Zero no Tsukaima Academia de magia de Tristan

Alisson

Escuche al director dando un anuncio, ¿lucha?¿que es eso? la verdad no me importaba pero sonaba divertido. Me acerque al patio dejando a jack y a la otra chica atrás, para mirar lo que sucedía, muchos alumnos mas se sumaron al patio.

—¿que sucede?... ¡quiero saber!—dije dando repetidos saltos hasta que alguien me contestara.

De un momento a otro preferí tomar mi arco y tenerlo listo para cualquier cosa, no se sabe, tal vez un pato gigante llegara a atacarnos...no un pato no...eso seria raro...

 

Liam K. Walker.

Dejó sus maletas en frente a las dos gigantescas puertas de la Academia, era de una infraestructura realmente hermosa, parecía una mansión digna de duques y reyes, cinco horas le tomó venir /a caballo/ pero esa imagen compensaba todo el cansancio, sí, pasaron algunos meses y sería el chico de intercambio o el chico nuevo pero en realidad no le molestaba eso, siempre le ponía buena cara a las situaciones, sabría hacer amigos, lo esencial por el momento era instaurarse por lo que empujó las puertas de la Academia. Por adentro no tenía nada que envidiarle a otros sitios de alta gama, estaba dien decorado y presentaba una buena fachada a primera vista, escaleras bien contorneadas y cuadros epistolares, cómo si fueran a hablarte, una señorita de no tanta gana te atendía, su edad rondaba a los 28 a 30 años, masticaba chicle y verificaba tu nombre es su pequeña lista.

—¿Liam me dijiste?—
—Sí, mucho gusto.
—Ajá, ajá, habitación 201.

Hizo una reverencia a la señorita y le regaló una sonrisa por atenderlo, él juró ver que ella también sonrió, y que los pelos que sobresalían de su verruga se movían al contorno del viento, también debía ir a hablar con el director y hacer un montón de trámites pero quería descansar un poco, al parecer todos dormían por lo que entró sigiloso a su habitación. Era una suite bastante hermosa, digna del hermoso lugar, soltó todas sus maletas y se estiró un poco, esbozó un ligero bostezo, debía bañarse, agarró algunas ropas y su toalla, sospechaba que sería una noche larga. Tardó unos quince minutos en bañarse y ponerse su pijama, esta consistía en unos dibujos de elefantes, en ese sentido aun conservaba su niñez. La alarma sonó eficazmente, eran las seis de la mañana y comenzaba otro día.

—Ay... Mi espalda. — Se tocó la espalda y estiró sus brazos, sonrió con los ojos bastante cerrados, se llevó el pelo hacia atrás y prosiguió a entrar al baño de nuevo, hoy sería su presentación debía ir bien aseado.

 

Matthew

Finalmente habíamos logrado entrar a la academia sin daño aparente,mi familiar se mantenía sobre mi cuidando todo por si acaso pasaba algo y Elizabeth seguía montada en mi corcel junto conmigo, al final a ella tendría que enseñarle a andar en uno del establo, no podíamos estar montando el mismo caballo todo el rato, no era malo pero... no podía hacer muchas cosas sin que ella se asustara.

— Chica de pueblo — miré a Rachel y le señalé con un ligero movimiento de cabeza los establos — Espero que sepas bien como quitar monturas y como tratar al caballo después de montarlo, no me gustaría pensar que sabes mas cosas del pueblo que de tu entorno mismo.

 

Rachel

Mi mandibula se tenso cuando Matt me llamo ”Chica de pueblo" ¿Quién se cree?

—¡No seas idiota, estirado!—Exclamé mientras ambos caballos se acercaban al establo— Como soy un "chica de PUEBLO" se cuidar a los caballos, hacer tareas domesticas y más. No soy mala en cosas...aunque no se tú—Le respondí mientras mi fénix se posaba en mi hombro.

