Long-fic de Inuyasha - Amigos de la infancia; amor de adolescentes

Capitulo 14.- Nuestra vida juntos.

Áyame estaba mejorando día a día con sus visitas al psicólogo que iba por las tardes. Lo curiosos fue que Hirotaru se lo recomendó, ya que cuando Ayame le pidió que sea el que le de terapia, ya que lo conocía desde antes y le tenía confianza. Pero Hirotaru le dijo que no podía, ya que como ya la conocía por ser su alumna y amiga de su hermana, se le iba a dificultar darle terapia, pero le recomendó algunos buenos psicólogos que el ya conocía, a lo cual Ayame accedió.

-¿Cómo te sientes con tus idas al psicólogo Ayame?.- le pregunta Sango curiosa, cuando estaban en los descansos.

-Mejor, ya siento que supero lo que paso y lo mejor es que cuento con el apoyo de todos ustedes gracias.- dijo Ayame muy contenta.

-Para eso son los amigos.-le dice Kagome, mientras ella estaba recargada de Inuyasha y siendo abrazada por él.

-Así es, los buenos amigos siempre estarán en las buenas y las malas.- dijo Miroku abrazando a Sango cariñosamente, pero en eso su mano se pasa a tocar donde no debe, recibiendo un golpe habitual de su novia.

-¿Porque me pegas mi Sanguito?.- dijo Miroku dolido del golpe.

-Aunque seamos novios, no significa que te puedes tomar ciertas libertades.-dijo Sango molesta, puede que amara a Miroku, pero sus mañas las odiaba.

-Ay Miroku, ni siendo novio de ella, dejas tus mañas pervertidas.- dijo Inuyasha desaprobando la actitud de su amigo.

-No puedo evitarlo, amo demasiado a mi Sanguito y quiero demostrárselo.-

-Pero hay otras formas de demostrar tu cariñó hacia ella, unas mas educadas.- le dice Kagome riéndose de la desgracia de Miroku.

/

-Inuno, en mi empresa estamos buscando jefe de producción, ¿quisieras tomar el puesto?.- le pregunta Reiko a su viejo amigo, cuando ambos estaban en un restaurante comiendo, solo estaban ellos nada más, Reiko solo lo invito a él para hablar de algo privado. Inuno casi se atraganta cuando escucho eso.

-¿Hablas en serio Reiko?.-

-Muy en serio amigo, tu mejor que nadie y tu esposa, sabe coser y confeccionar ropa, ya he visto y comprobado como lo haces y quiero eso en mi empresa. ¿Qué dices entonces?.-le dice Reiko feliz y sincero.

-No lo sé, es una gran sorpresa.-

-Lo sé, la ventaja es que puedes sacar tu genio creativo, además así puedes ganar lo suficiente para la universidad de Inuyasha, que ya pronto se gradúa del bachillerato al igual que mi hija, y también formarle un buen futuro escolar a Shippo que ya está creciendo.- le dice Reiko tratando de convencerlo con esas ventajas. El anterior jefe de producción fue despedido por tratar de hacerse pasar por el dueño de la empresa, solo para sacar provecho en unas cosas y situaciones, cuando el padre de Kagome se enteró lo despidió y lo denuncio a la policía, causando su encarcelamiento inmediato.

-En ese caso acepto, te prometo como buen amigo que seré puntual, hare bien mi trabajo y lo tomare en serio. Pero claro es que porque somos amigos no debo tomar ventaja de eso, en la empresa serás mi jefe y eso lo respetare.- le dice Inuno con sabiduría.

-Me alegra que hayas aceptado; y además lo que dices es cierto, en la empresa tendremos trato formal como empleado y jefe, pero ahí afuera seremos los amigos que fuimos desde bachillerato.- dijo Reiko estirando la mano para cerrar el trato, lo cual Inuno acepta acercando la suya y dando un apretón de manos.

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-¿Qué sucedió qué?.-pregunta Izayoi asombrada cuando su esposo le dijo la noticia.

-Como escuchaste, Reiko me ofreció el puesto de jefe de producción de su empresa, y este lunes empiezo.-

-Eso es maravilloso, al fin el mundo sabrá de tu genio creativo.-dijo Izayoi contenta por su marido, lo abraza y besa, en eso siente que Shippo, quien jugaba en una esquina del sofá con sus peluches gatea a ellos.

-¿Escuchaste pequeño?, papa tiene nuevo trabajo.-dijo Izayoi a Shippo, quien se ríe y mueve inquieto en brazos de su mama.

-Papa.- dijo Shippo de repente, sorprendiendo a ambos padres. Esa era su primera palabra en los once meses que tiene de vida.

-Dilo de nuevo Shippo.- dijo Izayoi sorprendida.

-Mama.-dice él bebe kitsune de repente.

-Sus primeras palabras.- dijo Inuno contento por su pequeño hijo adoptivo. En ese momento se abre la puerta, y era Sesshoumaru quien llego de una cita con Rin, y ella lo acompaño a su casa.

-Hola padre, Izayoi.-dijo Ssshoumaru con su carácter frio de siempre, aunque cambio un poco desde que conoció a Rin. Ambos se sientan en un sofá cerca de sus padres.

-Hola hijo, Rin.-

-Hola señor y señora Taisho, ¿Cómo estas pequeño?.-dijo Rin con ternura al ver al pequeño bebe, ella de inmediato lo carga y juega con él. Sesshoumaru aunque no lo admita abiertamente, adoraba ver eso en Rin y pensaba que sería una excelente madre para sus futuros cachorros, como él llamaba a los bebes.

-Ya empezó a hablar.- dijo Izayoi feliz.

-A ver, di mama.- dijo Rin mientras jugaba con el bebe.

