Kholod, hogar moguri Algaba de Baobab

Algaba de Baobab

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Nv. Recomendado: 48

La Algaba de Baobab, uno de los cinco bosques sagrados en los cuales puede hallarse uno de los árboles homónimos. A diferencia del resto de bosques, en las profundidades de este, se dice, reside una ciudad rústica y de pequeño tamaño, poblada por Moguris, residentes del continente de Kholod.

El bosque en particular es muy diferente a cualquier cosa que un humano conozca, con extrañas plantas y árboles de especies exóticas, como la mayoría de cosas en Kholod. No es considerado uno de los bosques más inhóspitos de Ilumbra, ni mucho menos, pero su ambiente tropical puede ser peligroso para aquellos no familiarizados con la zona, sin duda.

Contenido oculto: Minijuego: Huerto

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Bueno, escribí un texto en media hora para la introducción aquí, pero lo tenía en el portapapeles y se me puto borró, así que ahora lo tengo que escribir de nuevo. Si me sale un churro que sepáis que es por eso (?)
Amelie Lucas Diamond Yáahl Yugen
Aquí comienza oficialmente vuestro capítulo 7. No tenemos prisa hasta que los demás terminen su capítulo 6, por lo que podemos tomárnoslo con calma. De momento, os pondré unas interacciones que debéis ir haciendo, así que aprovechadlas para postear poco a poco. Como digo, no hay prisa de momento

Por mucho que los pilotos trataron de evitar el impacto, fue tarde... pero sus esfuerzos no fueron en vano. Biggs y Wedge habían hecho que el barco frenase todo lo posible tras el impacto con el pájaro gigante que desestabilizó el Starlight, y no pudieron evitar el choque, pero sí que lo suavizaron. Cuando tocaron tierra, lo hicieron arrastrándose algunos metros por el suelo, aprovechando los árboles del espeso bosque sobre el que cayeron para contener el navío.

Cuando todo cesó, Wedge y Biggs tenían sus cabezas sobre los timones, exhaustos, y Cid tuvo que levantarse del suelo, echado en un rincón para no caerse durante el traqueteo del descenso. Lentamente, Wedge alzó la mirada, y suspiró hondo.

—E-Estamos a salvo... lo hemos conseguido.

—Maldito pajarraco —dijo Cid, caminando con esfuerzo hasta el cristal, observando con alivio que seguía intacto. Con todo, la preocupación por su "joyita" seguía bien presente en sus ojos anaranjados—. ¿¡Qué se supone que era esa cosa!?

Biggs, sin levantar aún la cabeza, se encogió de hombros.

—No sé, pero ni pensarlo quiero.

Al final, Cid suspiró, girándose para mirar al resto.

—¿Estáis bien? Deberíamos... asegurarnos de que los heridos están también a salvo, y salir de aquí para tratar de ubicarnos y ver los daños del barco. Creo que estamos en Kholod, pero... a saber dónde.

***

Por fortuna, los demás no sufrieron mayores daños. Como si ya fuese costumbre, se salvaron una vez más, pese a que su plan no salió precisamente como lo planearon. Ya parecía una broma del destino...

Flora se despertó nada más notar el agitar del Starlight, e hizo todo lo posible por evitar que Calum, Darek o Aidan saliesen dañados de aquel accidente. Cuando hubieron salido, Darek y Aidan también lo hicieron, con gruesas vendas tapando sus torsos y cubriendo las heridas.

El Starlight estaba varado, incrustado en la tierra y habiendo arrasado algunos árboles a su precipitado paso. Y Cid, andando de un lado a otro, lo miraba con horror.

Por su parte, Flora se sentó en una piedra cercana, abstraída, y comenzó a usar su lanza para dibujar formas en la tierra, completamente distraída.

Biggs y Wedge estaban junto a sus compatriotas, Darek y Aidan, y los dos primeros parecían estar... ¿cavando en la tierra?, mientras los Titanes miraban con cierta tristeza en sus ojos.

Y Calum, al cual habían sacado también del barco, dormitaba con la misma paz de siempre en sus ojos cerrados, apoyado contra la cubierta del Starlight.

Estaban perdidos, abandonados allí, en mitad de un bosque perdido. Pero vivos. Todos vivos...


>> Hablar con Flora
>> Hablar con los eleanos
>> Hablar con Cid
>> Acercarse a Calum

 

Fauna.

El barco se precipitó a gran velocidad pero no se estrelló. En su lugar frenó bruscamente y la fuerza del impacto lo hizo arrastrarse, levantando tierra y quebrando árboles a su paso. El espeso follaje del bosque redujo la velocidad hasta finalmente detenernos.

Me incorporé del suelo donde la inercia del descenso me había empujado y miré el espeso manto de hojas que nos cubría desde el cristal delantero de la cabina de mando. Estábamos en un bosque, en Kholod.

Tierra de moguris.

El pensamiento catastrofista que me había asaltado durante el choque se disolvió al ser consciente de que no sabíamos el estado de los heridos tras el brusco aterrizaje.

Por suerte todos parecían estar físicamente bien.

Descendí del barco sintiendo la brisa meridional rozarme el cabello. Miré a Calum, dormido eternamente sobre la cubierta del Starlight y me pregunté cómo le contaríamos de lo sucedido con Aster cuando despertase.

Ojalá pudiese despertar.

Flora se había alejado un poco y se sentó en una roca dibujando con la punta de su lanza en la tierra.

No reparé en los patrones del dibujo. No parecía estar trazando nada concreto en realidad.

Me senté junto a ella y cerrando los ojos apoyé la cabeza en su hombro.

>> Hablar con Flora.

 

Cuando Fauna apoyó la cabeza en su hermana, esta reaccionó ligeramente, desviando la mirada hacia ella, pero sin inclinar su cabeza. Y, tras un suspiro, dejó caer la melena verdosa suavemente sobre los cuernos de Fauna, chocando sus sienes de forma ligera. Fauna no la veía, pero Flora tenía algunas lágrimas brotando de sus ojos. Al final, tras unos segundos en puro silencio, la mayor habló:

—¿Sabes? Presiento que... Alma lo sabía. Sabía lo que pasaría. Al menos parte de ello, claro. Al menos su propia muerte. Sabía que Aura conseguiría lo que quería, que nada podría evitarlo, y si despertó vuestro poder escondido, el tuyo y el del resto, y te pidió que fueses ante Iifa no fue para hacerte más fuerte necesariamente... sino para prepararos para el futuro, para un futuro más lejano. Para dejar su legado mientras podía en alguien. Confió en vosotros, vio algo en vosotros.

Calló tras decir eso de nuevo, los ojos clavados en un punto fijo.

