* Media noche * (Jacob-Reneesme) (Edward-Bella)

(Mitad de la tercera parte)​

Mi imaginación quedó ridiculizada bastante por mi inocente seguridad de creer que conocía completamente la capacidad de sorprenderme Alice.

Al cumplir exactamente un kilometro de llegar a mi casa el camino empezó hacer alegre, llamativo, muy festivo. Y todo gracias a mi tía. Había puesto adornos muy vistosos de figuras irregulares sobre el camino. Era imposible que no pudieran llegar mis amigos a la fiesta; ésta se anunciaba a gritos.

Era muy exagerado detalle de los colores en lo alto, porque no había espacio libre que las figuras no adornaran; pero me encantaba, y al parecer también a mi amigo.

¾ Tardaron varios días en colgarlos ¾aseguró Isaac con la vista puesta en el cielo colorido.

Estaba segura que era una de pocas, si no es que la primera vez, que parte del cielo de Forks se veía alegre, con luz. Ese era el efecto que hacia tantos colores sobre nuestro camino: Daba vida el trayecto en mitad de un día común en este pueblo, nublado y triste.

¾ Si ¾Estaba embelesada como él. Además no sabia que decir, no mencionar la verdad era lo mas correcto: Hace apenas unas horas que fui a la escuela y no había nada de vida por aquí¾, espero que te haya gustado la sorpresa ¾¡Porque a mi me encantó!
¾ Vaya que si ¾Se acomodó feliz mi amigo sobre el asiento y se quedó callado, viendo el resto del inicio del “espectáculo”. Porque por lo que conocía a mi familia y sobre todo a mi tía, estaba segura que esto solo era el comienzo.

Llegamos en donde recordaba que la última vez estaba mi casa, pero ya no estaba, por lo menos no se podía ver. Estaba tapada todo el frente por una enorme lona que tenia dibujado un castillo. Mi casa había sigo trasformada en un… ¡Castillo!

Los carros de la manada, como los de mi familia, ya estaban estacionados todos a un lado del pequeño “castillo” de piedra gris claro, en orden, en una fila, que prometía convertirse en muy larga.

No supe donde estacionar mi camioneta, porque no quería ser precisamente yo la que empezara el desorden; sé que Alice no me lo perdonaría. Entonces al estar en medio de la casa y la fila de autos, un joven vestido de bufón, con tela de seda brillante, de colores vivos rojo y azul, tocó de mi ventana. No tenia ni idea quien era, bajé el vidrio automático… lentamente. Parecía tener miedo de lo que me estaba apunto de enfrentar.

¾ Milady ¾Saludó con una agradable sonrisa el joven de tes blanca¾, yo le estacionaré su camioneta.
¾ ¿Te contrataron…? ¾¡Alice! Exclamé en mi mente. Me sentí tonta por titubear al no saber que demonios le había pasado a la cabeza a mi tía para contratar un parking, transformar mi casa… ¡Y que mi familia lo aceptara! ¡Era ridículo! Respiré profundamente¾ Esta bien ¾A mi pesar tenia que seguir las reglas de “mi” fiesta¾, un gran favor, te ruego que tengas cuidado con los papelitos. No quiero perder ninguno.
¾ No se preocupe ¾Con un gesto de inclinación con su cabeza me tranquilizó.

El joven me tendió la mano y bajé de la camioneta. Le agradecí con una sonrisa su ayuda. Empezó el bufón a darle vueltas a mi regalo.

