¿La Muerte Se Puede Enamorar?

Tema en 'CLAMP' iniciado por Angel Cullen, 18 Octubre 2008.

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    Angel Cullen

    Angel Cullen Usuario común

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    ¿La Muerte Se Puede Enamorar?
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    ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Este fic esta basado en una idea que me dio Isabela en su fic "Ojala Fuera Cierto" asi que espero y les guste. Esta algo largo jejeje

    ¿La Muerte se Puede Enamorar?

    El en sótano de una casa común y corriente, por fuera, se veía una silueta delgada haciendo mucho movimientos delicados por toda la habitación, iluminada por el deslumbrar de algunas velas que daban un ambiente un tanto tétrico y misterioso. La silueta movía sus manos encima de una fotografía en la que aparecía la foto de una chica de cabello rubio y ojos cafés, como la tierra. Dejaba caer lo que parecía ser polvo brillante sobre ella. Luego de terminar de esparcir más de ese polvo brillante encima de la fotografía, tomo un libro y lo que parecía ser un cabello rubio.

    -Hora de decidir adonde iras- la voz de una chica se podía escuchar en aquel tétrico y oscuro lugar, mientras sostenía el libro – has hecho cosas malas, muy, muy malas- una sonrisa malvada se curvo en sus labios – debes ir al infierno – tomo una tijeras que se encontraban en una mesa de la habitación, se arrodillo frente a la fotografía y lentamente alargo el cabello, acerco las tijeras y sutilmente lo corto en dos.

    En el momento en el que ejerció el corte todas las velas se apagaron, ahora solo dejando a una chica en la oscuridad del sótano, con la tristeza de lo que acababa de hacer. Había vuelto a matar a alguien. Entre la oscuridad la joven se levanto y camino lentamente hacia las escalera con el cuidado de no tropezar con algo. Subió las escaleras y cuando se encontraba en la sala de la humilde casa, noto una nota en la mesa de la habitación.

    Leyó:

    Monstruo:

    Salí a comprar lo necesario para la cena, aunque hoy no me toca si no lo hago yo tu nunca lo harás, ten lista las cosas para empezar a hacer la cena, hoy solo cenaremos tu yo, de nuevo, papa llamo y dijo que no podría llegar a casa hoy, llegaría mañana en la mañana para alistar las cosas para su viaje.

    Touya.

    Sakura dejo la nota donde la había hallado y se encamino a la cocina para sacar las ollas y sartenes que necesitaría para cocinar la cena. Después de que pusiera el agua a calentarse camino hasta la sala y encendió la televisión, instantáneamente cambio el canal al noticiero.

    -Ah habido un lamentable accidente automovilístico en la autopista que se dirige a la Secundaria Seijou –se escucho decir a la reportera que, junto al camarógrafo, tomaban escenas de un auto completamente destrozado – en el auto solo iba una chica aun no reconocida por los familiares, que lastimosamente perdió la vida en este accidente vial, iba acompañada de su amiga Kawashi Joy, la que sorprendentemente salió ilesa de este accidente, ¿Que nos puede decir al respecto? - pregunto la reportera a una chica de cabello negro y ojos azules.
    -Aun no puedo entender como sucedió el accidente, íbamos conversando sobre lo divertido que fue habernos burlado de Koji cuando le pidió a Akari que saliera con ella y ella lo rechazo rotundamente – la chica comenzó a reír, luego se puso triste nuevamente- luego de la nada ella acelero el auto y fuimos a chocar con un camión que pasaba por ahí, - sus ojos empezaban a cristalizarse ante el recuerdo­ – le grite mil veces que frenara y lo único que dijo fue “seria divertido saber como es la vida después de la muerte” – la chica no aguanto mas y rompió en llanto frente a la cámara.
    -Aquí Kimiko Monosuwa, para Tomoeda News, aquí mostramos la imagen de la fallecida para que los familiares vengan a reclamar el cadáver y darle su santa sepultura. - apareció la fotografía de una chica de cabello rubio y ojos cafés, “como la tierra”, murmuro Sakura antes de escuchar la puerta de el recibidor abrirse y apagar el televisor rápidamente.

    -Monstruo, ya llegue a casa, espero hayas leído la nota – dijo una vez dentro un chico de cabello oscuro y ojos azules con bolsas en la mano. Touya Kinomoto, hermano mayor de Sakura Kinomoto. La causante del reciente accidente y muerte.
    -Si Touya, lo leí y ¿Cuantas veces tengo que decirte que no me digas monstruo? – dijo levantando la voz, debido a que no le gustaba que usara ese apodo con ella.
    -Pero eso eres un monstruo feo y perezoso – decía en tono burlón, lo que hacia que Sakura se pusiera roja de la ira.
    Antes de que Touya se diera cuenta, esta le había proporcionado un gran pisotón en el pie, haciendo que este gimiera de dolor – Para que aprendas a no decirme monstruotomo las bolsas que ahora se encontraban tiradas en el suelo, para caminar hacia la cocina y empezar a cocinar.
    -Sakura! – grito Touya sintiendo el dolor en su pie
    -Ahora si me llamas por mi nombre no? Debería darte pisotones mas seguido – dijo fingiendo que en realidad lo estaba pensando – no dramatices Touya ni que te hubiese dado tan duro
    -¿No? ¿No te has dado cuenta que andas con tacones? – Sakura vio sus zapatos y vio que ciertamente andaba tazones “ups” pensó.

    Luego de que Sakura se disculpara con Touya y cenaran, Sakura se dirigió a su habitación donde su celular llevaba sonando casi dos minutos. Sabía quien era, nadie era tan insistente como para llamar a un número por dos minutos y seguir esperando respuesta. Sakura tomo su celular y contesto la llamada.

    -Sakura!, ¿Viste la noticia? – pregunto una melodiosa voz al otro lado del teléfono
    - Si – contesto con voz triste
    -Lastima que Hikari, murió, no era tan mala chica –hizo una pausa- solo era presumida
    -Tomoyo, ambas sabemos que era de lo mas detestable – contesto
    -De acuerdo, no era un ángel, pero tampoco es un demonio – dijo
    -Bueno, ¿Ese era el motivo de tu llamada?
    -Oh si!, el motivo – soltó una ligera risa­- quería comentarte que mañana tendremos un nuevo compañero en el salón
    -¡¿Enserio?! – pregunto emocionada, le encantaba cuando llegaba alguien nuevo, siempre tenia la posibilidad de conseguir un nuevo amigo o amiga. – ¿Sabes como se llama?
    -Cálmate Sakura, eso lo sabremos mañana en clases, por lo pronto, solo te dejo ilusionada con la noticia. – la chica volvió a reír y corto l a llamada.

    Siempre era lo mismo, siempre que llegaba un nuevo estudiante, Tomoyo era la primera en saber y avisaba a toda la clase. Para cuando llegaban al salón en la mañana ya todos sabían que habría un chico o chica nueva y empezaban a preguntar como era, si era guapo o si era chico o chica. Sakura era una de ellos, siempre era la más curiosa de toda la clase, aunque intentaba ocultarlo frente a sus nuevos compañeros, no quería parecer una entrometida.

    Sakura se recostó sobre su cama y pensó lo que sucedió en la tarde, otra vez, desde hace dos años estaba en ese negocio oscuro. No era un tema para conversar con gente nueva. Continuo pensando en el nuevo estudiante, tenía la sensación de que se llevarían muy bien. Lentamente el sueño la fue venciendo y pronto quedo dormida.