—... a veces me pregunto si Alma sentía lo mismo que Hendrick sentía hacia ella. Vivir tanto tiempo, ser inmortal, ver pasar por tu vida a cientos y cientos de personas, todas envejeciendo y desapareciendo de tu lado, ¿no enfría eso el corazón de cualquiera? —susurró, apesadumbrada, reflexiva—. Sé que lo quería, lo sé, pero... para un ángel como ella, para alguien que tenía constantemente las voces de toda Áurea haciéndole eco en la cabeza y que había vivido miles y miles de años, ¿el amor es igual que para alguien como nosotros? Somos... frágiles. Somos breves. Lo vivimos todo más intensamente. Por mucho que Alma quisiese, ¿podía llegar a experimentar las mismas emociones que Hendrick? Él... no pudo vivir asumiendo lo que había pasado. No sin ella. Pero ella quizá habría seguido adelante sin problemas. Porque no sería la primera vez... ¿no?

Flora estaba realmente afectada por los acontecimientos, y no era de extrañar. La lanza empezó a describir una espiral en la tierra del suelo, y fijó sus ojos de nuevo en la punta, echándose hacia delante.

—Espero que Theia esté bien. M-Me pregunto cómo estará ahora mismo, sin Alma, sin Hendrick... esos soldados de blanco habrán tomado pleno control, como con Elérea. Donde pisa Aura, detrás aparecen ellos, por lo que parece —golpeó entonces el suelo con fuerza con su Gugnir, apretando los dientes—. ¡Maldita sea! No pude hacer nada para protegerles. Ni a Alma, ni a Hendrick, ni a Áurea en general... ni siquiera a ti. Estás bien, sí, después de todo... pero no es gracias a mí, desde luego. Eres mucho más fuerte que yo, eres... siempre fuiste algo especial, y yo...

Las lágrimas cubrieron su rostro, y en seguida las limpió con el dorso de la manga.

—Mírame, parece que me estés consolando tú a mí, que hayas venido a darme ánimos. Cuando la mayor y la que se supone que debe protegerte soy yo. Pero se ve que nunca se me dio muy bien, ¿huh? —por primera vez desde que empezaron a hablar, Flora se giró a mirar a Fauna. Aunque tuviese los ojos enrojecidos y empañados, se permitió una ligera sonrisa cuando miró a su hermana pequeña—. Alma vio algo en ti, Fau. Créeme, la conocía muy bien, como si fuese prácticamente otra hermana más, y... pocas veces vi en ella una sonrisa más genuina que cuando percibió que estabas bien y que regresabas con nosotros. Noté esperanza en sus ojos. Y no la había visto nunca, no de esa forma.

>> Parte de ella está en ti ahora, ¿no? Su poder especial, pero no solo eso. También su voluntad. Yo soy muy pequeña, Fauna, y en ocasiones como esta me siento tan impotente, tan inútil... pero tú tienes la fuerza necesaria, el poder. Heh —melancólica, agachó la mirada de nuevo, susurrando sus nuevas palabras—. Así debía sentirse Hendrick. Sintiéndose incapaz de proteger a Alma, y mucho más pequeño que ella, pero... siempre a su lado, incluso hasta el final. Aunque no comprendiese a la persona a la que más quería, hacía todo lo que estaba en su diminuto alcance para ayudar a alguien que era mucho, mucho más grande que él.

De pronto apoyó la lanza en el suelo, se apoyó en ella y se levantó, secándose de nuevo las lágrimas. Se notaba que percibió la tristeza de Fauna, y, cuando se hubo desahogado, trató de apartar toda la pesadumbre que sentía por un instante, por hacerse la fuerte. Como si sintiese que si se hundía más aún, Fauna lo haría con ella. Y después de todo, era la mayor.

—... bueno, sea lo que sea lo que ha pasado, hemos sobrevivido a esta caída, ¿eh? El destino no quiere perderte, Fauna, ¿ves? Tienes que seguir adelante, por Alma, por Hendrick, por toda Ilumbra. Sé que es difícil... pero estaré a tu lado, lo prometo —se giró a mirarla, una vez más. Sonrió. Genuinamente se estaba esforzando, mucho, por sonreír. Y podía notarse desde lejos—. ¿Dónde crees que estaremos? Kholod, eso seguro, pero...

Es verdad, ¿dónde estarían? Y, sobre todo, ¿funcionaba el Starlight? Porque si no funcionaba, ¿cómo saldrían de allí...?


***

Cuando Erin se acercó a los Titanes pudo darse cuenta de lo que estaban mirando, aunque tampoco era muy difícil intuirlo. Wedge y Biggs estaban cavando con gran esfuerzo, de manera bastante sincronizada... y junto a ellos, un ovillo de sábanas del tamaño de una persona yacía, al lado del agujero cada vez más y más profundo.

Loke. Iban... a enterarla. A darle la despedida digna que se merecía, ¿eh?

Darek negó con la cabeza ante las palabras de Erin, como indicando que todo estaba bien, que no tenía de qué preocuparse. Si bien eso, claramente, no era cierto. Darek era el que mejor conocía as Loke de los presentes; el único que la conocía realmente, mejor dicho. Y su muerte, evidentemente, no le dejó indiferente. Darek no era de piedra, aunque lo pareciese. A veces parecía que el sobrenombre de "Coraza" le quedaba mejor a él.

—¿Por qué enterraremos a los muertos? —intervino de pronto Aidan, al notar el silencio que pesó sobre la escena, ojos clavados en el cielo, vendas cubriendo su torso, desnudo como el de Darek, salvo por chaquetas que tenían puestas por encima—. Nunca me paré a pensarlo. Es una tradición un poco absurda, ¿no?

—... fue una tradición de la Iglesia de los Cinco Sagrados —explicó Darek, mirada clavada en el agujero que cada vez crecía más y más—. Pero la idea tiene su lógica. Nuestros cuerpos le dan nutrientes a la tierra, y así, de ellos crecen y se desarrollan las plantas. Una muerte crea más vida. Esa es la esencia... o lo que nos quisieron vender, claro.

"Una muerte crea más vida". Ese era el precepto que la Iglesia de los Cinco promulgó cuando extendió la tradición de enterrar a los fallecidos. Aunque la explicación sobre las plantas era cierta, había algo más espiritual de fondo, ¿no? ¿Cómo era? Algo sobre regresar al árbol sagrado, hacer que las raíces del árbol absorban el alma para poderla reencarnar en otro ser.

Ya, claro. "Árboles sagrados".

—... Loke nunca quiso que se supiese —dijo de repente Darek, clavando los ojos en el suelo—, porque sentía que se la juzgaría y todos pensarían que era Consejera por su relación con ella, pero... era la hermana de Alyssa. La Emperatriz.

Aidan parpadeó un par de veces, sorprendido, mirando a Darek. No esperaba la noticia. Lo cierto era que... se lo tenía muy bien callado, sí. Conque la Consejera principal de Alyssa era su hermana, ¿eh? Y la que después siguió siendo Consejera del Emperador... no era sino su cuñada. Dos personas unidas por una misma pérdida, ¿eh? La pérdida de Alyssa, alguien muy querida para ambas.