¾ Es nuevo, ¿cierto? ¾Levantó la mirada del Audi. Estaba buscando la matricula.
¾ Si.
¾ Entonces nada más pondré en la hoja la marca del carro…
¾ ¿Porque no solo lo estacionas? ¾Era todo tan ridículo que ya hasta gracioso se me hacia.
¾ Le tengo que dar su talón para cuando quiera que le entregue su camioneta.
¾ Cariño…¾Sonríe a mi pesar y condescendiente lo traté. Esto era para no atacarme de risa¾, soy la festejada y lo más importante de todo… Esta es mi casa… O por lo menos lo era ¾farfullé desahogándome aunque esas palabras fueron para mí y el Todopoderoso que me escuchaba.
¾ ¡Ahh! ¾El bochorno del trabajador era lamentablemente muy visible al ponerse rojo. Bajó la mirada y empezó a escribir sobre la hoja y la arrancó para entregármela¾ De todos modos se lo debo de dar.
¾ No es necesario todo esto para diez carros… y se me hace mucho ¾Se lo decía a Isaac que se había acercado a mi y al joven; pues mis buenos amigos no eran muchos.
¾ ¿Diez? ¾Echó una vista a su agenda electrónica que sacó de su chaleco¾ La señorita Alice nos dijo que esperamos cincuenta y dos automóviles y también motos.
¾ ¿Les dijo? ¾Esto ya no daba risa.
¾ ¿Cincuenta y dos carros? ¾Gritó mi amigo al mismo tiempo que yo había hablado.
¾ Si, nos dijo, es que somos cuatro ¾Me aclaró amable el bufón.
¾ ¡Vaya, Nessie! ¾Parecía incomodo Isaac. Se acomodó sus delgados lentes de su nariz¾ Pensé que iba a ser una fiesta algo mas… intima.
¾ Ya somos dos ¾Mascullé mientras les regalaba a ambos jóvenes una sonrisa fingida ¾Pues entremos.

En esos pocos minutos de distracción, no me pude dar cuenta que ya había dos tipos, uno de cada lado de la casa, vestidos de bufones con llamativos trajes de colores, mascaras y nunca faltante gorro. Estaban sobre unos zancos de dos metros.

Me acerqué rápidamente a uno de ellos, el que me quedaba más cerca del camino y con mi fatal humor sarcástico le hablé, pues mi entusiasmo como si fuera magia se había desvanecido:

¾ ¿Quién lanzará fuego de la boca?

El bufón se acercó a mí, se inclinó y habló en voz baja:

¾ Los dos, solo estamos esperando instrucciones de la señorita Alice.

¡Esto si que era una burla!

¾ ¡Wow! ¾Y a Isaac parecía disfrutar las exuberantes ocurrencias de mi familia ¾ Creo no venir vestido para una fiesta de este tipo.
¾ Nadie en una fiesta organizada por mi no se va a ver genial ¾Apenas había tocado mi pie dentro de la casa y la culpable de todo esto se cruzó en mi camino.
¾ Alice ¾mi boca no se había apenas movido, mis dientes estaban frustrantemente pegados arriba y abajo¾ que bueno que te veo…¾Mis palabras se me esfumaron no solo de mis labios, también del cerebro al ver ante mí a una joven vestida de una “Lady” del siglo XV. Su vestido era verde obscuro con un delicado borde en las mangas y en el pecho de color oro. Tenia sobre su corto cabello un pequeño sombrero inclinado de lado izquierdo negro con una linda pluma del color del vestido.
¾ Milady, Milord ¾Un hombre joven vestido como los guardias de los antiguos reinados europeos, nos saludó¾ ¿Serian tan amables de darme su nombre?
¾ Soy Isaac Backer ¾En automático mi amigo obedeció.

El “guardia” buscó el nombre mencionado en una lista de un pergamino que estaba desenrollando.

¾ Lord Backer ¾Anunció todo formal el guardia¾, puede pasar.
¾ Lord Isaac ¾Alice me ignoró por completo¾, en la habitación de invitados del castillo está su traje, está etiquetado con su nombre.
¾ ¿Pero de que estas hablando? ¾Entonces Alice abrió completamente la puerta y por primera vez sentí que me iba a dar un infarto fulminante ¾¡Santos cielos!
¾ ¡Bienvenidos a la edad media!

Mi casa tampoco ya existía por dentro. Estaba irreconocible. Todo su interior desde el techo, hasta el piso era una feria del mundo medieval. El piso lleno de paja, los muebles ahora eran de toscos diseños de madera y los techos llenos de estandartes.

¾ ¿Me quieres matar? ¾Le susurré y vi a mi familia y a la manada divirtiéndose en todo este espectáculo al participar en varios juegos comunes de esos tiempos. Ellos ya estaban vestidos como varios personajes de esa época: Caballeros, gitanos, magos, bufones y hasta esclavos...

¿El alto joven vestido de harapos y pintada la espalda de sangre, dando el efecto de ser golpes de látigo, era Emmett?

