Cambiando mi vida [KagomexInu][SesshxRin]

Cambiando mi vida
Capítulo 1- ¿Estoy embarazada?


Me llamo Kagome Higurashi, tengo 18 años, ya hace un mes que vivo en la mansión de mi novio “Inuyasha”, tengo una hermana, Rin que esta de viaje por Europa. Es por ese motivo que convivo con Inuyasha, aun nos falta un año más para salir de la escuela. Su hermano, Sesshomaru, un hombre de negocios, no aparenta tener una buena relación conmigo, aunque se que de todas formas eso algún día cambiará.
Ya son tres años que llevamos como novios con Inuyasha y el me ha demostrado su amor en aquellas noche de pasión que tuvimos.
Una mañana en la mansión Taisho…
Kagome no se sentía bien, pues se había levantado a arrojar y debido a esto tuvo que faltar a la escuela. Otro extraño caso era que en todo el mes no le había bajado la menstruación. Kagome había faltado ya a muchas clases, ella e Inuyasha no sabían que esperar. ¿Acaso Kagome estaba embarazada?
Un mes despues la pancita de Kagome empezaba a notarse y decidio que lo mejor sería avisarle de una vez a Inuyasha.


—Inuyasha— dijo recostandose a su lado— tengo que decirte algo muy importante— no pudo continuar ya que su voz fue ahogada con un dulce beso de Inuyasha — ¡Inuyasha! ¡Estoy embarazada!— dijo sin saber como iba a llegarle la noticia a su novio.


Inuyasha quedo callado, pero luego interrumpío el inmeso silencio que había en la habitación con una sonrisa dibujada en su rostro mientras soltaba unas cuantas lagrimas— Kagome, me haces el hombre mas feliz del mundo— dijo y sin pensarlo junto sus labios a los de esa mujer que tan feliz lo hacía.


El abrazo a su compañera mientras esta se recostaba en su pecho— ¿En qué piensas tanto mi Inuyasha? — dijo dulcemente Kagome mientras miraba el pensativo rostro de su novio.
—En lo dificil que será decirle a Sesshomaru...— dijo mientras soltaba una leve sonrisa.

Continuará...
Haha pobres monochos, y ahora ¿Cómo encontrarán la manera de decirle a Sesshomaru que su hermano menor sería padre? Comenten.

 

Cambiando mi vida
Capítulo 2-De vuelta a casa-
El abrazó a su compañera mientras esta se recostaba en su pecho— ¿En qué piensas tanto mi Inuyasha? — dijo dulcemente Kagome mientras miraba el pensativo rostro de su novio.
—En lo difícil que será decirle a Sesshomaru— dijo mientras soltaba una leve sonrisa.

Ambos estaban pensando en como sería su pequeño, que nombre llevaría, como cambiaría su vida con su llegada.
Mientras tanto en Europa, Rin, la hermana de 19 años de Kagome, había sido despedida de su trabajo debido a un mal entendido y ella ahora tendría que regresar a Tokio con su hermana.

— ¿Aló? —Dijo Kagome mientras tenía su telefono en el oído— ¿Rin? —Estaba muy entusiasmada de volver a hablar con su hermana pero al saber la mala noticia esta le pidio que regresara con ella y luego encontrarian una solución.

Al caer la noche, Inuyasha y Kagome fueron para el aeropuerto, buscaban a Rin y al verla Kagome corrío a su encuentro.

—Rin, ¡Porfín estas devuelta! — dijo muy contenta la hermana menor.
—Así es Kagome pero, todavía devo buscar en donde pasaré la noche— comentó Rin mientras sostenía su equipaje— Inuyasha, que alegría verte— dijo muy divertida.
—Rin debemos contarte una excelente noticia— dijeron a coro Kagome e Inuyasha.
—Esta bien muchachos pero será cuando encuentre un nuevo hogar— respondío mientras bajaba la vista.
—Espera Rin, puedes quedarte en mi casa, tenemos muchas habitaciones— comentó Inuyasha tratando de convencer a Rin, despues de todo esta era su cuñada.

Al llegar a la enorme casa Taisho, llevaron a Rin al salón principal para luego enseñarle su habitación.

—Inuyasha, ¡Que casa tan enorme! — Comentó mirando con gran asombro la inmensa casa —Su padre seguramente se sacrifico demasiado para darles esta mansión, pero bueno, ¿Qué era lo importante que iban a decirme?— preguntó.
—Rin, ¡Inuyasha y yo seremos padres! —Respondío Kagome sin saber que respuesta saldría de la boca de su hermana.
— ¿Cómo dices Kagome? ¿Acaso tu estas embarazada? —dijo dejando un gran silencio que pronto se desvanecio con un grito lleno de felicidad— Kagome, ¡sere la tia mas linda y cariñosa! Muchachos, que felicidad me da que vayan a ser pad…—No pudo terminar la frase al encontrarse la mano de Kagome en la boca de Rin.
—Rin, no grites, Sesshomaru aun no sabe— Comentó Kagome.
— ¿Qué es lo que yo no se?...