—Espera, espera —musitó, reflexivo, Aidan—. Eso querría decir que... ¿¡la Emperatriz era una demonio!?

Darek alzó la mirada para fijarse en Aidan, y asintió. Luego, suspiró.

—... y Zael, el Emperador, es un ángel.

—Espera, ¿¡qué!? ¡A-Auch! —al reaccionar con brusquedad, Aidan se echó hacia atrás, y debió estirar más de la cuenta su cuerpo, resintiéndose por la herida. Debía ser un tajo profundo...

—Creo que eres literalmente el único aquí que no lo sabía ya. Bueno, y los dos gemelos tampoco. Aunque no me extrañaría que Wedge lo deduzca —se burló ligeramente Darek—. Pero sí, así es. Yo... lo supe desde hace mucho. Me convertí rápidamente en el mejor hombre del ejército de Zael, y, cuando su mujer falleció, me lo contó todo. El motivo por el que quiso romper con todo lo que estuvo apoyando por años, el motivo por el que empezó las invasiones y todo su plan para acabar con los Profetas y, por extensión, con los árboles y los de su propia especie fue... por ella, por el amor de su vida. ¿Cómo de intenso debe ser el amor que sientes por alguien como para que, pese a ser un ente casi inmortal con vida infinita, un ser efímero como un demonio haya logrado despertar tanto en él? Siempre me lo pregunté —susurró, suspirando luego y enfocando los ojos en el cielo—. Y, si no cuestioné todo lo que me contó fue precisamente porque sus ojos eran los de un hombre roto, lleno de ira, de pesadumbre y de tristeza. Zael era un hombre que jamás en su larga vida conoció algo parecido a la felicidad, y cuando la encontró... le fue arrebatada. Por ellos, por los ángeles.

—¿Por ellos? ¿Ellos... mataron a la Emperatriz? No entiendo nada, joder...

Pero Darek miró a Erin, y asintió.

—Alma ya te puso al día, ¿verdad? Entonces sabrás casi lo mismo que yo. A ambos nos contaron muchas cosas, cosas que son difíciles de digerir. Que desafían la propia lógica del mundo que creíamos que pisábamos. Ahora al menos tú entenderás lo que sentía yo, en parte. ¿No, Erin? Esa sensación de darte cuenta de lo diminuto que eres en la imagen completa; cómo por mucho que en Elérea seas una de las figuras más grandes de todas, eso se traduce en una mísera mota de polvo. Ahora tú también me entenderás...

>> ... pero Loke era la única persona que me entendía antes —reveló, apesadumbrado—. Ella era la única que, por deferencia de Alyssa, sabía toda la verdad, igual que yo llegué a saberla por Zael. Éramos, de algún modo, los consejeros de la pareja, cada uno el de uno de ellos. Y aunque aconsejásemos a los emperadores, a nosotros nadie nos aconsejaba, porque ni podíamos, ni debíamos revelar la información que teníamos. Por ende, solo nos teníamos mutuamente para apoyarnos.

Aidan agachó la mirada, sin saber muy bien qué decir. Así que Darek decidió abrir un poquito su muralla, ¿eh? Estaba hablando con el corazón, por una vez. Expresando lo que sentía de verdad.

Y se merecía poder desahogarse y soltarlo todo, aunque fuese una vez.

—... ella nunca apoyó del todo el matrimonio, tampoco —confesó—, pero a diferencia de los congéneres de Zael, para ella era más importante la felicidad de su hermana que los prejuicios. Ángel, demonio, ¿qué más da la raza? Lo importante era que se querían, ¿no? Y Loke aceptó eso. Y precisamente conocer a su cuñado le hizo entender que no todos los ángeles son malos, al igual que no todos los demonios son buenos. Pero siempre se caracterizó por ser fría como el hielo, eso era cierto. Y por ese motivo, cuando Alyssa murió, ella sirvió como la razón dentro de la ira. Zael solo quería venganza al inicio, pero ella le frenó. Era su propia hermana, sí, pero para ella siempre fue más importante mejorar el mundo entero que cobrarse venganza. Y fue ella la que moldeó las ideas de Zael, la que le hizo darse cuenta de que la mejor forma de vengar a Alyssa era rompiendo el yugo de la lluvia carmesí. Ayudando a todos los que pisan Ilumbra, rompiendo el sistema al completo.

>> Qué mujer era —confesó, al final, sin poder ocultar una ligera sonrisa, entristecida, pero presente—. Solo espero que ahora que ya no está... pueda hacerle compañía a su hermana, verse una vez más. Cómo me gustaría creer en toda la historia de la reencarnación de almas de la Iglesia ahora mismo...

 

Fauna.

Sentí su cabeza sobre la mía y luego solo silencio. No era pesado ni angustioso en realidad. Era un silencio reconfortante, pacífico. Las palabras no eran necesarias cuando ambas entendíamos lo que la otra quería decir.

Pero entonces empezó a hablar y su voz se me antojó distante. Al menos en un inicio. Su voz no era un plano vacío de emociones; Flora era una persona emocional. Su extroversión y su carácter animoso no la había forzado a una vida de ostracismo como al que yo misma me sometí, sintiéndome solo en calma en compañía de la naturaleza y de los árboles. Ella era luz. No como la luz corrupta de Aura, si no como los rayos del sol que calentaban y mantenían la vida en Illumbra.

Incluso si no podía verlo.

La escuché hablar sin interrumpirla sabiendo que ella hablaba y yo callaba cuando las emociones eran demasiadas para tolerarlas. Ella necesitaba expresarse y yo me recluía y me encerraba en mí misma. Siempre había sido así.

Las suyas eran reflexiones que yo también me había hecho. Alma lo sabía, conocía lo que haría Aura y aún así lo aceptó. Permaneció en el palacio, en Theia, y aguardó su final sin titubear. Me pregunté entonces si para ella había sido una suerte de descanso. Para un ser inmortal, inmarcesible... ¿aquel abrupto y aciago desenlace había sido algo que había estado esperando años, siglos quizás?

Una liberación de su yugo como profeta y como ángel.

Flora se incorporó y la seguí con la mirada sintiendo las palabras que quería decirle atoradas en la garganta. Separé los labios pero volví a cerrarlos, apretados y tensos. Nada que yo pudiera decirle cambiaría esa imagen que tenía sobre sí misma.

Ella se sentía pequeña, fugaz y prescindible... pero las flores más pequeñas eran a menudo las más hermosas. En el gran esquema del mundo no había seres más o menos necesarios que otros. Ni siquiera los humanos, que eran a ojos del resto de especies "un error".

Todo estaba conectado. Éramos parte de un todo. No había eslabones prescindibles.

Incluso cuando la oscuridad cayó sobre mí y me hizo pensar que así era... Flora tenía razón. Parte de Alma aún vivía en mí. Su poder, su esperanza y su legado. Confió y me recordó cual era mi misión.