-Aome, Yasha.-dijo Shippo de repente poniéndose inquieto mirando la puerta, sorprendiendo a todos, pero Sesshoumaru e Inuno olfatean y se dan cuenta que Inuyasha había llegado junto con Kagome.

-Hola mama, papa, Rin y el iceberg.-dijo Inuyasha al entrar con su novia, pero al ver a su medio hermano le dijo ese apodo de forma burlona.

-Hola hibrido.-dijo Sesshoumaru frio, devolviéndole el chiste.

-Hola a todos.-dijo Kagome mientras saludaba a todos, cuando Shippo la ve salta a sus brazos.

-Aome.- dijo el pequeño feliz, le decía a si ya que apenas empezó a hablar.

-Ya habla.-

-A ver enano di mi nombre.- dijo Inuyasha sentándose a lado de Kagome, quien tenía a Shippo.

-Pellito.-dijo Shippo riéndose queriendo decir "perrito", a Inuyasha no le hizo gracia, pero Sesshoumaru se atacó de la risa.

-Bien dicho Shippo.-dijo Sesshoumaru frio riéndose.

-Sesshoumaru.- dijo Rin en forma de regaño.

-Condenado zorrito travieso.- dijo Inuyasha molesto.

-Calma hijo, apenas está empezando a hablar.- dijo Inuno calmado.

En ese momento Inuyasha y Sesshoumaru van a la cocina para preparar la comida, ya que ese día ellos quisieron hacer la cena, nada más por querer impresionar a sus novias, pero como la cocina no era grande, sino mediana, peleaban por espacio.

-Hazte a un lado inútil.- decía Inuyasha empujando a su hermano, cuando quería agarrar una sartén para preparar carne.

-Quítate tú imbécil.- le dijo Sesshoumaru, también empujándolo para agarrar una olla y hacer ramen. Desde la sala se escuchaba como ambos hermanos discutían por territorio en la cocina, Inuno se dirige para allá, para intentar calmar la situación con sus hijos, y así puedan cocinar en paz.

-Recuerdo que cuando empecé a salir con Inuno, el me invitaba a su casa y también me preparaba la comida.-dijo Izayoi al recordar esos días con nostalgia.

-¿De veras?.- pregunta Rin mientras que Kagome jugaba con Shippo, ella le agarraba sus manitas con cuidado, mientras él hacia el intento de caminar.

-Así es, aunque con el paso del tiempo mejoro mucho, es que antes no era un as en la cocina, a cada rato se le quemaba la sopa.-dijo Izayoi en voz baja a las chicas mientras se reían.

-Ya te oí Izayoi.-dijo Inuno desde la cocina reprochándole; Izayoi se ríe pues no se acordó del fino oído de su marido.

-Pero aun así te amo.- le dice Izayoi en voz alta. Inuno sale para decir que ya estaba lista la cena, se sorprende al ver que Shippo ya estaba andando.

-¿Ya viste eso querida? El pequeño está empezando a dar sus primeros pasos tambien.- dice Inuno a su esposa, ella voltea y se sorprende de que Shippo ya puede andar, no se había fijado antes.

-Ve con papa pequeño.- le dice Kagome mientras lo soltaba con cuidado; Shippo camina algo torpe hacia Inuno, quien se agacho y le extendió los brazos para recibirlo.

-Papi.- dijo Shippo cuando llego con Inuno, quien lo abraza y lo lanza con cuidado arriba en los aires haciendo que el pequeño ría.

-Ten cuidado Inuno.-dijo Izayoi asustada.

-No te preocupes mujer, se está divirtiendo.- dijo Inuno despreocupado mientras jugaba con su hijo; así antes jugaba con Sesshoumaru e Inuyasha de bebes; y también su primera esposa le reclamaba eso cuando jugaba así con Sesshoumaru bebe. Cuando nació su hijo Inuyasha, Izayoi siempre le reclamaba lo mismo por jugar así con el bebe o con otros bebes como Hirotaru o Kagome. Pasa una cena tranquila todos juntos, ambos hermanos cocinaron carne asada, ensalada cesar y sopa ramen, haciendo un banquete en total para impresionar a sus novias

/

Un día Reiko propuso a la familia Taisho y a su propia familia ir de paseo, no decía el lugar a la familia de su amigo púes quería que fuera sorpresa, su familia ya lo sabía, pero se mantenían callados. Cuando se detienen, la familia Taisho se sorprende de estar en uno de los residenciales más grandes y lujosos de Tokio, caminan un poco y se detienen en una casa de tres pisos la cual tenía un garaje, patio trasero enorme y un gran jardín.

-¿Les gusta su nueva casa?.- pregunta Reiko sonriente.

-¿Hablas en serio?.- dijo Inuno sorprendido.

-Así es, mi nuevo jefe de producción debe tener una buena casa para acomodar a su familia y vivir a gusto.-

-Pero es demasiado.-

-Deja de regatear y veámosla por dentro.- dijo Reiko arrastrándolo junto con los demás adentro de la nueva casa. Adentro la casa tenía una enorme sala, cuarto de comedor, una enorme cocina; además contaba con cinco habitaciones con su propio baño, además de un estudio y gimnasio.

-¿Tu lo sabías peque?.- dijo Inuyasha abrazando a su novia mientras veía asombrado la casa que su suegro compro para su familia y el.

-Así es, entre todos escogimos la casa, Hirotaru se encargó del diseño de la cocina, mama del diseño de la sala y yo del jardín, mientras que papa acomodaba el gimnasio. Souta en cambio diseño el cuarto de videojuegos.- dijo Kagome feliz, Hirotaru lo arrastra hacia ese último cuarto, donde estaban muchos videojuegos y consolas listas para usarse. Solo tenía cojines en el suelo y sillones como muebles para descansar.

