Cánticos y goles

¡Hola mis amigos! ¡Llegó la ansiada Final y ya verán de qué forma!

@Marina, muchas gracias por tus comentarios, vi que te agradó el capítulo anterior y ojalá que este no desentone. Una Final es algo muy grande para los amantes del futbol y como dije anteriormente: se llega muy pocas veces en la vida o nunca se llega, así que la afición granate está más que ilusionada con conseguir una estrella más y los aztecas con inmortalizar su nombre. Me has seguido a todo lo largo de esta historia y ya casi ha llegado a su final; me has deseado cada quincena los mejores deseos y éstos se han materializado. Muchas, muchas gracias a ti y a tus talentosas hijas por aguantarme, por querer conocer un mundo que tenía en las tinieblas con todo el celo del mundo. Su participación me dio luz y ánimos. Que Dios les sonría.

A todos los demás que han seguido esta historia les dedico esta primera parte, pónganse cómodos en sus respectivos asientos, ya sea en los palcos o en las cómodas y renovadas gradas, sean bienvenidos a Aztlán. Que empiece el partido.



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UNA FAMILIA CON MÍSTICA


1er Tiempo.

-¡¡Aaaaaaaaaaaarraanca la Graan Finaal!! ¡¡Cuauhtémoc-Euroarsenal!! ¡3-1 el marcador a favor de los visitantes! ¡Esta noche, señoras y señores, tenemos campeón! ¡Señor Ramón! ¿Quién es su favorito para coronarse esta noche? Salude usted a sus admiradores.

-¿Mis admiradores? ¿Acaso tengo? Mira, Rogelio, mejor me centro en mi opinión. Buenas noches al auditorio quienes sí tienen a su favorito. Yo debo ser más neutral, esa es mi chamba. No es que tenga un favorito, considero que aunque el Euro tiene la ventaja y mucho potencial, el Cuauhtémoc tiene también muchos argumentos para empatar el marcador global y alargar la serie… Yo me decanto por la victoria del local pero no le va a alcanzar. 3-2 a favor del Cuauhtémoc.

-Me gusta su pronóstico señor Ramón, yo también pienso similar. El Cuauhtémoc es capaz de meter los goles que necesita, pero el problema es que el Euro también te puede hacer daño ¿cómo paras a este equipo? ¡Y la pregunta también va dirigida a ti, Lupillo! ¡Danos tu opinión al respecto!

-Hola caballeros, buenas noches a quienes nos ven y escuchan. Me uno, me uno a su visión del partido, esto es sencillo: no puedes parar al Euroarsenal. Es un equipo que ha venido ganando y goleando tanto en la Copa como en la Liga, así que es impensable que vaya a tener hoy, en el partido más importante, su peor rendimiento, sería una tragedia. Yo también veo a los predators festejando el título como visitantes.

Los comentaristas han dado su punto de vista, mismo que molesta a Isaack quien ve el encuentro tanto en vivo como por tv, en el palco reservado para él. Y es que el seguimiento vía tv es importante para ver alguna jugada apretada que aunque no ayuda de nada, representa al menos un pobre consuelo. Isaack es acompañado por Lizeth, ambos con la playera del equipo puesta. El joven Anderson hubiera preferido vestir más elegante, pero la maestra no ha querido vestir de otra manera que sea vistiendo el jersey mexica y su compañero ha correspondido al gesto de su ¿prometida? Sonríe el propietario al recordar el intento de cena de ayer cuando la hermosa mujer lo abandonó en su propio restaurant. Luego la sonrisa cambia por una expresión de paz al ver a su amada ahí, con él, bella, vistiendo de grana, multiplicando el ardor de su de por sí ya escarlata cabellera. Suspira e ilusionado se vuelve hacia la cancha donde sus chicos generan los primeros intentos por anotar.

El entrenador Villanueva también ve el desarrollo de estos primeros instantes del duelo. Está de pie, al filo de la zona técnica. Ya ha pegado los primeros gritos invitando a la perfección, ya sea cerrar un espacio, presionar al rival, hacer un movimiento para recibir la pelota o hablarse entre los jugadores. Tras de sí se encuentran sedentes Paris, Antonio, Fred y Al, “tranquilos”, viendo a sus compañeros, dispuestos a entrar en combate en cuanto su técnico lo considere necesario o cuando la situación lo amerite. Y es que Al sabe que aunque poco probable, el escenario de que Alejandro se lesione y él tenga que suplirlo se puede dar y debe estar preparado para ello; Fred sonríe orgulloso cuando escucha el estridente sonido de la Huitzilopochtli mencionando el nombre de cada uno de los aztecas cual grito de guerra motivando tanto a los que están sobre el terreno de juego como a los que habitan la banca; Paris deja de ver las acciones un momento y mira su pie lesionado como comunicándose con él, el entrenador Villanueva le ha dicho que puede disponer de él por diez o quince minutos, “con eso te basta para cambiar el rumbo del encuentro”, ha sentenciado; Antonio está metido en el partido, en silencio por fuera pero animadamente por dentro, sabe que es muy posible que ingrese para la segunda mitad y desde ya se prepara para dar su dosis de lucha.

Y es justamente una lucha la que se vive en el terreno de juego: choques, rebotes, faltas. Estos primeros minutos cada equipo pelea por hacerse del control del balón, el Cuauhtémoc que creía que el Euro vendría a echarse atrás a guardar la diferencia de dos goles se ha equivocado, los predators se comportan como el equipo ganador que ha sido toda la temporada y disputan con bravura, pero con respeto, cada espacio, intentando adueñarse del eterno infaltable y liquidar esto lo más pronto posible. Esto a su vez, origina que el ambiente en Aztlán sea tenso por más que la Huitzilopochtli y las Mamazitecas quieran hacer una fiesta en torno al juego.

En sus hogares Marco y Steven también se sienten igual, en especial el primero por el cual aún fluye la sangre azteca y la amistad con los mexicas ha vuelto. Quisiera pertenecer al Cuauhtémoc y estar en el campo jugando pero sabe que eso ya es cosa del pasado, y como para consolarse piensa que de alguna manera sí puede hacer daño al Euroarsenal, ganando los dos partidos que restan de la Liga y coronándose campeón con los steelers, dejando en segundo lugar justamente al Euro.

Semejante lucha sólo puede ser interrumpida por una genialidad de uno u otro lado. En este caso la iluminación llega por conducto de Efrén apoyándose en Paul para generar una jugada que como espada corta las líneas visitantes por el centro, quedando en posición de disparo y aprovechando la oportunidad tirando con precisión mas no la suficiente para vencer el arco predator, pero sí con lo necesario para levantar de sus asientos a los aficionados mexicas. Esto al minuto 14. Entonces vendría una lluvia de jugadas emocionantes de uno y otro lado causando el gozo y el sufrimiento en la fanaticada granate, dominadora absoluta de las tribunas salvo un minúsculo grupo de fans predators que han venido a apoyar a su escuadra. Aquí el recuento:

A los dos minutos de ocurrida la jugada de peligro anterior Mat y nuevamente Efrén, se entienden y hieren el costado derecho del Euro de modo que Mat queda en posición de disparar y lo hace, lo que nunca, mandando su tiro ligeramente cruzado, viendo cómo pasa rozando el segundo poste ante el lance inútil de Daniel, el arquero visitante. Esto animaría al resto de los aztecas quienes reflexionaban que si Mat les daba ese ejemplo, lo menos que podían hacer era hacerle segunda.

Al minuto el Cuauhtémoc robaría el esférico por conducto de Paul catapultando a Ian al frente, éste, defensa con alma de delantero, en lugar de avanzar por la banda e intentar enviar un centro, se va internando en el entramado de jugadores, pero no es tonto y no se va a estrellar con las líneas enemigas, hace pared con Efrén, le queda el espacio para tirar y no se la piensa conectando de tres dedos, incapaz de tirar con la de palo y cuando parece que hará el ridículo por no usar su pierna hábil, resulta que su tiro se estrella en el palo izquierdo de Daniel que no lo esperaba y se queda como estatua; da y recibe, el rebote le queda a Jamal que se perfila para mandar un pase a René que ha hecho un buen movimiento al frente y queda marcado sólo por Javier, van forcejeando en la carrera hasta que el delantero gana un metro de distancia y tira rápido, cruzado y la pelota se va apenas a un lado de la portería donde Alejandro aunque se tira no llega a tapar y mira angustiado cómo apenitas se ha salvado. El portero azteca les grita a sus defensas exigiéndoles atención, sabe que no están como para descuidar la retaguardia, los delanteros rivales son temibles y no se les debe dar la más mínima posibilidad. Aún molesto da la pelota a Damián que de inmediato pasa a Efrén, participativo como nunca en su vida, un rival le cae en la marca como perro de caza pero el mexica muestra que está inspirado y hace un túnel encendiendo a su fanaticada y desparramando al frustrado marcador… Cosmo encara a otro predator evitándolo, haciendo el giro a la Zidane y en cuanto recupera la vertical hace un brusco cambio de dirección hacia la derecha para luego enviar el pase al lado contrario, este simple movimiento le rompe la cintura a casi todo el aparato defensivo del Euroarsenal que hacía su típico movimiento hacia donde la jugada se gestaba. El que recibe el milimétrico pase es Ignacio poniéndole la almohada al balón, está en el callejón izquierdo, tiene ventaja de tres pasos sobre su marcador y sabe que la cobertura llegará tarde y por supuesto que lo aprovecha, se quita de encima a su rival ya internado en el área y para cuando la cobertura llega él ya soltó el balón hacia la medialuna donde vuelve a aparecer Efrén, ve la ola predator abalanzarse contra él por lo que no tira y devuelve el balón a Ignacio cuidando no meterse en fuera de lugar, en esta ocasión el pase queda un poco largo y el delantero no se desespera por tirar, recupera y presto envía el centro a donde Álvaro le gusta: arriba a segundo palo, es tan eficiente en su juego aéreo que difícilmente pierde una oportunidad como esta, cabecea la pelota al lado contrario a su ubicación, haciendo ver ridículo a su marcador en su intento por contenerlo y dejando sin oportunidad a Daniel que regresaba a tapar y le cambian el flujo de su recorrido… el balón pega en el poste, pica, brinca divertido esperando que alguien llegue a reclamarlo, los elegidos son Ignacio y Efraín, cerca de la jugada, se abalanzan sobre la esférica con convicción, uno para meterla a la portería, el otro para reventarla… y gana éste último.

-¡HHUUUUUUUU…!

Se lamenta la afición granate que se saboreaba el gol. Ese alarido con efecto exhalador de Aztlán retumba en los alrededores del estadio, esto aunado al peligro mismo de la jugada estremece los corazones de jugadores y afición predator que reconocen el potencial de los locales, éstos no son un montón de moribundos, son una fiera herida, acaso de lo más peligroso que existe en la vida.