Miré a Flora y solo pude agradecer en silencio al Creador porque mi madre fue la misma que la suya. Agradecía tanto, tanto tenerla conmigo. Si la hubiera perdido también a ella... no sé qué hubiera hecho.

>>No tienes que forzarte a sonreír por mí<<

—Flora, hermana mía— si ella iba a esforzarse yo también lo haría, incluso si mi corazón estaba roto en pedazos—. Gracias por seguir aquí.

 

Brigid

Habían tenido que huir; miró en Hendrick lo que ella posiblemente haría si los suyos cayeran; no tenía tanta entereza para continuar. Y fue justo ese pensamiento el que la llevó a recordar a Calum y Aster, no quería irse sin ellos. Todo pasó muy rápido, y lo que aun quedaba de vida y pensamiento libre en Aster, lo usó para entregarle a Calum, nuevamente inerte en sus brazos.

Sus ojos volvieron a ser los mismos un breve instante; el instante necesario para confiar en ella. Entregándole a la persona más importante para él. Brigid no pudo llorar en ese momento, simplemente sujeto a Calum con fuerza..

En sus brazos estaba la respuesta que buscaba; la llama necesaria para jamás rendirse, incluso si jamás volvía a abrir sus ojos... tenía que intentarlo por él.

Cuando la nave cayó, todos comenzaron a levantarse poco a poco. Lo primero que hizo Brigid fue correr hacia dónde se encontraba Calum.

>> Acercarse a Calum

 

Rigel Betelgeuse

Tuvimos que huir de Theia. Una vez más, como siempre, huíamos. Porque habíamos sido derrotados. Aunque nos hubiésemos intentado anticipar, no había servido para nada. Aura ganaba una vez más, el castillo de Alma se derrumbó, y poco después la ciudad fue tomada por unos soldados de blanco. Unos soldados que montaban en chocobos... también blancos. Blancos como Orion.

... No "como" Orion, no. Él también estaba allí. Mi mirada se fijó en él, quedé parado allí, sin saber cómo reaccionar, buscando establecer contacto visual con él. Pero no fue posible. Estábamos en pleno ataque y me arrastraron fuera de allí, sin remedio. Sabía bien que era lo correcto, pese a no poder evitar sentir una vez más que había sido traicionado, ahora por mi propio chocobo. Ni siquiera tuvimos tiempo para salvar a Áster, solo Calum pudo venirse con nosotros, aún dormido.

Escapamos en el barco volador de Cid, el Starlight. Brigid, Fauna, Flora, los tres titanes y Calum. El cuerpo de Loke también nos acompañaba, pero sin vida, y Hendrick... se había quedado atrás.

El viaje fue un tremendo vaivén mental, de emociones agolpadas, de rabia y frustración, de impotencia ante la conquista de Theia. Cada uno acabó por su lado, intentando recuperarse a su manera de todo lo vivido. Lo único que consiguió hacerme desconectar un poco fue reencontrarme con Biggs y Wedge, pilotando el barco, y a Cid. Era un mocoso cuando se lo proponía, pero se había preocupado por mí aún cuando ni me conocía. Él estaba igual de quemado que todos, por motivos más personales, que debían ser los que menos le importasen en ese momento. Pero bueno, seguía siendo un niño...

Comentarios esporádicos de los rescatadores amenizaban levemente la travesía, pero el peso emocional de las últimas experiencias seguía ahí. Pasado el pequeño instante del reencuentro, el único sentimiento que reinaba en el barco era la culpa. Culpa por haber perdido ya hasta tres regiones por culpa de Aura, quien ya acumulaba el poder de dos profetas. Aunque, finalmente, la culpa desapareció. No por sentimientos positivos, sino por preocupación, temor de nuevo, al ver una nueva amenaza. Un pájaro en llamas, gigante, arremetía contra nosotros, golpeando el barco fuertemente, obligando a los pilotos a aterrizar de emergencia sobre el pequeño trozo de tierra que acabábamos de encontrar.

Golpes llegaron por todos lados, el barco se zarandeó fuertemente, y acabamos cayendo al suelo casi todos. Por fortuna, consiguieron que el barco no se tambalease lo suficiente como para volcar, y en su lugar lograron que se apoyase sobre la tierra, chocando con varios árboles a su paso, dejando un rastro kilométrico.

Cuando todo cesó, poco a poco nos incorporamos para observar que todo estaba "bien". Que todos estábamos vivos, que no era para nada poco después de lo mucho que habíamos vivido. Y que, aunque el barco estaba destrozado, al menos podíamos bajar y pisar tierra firme. Así fue, desalojamos el barco al completo y nos reunimos en mitad de aquel bosque, probablemente de Kholod.

—No es posible... No puede estar pasándonos esto ahora —dije, completamente frustrado por la situación. Cuando más necesitábamos darnos prisa para actuar, más parados nos quedábamos. Nos dispersamos en grupos, mientras todos buscaban algo con lo que entretenerse o despejar sus mentes.

Fauna y Flora se sentaron juntas a hacerse compañía, mientras que Brigid se acercó al cuerpo de Calum, que había sido protegido del aterrizaje forzoso. Mientras, los distintos soldados eleanos fueron a buscar una superficie no muy dañada, donde enterrar el cuerpo de Loke. Me mantuve distante, escuchando al Puño explicarle la situación a los otros dos titanes. La Coraza ya estaba al tanto de todo, pero ni el Relámpago ni mis oficiales sabían nada. Yo, claro, tampoco debía saberlo. No debía saber que Zael era un ángel, ni que Alyssa era un demonio, ni nada por el estilo. Tampoco debía saber que aquella que enterraban era mi tía, al igual que ella no sabía que yo era su sobrino, pese a que en sus últimos delirios me tratase como a tal.

Hurgué en mis bolsillos entonces, con gran preocupación. ¡Mierda, la foto! La encontré bien protegida, por fortuna. Temía que con el balanceo se hubiese podido caer. La miré durante un rato, sin acercarme al grupo. Alguna lágrima rodó por mis mejillas, probablemente. Ella había sido una víctima más del ego de los ángeles. Y Zael solo quería venganza, de nuevo fruto de su ego, de la manera más puramente egoísta. No podía aceptar nada de lo que aquel hombre dijese, en mi corazón solo albergaba rencor por él. Por más infundado que pareciese que estaba, era lo que sentía.

Busqué huir de aquella reunión de eleanos, para no tener que dar explicaciones. La única persona que quedaba era... Cid.

—¿Crees que podrás hacer algo a corto plazo? —pregunté, tal como me acerqué a él. Me daba igual la respuesta. Solo necesitaba mantener la cabeza ocupada. Pensar en... qué hacer.

Con cualquiera de los muchos problemas que tenía.

 

Fauna

No necesitaba compensarme. No era culpa suya no haber podido estar esos tres años. Pero aún así no dije nada, porque tampoco era necesario. Nada cambiaría lo agradecida que me sentía porque estuviera aún ahí.

Porque el rojo no la hubiera manchado.