    Sakura Se encontraba en aquel oscuro lugar, el lugar de esos recuerdos dolorosos, donde su vida había cambiado a ser una peor. Partes metálicas volaban por todo el lugar, el fuego hacia presencia alrededor de ella. Junto a ella se encontraba los cuerpos de su hermano y su padre. El auto había quedado destrozado, después de caer por el abismo, estaba envuelto en llamas. Sakura veía los cuerpos y las llamas acercándose a ellos, ¿Por qué ella no estaba inconsciente igual que ellos?

    -¿No quieres que mueran? – escucho la voz de una mujer detrás de ella, volteo para ver a una chica pelirroja y ojos color miel. – no quieres quedarte sola, ¿Verdad Sakura?
    -¿Co-como sabes mi nombre? – pregunto temerosa
    -Eso no importa, ¿No quieres que mueran verdad?
    -No…
    -¿Estarías dispuesta a pagar un precio para que no mueran?
    -¿Que tipo de precio?
    -Solo me tienes que hacer un favor – sonrió
    -De acuerdo.
    La chica alzo sus manos y Sakura se elevo en el aire. Una vez en el aire, Sakura, la rodeo un brillo blanco, que pronto se desvaneció. Sakura cayo al suelo, pero esta vez tenia un libro y una tijera sobre el. – Ese será tu trabajo.
    -No entiendo, ¿Cual es mi trabajo?
    -Tendrás que…

    Pipipipipipipipipipi

    Sakura abrió los ojos rápidamente, se levanto de igual manera. Miro todo a sus alrededor “todo fue un sueño” se murmuro a ella misma, antes de que el sonido del despertador volviera a sus oídos. Tomo el despertador y apago la alarma. Era la quinta vez que soñaba con eso en los últimos dos meses. Se levanto pesadamente y se encamino al baño a darse un relajante ducha, tal vez así podría olvidar esa pesadilla. Salió de baño y se vistió con el uniforme de la escuela, una falda tableada de color azul un poco más arriba de las rodillas, una camiseta blanca con el escudo de la escuela en el hombro izquierdo y una boina. Bajo a la sala para encontrarse a su hermano cocinando el desayuno.

    -Hoy te levantaste temprano, monstruo – comento Touya con tono burlón
    -Parece que no aprendes, ¡Te dije que no me dijeras monstruo! – dijo tomando asiento en la mesa del desayunador.
    -Pero eso eres, además siempre acostumbras dormir hasta tarde y siempre llegas tarde a clase – comento mientras le servía el desayuno
    -¿Y papa?
    -Ya se fue – contesto sentándose frente a ella y empezando a desayunar al igual que su hermana
    -No me puede despedir – dijo con la cabeza gacha
    -No te preocupes, regresa en dos días
    -Bueno será mejor que me apresure antes de que llegue tarde al instituto. – levantándose de la mesa y dejando su plato en el lavador, salió de la casa en patines. Luego de unos minutos logro divisar el instituto. – llegue a tiempo, me pregunto como será el chico nuevo – dijo llevándose su dedo índice a la barbilla de manera pensativa.


    Después de que fuera al área de casilleros de las chicas y cambiar sus patines por sus zapatos negros reglamentarios, se encamino a su salón, donde al entrar vio y escucho a muchos chicos conversar sobre el nuevo chico, en especial las chicas que se preguntaban si era lindo o si iba a ser de esos "nerds" que solo les interesa estudiar. La profesora Mitsuki entro al salón y pidió a todos los chicos callar para poder presentar a un nuevo estudiante.

    -Muy bien chicos, el es Syaoran Li, viene de Hong Kong, espero que se lleven bien – en el momento de que la profesora dijo su nombre un chico de cabello castaño oscuro alborotado, alto, cuerpo fornido y unos hermosos ojos color miel entro por la puerta del salón, todas las chicas estaban suspirando y lanzando miradas coquetas al chico, pero este solo las ignoraba – bien, tu asiento será… detrás de Kinomoto. Kinomoto levante su brazo para que Li pueda ubicarse por favor.

    Sakura obedeció y levanto su mano para que Syaoran supiera donde estaba, este pasó a su lado y le guiño el ojo haciendo que esta se sonrojara. Luego de eso, Sakura perdió su vista en la ventana, nuevamente, recordando ese horrible sueño. “De nuevo” murmuro para si misma, con la mirada perdida en la ventana.

    Lo se, esta excesivamente largo, pero ese es el primer capi, este es mi primer fic, porfavor no sean muy duros.
    Si hay algo en que mejorar avisenme y lo arreglare.
     
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    Alex Nanami

    Alex Nanami Entusiasta

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    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Hola DarkAngel
    La verdad no se que es CLAMP xD Pero la narracion y el trama esta muy bueno :)
    Siguelo y hazme saber sobre este CLAMP
    xD Bueno siguelo pronto suerte amiga :)
     
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    DarkAyame

    DarkAyame Entusiasta

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    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Precioso!!! Me encanta como escribes y combinas los hechos
    Pobre Sakurita, ella como muerte es lo unico que me parece raro pero lo sabes escribir
    Respondiendo a Alex, CLAMP es un grupo de dibujantes que crearon exitos como Sakura Card Captor, X/1999, Guerreras Magicas y actualmente, Tsubasa Reservoir Chronnicles
    Nee ojala lo continuaras ^^
     
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    Pami

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    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Lleva más de un mes si continuación por lo que cierro la discusión.
     
  5.  
    Angel Cullen

    Angel Cullen Usuario común

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    ¿La Muerte Se Puede Enamorar?
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    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Conti ^^U

    Fuego y Centro Comercial

    Sakura llevaba buen rato con la mirada perdida en la ventana, ese sueño le hacia recordar su trabajo, ese maldito trabajo que le habían encargado, aunque era la única manera de que su familia se destruyera. Había tenido suficiente con la muerte de su madre, ni siquiera la había podido conocer bien.

    -Kinomoto! – El grito de su profesora la hizo sobresaltar volver a la realidad- ¿Podría dejar de ver a la ventana y enfocarse mas en la lección de hoy?
    -Si- dijo mientras volvía con la vista la al frente, escucho una pequeña risa detrás de ella, volteo y vio a su nuevo compañero, Syaoran, detrás de ella con una risa burlona en su rostro.
    -Deberías dejar de soñar despierta- volvió a reír, para luego lanzar un mirada coqueta hacia la chica, esta volteo inmediatamente
    -No te importa si sueño despierta, no sabes nada de mi – murmuro para que no la descubrieran
    -No sabes cuanto puedo llegar a saber, Sakurita – su voz sonaba en su mismo tono de voz, pero ahora el estaba justo detrás de su cuello, haciendo su aliento chocara con este.
    -Pues demuéstrame cuanto sabes de mi – lo reto
    -Esta bien, pero ahora no es el momento – dijo volviendo a acomodarse en su asiento
    -Y así se conjuga un verbo – termino de explicar la profesora

    Las clases pasaron rápido después de que Sakura empezara a tomar un poco mas de atención, pronto llego el receso, Sakura y su mejor amiga, Tomoyo, fueron a sentarse debajo de un árbol de cerezo donde hablaron sobre trivialidades de la secundaria. Tiempo después llego un joven de cabello negro-azulado y ojos de un color azul marino profundos y misteriosos.