El partido se reanuda con el Euro sabiendo que debe enfriar a su contrincante y tocar la pelota es un buen método, escondérsela al Cuauhtémoc. Quisieron mostrarse como un cuadro implacable pero también los que están enfrente lo son, así que mejor paso a paso, primero a tener el dominio del balón y luego a meterla en la portería contraria. Pero, cómo adueñarte del balón cuando el espíritu del rival es abrumadoramente ardiente, cada mexica corre y presiona ocasionando que pronto recuperen el esférico vía su especialista: Paul quien juega con Ray por la banda izquierda, éste se conecta con Ian y consigue llegar a línea final de donde manda el centro pero no a los delanteros, si no a Efrén, fuera de la medialuna, que ahora sí sin marca la prende de bolea, sabroso, y la pelota roza el larguero ante el lance espectacular pero estéril del guardameta visitante.

-¡HHUUUUUUUU…!

Es el mejor momento del Cuauhtémoc, parece que pronto caerá el gol a su favor y el técnico visitante exige a sus pupilos concentración, pero es que ésta no basta para contener el talento y el hambre que poseen los locales. Aún así tienen su segunda oportunidad por conducto de Carlo, su creativo quien después de quitarse de encima a Paul filtra un bombón para René que ahora sí le gana en la carrera a Javier pero Alejandro jugando como tercer central, intuyendo la jugada, se adelanta a su posición y veloz le sale al achique al delantero que alcanza a bombear el balón, éste saltarín como Pepe Le Pew se dirige a la portería pero Jhonny llega a tiempo y frustra el intento de anotar del Euro, dándose todavía el lujo de no reventar si no de controlar el balón y salir jugando por la pradera derecha con Damián. Este gesto del coloso rapado empequeñece el peligro del Euroarsenal, ha sabido canalizar la agonía del momento por admiración de la gente al mostrar sangre fría para gestar una nueva jugada, viéndose hasta sobrado, arriesgándose a no llegar al balón y ser culpable por ello. No tiene qué lamentarse, ya el balón está en media cancha en los pies de Efrén que descarga a la izquierda para Ray, su hermano se bota para ayudarle con la pared y los De la Plata generan su propia chance de gol, habilidosos, irreverentes, jugando como en el barrio, con esa desfachatez de no estar jugándose nada excepto la satisfacción de burlar al rival. En última instancia Ray ha invadido terreno enemigo pero es detenido sin falta, desarmado por Darío quien puntea el balón pero mal, hacia el centro del área donde Álvaro la recibe incómodo, cubre protector con su cuerpo a la esférica, Samuel, el otro central le pone músculo pero el azteca es un roble y no lo mueve. Efrén viene de frente pidiendo el balón para disparar y la lógica es esa precisamente, todos en el estadio, mexicas y predators esperan esa jugada, pero entonces ocurre lo impensable: Álvaro, confiando en su capacidad, gira sobre su eje jalando el balón, viéndole la cara a su rival, quedando en posición de tiro, tratando de ser contenido con falta por Samuel… fusila a Daniel que apenas y comenzaba a hacer el achique… el balón pega en el poste contrario a la ubicación del tirador, se pasea por toda la línea de gol, caprichoso, jugando con los sentimientos de ambos equipos y aficiones… le da un beso al otro poste y regresa a las manos del guardameta quien a su vez le da un beso, agradecido por su viaje y destino, más suerte no podía tener.

-¡HHUUUUUUUU…!

Aztlán se cimbra ofuscado por no conseguir el anhelado gol y el mismo Álvaro es una muestra de ello, se manda todas las groserías que se sabe al grado de saltársele la vena en el cuello y contrario a lo que uno pensaría, Ignacio se le acerca y tranquilo le dice:

-Calma, ya será en la próxima. Te necesitamos con la cabeza fría.

Y se marcha a posicionarse para defender. Ya solo y calmado Álvaro piensa cuándo se cambiaron de chip.

De resaltar el fair play de las dos escuadras jugando y dejando jugar en estos minutos finales haciendo invisible al árbitro, como tiene que ser.

-¡Que me den un respiro estos muchachos, Sr. Ramón! ¡Me van a dejar sin voz! ¡Quince minutos trepidantes, de ir y venir! ¡Así se juega la Gran Final! ¿Sigue pensando lo mismo del inicio del encuentro?

-Caray, ya no estoy tan seguro. El Cuauhtémoc está partiéndose el alma, pero… ¿qué tanto puede jugar así? Si el Euroarsenal resiste esta embestida, puede sacar el resultado que quiere, tarde o temprano los aztecas se cansarán, se equivocarán o se desesperarán y ahí, mi querido Rogelio, ahí podrán matar a los locales. Hemos visto este tipo de partidos muchas veces.

-¡Aquí le quieren callar la bocota! ¡Se viene el Cuauhtémoc por conducto de Ray! ¡¿Quién le marca?! ¡Parece que el error lo acaba de cometer el Euro! ¡Es Jermain, el medio de contención el que llega a la marca! ¡Adiós le acaba de decir el joven De la Plata, Robbie llega a cubrir! ¡SE LO QUITA, PUEDE TIRAR!...

Ignacio se bota para recibir en lugar de picar al área chica, está solo y le pide ansioso el balón a su hermano. Álvaro se mueve a segundo palo tanto para ser una opción como para dejarle el camino abierto a su compañero. Efrén se ha vuelto a quedar en la medialuna, también está desmarcado y se relame los bigotes, si recibe la pelota de seguro será gol, no puede fallar. No hay más opciones para Ray pero caray, con eso basta y sobra, los predators han cometido un error infantil, tal vez el único que cometan en todo el partido así que debe aprovecharse, aquí tiene que caer el gol. Pero los nervios lo traicionan, no controla bien el esférico, claro que tiene que contar la presión que ejerce Darío al intentar cerrarle el disparo y el pase, se planta y abre los pies para intentar interceptar el balón, entonces Ray manda el balón por debajo de las piernas ya sea por una genialidad o por ser la única forma de filtrar la de gajos, directa a Álvaro quien ya animado se manda una copia de la jugada de hace rato pensando si ya funcionó una vez por qué no habría de funcionar de nuevo: cubre con el cuerpo la pelota y luego la jala girando al revés, es decir alejándose de la portería, no acercándose, pero también alejándose de su marcador que se da cuenta de que se la ha vuelto a aplicar… La afición está expectante, ya al filo de sus asientos o de pie, inconscientemente gestan ya el grito de gol en sus corazones… Álvaro ha quedado de frente a la portería, exactamente frente al poste izquierdo de Daniel que recorre para tapar pero su propio compañero le tapa y le impide avanzar más… Samuel, mortificado por bloquear el disparo estira la pierna para hacerlo, luego la otra viéndose desesperado y perdiéndose en la jugada al caer por el esfuerzo mientras que el mexica deja caminar la pelota y él sólo la acompaña dos metros, todavía con suficiente margen de tiro, sin amenazas alrededor, viendo de reojo su entorno, centrado en el balón, sabiendo cómo conectarlo: con el empeine, arriba para que el portero, casi de rodillas jamás llegue, y dispara… todo esto en apenas unos segundos…

-¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOLLLLLL DEL CUAUHTÉMOC!!! ¡¡¡ GOLAAZO DE ÁLVARO!!! ¡¡¡CAYÓ EL 1-0 QUE TANTO NECESITABAN!!! ¡¡QUÉ JUGADA DE ÁLVARO!! ¡¡AZTLÁN EXPLOTA, SE VIENE LO MEJOR RAMÓN, SE VIENE LO MEJOOR!!...

Tal cual lo dice el comentarista, Aztlán grita el gol a todo pulmón, más eufórico que feliz. La afición en su furor se siente tocada por el destino y firmemente creen que este es su año, que así como han venido ocurriendo las cosas todo está pintado para terminar coronándose y ya lo habíamos dicho antes: se vale soñar, pero ahora el sueño es tan real, tan tangible… Los aficionados le agradecen y le celebran el gol a Álvaro exultantes, como el propio azteca que se desata festejando, frunciendo el seño, abriendo las fauces en clara señal de intimidación al rival, pero no son éstos los que lo encuentran si no sus amigos Mat, Paul, Efrén, Ignacio, Ray y Damián, orgullosos, léperos, recargados, echándosele encima al goleador o invitando a la gente al clímax; en campo azteca Jhonny, Javier e Ian se abrazan, luego se sueltan para ir a felicitar al anotador aunque Javier se dirige a su área para festejar con Alejandro como auténticos leones, rugiendo, mandando ese mensaje de “¡Aquí estamos, cabr…”!. El resto de los mexicas en la banca también se alocan con la anotación: el entrenador Villanueva recibe el abrazo de Paris, vigoroso; Al pega de brincos emocionado; Antonio se vuelve hacia la tribuna ubicada detrás de la banca y los anima a alentar al equipo titular y Fred festeja apretando puños y alzando su voz al cielo para luego volver su mirada en dirección a las Mamazitecas intentando buscar a Violeta en vano, demasiada distancia, no le importa, sabe que ella también disfruta del momento y le basta.

En cuanto a la popular porra femenil, sus integrantes, creativas, crean un pequeño mosaico que dice: “Te amamos 13” en alusión al número de Álvaro, un pequeño detalle en comparación con la celebración de la Huitzilopochtli que enciende sus bengalas y recibe la “sangre” que Álvaro les ofrece, acercándose a la barra después de festejar con sus compañeros, haciendo ese gesto de cortarse las venas y extender sus brazos hacia sus animadores.

Isaack y Lizeth en su palco son una copia de los aficionados abajo en las tribunas, nada más que mientras que Lizeth sí muestra una expresión más alegre, el propietario del equipo ruge como Alejandro y Javier, hay mucha presión por ser campeones, mucha… La maestra abraza a su amado y esto lo calma un poco pero manteniendo el rostro serio, ansioso, sin ser capaz aún de disfrutar del juego.

Marco en casa vive un festejo similar permitiéndose algunas groserías incluso hacia sus propios ex compañeros que disque apoyándolos, groserías escuchadas por su mamá que sólo atina a pensar: “Ay Marquito, con razón no quisiste que Paola viniera”.

Y Steven en su casona acompañado por Tania también festeja el gol, la chica más animada que el capitán steeler. Tania había querido ir al estadio a apoyar a Paul, pero su hermano le pidió de favor que mientras Autlania se prepara a conocer que sus dos equipos han hecho las paces a escondidas, no sería prudente que se le viera, siendo hermana de quien es, apoyando en la Gran Final a un miembro del Cuauhtémoc y menos siendo parte de las Mamazitecas, la zona más fotografiada de Aztlán. “Yo mismo te llevo al festejo cuando acabe el partido, pero si me puedes hacer ese favor, no vayas al estadio”, le solicitaría Steven.

-¡¡Tremendo Rogelio, tremendo gol!! ¡Con este gol el marcador se pone 1-0 a favor de los locales y 2-3 en el marcador global, aún, con la ventaja para el Euroarsenal! ¡Es sólo un gol el que ocupan los aztecas para empatar la serie y dos para ganarla, y tiempo hay mucho todavía! ¡Vamos a ver cómo reacciona y responde el Euro, haber si se comporta con personalidad ganadora o se ven opacados por la mística del Cuauhtémoc! ¡Gran final, Rogelio, gran final! ¡Inesperado verlo así después de que allá, en el Coliseo, el Euro ganaba 3-0 y tuvo el 4-0 en los pies de René, pero el impresionante Alejandro se mandó la jugada de su vida, anotó y gracias a eso hoy están disputando la Copa, ya deberían estar muertos y están más vivos que nunca! ¡Qué bonito es el futbol!