 

Cambiando mi vida
Capitulo 3-Conociéndote-

— ¿Qué es lo que aún no me han comentado? — Preguntó Sesshomaru avanzando en dirección a Rin— Inuyasha, dime ¿Quién es esta mujer? — Preguntó mientras miraba a Rin de arriba abajo como si se tratara de algun bicho extraño.
— Ah es que, precisamente ibamos a hablarte de eso— Añadio este— Rin, la hermana de Kagome se quedara con nosotros— comentó esperando que su hermano mayor acceda a su petición.
Pero Sesshomaru, con su típica actitud cortante miró de inmediato a su hermano de muy mala forma— ¡Inuyasha! Tú no tienes la libertad de traer a cualquier persona desconocida a la casa— Gritó sacando a Rin de sus casillas.
Pero que hombre tan engreído y egoísta, — ¿Quién se cree que es? — Pensaba Rin mientras miraba llena de furia al hombre de pelo plateado— Sabes que, no me interesa tu casa, puedo buscarme otro lugar— dijo sin miedo alguno enfrentando a aquel hombre que llevaba una luna creciente justo en la frente.
—Pero que niña más malcríada y atrevída— replicaba sesshomaru al conocer tal comportamiento de aquella mujer.
— ¡Maldición!— Pensó Rin, estabá muy enojada, ese hombre la había tratado de una forma muy desagradable— Eres un completo ¡tonto!— Gritó Rin, ya no podía permanecer en ese lugar con tal fiera— Lo siento Inuyasha, Kagome— y se salio corriendo de allí.
— Pero que mujer más sinvergüenza, viene a gritarme en mi propia casa— Pensaba Sesshomaru, pues nunca nadie lo había hecho pasar por algo así y menos una jovencita. Estaba lleno de furia y miró a su hermano— Inuyasha, ¡que no se te ocurra traer de nuevo a esa mujer! — dijo esto y dio media vuelta para marcharse quizas a su habitación pero Inuyasha rapidamente se puso frente a el.
—Espera Sesshomaru, mirá, tu hisistes pasar un mal momento a Rin— reclamaba a su hermano menor— ahora escúchame bien, llevale su equipaje de nuevo y si tanto quieres que se valla diselo tú— fue lo último que mencionó Inuyasha al darle el equipaje de aquella mujer.
Sesshomaru estaba que explotaba, ¿Acaso su hermano menor estaba dandole órdenes? No dijo ni una sola palabra, tomó el equipaje y salio en su convertible negro en busca de aquella joven.
— ¿Qué crees que hara Sesshomaru, amor? —Preguntó Kagome mientras descansaba en el pecho de su amado novio, estaba muy preocupada por su hermana.
— Nose Kagome, pero si no la trae de regreso juro que le daré su merecido— dijo acariciando la cabeza de Kagome.
En tan poco tiempo, había empezado a caer la lluvía, Sesshomaru buscaba con la mirada desde su auto por todo lugar. A lo lejos vió una mujer que estaba sentada en el suelo de un parque abandonado que había por allí, estaba mojandose.
— ¿Por qué? —Se preguntaba a sí misma— ¿Por qué ya no puedo lidiar con todo? ¿Por que me abandonaron?
Sesshomaru observaba toda la escena, al parecer ¿esa muchacha no solo estaba así a causa de él o quizas sí? Empezó a sentirse mal, esto era muy extraño en el, nunca antes se había preocupado y nunca se había sentido de ese modo por alguna persona.
La muchacha pudó darse cuenta de que alguien estaba detrás de ella— ¿Y ahora qué quieres? —Preguntó, pues estaba aquel hombre de cabellos plateados con ella y traia algo en las manos— No te hubieras molestado en traer mis cosas, yo misma iba a ir por ellas— dijo mirando el suelo.
El rostro de Sesshomaru había cambiado de inmediató, unos minutos antes estaba que estallaba y ahora reflejaba tristeza, pero no, el tenía que preservar esa actitud que llevaba siempre y una mujer como ella no lo haria cambiar de cierta forma— Por eso mismo he venido, para que no vuelvas a poner un pie en mi casa— dijo alcanzandole sus pertenencias y cuando estaba listo para marcharse una dulce voz lo detuvo.
—Entiendo, no es la primera vez que conosco alguien como tú— dijo levantandose —Me voy— y dio media vuelta para irse.
Sesshomaru quedo parado mirando como aquella mujer que quizás fue capaz de despertár algo en él, se marchaba.