/

Estaban todos descansando en el jardín de la nueva casa de los Taisho; Kagome y Souta estaban jugando guerra de pulgares, y como Kagome era mayor, ella le estaba ganando. Mientras que Hirotaru y Sesshoumaru estaban jugando ajedrez; e Inuyasha jugaba con Shippo.

-Souta, no te esfuerces, si casi siempre te gano.- le dice Kagome ganándole de nuevo a Souta.

-No se vale si haces trampa.- dijo Souta reprochándole, es que Kagome siempre usaba otro dedo que no es el pulgar para aplastar el pulgar de Souta.

-¿Recuerdas como jugábamos en la prepa Inuno, en que nos agarrábamos desde el dedo de en medio y debíamos dar vuelta contraria?.- dijo Reiko al ver como sus dos hijos menores jugaban.

-Así, a veces nos lastimábamos horrible, y no se esperaba el regaño de nuestras madres.- dijo Inuno riendo; cuando ellos eran jóvenes eran muy valientes y les encantaban los retos, sobre todo si se trataba de deportes, vencidas o lo que sea; aunque no siempre ganaban.

-Jejeje, así es. ¿Te acuerdas cuando teníamos diecisiete y estábamos jugando futbol americano?; yo me torcí tanto el cuello que no lo podía mover y tuve que ir así a mi casa?.- dijo Reiko recordando eso.

Flash back

Estaban un par de demonios jóvenes de diecisiete años; eran Reiko e Inuno, que estaban jugando fútbol americano con otros muchachos humanos y bestias aunque estaban jugando sin protección debida; pero en eso alguien golpea brusco a Reiko lastimando su cuello muy feo; para un humano eso sería la muerte, pero como era un demonio, solo fue una simple torcedura.

[FONT= ]-Lo siento amigo.-[FONT= ] dijo este muchacho muy preocupado.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-No te preocupes; mejor por hoy suspendamos el juego.-[FONT= ] dijo Reiko levantándose con ayuda de Inuno.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Reiko, es mejor que te acompañe a tu casa; no puedes caminar así con ese cuello torcido.-[FONT= ] le dice Inuno mientras apoyaba el brazo de su amigo en el para poder guiarlo.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Gracias amigo; lo que me preocupa es como se pondrá mi madre.-[FONT= ] dijo Reiko mientras era guiado a su casa. Llegan y los recibe la madre de Reiko; Elsy Higurashi; su regaño no se hizo esperar.[/FONT][/FONT]

-¿[FONT= ]Ya ves lo que te pasa tonto por no tener precauciones necesarias?; como uno de mis hijos mayores debes dar buen ejemplo a tus hermanitos.-[FONT= ] dijo Elsy mientras le acomodaba el cuello de su hijo; mientras que Inuno reía por la cara de su amigo; él sabía que su madre no era de esas mujeres que consolaban exageradamente a sus hijos; sino de las que reganaban para que aprendan, aunque no por eso dejaba de preocuparse por ellos y atenderlo. En ese momento ella le pone una toalla atrás de la cabeza de su hijo y con un movimiento estratégico, la mueve rápido y le acomoda el cuello de Reiko.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Eso dolió mama.-[FONT= ] se queja Reiko.[/FONT][/FONT]

-¿[FONT= ]Entonces para que andas como tarado jugando a arriesgarte?.-[FONT= ] le regaña de nuevo su madre mientras atendía a un hijo pequeño que tenía hambre. Reiko tenía siete hermanos y hermanas y con el sumaban ocho; él era el cuarto hijo.[/FONT][/FONT]

-¿[FONT= ]Te quedas a comer Inuno?.-[FONT= ] le ofrece Elsy amablemente.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Gracias señora Higurashi.-[FONT= ] le dice Inuno mientras se acomodaba en la amplia mesa.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Hermano Reiko; ¿[FONT= ]jugamos a los izquierdasos?.- [/FONT][FONT= ]le pregunta de repente una niña de diez años a Reiko.[/FONT][/FONT]

-Después de comer Ranko.-

[FONT= ]-Miedoso; lo dices porque siempre te gano.- [FONT= ]dijo Ranko burlándose de Reiko.[/FONT][/FONT]

-¿[FONT= ]Cómo se juega eso?.-[FONT= ] le pregunta Inuno curioso; mientras Elsy le pasaba un plato con sopa.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-No querrás saber amigo.-[FONT= ] le dice Reiko.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Así.-[FONT= ] dijo Ranko mientras que con su brazo izquierdo le pegaba a Inuno fuertemente.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Te lo dije.-[FONT= ] se burla su amigo mientras veía a Inuno quejarse del dolor, podía ser pequeña esa niña pero pegaba fuerte.[/FONT][/FONT]

[FONT= ]-Ranko, compórtate con la visita.-[FONT= ] dijo Elsy de repente.[/FONT][/FONT]

-Si mama.-

-¿[FONT= ]Mama, puedo comer dulces?.-[FONT= ] pregunta Edianka, el último de los hermanos de Reiko, quien contaba con nueve años.[/FONT][/FONT]

-Después de comer Edianka.-

Fin de flash back

-¿En serio así era mi abuela Elsy?; siempre me la imagine de la otra forma.- le dice Kagome a su padre bastante sorprendida.

-Así es, ella no era de esas madres que decían "ay mi pequeño, como le duele"; ella era más bien "ande tarado, ya ves lo que te pasa".-

-Jaja, pero como te regañaba cuando te pasaba algo, o a tus hermanos.- se burla Inuno de él; él ha sido testigo de los regaños de Elsy a Reiko.

-Tú tampoco te salvas Inuno; que tu madre también era igual como la mía.- le contraataca Reiko de repente. En eso suena el teléfono de Reiko, era un mensaje de su hermana menor Ranko, en donde le decía que su bebe ya nacio y le manda la foto.