¾ ¿Dónde pongo el regalo? ¾Isaac parecía ansioso por ser parte ya de ese mundo.
¾ Sobre la mesa de los tributos ¾Eufórica Alice le señaló hacia una mesa de madera grande que estaba al fondo y ya casi llena de regalos ¾Toma el mapa y el horario de cada evento ¾Le dio una hoja color café, parecía ser un pequeño pergamino antigua.

Apenas mi amigo se alejó unos pasos de nosotras y no pude contenerme más:

¾ Tía ¾balbuceé toda tensa¾, pretendía una fiesta intima.
¾ Preciosa, ¾Me tomó de la mano y empezó andar, negó con su cabeza muy indulgente hacia mí. ¡Como si mi preocupación fuera una tontería!¾esas fiestas se pueden hacer todo el tiempo y ahora…
¾ Tuviste el pretexto para traer a mi casa un espectáculo de Broadway 1.
¾ ¡Verdad que si es digno de Broadway! ¾Al no poder darle respuesta por mi lengua paralizada, mi tía continuó¾ Las fiestas temáticas es la moda.
¾ Tía, de por si hay gente que creen que tenemos fuertes negocios turbios y con esto…
¾ ¿Crees que exageré? ¾Hizo un puchero, deteniendo nuestro caminar¾ Todos me dijeron que era mucho… ¾Se cayó y una sonrisa triunfal iluminó su exquisito rostro¾ menos Jacob, me decía que era libre de seguir mi plan, que así lo querías. ¿Entonces de que te quejas? ¾me palmó mi huesuda mano.
¾ De que quiero pasar como una joven normal, de familia normal ¾Me encogí de hombros.

Pero por fin mi cerebro desde que llegué, por culpa del shock, pudo pensar.

Era absurdo mi próximo infarto. Eso me encantaba: tener una familia como la que tenía. Tener una tía que disfrutaba de la alegría, pero sobre todo de hacer feliz a los demás. Y eso quería hacer Alice ofreciendo su amor y talento: Que sea para todos los invitados un día inolvidable. Pero sobre todo, que yo lo tenga, pues era “Mi día”.

¾ Será increíble ¾Sentenció.

No tenia que tener visiones para estar segura de aquello, puesto que todo lo que alcancé a ver era perfecto y eso que aun no iba a la feria.

¾ Estoy segura que si ¾Le di un besó en la mejilla¾. ¿A todos les mandaste hacer trajes? ¾Seguimos el camino que parecía llevarnos a mi recamara, yo me dejaba guiar por mi tía.
¾ Estoy segura que les encantará el papel que cada quien va a desempeñar por este día.
¾ Porque lo viste en tus visiones ¾Mi tono era como si estuviéramos conspirando con la ayuda de un plan malévolo.
¾ Exactamente ¾Orgullosa se irguió de hombros.
¾ Pues quiero el mio…¾Lo decía por el traje que yo iba a usar¾ Sorpréndeme.

Entramos a mi habitación, creo yo, de los pocos lugares de la casa que no era invadido por la temática de mi fiesta. Todo seguía exactamente como lo había dejado hace unas horas, excepto por cinco disfraces que estaban sobre mi cama.

¾ Ponte el que quieras ¾Me dijo Alice. Era lo malo para ella no planear también mis gustos, al no poderme ver en sus visiones¾. Jacob está seguro que escogerás el de la reina o el de dama de la corte.
¾ Pues se equivoca ¾No iba a ponerme algo que fuera tan vistoso (Si la fiesta lo seria no quería también yo serlo), quería ser parte de la feria ¾Vi a Leah de gitana, me gusta ¾Había un traje similar del de mi amiga en la cama. Lo tomé para verlo, estaba precioso, pero… con la blusa de seda roja con mangas cortas se iba a ver mis brazos.

No podía enseñar nada de mi cuerpo, eso era una pena porque el traje estaba increíble. Entonces sin tener otra opción vi el de la reina y el de la dama de la corte, ahora entendía porque mi esposo estaba tan seguro: eran disfraces que cubrían todo. El hecho que supiera Jacob que iba a querer esconderme bajo ropa me molestó muchísimo. Odiaba sobre este tema que me conociera tan bien.

