¿Quién te quiere?. (SesshxRin)

¿Quién te quiere?

Yo, te quiero , sin medidas , con paciencia , en silencio. Yo , te quiero más que a mi vida , más que a mi mismo , más que a nada en el mundo.
Y simplemente no me atrevo a decírtelo. Te rechazo , te utilizo, me río en tu cara como si fueras basura aun sabiendo que en el fondo me muero por ti. Es una tortura tener orgullo.
¿Que pensaras?, que soy un bipolar , un sádico, un masoquista, un cínico .Pero no , yo solo soy una persona con un 10000% de orgullo que con el paso del tiempo y con mucho esfuerzo consiguió admitir que esa niña de ojos chocolate era su vida. ¿Quién es esa niña? Tú Rin Higurashi, eres tú la única que ha conseguido infiltrarse en mi congelado corazón, la única que con una mirada o una sonrisa consigue que me sienta como un cubo de hielo en el Sahara. ¿Que no daría por tenerte? Ya sé que si te puedo tener, pero no es tan fácil , es cuestión de acercarme a ti y quererte abrazar pero lo primero que hago es mirarte como si fueras basura, pero no lo eres, eres valiente y encantadora. Puedo decirte que he besado a mil mujeres pero ninguna me hizo sentir lo que me hiciste sentir tú. No te voy a pedir perdón por todo lo que te he hecho pasar en estos cinco años , no me apetece caer más bajo de lo que estoy cayendo ya. Simplemente es esto, tenía que desahogarme, tenía que decírtelo , aunque si te soy sincero no sé si seguiré reaccionando de la misma manera la próxima vez que te vea, no quiero que hables de este tema ,claro esta, si quieres seguir ¨persiguiendome¨ adelante, y si te vas despídete.
Te…

La joven de ojos chocolate dejo caer la carta de sus manos como si fuera una pluma , no se lo creía aun. Él, al que más deseaba al que más quería. No sabía que hacer , miró el reloj, iban a ser las cinco de la tarde , le quedaba tiempo suficiente para arreglarse e ir a la cafetería en la que siempre se encontraban. Si él la rechazaba no le iba a doler, estaba más que acostumbrada. Salió lo más rápido que pudo de su casa y llamó a un taxi . En diez minutos ya estaba en la cafetería , pidió un capuchino y se sentó en la misma mesa de siempre , miró el reloj , en cinco minutos él llegaría. De repente miró por la ventana de la cafetería y vio que Sesshomaru ya estaba bajando del carro. ¿ Como demonios había pasado tan rápido el tiempo? No, no era el tiempo, era él , había decidido no ir puntual.
La cara de Rin enrojeció de forma instantánea, se tranquilizo y se hizo la sorprendida.
- Rin- la saludo él fríamente mientras se dirigía a la barra a pedir su café
Cuando el llegó con el café ella habló.
- Que temprano llegaste hoy- dijo la peli-negra mientras llevaba un mechón de su pelo detrás de su oreja
- Me aburría en casa- habló él observándola detenidamente
- Ajá- Rin sonrió con delicadeza al mirarle a los ojos y recordar un verso de la carta: ¨Tú Rin Higurashi, eres tú la única que ha conseguido infiltrarse en mi congelado corazón¨
- Leíste la carta ¿verdad?-preguntó descifrando su mirada ,y casi al segundo ella asintió con la cabeza mientras bebía un sorbo de capuchino, dejándole un divertido bigote de espuma.-Te quedo un bigote de espuma…- le comunicó el joven
- Oh, gracias-dijo ella mientras se limpiaba con una servilleta. Pasaban los minutos pero no encontraban conversación interesante , al final decidieron no hablar y entonces fue cuando sus miradas se encontraron, ella notó algo nuevo, los ojos de Sesshomaru ahora no solo expresaban frialdad, había algo más , sonrió y bajo la mirada. Se bebieron el café y como siempre cuando salían cada uno tomaba su camino , pero está vez estaba lloviendo, estaba diluviando.
- Bueno yo me voy – se despedía la peli-negra.
- No, tu te vienes conmigo-habló el mientras avanzaba con paso seguro en medio de la lluvia. Ella no tuvo mas remedio que seguirle, rápidamente llegaron al carro. Rin subió al copiloto y Sesshomaru conducía.
- ¿A dónde vamos?
- A tu casa.
- Está bien- dijo sonriendo.
Al llegar a la casa de Rin, bajaron del carro, él se quedo ahí en la lluvia como si no pasará nada, ella camino hacia la puerta de su casa. Rin se dio media vuelta para despedirse con la mano de Sesshomaru, se quedó unos segundos embobada mirándolo ,ahí apoyado en su carro bajo la lluvia, que sexy se veía. Sacudió la cabeza y antes de despedirse el peli-plateado habló:
- ¡Espera!- se dirigió hacia la joven y se quedó así, en frente de ella quieto como un árbol. Ella se limitó rodear con sus brazos el cuello del peli-plateado y abrazarlo dulcemente , pero lo que no se esperaba era que el la correspondiera rodeándola por la cintura con sus brazos. Estuvieron así bastante tiempo , hasta que el se decidió , se separó estrepitosamente y sus manos se entrelazaron con las de ella, hizo un pequeño amago y lentamente la empujó contra la puerta quedando así sus labios, a milímetros de encontrarse.
- Al diablo el orgullo.

Fin ​