Kashya Thornton Entrecerré ligeramente los ojos al ver como la puerta se abría en ese instante y la figura de Morgan se visualizaba. ¿Había pensado en ella y justo aparecía? Eso no podía ser casualidad, estaba segura, la teoría solo se afianzaba más y más. Sea como fuere, pronto recuperé la neutralidad en mi expresión y observé el intercambio entre ambas chicas. Era obvio que a Bleke no le agradaba Morgan, siendo comprensible después de lo sucedido el día anterior, pero ella era más educada y apropiada para darle aquella información a la morena. Ladeé la cabeza al ver que centraba su atención en mi y asentí al final, volviendo a intercalar un par de miradas entre ambas antes de comenzar a caminar hacia la salida. Seguramente Emily estaría en el patio ya, con Anna. ¿Quizás estaría también el mejor amiga de Morgan ahí? Ayer había parecido que a Emily le había caído bien y no estaba tensa, cosa que normalmente no le pasaba con chicos o desconocidos en general. Contenido oculto Uy pero bueno Morgan-chan u////u
Bueno, estaba preocupada. Qué sentido tenía esforzarse por negarlo, ¿no? Había logrado correr el asunto durante las clases pues tenía esta facilidad casi inhumana para escindirse, cortesía de los Middel. Le habría gustado que Jez estuviera allí, estaba segura que habría hecho un mucho mejor trabajo que ella, pero la situación era otra. Debía amoldarse, era la única verdad, y en definitiva también contaba con esta facilidad para amoldarse al recipiente donde la vertieran. Cortesía de los Middel, otra vez. Tenía la labia, tenía las herramientas; sólo le faltaba dar el paso hacia adelante, hacia la línea que ella misma había trazado. —Kashya —la llamó, suave, mientras caminaban hacia la biblioteca—. ¿Qué piensas de Morgan y el chico de tercero, David? Se permitió hablar un poco más antes de que la chica tuviera tiempo de responder. —Yo... no estoy muy segura sobre ellos. Tienen algo que me incomoda un poco. ¿Adónde quería llegar? ¿Cuál era su punto? ¿"Mantene alejada de ellos"? Suspiró, pellizcándose el puente de la nariz, y relajó el semblante. Ahí estaba otra vez, la molestia jaqueca latiendo al centro de su frente. —Como sea, siempre puedes hablarlo con Hodges-san. Ahí estaba, siempre lo mismo. Dudando, oscilando la pierna sobre la línea, y finalmente retrocediendo. De vuelta a su burbuja, a su pequeño universo. De vuelta a los barrotes de la maldición. Estaban por llegar a su mesa de siempre cuando una presencia oscura, similar a una pantera, se deslizó silenciosamente junto a ellas y les sonrió como si nada. Morgan. No abrió la boca, procedieron a sentarse en sus lugares usuales y a sacar sus libros para empezar a leer. Bleke apenas le echó un vistazo antes de enfocarse en su lectura, permitiéndose un suspiro casi imperceptible. Contenido oculto Amane te etiqueto cuz yes
¿Qué Kashya se había interesado en él decía? Pues no de la forma que planeaba, pero sí, se había dado cuenta incluso con la tremenda cara de póker de la chica. Lo que no se tragaba pero ni en joda era la mierdilla esa de los celos, qué iba a creerse nada de Morgan O'Connor. La observó alejarse sin perder detalle del movimiento de sus caderas al andar y cuando la vio desaparecer del pasillo de tercero se permitió una risa floja, algo ronca. No iba a llevarse un buen polvo, pero tampoco estaba perdiendo desde su comprensión de las cosas. En realidad el asunto podía ponerse más y más interesante. No pretendía hacerle daño a nadie, en realidad, solo quería entretenerse sin que lo miraran raro o bueno no tanto, porque no importaba qué tanto pretendiera disimularlo la otra chica bañada en lejía, no estaba cómoda. No importaba si era por él y por Morgan o por alguna otra cosa, pero no lo estaba y punto. Sin embargo, aunque no pretendiera hacerle daño a nadie, tampoco era una santa paloma. Si la otra estaba incómoda, bueno, que se las arreglara, si acaso se iba a limitar a no hablarle para no fastidiarla más. —Hola, hola~ —dijo mientras entraba a la biblioteca pero no se molestó demasiado en detenerse, sigo su camino hasta los estantes y buscó algún libro. Recorrió los lomos de los libros con vista casi experta, si leía era porque en los libros podía encontrar un montón de las cosas que le gustaban. Leyendas, mitología, terror, misterio... ¡Bingo! No era el gran hallazgo, pero la mitología de Japón había terminado por absorberlo apenas llegó, el panteón sintoísta era una cosa de lo más extensa y compleja y cada vez que creía haber leído todo al respecto, le aparecía otra cosa y otra y otra. Luego aparecían los mitos, los yokai y los espectros. Una vez conseguida su lectura de la tarde, regresó a la mesa donde estaban las chicas y se sentó junto a Morgan, no sin antes dedicarles una sonrisa a las otras dos muchachas.
