¿Amor? NaruHina

¿Amor? NaruHina

Necesito soñar de nuevo.
Sakura me dejo shockeada con su confesión, no por bonita... por que fue lo más tonto que he escuchado, y se esta haciendo mucho más posible el NaruSaku :X
Así que fantacie un poco para dejar de pensar que Sakura y Naruto van a terminar juntoa (Me enfermo de solo decir eso xD)
Asi que sin más que decir
aqui mi nuevo
One-shot: ¿Amor?
Ready...Set!...GO!!

¿Amor?

¡Bienvenidos a la secundaria Konoha Gakuen! Donde todo lo que sucede es exactamente igual al día anterior, una escuela donde nunca hay novedades ni noticias escandalosas. Lo único que te permite saber que es un día diferente del anterior es, el siempre cumplido llanto de la ex novia de Sasuke Uchiha y los gritos de alegría de otra chica. Siempre me he preguntado que es lo que ven en él, para mi es solo un patán, alguien que siempre a jugado con los sentimientos de todas las chicas. Sin embargo no logro entender porque siempre esta buscando a otra chica; es más algo que todavía no logro entender es ¿Por qué la humanidad siempre esta intentando buscar el amor? ¿Qué es lo que causa que todos lo busquen desesperadamente?

—No puedo creer Yuno-chan allá caído— dijo Sakura mi más antigua y mejor amiga. Su cabello es rosa, casi igual al de los cerezos, aunque muchos le dicen que es más parecido a una goma de mascar. Su raro cabello rosa, sin que yo pueda hablar mucho pues mi cabello es color azul noche, es contrastado por sus bellos ojos verde jade y su rostro perfilado. Tiene buen cuerpo y trae locos a la mayoría de los chicos de la clase. Es casi perfecta su único problema es su humor un “poco” inestable, en un solo segundo la chica dulce y amistosa que conociste se convirtió en un completo demonio.

—Ya lo ves. Hay una primera vez para todo— dije yo. Sus ojos se abrieron bien grande y en su rostro se dibujo un gesto de incredulidad; tal vez pensó que nunca diría eso, ya que soy algo… tímida, diría yo, y no suelo decir esas cosas. Sakura y yo ciertamente somos polos opuestos: Ella es extrovertida y expresiva y yo soy muy poco expresiva y algo ajena a lo que suceda con los demás. Sin embargo soy feliz así, y hasta ahora no he encontrado una razón para cambiarlo.

— ¿Y dime Hinata, quien es la nueva?— preguntó mi amiga colgando su maletín en el espaldar de es asiento y sentándose a mi lado, todo intentando aparenta poco interés en el tema. Pero yo lo se, siempre le ha atraído Sasuke y siempre me he mantenido ajena a esa poco secreta atracción y… ¿Para qué mentirles? Me hierve la sangre saber que se siente atraída por ese idiota que no respeta a las mujeres en lo más mínimo.

—Parece ser Kari— respondí a su pregunta mirando la espalda de la chica que ahora estaba encima del Uchiha.
— ¿Hikari?— preguntó entre incrédula y sorprendida.
— ¿Qué pasa con ella Sakura-chan?— pregunte con algo de curiosidad, aquellas reacciones no son típicas en ella rara vez se le sorprende con un chisme y mucho menos si es sobre el Uchiha.
— ¿Acaso no lo sabes?— me preguntó, a lo que negué con la cabeza –Ella es la novia de Sai- dijo tomándome por sorpresa.

Sin embargo lo que me tomaba por sorpresa no fue el hecho de que estuviera engañando a Sai, si no que Sai ese chico azabache de tez pálida y más insensible que el propio Sasuke Uchiha tuviera novia. Siendo sincera ese chico me causa miedo, es algo raro, siempre esta sonriendo. Es una de esas pocas personas en el salón con las que suelo tener menor contacto.

Nos mantuvimos ambas en silencio, ambas dentro de nuestros pensamientos. Ella tal vez pensando en Sasuke y yo en realidad esperaba terminar rápido clases para ir a mi entrenamiento de esgrima. La campana sonó y por primera vez, y tal vez marcando la llegada del apocalipsis el maestro Hatake llegó a tiempo a clases. Fue una entrada casi instantánea al sonido del timbre. El maestro entro en la habitación cargando una gran cantidad de libros, ni siquiera podíamos llegar a ver su rostro, el cual siempre estaba cubierto por una mascara.

—Chicos. Por favor a sus asientos— dijo el maestro Hatake poniendo la gran torre de libros en su escritorio —Hoy recibiremos a un nuevo estudiante— dijo con entusiasmo, algo característico en él.
—Disculpe Kakashi-sensei— dijo Sakura pidiendo la palabra— ¿Entrara un nuevo estudiante a la mitad del semestre?—
—Si, puede ser extraño pero salió de su escuela anterior por problemas que para mi son desconocidos. Pero dejemos que el mismo se presente ¿Te parece Sakura?— preguntó el maestro con un cariño que solo le daba a ella, por eso solo ella lo llamaba Kakashi-sensei.

