Microrrelato "¿Como es que alguien puede ser tan inmenso como para disfrazarse de cielo?"

¿Como era posible que él solo causase todo eso en mi?

Mi sentimientos parecian no quere entender lo que realmente estaba ocurriendo. Muchas personas que conozco me habian contado acerca de esta experiencia, pero nunca les habia creido verdaderamente.

Bueno, no es que no les haya creido, sino que no les habia entendido.

Y ahora lo sé, es un sentimiento bastante extraño y abrumador, como si tu corazón hubiese quedado perdido en el medio de la nada sin saber a donde ir, habiendo sido arrojado desde el mismisimo cielo. Un cielo que antes brillaba, pero que ahora se ha oscurecido y no parece que vaya a volver a esa forma anterior. Ahora solo hay nubes grises allí y el paisaje primaveral sucumbido por amor y los abrazos de dulzura del cariño incondicional que ese lugar me daba han desaparecido.

Me pregunto porque, asi como el cuerpo de nosotros, los humanos, esta biologicamente preparado para afrontar muchas situaciones riesgosas y desagradables de nuestra vida, nuestra alma no lo estará de la misma forma.

Quizás, si alguien me hubiese advertido de esto, ahora no estaría tan desconcertado.

Quizás, si alguien me hubiese dicho que no habia nada detras de la mascara con la sonrisa, ahora no habria lagrimas cayendo a lo largo de mis mejillas.

¿Y quien pudiera borrar estas lagrimas? Si solo ese cielo que parecia mostrarse infinito y vislumbrar un futuro lleno de esperanzas color verde en mis ojos podia hacerlo, me ha mentido y traicionado. Y su adios me ha herido mucho, porque se ha marchado sin decir ni una sola palabra. Abandonandome sin dejar ninguna brujula o pista que pueda guiarme en este nuevo camino. Camino que pareciera estár lleno de infortunio y desventuras.

Puede ser que haya alguien que me entienda y quiera ayudarme, pero sus palabras en este momento no me alcanzarán, aun si esa persona gritase hacia mi con todas sus fuerzas. Esas palabras no alcanzarán mi corazón, porque de hecho éste ya no está entre nosotros.

Se ha roto, y alguien debe repararlo.
Siempre he sido yo el que se ha tomado el trabajo de mimarlo y quererlo, nunca nadie lo ha hecho por mi y supongo que, al menos en mi situación, eso deberia ser normal. Asi que, para no cambiar la costumbre, otra vez me dedicare a alagarlo y llenarlo de cariño y sorpresas hermosas para que, poco a poco, se recupere y vuelva a ser el que era en un principio. Ese que, a pesar de que pasaba desapercibido en todas partes y no destacaba entre todas las demas cosas que lo rodeaban, era querido y tenia alas. Aquel que era libre sin la necesidad de ser amado por otra persona que no sea yo mismo.

Alguien se ha disfrazado de cielo y se ha puesto la mascara con la sonrisa para cortar el lazo que me une a mi corazón.

Y a veces me pregunto como es que esa persona pudo ser capaz de hacer eso.

¿Como es que alguien puede ser tan inmenso como para disfrazarse de cielo?

Pues no me gusta esa pregunta, porque me hace recordar cuan "gigante" era ese alguien. Simplemente produce que desee que ese cielo vuelva, sin importar si vuelve en forma de rayos o tormenta. Y eso no es bueno ya que, al menos por ahora, no estoy preparado para seguir sufriendo.