    -Chicas, ¿Les molesta si invito a un amigo?
    -No hay problema Eriol, mientras mas mejor – respondió sonriente la pelinegra.
    -Muy bien, enseguida vuelvo – y dicho esto, camino rumbo a la cafetería
    -¿Que te pareció Syaoran? – pregunto Tomoyo
    -Pues, a decir verdad, es algo coqueto, primero le guiña el ojo y luego me mira coquetamente. Creo que es un mujeriego, de seguro lo hace con todas – comento
    -¿Sera que le gustas? – comento Tomoyo, haciendo que Sakura se sonrojara
    -Hay Tommy que cosas dices.
    -Chicas, aquí esta mi nuevo amigo - Eriol se aparto para dejar ver al chico de cabello castaño y ojos de un color mas claro del que estaban hablando.
    -Gracias por invitarme Eriol, ser nuevo no es nada fácil – comento mientas ambos tomaban asiento frente a las chicas – y como estas Sakurita?
    -Porque me dices Sakurita?
    -¿Porque? ¿No te gusta? Me pareció un lindo sobrenombre para una linda chica como tu – lanzo su típica mirada coqueta a Sakura y esta aparto su vista de el rápidamente
    -A mi me parece un tierno sobrenombre, ¿No Sakurita? – comento Eriol
    -¿Ahora tu también Eriol? – dijo Sakura con fastidio
    -Cálmate Sakura, es solo un sobrenombre, además no te queda nada mal – intervino Tomoyo
    -Pero no me has contestado la pregunta Sakurita, ¿Como has estado?
    -Pues, tú debes saberlo ¿No? ¿No dices que tu sabes muchas cosas sobre mi?
    -Tienes razón, además se que estas muy bien – esta vez uso un tono seductor que hizo que Sakura tomara un radiante color rojo.

    El receso termino pocos minutos después, los cuales fueron aprovechados por los integrantes del grupo para ponerse de acuerdo para ir al centro comercial y ver una película en la tarde. Entraron a clases, Sakura se volvió a perder en la ventana, Syaoran le ayudo un poco tocándole el hombro para que la profesora Mitsuki no notara que estaba perdida. Después de las clases Sakura fue corriendo a su casa, para ver que tenía algún “trabajo” pendiente. Entro en su habitación y vio un pequeño sobre su cama, suspiro resignada, tendría que “trabajar”. Abrió el sobre y saco la fotografía que este contenía, al verla noto que era una chica de cabello castaño, piel de color morena y ojos verdes claros. Salió de su habitación y bajo al sótano, donde encendió las velas, coloco la fotografía en la mesa.

    -Haber si has hecho algo malo – tomo el libro que estaba sobre la mesa y leyó las paginas, sonrió con pesar – lastima Akari, te vas abajo – tomo las tijeras de la mesa y lentamente corto el cabello, este lentamente fue quemándose hasta quedar solo cenizas.

    Sakura recogió las cenizas en una bolsa, la coloco sobre un mueble empolvado del sótano y salió. Corrió a su habitación, iba a llegar tarde con sus amigos, tomo un rápido baño y se vistió, un jean ajustado a las caderas, una blusa rosa de tirante con adornos de color blanco y unas zapatillas blancas. Salió de la casa, no sin antes dejarle una nota a su hermano explicándole donde y con quienes estaba. Corrió lo mas rápido que pudo, hasta que logro ver la entrada al gran edificio que era el centro comercial, ahí estaban Eriol y Tomoyo acompañados de Syaoran. Una vez con ellos se disculpo por llegar tarde.

    Entraron al centro comercial, el cual estaba infestado de gente, caminaron en dirección a las salas de los cines, pero en una de las pantallas que se encontraban en los pasillos, mostraron el noticiero y la imagen de una casa envuelta en llamas detrás de la reportera.

    -Hola, aquí Kimiko Monosuwa, reportando nuevamente una terrible escena, como podrán ver detrás de mi, se encuentra la casa de la familia Kawamura – señalando la casa detrás de ella – el fuego invistió la casa de manera inexplicable, según los vecinos, según ellos la familia había salido esta noche con destino a Hong Kong a excepción de la hija mayor Akari Kawamura, quien se cree esta aun dentro de la casa. – de la puerta de la casa salió un gran bulto envuelto en fuego, que inmediatamente los bomberos eliminaron, dejando ver a un cuerpo calcinado tirado en el suelo – al parecer,- continuo - Akari Kawamura, ah muerto calcinada en su propia casa. La policía investigara las posibilidades de homicidio. Aquí Kimiko Monosuwa reportando para Tomoeda News.

    Los chicos quedaron estupefactos al ver semejante escena, a excepción de Sakura, quien solo se volteo para seguir caminando, seguida de los demás. Entraron a ver una película de terror, que Sakura fue forzada a ver, gracias a sus amigos del alma, Eriol y Tomoyo, llamada La Muerte, aunque ese nombre se le hacia muy irónico en su interior. Después de la película.

    -Sakurita, la próxima ven a mi lado en caso de protección – dijo Syaoran en tono burlón, Sakura le lanzo una mala mirada
    -Perdón, es que como algunas personas saben – viendo a Eriol y Tomoyo – le tengo mucho miedo a las películas de terror.
    -Lo lamento Sakurita, pero esa era la mejor película que había – comento Eriol – además tienes 16 años, deberías dejar esos miedos o la gente se puede aprovechar.
    -Lo se, pero ¿¡Porque tenían que obligarme!? – exclamo, moviendo sus brazos de arriba hacia abajo.
    -Por lo mismo que acaba de decir Eriol, debes superar tus miedos – contesto Tomoyo
    -¿Y así piensan ayudarme? ¿Obligándome a ver una película de terror? Si, claro – rolo los ojos, para encontrarse una tienda llena de ropa – ¡Hay! Quiero ir a esa tienda ¿Vamos?
    -Bien, yo erigiré tu ropa Sakura – Tomoyo empezó a empujar a Sakura dentro de la tienda, donde le probo un sin fin de ropa, para que luego los chicos juzgaran cual le quedaba mejor. Al final salieron con varias bolsas, las cuales los chicos cargaron.

    Después de salir del centro comercial, Tomoyo se ofreció a llevar a todos a sus casas debido a que ya estaba oscuro afuera, y no quería que Sakura estuviera en peligro. Llegaron a la casa de Sakura, Syaoran se ofreció a ayudarla con las bolsas, ya en la entrada de la casa de Sakura, Syaoran se acerco a su oído y murmuro.

    -Hoy te veías hermosa con esa ropa, me muero por vértela puesta – rozo su mejilla con su labios y se alejo, dejando a una sonrojada Sakura en la puerta de la casa.

    Sorry por la tardanza u.u
     
  6.  
    fabrianny

    fabrianny Entusiasta

    Cáncer
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    Hola! Gracias por continuar de verdad está interesante y gracias por leer mi fic y por tú sabio comentario subire el capítulo lo más pronto que pueda y realmente me gusta la actitud de shaoran y es una pena lo que sakura hace pero bueno se que sabrás llevarlo bien
     
  7.  
    melodia

    melodia Guest

    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    ¡Que bueno que continuaste con tu ff!, adoro la personalidad que le diste a Syaoran jiji, espero que no tardes en poner la siguiente. ¡Felices fiestas!
     
