Long-fic de Naruto - Un experimento particular (Sakura&Sasuke)

Primer capítulo de un fic que estoy publicando en otra web, y con el que me quiero estrenar en esta.
Se sitúa en un mundo completamente alternativo y actual pero con los personajes de Naruto, por favor tened presente esto antes de su lectura.
Los personajes de Naruto dentro de mi versión propia del manga Hana Kimi.

Nos leemos,
Mei

Capítulo 1: El instituto Konoha ahora es mixto.


Sakura no podía echarse para atrás, se lo había prometido a su padre y debía cumplir con su palabra. Se miró de nuevo al espejo, una chica de ojos verdes y pelo rosa la devolvió la mirada de terror. Sí, estaba asustada, no sabía que le depararía aquella decisión, ¿habría hecho bien al aceptar la propuesta de su padre? No lo sabría por mucho que se mirara al espejo, debía ponerse en camino. Agarró su maleta de ruedas color rosa y su mochila vieja repleta de sus nuevos libros, no miró atrás cuando se alejó de su casa.

El viaje en tren se le hizo demasiado corto, supuso que se debía a los nervios, pero había llegado a su destino tras una hora y media de viaje. Miró al frente, una valla de forja y ladrillo la separa del campus de su nuevo instituto, el Konoha. Su padre era el director del centro desde hacía varios años, por eso hacía mucho tiempo que Sakura no le veía. Sus padres se separaron cuando ella cumplió los ocho años, la relación no era buena entre ambos pero sí que existía un pacto de paz por el cual en presencia de su hija se trataban con extrema formalidad. La chica pelirrosa se había extrañado al recibir un email de su padre proponiéndole este plan disparatado que ella iba a realizar, pero… era su padre, y quería reforzar el lazo que los unía, le echaba de menos. Por eso no había podido negarse, le daba igual que sus amigas la dijeran que era una locura, o que tuviera que actuar al margen de su madre (la cual se había ido a Nueva York para dar clases en una universidad muy prestigiosa), ella estaba dispuesta a intentarlo.

-¿Qué hace una mujer aquí?- La voz le llegó de su izquierda, pertenecía a un chico de pelo marrón y ojos negros.

-Eso no importa Kiba, date prisa o no llegaremos a clase…- otro chico apareció a su lado, y traspasó el lumbral.- Venga, vamos.

-¡Espérame Shino!, No te vayas sin mí.

Los dos muchachos comenzaron a correr perdiéndose de vista. Sakura suspiró, sí, “¿qué hacía una mujer aquí?” sería la pregunta más escuchada durante los próximos días. Konoha era un instituto enteramente masculino, no estaban permitidas estudiantes femeninas de momento. Ahí entraba Sakura… o más bien el padre de la pelirrosa, el director deseaba que Konoha fuera un instituto mixto, y para ello debía demostrar que sus alumnos actuales no eran unos locos “salidos” (propias palabras del padre de Sakura) y que era totalmente factible transformar el instituto. Sakura sería la primera alumna de Konoha, y tras ver los bueno resultados que obtendría de este experimento podría dar con sus informes en las narices de los manda más de la asociación de padres y de los inversores que dudaban de su idea.

Con un choque de tobillos Sakura traspasó el cercado y entró por primera vez en Konoha, ahora instituto mixto… con una sola alumna.

Su padre no podía atenderla en ese momento, se suponía que debía enseñarla el instituto, el campus y los edificios de los dormitorios… pero de nuevo debía de apañárselas sola. El conserje, un tal Orochimaru que no le gustó un pelo, le tendió una llave con el número 221 y la letra B grabadas. El conserje le dijo que su dormitorio se encontraba en el edificio B, y tras unas breves indicaciones Sakura y su maleta partieron en busca de su vivienda por el próximo año académico.

El edifico B estaba más lejos del instituto de lo que parecía, el campus era gigante. Era un edificio de color blanco muy grandes, con tejas rojas y ventanas de manera antigua… era hermoso a la vez que estremecedor.

-¿Te has perdido?- Una voz masculina salió detrás de ella. -El instituto femenino Kikuyuu no es este, si quieres te llevo.

Era un chico de pelo rubio y ojos azules eléctricos, lucía una sonrisa contagiosa. Llevaba el mismo uniforme que el padre de Sakura le había hecho llegar esta mañana… y que ella había customizado como le había dado la gana: pantalones negros (Sakura los había lavado para encogerlos porque eran demasiado grandes), camisa blanca y corbata de cuadros rojos y negros.

-No, busco la habitación 221B…

-¡Ah! No me digas más, eres otra fan loca de Sasuke, ¿pero se puede saber qué le veis al amargado ese?

-No sé quién es ese tal Sasuke, yo solo busco mi habitación. Este año estudiaré en Konoha como un estudiante más, tengo entendido que se os pasó una circular a finales del año pasado a todos los alumnos sobre la posibilidad de que Konoha fuera un instituto mixto y…

-Espera, ¿no era una broma? Todos pensamos que no era más que una coña del director, al fin y al cabo le va mucho ese tipo de tonterías.

-Pues no, mi nombre es Sakura y soy alumna de Konoha.

El chico rubio la miró intensamente durante unos minutos para luego comenzar a reírse como un loco, tuvo que agarrarse a una pared para no terminar en el suelo.

-Lo siento, es que no me lo esperaba… al igual que el resto del alumnado. Mi nombre es Naruto, un placer conocerte.