Kashya Thornton Las clases habían acabado siendo menos pesadas de lo normal y es que, ciertamente, la idea de encontrar a alguien interesado en el tipo de leyendas que me agradaba leer había acabado emocionándome. Y el hecho de que Morgan también pareciese algo interesada en ello... era una buena noticia, porque también me agradaba estar con ella. Emily apareció para decirme que estaría en el Invernadero al acabar las clases y tras asentir con la cabeza, esperé a Bleke para dirigirnos a la Biblioteca. La miré con la cabeza ligeramente inclinada al escucharla hablar y volví a dirigir la vista al frente en cuanto terminó. Era... comprensible. Al fin y al cabo, la conversación que habíamos tenido en la Azotea podía haber sido algo inquietante para ella, sabía que normalmente las personas no veían con buenos ojos aquellos temas. ¿O quizás era algo que se me escapaba? Hablarlo con Emily... Quizás fuese buena idea, ella solía ser más perceptiva que yo con algunas cosas. Llegamos a la biblioteca antes de que pudiese responderle y Morgan apareció no mucho después de nosotras, haciéndome imposible seguir con la conversación porque... bueno, hasta yo sabía que no era buena idea. Aun así, me incliné ligeramente hacia Bleke después de saludar a los otros dos, hablando en voz baja. —No te preocupes, estaré bien —le dije—. Gracias. Me incorporé después en el asiento y comencé a sacar las cosas, mirando al chico cuando lo tuve todo preparado. >>¿Vas a unirte al club?
Apenas si alzó la vista de su libro cuando percibió la cercanía de alguien pasando a su lado, y en cuanto Maze las rebasó se permitió una sonrisa de lo más divertida. Siguió leyendo como si nada. Demian, ¿eh? Qué cosa con su memoria, parecía de anciano. Lo había leído pero no recordaba nada. Aún así, qué prosa más preciosa. El muchacho se acomodó a su lado y Morgan pasó de página, escuchando que Kashya le preguntaba si se uniría al club. No buscó sus ojos pero sí deslizó la vista hasta el libro que llevaba entre manos, ladeando ligeramente la cabeza para conseguir leer el título. Mitología japonesa, ¿eh? Volvió a sonreír como hace un rato y no dijo nada, regresando a su propio libro. Prefería esperar a oír su respuesta. Bleke, por su parte, los vio aparecer de a uno y, al menos, decidió apoyarse en las palabras que Kashya le había dedicado. Sólo le quedaba confiar, ¿no? Le sonrió a Maze en cuanto él lo hizo ya que, a pesar de todo, realmente lo conocía poco y nada y no era su estilo prejuzgar ni ser grosera. Sin embargo, una vez resolvió concluidos los saludos protocolarios, se abocó a su libro de lleno. Y ya.
Había buscado en el índice del libro para ver si encontraba algo de lo que no hubiese leído antes, poco probable, pero siempre se valía intentar. Se había decidido ya a empezar por algo al azar, así que pasó las páginas pero se detuvo cuando escuchó la voz de Kashya. Le dedicó una sonrisa suave, quizás algo avergonzada incluso. —No creo. Realmente seguro dejaría las lecturas del club por leer otras cosas entonces no tiene caso que lo haga, pero bueno, si no tienen problema con que venga a leer con ustedes a veces, aunque no esté en el club, pues me verán por aquí algunos días. —No estaba hablando fuerte, era idiota pero sabía comportarse en una biblioteca. Miró los libros que las chicas tenían entre manos. ¿Demian? Ugh, qué va. Aunque... ¿No era ese el que había escrito El Lobo Estepario? Y se le iba la olla al final del libro de una forma rarísima. Ah, qué importaba, prefería su libro de mitología.