¾ ¿Entonces cual te pondrás? ¾Alice me animó a escoger.
¾ El de dama esta bien ¾Era un vestido precioso color dorado con piedras de fantasía que daba el efecto de ser perlas, con una diadema ¾¡Que maravilloso! ¾Estaba enamorándome del conjunto¾ Parecen perlas.
¾ Es que son perlas.
¾ ¡Tía, no me digas que todos los trajes salieron así de costosos!
¾ No, los demás son solo replicas ¾Se rió¾. No te asustes. ¿Te ayudo a vestirte?
¾ Yo me encargo ¾Oculté la mirada con mi disfraz, no quería que se viera el terror que hay en mis ojos de que me viera desnuda¾, gracias.
¾ ¡Muy bien! ¾muy entusiasmada dando pisadas como bailarina se dirigió a la puerta¾. Tienes todo el tiempo del mundo para arreglarte, en una hora llegará Jacob para escoltarte hacia las escaleras.
¾ ¿¡Haré entrada!? ¾Casi los ojos se me salían de orbitas.
¾ Por supuesto. Se harán las cosas bien ¾Parecía ofendida que hubiera pensado otra cosa viniendo de ella¾ ¿Quieres que le diga a Rosalie que te peine?
¾ Yo lo hago ¾Le regresé la sonrisa.
¾ ¿No quieres saber de que se disfrazó Jake?

Tenía mucha curiosidad de saber como se vestirían todos, sobre todo mi esposo, pero estaba segura de lo que fuera seria el más guapo de la feria.

¾ Mejor sigamos con las sorpresas ¾Me acerqué a mi pequeña tía y le di un fuerte abrazo acompañado de un cariñoso beso y hablando con toda amor, sinceridad y gratitud le dije desde el corazón¾ Tía, muchas gracias. Muchas gracias a todos ¾Y antes que se fuera añadí¾ Te ves espectacular con ese vestido.
¾ Gracias ¾agradeció con su linda voz¾, pero hoy es tu día. Serás la sensación.

Eso por supuesto que no pasaría.

* * *​

​

Por el ruido que me llegaba desde abajo, sabia que ya la mayoría de los invitados habían llegado. Se oían risas, platicas, aunque no las entendía, pues el festín estaba a lo grande.

Por las pisadas supe que ya mi esposo había llegado por mí y me lo confirmaron sus tres golpes en la puerta. Movió la chapa de la puerta para poder entrar, pero tenía seguro, por eso me paré de la cama para abrirle.

¾ ¿Por qué cerraste la puerta? ¾No podía comprender aun porque siempre Jacob dice o hace cosas que menos me espero.
¾ Hola, mi pequeña, ¿Cómo estas? ¾Traté de imitar su voz; y la verdad es que no me salía nada mal ¾Lo correcto al ver una persona después de tiempo es saludar¾ Mi pequeña lección de modales lo estaba haciendo para no responder a su pregunta, aunque él ya sabía la respuesta: No quería que nadie me viera sin ropa. Era mejor hacerme la ofendida.
¾ Disculpe ¾Se inclinó mi bello caballero de armadura¾, milady ¾Se aclaró la garganta y con su voz sensual; que nada mas esa me podía atrapar y llevar a un mejor mundo de pasión y dicha, prosiguió¾ ¿Me daría el honor de ser yo, un humilde guerrero, acompañarla en este día y cuidarla en la feria de hombres ruines, que al ver lo bella que es usted, el único deseo que saldrá de sus corazones es robarla?

¡Ridículo! No pude evitar pensarlo. Ya era mucho no ahogarme de la risa. Pero debía admitir que todo este circo era muy divertido.

¾ Yo seré la que lo cuide a usted, milord ¾tomé de sus manos que era lo único que no estaba cubierto de hierro de la armadura y se las besé ¾permítame el atrevimiento de decir que usted es el caballero mas atractivo que he visto y hoy claramente se dará cuenta.
¾ Con solo yo ser siempre el dueño de tu corazón, me importa poco que haya puros “adonis” en la feria y en tu vida.

Atrapó mis labios con los suyos. Su beso fue lento, pero lleno de una dulce sensualidad que era tan deliciosa que debía ser prohibida.
¾ Eso dices porque sabes que nadie es como tú y lo mas interesante de todo… ¾Mis palabras apenas salían de unos labios que aun eran reclamados por su dueño, pues todo mi ser siempre serian de mi esposo¾ : nadie me hace sentir de esta manera con el solo saber que existe y hacer que ame con esta intensidad para toda mi existencia.