 

Matthew

— Gracias por admitir de una vez por todas que eres una chica de pueblo, aunque para que engañarnos, ya los sabíamos todos — alcé mis hombros despreocupado y cuando estuvimos ya frente al establo bajé de mi caballo y ayudé a Elizabeth a bajar de este también para comenzar a quitarle las monturas y riendas al corcel.

— Yo se lo que todo noble debe saber mas... ciertas cosas más — reí levemente — Y ahora que se que tú puedes hacer todo lo que una pueblerina hace... quiero creer que realmente te ponen a hacer eso en tu familia ya que, querida... no existe otra explicación

 

Elizabeth.

Matthew me había ayudado a bajar del caball. Ya en el suelo el prosiguió a quitarle la montura a su caballo mientras yo aregabla mi vestido y luego proseguía a peinarme el cabello con los dedos. Esto seria un desastre a la hora de peinarlo como se debe.

Camine hasta Rae y me reviste en su hombro cansada.
—Solo ignora sus comentarios —el tono que use era para que solo ella me escuchara —, es molesto estar en medio de las disputas —di un bostezo, claro que cubrí mi boca —, y no me quieren ver molesta, ¿verdad?

 

Rachel

Tras bajarme de White me acerque a paso rápido a Matthew antes de que Eliza se me acercara, al llegar a su lado le di una patada en la pierna mientras apretaba ambos puños.

—¡Callate, maldito Estirado! —Le dije antes de acercarme a mi caballo— Sí, me hacian hacer esas tareas ¡Pero adivina! No todos tenian una buena vida de lujo antes ¿Captas? No por ser noble te creas.

Tras decir eso Eliza se me acerco y yo le sonreí a ella, antes de asentir.

 

Matthew

Una ligera risa salió de mis labios al escucharla decir eso, pero era algo que me esperaba de respuesta, y no es por que me "creyera" por ser noble, simplemente había distintos niveles, eso era todo. Ignorando los demás comentarios me dirigí a Elizabeth — No era una discusión realmente pero tranquila... nadie te quiere ver enojada — alcé mis hombros restandole importancia y una vez que finalicé el trabajo dejé al corcel en el establo en su respectiva caballeriza

— La academia no parece haber sufrido nada del ataque..

 

Rachel

Fulmine con la mirada a Matt y cuando nos dio la espalda me acerque a White y tras quitarle la montura le acarie el hocico.

—Por suerte tienes razón, Estirado—Le dije a Matthew antes de que Eliza y yo salieramos del establo. En ese momento el director anuncio que los de la clase C iban a tener su clase en el patio con Agnes.

 

Alisson

Bueno, igual ni me entero de que rayos pasa, que va, ni quería saber—a quien engaño, ¡si quería!—comencé a caminar un ratito por al academia, y a los pocos segundos me fui dando saltitos en vez de caminar, tal cual, era un poquis aburrido caminar como una persona normal, para mi claro.

—Pa ra pa, pa pa ra pa....Bueno, escuche sobre que habia habitaciones por aquí, ¿en donde estarán?—dije mirando a todos lados sin parar de dar pequeños saltos.

En ese momento escuche que algunos de clase C estarían con una maestra de nombre...Agnes...me sonaba a algo raro, no lo recordaba pero era raro...y asqueroso. A si las habitaciones.

—Buenooo, no deben estar lejos supongo—dije poniendo el dedo meñique en mi mentón, a y, claro, ¿cuando comenzarían las clases para mi? la verdad sigo sin ponerme al tanto con este lugar.

 

Matthew

A punto de abrir mi boca para decir otro comentario, la voz de nuestro director se hizo presente anunciando que mi clase le tocaba con Agnes una vez más, ¿qué tanto se desquitaría la profesora hoy? ¿qué tanto extrañó mi presencia?, ante esto último solté una leve risa antes de retirarme despidiéndome en concreto solo de Elizabeth y me reiré con las manos posicionadas en mi nuca tranquilamente.

