Hana Fairchild —Hana, creo que los perdimos de vista… —comentó Biyomon al rato de andar por allí, mirando alrededor—. ¡Oh, pero mira! Allí hay un árbol que tiene frutas… ¿tienes hambre? Podemos hacer una pequeña pausa para comer si quieres… Hana detuvo entonces sus pasos. Era cierto... el chico y el niño pequeño ya no se encontraban por allí. En el bosque, el único sonido que podía percibir era el murmullo de las hojas. Una pequeña parte de su ser sintió un ligero alivio... la otra parte cierta... ¿decepción? —Eso parece— murmuró. Y entonces, recordó la segunda parte de las palabras de Biyomon... su mirada se alzó hasta los grandes árboles frutales que se hallaban justo frente a ellas. Sintió sus mejillas enrojecer levemente al ser consciente del leve gruñido de su estómago. >>Hm, lo... lo cierto es que podría decirse que sí tengo un poco de hambre— le dijo al digimon—. No he podido comer nada desde mi mundo. Pero esos árboles, y esas frutas... ¿estás segura de que no son venenosas, Biyomon? Esos colores tan vivos...
Mientras disfrutaba de las ricas frutas con mi amigo, desde las alturas ví algo raro; por el camino que veníamos se movían las hojas aún estaban lejos. "Rayos, ¿qué hago? No debería alarmar a Scottie, se asustará y yo que ya estoy con un poco de miedo… tal vez sea la chica muda, pero no creo… mejor…" —Ehm, Scottie, dame tu mano, te ayudaré a subir. Hay una vista preciosa, luego ayudaré a subir a nuestros amigos digimon —le dije al joven. En realidad no mentía; hacia el otro lado se podía ver un bosque no tan atemorizante ya que tenía muchos colores, y tal vez ahí arriba estemos a salvo. Contenido oculto Steve Yops
—¡No te preocupes! Yo suelo venir a comer las frutas de aquí todo el tiempo, así que te aseguro que se pueden comer —le aseguró Biyomon—. ¡Pero sí ten cuidado con los hongos! Muchos de los que hay por aquí son venenosos, así que por las dudas no comamos de esos… Biyomon comenzó a batir sus alas y se elevó hasta llegar a la copa de aquel árbol. Desde allí, cortó algunas frutas y las bajó para Hana; parecían ser naranjas. Lucían exactamente igual que las naranjas que había en su mundo… por lo que no debía haber nada extraño con ellas, ¿verdad? —Ten, Hana, estas son para ti —sonrió la digimon, entregándole las frutas obtenidas.
Hana Fairchild Hana asintió. Si Biyomon era una asidua comedora de aquellas vistosas frutas de ninguna manera entrañaban peligro alguno ¿verdad? Los hongos en cambio, tal como había mencionado la digimon podían representar un peligro mayor... Pero eso era algo que Hana ya sabía. —Tranquila— respondió la muchacha con suavidad—. Me mantendré alejada de ellos. Él únicos hongo que yo como es el shiitake... y dudo mucho que haya de ellos en este lugar. Biyomon aleteó, elevándose del suelo hasta alcanzar la alta copa del árbol repleta hasta arriba de aquellas curiosas frutas. Tomó un puñado de ellas y, con una encantadora sonrisa, le hizo entrega a Hana de estas una vez regresó al suelo. La muchacha no pudo evitar sentir sus mejillas enrojecer levemente ante la dulzura y candidez que demostraba el gesto del digimon pájaro. De verdad que aquella criatura era muy tierna. —G-gracias, Biyomon...— murmuró, desviando por un momento la mirada. Luego volvió a mirar sus manos—. Tienen una pinta deliciosa. Son... ¿naranjas? Así lo parecían. Eran redondeadas, de color naranja y tenían una textura similar. ¿Sería alguna fruta de la familia de los cítricos? Curiosa por conocer su sabor Hana decidió probarla. Su gesto se iluminó al instante. —¡Mmm~!— exclamó—. ¡Está delicioso~! Parece una naranja, pero tiene un sabor parecido a la frambuesa... cítrico pero a la vez dulce... ¡es toda una delicia para el paladar...! ¡De verdad que esta muy bueno, Biyomon! Eran datos virtuales realmente, ¿verdad? Pero Hana parecía tan encantada que ni siquiera se había preocupado por disimular su reacción.
