Zero no Tsukaima Academia de magia de Tristan

Matthew

Se encaminó a la puerta después de chocar sus manos en mis mejillas con una sonrisa y la seguí de cerca no sin antes decirle a Daiki que si quería y se desocupaba ya sabría a donde iríamos. Mientras tanto Elizabeth y yo nos dirigimos al patio para empezar a recorrerlo — ¿Emocionada?

 

Elizabeth.

—Totalmente —ya estaba despierta al 100%, salimos al patio y de inmediato Kit llegó volando a hacernos compañía —¿Tú tienes tu propio caballo Matthew?

 

Daiki uchida

Escuché a Matthew y pensé...¿sería bueno ir después de lo ocurrido? Me encogí de hombros, el pasado era parte del pasado porlo que sin más me levanté, me despedí del pelirrojo, la profesora y los seguí en silencio hasta el patio.
—¿Y lo primero es..? —pregunté con las manos en los bolsillos.

 

Matthew

Ya nos encontrábamos cerca de los establos ya que lo podíamos ver desde nuestra posición — Sí, tengo mi propio caballo, pero lo curioso es que todavía no le pongo nombre — llevaba máximo 5 años con un caballo propio y no le había puesto nombre debido a la falta de imaginación que tenía para colocarlos — Lo primero es, Uchida, por punto crítico llegar a los establos, a menos que sepas montar al aire en si...

 

Elizabeth.

—Tal ves si pueda ya que es un mago de aire —comenté con una gran sonrisa volteando me a Daiki caminando de espaldas a los establos —, ¿puedes hacerlo, Daiki?

 

Daiki Uchida

Reí ante el comentario del rubio, así que podía hacer bromas, ¿eh? Miré a Elizabeth y asentí...Flotar era sencillo para un mage de viento.
—Sé que primero debemos llegar, pero una vez allí, ¿qué será lo primero? —suponía sería algo de equilibrio...

 

Matthew

— Pues subir al caballo por primera estancia y mantenerte allí, no es algo complicado realmente ya tienes una silla. Y cuando te sientas cómodo saber tomar las riendas — eso era lo esencial a mi parecer saber como subir y saber sostenerte, fuera de eso solo era cuestión te tenerte suficiente confianza para mantenerte alli

 

Daiki.

Parecía sencillo pero sabía por experiencia que una cosa era decirlo y otra totalmente practicarlo así que solté un suspiro.
—Bueno, veremos con las acciones —dije con una sonrisa para mirar a Elizabeth—, y tu, ¿por qué quieres aprender?

 

No veía nadie cerca, lo que me faltaba es compania...

 

Elizabeth.

—Se oye divertido intentarlo —me encogí de hombros para voltear nuevamente a los establos.

El resto del camino se hizo corto, al llegar yo me coloque en la puerta para ver mejor a los caballos — ¿Cuál es el tuyo Matthew?

 

Me levanté de la pared, para observar un poco lejos un par de establos, lo que me dio algo de animo a ir.

 

Matthew

Por fin habíamos llegado, Elizabeth se colocó en la puerta de los establos para verlos mejor, yo la rodee para adentrarme a estos y caminé hacia un caballo negro de pelo largo — Este es mi caballo, "sin nombre" por ahora, luego se me ocurrirá uno... — le coloqué la rienda que estaba colgada en uno de los compartimientos del establo, luego repetí el proceso con dos yeguas blancas

— Las yeguas son mas... mansas por así decirlo, no les causará mucho problema — les expliqué mientras sacaba a los caballos y los amarraba a un poste cercano a ellos — ¿Les parece?

 

Daiki.

El camino fue realmente corto, así que cuando llegamos, miré con emoción a los caballos. Nunca había visto una tan cerca por lo que me parecían fascinantes. Elizabeth preguntó por el caballo de Matthew y sentí curiosidad, así que me quede mirando en silencio al caballo negro. Asentí a su petición de iniciar con las yeguas me parecía buena idea. Cuando volteé vi a una chica acercarse, la desconocía...
—Eh.., ¿hola? —dije cuando estuvo cerca.

 

Allí estaban Matt y Eli.

--Hola chicos--,dije llenado a ellos

 

Había otro presente, cual no había visto por error.

--H-Hola--me disculpe saludando.

 

Matthew

Mientras cepillaba un poco a las yeguas que montarían Daiki y Elizabeth llegó Atemis pero no le saludé ya que lo había reemplazado con una sonrisa de bienvenida — Atemis, saca a tu yegua, montaremos, ¿vale? — no era precisamente una opción de respuesta de si o no, realmente era como invitarle a la fuerza pero ya estaba allí, y no parecia tener a otro lugar a donde ir

 

Elizabeth.

—Me parece fantástico —dije. Escuche una voz femenina y volteé viendo a Atemis saludandonos con una sonrisa —, ¿Atemis tambien monta? —pregunte fascinada —, tienes que acompañarnos, es mi primera vez —dije con una sonrisa mientras miraba al resto de caballos aun en el establo.

 

Daiki.

¿Atemis? Bueno, ya conocía a Matthew y a Elizabeth, así que me encogí de hombros, no era necesario que me conociera a mí.
—No te preocupes, no ha sido nada —contesté con una sonrisa para que no se sintiera mal. Me acerqué al caballo y comencé a acariciarlo...era tan suave al tacto.

 

--Oh, que bien, me encanta montar--dije, llamando con un silbido a Arkien, cual había llegado en unos segundos.

 

Matthew

Atemis había llamado a su familiar para montar, no usaría a una yegua al parecer, pero no importaba, cuestión de gustos. Daiki acariciaba a una de las yeguas y aproveché eso para ir a tomar las sillas colocándole el primero a su yegua — Recuerda no pasar detrás de ella asi de repente, te matara de una patada, si pasas detras de ella asegurate de estarla acariciando para que sepa a donde vas o simplemente no pases detras de ella — pase las correas de la silla por debajo de su lomo para ajustarlas, luego tomé su mano e hice que agarrara el estribo de la silla (donde van los pies) y lo jalara

— Dime si lo sientes flojo para ajustarlo más — le avisé antes de acercar a Elizabeth a su yegua para que empezara a acariciarla de igual forma y se familiarizara con ella mientras iba por la siguiente silla

— ¿Traigo una silla para ti tambien Atemis?