  8.  
    Angel Cullen

    Angel Cullen Usuario común

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    ¿La Muerte Se Puede Enamorar?
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    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Fabrianny: Si, es una pena el trabajo de Sakura, pero es que aun no ves mi otro trabajo, ahi ella es parecida a mi.
    Melodia: Parece que tanto a ti como a Fabrianny, les gusta la personalidad de Syao, es que claro, el es hermoso, y coqueto ;) Aqui te traigo la conti :)

    Capitulo 3: Descubierta

    Sakura entro a su hogar, se descalzo en la entrada, Syaoran siempre la confundía y la estresaba. Con sus coqueteos y miradas. No sabe como seria la secundaria con el como su compañero. Suspiro. Tendría que lidiar con el y con sus coqueteos todo el año y también los próximos años hasta su graduación. Camino a la sala, no había nadie, luego fue a la cocina donde encontró a su hermano con un delantal frente a la estufa.

    -Al fin llegas monstruo- dijo Touya sin quitar la vista de la comida- escuche la voz de un chico – bajo la intensidad de la flama y volteo a Sakura- ¿Quién era?

    -Solo un amigo- contesto sin darle mucha importancia, pero al ver la mirada de Touya, explico- fuimos al centro comercial con Tomoyo, Eriol y un nuevo compañero, Syaoran, y como venia cargada de bolsas, el me ayudo a cargarlas hasta la entrada.

    -Pero te pudo ayudar Eriol- comento con tono claramente molesto.

    Sakura rolo los ojos, su hermano nunca la dejaba estar con otro chico que no fuera Eriol, incluso le había pedido que no lo viera, si no le hubiera dicho que este estaba enamorado de Tomoyo, nunca la hubiera dejado estar con el- El estaba acompañando a Tomoyo – y sin darle tiempo a Touya de volver a reclamarle el porque no tenia porque estar con un chico, salió de la cocina y subió las escaleras camino a su habitación. Dejo las bolsas sobre la cama fue hasta su computadora y abrió su correo. Suspiro de mala gana. Tenía un mensaje de esa chica. El mensaje contenía diversas fotografías de varios chicos y chicas.

    - Otra vez, ¿Nunca puedo tener un descanso? – reprocho para si misma. Luego vio una pequeña posdata en la parte de abajo de todas las fotografías. – PD: Sakura, este es solo un adelanto, así que no te quejes, son los que tendrás que juzgar durante este mes. Te avisare cuando tengas que juzgar alguno. No reproches.

    Se levanto de su asiento y fue a alistar su uniforme. Se vistió para dormir y se acostó para luego quedar a merced de Morfeo. Durante esa noche Sakura vio en sus sueños la imagen de una chica de cabello negro y ojos del mismo color, la chica caía de un edificio y luego…nada. Todo se volvía oscuro. Luego volvía a ver la imagen de la misma chica, riendo a espaldas de una chica de lentes de cabellos algo rizado peinado en una media coleta y cargada de libros. Despertó, sabia que ese día tendría trabajo, ella tenia diferentes maneras de avisarle, y una era en sus sueños. Volteo a ver el reloj que se encontraba en la mesita de noche a un lado de su cama. Había despertado, extrañamente, temprano ese día, se levanto y fue a ducharse, tiempo después salió de el baño envuelta en una toalla dispuesta a cambiarse, para luego bajar las escaleras y empezar a hacer el desayuno. Al terminar de cocinar, para su hermano, decidió partir al instituto.

    Patino por las calles de Tomoeda camino al instituto Seijou, paro un momento en el camino de los cerezos, estos se encontraban brotando los últimos capullos, antes de que terminara la primavera, para que el verano diera lugar en la ciudad. Disfruto de la lluvia de pétalos que los cerezos hacían caer con el viento, haciendo que los pétalos volaran alrededor de Sakura. Lo que Sakura no sabia era que alguien que pasaba por ahí, la estaba viendo mientras ella se encantaba con la danza que los pétalos hacían alrededor de ella. Syaoran Li, miraba fascinado como la flor de cerezo, se dejaba encantar por las maravillas de las flores de su mismo nombre. Decidió acercarse al ver que ella había dejado de ver los pétalos danzar y dirigir su mirada al suelo.

    -Hola, Sakurita- saludo Syaoran sacando a Sakura de sus pensamientos y haciendo que esta le sonriera.

    -Hola, Syaoran- sonrió la castaña

    -Vas camino al instituto, supongo, ¿Te parece si vamos juntos? No quiero llegar solo y que todas las chicas se me tiren encima, tu sabes como las tengo ¿No?- dirigió una mirada burlona a Sakura, esta solo volteo la cara y siguió caminando – oye no te lo tomes así, tu sabes que yo te quiero a ti.

    -Vámonos ¿Quieres Syaoran?- ordeno sin darle importancia a su comentario anterior, este solo se encogió de hombros y la siguió. El camino fue algo silencioso debido a que ninguno tenía el valor de romper el silencio, aunque era un silencio cómodo, al menos para el ambarino. Sakura no podía dejar de pensar como su vida había cambiado en tan solo una noche, esa horrible noche.

    Flashback

    -Tu trabajo es… juzgar y luego matar- Sakura abrió los ojos completamente sorprendida, ¿Acababa de aceptar el trabajo de la muerte?- ese será tu precio para que no pierdas a tu familia.

    -De acuerdo – no había vuelta atrás, había aceptado por la vida de su hermano y su padre, tenia que cumplir su trabajo – ¿Como sabré a quienes juzgar?

    -Te contactare, ya veras, empezaras dentro de una semana, tienes que tranquilizarte. – luego desapareció en el viento. Sakura volteo a ver a su hermano y padre, estos ahora se encontraban sin rasgo de heridas.

    Fin del Flashback

    -¿Sakura?- la voz de Syaoran la saco de sus recuerdos, levanto la cabeza y vio que se encontraban en la entrada del instituto – ya llegamos.

    -¿Ah? Perdón estaba pensando – rio nerviosamente, luego ambos castaños se dirigieron a sus respectivos casilleros. Sakura al abrir el suyo, un sobre negro salió volando y se poso en sus delicadas manos.- Genial, ¿Ahora trabajo en la escuela? – Abrió el sobre de color negro y leyó lo que este contenía – Sakura, supongo ya sabes a quien debes juzgar, aquí la fotografía, debes de hacerlo ahora mismo.- dentro del mismo sobre, se encontraba la fotografía de una chica de cabello negro y ojos el mismo color. – Negro…

    Sakura se escabullo de la primera hora de clases en busca de un lugar oscuro y de poca iluminación para hacer su juicio y luego volver a clases, con la excusa de que había llegado tarde. Recorrió todo el instituto en busca del lugar perfecto. Recordó que el instituto poseía una bodega en la que guardaban los escritorios que no eran utilizados, cuando encontró la habitación, entro y en uno de los escritorios coloco la fotografía y con la oca iluminación que entraba al lugar, empezó con su juicio.

    Dio dos vueltas alrededor del escritorio en que el estaba puesta la fotografía, movió su brazo derecho sobre la imagen de la chica y dejo caer lo que parecían ser cenizas, en su mano izquierda se encontraba una bolsa de tela de la que sacaba aquel polvo oscuro y brillante. Se coloco frente a la imagen y unió sus manos en forma de plegaria, hizo una oración en un idioma extraño y cuando termino.

    -Has hecho muchas cosas malas, Haruka- sonrió con malicia y de un frasco que saco de su mochila- te vas abajo…- saco lentamente un cabello negro, lo enderezo, tomo sus tijeras y lentamente fue acercando al cabello. Corto el cabello y la fotografía salió volando por la ventana.- Termine – dijo, mientras recogía el frasco y el libro y los metía en la mochila, pero al voltear, encontró a su mejor amiga en la puerta. - ¿Tomoyo?

