Paso sinuoso

Orgen

El Snorunt parecía un poco serio, o al menos, en lo que respecta a sus movimientos, pues decidió atacar con follaje. Sin embargo, Popplio decidió esquivarlo y emitió un gruñido, para debilitar las fuerzas de su rival.



POPPLIO: Agua (Equilibrado)
Torrente: x2 movimientos tipo Aqua si los ps bajan de 1/4.
Salud: 114/114 (14)
Fuerza: 130 (10)
Resistencia: 120
Agilidad: 0/1 (50 de Velocidad) (10)
Movimientos:
-Destructor (20 Potencia, Normal)
-Pistola agua (40 Potencia, Agua (Base 30, +10 STAB))
-Gruñido (-10 fuerza rival)
-Ojitos tiernos (-10 fuerza rival, dos puntos de agilidad para esquivarse) (Usos: 5/5)

 

Alpha Xenodis.

Seguí molesto incluso después de que se fuera. No pude leer una sola página más y acabé por salir de ahí lo antes posible. No le iba a dar siquiera la oportunidad de darme medio gramo de comida o eso significaría mi derrota.

Y aún bajo el sol anaranjado de Udan mi ceño se fruncía. Me vine aquí porque sabía que nadie más me podría encontrar en este lugar. Era una estúpida isla en medio de la nada, sin tecnología y lo único que realmente funcionaban eran las gear, pero sabía que nadie más tenía una de esas aparte de mí, o al menos no las usaban regularmente que yo haya visto. Este lugar era mejor, y tenía dos puntos a favor: El que ya dije y que podría empezar a aprender con práctica, no solo con teoría.

Las estrategias para dummies hablaban de formar equipos y la mejor manera de hacerlo. Sé que no había llegado precisamente a esa parte del estudio, pero aprendo mejor haciendo uqe viendo. Iba a partir prácticamente desde cero aquí.

—Así que por eso los enviaré a casa—Avisé a mis compañeros, a quienes llevaba un tiempo sin ver. Sabía que eran entusiastas de los combates, como todo Pokémon que pasa por mis manos, pero ninguno de ellos entraba en lo que planeaba. Y por supuesto no iba a abandonarlos. Aunque enviarlos con la bruja podría ser un destino peor; Al menos tenía cien por ciento seguridad de que los recibiría mejor que a mí.—. Venga, los tres entrarán en estas balls y más tarde regresaré a Galeia para enviarlos por el pc.

Un último abrazo a cada uno. Noctowl, Remoraid y no- Me niego a darle uno a Bellotita. Me pondrá algún paralizante encima y me acabaré quedando aquí por horas tumbado sobre la arena. A él solo le podía dar una sonrisa, y quizás la advertencia de no hacerle eso a mi madre si deseaba vivir para contarlo... O que al menos lo hiciera lejos mía para no pagar las consecuencias. En fin.

—Venga, entonces quedamos nosotros cuatro—Giré a mis compañeros restantes.—. Zero y Burnit—Scyther y Charizard, ya que Incineroar se pasó al bando de Galeia—, y por supuesto Aibou. ¡Vamos a buscar nuevos compañeros!

Y aquí vamos.

 

Alpha Xenodis.

—Por supuesto, Aibou no puedes participar en el desafío de las marcas, ni en entrenar a los pequeños. Se supone que eso es solo para los bichos que pillemos aquí y tampoco sería justo para los novatos tenerte de compañero de entrenamiento.

Aproveché la pausa para acomodar mis cosas y también para cambiarme. Ya que no se ve nadie cerca, ¿qué más daba desnudarme en público? Hacía demasiado calor aquí para seguir tan abrigado como allá arriba en la sede. Va mejor una camisilla y unos short con las deportivas que tantas ropas. ¿Sabes qué? Los botones los puede abotonar otra persona. Que entre airecito y se vea lo que hay.

—Mira, mira. Si hasta parezco tableta de chocolate—Un par de palmadas y rebotar en esos abdominales fuertes me hizo sentir orgulloso. No estaba para nada cerca de tipos como Adam, pero ya me acercaba mucho más a mi yo del futuro-pasado que ya no es futuro, pero sigue siendo pasado.—. De puro trabajo duro. ¿Qué opinas, eh, Aibou?

Silencio sepulcral. Buscar las miradas de mis otros dos compañeros al menos me dio un poco de ánimo. Ellos sí entendían lo mucho que me había esforzado.

>>Venga, al menos podrías salir, ¿no?

 

Alpha Xenodis.

De nuevo, nada.

—Realmente odias el sol, ¿eh?—Reclamé al aire, obvio, mientras terminaba de meter a presión las ropas que me había quitado. Algún día organizaría esa bolsa, pero ese día sin ninguna duda no era hoy.—Tú te lo pierdes. Igual te invito a relajarte en la arenita con nosotros cuando quieras. No tiene que ser siempre de noche que salgas.

Asumí que no tendría más respuestas que de una puerta, así que solo terminé de ajustar mis cosas y me eché el equipaje al hombro y en mano seguí con la guía que usaría para buscar más compañeros: El súper cuaderno del explorador de Udan hecho por Emi y el resto. Con esto no había duda que no me perdería y encima traía mucha información interesante sobre los Pokémon de aquí. Si lo hubiera tenido desde el principio... Vale, no lo habría leído, pero podría haber querido leerlo desde antes.

>>Mejor tarde que nunca. ¡Busquemos a ese Pichu!