Me dio otro beso, pero esta vez fue fugaz, sospeché que lo último que dije de mi “existencia” no le había gustado en absoluto, porque al alejarse de mí para abrir la puerta tenia una cara seria, pero con unos ojos de un agudo dolor que hasta me clavó en el pecho.

¿Cuándo comprendería que todo saldría bien?

Era desgarrador para mí ser la Maldita que le causara aflicciones al hombre que amo, cuando yo solo quería vivir para él, que sea feliz gracias a mí.

¿Pero que podía hacer?

Solo me quedaba suplicar que pronto Jacob me ayudara a serlo dichoso de nuevo.

¾ ¿Ya bajamos? ¾Pregunté al pasar enfrente de él y salir de nuestra habitación.
¾ Espera la señal.
¾ ¿Cuál señal? ¾Me acomodé la diadema de perlas de mi cabeza, se me estaba chavando.
¾ Pequeña, parece que no sabes que con Alice siempre hay “señales” ¾dibujo en el aire con sus dedos dos comillas.

Quería saber de que señal se trataba, pero no tuve que esperar ni un segundo para saber ahora en que Alice se había pasado.

Se oyeron trompetas… ¡Por Júpiter y Zeus!... Dioses de varias culturas y hasta de demonios sus nombres pasaron por mi cabeza, ya no sabia que mas exclamar o maldecir.

¾ Es broma, ¿cierto? ¾¡Por todos los santos que si lo fuera!
¾ ¿Broma qué, amor? ¾Se estaba burlando de mi, ¿Cómo preguntar eso?, entonces sin saber que pensar levanté la cabeza para verlo. El muy sinvergüenza se estaba apunto de atracar de la risa.
¾ ¿Cómo pudiste permitirlo? ¾Lo golpeé en su estomago. Un quejido se me escapó… ¡Maldita sea, porque debía tener armadura! ¾Sabes que yo soy sencilla…
¾ ¿¡Sencilla tú!?

¡Oh, santísimo, desea que se ahogara!

¾ No hablamos del físico ¾Le aclaré harta¾. Sino de mi forma de ser, sabes que no me gusta llamar la atención.
¾ Tú me dijiste que le diera carta blanca a Alice para hacer todo lo que quisiera.
¾ Tú bien sabes a que me refería ¾Si mi mirada matara… yo ya era viuda.
¾ Te seré sincero, esto de que las trompetas anunciaran tu llegada no lo sabía ¾Y viéndome furiosa mi esposo no le bajaba por lo menos un poco su risa¾. Pero tiene su estilo ¾Ofreció su brazo¾ Bajemos, milady.

Las malditas tromperas se callaron y empezamos a bajar las escaleras.

¾ Supongo que ya llegaron mis amigos.
¾ Amigos, enemigos… ¾Lo estaba pasando en grande Jacob¾. No estoy seguro, pero creo que todos los jóvenes de Forks estan aquí.
¾ ¿Hay gente que no conozco? ¾¿Podía existir algo más que este colmo?… Espero no saberlo.
¾ Eso tú me lo dirás, preciosa.

Mientras íbamos bajando pude ver a todos los invitados. Eran más de doscientos y a todos los conocía. La mayoría de la escuela estaba, si no es que toda. Mi familia y mis amigos de la Push.

¾ Los conozco a todos ¾Le confesé a mi esposo sin dejar de sonreír como tonta.
¾ Y todos a ti… ¾Se cayó y apunto de llegar con todos ellos, agregó furioso, aunque con su magnifica sonrisa engañosa la utilizó muy bien para los demás¾ es hasta ofensivo ver el encanto que eres para ellos.

El tiempo de exigir de que hablaba desapareció al ponerse Alice en medio de nosotros y ofrecer un brindis. Todos alegres y gozando de todo el show levantaron sus copas de madera.

¾ Salud por Nessie, mi bella esposa ¾Jacob le había ganado las palabras a mi tía.
¾ ¡Salud! ¾Gritaron todos eufóricos y el golpe de las copas siguió.