No le prestó demasiada atención a todo lo demás que Maze dijo después del primer "no creo", aunque realmente estaba a su lado y era difícil ignorar una voz tan cercana. Como fuera, lo más probable era que a las pocas horas olvidara toda su relevancia. Si aparecía en la biblioteca de forma anárquica no era algo que... le sirviera, suponía. Siempre acababa buscándolos, ¿verdad? Los patrones y repeticiones. —Ah —murmuró de repente, alzando la vista, como si acabara de recordar algo—, cierto. Lass, habías dicho algo de ir a tu casa, ¿verdad? Le sonrió a Kashya y se volvió apenas un segundo hacia Maze, para volverlo partícipe del intercambio. Su plan era incluirlo, al fin y al cabo. —¿Qué tal mañana~?
Kashya Thornton Asentí con la cabeza cuando el chico acabó de hablar, solemne. Personalmente no me molestaba que cualquiera viniese a la Biblioteca mientras respetase las normas. Ni siquiera me molestaba que no estuviesen leyendo mientras se mantuviesen en silencio, a decir verdad. Me giré después hacia Morgan cuando la escuché hablar y volví a asentir con la cabeza. —Mis padres no están en casa así que podéis venir cuando queráis —informé, sacando entonces una libreta para romper un trozo de papel y comenzar a anotar algo en él—. Mañana está bien. Extendí entonces el papelito hacia Morgan, con mi dirección apuntada, y finalmente decidí centrarme en el libro que había abierto ya. Lo mejor sería terminarlo antes del fin de semana. Contenido oculto Que lindo, mis niñas todas con sus citas teehee Also, por dios, que no se acaba el libro en la vida la chiquilla a este paso (?)
Siguió leyendo despacio, variando la atención entre la lectura y las palabras de Morgan a Kashya. Seguía con su plan, ¿no? En síntesis de juntar el hambre con las ganas de comer. Por otro lado había que ver lo ajena que parecía Kashya a... bueno, ¿la vida? Les decía que fueran a su cada cualquier día porque no había nadie en casa, accedía a la petición de Morgan y casi arrastrado por la morena él terminaba en el paquete. Qué cosas. No eran los planes que tenía para el fin de semana, pero mejor que ir a revolverse con las pandillas sí era, al menos no corría riesgo de que le partieran la jeta, que era casi para lo único que servían los jodidos. —¿Quieres que llevemos algo? Digo, para comer o algo así. —No iba a proponerle a Kashya aparecerse en su casa con alcohol ni nada de ese rollo.
Kashya Thornton Oh. Era la primera vez que alguien aparte de Emily iba a mi casa así que no había pensado en esos detalles, pero es cierto que quizás tenía que comprar algo de bebida y comida, ¿no? Al fin y al cabo solo tenía platos precocinados en el frigorífico. —Podéis traer lo que más os guste, sí. Levanté la vista entonces y le dirigí una mirada analítica a cada uno de ellos, acercándome un poco más después para hablarles en voz aún más baja. >>No me importa si queréis traer alcohol pero no podéis entrar a la biblioteca borrachos —sentencié, con seriedad, antes de volver a separarme. Contenido oculto Idk, she is too pure pls (?)
Siguió los movimientos de Kashya en perfecto silencio, sonriéndole encantada al recibir el papelito. Le echó un vistazo por mera inercia y se lo guardó en el bolsillo de la falda. Conque vivía sola, ¿eh? Menuda información. Sonaba a una perfecta base de reuniones... o algo así. Podía llevar a Kashya a casa, de hecho estaba segura que a su hermanita le encantaría conocer a una amiga suya que fuera... inofensiva. Pero con Maze ni de coña haría eso. Siempre había mantenido su mierda fuera. Vio a Mason de reojo en cuanto escuchó su ofrecimiento digno de un caballero inglés y cerró brevemente los ojos, como si se estuviera regodeando en una broma interna. Y es que, de hecho, lo estaba haciendo. Tan suavecito y educado, era tan divertido~ Fue entonces la última intervención de Kashya la que consiguió cambiar su eterno semblante de calmada y casi irritante diversión. Alzó las cejas, sorprendida, y se permitió una risa de lo más genuina. Intentó moderar el volumen ya que estaban en la biblioteca y eso, pero venga. Esa niña era todo un caso. Soltó un suspiro tras calmarse, arrastrando su corta melena entre los dedos sin alterar su flequillo, y acabó por deslizar la mano hasta dejarlo caer. —¿Has oído eso, Maze? —murmuró, sedosa—. Podemos llevar alcohol, qué oferta~ Soltó otra risa, esta vez por la nariz y ligeramente sardónica, y le palmeó la cabeza a Kashya. —No te preocupes, lass. No es la idea montarnos una fiesta ni nada parecido. —Retiró la mano y se echó sobre el espaldar, pensativa—. Hmm, yo puedo hornear unas galletitas. Se me da bastante bien.