Me limité a incorporarme de la roca y juntas nos acercamos hacia el Starlight.

Cid se encontraba hablando con Rigel y repentinamente exclamó saber dónde nos encontrábamos señalando un punto distante en el cielo.

En la lejanía, alzándose majestuoso se encontraba un árbol de proporciones colosales. Tanto, que ni siquiera se alcanzaba a ver su copa perdida entre las nubes.

Baobab.

El árbol sagrado de Kholod.

Kholod era un continente poblado por moguris y pronto Cid lo trajo a colación. Bajo su punto de vista, los moguris podrían ayudarnos a reparar el barco a cambio de algunos guiles.

—Los moguris consideran tóxicos a los humanos—sentencié entonces—. Incluso si le prometemos guiles, ¿nos permitirán siquiera acercarnos?

No estaba tan segura. Y tampoco compartía el pensamiento de Cid de que eran seres 'intelectualmente inferiores'. Aquella era su tierra y nosotros los invasores. No me parecía adecuado perturbar su paz, pero la alternativa era esperar meses quizás hasta reparar el Starlight.

Me encontraba perdida en esos pensamientos, sopesando la idea de que adentrarnos en el bosque era lo mismo que enfrentarnos a los monstruos, cuando Flora me puso una mano en el hombro.

Estaba dispuesta a quedarse junto al barco en caso de necesitar defenderlo mientras el resto íbamos en busca de la aldea moguri en Baobab.

Sonrió y esta vez fue una sonrisa auténtica. Era evidente que la situación aún le pesaba y que estaba haciendo esfuerzos por priorizar el problema en el que nos encontrábamos. Quizás fue eso lo que me puso en marcha. No dudaba de sus palabras; Erin, Brigid, Rigel y yo... hacíamos un buen equipo.

Una simple rama podía partirse con facilidad pero no varias si estaban juntas en un mismo ramo.

Incluso si eran ramas ya quebradas.

Miré al resto, al Starlight, y de nuevo a mi hermana. En aquel momento lo último que quería hacer era separarnos. Tenía la necesidad de que permaneciéramos todos juntos porque no sabía cuando volvería a verlos o siquiera si eso sucedería. Ese miedo, en lo más profundo de los altos muros que acababa de erigir, aún rondaba mis pensamientos.

Pero sabía que en nuestra situación había que ser prácticos.

—De acuerdo—asentí—. Tened cuidado.

>>Hacia el norte.

 

Brigid

La idea que surcaba a su mente la hacía sentirse extraña, no podía preguntarle a Fauna, no en ese preciso momento; pero si no conseguía el valor, tal vez nunca podría ver nuevamente la mirada de Calum.

Pero la voz de Cid la sacó de su ensimismamiento, había entendido en dónde habíamos caído. Y fue allí que se empezó a entender el plan de Cid, a decir verdad, a Brigid le parecía un chico muy inteligente y sobre todo positivo; él también había ya pasado por mucho, y allí estaba; emocionado por sus planes que a Brigid le hicieron todo sentido. Y cuando se decidió quienes irían, ella afirmó, encargándoles con mucho esfuerzo a Calum, no quería separarse de él; pero ya había visto la fuerza de Flora, por lo que podía confiar en ellos, además de que no sería bueno exponerlo a peleas fuertes.

Fauna marcó el camino al norte; aparecieron nuevos enemigos; esta vez armados. Tal vez sería mejor eliminarlos lo más rápido posible. Brigid se preparó para embestirlos.

 

¡Fauna sube de nivel! +6 PH
¡Rigel sube de nivel! +6 PH
¡Brigid sube de nivel! +6 PH
¡Erin sube de nivel! +6 PH

Enemigos de la zona eliminados. Brigid puede usar dos veces más su mecánica especial, pero no podrá usarlo de nuevo en la Algaba de Baobab.

Brigid obtiene:
- Rebanadora de Weis
- Polvo ruinoso

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PD: tiré más dados para el resto de enemigos; la mecánica elimina a todos los que hay en la zona, por lo que se debe tirar 1d3 por cada enemigo. Veo que solo tiraste por el primer grupo, así que yo lancé los dados más arriba.

Si queréis avanzar, avisadme de en qué dirección vais y puedo editar este post directamente con la zona, para que no posteéis si no queréis.

 

Rigel Betelgeuse

Cid parecía desesperanzado viendo el panorama a nuestro alrededor. Perdidos en mitad de un bosque, necesitaríamos madera, metales y mano de obra. Más... tiempo. Mucho, mucho tiempo... Y este era el recurso más escaso para nosotros ahora mismo. No podíamos alargar más la parada, el mundo estaba en peligro, ¿¡en serio tenía que pasarnos esto ahora!? Ugh. El chico pensó alternativas, y tras un rato miró al cielo. Y... bingo.

Alzó la voz Cid, para expresar su última esperanza en nuestra situación. Baobab. El árbol sagrado de Kholod, ¿eh?

—Eso es, los Moguri —respondí, dando un golpe sobre la palma de mi mano—. Los necesitamos si queremos salir de aquí.

Cid propuso ir a investigar y negociar con ellos. Eran mercaderes y por unos guiles harían lo que hiciese falta. Tsk, no me hacía especial gracia pensar en prometerles un dinero que ni siquiera tenía, más aún siendo que ellos mismos estaban en peligro y la cooperación ahora mismo era crucial para el bien de Ilumbra. Pero si no había otra opción, tendríamos que hacerlo. Me ofrecí voluntario para ir allá, aunque realmente Cid se había encargado ya de atribuir responsabilidades a todos. Biggs y Wedge prepararían la madera mientras que nosotros íbamos de expedición, él se encargaba de ir planificando la reparación, y los Titanes descansarían para recuperar la forma física después de la pelea contra Aura.

Para defender el barco, Flora había accedido a quedarse allí, en guardia. Eso nos dejaba a Fauna, Brigid, la Coraza y yo para explorar la Algaba.

—Está bien, partiremos de inmediato, si le parece bien —me dirigí a la Coraza—. Necesitamos de su ayuda, si hace falta me encargaré de las negociaciones. Conseguiremos que colaboren con nosotros cueste lo que cueste.

Quizás no fuese el más propicio para hablar con los Moguris, en realidad, pero de eso nos preocuparíamos más tarde. Fauna comenzó liderando la marcha, viendo la posición del árbol y dirigiéndonos al Norte. Avanzamos un tiempo, hasta que pronto comenzamos a ver a varios monstruos rodeando varias salidas. El camino se bifurcaba en dos: uno continuaba hacia el noreste, mientras que el otro iba hacia el noroeste. El árbol se seguía vislumbrando hacia el noreste de nuestra posición, así que debíamos avanzar por allí. Pensaba una manera de planificar el avance, enfrentándonos a la menor cantidad de enemigos posibles, pero cuando quise darme cuenta, Brigid había dado un paso adelante.