Tanto mi familia, como amigos y buenos conocidos se acercaron a mí después de finalizar el brindis para felicitarme. Todos me agradecían felices y emocionados por haberlos invitado a mi fiesta, declarando que estaba increíble; todos estaban seguros que la iban a pasar a lo grande.

El protagonismo que me hizo vivir a mi pesar mi tía, como lo de mi entrada, a los invitados parecía fascinarle. Les parecía genial que todo se siguiera como era costumbre en esa época. Al ver la aceptación de la desbordante imaginación de Alice, de nadie creerme una loca, la empecé a pasar bien.

Todos muy amables me felicitaron y se fueron esparciendo por la “feria”.

No solo en el “castillo” había distracción, también afuera. De hecho, fuera de estas pareces estaba lo mas divertido.Lo supe al ver la hoja del itinerario de las actividades que Jacob me había dado, junto un listón color rojo que me amarró en mi muñeca izquierda.

¾ ¿Y el listón para que es?
¾ Me dijo Barbie que era para cuando empezara el torneo ¾Se tuvo que acercar a mi oído para poderlo escuchar. La algarabía estaba en todo el ambiente ¾Nosotros somos equipo rojo. Ese deberemos apoyar.
¾ Que bien que nos tocó el mismo color ¾Comencé a leer las actividades y observé el pequeño mapa para saber donde se ubicaban.
¾ Yo era amarillo ¾Besó en mi cuello. Como siempre su contacto despertó en mi todo mi cuerpo. Tuve que respirar varias veces para lograr por lo menos un poco controlar el deseo ¾ Pero unas negociaciones con Seth… y todo listo.
¾ ¿Con que lo amenazaste? ¾Por su desgracia lo conocía muy bien. Sabía que Jacob con Seth no era de “negociar”. Pobre de mi tío.
¾ Amor, me ofendes ¾Teatral se puso ambas manos sobre su pecho.

No me dejé engallar por esos juguetones ojitos de “niño bueno” que me volvían loca, me encantaban; luego hablaría con Seth.

¾ Doy por hecho que ese torneo que mencionaste es el evento que comienza a las diez ¾Seguía leyendo la hoja.
¾ ¿Qué te apetece hacer primero?
¾ ¿Qué es lo que me recomiendas?
¾ Pues depende… ¾Se acercó a mí para también ver lo que decía el pergamino¾ Si quieres ganar monedas de manera fácil o quieres divertirte.
¾ ¿Monedas?
¾ ¡Ahh, es verdad! ¾se sacó de adentro de su armadura, que se le pegaba muy sensualmente a su cuerpo, una bola roja que estaba amarrada con un listón dorado ¾Toma ¾ Agarré la bolsa.
¾ ¿Pero para que es? ¾Habían fichas de colores.
¾ Cada juego tiene un costo, pero si ganas te ganas mas monedas.
¾ ¿Cómo Las Vegas?
¾ Si. Piensa bien en que las gastas, solo tenemos cada quien veinte.
¾ Suficiente…
¾ Ni creas, todos los juegos cuestan diferente ¾Iba pasando un joven vestido de chambelán del siglo XV, con una charola que tenia copas de madera. Jake tomó dos¾, los más divertidos cuestan mas, por eso te recomiendo que vayamos a jugar naipes, ahí se gana rápido las monedas. Y ya cuando tengamos mucho vamos a la acción de afuera ¾Me dio la copa y disfruté del refrescante refresco de naranja.

* * *​

​

Eran cinco mesas de madera para seis personas cada una, las que se estaba jugando a los naipes (cinco jugadores y “la casa”. Era quien repartía las cartas). En la mesa 1 estaba mi padre y mi madre, haciendo que ni de locos Jake y yo nos sentemos ahí. En la mesa 2 estaba mi tía Alice con tío Jasper, tampoco era buena mesa para nosotros. En la 3 estaba mis abuelos Esme y Carlisle, eran peligrosos en los juegos de cartas, obvio que esa mesa no era amiga. En la 5 estaba Seth, no quería quitarle sus monedas. Por eso tuvimos mi esposo y yo sentarnos en la 4.

Hubiera ganado más monedas si me hubiera retirado a tiempo. Me había tardado en reconocer que Isaac era un excelente jugador. Tanto que él gano más que yo, es que a mí por divertirme me gustaba arriesgar y parecía mi amigo que lo estaba tomando muy enserio.