No pudo evitar soltar una risa baja al comentario de Kashya sobre el alcohol y sonrió para sí cuando Morgan dijo algo al respecto también. Dios, esa chica, ¿qué tenía en la cabeza? Estaba bien que no fuese expresiva, pero pecaba de verdaderamente ingenua. ¿Qué tanto desconocía del mundo? —Sí, sí. Nada de fiestas en casa ajenas —comentó, tratando de no reír más—. Hmm, puedo pasar a comprar refrescos, o puedo llevar café para preparar si alguna le gusta. En casa a veces preparamos comida de más, no somos buenos con eso de... los cálculos, entonces tal vez lo lleve también. De alguna manera le hacía ilusión, incluso si estaba siguiendo el plan macabro de Morgan, porque hace rato no tenía amigos con quienes pasar el rato realmente y cuando los tenía no era que pudiera hablar de sus cosas tampoco, al menos no sin quedar como un raro. Así que al final se las jugaba de ser un simple fuckboy y eso no siempre servía para hacerse compañías, es decir, que no fueran para follar al menos.
Kashya Thornton Dejé que la chica colocase su mano sobre mi cabeza con una expresión de indiferencia y acabé por encogerme de hombros cuando se separó, intercalando miradas entre ambos mientras seguían hablando. ¿Galletas caseras, café y comida? A Emi le gustará saber todo eso, seguramente. —Cómo queráis. Compraré cosas también pero no prometo que os gusten, así que...
¿Nada de fiestas en casas ajenas? Giró la cabeza casi por completo hacia Mason en cuanto lo escuchó porque, por su hermana, podría jurar que ese tipo no tenía cara para decir algo así. No es que lo conociera de mucho pero su intuición no solía fallar. En cualquier caso, sólo le restaba confirmarlo. Y le gustaba tener razón. —Eh, Maze~ Igual te tenía más del tipo, ya sabes. —Se encogió de hombros, jugueteando con su propio cabello, mientras buscaba la palabra correcta—. No lo sé, ¿nocturno? ¿Parrandero? Sonrió divertida y ladeó la cabeza, echándola sobre el borde del espaldar, para verlo de costado con una inocencia casi fingida. —Quizá me equivoque, de todas formas~ Luego sacó su móvil del bolsillo de la falda y, con suavidad, lo deslizó por la mesa hacia Kashya. —Anótame tu número, podemos comprar las cosas juntas, si quieres.
Kashya Thornton Miré al chico casi al mismo tiempo que Morgan le dirigía la mirada. No era algo que fuese a demostrar o decir pero... coincidía con ella, el pelirrojo tenía toda la pinta de moverse por esos mundos. Bueno, igual que ella. Miré como la morena me extendía el móvil y la mira sin comprender, escuchando después sus palabras. ¿Ir a comprar juntas, hum? Sonaba a buena idea, sí, seguro que ella sabría mejor qué elegir. Cogí pues el aparato y registré mi número bajo mi nombre tal cual, devolviéndoselo no mucho después y volviendo a centrar mi atención en el libro. Ya... estaba todo decidido entonces, ¿no?
No separó la vista del libro mientras Morgan le hablaba, siguió leyendo y antes de responderle pasó una página. En el rostro se le había formado una sonrisa que era una mezcla extraña de inocencia y segundas intenciones, no era muy diferente de la manera en que ella lo estaba mirando. —Quizás no elegí las palabras correctas, sí —admitió mientras seguía paseando los ojos por la hoja—. Me refería a no hacer fiestas en casa de una chica que evidentemente no es de ir a ellas. Se apartó algo de cabello del rostro con un movimiento de cabeza. —Sé dónde debo comportarme y eso, ya sabes, todo zorro conoce en realidad en qué gallineros puede colarse sin que vayan a meterle un tiro en la sien. —Frunció algo el ceño al no poder entender del todo uno de los kanjis y luego continuó—. Y si me lo preguntas prefiero evitarme una cantidad importante de disparos.