    -¿Qué estabas haciendo?- pregunto

    -Nada- se disponía a salir de la bodega pero Tomoyo le impidió el paso – vámonos Tomoyo.

    -Primero me dices que estabas haciendo.

    -No es nada importante – estaba empezando a desesperarse, su hermano nunca le había preguntado porque pasaba tanto tiempo metida en el sótano, porque ella tenia que preguntárselo- ¿Nos vamos?

    -No, Sakura, vi que tenías la imagen de Haruka, y necesito saber que estabas haciendo – dijo con voz seria, a la cual Sakura nunca podía ceder. Sakura suspiro. La pelinegra sonrió, sabia que siempre que usaba ese tono de voz siempre lograba que esta le contara todo.- Entonces ¿Qué hacías?

    - Lo que pasa es…- estaba dispuesta a decírselo a Tomoyo.

    -¡AH! – unos gritos provenientes de las afueras del instituto, hicieron sobresaltar a ambas chicas, haciendo que estas salieran corriendo de la bodega. Ambas chicas salieron al patio de la escuela, donde varios estudiantes y maestros se encontraban reunidos en un solo punto. Al acercarse mas, vieron el cuerpo inerte de una joven de cabello negro y ojos del mismo color. Todos los presentes murmuraban entre si, su nombre Haruka Higurashi.

    -¿Que paso aquí?- exclamo Tomoyo al ver el cuerpo sin vida de la chica –

    -Murió… - mascullo Sakura y sonrió con malicia, al lado de Tomoyo, quien la vio sorprendida – fui yo…

    -Salió de el salón, en medio de la clase – empezó a relatar el maestro a uno de los oficiales que se encontraban revisando la escena de la muerte. – le pregunte a adonde iba, lo único que me respondió fue “a una mejor vida” después de eso, la seguí hacia el tejado, donde se volteo y me dijo “lamento haberme burlado de Chikako, voy a volar” se volteo nuevamente, alzo su brazos y se lanzo– el oficial encargado de interrogarlo, asentía a todo lo que decía, mientras que conectaba este caso a otros que últimamente estaban azotando a Tomoeda, recién hubo un accidente vial, en el que la chica parecía querer morir, días antes un chico se había cortado las venas en la clase de cocina con la excusa de “querer probar la sangre antes de morir” y ahora esta chica que se había lanzado desde el tejado de la escuela. Lejos de estos sujetos se encontraban dos chicos y dos chicas comentando sobre lo recién ocurrido.

    -Esto es raro, Tomoeda esta siendo lugar de muchos suicidios raros. – comento Eriol, mientras se mostraba pensativo ante los sucesos.

    -Debe ser por algo o alguien – insinuó Syaoran mirando de reojo a Sakura, quien volteo la cara. Tomoyo la miraba de manera extraña, tenia que averiguar que tenia que ver su amiga en esos extraños sucesos – no encontraran nada, esto es obra de la Dama de la Muerte.

    -¿La Dama de la Muerte? – pregunto curiosa Tomoyo.

    -Es una mujer, encargada de juzgar a las personas y decidir si irán al infierno o vivirán un tiempo más, para darles otra oportunidad, en caso de que dicha persona haya hecho actos malos, y vaya al cielo. Haciendo que parezcan suicidios. – explico Syaoran.

    -Interesante – murmuro Tomoyo, esto ponía muy nerviosa a Sakura, quien prefirió cambiar el tema, antes de que esto se saliera de control.

    -Bueno, será mejor olvidarnos del tema, esperemos que eso que dice Syaoran nos sea verdad. No me imagino las vidas de las personas en manos de una mujer – Sakura jugaba con los dedos de sus manos mientras que intentaba buscar una excusa para salir allí, pero Tomoyo se adelanto.

    -Sakura, me acompañas quiero ir a la cafetería, me estoy poniendo algo nerviosa y quiero tomar algo para calmar los nervios. – sugirió Tomoyo, por lo que Sakura agradeció, tenia una excusa para escapar de los comentarios de Syaoran. Las chicas se encaminaron a la cafetería dejando a los chicos solos. Antes de que ambas llegaran a la cafetería, Tomoyo jalo a Sakura a uno de los pasillos de la escuela, los cuales estaban vacios debido al trágico suceso, y empezó el interrogatorio. – Muy bien Sakura ¿Por qué dijiste que había sido tu quien que mato a Haruka? El maestro dijo que ella se había lanzado sola. – Sakura maldijo por lo bajo, no imagino que en este momento Tomoyo le echaría la pregunta de los cinco millones de dólares.

    -Tomoyo… -bajo su mirada, no quería ver el rostro de Tomoyo cuando se lo dijera– yo… soy la Dama de la Muerte

    -No. Puede. Ser – Tomoyo tenia los ojos completamente abiertos, sorprendida ante tal revelación.

    Sakura llevo a Tomoyo a una de las bancas que se encontraban en el pasillo y dio a Tomoyo un vaso de agua. Cuando Tomoyo logro articular, otra frase que no fuera “No puede ser”, procedió a explicar como había sucedido todo.

    -¿Esto es una broma verdad?- pregunto Tomoyo aun sin creer lo que le había revelado su amiga y prima.

    -Lamento decirte que no lo es, es verdad – Sakura se encontraba con la mirada baja, no le gustaba mucho recordar ese momento de su vida, pero tenia que explicárselo a Tomoyo – recuerdas que en los últimos dos meses Touya siempre me ha preguntado el ¿Porque paso tanto tiempo en sótano?- la pelinegra asintió y la castaña se dispuso a continuar con su explicación- es porque estoy “trabajando”.

    -Pero que clase de trabajo es ser la Dama de la Muerte, eres una asesina – comento Tomoyo.

    -Lo se, pero tengo que hacerlo, o Touya y mi papa… morirán.

    -¡¿Como?!

    -Es un trato, recuerdas el accidente que tuvimos hace casi tres meses – la pelinegra asintió con duda – pues…

    Flashback

    Sakura Se encontraba en aquel oscuro lugar, el lugar de esos recuerdos dolorosos, donde su vida había cambiado a ser una peor. Partes metálicas volaban por todo el lugar, el fuego hacia acto de presencia alrededor de ella. Junto a ella se encontraba los cuerpos de su hermano y su padre. El auto había quedado destrozado, después de caer por el abismo, estaba envuelto en llamas. Sakura veía los cuerpos y las llamas acercándose a ellos, ¿Por qué ella no estaba inconsciente igual que ellos?

    -¿No quieres que mueran? – escucho la voz de una mujer detrás de ella, volteo para ver a una chica pelirroja y ojos color miel. – no quieres quedarte sola, ¿Verdad Sakura?

    -¿Co-como sabes mi nombre? – pregunto temerosa

    -Eso no importa, ¿No quieres que mueran verdad?

    -No…

    -¿Estarías dispuesta a pagar un precio para que no mueran?

    -¿Que tipo de precio?

    -Solo me tienes que hacer un favor – sonrió

    -De acuerdo.

    La chica alzo sus manos y Sakura se elevo en el aire. Una vez en el aire, Sakura, la rodeo un brillo blanco, que pronto se desvaneció. Sakura cayo al suelo, pero esta vez tenia un libro y una tijera sobre el. – Ese será tu trabajo.

    -No entiendo, ¿Cual es mi trabajo?

    -Tendrás que juzgar y luego matar.- Sakura abrió los ojos completamente sorprendida, ¿Acababa de aceptar el trabajo de la muerte?- ese será tu precio para que no pierdas a tu familia.