-Gracias, ahora si me indicas donde está mi habitación…

-Espera, ¿no estás equivocada con el número de habitación?

Sakura sacó la llave de su bolsillo y se la pasó a Naruto, el chico miró la llave durante unos segundos con el cejo fruncido. El director debía de estar loco si pensaba que Sasuke dejaría que una chica extraña viviera con él en la misma habitación. Naruto se preguntó qué idea loca estaría maquinando esta vez el director de Konoha, el cual era por todos conocidos por su afición a las mujeres y a realizar experimentos sociales. El chico miró de nuevo a la pelirrosa, era guapa a rabiar con unos ojos verdes que hipnotizaban, conociendo a sus compañeros no tuvo la menor duda de que la chica iba a tener serios problemas en llevar los que se consideraría una “vida normal” de instituto. Además estaba Sasuke, ellos se habían llevado bastante bien durante años, no eran amigos pero se soportaban, pero tras el accidente todo cambió. Sasuke se había alejado de todo, se había aislado y se ganó la fama de huraño en poco tiempo… y ahora debía compartir su cuarto, con una chica.

-Disculpa…

-Bueno, ¿te han enseñado las instalaciones ya?

-Pues no la verdad, pero creo que debería dejar las cosas primero y…

-Nada de eso, mejor suavizar el golpe.- Sakura miró al muchacho con clara cara de estupefacción.- Haremos que alguien avise a tu nuevo compañero de habitación que estás aquí.-aclaró el chico al tiempo que paraba al joven que Sakura había visto esa mañana en la entrada.- Kiba, escríbele una nota a Sasuke y pásala por debajo de la puerta, ponle que “ya ha llegado su compañera de habitación, y que irá dentro de un rato”.

-Espera, ¿cómo que compañero de habitación?- Su padre le había asegurado que tendría una habitación individual, al igual de que estaba libre de tomar las clases de gimnasia.
-Eso digo yo, ¿cómo que compañera?- Kiba miró de arriba abajo a la joven pelirrosa.- Oh, eres la chica de antes, lo recuerdo.

-Escucha Kiba, concéntrate, ¿recuerdas la circular que nos pasaron al finales del curso pasado?- el castaño afirmó lentamente dando a entender que no se acordaba en lo más mínimo.- Nos dijeron,-prosiguió Naruto.- que este año Konoha sería un instituto mixto, bueno pues esta es su primera alumna Sakura, de momento es ella sola.

Kiba miró a Sakura intensamente, y desde ese momento nuestra protagonista supo que iba a tener varios problemas, y que la “santidad” de los alumnos de Konoha no era tan evidente como su padre le había dicho vía email… en cuanto le pusiera la mano encima, iba a saber de lo que era capaz su hija.

Tras despedirse del muchacho y hacerle prometer que dejaría la nota en el cuarto de Sasuke, Naruto le confirmó que en cuanto salieran por la puerta todo el instituto sabría de su existencia gracias al muchacho de pelo marrón. Según Naruto era una manera rápida de que “el shock” se pasara rápidamente, “como cuando quitas una tirita de un tirón” le había dicho. El chico resultó ser muy amable, Sakura supuso que estaba preocupado por ella y que él era uno de los más cuerdos por allí (nda: pronto descubrirá que no es así, que es Naruto pls) El edificio de los dormitorios B contaba con una lavandería, una zona de recreo con una tele un poco vieja y un billar, y una cafetería gratis para los miembros de ese dormitorio. Los jardines estaban repletos de pequeñas plazoletas con flores y bancos donde leer tranquilamente, incluso se habían permitido el lujo de tener alguna que otra fuente.

Un ladrido llegó a los oídos de Sakura, que no pudo evitar mirar a un lado y a otro buscando el dueño de ese sonido. Sakura era amante de los animales, era vegetariana desde los doce años, y aunque nunca se lo habían permitido, siempre había deseado tener un perro. El sonido se hizo más fuerte, y una enorme bola peluda de color blanco la tiró de espaldas en medio de unas de las plazoletas. Cuando consiguió enfocar la vista, comprobó que encima de ella había un enorme perro tumbado sobre sus pechos, y que Naruto se había subido encima de un árbol.

-¿Cómo leches te has podido soltar Akamaru?- gritó el rubio sin bajarse del árbol consiguiendo como respuesta un gruñido. – Es el perro del dormitorio, bueno lo trajo Sasuke y desde entonces está aquí. Curiosamente sólo es amble con las mujeres, Sasuke y Kiba.

Este último apareció corriendo gritando miles de excusas. Naruto bajó del árbol una vez que comprobó que el perro estaba bien sujeto por la correa negra que llevaba el chico del pelo marrón, el cual les aseguró que había dejado hacía ya 15 minutos la nota a Sasuke. Con una breve despedida salió corriendo con Akamaru detrás.

-Un perro acosador, lo que me faltaba…-murmuró la pelirrosa viendo cómo se alejaban los dos

-Bueno, Akamaru es lo que menos debe de preocuparte.- aseguró Naruto agarrando la maleta de Sakura que había salido despedida tras el impacto.

-¿Qué quieres decir?

-Supongo que ya es hora de que conozcas a tu nuevo compañero de cuarto.


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La aparición de Sasuke en el siguiente capítulo, junto a otros protagonistas que os sonarán.