Zero no Tsukaima Academia de magia de Tristan

Escuche el sonido de la puerta abrirse, así que despeje mi mirada de mi maleta ya vacía. Había usado la magia para acomodar mis cosas en mi parte de la habitación.

Cuando voltee vi a una chica entrar a la habitación, suspuse que esa era Elizabeth Zabat.

Yo trague saliva y luego de unos segundos de respiración mental del 1 al 5, una sonrisa se formo en mis labios antes de acercarme a mi compañera, trataria de ser como soy.

--Sí, esa soy yo. Rachel Kimura--Dije sonriendo antes de extender mi mano para estrechar su mano-- entonces, tu eres Elizabeth Zabat ¿no?--Dije sonriendo antes de pensar en algo-- ¿puedo decirte Eliza?

 

Deje de ver el collar, para esconderlo del público nuevamente, y tirarme en la cama, viendo el techo, ya que estaba sola y mi compañera no llegaba.

—¿Se habra ausentado en el primer día? Aunque no es normal, tal vez..—murmuré para mi misma, ya que la habitación estaba vacía.

 

Elizabeth.

—Llamame como gustes. ¿Puedo yo llamarte Rae? —estreche su mano y luego de soltarla tome mi varita, con un simple movimiento ya se había guardado todo en su respectivo lugar y la maleta quedaba bajo mi cama. Me lance a mi cama con cansancio quitandome la capa.

 

Daiki Uchida

Suspiré, no podía dormir con el escándalo de afuera, así que me puse de pie y sacudí mi cabello. Abrí las maletas y comencé a sacar la ropa, hubiera sido más fácil si utilizaba magia pero...quería entretenerme con algo. Si utilizaba la varita, solo conseguiría terminar antes y aburrirme como ostra. Me quite la capa ya que me molestaba un poco y comencé a acomodar la ropa en los cajones.
—Al menos estaré entretenido un tiempo —dije mientras acomodaba la ropa interior en el cajón superior.

 

Me quite la capa y la puse en el respaldar de una de las sillas de la habitación para luego desabotonar el primer botón de mi camisa y acostarme en la cama un poco cansada.

--Claro, llamame Rae si quieres, Eliza--le respondí sonriendo mientras buscaba mi libro de leyendas mágicas, familiares, ect.--…¿En que aula quedaste?--le pregunte sonriendo mientras buscaba en mi bolso.

 

Elizabeth.

—En la 3-C si no me equivoco —coloque una mano en el mentón pensativa luego me encogí de hombros y busque algo en mi bolsa de mano. Termine con unos cascos de musica rosa en la derecha y un fenix de fuego de peluche en la otra.

 

Yuniko Koizumi

El tranquilo silencio al que había estado acostumbrada durante el viaje en coche fue desapareciendo a medida que avanzaba por aquellos largos pasillos, llenándose de murmullos cada vez más altos de lo que parecía ser una masa de estudiantes acumuladas en un mismo lugar. Pasé por la puerta que llevaba al ruidoso lugar, al parecer al amplio patio de la academia, y observé por unos instantes a la multitud de estudiantes que se amontonaban frente a una tarima. Sin intenciones de unirme a ellos, me quedé apoyada al marco de la puerta de brazos cruzados y con mi maleta a mi lado para escuchar al menos las principales indicaciones del director, no quería complicarme mucho el día. Mientras aquel viejo despistado que de seguro se trataba del director esperaba unos papeles para nombrar las aulas y habitaciones de los alumnos, me dediqué a observar al resto de personas por encima; como lo suponía, era la más pequeña de aquí.

Me figuraba que aquellas personas no pasaban los dieciocho años, pero por lo que me fijé los más pequeños eran de unos quince o así. Solté un breve suspiro mientras cerraba los ojos, eso ocurría por pasarme a cursos más avanzados sin siquiera hacer los que les correspondía a mi edad. ¿Memoria fotográfica, inteligencia superior a los de mi edad? Aquello no me importaba, yo solo quería jugar con los demás niños de mi clase como siempre lo había hecho. Aquí no tendré a nadie con quien hacerlo...¿o quizás sí? Una sonrisa traviesa se formó en mis labios fugazmente, y volteé de nuevo a ver al anciano, que al parecer ya tenía la respuesta para darnos.