¿Qué les parecio? Fue mi primer capitulo más largo que he hecho hasta ahora.
Opinen n.n

 

Cambiando mi vida
Capitulo 4- Bienvenida a casa
No supó como fue pero, tomó a Rin por el hombro para voltearla— ¿Dónde se supone que dormirás? —Preguntó aquel hombre que no dejaba de mirarla.
—No lo sé, pero ya encontraré algun lugar que no sea una mansión— dijo sarcasticamente— oye, ¡ya suéltame! —gritó al ver que sesshomaru no soltaba sus manos, intentó soltarse pero esto fue inútil.
Sesshomaru no la soltaba, la subio al auto y puso el seguro— Te llevare de regreso a casa por que sino se enfadarán conmigo— dijo mientras conducia el carro
— Ya veo porque viniste hasta aqui— comentó soltando una pequeña y silenciosa risa que llego hasta los oidos de este.
Al llegar a la casa, Sesshomaru llevó a Rin a la habitación en donde dormiría —Es muy grande— exclamó la muchacha al ver tan inmensa habitación
— Y ¿Qué quieres que haga? Todas las habitaciones aquí son así de grandes— respondío Sesshomaru.
Al día siguiente, Rin despertó, se dio una ducha, se vistió y se fue a la mesa que era hora del desayuno.
Kagome al ver a Rin, una sonrisa se le dibujo en el rostro. Todos estaban sentados disfrutando del desayuno.
— ¿Me alcanzas el azúcar?— dijo la joven de cabellera negra.
— Tómala tú, la tienes cerca— respondío Sesshomaru mientras volvía a lo suyo.
—Sigues siendo igual de terco que antes— comentó exaltada Rin mientras el muchacho de cabellos plateados la miraba furiosamente.
—Y tú sigues siendo una niña maleducada— respondió enojado Sesshomaru, pues nuestra muchachita volvía a enfrentarsele.
— ¡Ah claro! Disculpeme señor, a usted no hay como decirle nada porque ya los bota de su casa, ya entiendo porque Kagome e Inuyasha no le han contado lo de su bebé— se tapó la boca al darse cuenta que habló mas de la cuenta.
— ¿Cómo dices? ¡Inuyasha! — Gritó el hombre que llevaba una luna creciente en la frente— Quiero verlos a los dos en mi escritorio— órdeno mientras se retiraba del lugar.
— ¡Dios mio! Perdonenme — dijo Rin.
—No te preocupes Rin, arreglaremos esto, despues de todo teniamos que contarle tarde o temprano— añadió Kagome
Ya afuera del estudio de Sesshomaru, Inuyasha y Kagome no sabían como explicarle — ¿Por qué demonios no entran? —Gritó Sesshomaru para que estos entraran de una vez.
—Verás sesshomaru— empezó Kagome—Son cosas de jovenes, supongo que tu ya sabes— dijo, pues se había armado de valor y le explicó a sesshomaru que estaba sentado en su sillon con los pies sobre su escritorio.
— ¿Y no pensaron en que podía pasar? ¿No tomaron precausiones? Inuyasha, tan ingenuo como siempre— agregó sesshomaru— Esta bien, ya no podemos hacer nada, ahora largo— dijo mientras Inuyasha y Kagome obedecian.
— ¿Lo aceptó? —Preguntó Kagome ya afuera.
—Si, no fue tan difícil— continúo Inuyasha.
Ya había pasado mucho tiempo y Kagome ya casí tenia ocho meses, por su parte Rin había encontrado un nuevo empleo, Sesshomaru se había buscado una novia e Inuyasha había logradó graduarse y ya estaba trabajando en las empresas que su padre había dejado.
Kagome y Rin, estaban preparando todo, pues harían una fiesta antes de que el bebé naciera. Habían invitado a sus amigos Miroku, Sango, Shippo, Koga, Ayame, a la novia de Sesshomaru Kagura y otros más.
Ya en la fiesta todos reían y entregaban regalos para el futuro bebé, Sesshomaru estaba con Kagura, Miroku con Sango, Koga con Ayame, y Rin sola. No dejaba de ver al hombre de ojos dorados con su elegante novia — Yo podría estar en su lugar— pensó — Pero que diablos estoy diciendo, si no tengo nada con el, además a el solo le gustan las muchachas de piernas largas y que esten a su mismo nivel— estos pensamientos revoloteaban por la mente de Rin, de repente, alguien le llama a su teléfono e inmediatamente se sale afuera.
— ¿Por qué sigues llamandome? ¡Te dije que me dejarás en paz! — hablabá la jovencita con aquella persona por telefono, de prontó sintío que alguien mas estaba con ella.
— ¿Qué sucede Rin? — Preguntó Sesshomaru al ver a la muchacha sola.
— ¡Nada que tenga que ver contigo! —Respondío mientras tomaba un taxí.
¿Qué te pasa Sesshomaru, acaso la piensas seguir? ¿Por qué mejor no vas y acompañas a Kagura? —Pensaba Sesshomaru pero decidió ir tras Rin, sentía que algo no andaba bien y no podría vivir tranquilo sin volver a escuchar sus mismas peleas— ¿Hasta donde estas yendo Rin? —Se preguntaba así mismo mientras seguía en su carro a aquella joven.

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Ahahaa, aver si les gusta, esta asi como que nuse hihi. Comenten.