— ¡Oye Agnes! — alcé la voz justo cuando estuve cerca de ella, pero aun me faltaban un par de metros para estar en su rango de ataque — ¿Cómo han ido los golpes que accidentalmente te di en nuestro combate? — pregunté con una sonrisa, probablemente eso sería irrespetuoso pero.. he de decir que esa era nuestra relación, ella intentando matarme y yo haciendola molestar

 

Agnes

Cuando escuche que me gritaban algo lo primero que hice fue darme la vuelta a la vez que sacaba mi espada y señalaba a esa persona con ella.

La punta de la espada le toco la nariz a Matthew, ¿Qué se creí hablandome así?

Guarde mi espada y le miré con expresión de superioridad, aunque claro, la tenia.

—Eres tú, Connor—Respondí antes de colgar un saco en mi hombro—...Mi imaginare que no me llamaste solo por mi nombre y que no preguntaste aquello...

Tras decirle eso le di un golpe en el hombro para hacerle señas a que me siguiera; cuando llegamos al patio trasero todo los demas estaban allí.

Connor se puso donde los demas y tras dejar el saco en el suelo los vi a todos.

—Bien, fracasados, esta vez no usaremos espadas y obvio que no magia...—Quite una manta que cubría varios blancos, luego saque del saco una pistola—Esta vez usaremos esto.

Rachel

Suspire mientras veía al rubio irse; ¿Qué le pasaba a esté? ¿Tanto amaba hacerle la vida imposible a alguien?

Apreté los dientes mientras murmuraba un "Un día de estos...".

—Bueno, Eliza ¿Nos vamos a clases?

 

Elizabeth.

Nos tocaba la siguiente clase en el patio, sonaba bastante interesante, falte a la primera clase al quedarme dormida, así que estaba un poco nerviosa de que la profesora notara mi anterior ausencia. Esta maestra tenia un temperamento de locos. La voz de Rae me saco de mis pensamientos, la mire con una sonrisa.

—Claro, recuerda el humor de la profesora —respondí mientras caminábamos a donde se daría la clase.

 

Matthew

La reacción que tuvo Agnes no fue realmente la esperada por mi parte, pero había sido algo mejor de lo que me había imaginado, de hecho ya me imaginaba en la enfermería por un tajo mortal y ella disculpándose con el director diciendo que había sido un accidente y que no iba a pasar otra vez así que solamente queme apuntara y que me diera ese golpe me había aliviado solo un poco.

— Tú fuiste la que me dijo en un principio que te llamara Agnes, ¿acaso lo olvidas? — pregunté colocando mis manos en mis bolsillos antes de retirarme con los demás para notar con sorpresa que ella sostenía una pistola: estoy muerto.

— ¿Nos enseñarás a usar la pistola porque crees que es una forma más fácil de matar a un mago? — esta pregunta tendría dos posibles respuestas, la primera que no alcanzaría a escuchar porque ya tendría una bala en el pecho o la segunda donde se me respondería de la manera mas correcta, pero sea cual sea el caso ya tenía mi varita preparada para incinerar la posible bala

 

Agnes

Fulmine con la mirada a Connor por su pregunta; Lance la pistola al aire y la atrape, luego presiono el cañon apuntando hacia Connor y las balad hacen click en su lugar. Pero me arrepenti al tratar de dispararle, lo más seguro es que si asesinara a un estudiante el director me sacaria a patadas de aquí.

Ninguna bala salio disparada así que no la baje.

—Otro de tus comentarios y no me importaran que me echen, te disparo—Le dije, aunque en parte era mentira eso...no podia arriesgarme.

Baje la pistola y le di una a cada estudiante; cuando llegue donde Matthew mantuve presión en la pistola cuando la puse en su palma.

 

Matthew

Lanzó su pistola al aire y la atrapó en el aire antes de apuntarme pero mi expresión no cambio en lo absoluto, ¿dispararía o no?, si la suerte no me acompañaba podría incinerar la bala sin ningún problema y si no lo lograba pues... directo a la enfermería que mas importaba, el problema del despido sería de ella, no mio.

