Amor de Antaño [SasuHina - NejiTen]

Re: Amor de Antaño [SasuHina - NejiTen]

¡Ay! Lamento, lamento, lamento, lamento hacerles esperar. Pero, ya no tendrán que hacerlo más, aquí está la conti tan ansiada.

Capítulo V.Ira

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Ino escrbía dulcemente en su diario de vida, con un dulce e hipnotizante sonrisa. Nunca antes había estado tan feliz por algo. Nunca antes había estado enamorada de verdad. Enamorada de un pobre.

Escuchó el retumbar de los pasos de su hermana Sakura. Cerró rápidamente su libro de vida y lo escondió tras ella, procurando que su hermana no lo notase.

La pelirrosa se acercó a ella, estirando las arrugas de su vestido color lila. Se percató de los nervios de la rubia, sabía que ocultaba algo. A ella no le podía mentir, la conocía demasiado bien.

-¿Qué ocultas?-Preguntó con cautela, tomando el objeto que escondía su hermana-Vaya, un diario... ¡Qué patético!

Ino frunció el ceño enojada, viendo cómo la muchacha hojeaba el pequeño cuaderno y se reía tontamente.

-"Sai es tan tierno, dulce..."-Imitó con voz infantil a la rubia, riendo cómo desquiciada.

Lanzó el diario a la chimenea, excitando el fuego que yacía ardiendo entre la leña. Ino miraba con lágrimas en sus ojos el libro donde guardaba sus más oscuros secretos, y sus más profundas ilusiones.

-¡Eres un mounstro!-Le gritó enojada y adolorida a la pelirrosa.

Sintió cómo la mano de su hermana se estampaba en su rostro. Las lágrimas descendieron por sus mejillas, calmando el ardor que la bofetada dejó. Pasó su mano con delicadeza por el lugar, volteando luego a ver a la pelirrosa, con aún su mano extendida. Y ese semblante enfurecido que ella tanto temía.

-Tú no te puedes enamorar, Ino...-Habló la muchacha de ojos color esmeralda, tomando a la rubia por los cabellos-¡Y menos de un pobre!

-¡No sabes lo que dices, Sakura!...-Ino se soltó del agarre, harta de las superficialidades de la chica-Jamás he sentido lo que siento ahora... ¡Ningún otro hombre me enseñó a amar cómo Sai!

-¡Cállate de una vez, pérfida!-Sentenció la pelirrosa, amenazando con golpear de nuevo a la rubia-Pones en riesgo el nombre de nuestra familia.

-¡En riesgo lo pones tú! Insinuándole a cuánto hombre se te pase por en frente-La rubia lo soltó, sin importar cuánto daño le hiciese su hermana. Estaba harta de hacer lo que ella quisera.

Sakura sentía la ira invadir su cuerpo, ¡cómo osaba hablar así de ella! Sus manos atraparon el débil cuello de su hermana, estaba cegada por la ira.

Los gritos alertaron a los empleados de que algo sucedía. Mucho corrieron en dirección a la habitación de donde provenían los alardidos de dolor.

Encontraron a las dos muchachas en una disputa física; Ino intentaba separar las manos de su hermana de su cuello, ya cortaban su respiración. Los recién llegados intentaron separar a las muchachas. Hasta que llegó la madre de ambas.

-¡¿Qué es lo que pasa aquí?!-Preguntó severa al ver a sus dos hijas.

Ino se desmayó por la falta de aire, mientras Sakura la veía con reproche. Sus ojos estaban llenos de lágrimas, que furiosas amenazaban con salir a flote, acabando con la tranquilidad de sus mejillas enrojecidas de enojo.

-¿Qué sucedió, Sakura?-Volvió a inquirir la rubia de curvas pronunciadas.

-Ya, qué más dá...-Sentenció con tono de voz distante, le dolía lo que hizo con su hermana. Más su furia era incontenible en ese momento.

Sakura se marchó con paso rápido, debía salir de allí a tomar aire. Estaba arrepentida de sus acciones impulsivas. Debía aprender a controlar su ira.

......

Neji y Tenten caminaban despacio por los verdes jardínes de la mansión Hyuga, ambos sin decir nada. Solo disfrutando de la compañía que ambos se proporcionaban sin mencionar palabra alguna.

La castaña de ojos cacao deseaba decir algo, romper el hielo. Más temía lo que el Hyuga diría, muy bien conocía su fama de gélido y frío, aún con las damas. Sin embargo, si fuese sutil, y no digese algo imprudente; tal vez, solo tal vez, el quisiera hablar con ella.

-Uhmm... ¿Neji?-Preguntó, vacilando entre decirle o no-¿Cómo has estado con el vals?

-Pues, ahora que lo mencionas, necesitaré otra clase...-Confirmó, cruzando sus brazos en el pecho-¿Qué tal en tu día libre?

-¡Ese día visitaré a Kiba!

-Perfecto, lo visitarás otro día.

Tenten golpeó delicadamente el hombro de Neji, reprochándole por su comportamiento egoísta y celoso. ¡Muy celoso! Sin embargo, no podía negar que no le gustase que el guapo Hyuga la celase.

-Está bien...-Aceptó por fin la castaña- ¡Pero me debes un día libre, tacaño!

La chica rió, y el muchacho la veía, con ganas de reír, más no lo hizo para no arruinar aquella imagen de chico gélido.
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