-¿Quién es esa bebe?.- dijo Inuno al ver la foto que su amigo mostraba.

-Es la nueva bebe de mi hermana Ranko; ¿recuerdas la que le gustaba jugar izquierdasos?.- dijo Reiko mientras le prestaba su celular a sus hijos para que vean la foto.

-Ya recordé; ¿ cómo se siente?.-

-Dice que bien; la última vez que la vi hace doce meses; estaba muy bien dando lucha en la vida, pero eso si todavía le gusta darme con su brazo izquierdo, pega igual que antes.-

/

El tiempo pasaba; la relación de ambos híbridos iba muy bien; y el nuevo trabajo de Inuno le favorecía gratamente; hasta que logro juntar una fortuna por su esfuerzo. El tiempo pasaba hasta convertirse en cinco años. Inuyasha y Kagome se graduaron de la universidad, el de administrador de empresas y ella de diseñadora. Sesshoumaru se casó con Rin y tenían un niño de tres años llamado Ryu. El hermano mayor de Kagome también se había casado con Jinzu desde hace tiempo y tenían una hija llamada Jinzu de dos años. Kouga seguía preso por su delito de hace tiempo, mientras que Ayame hacia planes para contraer nupcias con Osaku.

En cuanto ambos híbridos de graduaron de la universidad; se casaron. Ambos padres Reiko e Inuno les pagaron la boda, aun cuando sus hijos les habían dicho que no era necesario, pero ellos insistieron, ya que se sentían orgullosos de verlos unir sus vidas. Hasta les compraron una buena casa como regalo de bodas.

/

-Inuyasha tocan, iré a abrir.- dijo Kagome, quien tocaba su abultado vientre de siete meses, estaba esperando una niña. Ella y su esposo trabajaban en la empresa de su padre; solo que ella tuvo que pedir baja por maternidad hace dos meses; pero fue más que nada por insistencia de su padre y esposo; quienes decían que debía descansar lo más posible para que nazca bien la bebe. Su padre le permitió volver hasta que su nieta tuviera tres meses de nacida. Abre la puerta y resultan ser sus padres y suegros junto con Shippo, Souta había salido con sus amigos.

-Hola a todos, pasen.- dijo Kagome mientras los dejaba entrar.

-Hola hija, que haces levantada que deberías descansar por bien tuyo y de mi nieta.- dijo Reiko al hacerla sentarse en un sofá; cerca de el e Inuno; quienes eran los que más regalos le daban a su no nacida nieta. La verdad es que decían que esa bebe era el fruto de lo que ellos hicieron, al comprometer a sus hijos de bebes hace veintitrés años.

-Papa no exageres estoy bien.- dijo Kagome mientras dejaba que su padre y suegro toquen su barriga para sentir a su nieta. Aunque ellos dos eran abuelos consentidores con los nietos que ya tenían por parte de Sesshoumaru y Hirotaru; se ponían un poco más alegres con esta nieta de parte de Inuyasha y Kagome, porque era la nieta que tenían en común; algo que querían desde hace tiempo.

-Eso siempre dices linda.- dijo Inuyasha al aparecer de repente, después de saludar a su familia se sienta a un lado de su esposa.

-Pero es verdad.-

-¿Cómo está mi sobrinita?.- dijo Shippo de cinco años al tocar la barriga de Kagome.

-Dile a tu mami que debe descansar por ti pequeña.- dijo Reiko a su vientre mientras trataba de sentir a su nieta.

-¿Mama, ya vez lo exagerado que es papa?.-

-Lo se hija, pero entiende que se preocupa por ti y mi nieta.- le dice Sayo muy tranquila.

-Hola pequeñita, soy el abuelo Inuno te traje estos juguetes que te encantaran.- dijo Inuno al acercarse a la barriga de Kagome y hablarle a su nieta.

-¿Te gustan bebe?.- dijo Shippo al hacer sonar una sonaja cerca del vientre de Kagome, haciendo que la bebe se moviera.

-Se movió papi.-

-Eso pasa cuando escucha un ruido cerca enano.- dijo Inuyasha al hacerle cosquillas a Shippo.

-Eso es bueno pequeño, porque ella dice que está viva y le gusta su juguete.- le dice Inuno muy tranquilo.

-No hay duda que estos dos serán unos abuelos consentidores con esta pequeña.- dijo Izayoi riendo mientras sacaba unas ropitas de bebe para su nieta.

-Yo creo que tú también serás así mama.- le dice Inuyasha al ver la ropita que trajo su madre y mostrárselas a su esposa.

-Que bonitas prendas, que buen gusto tiene señora Izayoi.- dijo Kagome maravillada.

-Lo sé, pero quien las escogió fue Inuno.-

-Mira hija, vi estos bonitos vestidos de maternidad para ti.- le dice Sayo mientras sacaba tres vestidos de maternidad que estaban a la moda.

-Son hermosos mama.- dijo Kagome al ver uno por uno.

-¿Porque no te los mides?.- dijo Sayo al ir a la habitación de su hija con ella e Izayoi.

Todos los hombres estaban preparando la cena, mientras que las mujeres le median los vestidos a Kagome para ver si le quedaban. En eso son llamadas para cenar.

-Primero hay que brindar por la pronta llegada de nuestra nieta.- dicen Inuno y Reiko al ponerse de pie, todos lo siguen.

-¿Cuándo nace la bebe?.- pregunta Shippo inocentemente.

-En dos meses más Shippo.- le responde Inuyasha.

-Papi, hermano, ¿cómo se hacen los bebes?.- pregunta de nuevo Shippo poniéndolos nerviosos; mientras que las mujeres reían, tenían que ser hombres.

-Pues llega una cigüeña a preguntar a las parejas si quieren un bebe; si es así, ella se va y regresa con él bebe solicitado; pero como esta chiquito lo pone en la barriga de la mama para que pueda crecer.- explica Kagome de repente, dejando satisfecho a Shippo y que su suegro y esposo respiren de alivio.