Las acciones se reanudan con todo Aztlán latiendo al mismo ritmo, demostrando eso de que sí es posible ser uno con el universo, completamente conectados equipo y afición. Se ha rebasado la media hora de juego y los visitantes saben que tienen que apagar esta hoguera cuanto antes, pero ¿cómo? Apenas e intentan crear una jugada, un indígena les cae e impide que puedan hilar tres pases siquiera y la tribuna enloquece por la entrega de sus guerreros. Entonces, ante ese brutal empuje, ceden una vez más la pelota resignándose a volver a enfrentarlos en su propia área cual implacables enemigos dispuestos a cobrar una afrenta, y en verdad que lo hacen.

Efrén, manejando los hilos del juego como nunca antes en su carrera, aprovechando la oportunidad que se le da, lleva la pelota cocida al pie yendo de la banda derecha hacia la medialuna, descarga sobre Mat en esa pradera donde hace daño, éste último se saca de encima a su estampilla y manda un centro tendido, bonito, antojable para cabecear y el receptor no puede ser otro que Álvaro, ganando por arriba por enésima vez; Daniel se ha quedado a medio camino, ni va por la pelota ni protege su portería, el gol está cantado, sin embargo por amor propio Samuel, el responsable de marcar a Álvaro, estorba bien y le impide al delantero rematar cómodo estrellando la pelota en el poste derecho, y luego siendo despejada por Darío.

-¡HHUUUUUUUU…!

El Euroarsenal, el villano de la Liga Juvenil de Futbol, azote y verdugo de todos, ya no siente lo duro si no lo tupido, nunca imaginó estar sufriendo de esta manera el juego, se acaba de salvar del segundo gol y cuando apenas entre sí los chicos se exigen atención nuevamente los aztecas tienen el balón y van de nuevo sobre el área enemiga inclinando totalmente la cancha hacia la puerta predator. El técnico visitante grita desesperado las indicaciones pero los culpables no son los muchachos, los mexicas están inspirados, incombustibles, nadie, ningún equipo sería capaz en este momento de hacerles el menor daño. El entrenador ya ha pensado en varias posibilidades de apagar semejante ánimo pero las desecha pronto, con faltas no porque es lo que menos le conviene, cometer un foul sería darle la oportunidad al local de mandar un centro a Álvaro que está intratable; hacer tiempo es una buena opción pero son incapaces de cortar el juego indígena, la pelota prácticamente no ha salido del terreno de juego y el tiempo muerto es ridículamente mínimo; generar una jugada o tocar el esférico de aquí a allá estirando la cancha lo más que se pueda imposible con el pressing que ejercen los de casa ¡¿cómo diablos contener al Cuauhtémoc?!

Como sea, el tiempo transcurre y los locales no consiguen anotar pero tampoco se desesperan, se tienen confianza, sólo ocupan un gol y tienen los pocos minutos que restan del primer tiempo más todo el segundo, llegará, lo saben. Sin embargo el talento no es exclusivo de un equipo, si no que se obsequia indiscriminadamente y sólo una genialidad puede revertir un panorama tan desalentador como el que vive el Euro. El conjunto de la Angelópolis sale desde atrás, desde su área hasta que la bola llega a los botines de Jamal quien con su pierna educada manda un pase larguísimo a René ubicado en zona enemiga, el delantero de apodo pistolero se bota unos pasos hacia la medialuna y Javier le persigue feroz pero pierde por tercera vez con su marca, René brinca más alto, de espaldas a la portería de Alejandro, incapaz de hacer daño, en teoría, porque le baja la pelota a Carlo dejándosela a modo para tirar. Carlo, que venía de frente a la puerta contraria sin marca recibe gustoso el bombón de su compañero y la prende de zurda con la parte externa generando un efecto monstruoso de afuera hacia adentro. El deleite es tal del jugador como del balón que ambos sonríen durante todo el trayecto, conociendo el destino del último quien se incrusta en el ángulo superior derecho desde la perspectiva del anotador, de paso, dejando como estatua a Alejandro, al portero revelación de la Copa. La anotación es tan fabulosa que cualquiera esperaría que el Cuauhtémoc se desplomara moralmente…

-¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOLLLLLL DEL EUROARSENAL!!! ¡¡¡ GOLAZAZAZO DE CARLO!!! ¡¡¡ME PONGO DE PIE ANTE ESTA SOBERBIA ANOTACIÓN!!! ¡¡QUÉ COMBA HIZO ESE TIRO!! ¡¡SE EMPATA A 1 LA GRAN FINAL!! ¡AZTLÁN ENMUDECE! ¡Ramón! ¡¿Sigues pensando que el futbol es lindo?!

-¡Por supuesto! ¡¿A quién no le da gusto ver un gol de esta hechura?! Claro que a los seguidores del…

En el silencio se gesta el sonido… Carlo, el anotador del Euro festejaba sacudiendo la mano como diciendo “¡Qué gol me mandé!” y con un gesto odioso a la vista de los locales cuando de repente sucede algo inédito… Lo normal es que el equipo que recibe el gol se duela unos segundos y se disponga a mover la pelota desde el centro del campo y que la afición vulnerada le grite de cosas al goleador, o bien que calle durante la celebración y más en estas circunstancias cual balde de agua fría. Pero aquí se da un suceso por demás extraño: la Huitzilopochtli, apenas unos segundos después de haber recibido el gol demuestran qué tipo de barra es. Román, uno de los líderes del grupo toma el altavoz y ruge en el silencio del estadio:

-¡¡CUAUHTEEEEEEEEEEEEEEMOC!!

Y el resto de la barra responde perfectamente coordinados, intimidantes, robándose la atención del público y de las cámaras, incluyendo las de tv:

-¡AHHUUUUU! ¡AHHUUUUU! ¡AHHUUUUU!

Casi simultáneamente, en el terreno de juego, sin previa coordinación y desafiando las costumbres futboleras, Jhonny se acerca a la portería, saca el balón de una patada y luego con las manos hace el típico ademán de “no pasa nada”. Sus compañeros lo ven… y le creen. Cuando menos acuerdan ya están sonriendo, firmes en su postura, incólumes. Entonces se combinan ambas escenas ocasionando que la gente en el estadio pase del silencio a los aplausos, los gritos de ánimo, las sonrisas ilusionadas; la tormenta vencida, la fe renovada. Por si fuera poco, las Mamazitecas actuando ocurrentes y también demostrando su organización forman un mosaico que dice: “¿Es lo mejor que puedes hacer?” “Me aburres”, agregando otro ingrediente para no dejarse amilanar.

Es tal el efecto causado que en cosa de quince segundos Aztlán está intacto, animado como si nada hubiera pasado; los comentaristas han callado completamente asombrados de lo que presencian; e incluso, Carlo y los predators han interrumpido su festejo, intimidados por la sangre, la calidez y el valor indígenas.

-Qué gran rival ¿eh? Qué bonita fiesta.

Dice sincero y hasta orgulloso Sunny a sus compañeros, admirando el esplendor de Aztlán y sin el afán de sonar exagerado, hasta sintiendo envidia de la familia azteca. Los predators entre que festejan fingiendo ignorar a la tribuna y reflexionan sobre el comentario de Sunny, se posicionan para reanudar el encuentro.

-¿De qué está hecho este equipo? ¡Caray! ¡Cayó un gol del rival, les empataron! ¡¿No se dan cuenta?! ¡Con este marcador no son campeones!... Sr. Ramón… nunca en mi vida he conocido un equipo como este Cuauhtémoc, y no sólo los jugadores, la misma afición es admirable… Creo, Ramón, que aunque les moleste a los fans del Euro, este tipo de señales sólo presagian algo: el Cuauhtémoc va a ser campeón.

-No sé si vaya a ser campeón pero qué mística, qué sangre de esta familia azteca. Al menos si no ganan creo que no habrá dolor ni resentimiento entre ellos, se han entregado y todo esto, todo lo que han vivido ha sido una auténtica película, ellos ya…

-No Ramón, no… El Cuauhtémoc va a ser campeón. No estoy tratando de quedar bien con los locales ni generar un efecto de consuelo, de falsa ilusión, lo acabo de ver… Que me corran si quieren pero lo he visto, ya verás…

Esta reflexión de Rogelio agrada a Isaack que se siente ancho tanto por el comportamiento de equipo y afición, como por agradarle que alguien diga que su amado club va a ser campeón, “campeón”… qué bonito suena, sonríe el propietario. Dicha sonrisa se ilumina aún más cuando de pronto de entre un sector del estadio se escucha el alegre e inconfundible canto del “Cielito Lindo”, regándose pronto por la tribuna, contagiando de buen humor a todos en Aztlán excepto a los predators:

“…Ay, ay, ay, aaaaay, canta y no llores porque cantando se alegran, Cielito Lindo, los corazones…”

-¡De los momentos más estremecedores que me han tocado en una cancha de futbol, compañeros! Este espectáculo hace que se me erice la piel. Aquí a nivel de cancha es algo maravilloso, maravilloso…

Dice Lupillo con un timbre de voz emocionado, brillando sus ojos de éxtasis. No sólo es él, cada uno de los mexicas infla su pecho, orgullosos, admirando y disfrutando del momento, jurándose internamente recompensar a la afición con la gloria máxima. Y así se termina la primera parte, así se van a descansar y modificar la táctica para cumplir ese juramento, sonriendo, abrazándose entre ellos, agradeciendo al Señor haberles hecho recorrer este camino…

“…Ay, ay, ay, aaaaay, canta y no llores porque cantando se alegran, Cielito Lindo, los corazones…”

¿Qué tal el ambiente? Inmejorable, la afición también se entrega a sus guerreros ¿cómo no sentir la belleza del futbol con este apoyo, cómo renunciar al gol cuando los cánticos no cesan impulsándote a conseguirlo? En el Segundo Tiempo se multiplicarán las emociones pero antes, en una semana el mediotiempo y en dos, entonces sí el clímax de la noche ¡no se lo pierdan! ¡Muchas gracias! Que estén muy bien.

 

¡Hola mis hermanos fanficslandenses! Aquí llega un capítulo muy corto pero necesario, dando chance a que se prepare la botana.
@Felina, tienes agenda ocupada y te das el espacio para leerme, ojalá que haya valido la pena y bueno, llegué al partido final, al futbol que a lo mejor no es tan de tu agrado pero tiene que cerrar la historia de esta manera, lo siento. Muchas gracias por todo, eres un amor.
@Borealis Spiral, muchísimas gracias por tus deseos y comentarios. Llegamos al final chica, sí, por fin, ya te dejaré tranquila (sólo como escritor, como lector continuaré tras tus pasos). Este último partido debía ser vibrante así que hice mi esfuerzo y ojalá cumpla con las expectativas. Este capítulo es cortito, el grande se viene luego. Que Dios te sonría, preciosa.
@Marina, tanto tiempo después y aún estás aquí, gracias por eso. En este episodio no tienes qué comentar, es minúsculo o así me lo parece, de hecho es aquí en este rato cuando tenemos que reabastecer nuestros estómagos para degustar la segunda parte, lo sabes, sólo pide y mi gente te atenderá a placer. Que tengas una exquisita cena. Un abrazo.
A todos los demás muchas gracias, espero poder publicar el Segundo Tiempo el viernes ¡Felices Fiestas a todos! Un abrazo desde mi hermoso pueblo.