Después de aquellas palabras un chico de ojos azules, alto y bastante guapo entro por la puerta del salón. Allí sentí como la sangre subía a mis cachetes y sin tener que verme en un espejo supe que estaba completamente roja. Mis mejillas estaban tan coloradas que me sorprendió que él no se hubiera dado cuenta y por más que intentaba reprimir aquel sonrojo no podía detenerlo. Es que él era tan… ¿Lindo? ¿En que diablos estaba pensando? Ahora lo que menos necesito es que yo también me enamore de un chico estúpido; porque conozco muy bien a los de su tipo una cara linda… o mejor dicho hermosa pero a fin de cuentas resultan ser unos idiotas.

— ¡Ohayo!— dijo con emoción—Soy Uzumaki Naruto es un gusto conocerlos—terminó llevando uno de sus brazos a su nuca y riendo torpemente. Algo que para mi mala suerte causo otro sonrojo incontrolable.
—Bien joven Uzumaki— dijo—Bienvenido a la secundaria Konoha Gakuen. Después de clases la señorita Hyuga le enseñara el colegio.

Lo siguiente que ocurrió fue una serie continua de errores, errores que no suelo cometer. El primer y peor error fue el levantarme con brusquedad y un grito estrepitoso y fuerte salió de mi boca algo como un “¡¿Por qué yo?!” Solo hay comenzaron los errores. Primero quede como una chica impulsiva y agresiva frente al salón de clases, segundo le di a aquel…apuesto chico una muy mala primera impresión; tercero y afortunadamente el ultimo me torne completamente roja no solo al ver las miradas sorprendidas de mis compañeros sino también la mirada azul cielo del chico nuevo que me miraba sorprendido; pero sin notar, como todos los demás, mi enorme sonrojo. Pero en ese momento en realidad no note esa serie de errores que para mi son inaceptables, pues la representante de la familia Hyuga tiene que ser “perfecta”, y en todos los aspectos estoy muy lejos de llegar a serlo. Ya lo dije antes y en ese momento solo me deje llevar por el enojo de no poder ir a mi entrenamiento de esgrima… ¿Creen ustedes que sea posible odiar a una persona tan pronto la vez?

—Porque, usted señorita Hyuga, es la representante de la clase—dijo respondiendo a mi pregunta escandalosa. Yo tan solo pude sentarme, bastante enojada en mi asiento y… en realidad a ciencia cierta no se como lo vi, pero en el chico nuevo se dibujo una expresión de miedo. Sin embargo esa tonta sonrisa seguía dibujada en sus labios…sus bellos labios ¿Pero en que diablos pensaba? Por él debía perderme mi entrenamiento de esgrima.

El día paso con tanta normalidad que ni siquiera note que el chico nuevo existía. Sasuke rompió con su novia y estaba hablando con otra chica, una de un grado menor, como siempre sucedía. Por mi parte yo estaba dispuesta a marcharme a casa, además ya había terminado de empacar mi maleta. Estaba tan metida en mis pensamientos tan tranquila que pensé que nunca nada me podría sacar de ese estado hasta que…

— ¡Hola!— me dijo el chico nuevo casi gritando y llevándome casi hasta la muerte de un susto— ¿Ibas a irte a cas sin mostrarme la escuela?— bromeo con su tonta sonrisa.
—Yo…yo— mi legua se congelo—Yo lo siento, lo olvide— alcance a decir.

Sus ojos se postraron en los míos y simplemente me congele. Mirara sus ojos era como conocer el más hermoso mar, sus dorados cabellos eran casi tan brillantes como el sol y sus morenos labios eran algo aun más provocativo que el chocolate. ¿Pero qué diablos pensaba? Esa pregunta pasó por mi cabeza el día entero. ¿¡Que rayos tenía este chico que cambiaba completamente mi comportamiento?! Aquella personalidad fría e inexpresiva, seria e insensible que tanto trabajo me había costado crear desaparecía por completo cuando él estaba cerca.

Me continuaba mirando y solo quería saber que era lo que pasaba por su cabeza, si el también sentía aquella atracción involuntaria, ese vacío en el estomago que se asemejaba a un hoyo negro que parecía que se comiera todas las palabras, la respiración y el aire que intentaba salir de la boca. Quería saber más sobre él. Pero una Hyuga no se debe dejar llevar por sus sentimientos y sus impulsos debe ser un ser racional a quien nada le afecta. Una Hyuga de verdad no se deja afectar por el saber que piensan los demás.

— ¿Y bien? — preguntó sacándome de aquel estado de hipnotismo en el que me encontraba.
—Ahh…—alcance casi a decir—Bi….bien… sígueme— dije de nuevo con ese balbuceo torpe. Comencé a caminar y como lo esperaba él me siguió. No lo entendía debía estar eufórica, por él no iría a mi practica de esgrima y mi padre, Hiashi, de seguro se molestaría pero había, dentro de mí, un sentimiento de alegría imparable.