Biyomon pareció bastante feliz de ver que a Hana parecían gustarle las naranjas. Contenta, se volvió a su propia naranja, y procedió a comerla también. Las dos se sentaron debajo del árbol para poder disfrutar de aquellas frutas mientras descansaban. —Suelo venir mucho por aquí para comer las frutas de este lugar, y además aprovecho para saludar a los digimon insecto que viven por aquí, son muy amigables —comentó Biyomon, mientras comía una segunda naranja—. Hay toda clase de frutas en los árboles de por aquí; frutillas, manzanas, peras, sushi, bananas…
Scottie Peterson. Puse una cara de sorpresa y un poco de inseguridad apenas supe que tenía que atrapar las frutas. ¡Q-qué vergüenza! Yo siempre he sido malo en los deportes. Es por eso que siempre me elegían de último... —¡L-la tengo!, ¡eso es! —exclamé, con una mueca torcida parecida a una sonrisa. Parece que lo estaba logran...— ¡Ay! Hablé demasiado pronto. Apenas me confié, sentí como la tercera y última fruta me golpeó en la cabeza, haciendo que perdiera el equilibrio, y por ende, cayeramos las frutas y yo al suelo. —¡Casi lo logro...! —dije, llorando con esos ríos graciositos en los ojos que ponen en las caricaturas japonesas. [3/15]
Terriermon se acercó con sus pausados pasitos hasta Scottie, quien aún yacía derrotado en el suelo rodeado de las frutas que se le habían caído. El digimon simplemente soltó una risita y colocó su mano sobre la frente de Scottie. —Momantai —dijo Terriermon, risueño—. Estuviste bastante cerca, Scottie… —Daryl, tal vez no sea tan buena idea subir ahi arriba, podría caerse —comentó Gabumon, viendo a los otros dos—. ¡Ah, tengo una idea! Los Kunemon viven por aquí, ¿verdad, Terriermon? Tal vez ellos sepan algo acerca de Gennai… —Sí… el Cuarto de Kunemon es por ahí, en esa dirección —señaló Terriermon, apuntando con su manito a un poco más adelante—. ¿Quieren ir a ver?
Scottie Peterson. Hice un puchero al ver como a Terriermon se reía con mi casi-triunfo. Lo más probable es que le traiga muchos momentos de risa, porque así soy yo... torpecito y con dos pies izquierdos como dicen por ahí. Mi inteligencia es lo que lo enmienda, supongo. —¿Kunemon?, ¿qué son esos? —pregunté algo inseguro—. ¿Son amigables? No vaya a ser que terminemos siendo atacados como pasó en esa cueva... [4/15]
—Los Kunemon son bastante amigables, de hecho; son digimon insecto a los que no les gusta pelear —fue Gabumon quien respondió a la pregunta de Scottie—. Así que no creo que tengamos ningún problema con ellos… Terriermon asintió a lo que dijo el otro digimon, y luego pegó un salto para colocarse sobre la cabeza rubia de Scottie. Amigablemente, le sonrió, haciendo equilibrio hasta que finalmente logró colocarse cómodamente sobre el chico. Mientras tanto, en otra parte del boque, Hawkmon llevaba a Frank en dirección al Cuarto de Kunemon, volando en esa dirección con el chico siguiéndole detrás. Y por otro lado, no muy lejos de allí, Hana y Biyomon se habían puesto nuevamente en marcha tras terminar de comer las naranjas. Biyomon ahora guiaba a Hana hacia los amigables digimon insecto que había mencionado mientras comían, quienes quizás sabían algo acerca del anciano que buscaban… ¿se encontrarían todos ellos en el Cuarto de Kunemon, o pasarían cerca los unos de los otros sin percatarse de ello?
Intenté no reírme al ver cómo se reía aquel Digimon por lo sucedido con Scottie. —Daryl, tal vez no sea tan buena idea subir ahi arriba, podría caerse. —Hm, sí, bueno… creo que tienes razón —admití. Dejé cae varias frutas al suelo y luego pegué un gran salto para bajar a tierra—. ¿Cómo haremos para llevar las frutas? Al escuchar nombrar el Cuarto de Kunemon no pude evitar pensar que como que no debería de fiar. Scottie hizo una pregunta al respecto, lo bueno es que, al parecer, no corremos riesgos . —Muy bien amigos, si ellos saben algo de Gennai deberíamos ir —dije, agarrando algunas frutas entre mis brazos; puede que más tarde tengamos más hambre—. Scottie, ¿quieres que te ayude a practicar, para que puedas atrapar objetos cuando te los lanzan?
Scottie Peterson —E-eso creo, quizá me haga bien tener un profesor para estas cosas... —dije tímidamente—. Pero no será muy fácil que digamos, siempre fui más bien malito para esto de los deportes y todo eso. Seguí caminando mientras esperaba la respuesta de Daryl. No estaba muy seguro si era para practicar ahora ya, pero creo que primero debíamos encontrar a los Kunemon, ¿no? [5/15]