-¿Y porque se pusieron tan nerviosos por eso; no era fácil decirme lo que Kagome me dijo?.- dijo Shippo cruzándose de brazos, haciendo que se rían, era pequeño pero bastante directo.

-¿Y cómo nombraran a mi nieta?.- pregunta Izayoi.

-Todavía no decidimos bien el nombre; estamos entre Sakura o Akari.- le contesta Kagome mientras tocaba su vientre.

-Pensamos en la posibilidad de ponerle los dos nombres.- dijo Inuyasha al acariciar la barriga de su esposa.

-Ambos son hermosos para mi nietecita.- dijo Reiko feliz.

/

Ya había llegado el día del nacimiento de la bebe de ambos híbridos, Kagome estaba en la sala de parto. Inuyasha estaba en la sala de espera con su familia, estaba caminando de un lado a otro nervioso por su esposa y bebe.

-Inuyasha siéntate y cálmate de una vez.- le dice su padre al verlo nervioso.

-¿No ves que me siento nervioso papa?.-

-Sé que se siente eso, pero Kagome es mitad bestia, estará bien al igual que tu hija.- dijo Reiko apoyando a su amigo.

-Amigo; mi hermana jamás se deja vencer, y esta no será la excepción.- dijo Souta que ya tenía catorce años.

-¿Recuerdas cielo, cuando Jinzu nació y como te pusiste?.- dijo Jinzu a Hirotaru riendo, mientras que su hija jugaba con Ryu.

-¿Esposo de la señora Taisho Higurashi?.- dijo un médico de pronto.

-Soy yo.- dijo Inuyasha de repente; entra a la sala donde estaba su esposa internada. Entra y ve que Kagome sostenía un bulto rosa que se movía y lloraba, se acerca y ve a su bebita; era hermosa y se parecía a ambos; tenía el cabello negro con orejitas de perro blancas como su padre y la piel blanca de su madre.

-Di hola papi pequeña.- dijo Kagome a su bebe mientras le movía su manita como saludo, mientras era besada por Inuyasha.

-Hola pequeña soy papa.- dijo Inuyasha tiernamente al cargar a su bebe; la bebe en cuanto escucho a su papa deja de llorar y abre sus ojos; los cuales eran dorados con toque de azul.

-Eres hermosa como tu mama.-

-No; es hermosa como su papa.-

-Más bien se parece a los dos.- dijo Sayo al entrar con los demás a la habitación para conocer a la nueva bebe. Reiko fue el primero en cargar a la bebe.

-¿Cómo se llama la pequeña nieta?.- pregunta Izayoi.

-Se llamara Akari Sakura.- dijo Inuyasha orgulloso.

-Hola princesita soy el abuelo Reiko, y te consentiré mucho como lo hago con tu primita Jinzu.- dijo Reiko al cargar a su nieta.

-¿Porque papa y el señor Inuno no pelearon para ver quien cargaba primero a mi pequeña?.- pregunta Kagome sorprendida, al igual que su esposo.

-Es que hicieron un juego para ver quien la cargaba primero y el gano.- le explica Hirotaru tranquilamente. En eso Reiko le pasa la bebe a Inuno su otro abuelo, mientras se dirigía con su hija.

-Hija; quiero decirte que estoy orgulloso de lo que has logrado hasta ahora; jamás te dejas vencer por nada y de seguro serás una buena madre; quiero que sepas que siempre serás mi pequeñita aunque ya seas mama.- dijo Reiko al besar la cabeza de Kagome.

-Hola pequeña Akari; soy el abuelo Inuno.- dijo Inuno al cargar a su nieta, mientras que ella lo miraba y sonreía.

-¿Puedo verla papi?.- dijo Shippo al acercarse.

-Claro.- dijo Inuno al poner a Shippo en una pierna con cuidado de no lastimar a la bebe; y en eso con cuidado la acerca para que el pequeño la vea.

-Se parece a Kagome.- dijo Shippo.

-Lo se enano, es lo que le digo a ella,- dijo Inuyasha al apoyar a su hermanito.

-Lo que sigue en nuestro futuro ¿que será?.- pregunta Kagome al ver a su bebe y a su esposo.

-Eso no importa mucho, mientras estemos juntos venceremos cada obstáculo que se nos interponga.- dijo Inuyasha al besarla.

-Aquí se escribió en este tiempo una gran historia que tiene un buen futuro; dos amigos conocidos desde bebes que al crecer se enamoraron; ustedes son "Amigos de la infancia; amor de adolescentes".- dijo Sayo mientras cargaba a su nieta y veía a su hija y yerno. No importaba que pasara, todo se iba a poder vencer.

FIN DE LA HISTORIA

POR FIN PUDE ACABAR ESTA HISTORIA QUE ME LLEVO MUCHO TIEMPO; DEBO AGRADECERLES CHICAS POR TODO EL APOYO Y ANIMOS QUE ME HAN DADO. LES PROMETO QUE SEGUIRE PUBLICANDO EN MI OTRA HISTORIA Y EN LAS FUTURAS QUE TENGO PLANEADAS. ESPERO TODO SU APOYO Y COMPRENSION QUE ME HAN DADO EN ESTE TIEMPO Y EN EL FUTURO; CUIDENSE MUCHO.

 

Capitulo15.- Epilogo.-

-Ya estás listo Inuyasha?.- pregunta Kagome, mientras vestía a su bebita de dos meses, poniéndole un vestidito rosa y zapatitos blancos. Su cabellito negro se lo arreglo, poniéndole un broche en medio de sus orejitas blancas de perro.