    -De acuerdo – no había vuelta atrás, había aceptado por la vida de su hermano y su padre, tenia que cumplir su trabajo – ¿Como sabré a quienes juzgar?

    -Te contactare, ya veras, empezaras dentro de una semana, tienes que tranquilizarte. – luego desapareció en el viento. Sakura volteo a ver a su hermano y padre, estos ahora se encontraban sin rasgos de heridas.

    Fin del Flashback

    -Una semana después, fue a la casa y hablo conmigo, me hizo firmar un contrato. No podía negarme, firme y ella me dijo que si me llegaba a retractar, ellos cumplirían su destino. Morir.

    -Terrible… y ¿Cuanto tiempo tienes que hacer esto?

    -Tengo que hacerlo hasta mi último día de vida. – agrego con tristeza.

    -¿Tienes que hacerlo hasta que mueras? – pregunto sorprendida y triste, no quería que su prima y mejor amiga viviera una vida así, asesinando gente.

    -Si… después de mi muerte, ella me hará renacer para que pueda tener una vida normal, que no podre tener.

    -Sakura, no quiero que tengas una vida así – la abrazo dándole a entender que la apoyaba, aunque fuera un caso algo raro.

    -Yo tampoco Tomoyo, yo tampoco – y entre los brazos de Tomoyo, rompió el llanto que había mantenido encerrado durante esos dos meses. – prométeme que no le dirás a nadie.

    -Lo prometo. – así se quedaron un largo rato hasta que uno de los maestros les aviso que debido al “suicidio” de Haruka, las clases se pospondrían por el resto de la semana. Ambas se encaminaron a la entrada del instituto, donde las esperaban los chicos recostados en el muro de la entrada.

    -¿Por qué tardaron demasiado? Solo fueron a la cafetería – comento Eriol, quien se notaba estaba algo estresado.

    -Eriol, ¿Otra vez perdiste una apuesta con Yamazaki? Te dije que no lo hicieras – regaño Tomoyo. – ¿Qué apostaste?

    -Mi reloj, contra su cadena de oro, a que Naoko no creería que el había visto un ovni volar ayer en la noche y que lo había raptado y operado en la nave. – contesto con enojo y de brazos cruzados.

    -¿Y ella lo creyó? – pregunto con una ceja levantada, Yamazaki era reconocido por sus mentiras, ya nadie creía en nada de lo que decía, ¡Y Naoko había caído! – ¡es imposible!
    -Dímelo a mí.

    -Eso te pasa por estar haciendo apuestas tontas. Bueno, como tendremos libre el resto de la semana ¿Quieren ir al parque de diversiones mañana?

    -Por mi esta bien. – respondieron al unisonó ambos castaños, lo que causo risa en los pelinegros y sonrojo en la castaña.

    En el trascurso del camino, Eriol y Tomoyo, iban en amena plática. Pero nuestra castaña iba un tanto callada, Syaoran, se acerco de nuevo a ella, al sentirlo sintió como una descarga eléctrica bajaba por su espalda. Syaoran sonrió y murmuro.

    -Hay más de una solución a tu problema, Sakurita. – murmuro a su oído, ella lo volteo a ver, sonrojada y confundida, el solo sonrio. Haciendo que su sonrojo aumentara.

    Continuara…
     
  9.  
    Angel Cullen

    Angel Cullen Usuario común

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    ¿La Muerte Se Puede Enamorar?
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    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    Fabrianny: Si, es una pena el trabajo de Sakura, pero es que aun no ves mi otro trabajo, ahi ella es parecida a mi.
    Melodia: Parece que tanto a ti como a Fabrianny, les gusta la personalidad de Syao, es que claro, el es hermoso, y coqueto ;) Aqui te traigo la conti :)

    Capitulo 3: Descubierta

    Sakura entro a su hogar, se descalzo en la entrada, Syaoran siempre la confundía y la estresaba. Con sus coqueteos y miradas. No sabe como seria la secundaria con el como su compañero. Suspiro. Tendría que lidiar con el y con sus coqueteos todo el año y también los próximos años hasta su graduación. Camino a la sala, no había nadie, luego fue a la cocina donde encontró a su hermano con un delantal frente a la estufa.

    -Al fin llegas monstruo- dijo Touya sin quitar la vista de la comida- escuche la voz de un chico – bajo la intensidad de la flama y volteo a Sakura- ¿Quién era?

    -Solo un amigo- contesto sin darle mucha importancia, pero al ver la mirada de Touya, explico- fuimos al centro comercial con Tomoyo, Eriol y un nuevo compañero, Syaoran, y como venia cargada de bolsas, el me ayudo a cargarlas hasta la entrada.

    -Pero te pudo ayudar Eriol- comento con tono claramente molesto.

    Sakura rolo los ojos, su hermano nunca la dejaba estar con otro chico que no fuera Eriol, incluso le había pedido que no lo viera, si no le hubiera dicho que este estaba enamorado de Tomoyo, nunca la hubiera dejado estar con el- El estaba acompañando a Tomoyo – y sin darle tiempo a Touya de volver a reclamarle el porque no tenia porque estar con un chico, salió de la cocina y subió las escaleras camino a su habitación. Dejo las bolsas sobre la cama fue hasta su computadora y abrió su correo. Suspiro de mala gana. Tenía un mensaje de esa chica. El mensaje contenía diversas fotografías de varios chicos y chicas.

    - Otra vez, ¿Nunca puedo tener un descanso? – reprocho para si misma. Luego vio una pequeña posdata en la parte de abajo de todas las fotografías. – PD: Sakura, este es solo un adelanto, así que no te quejes, son los que tendrás que juzgar durante este mes. Te avisare cuando tengas que juzgar alguno. No reproches.

    Se levanto de su asiento y fue a alistar su uniforme. Se vistió para dormir y se acostó para luego quedar a merced de Morfeo. Durante esa noche Sakura vio en sus sueños la imagen de una chica de cabello negro y ojos del mismo color, la chica caía de un edificio y luego…nada. Todo se volvía oscuro. Luego volvía a ver la imagen de la misma chica, riendo a espaldas de una chica de lentes de cabellos algo rizado peinado en una media coleta y cargada de libros. Despertó, sabia que ese día tendría trabajo, ella tenia diferentes maneras de avisarle, y una era en sus sueños. Volteo a ver el reloj que se encontraba en la mesita de noche a un lado de su cama. Había despertado, extrañamente, temprano ese día, se levanto y fue a ducharse, tiempo después salió de el baño envuelta en una toalla dispuesta a cambiarse, para luego bajar las escaleras y empezar a hacer el desayuno. Al terminar de cocinar, para su hermano, decidió partir al instituto.

    Patino por las calles de Tomoeda camino al instituto Seijou, paro un momento en el camino de los cerezos, estos se encontraban brotando los últimos capullos, antes de que terminara la primavera, para que el verano diera lugar en la ciudad. Disfruto de la lluvia de pétalos que los cerezos hacían caer con el viento, haciendo que los pétalos volaran alrededor de Sakura. Lo que Sakura no sabia era que alguien que pasaba por ahí, la estaba viendo mientras ella se encantaba con la danza que los pétalos hacían alrededor de ella. Syaoran Li, miraba fascinado como la flor de cerezo, se dejaba encantar por las maravillas de las flores de su mismo nombre. Decidió acercarse al ver que ella había dejado de ver los pétalos danzar y dirigir su mirada al suelo.