"Otro de tus comentarios y no me importaran que me echen, te disparo"

Sin más se limitó a bajar su pistola y paso a entregarle a cada uno de nosotros una pistola y por último estaba yo, apenas colocó la pistola en la palma de mi mano ni siquiera quiso soltarla, seguía ejerciendo presión en esta — Tranquila Agnes, no me haré daño con la pistola, no hay de que preocuparse — le sonreí y ejerciendo algo más de fuerza logré arrebatarle la pistola — Después de todo soy tu alumno favorito, no quisiera que te preocuparas mucho por mi~

 

Agnes.

Sonreí de manera casi forzada mientras trataba de no volver a alzar el arma; hubiera sido mejor que hubiera presionado el gatillo.

—Cierra la boca, Connor...—Le espeté antes de que dos chicas más llegaran al grupo, una pelinegra y una rubia. Fruncí el ceño antes de tomar dos pistolas más y dárselas en la mano—La próxima vez que lleguen tarde, ya verán—Tras decirles eso, la pelinegra trato de decirme algo pero yo me alejé y me puse frente a un objetivo; un cuadro de madera con tres círculos rojos uno para cada uno de ellos.

—Bueno, no se si les dijeron pero...para que ustedes puedan subir de rango y lleguen a subir de año más rápido y participar en las guerras, ustedes deberán pasar varias etapas donde cada uno recibirá puntuaciones y los quince primeros que tengan mayor puntuación son los que participaran en las guerras y se podrán quedar...en cambio, los que tengan muy bajas puntuaciones se deberán ir de esta academia hacia la de principiantes....así que mejor ustedes hagan lo posible para ganar puntos en las etapas.

Tras explicar eso me puse de pie con las piernas abiertas, sostengo el arma con ambas manos y disparo, la bala atravesó el círculo del medio.

Rachel.

Eliza y yo llegamos con el grupo y cuando yo me iba a alejar Agnes nos dio una arma; traté de explicarle que yo no era de esta sección pero no me dejo hablar. Bueno, así podría probar clases con ella, lo cual nunca hice.

Tras escuchar su explicación tragué en seco, ojala que las etapas no fueran tan difíciles. Pero bueno, cuando ella disparo la explosión fue tan fuerte que me dolieron los oídos;

 

Matthew

"Cierra la boca, Connor..."

Y yo solo me limité a reir un poco ante eso, a fin de cuentas seguía teniendo una paciencia limitada hacia mi persona, pero bueno, cada maestro tenía sus propios medios para ser molestado y sabía que en el fondo, muy en el fondo le agradaba el hecho de que me "atreviera" a cuestionarla solo un poco.

— Iniciemos con esto...— murmuré cargando el arma y disparando, había dado al segundo circulo blanco después del centro rojo, no estaba tan mal a fin de cuentas, pero podía mejorarlo

 

Agnes.

Me crucé de brazos mientras veía a todos los estudiantes dispararle a los blancos; aunque miraba a todos con atención al que más veía era a Connor, no lo hacia mal pero esperaba mejor de él.

—¡Sigan intentándolo y haganlo mejor idiotas! tengan en cuenta que si no lo hacen bien ¡NO ganaran muchos puntos y ADIÓS! No esta sus madres aquí, así que no sean bebes y disparen al centro—Les grite a todos, aunque me cuestionaran este era mi método de apoyo moral.

Los familiares de algunos estaban cerca pero cuando les miré todos se alejaron de los estudiantes para que yo no les disparara, por si acaso.

 

Elizabeth.

Los constantes gritos de la profesora me des concentraban bastante, lograba llegar a una parte cercana del blanco, pero no parecía ser suficiente ya que la maestra no dejaba sus gritos a nuestras personas.

Después de gastar un par de balas más me aburrí y deje de intentarlo, en definitiva no llegaría más cerca del centro si la profesora seguía hablándonos en ese tono.