-Ya estoy listo Kagome. Y Akari esta lista?.- pregunta Inuyasha al entrar, vestido de forma casual; dejándose el cabello plateado suelto, mostrando sus orejas caninas.

-Claro.- dijo Kagome, mostrándole a su bebe, quien solo sonríe a su padre.

-Estas lista para celebrar el cumpleaños de tu abuelo Reiko, mi princesa?.- dice Inuyasha tiernamente al cargar a su hijita, quien seguía soltando carcajadas.

-Me parece que sí. Y el regalo de mi padre?.- pregunta Kagome al acomodar la bolsa de bebes de Akari.

-Lo puse en la bolsa de Akari. Ya vámonos linda.- dice Inuyasha al besarla. Se van a su auto para dirigirse a la mansión Higurashi, donde se celebraba el cumpleaños número cincuenta de Reiko. Llegan a la mansión, donde estaba un festejo a lo grande en el patio trasero.

-Qué bueno que llegan hija.- dijo Sayo al ver a su hija, nieta y nuero. Akari estaba en un cangurito que Inuyasha cargaba; de forma que estaba viendo de frente a todos.

-Hola mama.- saluda Kagome a su madre.

-Hola señora Higurashi.- dice Inuyasha yendo con cuidado de no lastimar a su bebe.

-Hola Akari, vienes a felicitar a tu abuelito?.- dice Sayo tiernamente a su nieta, quien le dirige una sonrisa a su abuela materna.

-Y papa?.-
-Atrás en el patio, con los padres de Inuyasha.- informa Sayo al dirigirse allá con ellos.

-Feliz cumpleaños papa.- dice Kagome al abrazar a su padre.

-Me alegra que hayan llegado Kagome.- dice Reiko feliz de ver a su hija y nuero.

-Feliz cumpleaños señor Higurashi, esperamos que viva unos años más.- dice Inuyasha al felicitar a su suegro.

-Hijo, somos demonios. Por supuesto que viviremos mucho tiempo.- dice Inuno riendo, estando a lado de Izayoi y Shippo en sus piernas.

-Creo que eso se le olvido, papi.- dice Shippo riendo, mientras comía una paleta de dulce.

-Y como sigue mi nieta Akari?.- dice Reiko al cargar a Akari, quien tenía una bolsa de regalo en sus manitas; la cual le dio su madre. -Para mí; princesita?.- pregunta Reiko al abrir la bolsa, que resultó ser una pluma fina, de las mejores marcas para oficina.

-Sabemos que le encantan las plumas. Espero que le agrade.- dijo Inuyasha al estar sentado cerca de ahí. Reiko estaba fascinado con la pluma.

-A ver amigo; déjame cargar a mi nietecita.- dice Inuno al estirar sus brazos hacia Akari. Reiko se la pasa con cuidado a Inuno.

-Cada vez esta pequeña se parece más a Inuyasha.- dice Izayoi al ver a Akari siendo mimada por Inuno.

-Pero solo de las orejas mami.- dice Shippo al hacerle cosquillitas a su sobrina. En eso se transforma en Akari.

-Ya puedes transformarte al fin, enano. Pero te falta entrenar más.- dice Inuyasha burlón, al ver a Shippo transformado en su bebe; pero aún seguía mostrando su colita de zorro.

-No molestes, estoy aprendiendo.- dice Shippo cruzándose de brazos, al regresar a su forma original.

-Feliz cumpleaños, papa.- dice Hirotaru al llegar con su esposa e hija; quien de inmediato abraza a su abuelo.

-Abuelito.-dice la pequeña Jinzu de dos años. Era muy parecida a su padre y tenía orejitas caninas como el, pero tenía los ojos verde claros de su madre. De inmediato su abuelo la carga en brazos.

-Como te has portado Jinzu Jr.?.- pregunta Kagome al ver a su sobrina.

-Muy bien tía.- dice la pequeña Jinzu sonriendo, la sonrisa era parecida a su madre.

-Quieres dulces, pequeña?.- dice Inuyasha al darle un paleta a su sobrina, quien la acepto gustosa, y le daba otros dulces a Shippo.

-No mimen tanto a nuestra hija, se volverá malcriada.- dice Hirotaru al ver cómo le daban dulces.

-Hermano; ese es nuestro trabajo como tíos. Malcriar a nuestros sobrinos, el tuyo como padre es educarlos.- dice Kagome tranquilamente, provocando la risa de su padre.
-Bien dicho Kagome; también es mi trabajo como abuelo consentir a mis nietas.-

-Felicidades señor Higurashi.- dice Sesshomaru al llegar con Rin y Ryu. Los acompañaban Sango y Miroku.

-Feliz cumpleaños.- dice Sango feliz.

-Papa, esto es para ti.- dice Souta al darle un regalo a Reiko.

-Ven Akari.- dice Souta al ver a la bebe, quien de inmediato se va con su tío. Souta le hacía caras a Akari, haciéndola reír.

-A los bebes, les gusta también si les haces sonidos graciosos con caras Souta.- dice Inuyasha al verlo jugar con su hija.

-Que buen padre eres amigo.- dice Miroku al ver a Inuyasha aconsejar eso.

-Lo que sea por mí bebita.-orgullosamente responde Inuyasha.
-Y no tienen problemas para dormir?.- pregunta Sango.

-No, Akari es muy dormilona. Duerme desde el nacimiento, cinco horas.- dice Kagome mientras bebía agua.

-En eso se parece a su madre de pequeña.- dice Sayo, mientras que Kagome se ponía colorada de vergüenza.

-No sé de qué hablas mama.-

-Es hora de darle su biberón a Akari.- dice Inuyasha al sacar un biberón de la bolsa de su bebe, la carga en sus brazos y la alimenta.

-Y es muy comelona, igual que su padre.- dice Sesshomaru fríamente.

