mano cortaza. Horrorizado corrió rápido hacia ella y al extraño olor de café alrededor.

*****

Torpe. Torpe. Torpe. ¡Ay! El café, esta hirviendo.

*****

—¿Estás bien?

¡Ay no, esa voz no! No, por favor.

—¿Rin?
—Estoy bien, déjame— Rugió tratando de incorporarse.
—Míra nada más, te cortaste con la taza.
—Y el café me está quemando, suéltame yo puedo.
—Deja de quejarte y ven.
—Ni se te ocurra—Le advirtió al ver que Sesshomaru extendía los brazos.
—¡Ay, ya cállate!
La levantó como quién no quiere la cosa y la cargó escaleras abajo.

*****

La paz y calma que sentía al tenerla en sus brazos era perfacta.
—Eres increíble, mi amor— Le dijo Naraku mientras acariciaba la piel.
—Te extrañé tanto.
—Yo enloquecí.
—No juegues— Le dijo Sango con una sonrisa en los labios.
—Tienes que ver algo.
—¿Qué cosa?
—Todavía no, espera solo dos días más.
—Me puedo quedar aquí toda la vida.
—Me parece excelente.

*****

—¡Qué me sueltes!
—¡Te estoy ayudando!
—¡Nadie te lo pidió!

La dejó caer en el sofá de la sala mientras iba directo a buscar un poco de agua oxigenada.

—¡Ay! Qué ayuda.

Sesshomaru regresó con unos algodones y una botellita de agua oxigenada.

—¡Me va a arder!
—¿Porqué estás a la defensiva? ¡Ni si quiera te he dicho o hecho nada!

Me hiciste.

—Nadie te dijo que vinieras.
—Nadie te dice que no te puedes ir—Le contestó mirandola a los ojos.
—Yo no me iré, llegué primero.
—¿Y qué? yo llegué después. Ni pienso irme.
—Ya veremos.
—¿Es una advertencia?

No. Pero no te vayas.

—Sí—Terminó Rin. De repente sintió un ardor en la rodilla— Eres inc´reíble—Le reprochó rin.

*****

Parecía que ni un minuto había pasado, pero toda la noche se les había ido. Sango dormida en los fuertes brazos de Naraku, y el a gusto acurrucando su cuerpo con el de ella. Los pájaros españoles canturreaban en el cielo y el suave ardiente rayo de sol que les bañaba la cara de luz los desperto.
Seguían en la misma banca del mismo parque en el que pasaron toda la noche después de bajar del elevador, después de hablar, después de volverse a enamorar.
Espero que les agrade:llorar1:
Besitos.

 

Re: Café, baile y Arte [Rin/Sessh] [Sango/Naraku]

Yeii!:D
Oh, sí aja... #Kanna haciedno bailes raosxD#
Por fin, el castigo ha terminado :D
Y pondré laconti lo antes posible:D:D:D
Es cuestión de un par de horillas y minutillos, y tatán:D
Las veré luego con la contixD
Besitos:D:D