Rugió, y alzando su mandoble, cargó contra algunos monstruos. La ferocidad que desprendía Brigid, fruto del Shinryu, que albergaba en su interior, logró causar el impacto necesario para ahuyentar a casi todos los monstruos. Solo un par se mantuvo allí, y acabaron sucumbiendo a los tajos de la monje. En el proceso, recogió unos polvos especiales de una Amanita y una de las armas que llevaban los Weis. Era una daga... Uhm, parecía bastante útil. Tal vez podría intentar robarles una yo también a alguno...

—Vaya, Brigid... Buen trabajo, como de costumbre —dije, sorprendido, fijando mi vista en la daga que acababa de recoger—. Esto nos facilita mucho el camino, continuemos por allí —respondí, señalando el camino noreste—. Acabamos de ganar un tiempo valioso, no lo desaprovechemos.

Contenido oculto

Aaaa quiero la daga, me la cambias por algo? ;-; Tengo ingredientes y materiales y y y algo de armaduras, pick what you want (??)

 

Rigel Betelgeuse

Al avanzar por el sendero, comenzamos a oír una voz a lo lejos. Llegamos a un nuevo cruce, con Baobab al norte y tres salidas al sur. Pero lo más llamativo es que el lugar estaba lleno de Weis. Y un Moguri, que se encontraba acorralado por los Weis.

—¡Mirad, un Moguri! —comenté en voz baja—. Corramos a ayudarle, necesitamos ganarnos su confianza si queremos ayuda.

Weis mágico + Weis x3

 

El moguri se sobresaltó al ver llegar a los humanos, claramente desconcertado. Probablemente, lo último que esperaba era encontrar a humanos allí, en su tierra natal, pero... no dudó en refugiarse tras Rigel tan pronto como lo vio.

Una ayuda era ayuda, viniese de quien viniese, ¿no?

—¡A-Ayudad a mogu, kupó! Esos weis malos nos tienen hartos... ¡son muy pesados, kupopó! ¡Mira la mogusenda, invadida! ¡No se cansan, kupó!

Vaya... aparentemente, el conflicto con aquellas criaturas parecía ser más amplio de lo que pensaban...


Fila delantera: Weis A, B, C
Fila trasera: Weis mágico


WEIS MÁGICO
Lvl. 43
Tipo: Humanoide
Salud: 200/200
PM: 300/300
Fuerza: 30
Defensa: 50
Poder Mágico: 90
Terapeucidad: 80
Espíritu: 80
Defensa Mágica: 60
Velocidad: 80
+280 experiencia



WEIS A
Lvl. 42
Tipo: Humanoide
Salud: 250/250
PM: 50/50
Fuerza: 90
Defensa: 60
Poder Mágico: 0
Terapeucidad: 0
Espíritu: 80
Defensa Mágica: 40
Velocidad: 92
+240 experiencia


WEIS B
Lvl. 42
Tipo: Humanoide
Salud: 250/250
PM: 50/50
Fuerza: 90
Defensa: 60
Poder Mágico: 0
Terapeucidad: 0
Espíritu: 80
Defensa Mágica: 40
Velocidad: 92
+240 experiencia


WEIS C
Lvl. 42
Tipo: Humanoide
Salud: 250/250
PM: 50/50
Fuerza: 90
Defensa: 60
Poder Mágico: 0
Terapeucidad: 0
Espíritu: 80
Defensa Mágica: 40
Velocidad: 92
+240 experiencia

Turnos:
- Fauna
- Brigid
- Rigel
- Weis A
- Weis B
- Weis C
- Erin
- Weis mágico
- Fauna
- Brigid
- Rigel
- Weis A
- Weis B
- Weis C
- Erin
- Weis mágico

 

Fauna

El camino transcurrió en silencio. Los ánimos estaban apagados y no podía culpar a nadie. Baobab se divisaba al noreste, en medio del espeso bosque que nos rodeaba.

Podría decir que intenté mantener mi mente centrada y focalizada en alcanzar la aldea moguri... pero no intenté. Era algo automático. Actuaba en automático, como un robot. No sentía, no podía sentir.

Brigid expulsó a los Weis que rondaban sin mayor esfuerzo y seguí su movimiento con ojos apagados. Necesitaba decirle algo: "Lo siento por Aster"; "Recuperaremos el alma de Calum". Pero nada logró salir.

Mi cuerdas vocales parecían atadas. Le había dicho a Flora que me esforzaría, por ella, por ellos en general... pero en ese momento no podía.

Pronto escuchamos una voz y en automático tensé mi arco. Era un moguri. Y estaba siendo acosado por un grupo de Weis.

En cuanto nos acercamos corrió a ocultarse tras Rigel y supe lo que debía hacer.

No había podido proteger a nadie. No podía proteger a nadie.

Pero seguiría intentándolo.

Extendí mi mano izquierda y concentré energía lumínica.

Luz.

¿Seguía siendo el elemento de la pureza después de todo?

Fauna: Día+ (Weis C)

Contenido oculto: Ficha

FAUNA
Lvl. 46
Exp. sig. nv.: 1595
PH: 11
- PS: 93/93
- PM: 142/142
- Trance: 0/100
- Fuerza: 62
- Defensa: 67
- Poder Mágico: 86
- Terapeucidad: 128
- Espíritu: 82
- Defensa Mágica: 93
- Velocidad: 98
Resistencias y debilidades:
- Resistente a hielo (x0,5)
Dominio de armas:
+10% Arcos
+10% Bastones
Armas equipadas:
- Arco rúnico (11 Daño físico, hace el mismo daño desde la fila de atrás; quien lo porte recibirá un bonus de x1,25 potencia base en cualquier magia, técnica u objeto que provoque daño mágico (Media fue-vel: 75))
Armadura equipada:
-Pantalones de sigilo (+6 velocidad, otorga un 5% extra de dominio de arcos)
- Armadura de mago de batalla (+10 Defensa mágica, +3 Poder mágico, +3 Terapeucidad, aumenta en un 5% el dominio de varas y bastones del portador)
-Capucha sigilosa (+5 PM, +2 Espíritu)
-Zapatos tradicionales (+5 PS, +5 Velocidad)

Habilidades pasivas:
- Mejor trance: sube a 4 el número de turnos que dura el trance de la usuaria y modifica el bonus de estadísticas.
- Vista de halcón: el usuario será mucho menos susceptible a sufrir ceguera o bajadas de precisión de cualquier tipo. Aumenta en dos caras el dado que vaya a lanzarse para determinar la aplicación de ceguera o efectos similares. Si no lleva aparejado dados y es inmediato, lanza un dado de 5 caras en su lugar, y si sale 1, no sufres el efecto aun así.
- Don sanador: si Fauna usa una habilidad u objeto que suponga una curación y lleve aparejado un ratio sobre sí misma o un aliado, y en su próxima acción usa otra habilidad u objeto curativo con ratio (aunque sea otra acción distinta), la segunda habilidad u objeto mejora su ratio +0,2. Se sigue acumulando esa mejora si se siguen usando curaciones sucesivas en la misma persona, sumando cada vez un +0,2 extra.
- Don de luz: mejora el poder de los ataques de elemento sagrado de la usuaria. La potencia base de todo arma, magia, objeto o técnica que tenga elemento sagrado se multiplicará x1,5 (excluye invocaciones).
- Geocontrol: Rocas: el usuario gana un 20% de defensa cuando lucha en cuevas, terrenos montañosos, desiertos y terrenos sólidos en general.