    -Hola, Sakurita- saludo Syaoran sacando a Sakura de sus pensamientos y haciendo que esta le sonriera.

    -Hola, Syaoran- sonrió la castaña

    -Vas camino al instituto, supongo, ¿Te parece si vamos juntos? No quiero llegar solo y que todas las chicas se me tiren encima, tu sabes como las tengo ¿No?- dirigió una mirada burlona a Sakura, esta solo volteo la cara y siguió caminando – oye no te lo tomes así, tu sabes que yo te quiero a ti.

    -Vámonos ¿Quieres Syaoran?- ordeno sin darle importancia a su comentario anterior, este solo se encogió de hombros y la siguió. El camino fue algo silencioso debido a que ninguno tenía el valor de romper el silencio, aunque era un silencio cómodo, al menos para el ambarino. Sakura no podía dejar de pensar como su vida había cambiado en tan solo una noche, esa horrible noche.

    Flashback

    -Tu trabajo es… juzgar y luego matar- Sakura abrió los ojos completamente sorprendida, ¿Acababa de aceptar el trabajo de la muerte?- ese será tu precio para que no pierdas a tu familia.

    -De acuerdo – no había vuelta atrás, había aceptado por la vida de su hermano y su padre, tenia que cumplir su trabajo – ¿Como sabré a quienes juzgar?

    -Te contactare, ya veras, empezaras dentro de una semana, tienes que tranquilizarte. – luego desapareció en el viento. Sakura volteo a ver a su hermano y padre, estos ahora se encontraban sin rasgo de heridas.

    Fin del Flashback

    -¿Sakura?- la voz de Syaoran la saco de sus recuerdos, levanto la cabeza y vio que se encontraban en la entrada del instituto – ya llegamos.

    -¿Ah? Perdón estaba pensando – rio nerviosamente, luego ambos castaños se dirigieron a sus respectivos casilleros. Sakura al abrir el suyo, un sobre negro salió volando y se poso en sus delicadas manos.- Genial, ¿Ahora trabajo en la escuela? – Abrió el sobre de color negro y leyó lo que este contenía – Sakura, supongo ya sabes a quien debes juzgar, aquí la fotografía, debes de hacerlo ahora mismo.- dentro del mismo sobre, se encontraba la fotografía de una chica de cabello negro y ojos el mismo color. – Negro…

    Sakura se escabullo de la primera hora de clases en busca de un lugar oscuro y de poca iluminación para hacer su juicio y luego volver a clases, con la excusa de que había llegado tarde. Recorrió todo el instituto en busca del lugar perfecto. Recordó que el instituto poseía una bodega en la que guardaban los escritorios que no eran utilizados, cuando encontró la habitación, entro y en uno de los escritorios coloco la fotografía y con la oca iluminación que entraba al lugar, empezó con su juicio.

    Dio dos vueltas alrededor del escritorio en que el estaba puesta la fotografía, movió su brazo derecho sobre la imagen de la chica y dejo caer lo que parecían ser cenizas, en su mano izquierda se encontraba una bolsa de tela de la que sacaba aquel polvo oscuro y brillante. Se coloco frente a la imagen y unió sus manos en forma de plegaria, hizo una oración en un idioma extraño y cuando termino.

    -Has hecho muchas cosas malas, Haruka- sonrió con malicia y de un frasco que saco de su mochila- te vas abajo…- saco lentamente un cabello negro, lo enderezo, tomo sus tijeras y lentamente fue acercando al cabello. Corto el cabello y la fotografía salió volando por la ventana.- Termine – dijo, mientras recogía el frasco y el libro y los metía en la mochila, pero al voltear, encontró a su mejor amiga en la puerta. - ¿Tomoyo?

    -¿Qué estabas haciendo?- pregunto

    -Nada- se disponía a salir de la bodega pero Tomoyo le impidió el paso – vámonos Tomoyo.

    -Primero me dices que estabas haciendo.

    -No es nada importante – estaba empezando a desesperarse, su hermano nunca le había preguntado porque pasaba tanto tiempo metida en el sótano, porque ella tenia que preguntárselo- ¿Nos vamos?

    -No, Sakura, vi que tenías la imagen de Haruka, y necesito saber que estabas haciendo – dijo con voz seria, a la cual Sakura nunca podía ceder. Sakura suspiro. La pelinegra sonrió, sabia que siempre que usaba ese tono de voz siempre lograba que esta le contara todo.- Entonces ¿Qué hacías?

    - Lo que pasa es…- estaba dispuesta a decírselo a Tomoyo.

    -¡AH! – unos gritos provenientes de las afueras del instituto, hicieron sobresaltar a ambas chicas, haciendo que estas salieran corriendo de la bodega. Ambas chicas salieron al patio de la escuela, donde varios estudiantes y maestros se encontraban reunidos en un solo punto. Al acercarse mas, vieron el cuerpo inerte de una joven de cabello negro y ojos del mismo color. Todos los presentes murmuraban entre si, su nombre Haruka Higurashi.

    -¿Que paso aquí?- exclamo Tomoyo al ver el cuerpo sin vida de la chica –

    -Murió… - mascullo Sakura y sonrió con malicia, al lado de Tomoyo, quien la vio sorprendida – fui yo…

    -Salió de el salón, en medio de la clase – empezó a relatar el maestro a uno de los oficiales que se encontraban revisando la escena de la muerte. – le pregunte a adonde iba, lo único que me respondió fue “a una mejor vida” después de eso, la seguí hacia el tejado, donde se volteo y me dijo “lamento haberme burlado de Chikako, voy a volar” se volteo nuevamente, alzo su brazos y se lanzo– el oficial encargado de interrogarlo, asentía a todo lo que decía, mientras que conectaba este caso a otros que últimamente estaban azotando a Tomoeda, recién hubo un accidente vial, en el que la chica parecía querer morir, días antes un chico se había cortado las venas en la clase de cocina con la excusa de “querer probar la sangre antes de morir” y ahora esta chica que se había lanzado desde el tejado de la escuela. Lejos de estos sujetos se encontraban dos chicos y dos chicas comentando sobre lo recién ocurrido.

    -Esto es raro, Tomoeda esta siendo lugar de muchos suicidios raros. – comento Eriol, mientras se mostraba pensativo ante los sucesos.

    -Debe ser por algo o alguien – insinuó Syaoran mirando de reojo a Sakura, quien volteo la cara. Tomoyo la miraba de manera extraña, tenia que averiguar que tenia que ver su amiga en esos extraños sucesos – no encontraran nada, esto es obra de la Dama de la Muerte.

    -¿La Dama de la Muerte? – pregunto curiosa Tomoyo.

    -Es una mujer, encargada de juzgar a las personas y decidir si irán al infierno o vivirán un tiempo más, para darles otra oportunidad, en caso de que dicha persona haya hecho actos malos, y vaya al cielo. Haciendo que parezcan suicidios. – explico Syaoran.

    -Interesante – murmuro Tomoyo, esto ponía muy nerviosa a Sakura, quien prefirió cambiar el tema, antes de que esto se saliera de control.

    -Bueno, será mejor olvidarnos del tema, esperemos que eso que dice Syaoran nos sea verdad. No me imagino las vidas de las personas en manos de una mujer – Sakura jugaba con los dedos de sus manos mientras que intentaba buscar una excusa para salir allí, pero Tomoyo se adelanto.