30

EL OTRO SHOW


Medio Tiempo.

En el camino a los vestidores aztecas y predators inevitablemente se juntan en el moderno túnel de acceso. Nadie ve con amargura, coraje u odio al rival. Las miradas se encuentran y el orgullo y la admiración se percibe en ellas, incluso algunas sonrisas se intercambian de uno a otro equipo. Nunca alguien se avergonzará o sufrirá por ser derrotado por alguien así, al contrario, es un privilegio ser vencido por semejante rival.

Llegan entonces a un punto donde cada escuadra toma su propio rumbo mientras aún se escucha desde fuera el Cielito Lindo.

Ya dentro en el vestidor los chicos se disponen más como si apenas fuera a comenzar un partido que como si ya llevaran medio encuentro disputado, frescos, tranquilos, ilusionados con la victoria. El entrenador Villanueva habla inflamado de orgullo, sonriendo y los muchachos corresponden atentos, interviniendo de tanto en tanto con una risa o un disparo de adrenalina. Luego viene el tema de los mexicas de la banca: Paris ingresará los últimos diez minutos de juego así que Efrén deberá resistir, “no hay problema” dice Cosmo; Antonio ingresará pronto, seguramente por Ian o Damián; y Fred ingresará por alguno de los delanteros tan pronto den señales de agotamiento, así está pintado el esquema pero todo dependerá de cómo se vayan dando las cosas. Entonces Paul pide la palabra y el técnico la concede.

-Profe, chicos, tienen mi palabra de que no me cansaré, correré otros dos partidos de ser necesario, no tendrán que preocuparse por mi desempeño, cumpliré. –No miente el joven Garza, es un derroche de potencia física y resistencia, además su disciplina y la inteligencia para saber dónde ubicarse lo convierten en alguien inamovible- Pero, no puedo abarcar tanto, necesito toda la ayuda posible. Señor, quiero proponerle que mueva a Mat para que me acompañe en la media, con él ahí seremos los dueños del balón y sólo tendremos que preocuparnos por anotar. No perderemos fuerza, si Antonio ingresa él puede ocupar el lugar de Mati.

El entrenador Villanueva agradece la propuesta de Paul y en verdad la considera. Mat es su otro inamovible, un chico que pareciera no cansarse, va y viene por toda la banda derecha una y otra vez defendiendo y atacando, si concentra esa fuerza en la media junto a su pistón oficial es posible que le arrebaten al Euro la posibilidad de hacer daño, pero también del otro lado están dos súper dotados, Jermain y Jamal, mismos que hasta ahora no han conseguido hacer mucho, pero… Se la jugará, no hay tiempo para otra cosa, primero a controlar la media, eso es fundamental. Da la orden a Mat y éste accede disciplinado. Continúa dando indicaciones:

-Javier, tu marca te ha ganado tres veces y ya nos costó el gol, no quiero un error más. Ya te sabes sus trucos, nulifícalo. Y vete preparando porque llegará un momento del partido en el que te deje mano a mano con él, igual para usted, joven Guerra. Ignacio, tendrás que bajar un poco y ocupar el lugar de Mat aunque si quieres asociarte con tu hermano podrás hacerlo, Álvaro se quedará solo en punta ¡Vamos muchachos! ¡Hay que regalarles el trofeo a toda esta gente que también está dando su máximo esfuerzo, por ellos, por ustedes, por el joven Anderson!...

-¡Por usted, entrenador!

-¡Huua!

En las tribunas el ambiente es fabuloso, hace una hora había mucha tensión pero estos minutos de buen futbol han maravillado a los aficionados, claro, aún perdura la posibilidad de perder pero ya el camino andado los ha soltado y es más fácil llegar al final ahora. Las risas abundan, los estómagos se vuelven a llenar, las mamazitecas son fotografiadas hasta el límite de la memoria, la Huitzilopochtli se relaja un poco mientras prepara el material de guerra para la segunda parte, los amigos platican emocionados, una chava mira y escucha enamorada a su pareja hablar sobre el anhelado campeonato, un hijo de cinco años le pregunta algo a su papá mientras apunta hacia la cancha… El Mexica admira a sus protegidos y siente cómo el águila que lo arropa desea emprender el vuelo una vez más, está harta de ver hacerlo al Fénix de “enfrente” mientras ella sólo se cubre de polvo a cada temporada que pasa, incapaz de liberarse y disfrutar del gozo del vuelo, hoy tiene que ser, están tan cerca. El Mexica por su parte desea engalanarse con una nueva estrella y gritarle a todo México que esta ciudad, Autlania, es su dominio y vuelve para reclamar lo que le pertenece.

Aztlán está vivo, chulo, así lo puede comprobar Isaack desde su palco, ya más sereno, apoyado por Lizeth. Se encuentran de pie, abrazados, lo que hace que el propietario del club muestre sus poderosos brazos, lo que casi nunca pues siempre viste de traje o con saco. Se embriaga del aroma de la cabellera de la maestra, cautivado, enamorado. De pronto siente cómo la maestra se escapa del abrazo y la ve sonriendo con los ojos muy abiertos, brillando de alegría. Apenas le va a preguntar sobre esa expresión cuando ella comienza a moverse al ritmo de la música puesta en el sonido del estadio. La canción es alegre y por supuesto que Lizeth no puede resistirse, invitando a su novio a bailar siendo correspondida de inmediato para su sorpresa, de muy buen grado, mostrando su habilidad para el baile. Algunas cámaras de aficionados que se encuentran cerca de ahí captan el momento, contentos a su vez de que su mesías y su compañera disfruten del ambiente.

En casa, Marco inquieto y hacendoso se ha puesto a lavar los trastes a modo de terapia provocando la sorpresa de su madre, quien en agradecimiento le prepara otro platillo para acompañar la segunda mitad, Marco corresponde con un beso y un gracias y cumplida la tarea y abastecido para la continuación de la batalla, se acomoda en el sofá y se dispone a degustar alimento y partido.

Steven y Tania también esperan en casa la reanudación del juego. El capitán steeler está disfrutando de la Final como buen conocedor de futbol, en cuanto a Tania se concentra más en lo que pasa con Paul, si sale en la tv, si recibe una falta, si hace un buen pase o roba un balón, todo le festeja o de todo lo protege poniendo a prueba la tolerancia de su hermano.

Georgette está en casa, no aceptó el boleto que el mismo Isaack le ofreció evitando pasar por la misma decepción del clásico, prefiriendo ver el partido desde la comodidad y seguridad de su hogar. Tiene sentimientos encontrados pues mientras que su hermano se está mandando un partidazo destruyendo cualquier intento del Euro, su casi novio está calentando la banca pero sabe que entrará y es lo que le preocupa, que ingrese y se resienta de su lesión, no sabe qué es mejor: si quedarse en la banca completamente a salvo pero no disfrutar de la misma manera del festejo si es que se da o; entrar a jugar, convertirse en el héroe y fracturarse el pie… No, no hay margen para ilusionarse, ella sí que está sufriendo el juego, hay tanto qué perder.

Anamaya y su familia adoptiva también ven el partido, ha tenido que “resistir” la carrilla de su hermana diciéndole algo cada que Mat toca la pelota o hace una buena jugada, chiveándola para diversión de su sobrinito, su cuñado en cambio, reconoce que está viendo un partidazo digno de una Gran Final y como buen autlense desea que gane el Cuauhtémoc.

De regreso al estadio Cameron y Vanessa fingen que no saben que están siendo fotografiadas como miembros distinguidas de las mamazitecas y adoptan poses por demás infartantes, enloqueciendo a la afición masculina de alrededor las muy desgraciadas. Por su parte, Violeta, aunque también roba cámara, toma asiento y se refresca mientras espera el regreso de los equipos al empastado.

Justamente éstos ya vuelven a sus posiciones atravesando el túnel, pero cuando van a la mitad el camino es bloqueado por Sunny, solitario, abandonando el vestidor antes que sus compañeros, planeando unas palabras para los anfitriones. La sorpresa es grande pero el silencio llega rápido cuando Javier como capitán lo solicita en espera de lo que su rival tiene qué decir. Ambos conjuntos están revueltos pero esto no los incomoda, expectantes ante el discurso de Sunny:

-Tenemos fama de malos, pero somos buenos competidores. Chicos, mis compañeros y yo hemos acordado dar pelea limpia, no habrá golpes innecesarios ni provocaciones o burlas. Ganaremos o perderemos bien, pueden estar tranquilos en ese sentido… -Hace ademán como de escuchar el ambiente de afuera- Nos gusta la fiesta que han preparado, la estamos disfrutando también y sinceramente… -su mirada es de orgullosa fraternidad- que gane el mejor.

-¡Que gane el mejor!

Repiten los predators y luego los aztecas aunque desorganizados, también dicen esta frase. Así, animados, sabiendo que enfrente tienen a un gran rival no sólo en lo futbolístico si no también en lo moral continúan su andar hacia su destino, perdiéndose en el campo ante el bombardeo de los flashazos desde la perspectiva del entrenador Villanueva aguardando en la encrucijada de los vestidores, reflexionando y valorando la calidad humana de sus pupilos y sus contrincantes, enterneciéndose ante su comportamiento, sabiéndose afortunado de haber conocido a este grupo de jóvenes, esperanzado en el potencial de esta nueva generación de futbolistas, soñador, sonriente, pleno…

Apenas han aparecido los chicos en la cancha y ya la Huitzilopochtli está cantando animada, entonada e ilusionada: “Vaamoooos, vamos azteeecas, que esta noocheee, tenemos que ganaaaaaaar”…

Los mexicas son alimentados por esta energía y posicionados comienzan a gritarse indicaciones, motivándose de diversas formas incluso léperamente vía Jhonny.

El corazón en la mano, el alma en un hilo, se cierran los ojos y se hace una última plegaria, una vez que reinicie el partido no habrá tiempo para nada mas que para dejarse llevar por la corriente atravesando vertiginosos rápidos, cayendo de poderosas cataratas, aguardando el ataque de los depredadores o temiendo a la desesperante niebla, ya sea para quedar finalmente a la deriva o llegar a un remanso de paz en medio de formidables jardines y suaves pastos, idílico lugar al que sólo entran los elegidos.

-¡¡POR EL TÍTULOOOOOO!!

Rugen al unísono los aztecas mostrando toda la determinación de la juventud, esa que lleva a retar toda regla para demostrar ese “Yo quiero hacer, yo puedo hacer ¡Este soy Yo!”

La juventud es un tesoro que no debe desaprovecharse, tanto nuestro cuerpo como nuestra mente están en óptimas condiciones, así que a hacer ejercicio y a leer, a bailar y escribir, a cantar y a soñar, de eso se trata la vida y estos chicos lo están demostrando. Para el próximo capítulo el Segundo Tiempo, el héroe vendrá desde la banca ¡No se lo pierdan! Gracias, que estén muy bien.