Había pasado dos horas y logré multiplicar mis monedas. Jacob tenía cincuenta y cinco, había ganado varias competencias para entonces. Algo que yo no al haberme pasado jugando naipes medievales para multiplicar mi fortuna.

La comida era cordero asado a la leña y guarnición de puré de papa, a la gente le parecía encantar pues estaba continuamente llena la zona de la comida.

Jacob, porque yo le pedí que fuera civilizado, se fue a formar a la fila para que le dieran nuestros platos. Él quería meterse a la fila y alegar que era para la festejada. Yo aproveché ese tiempo para ver las demás actividades que estaban fuera del castillo. Las visité en este orden:

· Juego de manzanas: Era el típico juego que aun actualmente se usaba en las ferias escolares, que es sacar con la boca una manzana que estaba en una tina de madera llena de agua. Me tocó ver ganar a Andrea y a tío Jasper. Era gracioso verlos choreando por la cara.
· Vencidas: Eran tres barriles los que servían para recargar los codos de los competidores. Se sentaban sobre altos bancos de manera. Cuando pasé a ver quien estaba jugando, me costó llegar hasta delante, porque estaba rodeado por la gente. En un barril estaba Emmett y Edward; en otro Greg y Trevor; y en el ultimo Rosalie y Bella. En los tres estaba interesado saber quien iba a ganar. Aunque en dos ya tenía idea. Después de poner sus manos y empezar la competencia, a los pocos segundos mi madre fue vencida por mi tía; le siguió mio tió como vencedor sobre mi padre; y durando varios minutos y estando de un rojo escarlata sus caras, mis amigos aun seguían en la batalla. Ganó Greg la apuesta de Trevor.
· Troncos: Se habían puesto un inflable amarillo rectangular y sobre este estaba un tronco de espuma. El juego consistía en dos personas pararse sobre el tronco que giraba y hacer que tu contrincante se caiga antes que tú sobre el inflable. Eso requería de mucha agilidad.
· Tiro al arco: Era la actividad las solicitada y alejada, obvio por la seguridad, aunque alrededor había una malla negra para que no se escapara una flecha. De hecho las fechas no iban a matarte si te llegaba una de sorpresa, pero el dolor del golpe nadie te lo quitaba. Es que las flechas no tenían punta, eran imanes, que al chocar con el tablero se pegaba.
· Espadas: Se le llamaba así porque era una divertida representación de esa actividad medieval. Pero aquí en moderno. Consistía en pararte sobre un barril y tu oponente también. Alejados por algunos metros. Se tenía que tirar, con ayuda de un palo de goma, a tu adversario. Éste como el de troncos al caer era sobre el inflable amarillo.

Me faltaba visitar carrera de veleros, palo ensebado, buscar monedas en pasteles (no se podía meter las manos. Era como el de manzanas pero en un pastel y encontrar las monedas), pesca y algo de seguir a un cerdo y quitarle la bolsa de monedas que tiene en el cuello, cuando un joven vestido de mozo se plantó enfrente de mí. A él no lo conocía.

