Saltando de rama en rama, me puse frente a Yair. —¿Tendré que acostumbrarme siempre a tus negativas, Yair? —me quejé— Eres aburrido... De pronto apareció Pidgeotto sobre su cabeza. Me tomó de los hombros con sus patas y empezamos a volar. La clavé una mirada seria el entrenador de Gardevoir. —Algún día me mostrarás tu fuerza. No dejes de entrenar... Desaparecimos entre las copas de los árboles.
Quilava apartó la cabeza--¿Esa es tu forma de saludar?--le dije y este asintió me agache para pellizcarle los mofletes para que sonriese--Asi mejor--Dije mientras este intentaba huir pero yo no le dejaba
Me recoste y espere a que mitsuki contestara o hiciera algo interesante --Quilava donde estas?--Pregunte y este salio de los arbustos--Hola pequeño, que hacias ahi?--Le pregunte y este sonrio--Haciendo amigos eh? Que bueno--Le die y este sonrio--
—Por suerte, no soy aburrido —sonreí cariñosamente mientras me acercaba a Mizuki y le tomaba las manos—
Le correspondí el abrazo--Pues si, pero Quilava siempre es asi o no duerme--Dije mientras me ponia a pensar en esa opción
Buneary y quilava abrazaron a su entrenador por una razon --Hay chicos ustedes son una ternura pero que pasa?--Le pregunte y estos sonrieron y siguieron abrazandome--Vale, no se que le pasa pero bueno--Les dije sonriendo--
Me sonroje por el beso pero le sonrei y le bese en la punta de la nariz mientras Quilava al ver que Mismagius le miraba apartó la mirada