-Tú no te quedas atrás, Sesshomaru.- dijo Inuyasha colorado, cuando su medio hermano le revelo esa verdad.

-Calma Inuyasha. Todos saben que de pequeño, tienes un pozo sin fondo como estomago.- dice Izayoi riendo. Pasan un buen rato en la fiesta divirtiéndose como nunca. Inuno y Reiko se sentían felices de ver como sus hijos menores unieron sus vidas.

-Hola tío.- saluda Osaku al llegar con Ayame, quienes estaban casados desde hace dos meses.

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-Hola sobrino, felicidades.- dice un hombre yokai mayor al llegar con una mujer, un par de gemelos adolescentes y un muchacho, quien tenía un niño pequeño y una mujer joven. Ese Yokai, a pesar de ser casi un anciano, se vea de treinta años.

-Tío Arata, que bueno que llego. Teníamos meses sin vernos.- dice Reiko feliz al saludar a su tío, por parte de su madre.

-Bueno muchacho, nunca es tarde para ver a tu familia.- dice Arata al saludar a su sobrino.

-Ellos son mis hijos; no sé si los recuerda. Hirotaru, Kagome y Souta.- presenta Reiko a su tío sus hijos.

-Ah sí, me acuerdo de ellos. No los veía desde pequeños.- decía Arata feliz. Solo mantenía contacto con Reiko, por eso estaban al tanto ellos. Mientras que tenía mucho tiempo de no ver a sus hijos por distintas razones.

-Tío, ella es mi esposa Jinzu, y mi hija Jinzu Jr.-presenta Hirotaru formal.

-Hola tío, él es Inuyasha mi esposo; y mi bebe Akari Sakura.- presenta Kagome amablemente. Arata los mira como recordando algo.

-Creo que a ti te vi de pequeño muchacho, hace veinte años en casa de mi cuñado que en paz descanse.- dice Arata recordando.

-Tío, no te refieres a aquella ocasión?.- dice Reiko divertido al relatar lo que su tío Arata se refería.

FLASH BACK

Estaba Inuyasha de tres años en casa de los Higurashi. Sus padres le dejaron dormir con ellos ese día.

Inuyasha, dormirás con Hirotaru en su habitación.- dice Sayo al estar dentro de la sala.

-Si Señora Higurashi.- dice Inuyasha feliz.

-A que jugamos?.- pregunta la pequeña Kagome.

-Qué tal si jugamos a las escondidas?; pero el que cuente debe tener un gancho en la nariz.- dijo Hirotaru, a lo que los pequeños afirmaron.

Al día siguiente, después de desayunar, salen un rato a visitar al abuelo paterno Masahiro Higurashi; antes de dejar a Inuyasha en su casa.

-Veremos a mi abuelo?.- pregunta Inuyasha inocentemente.

-No pequeño Inuyasha; veremos al abuelito de Hirotaru y Kagome; quien es mi padre.- dice Reiko riendo.

-Hola Hijo, Sayo. Y quien es este pequeño platinado?.- saluda el abuelo Masahiro, quien era un yokai mayor, muy parecido a su hijo. Él había enviudado hace tiempo, cuando Reiko era joven.

-Hola papa, él es Inuyasha el hijo de Inuno, mi viejo amigo.- dice Reiko, sacando a Inuyasha, quien estaba escondido detrás de él, pues a primera vista; ese hombre se veía temible.

-Pero, que su hijo no era demonio completo?.- pregunta Masahiro dudoso.

-Él es su segundo hijo, con quien tuvo con la esposa actual. La otra falleció hace tiempo, con la que tuvo a su primogénito.- explica Reiko.

-Abuelito.- saludan los hijos de Reiko, abrazando a su abuelo.

-Mis pequeños híbridos.- dice Masahiro al abrazarlos.-Por cierto Reiko, nos visita tu tío Arata.-

Después de un rato, los tres pequeños jugaban a la pelota muy tranquilamente, mientras que los adultos platicaban, en eso se acerca un niño de la edad de Hirotaru, quien era un yokai completo.

-Que hacen tontos híbridos buenos para nada?.- dice ese niño con aires de grandeza.

-Quieres jugar Jr?.- ofrece Kagome amablemente.

-No nos trates así Jr.- dice Hirotaru enfrentándose con él.

-El que seas yokai completo, no te da derecho de tratarnos de inferiores.- defiende Inuyasha. En ese momento Arata Jr. le pega un puñetazo a Inuyasha, Hirotaru lo defiende, pero también termina siendo golpeado.

-Que híbridos tan tontos.- dijo Jr. Arrogantemente.

-Oye, no le pegues a mi hermano y a mi amiguito.- dijo Kagome enojada; en ese momento le da una patada en la pierna y un puñetazo en su estómago, dejándolo débil. Jr. Solo da una queja de dolor, al estar encorvado. En ese momento aparecen los adultos para saber que sucedía.

-El empezó papi, nos molestó diciéndonos híbridos buenos para nada y les pego a Hirotaru e Inuyasha. Yo solo los defendí.- dice Kagome inocentemente. Los mayores se rieron de la ternura de Kagome. Como una niña de tres años defiende a los demás, enfrentándose a un niño mayor.

-Pero ten cuidado a la próxima.- dice Sayo riéndose.

-Jr. Ya te he dicho muchas veces que debes tratar bien a los demás, y no ser arrogante por ser un yokai.- regaña Arata a su hijo.
Fin de flash back

-Ay amigo, aun de pequeños, Kagome debía defenderte.- dice Miroku burlón, mientras se reía junto con los demás.

-Pero eso fue hace mucho tiempo.- dijo Inuyasha sonrojado, viendo a otra parte. Su bebe solo los veía con extrañeza.

-Yo si me acuerdo; como me dolió los golpes que me diste sobrina.- dice Jr. Riendo del relato de su padre y primo.