Habilidades y técnicas:
- Tiro rápido [solo arcos]: tensa el arco y lanza una flecha a gran velocidad, pudiendo bajar la propia velocidad del rival brevemente. +10 potencia física, lanza un dado de 3 caras, si sale 1, retrasa en una posición el turno del objetivo de la lista para esa ronda (Coste: 4 PM)
- Flecha certera [solo arcos]: flechazo directo al punto débil del rival. Puede resultar en un golpe crítico. +10 Daño, lanza un dado de 7 caras, si sale 1, hace el doble del daño normal. (Coste: 6 PM)
- Paz mental [solo bastones]: crea un aura que protege a los aliados de sufrir daño aumentado por debilidades elementales. Otorga a todos los aliados un estado especial (P.M.) según espíritu. Mientras dure, cualquier debilidad elemental, sea natural o sea motivada por Aquiles o algún otro efecto, será anulada y el grupo recibirá daño neutro por ella. (Coste: 12 PM)
- Lluvia de piedad: hace caer una lluvia de energía curativa que restablece mínimamente los PV y PM del grupo durante tres turnos. PV curados por turno: Terapeucidad x0,1; PM curados por turno: Terapeucidad x0,05 (máx. 5 PM). (Coste: 15 PM)
- Fuerza natural: concentra la energía del ambiente y daña a un rival, mermando moderadamente uno de sus atributos. El atributo que se merme dependerá del terreno en el que se luche. 15 Daño Mágico neutro. Bajará la fuerza en ciudades, la defensa en montañas/cuevas, el poder mágico en lagos/costas/mar y la defensa mágica en Bosques/Praderas/Espacios verdes (Coste: 6 PM)
- Cura natural: concentra la energía del ambiente y cura a un aliado, subiendo moderadamente uno de sus atributos. El atributo que se mejore dependerá del terreno en el que se luche. +30 PS, Ratio x0,33. Subirá en 10 la fuerza en ciudades, la defensa en montañas/cuevas, el poder mágico en lagos/costas/mar y la defensa máguica en Bosques/Praderas/Espacios verdes. Solo se stackea hasta un máximo de +20 puntos. (Coste: 12 PM)

Magia blanca:
-Cura: +20 PS. Ratio x0,2 (Coste: 6 PM)
-Cura+: +40 PS. Ratio x0,33 (Coste: 14 PM)
-Cura++: +60 PS. Ratio x0,5 (Coste: 22 PM)
-Omnicura: +20 PS. Ratio x0,33. Cura a todos los aliados (Coste: 22 PM)
-Lázaro: revive a un aliado caído, con 1/4 de su vida máxima + ratio x0,25 (Coste: 20 PM)
-Lázaro+: revive a un aliado caído, con 1/2 de su vida máxima + ratio x0,25 (Coste: 32 PM)
-Luz: sana ceguera (Coste: 5 PM)
-Vocal: sana mudez (Coste: 5 PM)
-Pura: sana veneno (Coste: 5 PM)
-Despejar: sana sueño, amnesia y confusión (Coste: 6 PM)
-Esna: cura cualquier estado alterado negativo de un aliado. Sanará todos los estados que tenga el objetivo (Coste: 16 PM)
-Relax: sana piedra o la cuenta atrás de esta (Coste: 6 PM)
-Antitodo: otorga inmunidad a los elementos a un aliado, pero solo protege de un ataque, desapareciendo el estado tras recibir un ataque elemental (Coste: 8 PM)
-Coraza: otorga coraza a un aliado (Coste: 10 PM)
-Escudo: otorga escudo a un aliado (Coste: 10 PM)
-Astra: otorga velo a un aliado, protegiéndole de sufrir estados negativos por la duración del estado (Coste: 12 PM)
-Revitalia: otorga revitalia a un aliado. Durará según espíritu, y curará por turno los PS que resulten de terapeucidad de la usuaria x0,2 (Coste: 16 PM)
-Revitalia+: otorga revitalia a un aliado. Durará según espíritu, y curará por turno los PS que resulten de terapeucidad de la usuaria x0,4 (Coste: 28 PM)
-Resanación: otorga resanación a un aliado. Durará según espíritu, curará los PM que resulten de terapeucidad de la usuaria x0,1 (Coste: 20 PM)
-Día: 45 daño mágico, elemento luz (Coste: 6 PM)
-Día+: 75 daño mágico, elemento luz (Coste: 13 PM)

Invocar:
- Gilgamesh (nv. 1): invoca a Gilgamesh, el eidolón de Zénit. Usa una cadena poderosa de ataques, golpeando aleatoriamente a los enemigos con sus diferentes espadas. Causa entre 1 y 8 golpes, con 70 de ofensiva para el cálculo de daño, a enemigos aleatorios. El número de golpes y los enemigos golpeados se decidirá por dados. Activable solo cuando los PS de Fauna estén por debajo de 1/4 (Coste: 25 PM)
- Fenrir (nv.1): invoca a Fenrir, el lobo lunar. Su aullido purifica a los aliados y les devuelve las energías perdidas. Cura todos los problemas de estado negativos del grupo y reestablece los PM de todos los aliados (excluyendo a Fauna) curándolos en 1/2 de su máximo. Activable solo cuando Fauna sufre dos o más estados alterados negativos (Coste: 20 PM)

Trance:
- Requisitos: +10 por cada curación de estados. +5 por cada curación de PS.
- Bonus: +10% Terapeucidad, +10% Defensa Mágica, +20% Poder Mágico.
- Habilidad pasiva: Eco Blanco: permite usar dos hechizos de magia blanca en un mismo turno.
- Ataques combinados:
>> Cruz santa (con Hendrick): baña la espada de Hendrick con luz, y este ataca generando un destello purificador. +50 Daño físico, daño de luz, golpea a un enemigo, cura a todos los aliados con la mitad de daño. Usa la fuerza de Hendrick para el cálculo de daño. *sonidos tristes*
>> Plegaria sagrada (con Flora): Fauna y Flora recitan juntas las plegarias sagradas áureas, y unen la magia de la primera con la fuerza de la segunda. Por tres turnos, Fauna adquirirá la estadística de fuerza de Flora, y Flora adquirirá el poder mágico de Fauna (sin perder ninguna su poder mágico y fuerza, respectivamente, originales), además de transformar sus ataques básicos en golpes mágicos neutrales.