***

—Habitación F, compartida con Airin no se qué...mmm, ¿será las de aquella parte? —hablaba para mis adentros mientras cruzaba los pasillos de la primera planta, observando con ojo crítico cada detalle del lugar para así quedarme con mayor rapidez dónde quedaba cada cosa.

Caminé hacia el final de aquel largo pasillo pintado con tonos amarillos y marrones casi en su totalidad, y una vez visualicé la letrita que me correspondía sobre la puerta de la habitación, corrí hacia allí aún con mis maletas levitando gracias a mi varita. Abrí la puerta con la llave que me fue asignada y rápidamente la cerré y tiré mis cosas sobre la cama cercana a la ventana.

—Hora de prepararle una pequeña bienvenida a mi nueva compañera de cuarto...—reí divertida y me puse a ello antes de que llegara la susodicha.

 

Airin Yumei

Escuchaba al director con atención, aunque no lo pareciera ya que miraba a todas partes menos a él, cuando nombró mi nombre y mi habitación le miré para despues quedarme algo pensativa

—Uhm.....habitación "F" y mi compañera Yuniko Koizumi—Murmure mientras miraba a mi alrededor para ver si encontraba a mi compañera, al no encontrar a nadie, suspire—Genial....ni idea de quien es—Murmure de nuevo mientras hacia que mis maletas levitaran gracias a mi varita, y me dirigí a mi habitación

Mientras caminaba por uno de los pasillos, noté como ya varias personas ya se habian instalado en sus habitación—Vaya....que rapidez—Dije en voz baja para despues ver mi habitación

Miraba cada una de las habitaciones para ver cual era la mia, parecia que nuestra habitación era la más alejada, miré de nuevo uno de los carteles y por fin llegué a mi habitación

—Parece que es esta—Susurre mientras abria la puerta, escuche algo de ruido dentro de esta por lo que supuse que mi compañera habia sido más rápida que yo—Hola...—Dije a mi compañera pero me sorprendí al ver que el cuarto ya estaba hecho un desastre ya que me habia hecho una.....¿Bienvenida?

 

Sakura Nanami

Dormía plácidamente en mi cama, cuando me desperté y vi que ya era muy tarde

—Llego tarde!!—Dije—Por que el despertador no sonó!!— Grite mientras iba corriendo hacia la escuela

Como no siempre me pasa a mi, siempre llego tarde a los sitios y mas cuando son nuevos
Al llegar vi la escuela, era enorme y me dirigí hacia el patio

 

Yuniko Yoizumi

—Y luego de pulsar este botón, se activaría la caída de la bola que caería hacia...,no,no,así no era, a ver...—hablaba en voz alta mientras comprobaba los últimos detalles de la bienvenida que trataba de llevar a cabo, apuntando en unas notas rápidas todo lo que debía de tener en cuenta para que saliera bien, pero el sonido de la puerta abrirse logró cogerme desprevenida completamente, y la caída de un cubo de agua a la cabeza de aquella persona fue inminente.

Levanté la mirada rápidamente y la posé sobre la chica que ahora se encontraba completamente mojada debido a mi primera trampa, y salté a la cama y pulsé un botón con una sonrisa burlona en mi rostro.

—Segunda y última trampa, ¡adelante~! —reí, pero el botón no activó nada. Extrañada, miré el objeto y comencé a pulsarlo varias veces más. —¿Eh? ¿Pero, y ahora por qué no funciona? ¡Arg! ¡Vamos, actívate! ¡Vengaa! —exclamé ya enojada, pero de repente, una pequeña y leve explosión saltó gracias al objeto, y me chamuscó completamente, haciéndome caer al suelo por la pequeña potencia que no fue superada por el cuerpo de una niña de 13 años.

Me sobé la cabeza con pesadez e inflé mis mofletes a modo de berrinche, levantándome del suelo una vez me recuperé del pequeño impacto.

—Joo...juraría que lo tuve todo calculado. En fin..—suspiré y me encogí de brazos, dejando eso de lado y sonriendo ampliamente a la chica que seguía tratando de recuperarse por todo lo sucedido. Me acerqué alegremente y extendí mi mano como si el cubo que llevaba en la cabeza y su ropa mojada no hubiera sido culpa mía. —Soy Yuniko Koizumi, encantada~.