-Tú también defenderás a los demás como tu mami, princesa?.- pregunta Sango a Akari, quien solo sonríe.

-Me parece que si.- dice Inuno al ver a su nieta.

-Tu recuerdas eso Kagome?.- pregunta Ayame al ver a su amiga riéndose.

-No, pero el escucharlo da risa.- se carcajea Kagome.

-Sí que eres rara primita.-se burla Osaku.

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-Mama, puedo acomodar a Akari en mi vieja habitación?; ya se durmió.- pide Kagome, quien tenía en brazos a Akari dormidita, chupándose el dedo pulgar.

-Claro hija; acomódala con cuidado. No se vaya a lastimar mi nieta.- dice Sayo, al acompañarla y darle unas almohadas para acomodar a la bebe. Después de poner una radio, Kagome se va tranquila a la fiesta.

-Amiga, puedo preguntarte algo?.- pide Sango preocupada.

-Que es Sango?.-
-Veras, desde que me case con Miroku hace seis meses y tuvimos nuestra primera vez, he sentido síntomas de embarazo. Últimamente los he sentido más fuertes, y quisiera que me digas si estoy embarazada.- pide Sango; ella sabía que por su olfato los yokai e híbridos, pueden oler a bebes en gestación. Kagome la olfatea un poco para estar segura.

-Pues felicidades amiga, eres la orgullosa madre de un bonito bebe.-anuncia felizmente Kagome, poniendo a Sango del mismo modo.

-En serio amiga?.-

-Así es, y según mi olfato, tienes cuatro meses de embarazo.-

-De que hablan?.- pregunta Ayame curiosa.

-Sango está embarazada Ayame.- anuncia Kagome feliz.

-Que bien, tendremos más retoños aquí.- dice Ayame contenta por las noticias.

-Y tú y Osaku, hasta cuándo?.- pregunta Kagome pícaramente.

-Aun trabajamos en eso. Mi abuelo ya quiere un sucesor, para que tome el liderato de la tribu de los lobos.-

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Después de un rato se reúnen con los demás. Sango le informa a Miroku sobre su embarazo. Y como supuso, se puso más feliz, que un niño en navidad. Sus amigos también, se pusieron felices de la noticia.

-Que feliz soy; ya tendré un hijo igual a mi Sanguito.- proclamaba Miroku feliz al escuchar la noticia.

-Ahora debes ser buen padre para esa criatura.- dice Inuyasha burlón.

-Como debe ser, seré un buen ejemplo a seguir amigo.-

-Eso dices, pero quien sabe si lo hagas.- se burlan Ayame y Osaku.

-Inuyasha, tráeme algo de beber.- dice Inuno de repente; Inuyasha lo ve, pero se da cuenta de la colita de zorro; sabiendo de inmediato que era Shippo.

-Sigue esforzándote enano.- contesta Inuyasha burlón, mientras que Shippo recobra su forma original.

-No se vale.- reprocha Shippo, sentándose en las piernas de Kagome.

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Los meses pasaban, y la bebe de Inuyasha y Kagome crecía cada vez más, poniéndose muy saludable, pero a la vez muy activa. Cada vez se les hacía difícil a sus padres calmarla. Un día, cuando estaban en el trabajo Kagome estaba en su oficina con Inuyasha y Akari, en el piso.

-Ven pequeña, tú puedes.- decía Inuyasha animando a su bebe de siete meses. Akari ya estaba empezando a gatear.

-Eso Akari, ve con papa.- animaba Kagome. En eso Akari gatea torpemente hacia su padre, soltando risitas.

-Que hacen en el suelo, hijos?.- pregunta Reiko al entrar con Inuno a la oficina.

-Observen.- dijo Inuyasha al poner a su bebe frente a sus abuelos.

-Ve con tus abuelitos, Akari.- dice Kagome al soltar a su bebe; quien gatea donde estaban sus abuelos. Quienes se agacharon estirando sus brazos, para recibir a la bebe.

-Ven con el abuelo Inuno.-decía Inuno.

-Mejor ven con el abuelo Reiko.- decía este abuelo. Akari sigue gateando, pero en eso se detiene, quedando en medio de ambos abuelos.

-Creo que no se decidió.- dice Inuno cargando a su nieta.

-Pero como ya gatea; así de pequeña.- comenta Reiko al hacerle cosquillas a Akari.

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Él bebe de Sango y Miroku había nacido, resultando ser un varoncito parecido a su padre, pero con los ojos marrones de su madre. Todos sus amigos, estaban de visita en el hospital.

-Qué bonito bebe.- dijo Ayame ilusionada de ver al pequeño.

-Se parece a Miroku.- comenta Kagome, quien tenía cargando a Akari en brazos dormidita.

-Espero que herede el carácter de su madre; sino pobre bebe.- se burla Inuyasha.

-Nadie me comprende.- se queja Miroku, haciéndose el dolido.

-Se llamara Tenshi.- afirma Sango orgullosa.

-Que les parece si comprometemos a nuestros bebes, para que se casen de grandes?.- propone Miroku al ver a su bebe y a Akari.

-Por mucho que me guste la idea; es mejor esperar a ver como se llevan.- dice Kagome.

-Es verdad, debemos ver si serán buenos amiguitos tanto de pequeños; como de grandes.- dice Ayame.

-Es buen punto. La historia se repetirá con propiedad y buen camino.- dice Inuyasha al besar a Kagome, y besar la cabecita de su bebe. El haber conocido a Kagome de bebe, fue una de las mejoras cosas que le hayan pasado en su vida.

AHORA SI FIN.

Bueno chicas, aquí está el epilogo que les prometí, espero que les haya gustado. En respecto a la historia que propuse, deben esperar a que termine “JEFE DE MI CORAZON”. Es que debo manejar mi tiempo.