 

Brigid

Escuchó a Rigel y giró su vista hacia él sonriendo por sus palabras, fue allí que notó que observaba la daga que ahora estaba en su mano —¿Sabes? —inició con una pregunta para llamar su atención —Esta es un arma muy pequeña para mi, un mondadientes — observó nuevamente la daga y sonrió — Tus ojos no mienten, si la quieres puedo intercambiarla por algo; así ambos podemos sacar provecho y mejorar armamento. Aun estoy entendiendo la síntesis de armas; pero creo que puede ayudarme un poco de plata. ¿Qué dices? —preguntó algo avergonzada, pues simplemente le regalaría la daga a Rigel; pero tal vez sería bueno pedirle ayuda para que ella también mejorara sus armas.

Pero antes de que pudieran terminar de conversar, se escuchó una voz peculiar a la distancia, era un moguri. Y sin detenerse, el grupo decidió ir a ayudarlo.

A su sorpresa, Fauna decidió atacar. Su mirada perdida, aquello la angustió profundamente; seguramente estaba cargando demasiado, y le dolía no saber ayudarla.

Brigid: Caída del dragón [Weis Mágico]

Contenido oculto: Ficha Brigid

BRIGID
Lvl. 46
Exp. sig. nv.: 1030
PH: 0
- PS: 205/205
- Trance: 55/100
- PM: 58/76
- Fuerza: 150
- Defensa: 105
- Poder Mágico: 50
- Terapeucidad: 76
- Espíritu: 79
- Defensa Mágica: 90
- Velocidad: 94
Dominio:
- Manguales (5%)
- Martillos (+35%)
- Mandobles (+5%)
Armas equipadas:
- Mandoble de bronce (16 Daño físico)
Armadura equipada:
- Casco de guardia áureo (+6 Defensa mágica, +3 Poder mágico; si se porta el set completo, aumenta en 5% el dominio para todas las armas que pueda usar el portador)
- Traje de guardia áureo (+6 Defensa, +3 Fuerza; si se porta el set completo, aumenta en 5% el dominio para todas las armas que pueda usar el portador)
- Pantalones de guardia áureo (+6 Defensa mágica, +3 Terapeucidad; si se porta el set completo, aumenta en 5% el dominio para todas las armas que pueda usar el portador)
- Botas de guardia áureo (+6 Defensa, +3 Velocidad; si se porta el set completo, aumenta en 5% el dominio para todas las armas que pueda usar el portador)

Habilidades pasivas:
- Cuerpo a cuerpo: si ataca desarmada, su fuerza sube en un 10% extra (Fuerza desarmada actual: 165)
- Fuente de rabia: entra en estado Locura automáticamente si su PV baja de un 25%, y no saldrá del estado a menos que su PV suba de dicha cantidad. Esta habilidad puede activarse y desactivarse. ACTIVADA.
- Robustez: Gana un 10% de PV perdido por cada enemigo derrotado con un martillo.

Habilidades y técnicas:
- Castigador [solo manguales]: ataca con fuerza, haciendo especial daño a enemigos humanoides. +10 Daño físico. Hace x1,5 el daño normal a los enemigos humanoides (Coste: 4 PM)
- Quiebrayelmos [solo martillos]: golpe poderoso contra un enemigo que puede reducir bastante su defensa. +15 daño físico. Lanza un dado de 3 caras, si sale 1, baja la defensa rival en 10 puntos. (Coste: 7 PM)
- Torbellino [solo martillos]: golpea con el martillo a todos los enemigos. +5 Daño físico, golpea a todos. (Coste: 8 PM)
- Guardia de mandoble [solo mandobles]: se protege con el mandoble, reduciendo a la mitad todo el daño recibido hasta su próximo turno. Reduce a la mitad el daño recibido hasta su próximo turno (Coste: 6 PM)
- Guillotina final: baña el mandoble en luz y arremete con brutalidad verticalmente contra un enemigo, causando mucho daño físico de dicho elemento. +30 Daño físico, elemento luz (Coste: 12 PM)
- Cabezazo: golpea con la cabeza al enemigo violentamente, lo cual le daña y le provoca, haciendo que su atención se centre en la usuaria. 30 Daño físico. El objetivo atacará a Brigid en su próximo turno (Coste: 6 PM)
- Golpe arriesgado: golpe desarmada que hace más daño cuanto menos PS tenga el rival. Si el rival tiene más del 75% de los PS, 0 daño físico. Si el rival tiene entre el 50 y el 75% de los PS, 20 daño físico. Si el rival tiene entre el 25% y el 50% de los PS, 40 daño físico; si el rival tiene menos del 25% de los PS, 60 daño físico (Coste PM: 10)
- Berserker: causa el estado Locura al objetivo. (Coste: 10 PM)
- Multifortalecimiento: aumenta bastante la defensa de todos los aliados. Sube la defensa del grupo en 10 puntos. Solo puede usarse hasta dos veces en la batalla. (Coste: 16 PM)
- Chakra: canaliza el kiai interior para curar ligeramente los PV y PM de un aliado. +15 PS, +5 PM; ratio para PS = x0,2; ratio para PM = x0,05 (Coste: 10 PM)
- Halo: cura PV y problemas de estado a un aliado. +15 PS, ratio x0,3; cura el problema de estado más antiguo que padezca el afectado (Coste: 8 PM)
- Caída del dragón: canaliza la energía del Shinryu en una sola mano, golpeando a un rival desarmada. Tras atacar, ejecuta inmediatamente el efecto de Chakra o Halo en la usuaria. Si derrota a un rival con este ataque, sube su fuerza. 10 Daño físico, aplica Chakra/Halo (a elección) sobre la usuaria. Si derrota al enemigo, +10 fuerza propia (Coste: 18 PM)

Trance:
- Requisitos: +5 por cada ataque ofensivo que use sobre un enemigo; +20 si es reanimada en mitad de una batalla después de estar KO (solo una vez por batalla).
- Bonus: +10% fuerza, +10% terapeucidad y +10% defensa.
- Hab. pasiva: Energía verde (añade un 20% de posibilidades de esquivar cualquier golpe -dado de 10 caras, si sale 1-2 se esquivará- y hace que, a cambio de consumir el doble de PM, todas las técnicas de "Kiai" afecten a todos los enemigos o a todos los aliados. Tales técnicas son: Chakra, Resucitar, Halo, Maleficio, Armonía)

Inventario:
- Poción (+20 PS, ratio x0,2) (x3)
- Omnipoción (+30 PS, ratio 0,25, cura a todos los aliados) (x4)
- Cola de fénix (revive a un aliado caído con PS iguales a ratio x0,33) (x5)
- Éter (+10 PM, ratio x0,05) (x3)
- Omniéter (+20 PM, ratio x0,1, cura a todos los aliados) (x2)
- Panacea (cura cualquier problema de estado) (x6)
- Antídoto (cura el estado veneno) (x1)
- Aguja de oro (cura petrificación)
Guiles: 1705