 

Airin Yumei

Deje caer mi varita al suelo haciendo que todas mis maletas hicieran lo mismo, miré a mi compañera la cual parecia tener unos...12...o...13 años ¿Por qué estaria alguien tan pequeña aqui? pero deje de pensar en eso ya que un cubo de agua cayó a mi cabeza dejandome toda mojada, y el suelo tambien, no pude decir nada aunque quisiera ya que estaba demasiado confusa, de repente mi compañera se acercó y me extendió su mano, aun en shock, me quite el cubo de la cabeza, y le estreche mi mano

—Encantada.....yo soy Airin Yumei—Me presente para despues pestañear dos veces y saliendo del shock, la miré algo enojada—¿¡Por qué hicistes eso?! ¡Ahora toda mi ropa esta en el suelo, y yo estoy empapada!—Le grité para despues llevar una mano a mi frente y suspirar para intentar tranquilizarme

Una vez más tranquila la miré curiosa ya que no era muy normal ver a alguien de tan poca edad aquí—Oye....¿no eres algo pequeña para estar aqui?—Le pregunte mientras recogía mi ropa del suelo y la metia de nuevo en mi maleta y tomaba una toalla para secarme un poco

 

El gran grupo que se había formado se devolvió pronto, esperando no encontrame a nadie conocido como le había ocurrido a esa chica según escuche.

Entré a la habitación B que se encuentra vacía completamente de otra vida, me tiré en la cama más cerca de la ventana y más lejana del baño mientras mis cosas se acordaban por sí solas atravez de la habitación: ropa, decenas de libros y demás aunque lo primero era en menor proporción a los libros.

 

Atemis

Seguía esperando, aburrida en la cama, dado que el recuerdo de mi verdadero padre cuando era apenas una niña de 7 años,pasaba por mi mente.

***Flash Black***

El pueblo estaba bajo ataque, mi padre era uno de los soldados que defendían ese lugar,antes de hacerlo, mire a la pared del callejón donde me encontraba, para unos segundos después, estar viendo donde estaba él; batallando con el general que había provocado el ataqué, las fuerzas de aquel enemigo estaban fuertes, mi padre y otros soldados estaban resistiendo lo suficiente, el resto resistía menos, pero podían salir al menos...con vida.

—Porque...? P-Porque hoy papi...?—murmuraba, con los ojos algo llorosos, mi padre no estaba listo para un ataque así.

Para poder verlo, me tuve que escapar de la casa de mi madre y padrastro actual, había sido difícil, pero había podido salir sin problemas.

Cada vez el estaba mas débil entre los ataques, cuando sucedió..., al ver que lo habían atravesado, me dio un shock que me dejo los ojos sin cerrar, me coloqué mis manos frente la otra pared en el callejón, con la mirada abajo, y los ojos con lagrimas.

—F-F-Fue su...final....—murmuraba otra vez, cuando las lagrimas caían..., trate de quitármelas, e ir por el caballo marrón que me había servido como un transporte.

***

Al menos media hora después de salir del callejón y montarme al caballo, llegué a casa, ya sin las lagrimas, con la mirada abajo, el caballo freno, ya que mi madre y padrastro estaban ahí, me habían pillado.

—Se fue...¿No es verdad, hija..?—dijo mi madre, acercándose y bajándome del caballo con un abrazo.

—S-S-Si...—titubeaba, deprimida al máximo, ni siquiera había oído sus ultimas palabras.

***Fin del Flash Black***

Al recordarlo, me senté en la cama, con ls ojos cerrados, cuando una lagrima salio de mi ojo derecho.

 

Estuve oyendo de la gente sobre que tenia que ir a la habitación A, seguramente estaría mi compañera o compañero esperándome
Me fui directa hacía las habitaciones y pude ver la habitación A, toque la puerta para ver si había alguien

 

—Pase—dije, limpiandome levemente la lagrima en mi cara.

 

Abrí la puerta, y claramente era una chica

—Buenas, siento la tardanza pero es que el despertador no me sonó—Tras eso cerré la puerta—Me llamo Sakura Nanami, un placer

 

Me di la vuelta y me levante, una razón algo común para llegar tarde.

—Tranquila, no hay problema—dice, sonriendo un poco, y extendiendo mi mano para estrecharla—Atemis Minkuo, el placer es mio.

 

Le estreche igualmente

—Bueno parece que somos compañeras—Sonreí

 

—Sierto—dije, soltando su mano al estrecharla unos segundos, con una leve sonrisa—¿Sabes que salón te tocó?

 

—El salon B—Le respondí