Con el tiempo su compañía se hizo un poco menos insoportable, o debería decir más agradable. Sentía que por primera vez después de reprimir todos mis sentimientos podía mostrarlos libremente con él. Aquella persona con la después estaría sentada platicando era esa llave del candado de mis emociones, más bien lo era su sonrisa. Una sonrisa que derretía mi corazón con tan solo verla y hacia que mi total control se volviera inútil; una sonrisa que me volvía sumisa y más tímida de lo normal pero que me hacía sentir muy bien. Pero… una Hyuga debe fijarse en alguien refinado, que tenga el mismo tipo de educación que ella y más importante igual o más dinero, no podía dejarme sentir algo por él.

Aquella norma que me abría de seguir toda mi vida en aquellos momentos en verdad no importaba y por eso me deje llevar por las espontaneas sonrisa y no intente más detener los sonrojos. No me gustaba, solo me agradaba su presencia y llegue a admirarlo porque se mostraba como era: Una persona algo torpe pero alegre y perseverante, por supuesto por lo que él me contaba. Solo continuamos caminando conociendo la escuela hasta llegar al fatídico momento en el que pasamos por las canchas de fútbol de la escuela. Allí practicaba el equipo de futbol de la escuela, en el cual esta mi primo que nada tiene que ver en esto. Cuando apenas estaba pasando lo mejor, cuando creí que ya había hecho algún tipo de conexión importante con este apues…chico un gran golpe sacudió mi cabeza y lo siguiente que vi fue el balón de fútbol cayendo frente a mí.

Voltee con fuerza para ver quien había sido el idiota que me había golpeado pero solo vi risas, risas de todos e incluso la sonrisa de superioridad de mi primo, es más hasta el chico nuevo o Naruto o como se llamara reía. En lo más profundo de mí ser el orgullo Hyuga, que no concia salió a flote expresado en aquellas largas y fuertes palabras:

— ¡¿Por qué ustedes los chicos tienen que ser siempre insoportables?! — grite con todas mis fuerzas mientras salía corriendo a todo lo que mis piernas me daban. Corrí hasta llegar al viejo árbol de la escuela, allí me detuve y me senté bajo él intentando tranquilizarme, pero creo que aquella pregunta jamás en sus vidas la resolverán.

—Hey— decía él mientras correa hacia mi, Ni siquiera quise voltear a verlo, odiaba que ese orgullo Hyuga saliera a relucir en los momentos menos indicados— ¿Por qué saliste corriendo así? —preguntó con tanta ingenuidad que creí que era enserió.
—No es nada. Nada que te importe— respondí sin mirarlo estaba todavía muy enojada.
— ¡Vamos! No te ves para nada bien enojada, deberás— dijo mientras me tomaba por los hombros y yo instintivamente me zafaba de su agarre. — ¿Serviría una disculpa?— preguntó.
—Pu…Puede ser, tal vez— respondí volteando para ver su cara. El atardecer que estaba en frente mío hacia ver su rostro más hermoso, algo que produjo de nuevo un sonrojo en mi rostro.
—Lo siento, no debí haberme reído— dijo llevando su brazo a su nuca pero… ¿Por qué diablos me pregunto el por qué estaba enojada si ya lo sabía? —Ahora— dijo para dejarme intrigada —puedo decirte que te ves hermosa bajo la luz del atardecer— dijo para dejar mi rostro totalmente rojo y que por primera vez en mi vida me pusiera tan nerviosa que me mareara. — ¿Puedo ver el atardecer contigo? —preguntó, a lo que yo solo asentí con la cabeza entre nerviosa y alegre.

No nos dijimos nada más, solo continuamos viendo el atardecer, juntos, hasta que, por un impulso mágico diría yo, nuestras manos se tocaron. No pude evitar retirarla enseguida y mirarlo sonrojada mientras sostenía mi mano con la otra. Pero aquel sentimiento que recorrió por mi mano y luego siguió a mi corazón fue tan agradable, tan necesario, tan adictivo que sin saberlo ya estaba intentando tomar su mano de nuevo. Así lo hice, solo la toque, solo necesite tocarla para sentir esa hermosa sensación de nuevo pero él tomo mi mano con delicadeza. Él entrelazo sus dedos con los míos haciendo una pequeña telaraña de emociones diversas, pero todas buenas y hermosas; hizo que esas sensaciones fuera más fuertes pero mucho más hermosas. Y…solo nos quedamos así… y…ahora entiendo que es lo que hay en el amor que te hace buscarlo con ansias: El amor se siente muy bien.
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No creo que alla un OoC, Hinata tiene su personnalida de siempre, solo que al principio pense que seria más interesante que fuera una especie de lobo solitaario y ser sin sentimientos ;)
Cualquier cosa lideres del foro diganme y lo arreglo.
jejejej buehno eso es todo posteen!!
Sayo!!