 

¡Hola queridos lectores, hermanos fanficslandenses! ¡LLega el Segundo Tiempo!
@Marina, @Felina, @Borealis Spiral, @Sara Vongola, muchas gracias a todas por su compañía y apoyo. Se llega ya al final del partido y por más que intenté reducirlo me quedó aún así extenso, espero que no las espante. Después de esto vendrá un capítulo más y daré por terminada una historia que como dije en la intro del primer episodio, tenía celosamente guardada y que ustedes me animaron a publicarla, las adoro, Dios les sonría hoy y siempre, un abrazo.
A todos los demás muchísimas gracias por leer, mi admiración a cada uno de ustedes por resistir tantas juveniles aventuras y desventuras, ya ven, a final de cuentas era verdad eso de que no todo en la historia era futbol aunque debe terminar con ello por supuesto. Un abrazo.



31

EL MILAGRO DE SEPTIEMBRE


“Como ignoraban que era imposible, lo hicieron.”


2do Tiempo.

El partido se reanuda con ambos equipos estudiándose, viendo los ajustes que ha hecho su rival, en este caso, los predators se dan cuenta de que Mat se ha unido a Paul en la media, situación que en teoría debería volver más poderoso aún el mediocampo mexica, de por sí asfixiante. De inmediato Jermain y Jamal oponen resistencia apoyados por el resto de sus compañeros que se han dado cuenta de que si le prestan el balón al Cuauhtémoc sólo un milagro los puede salvar de una tragedia. Los aztecas continúan con su presión del Primer Tiempo y las fuerzas equilibradas, el talento no aparece durante unos minutos tensando gradual e inconscientemente a la afición.

-¡Haber Señor Ramón! ¡Dígale usted a la gente qué necesita el Cuauhtémoc para ser campeón! Aprovechemos este bache en el que ha caído la finalísima.

-¿Bache? Como usted no juega piensa que esto está estancado ¿eh? Por favor, allá abajo se está trabajando ¿piensa usted que los chicos están sentados? Mírelos, no use esa palabra, los ofende.

-Ramoncito ¿por qué me regaña? Disculpe usted, le juro que saliendo de aquí lo invito a cenar, sí, también a Lupillo pero ya no me regañe. Mejor conteste a la pregunta que se le hizo ¿sí?

-A mí no me ha ofendido, a los chicos, está despreciando su esfuerzo, invítelos a ellos.

-¡Lupillo! Misma pregunta ¿quisieras contestarla en lugar de este distinguido señor? Ya me duelen los oídos.

-¡Ya mismo respondo, Rogelio! Pero nunca más vuelva a usar la palabrita esa. Bueno, el marcador aquí está empatado a 1 pero el marcador global está 2-4 a favor de los visitantes, así que el Cuauhtémoc necesita ganar por dos goles de diferencia para empatar la serie, cualquier marcador es válido, aquí no hay la regla del gol de visitante, 3-1, 4-2, 5-3, como sea pero que la diferencia sea de dos goles, esto sólo para alargar la serie pero realmente los aztecas necesitan tres goles para ser campeones. Con el marcador global empatado nos iríamos a los emocionantes penales.

-No hay tiempos extra ¿verdad? Para aclararle a la gente.

-Es correcto, no hay tiempos extra. Si el marcador global está empatado al final del tiempo reglamentario habrá directamente penales, lo que sería un buen corolario ¿te imaginas, Rogelio?

-Sería un deleite ver eso, claro, no para la afición granate, para ellos sería sufrimiento extra.

-También para la afición del Euroarsenal, no te olvides de ellos.

El nudo futbolero no tarda mucho en desatarse. El talento de Efrén vuelve a brillar en la oscuridad de la noche, sobre todo, respaldado por Mat y Paul, sin tener que agotarse, concentrado en la pura tarea de generar peligro y hacer daño. El lugar dejado por Mat es ocupado por Ian desguareciendo la defensa, diciéndoles a Javier y compañía descaradamente “a’i se hacen bolas, yo me voy al frente y no pienso estar bajando a ayudarles a cada rato”, a lo que respondería Damián, suavecito como es: “Vete a la ching… yo me hago cargo aquí, pero tienes que ayudarles allá si no te parto la madre acabándose el partido ¡mete un gol!”

Este movimiento ha sido observado por el entrenador Villanueva que accede teniendo fe en sus muchachos, no muy convencido de que abajo queden dos predators contra tres de los suyos, pero tranquilizado un poco por la impresionante presión que ejercen sus mediocampistas en todo el terreno de juego, tanto en ataque como en defensa, además de agregar que cuando se requiere, Alejandro se comporta como un defensa más, nada tímido ni torpe el muchacho. Cuánto le aportan estos chicos, ofrecen más de lo que tienen, sacan todo su potencial, no se guardan nada, entonces se vuelve hacia Paris quien hace calentamiento, él sí tibio, carente de liderazgo y además lesionado ¡maldita sea! Se lamenta el técnico, para sus adentros se dice: “Ni modo Paris, o demuestras hoy tu valor o nos lleva el diablo y el olvido. Vamos muchacho, por una vez en tu vida.”

Como se decía, Efrén es el encargado de preocupar a la escuadra visitante y se muestra talentoso y hasta arriesgado, no se intimida ni se entorpece cuando los rivales le caen encontrando siempre un receptor o un espacio dónde poner la bola y en una de esas ocasiones le filtra un balón a la llegada de Ian que como bólido rebasa por fuera la línea defensiva que salía a hacer la trampa del fuera de lugar, entonces Ian llega en diagonal de frente a Daniel pero es presionado a la distancia por Darío que se recupera y regresa, de todos modos no va a llegar, la velocidad del mexica es mucha y el tiempo y el espacio más que suficientes para que este alegre defensa dispare…

-¡¡IAN FUSILAAA… DANIEEEL, GIGANTESCO A MANO CAMBIADA Y CON LAS YEMAS DE LOS DEDOS LE ARREBATA LA GLORIA AL CUAUHTÉMOC!! ¡MANDA LA PELOTA FUERA DE LA CANCHA Y TENEMOS TIRO DE ESQUINA! ¡Ramoncito, tenemos la primera de peligro de esta segunda parte!

-¡Sí, Rogelio! Y mira, sus compañeros no se la perdonan, este era el 2-1, era una jugada muy clara, no era para fallar.

Tal como dice Ramón, los aztecas, principalmente Álvaro e Ignacio le reclaman a Ian que estaban solos y no se las pasara. Muchos en el estadio también se lamentan y le reclaman a Ian que desaprovechara esta oportunidad. Casi todos coinciden en que fue una muy buena intervención del portero predator pero que fue más error del mexica que ahora lejos de vanagloriarse, se duele por los reclamos de sus amigos.

-¡Ya basta! ¡¿Qué acaso ustedes nunca fallan?! ¡Será la próxima! No trasladen su coraje a la tribuna, se podrían arrepentir. Denle la mano a Ian.

Habla con autoridad Javier que ha subido para ayudar en el tiro de esquina, al que ya está por cobrar Ray. La amistad se impone y los aludidos dándose cuenta de su error, se acercan al ofendido y le dan no la mano si no un abrazo, luego se posicionan para atacar limpiado el corazón y despejada la mente, escena vista y aprobada por el entrenador Villanueva que no se cansa de admirar la grandeza moral de sus pupilos, por un momento temió que Ian respondiera el ataque de los delanteros y así comenzara el principio del fin, resquebrajándose la estructura sobre la que el equipo está construido: la amistad, por fortuna un pequeño pero firme empujón ha sido suficiente para cerrar la grieta. “Muy bien, Javier”, le agradece internamente el técnico a su capitán.

El tiro de esquina ocurre sin ningún beneficio para los locales, pero no se apuran pues el control de las acciones es suyo, no pasa ni medio minuto cuando Paul recupera la pelota y descarga sobre Efrén. Fue un acierto total ubicar a Mat en la media, él junto al chico Garza se han adueñado por completo del mediocampo ganándole la partida al otro dúo dinámico Jermain y Jamal entendiendo la necesidad de intentar jugar al contragolpe, cada vez más pintado para ello.

Efrén clava una auténtica daga al enviar un pase quirúrgico al vacío, en plena área chica, entre la línea que delimita ésta y la portería. El portero había salido al achique ante un inminente disparo de Cosmo pero éste sorprende a todos y catapulta a Ian al frente que llega como bala, eso sí, esta vez no hay posibilidad de tirar pues el ángulo de disparo es mínimo y la jugada posible es un pase retrasado en diagonal. Daniel regresa esos tres pasos que había dado para taparle a Ian y cubrir el primer palo, es tal la velocidad del mexica que Dani se obliga a lanzarse para bloquear el pase o el tiro…

Por un momento Ian considera recortar a Daniel, quedar en posición de tiro y meterla. Sacarse la espina de hace rato sería algo muy grato, pero un ligero resbalón en el último instante le obligan a desechar la opción y asegurar el pase, un pase que no es precisamente un bombón, el resbalón hace que Ian mande más una pedrada que un centro al área… La jugada debería morir ahí, a lo mucho un rebote de un predator que metiera el balón en propia meta sería lo que pudiera salvar una buena chance, pero es casi improbable… Pero el Cuauhtémoc tiene a Álvaro y su destacada forma de rematar de cabeza. El delantero intuyendo la jugada se ha adelantado a su marca y después de pestañear ya tiene el balón encima cual bala de cañón ¿qué hacer? Se contorsiona en el aire moviendo la cabeza de manera que la fuerza del impacto sea amortiguada y cambiar la trayectoria de la pelota hacia el otro lado… El remate es bravo, no existe la comodidad en ningún centímetro de la jugada… Las fotografías del lance de Álvaro serán postales que se venderán en el futuro como auténticos símbolos de talento, cual salto eterno de Michael Jordan antes de una clavada…

-¡¡METAAAAAL!! ¡¡LA PELOTA PEGA EN EL PALO Y EL EURO SE SALVA DEL GOL!! ¡QUÉ REMATE, RAMÓN, QUÉ REMATE! ¡Si yo me lanzo así quedo en el suelo fracturado! ¡¿Usted podría hacerlo?! ¡Emocionante jugada!

-¡Usted ni siquiera se lanzaría así! No le veo el atletismo por ninguna parte, yo bueno, mejor comento, eso sí lo puedo hacer, de lo otro mejor ni hablamos…

Álvaro ha quedado tendido en el piso sabiendo que hizo todo lo humanamente posible por anotar, respirando agitadamente, recibiendo el reconocimiento de sus compañeros.

Isaack también muestra su orgullo por los chicos, lo están dejando todo en la cancha y de pronto no le importa ser campeón, le basta esta probada de pundonor y se promete recompensar con creces a los jugadores ganen, empaten o pierdan por goleada.