¾ Milady ¾Hizo una elegante reverencia¾, ¿quiere saber de sus amores?
¾ ¿Perdón? ¾Esperaba una felicitación tardía, no esto¾. No comprendo de que habla.
¾ Diez monedas y le aclararé las dudas de su corazón.
¾ ¿Diez monedas? ¾Fruncí el ceño, bromeando. Este joven no era un mozo, sino uno de los dos brujos que estarían aquí. Era parte de la distracción¾ ¿Tiene intensiones de estafarme, señor?
¾ Créame que el pago es mínimo para lo certero que es esto.
¾ Muy bien ¾Saqué la cantidad dicha y se las ofrecí. Sonriente con un gesto de cara me dijo que siguiera. Fueron unos cuantos metros y llegamos a un barril, pero este estaba lleno de agua ¾¿Qué debo de hacer?
¾ Solo muerda la manzana ¾Me puso la fruta enfrente de mis labios.
¾ ¿Esta envenenada? ¾Jugaba.
¾ No me de ideas, milady ¾Dijo pícaro¾, pero no veneno tendría, sino un somnífero para llevármela muy lejos.
¾ Lo lamento, buen hombre, pero mi corazón ya tiene dueño.
¾ Es eso mismo lo que veremos ¾Mordí la manzana¾, porque lo que dice la mente y el corazón son cosas diferentes, pero solemos ser erróneos al ajuiciarlos.
¾ ¿Pero que tiene que ver la manzana? ¾Pregunté al brujo cuando vi que sacó un cuchillo.
¾ La manzana es el fruto de la sabiduría, milady ¾Lo cortó por el centro¾. Lo ve ¾En medio de la fruta había una estrella y en el centro sus semillas¾ Sóplele por favor ¾de nuevo me puso las dos partes de la manzana enfrente de mis labios. Obedecí¾ Veamos… ¾dejó caes los dos pedazos sobre la mesa¾ Interesante… ¾Se rascó lentamente su barbilla¾ las semillas que salen de la manzana son hombres que la aman.
¾ ¿En serio? ¾Era divertido¾ ¿Cuántos son?
¾ Que la aman intensamente, milady, son tres ¾Arrugó su afilada nariz.
¾ ¡Ah, tres! ¾Me reí. Seguiría el juego¾ ¿Y no me puede decir como son?
¾ Algo mejor que eso, le diré las iniciales de sus nombres. Pero antes…¾Vio el corazón de la manzana¾, la sabiduría me dice que hay tres hombres que la aman, pero… usted ama a dos.

Sabia que era todo era una farsa, pero desgraciadamente no por saber que era un estúpido juego no me tensé al oír eso. Volteé a todas partes, para asegurarme que nadie estuviera tan cerca como para oír tanta tontería. Regresé la mirada hacia la del hombre de intensos ojos negros.

¾ ¿Por qué dice eso? ¾Traté de sonreír, pero era tembloroso mi gesto.
¾ Es el número de semillas que quedaron en el corazón de la manzana. ¿Sabe usted de quienes se esta hablando?
¾ Eso me gustaría que usted me dijera ¾¡Que tontería!

Cortó la cascara de la fruta, hasta dejarla desnuda. Y ahora volvió a cortar la cascara, que estaba cayendo en espiral, en tres y las puso sobre el agua del barril.

¾ Lo dividí en tres porque son los hombres que la aman ¾Me explicó¾. Pero por las ondulaciones tan rígidas que hizo la cascara le puedo asegurar que un numero muy grande de hombres no le quitan la mira ¾Se ríe¾. Yo me pongo en la lista ¾galante me vio.

Yo no tenía nada que decir a eso, solo levantar una de mis finas cejas.

¾ ¿Qué esperamos? ¾Estaba nerviosa.
¾ Que hagan la letra de la inicial de los hombres que la aman ¾Puso su mano en medio del barril¾ Las letras que se vayan con usted son los hombres que ama y los que no se mueven son hombres que la aman.
¾ Esta bien ¾Sabía que era una idiota por ser tan morbosa, y más porque ya no era agradable seguir el juego, pero mi curiosidad a esta farsa era mucha como para irme ahora.

Como si tuvieran vida, dos cascaras se vinieron hacia a mi y otra se quedó en el centro.

¾ El hombre que usted no tiene interés pero él la ama con sinceridad, empieza su nombre con “I”
¾ ¿I?
¾ ¿No conoce alguien que su nombre comience de esa manera?
¾ A varios, por eso no tengo ni idea.
¾ Es un buen joven ¾Estaba el señor joven ido, parecía que viera mas allá de lo que había en el agua.

Era increíble de haber sido un espiral al estar en el agua ese pedazo se había formado una “I” alineada y perfecta.

¡Era esto escalofriante!

¾ Ahora lo que nos interesa.

¡Lo vi!

¡Si esto era truco era muy macabro!

¡Una “J” y una “N” se habían formado!

¡Era clarísimo!

Estando congelada hasta los huesos y tratando de razonar esta mala broma tomé de las poseidas letras del agua y me alegué del “mago”.

Alguien debió pagarle para que me hiciera esto. Tenían que haber sido mis tíos. Yo no creía en magia de este tipo.

¡Era una tontería!

¡Tenia que serlo!

:confused: :confused: ​

En solo dias les subo lo restante.​

Espero que hasta donde va el capitulo lo esten disfrutando.​

;) Kiss​