    -Sakura, me acompañas quiero ir a la cafetería, me estoy poniendo algo nerviosa y quiero tomar algo para calmar los nervios. – sugirió Tomoyo, por lo que Sakura agradeció, tenia una excusa para escapar de los comentarios de Syaoran. Las chicas se encaminaron a la cafetería dejando a los chicos solos. Antes de que ambas llegaran a la cafetería, Tomoyo jalo a Sakura a uno de los pasillos de la escuela, los cuales estaban vacios debido al trágico suceso, y empezó el interrogatorio. – Muy bien Sakura ¿Por qué dijiste que había sido tu quien que mato a Haruka? El maestro dijo que ella se había lanzado sola. – Sakura maldijo por lo bajo, no imagino que en este momento Tomoyo le echaría la pregunta de los cinco millones de dólares.

    -Tomoyo… -bajo su mirada, no quería ver el rostro de Tomoyo cuando se lo dijera– yo… soy la Dama de la Muerte

    -No. Puede. Ser – Tomoyo tenia los ojos completamente abiertos, sorprendida ante tal revelación.

    Sakura llevo a Tomoyo a una de las bancas que se encontraban en el pasillo y dio a Tomoyo un vaso de agua. Cuando Tomoyo logro articular, otra frase que no fuera “No puede ser”, procedió a explicar como había sucedido todo.

    -¿Esto es una broma verdad?- pregunto Tomoyo aun sin creer lo que le había revelado su amiga y prima.

    -Lamento decirte que no lo es, es verdad – Sakura se encontraba con la mirada baja, no le gustaba mucho recordar ese momento de su vida, pero tenia que explicárselo a Tomoyo – recuerdas que en los últimos dos meses Touya siempre me ha preguntado el ¿Porque paso tanto tiempo en sótano?- la pelinegra asintió y la castaña se dispuso a continuar con su explicación- es porque estoy “trabajando”.

    -Pero que clase de trabajo es ser la Dama de la Muerte, eres una asesina – comento Tomoyo.

    -Lo se, pero tengo que hacerlo, o Touya y mi papa… morirán.

    -¡¿Como?!

    -Es un trato, recuerdas el accidente que tuvimos hace casi tres meses – la pelinegra asintió con duda – pues…

    Flashback

    Sakura Se encontraba en aquel oscuro lugar, el lugar de esos recuerdos dolorosos, donde su vida había cambiado a ser una peor. Partes metálicas volaban por todo el lugar, el fuego hacia acto de presencia alrededor de ella. Junto a ella se encontraba los cuerpos de su hermano y su padre. El auto había quedado destrozado, después de caer por el abismo, estaba envuelto en llamas. Sakura veía los cuerpos y las llamas acercándose a ellos, ¿Por qué ella no estaba inconsciente igual que ellos?

    -¿No quieres que mueran? – escucho la voz de una mujer detrás de ella, volteo para ver a una chica pelirroja y ojos color miel. – no quieres quedarte sola, ¿Verdad Sakura?

    -¿Co-como sabes mi nombre? – pregunto temerosa

    -Eso no importa, ¿No quieres que mueran verdad?

    -No…

    -¿Estarías dispuesta a pagar un precio para que no mueran?

    -¿Que tipo de precio?

    -Solo me tienes que hacer un favor – sonrió

    -De acuerdo.

    La chica alzo sus manos y Sakura se elevo en el aire. Una vez en el aire, Sakura, la rodeo un brillo blanco, que pronto se desvaneció. Sakura cayo al suelo, pero esta vez tenia un libro y una tijera sobre el. – Ese será tu trabajo.

    -No entiendo, ¿Cual es mi trabajo?

    -Tendrás que juzgar y luego matar.- Sakura abrió los ojos completamente sorprendida, ¿Acababa de aceptar el trabajo de la muerte?- ese será tu precio para que no pierdas a tu familia.

    -De acuerdo – no había vuelta atrás, había aceptado por la vida de su hermano y su padre, tenia que cumplir su trabajo – ¿Como sabré a quienes juzgar?

    -Te contactare, ya veras, empezaras dentro de una semana, tienes que tranquilizarte. – luego desapareció en el viento. Sakura volteo a ver a su hermano y padre, estos ahora se encontraban sin rasgos de heridas.

    Fin del Flashback

    -Una semana después, fue a la casa y hablo conmigo, me hizo firmar un contrato. No podía negarme, firme y ella me dijo que si me llegaba a retractar, ellos cumplirían su destino. Morir.

    -Terrible… y ¿Cuanto tiempo tienes que hacer esto?

    -Tengo que hacerlo hasta mi último día de vida. – agrego con tristeza.

    -¿Tienes que hacerlo hasta que mueras? – pregunto sorprendida y triste, no quería que su prima y mejor amiga viviera una vida así, asesinando gente.

    -Si… después de mi muerte, ella me hará renacer para que pueda tener una vida normal, que no podre tener.

    -Sakura, no quiero que tengas una vida así – la abrazo dándole a entender que la apoyaba, aunque fuera un caso algo raro.

    -Yo tampoco Tomoyo, yo tampoco – y entre los brazos de Tomoyo, rompió el llanto que había mantenido encerrado durante esos dos meses. – prométeme que no le dirás a nadie.

    -Lo prometo. – así se quedaron un largo rato hasta que uno de los maestros les aviso que debido al “suicidio” de Haruka, las clases se pospondrían por el resto de la semana. Ambas se encaminaron a la entrada del instituto, donde las esperaban los chicos recostados en el muro de la entrada.

    -¿Por qué tardaron demasiado? Solo fueron a la cafetería – comento Eriol, quien se notaba estaba algo estresado.

    -Eriol, ¿Otra vez perdiste una apuesta con Yamazaki? Te dije que no lo hicieras – regaño Tomoyo. – ¿Qué apostaste?

    -Mi reloj, contra su cadena de oro, a que Naoko no creería que el había visto un ovni volar ayer en la noche y que lo había raptado y operado en la nave. – contesto con enojo y de brazos cruzados.

    -¿Y ella lo creyó? – pregunto con una ceja levantada, Yamazaki era reconocido por sus mentiras, ya nadie creía en nada de lo que decía, ¡Y Naoko había caído! – ¡es imposible!
    -Dímelo a mí.

    -Eso te pasa por estar haciendo apuestas tontas. Bueno, como tendremos libre el resto de la semana ¿Quieren ir al parque de diversiones mañana?

    -Por mi esta bien. – respondieron al unisonó ambos castaños, lo que causo risa en los pelinegros y sonrojo en la castaña.

    En el trascurso del camino, Eriol y Tomoyo, iban en amena plática. Pero nuestra castaña iba un tanto callada, Syaoran, se acerco de nuevo a ella, al sentirlo sintió como una descarga eléctrica bajaba por su espalda. Syaoran sonrió y murmuro.

    -Hay más de una solución a tu problema, Sakurita. – murmuro a su oído, ella lo volteo a ver, sonrojada y confundida, el solo sonrio. Haciendo que su sonrojo aumentara.

    Continuara…
     
  10.  
    fabrianny

    fabrianny Entusiasta

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    23 Diciembre 2008
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    196
    Pluma de
    Escritora
    Re: ¿La Muerte Se Puede Enamorar?

    hola esta buena la conti y de veras no entendi mucho tu comentario pero se que tratas de decir basta ver tu nombre para darse cuenta yo uso uno similar en mi firma y creo que describe bien lo que soy y lo que oculto a la vista de los demas bueno me gusto mucho la conti y tengo una ligera sospecha de shaoran pero bueno dejare que tu lo aclares sabia que lo llevarias bien bueno saludos y gracias por leer mi fic
     
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