Ocurre entonces una jugada clave, no sabemos si la jugada clave o una de varias que acontecen durante el encuentro, ustedes decidirán. El Euro consigue por fin llegar a la portería del Cuauhtémoc vía Alexander que haciendo gala de habilidad burla a Ian y Paul por la banda izquierda, la cobertura llega tarde a cargo de Javier por lo que es Ignacio el que se sacrifica y debe contener al atacante pero lo hace deficiente, llega encarrerado en trayectoria perpendicular a la de Alexander sabiendo que el choque es inevitable… no diseñó bien su plan para desarmar a su rival, quizá no hubo tiempo para ello, ni modo, seguramente cometerá la falta y recibirá la tarjeta amarilla pero entonces se da cuenta dónde está, instintivamente se percata de que ya está dentro del área, si choca al predator se marcará penal ¡no lo puede permitir, sería el acabose! También por instinto hace uso de sus habilidades combativas, específicamente de su plasticidad. Justo antes del contacto da un pequeño salto y gira sobre su eje flexionando sus brazos, luciendo como un competidor de patinaje artístico haciendo un salto... Alexander espera el golpe e inconscientemente se protege tensando sus músculos, el balón ya delante de él corriendo alegre hacia el encuentro con Javier… Ignacio ha conseguido librar la trayectoria de su contrincante por milímetros pero la fuerza centrífuga ejercida y la rápida y defectuosa postura adoptada hacen que uno de los brazos se despegue del cuerpo y golpee al predator, éste, ignoramos si por aprovechar la oportunidad o por verdadera agresión cae al césped y se marca la falta enmudeciendo al estadio…

-¡PENAAAAL! ¡El árbitro acaba de marcar la pena máxima y aquí, mi estimado Ramón, se puede acabar todo para el Cuauhtémoc!

Tan pronto Ignacio cayó después del giro se vuelve para ver con horror cómo la autoridad ha marcado el penalti y se lleva las manos al rostro, se quiere morir, sus ojos ya lagrimean automáticamente y se queda ahí de rodillas en una escena que los fotógrafos no desperdician para captar con su lente.

Las reacciones de los aztecas son variadas, hay quienes se agachan derrotistas; otros se tocan la nuca con ambas manos, incrédulos; otros ríen con amargura; otros de inmediato le dan ánimos a Alejandro para tapar el tiro pero nadie reclama la marcación, tampoco nadie se acerca a Ignacio, tal vez por rencor aunque contenido, disimulado, hasta que por fin Ray se sienta a su lado como si fueran espectadores y no los protagonistas.

-Ya carnal, anímate, la va a tapar Alejandro. Levántate, anda.

Las palabras no surten el efecto deseado. Ignacio muestra su desencajado rostro y dice con un timbre de voz que Ray le desconocía:

-Todo se acabó, Ray, todo se acabó…

Y repite y repite y repite la frase… llorando como hacía años no ocurría, ni siquiera cuando abandonó al equipo y vivió una auténtica película de drama. A Ray no le queda más que respetar su lazo fraternal y abrazar a su hermano que no cesa de sentirse culpable por todo.

Esta escena es captada por miles de cámaras en Aztlán causando tantas reacciones, similares a las vividas por los mexicas… Isaack está tan convencido de que no le importa el campeonato si no la salud de sus chicos que pareciera no haberse percatado de la marca del penal, para nada afectado, ya diseñando cómo premiarlos tan pronto acabe el partido. Está a punto de decirle a Lizeth que se retiren a organizar todo pero la fe sobre Alejandro se impone y calla mientras espera el cobro de la falta, abrazado por la maestra.

El entrenador Villanueva de inmediato llama a sus atacantes de la banca, a los tres indicándoles que ingresarán en cuanto el árbitro lo autorice, necesitan goles y de nada sirve tenerlos en la banca cuando queda menos de media hora para que finalice el partido, “total, si nos contragolpean ni modo, qué más da perder por tres que por cinco goles o más”.

Del lado de los predators, Alexander es “asistido” por sus compañeros, festejando la gran oportunidad para incrementar el marcador y por qué no, liquidar esto de una buena vez. Pero Sunny no está convencido. Mira inquisitivo a su compañero y pregunta con firmeza:

-¿De veras te golpeó? Mírame y dime la verdad. No quiero ganar con trampa, es indigno.

-¡Claro que sí!... Bueno, ay no sé… me pegó, sí, no sé por qué me tiré, no quise fingir, de veras me golpeó, pero… no sé, Sunny, no estoy seguro…

Discuten los predators, varios se han reunido en torno a los involucrados y aportan su opinión, la mayoría coincide: si no fue falta no merecen ganar así, entre tanto el árbitro amonesta a un Ignacio desecho que ni siquiera mira al juez.

-Hay que decirle que lo desmarque.

Dicen algunos visitantes en referencia al penal.

-No se puede.

Concluyen los jugadores del Euroarsenal y toman drástica, irresponsable y rápidamente una decisión. Se posicionan reglamentariamente para la falta a cargo de René y los aztecas también se acomodan intercalándose entre los visitantes.

-Dijeron que jugarían limpio. Que ganarían o perderían como caballeros.

Habla ardido Damián y como respuesta los predators se plantan no como para esperar el rebote si no como espectadores privilegiados, el mismo René se vuelve hacia los competidores y ríe tranquilo, no es una risa burlesca si no una mueca que intenta tranquilizar, apenas se ha alejado un paso del balón y nada en su postura señala que quiera tirar. A esta altura los mexicas no tienen idea de lo que traman sus rivales y observan expectantes, es tal el efecto causado que tampoco se disponen para el rebote, están como hipnotizados, sólo Alejandro se prepara para tapar el tiro, incapaz de relajarse como el resto de sus compañeros.

-¡Silba el árbitro! ¡Viene Renéee!…

El delantero jamás tiene la intención de anotar, da el paso que lo separaba del balón y patea éste a un lado de la portería dejando boquiabiertos a todos en el estadio y a los que siguen el juego por tv. René se voltea hacia compañeros y rivales y habla potente:

-¡La gloria no se alcanza de esta manera! ¡Vamos a ganar o a perder dignamente! ¡Conózcannos, somos los predators del Euroarsenal! ¡Hay orgullo, hay honor, que gane el mejor!

Pocas veces en la vida se ve o se verán estas muestras ejemplares de fair play y por la misma falta de costumbre nadie sabe qué hacer: jugadores y afición del Cuauhtémoc no hallan qué hacer, los comentaristas no saben qué decir, los predators de la banca y sus pocos aficionados en el estadio no saben si festejar o lamentarse de este acto, este gol equivalía casi al título y lo desprecian como si pudieran ser campeones a cada rato. En un sector de Aztlán entonces se comienza a aplaudir en reconocimiento al gesto de los visitantes y el aplauso se riega pronto por todas las gradas mientras los predators se posicionan para reanudar el encuentro ante la incredulidad de los aztecas, éstos aún no salen de su asombro.

-Sin palabras, Ramón, sin palabras… Este torneo de Copa nunca lo olvidaré, de hecho creo que escribiré un libro al respecto. Esto debe conocerse en todo el mundo, la FIFA debe venir y hacer un homenaje a estos chicos, cuánto deportivismo, cuánta entrega, cuánto talento, esto es una historia de vida.

-Comparto la admiración, Rogelio. Sé que si el Euroarsenal pierde el título, en el futuro saldrán en internet todo tipo de videos ridiculizando este acto, mofándose hasta el hartazgo, puede que no se comprenda su comportamiento pero yo me uno al aplauso de esta gente que está de pie y se rinde ante sus rivales ¿qué más quieres que ocurra en esta Final? No le falta nada, el futbol es tan hermoso.

El árbitro entiende que este momento no debe ser interrumpido y aguarda paciente y orgulloso en el círculo del campo, permitiendo que las muestras de afecto se tatúen en las mentes de los niños para que aprendan cómo se juega al futbol con y sin balón, dentro y fuera de la cancha. Además el entrenador local le ha informado que hará un cambio y espera a que se aliste el jugador que ingresará a esta mágica noche. El entrenador Villanueva ha meditado acerca de este derroche de juego limpio y ajusta su táctica, no hará los tres cambios de un jalón si no que administrará los esfuerzos, se ha decidido por sacar a Jhonny y meter a Antonio. La apuesta es arriesgada pero confía en sus muchachos. Mientras el coloso rapado camina hacia su técnico, cabizbajo, negándose a abandonar la lucha pero mostrando disciplina ante la decisión de su líder, éste da indicaciones a Antonio luciendo como un manager arengando al boxeador antes de iniciar el round. Jhonny y Antonio se dan un fugaz abrazo y el que sale le desea suerte al que entra. Jhonny es recibido por el entrenador Villanueva que lo atrapa con sus brazos y le explica su decisión y le reconoce el buen desempeño, dándole la importancia debida, no deseando que se vaya a la banca a sentar y él quedarse allí como si no fueran miembros de una familia. Al liberarlo del abrazo lo acompaña a la banca mientras bromea y ríe como si estuvieran en un bar. Por su parte, Antonio informa de los ajustes tácticos: él ocupará el lugar de Damián quien a su vez se adaptará como central acompañando a Javier, Ian podrá descansar un poco pues Tony se ocupará ahora de hacer daño por la banda. Los ajustes realizados, el partido puede continuar.

Tan pronto despeja Alejandro reanudando las acciones, la postura de los predators es otra, ahora vuelven a convertirse en ese temible adversario que son y por el contrario los aztecas están shokeados, tardan algunos minutos en reaccionar y esto les cuesta caro: los predators salen de su área vía Robbie internándose en su pradera, Ian le impide el paso y el defensa pasa la pelota a Sunny próximo al ecuador de la cancha, botándose para recibir, marcado por ni más ni menos que Damián, Sunny lo gira habilidoso y deja a su marcador en la carrera… La defensa del Cuauhtémoc está desecha, le ofrece una llanura casi desierta al goleador visitante, Javier regresa a toda velocidad pero en el otro sector René corre hacia la portería enemiga para ser una opción de pase para su compañero. El peligro se palpa en el aire… Javier retarda la jugada lo más que puede pero ante un rival tan veloz y talentoso como Sunny, esta treta no le sirve de nada, sabe que va a perder pero debe pelear hasta el último momento. Sunny planea recortar a Javier hacia dentro para quedar en posición de disparo, la estrategia es la ideal y pareciera no tener ninguna dificultad pero un resbalón lo obliga a cambiar al plan B, el pie que apoya se le va de largo y corre el riesgo de quedarse tirado allí mientras el balón continúa su andar desaprovechando una oportunidad de oro… Como puede mantiene la vertical, lo suficiente para mandar el pase a René ubicado en el borde del área, cuidando no caer en fuera de lugar… La caída no le permite ver a Sunny que Alejandro abandona la portería para interceptar el pase, intuyendo la jugada, Alejandro a su vez sabe que jamás vendrá un disparo desde la descompuesta postura de Sunny, así que se la juega y sale veloz por el balón… René advierte la treta de Alejandro y sabe que debe llegar antes a la de gajos, entonces en vez de esperar corre al encuentro del balón, es un auténtico volado…

-¡¡LA GANÓ RENÉ, ALEJANDRO SE PASA DE LARGO, JAVIER LE TAPA EL TIRO, CAEN LOS DOS, SUNNY SE REHACE Y TIRAAAA…!! ¡¡MAAAT!! ¡¡MAT APARECE QUIÉN SABE DE DÓNDE Y SACA LA PELOTA EN LA RAYA, HA SALVADO A SU EQUIPO DE LA DERROTA, ERA EL GOL QUE MATABA Y ESTE CHICO CUAL RAYO LLEGA Y MATA LA ILUSIÓN PREDATOR!! ¡Por favor Ramón, qué salvada! ¡Mi corazón no sobrevivirá a tantas emociones!...

