Ahogo. He pasado mucho tiempo en este lugar, he de admitir que quizá ya me haya acostumbrado y qué quizá no sea tan malo como parece. Nunca había estado tan sola como ahora, acompañada sólo de mí y una radiante luz que viene en ocasiones a visitarme, qué la única música que escuche sea el silencio, el sonido hueco de las cadenas y mis jadeos ahogados en el vacío. Pidiendo ayuda Pero, al final siempre llego al mismo lugar y nunca llega nadie a responder mi llamado. Una corriente me empuja con fuerza acompañada de sonoras risas y palabras que nunca llego a comprender del todo, me sostengo de las pesadas cadenas para no perder el rumbo de nuevo. Es difícil, nadie puede ganarle a la fuerza del mar. El mar, siempre le he tenido un gran pavor desde que era niña y es irónico que ahora esté atada a él. Todos los días es una sensación de ahogo y pánico porqué no logro ver más allá del lugar donde ni siquiera puedo moverme con libre, abrazarme a mi misma y calmarme un poco, o tal vez cubrirme del frío. Sería peor si yo vagase por el mar sin un rumbo fijo y que cayera en un lugar mucho peor o que ni siquiera pueda mantenerme en pie en mi lugar, sonará extraño pero me alegra el solo tener las manos y tobillos sujetos. He intentado huir pero siempre me pregunto que será de mi pequeña amiga y qué pensará si me voy sin decirle nada. Además de qué al parecer no puedo hacer nada más que tirar y esperar a que la arena me suelte. Es inútil, lo único bueno de este lugar es la luz. No sé qué es o de dónde viene pero es realmente hermosa, en algunas ocasiones me permite tocarla y otras veces la siento sonreír aunque no pueda verlo. Eso me calma mucho. Ambas nos quedamos en silencio, yo admirando su brillo y ella solo mira las cadenas. Sería muy fácil echarle la culpa del que yo esté aquí, pero sé que eso no es verdad. Ella es la única que ha estado ahí para mi. Y mientras yo siga aquí será mucho más fácil si ella se queda conmigo. Y espero que cuando suba a superficie pueda saber qué o quien realmente es.
Ha sido precioso de leer. Quizás es la narración lenta y pausada que usas, lo leí varias veces mientras que me imaginaba la escena. Y casi que lo sentí como el inicio de Diver, la canción que es un opening de Naruto.