Mantuvo su atención sobre Kashya mientras la albina agendaba su número, y en cuanto le devolvió el aparato, Morgan le sonrió con la ilusión de una niña pequeña. Le echó un vistazo a cómo se había agendado a sí misma y soltó una risa por la nariz que, curiosamente, no tenía nada de burlona o altiva. —Genial, Ka-chan~ —Aflojó la muñeca hacia atrás y repitió el proceso con Mason—. Tú también, niño bonito. Puede que, en ese sentido, se pareciera un poco a Bleke. Los aires de seguridad, la autoridad subyacente a la suavidad con la que hablaban, como si pidieran las cosas pero realmente no hubiera espacio a réplica. Se movían por el espacio en tanto les apeteciera, se comportaban como si fueran las dueñas del mismo pero tampoco les interesaba alardearlo. Era una posesión dada por sentada. Le prestó debida atención a lo que decía el muchacho; aún no había regresado a su libro, después de todo. Aguardó pacientemente a que dejara de hablar para observarlo un par de segundos más, sonreír y, ahora sí, recoger Demian entre sus manos. —Astuto —murmuró, aunque fue casi un susurro—. Aunque los zorros no deberían sólo fijarse en cañones de escopeta. También hay depredadores naturales, por ejemplo.
Pasó otra página, todavía tratando de encontrarle sentido al kanji a pesar de haberlo dejado pasar, y despegó la vista hasta que vio el movimiento de Morgan. Repitió el proceso de Kashya sin mayor complicación. "Aunque los zorros no deberían sólo fijarse en cañones de escopeta". —Los lobos me han mordido lo suficiente para que no me olvide de ellos tampoco —respondió regresándole el objeto, para seguir leyendo. Vaya palizas se había comido más de una vez, de verdad, directo de los lobos—. Los felinos, las serpientes, también puede que me haya llevado la patada de uno que otro herbívoro de lo más enérgico. No se nace aprendido después de todo. Contenido oculto que me torettice y siga con la wolf shit dise
Soltó una risa por la nariz, algo burlona. No se nace aprendido, no, pero lo de ese tipo ya parecía rayar lo suicida o directamente estúpido. Eh, se lo había figurado más... ¿precavido, quizá? Puede que fuera más dueño de sus impulsos de lo que aparentaba; como los tiburones al oler la sangre. O un simple perro en celo. —Tendrás siete vidas, entonces —soltó, con aires algo distraídos—. Lucky you~ Prefirió entonces abocarse a su lectura y dejar de perturbar la paz de la biblioteca, aunque la mitad de esa idea fuera absoluta mierda. ¿Qué podía importarle a ella, que no fuera su hermanita o ella misma? Nada. Nada en el puto mundo. Contenido oculto sabroso relleno nunca me di cuenta de aclararlo pero recién mientras me pegaba una duchita me di cuenta. Morgan está leyendo Demian en la versión en inglés porque, bueno, se imaginan leer Demian en japonés???? me pego un tiro. Además lleva poquitos años en Japón Nada, eso JAJAJA
Emily Hodges Asentí con la cabeza, emocionada, al escucharlo. Realmente era el sitio ideal para pasar la tarde y descansar de las clases antes de volver de nuevo a la rutina, que en mi caso no siempre era de lo más agradable. —También está Suzumiya-senpai y una chica de primero rubia, no sé si te lo dije. Así que de verdad es un ambiente muy tranquilo~ Así, no tardamos en llegar a la Biblioteca y tomé la delantera, abriendo la puerta para entrar y dejándola así hasta que el chico siguió mis pasos. Busqué con la mirada al club, no fue especialmente difícil encontrarlo, y nos acercamos. >>Senpais —saludé, con una inclinación, en cuanto alcanzamos la mesa, y en cuanto me incorporé intercalé una mirada entre Morgan y Kashya—. ¿Habéis acabado? Contenido oculto Gabi esta mañana: que ganas de aventarme un post así random de relleno Gabi ahora: que rico emi va a conocer a morgan mejor 7u7(?