René le había ganado la carrera y la pelota a Alejandro pero para su desgracia eso implicaba regresar hacia la posición de Javier quien viendo que se le presenta la oportunidad de redimirse taponea limpiamente el tiro de René, cayendo los dos y quedando fuera de acción, pero la diosa fortuna quiere que el balón le quede a un Sunny apenas levantándose y viendo la portería sola, tira. Pero comete un error pues si se hubiera tomado el tiempo necesario para levantar la cara, habría visto que Mat aparecía en escena dirigiéndose presuroso a la portería justamente para evitar el gol; entonces hubiera pateado con más fuerza haciendo inútil cualquier intento de salvada, pero…

-¡¡MAAAAAAAAAT!!

-¡¡AHUUU!! ¡¡AHUUU!! ¡¡AHUUU!!

La afición en el estadio valora en su justa medida ese salvamento y festeja prácticamente como si hubiera caído un gol a favor, caray, pasan en dos segundos de la agonía al éxtasis, este equipo pareciera pretender matarlos.

El despeje le queda a Ian y éste juega al centro del campo con Efrén que a su vez regresa el balón a Paul y éste sabedor de cómo enfriar las cosas, lo hace dando tiempo a sus amigos de reponerse del susto. Mat se a recuperado y posicionado pero se toma su tiempo para ir a reclamarle a Damián por no haber seguido a Sunny, era su chamba, le hace saber furioso, como nunca antes en su vida, provocando la ternura de varios de sus compañeros y es que ver a un pan de Dios explotando contra alguien es algo… peculiar.

El partido continúa con un par de llegadas más, una por cada bando. El Cuauhtémoc responde tres minutos después por conducto de Tony que fresco desborda por la banda quitándose a Efraín y a Jamal, soberbio, haciendo que la gente se levante de sus asientos de nuevo, ya internado en el área cambia de juego mandando el balón al vértice contrario donde Ray, en soledad cinco metros a la redonda, se acomoda, se relame los bigotes y la prende de bolea… De su pierna sale un rayo pero los reflejos de Daniel son de otro mundo y estira la mano izquierda cambiando la trayectoria de la pelota y mandando a corner.

-¡HHUUUUUUUU…!

En el cobro de tiro de esquina no pasa nada en la portería visitante, pero sí en el contragolpe que encabeza Alexander sacándose de encima a Mat y volando hacia la gloria, lleva a Sunny acompañándolo por el centro, marcado a medias por Antonio. Alejandro espera fuera del área para tratar de interceptar otra vez el pase, sabe que si aguarda en su arco les facilita la tarea a los atacantes. Mat es un especialista en defender, además de ser veloz por lo que Alexander no la tiene fácil, incapaz de ir hacia dentro, obligado a hacerlo por fuera. Tras avanzar varios metros sabe que se perderá en el callejón y que de hacer tiempo permitirá que la defensa azteca se reorganice por lo que urgido manda el centro a pesar de todo, bastante aceptable… Sunny ha picado a primer palo adelantándose a Tony y cabecea girando la cabeza para mandarla al otro poste… Y entonces Alejandro que ha vuelto a cubrir su meta le contesta a Daniel haciendo un paradón, recuesta sobre su izquierda cual felino y le dice que no a la derrota.

-¡¡ALEJAAAAAAAAANDROOOO!!

-¡¡AHUUU!! ¡¡AHUUU!! ¡¡AHUUU!!

El público se rinde a sus pies completamente emocionado y orgulloso de tener a esta clase de portero en sus filas.

Viene entonces el segundo cambio del Cuauhtémoc, algo arriesgado también pues el entrenador Villanueva decide sacar a Álvaro, su eje de ataque, reemplazándolo por Fred y es que considera prescindir de un centro delantero clavado y tener llegada mediante la habilidad y velocidad o bien hacer tiros desde fuera del área. Así se lo explica a Álvaro cuando al igual que a Jhonny, lo recibe con los brazos abiertos, plenamente satisfecho de su rendimiento.

De inmediato el cambio rinde frutos pues Fred comienza a preocupar a la defensa visitante, regateador, atacando por todos los frentes, asociándose con sus amigos. Pero es el Euro el que pega de nuevo contragolpeando a un desesperado equipo local que está ya volcado al frente y descuida la retaguardia. Sunny corre por el centro del campo ligeramente cargado a su derecha hacia la portería enemiga; Javier le persigue haciendo un esfuerzo sobrehumano, de milagro no cae en cada paso que da; Alejandro regresa a su portería trotando hacia atrás pero se queda fuera del área chica a esperar el ataque. Sunny ya se la quiso aplicar hace un momento a Javier recortándolo pero resbaló, ahora no puede haber tanta mala suerte, además su marcador va corriendo a duras penas así que será de lo más sencillo quitárselo de encima, sin embargo sabe que Javi puede recurrir al forcejeo o a la barrida y desarmarlo, excelente, ambas maniobras si ocurren dentro del área pueden significar ahora sí un penal completamente válido, así que continúa. Pero nada más entrar al área ve de reojo cómo trastabilla Javier y de una buena vez lo deja tendido por el suelo, completamente fuera de acción… el recorte ha sido hacia dentro para quedar en posición de tiro pero Alejandro sabiendo que venía esa jugada se adelanta y le achica el ángulo de disparo… Sunny aguanta la pelota obligando al portero a estirarse por ella, el delantero evita el manotazo alejando la pelota, recorriendo en paralelo la portería… Alejandro no se rinde y rehaciéndose se vuelve a lanzar por la pelota que se pregunta por qué no la llevan a las redes… No lo consigue y queda también desparramado por el césped… Un aliado azteca llega, Antonio comprometido, ha atravesado toda la cancha y espera ser el salvador, Sunny lo ve y planea quitárselo también, si adelanta un poco el balón y él desacelera para después meterle velocidad ocasionará que Tony pase entre ambos y encarrerado como viene se irá de largo; ejecuta todo a la perfección… Pero rayos, llega un cuarto mexica, justo detrás de Antonio, es Fred el jugador que fresco se siente obligado a desquitar el salario, ha visto cómo han burlado a Tony por lo que en vez de ir por el jugador se dirige a la portería a tratar de tapar el tiro, esto genera que Sunny planee poner el balón en el ángulo, tonta o brillantemente identificado con la idea de no hacer nunca un gol fácil “qué chiste”, buscar siempre un gol delicioso es su estilo de vida, si no, no vale la pena vivir el futbol…

El técnico predator desde su zona ha ordenado-suplicado varias veces el disparo viendo que su pupilo juega con la gloria, enredándose en una jugada ya solucionada desde el principio, “¡Tira, tira, tira, tírale ya!” le han escuchado decir.

Como en respuesta Sunny lo hace ante la angustia de todo Aztlán… y falla…

Todo el estadio contiene la respiración mientras el predator se sabe de ya etiquetado como “villano”, si ocurre un milagro y el Cuauhtémoc empata ésta jugada no se le olvidará nunca en su vida y peor aún, jamás se lo perdonarán.

La afición ya está empezando a creer que no serán campeones, es más probable que caiga el gol visitante que el propio. Entonces esa fatalidad es arrebatada de golpe cuando miran a su joya preparado para entrar al campo. Paris había sido informado por el entrenador Villanueva que entraría de cambio, a lo que el chico Estrella respondió:

-Pero entrenador, no estoy al cien y aún faltan los dos goles. Quedan como diez minutos ¿para qué entrar? Mejor meta…

-¡Con un demonio, Paris! ¡No te estoy pidiendo permiso, te estoy ordenando que ingreses a jugar! ¡Rápido!

-¡Estoy lesionado! Son diez minutos, qué…

-Escucha Paris, lo siento mucho pero hemos llegado a un momento en que no me importa tu carrera futbolística. El año pasado perdí dos campeonatos ¿Tienes idea de lo que se siente? Así que si te fracturas ¡me importa un rábano, ve, anota un gol, pon el pase para otro! y te sacaré para cuidarte ¿sí?

Entonces con esa “invitación” pues cómo negarse, herido en su orgullo, obligado a hacer algo por el bien del equipo, recibido con aplausos y la afición granate puesta de pie, toma su lugar despidiendo y felicitando a un Efrén que ya hacía rato sólo caminaba, por completo tronado.

-¡¡PAAARIIIIIIIIIIIS!!

-¡¡AHUUU!! ¡¡AHUUU!! ¡¡AHUUU!!!

El levantón emocional es mayúsculo, los aztecas se sienten recargados y se vuelven a lanzar al frente liderados por Paris, pero no puede, le cuesta correr, así que se dedica a repartir el juego con pases precisos y en una de esas le pasa a Antonio que desborda sobre la banda derecha, manda como centro una venenosa pedrada buscando una pierna, cualquiera, tanto amiga como enemiga, cualquier pierna es suficiente para mandarla al fondo del arco. La potencia del centro rebasa la capacidad de reacción de Ignacio, a los dos centrales los pasa de largo, helados en postura y mente de pensar que pudieran meterla en su propia portería y Fred que venía un poco retrasado, aún con energía se barre buscando rematar… pero no llega por fracciones de segundo…

-¡HHUUUUUUUU…!

El Euro viendo esta muestra de poder y pundonor ya se echa atrás cerrando filas y dispuestos sólo a contragolpear si es que es posible, saben que pueden incluso darse el lujo de recibir un gol y de todos modos ganar, así que a defender estos minutos finales: cinco más los que añada el árbitro. Su treta funciona pues el Cuauhtémoc en su afán de conseguir el par de goles va a la portería predator pasando la pelota buscando abrir algún resquicio, pero pierden a la caprichosa y Jermain busca un receptor a quién enviarle el pase, ha encontrado a Alexander y pasa… Ya los aztecas se resignan a tener que echarse otro trago amargo y sus piernas agotadas encomiendan la tarea de correr tras el delantero a los más frescos, o los más inteligentes, Paul leyendo la jugada, se ha ubicado magistralmente e intercepta el pase… El aparato defensivo del Euroarsenal apenas se disponía a salir pero viendo cómo el equipo local recupera la de gajos, se vuelven a posicionar. Este regreso de la ola en el que atacantes y defensores se ubican para cumplir su propósito mueve a todos y cada uno de los jugadores, excepto a Paris, parado fuera del vértice izquierdo del área, recibe el balón del incansable pie de Paul. El chico Estrella muestra de qué está hecho, es de ese tipo de jugadores que ven el futbol desde otro plano, permanece estático mientras todos a su alrededor se mueven, podría ver al mundo destruirse y él presenciarlo con esa calma propia de un muerto, así le parece a Jamal que lo presiona confiado en la falta de expresión del mexica… Entonces brilla la magia. Paris patea la pelota entre las piernas del rival que osaba robárselo y acelera de 0 a 100 en dos segundos… rodeando a Jamal… sólo da cuatro pasos para alcanzar la bola… y prenderla de derecha, con la parte interna… Samuel que salía a tapar y juraba que lo hacía ve desde una privilegiada posición el origen de la mortal curva que hace el eterno infaltable, sigue con la mirada la estela que deja el balón y la ve incrustarse en el ángulo izquierdo de su compañero Daniel, éste se queda como estatua viendo cómo cae su meta, reconociendo la impresionante calidad de su rival haciendo ver tan fácil el futbol.

-¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOLLL DEL CUAUHTEEEEMOOOOC!!! ¡¡¡DIOS, PARIS QUÉ GRANDE ERES!!! ¡¡¡POR ESO TE LLAMO MERLÍN, POR ESO ESTA GENTE TE ADORA!!! ¡¡¡QUÉ GOLAZAZAAZO TE HAS MANDADO!!! ¡¡¡EL CUAUHTÉMOC SE PONE AL FRENTE 2-1, 3-4 EN EL MARCADOR GLOBAL, LA FINAL EN SU PUNTO MÁXIMO, EL CIERRE PROMETE SER VIBRANTE!!!...

Aztlán explota eufórico… había ido conteniendo durante cada minuto la ansiedad por el gol que los acercara al empate, además todo el peligro del Euroarsenal que no ha llegado a ser letal, pero que igual los ha dejado helados en más de una ocasión, las oportunidades falladas, todo ello los ha puesto de modo que vibren con esta anotación. Es una bella estampa futbolera y Cronos se regocija admirándola…

Paris también ruge la anotación sacándose toda la presión acumulada. Es felicitado por sus compañeros que saben que pueden tener dos o tres chances más antes de terminar el encuentro, quién sabe, a lo mejor el milagro aún se pasea por los alrededores.

Georgette en casa, al no percibir el juego como todo aficionado, sí disfruta del gol y en un momento de fragilidad se quebra y llora por su amado, sabe cuánto significa para él jugar y anotar y más en estas condiciones tan adversas. Sus ojos vierten lágrimas de alegría por su casi novio mientras lo ve en la pantalla en close up jalándose la playera para besar el escudo del equipo, “es bellísimo”, dice enamorada la joven Garza.

El Cuauhtémoc se vuelca al frente y el Euro se echa atrás, quedan tres o cuatro minutos y deben asegurar cada uno su rol hasta vencer o perder. El milagro que ya se iba regresa tras escuchar el ruido ensordecedor de Aztlán ¿qué ocurre? Se pregunta. Pronto encuentra asiento y lo toma cómodamente.

Y es que los aztecas atacan motivados por ese extraordinario gol vía los jugadores frescos: el propio Paris, Fred y Antonio. Es éste último el que desborda una vez más por la banda y manda un preciso centro, tonto, qué error, ya no está Álvaro para rematar, la estrategia ahora es intentar por abajo pues un cansado Ignacio y un delgado Fred no son competidores en el cabeceo para Darío y Samuel, rayos, mil veces tonto. Pero, ya tenemos a Milagro sentado en el estadio… éste ha elegido a Fred, digamos que lo ha cautivado ese pormenorizado estudio por el futbol y el amor que profesa por este equipo y esta ciudad, sí, es buen candidato.

El centro hace un extraño efecto, quizá el que le puso Tony y el balón cae justo dónde está él, Fred y aunque no sea especialista en cabecear, el pase es tan cómodo que sólo tiene que poner la frente… Daniel está vencido, jamás llegará a la pelota, es gol, es el empate en el global ¡habrá penales y la oportunidad para el Cuauhtémoc de ganar! Esto pasa fugaz por la mente de Robbie y se niega a aceptarlo, no desea nunca hacer trampa, es instintivo. Se lanza con la mano extendida como si fuera el portero y aunque trata de fingir que la saca con la cabeza, no le pasa desapercibido al juez central y marca el penal. La treta de Robbie no es mala, sabe que lo expulsarán y dejará a su equipo con diez pero qué importa, faltan como dos minutos para que termine la Final, además lo que era un gol seguro ahora se convierte en una opción para que los locales fallen, por donde se le vea no ha sido tan irresponsable su lance.

El estadio enloquece por la marcación, la afición granate no puede creer tanta belleza y tanto drama al mismo tiempo, lástima que sólo hay espacio para uno ¿cuál será? Isaack, el entrenador Villanueva, los jugadores de la banca, la maestra Lizeth, Georgette, Marco, Steven, Tania, Anamaya, la Huitzilopochtli, las mamazitecas sufren y ríen al mismo tiempo.

Los predators enseguida desean suerte a Daniel para que detenga el disparo que de seguro cobrará Paris ¿quién más?

Por su parte Paris desecha la oportunidad ante la incredulidad de sus amigos. No es miedo, no se siente al cien, podría arriesgarse y pretender ser el héroe, pero no habrá otra oportunidad, esto tiene que asegurarse, dársele las mayores posibilidades de éxito, no restárselas. Los mexicas lo entienden pero nadie quiere tomar la responsabilidad. Ignacio, que tiene la espina clavada por el penal cometido, necesita tomar revancha y esto lo impulsa a apuntarse. Se dirige entonces al punto penal mientras sus compañeros y rivales se ubican fuera del área grande intercalándose entre sí. Tiene enfrente a Daniel y a un lado al árbitro informándoles, aunque ya las conozcan, de las reglas del cobro. El juez le da la pelota a Ignacio y se retira unos pasos. Daniel caballerosamente le desea suerte al delantero. Ningún predator se manifiesta por exigir justicia y pedir que erren el penal como ellos hicieron hace un momento, este penal es completamente válido así que a cumplir.

Aztlán se muerde las uñas, no habrá otra oportunidad, es posiblemente lo último y sufren de tantas formas estos instantes, hay quienes definitivamente no quieren ver y se cubren el rostro o se voltean de espaldas, incluso el mismo Mexica pareciera elevar su cabeza al cielo nocturno para no ver y varias cámaras de tv se empeñan en mostrar este increíble fenómeno, “Se los juro, se ha movido” se dice en algún medio de comunicación y su correspondiente crónica del partido iniciará con este relato.

A Ignacio lo sacude levemente su propio ritmo cardiaco. Trata de controlarse pero ¡cielos! esto es una prueba de fuego. Fred se prepara para el rebote y el árbitro silba…

El penal es mal tirado, a la izquierda del portero y a media altura, y para la habilidad de Daniel es fácil de atajar y lo hace… Manda el balón a un lado pero al encuentro de Fred que no se ha quedado a lamentar la falla, ha reaccionado antes que cualquier otro sobre el campo y Milagro le dice “este momento es tuyo”.

Fred es firme, jamás duda, tampoco planea bien su tiro, sólo piensa en fusilar al portero que se levanta y ofrece su cuerpo y rostro para que lo dañen, no le importa con tal de salvar su valla… No es afortunado, la bola le pasa por un lado rompiendo el aire y vulnerando la portería celosamente guardada…

-¡¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOLLLL!!! ¡¡¡SE EMPATA EL GLOBAL, TENDREMOS PENALES, LA FINALÍSIMA EN SU CLÍMAX!!! ¡¡¡FRED APARECE COMO EL SALVADOR DEL CUAUHTÉMOC, COMO ESE TALIZMÁN QUE HA SIDO TODA LA TEMPORADA!!!...

A Fred lo golpea el alivio, llora el gol mientras corre hacia la banda contraria a donde estaba ubicado, sacudiendo las manos, negando con la cabeza, cubriéndose con las palmas el rostro para volver a mostrar su llanto al mundo… Esta escena es por demás emotiva, captada por las cámaras, generando las lágrimas de muchos en el estadio como Violeta e Ignacio.

La primera llora totalmente conectada con su chico, feliz por ver cómo éste se ha sacado la espina de la jugada aquella del clásico, en la cual falla una opción muy fácil a unos minutos de finalizar el partido y que en vez de terminar el duelo 3-1, acaba con un terrible empate para ellos, también por su pobre desempeño en la Final de ida cuando falla como tres jugadas claras de gol y que ocasiona que el equipo se meta en graves problemas, sólo revividos por esa épica jugada de Alejandro. Había sufrido mucho y ahora se merece cada aplauso y sonrisa de la fanaticada, piensa emocionada Viole, sentada, asistida por una integrante de la barra femenil.

Ignacio también ha sido golpeado por el alivio. De saberse villano a que le salven la vida, así ha pasado y llora agradecido con el Supremo. Mira pasar frente a él a Fred pero no gira su cabeza en acompañamiento, entonces cuando su amigo desaparece de su campo visual se tira de rodillas al pasto y se abandona al llanto. Ahora nadie lo consuela, ni siquiera Ray, todos y cada uno de los mexicas, tanto titulares como de banca se abalanzan sobre Fred agradeciéndole delirantes la anotación. Es irónicamente Daniel el que se acerca a Nacho y le ofrece la mano.

-Ha sido un gran partido. Seguramente ganará el mejor. Anda, levántate, debes ir a festejar con tus amigos.

Ignacio acepta la mano y el comentario, se reincorpora, limpia sus ojos y aún sosteniendo la mano de Dani le dice “gracias” sincera y orgullosamente.

Aztlán está ya curado de espanto, vuelve a pasar del desencanto a la euforia en dos segundos. La gente está feliz, los comentaristas cautivados, las cámaras de tv sacudiéndose por la energía de la afición. Isaack y Lizeth se abrazan encantados por sus muchachos, agradeciendo al cielo por esta noche; el entrenador Villanueva consciente de que el partido terminó y vienen los penales de inmediato diseña su lista de tiradores con una sonrisa enorme en el rostro; Marco está que no cabe de alegría, va y abraza y besa a su mamá que resiste el “ataque” estoica, ¡Paola! Clama el auxilio de la hermosa joven; Steven reconoce el partidazo que acaba de ver y comprende el carisma que tiene este equipo, muy diferente de la popularidad de ellos, los steelers, en cambio Tania, brinca feliz y eleva los brazos y aplaude y aúlla ante la mirada interrogante de su hermano que piensa “¿Alguna vez se pondrá así con nosotros?”; Román, Christian y Arturo como el resto de la Huitzilopochtli se miran entre ellos encantados de la vida, sudorosos, también agotados aunque reforzados por este disparo de adrenalina, planean regar la voz para que nadie en la barra se burle o se meta contra los tiradores del Euroarsenal cuando ejecuten su respectivo penal, han luchado dignamente y ellos corresponderán a la categoría del rival.

-¡La Copa no se decide por su dueño, señor Ramón, parece ser que pondrá una prueba más a estos jóvenes para ver quién la merece! ¡Cuánto rigor!

-¡Por eso el campeón siempre es el mejor! Porque tiene que pasar por todo esto y mucho más para levantar el trofeo.

-¡La inmortalidad tiene su precio! ¡Se vienen los penales, la gloria máxima del futbol en disputa después de unos minutos de espera y de tensión! ¡¿Quién será el Campeón?!...

¡Los penales! ¡Lo más emocionante de un partido de futbol! ¡No se los pierdan en el próximo y último episodio! ¡Gracias!