One-shot de Inuyasha - Una navidad con Inuyasha

Hola a todos, antes que nada quiero aclarar que el anime Inuyasha, al igual que todos sus personajes, lamentablemente no me pertenecen si no a su autora Rumiko Takahashi.
y este one-shot lo hago por puro entretenimiento y por que me gusta y sin fines de lucro ni nada por el estilo.

espero lo disfruten.
AnnaY




Una navidad con Inuyasha…

Navidad, época de mucha alegría, y para la mayoría de las personas la temporada favorita del año. Para Aome la navidad era la temporada favorita ya que siempre se la pasaba feliz junto a su familia, aunque en esta ocasión, era su primera navidad en el sengoku, además de ser la primera que pasaría con su amado Inuyasha, en esa época no sabían muy bien sobre esta “tradición” de la que la joven del futuro les hablaba, aun así, le ayudaron en los preparativos para la cena de noche buena, el hanyou se encontraba ansioso, aunque no entendía muy bien de que trataba todo esto, el sabia que abría mucha comida, lo cual al semi-demonio le llamaba mucho la atención, aunque en realidad esa no era la razón principal.

Aome y sus amigos se encontraban en la casa de la anciana Kaede quien había prestado su casa para que todos se reunieran a cenar ahí.

—Inuyasha,¿ ya has traído las cosas que te pedí?— Preguntaba la castaña al semi-demonio al verlo entrar.

—¿Ha?— Fue lo único que respondió el peli plata.

—La señorita Aome matara al joven Inuyasha por haberse olvidado de su encargo
— Le decía el monje a su querida esposa.

—Si, pobre Inuyasha— Le contestó la ex-cazadora.

El hanyou les miro de forma desafiante dándoles a entender que cuando terminara con Aome les haría pagar sus comentarios.

—INUYASHA VE POR LO QUE TE PEDI—Decía ya irritada la sacerdotisa, pues solo faltaban unas cuantas horas y la comida, aun no estaba lista.

—Esta bien Aome, pero no te pongas así, ya voy…. Por cierto… ¿que me habías pedido?—Y esa… fue la gota que derramo el vaso.

—TE PEDI QUE FUERAS POR PESCADO Y VEGETALES— Decía al borde de la ira la castaña.

—Inuyasha, tienes mala memoria—Burlaba el monje interrumpiendo.

—Jodete Miroku—Contestó el peli plata y cuando reaccionó en lo que dijo era muy tarde, la sacerdotisa le había mandado al suelo con un —ABAJO—

Luego de esto, los demás se dedicaron a hacer lo que se les había encomendado, Miroku se había encargado de limpiar la casa, sango junto con sus gemelas se encargaba de decorar mientras Shipoo barría la parte de enfrente de la casa y Aome junto con Kaede preparaban los alimentos, mientras un curioso Inuyasha les miraba atento a lo que cocinaban.

—Aome… ¿cuando comeremos? Ya tardaste mucho…—Decía el semi-demonio poniéndose frente a Aome quien se encontraba picando los vegetales.

—Pronto, si te hubieras apurado en traer lo que te pedí la cena ya hubiese estado lista en este momento—Dijo mientras le miraba con aura tenebrosa, a lo cual el hanyou solo se apartó.

Ya que todos habían terminado con sus labores, la azabache les indico que podían ir a descansar a sus casas y a prepararse para en la noche, claro no sin antes darles la gracias por su ayuda, todos se retiraron a sus respectivas viviendas, quedándose solo Kaede y Aome para terminar de preparar la comida.

Inuyasha se encontraba aun viendo a Aome y la anciana Kaede preparar la comida, ya no podía esperar mas su estomago le reclamaba comida, sin darse cuenta dejo de ver la comida y quien era la presa de su mirada era la castaña, el semi demonio le miraba de forma…”extraña” pero Kaede se dio cuenta de la cara de bobo de Inuyasha.

—Inuyasha, si tanto te gusta la señorita Aome díselo y deja de verla con esa cara—Le decía Kaede aguantando su risa.

Al escuchar esto la joven del futuro se dio cuenta de la mirada de Inuyasha hacia ella y al sentir que la sangre se le subía a la cara reflejando su sonrojo al no saber que hacer, solo encontró una solución.

—ABAJO— gritó la castaña mandando al hanyou al suelo.

—AOME QUE TE PASA— Dijo el peli plata alzando la cabeza del suelo con cara de sorprendido.

—DEJA DE VERME DE ESA FORMA— Contestó la azabache aun sonrojada.

—YO NO TE MIRABA, NO SEAS MENTIROSA— reclamaba Inuyasha levantándose del suelo.

—PERO SI DESDE HACE RATO QUE ME MIRABAS… CON UNA MIRADA EXTRAÑA— Contestó la sacerdotisa.

—Era de enamorado— Dijo Kaede interfiriendo aun aguantándose la risa de verlos discutir.

— ¡¿Qué?! NO DIGA ESTUPIDECES VIEJA TONTA. —Le dijo furioso el hanyou “diablos” pensó al darse cuenta de la cara de Aome.

—ABAJO...ABAJO, ABAJO, ABAJO, AAABAAAAJOOO—Gritó furiosa la castaña.

En ese momento el monje y sango entraron corriendo, pues al escuchar los gritos de Aome, pensaron que tal vez sucedía algo malo.

El peli plata se encontraba a casi 3 metros bajo tierra, la sacerdotisa no dejaba de decir ABAJO por lo tanto no podía levantarse, al entrar la pareja y ver aquella escena echaron a reír lo cual detuvo los gritos de Aome.

Inuyasha comenzó a levantarse y sacudió sus ropas, mientras una sonrojada azabache se disculpaba con el monje y su esposa por haber visto tal escena.
Luego de esto la anciana Kaede les llamo la atención pidiéndoles ayuda para preparar la mesa pues la cena al fin estaba lista, Inuyasha se encontraba molesto por lo cual tan solo se mantuvo en una esquina sentado como si fuese un perrito, estando en esa pose tan familiar en el, se encontraba de brazos cruzados, aun sin dejar de ver Aome.

Mientras todos ayudaban a excepción de Inuyasha quien aun se encontraba molesto con la sacerdotisa por haberlo mandado a comer tierra hace un rato, Aome se encontraba arreglándose, pues al haber estado preparando la cena no le había dado tiempo de arreglarse.

Inuyasha se encontraba sentado en una equina de forma canina como siempre lo hacia con brazos cruzados viendo a los demás mientras arreglaban la mesa, justo en el momento en que todos habían terminado Aome salió vistiendo un hermoso kimono azul rey con flores doradas, que le quedaba perfectamente bien amoldado a su cuerpo, el hanyou notó la presencia de la azabache y al voltear, su quijada por poco llega al suelo mientras las gemelas aplaudían al ver tan hermosa a tu tía Aome.

—Se ve ustedes muy guapa, señorita Aome— Dijo el monje quien vestía un elegante traje de monje en color azul con decorados en blanco.

—Eso es verdad Aome, ¿tu que dices Inuyasha?— Decía sango vestida con un kimono rosa con decorados en plateado mirando al semi-demonio.

El aludido que aun se encontraba embobado mirando a la sacerdotisa no prestó atención a la pregunta, a lo cual la azabache se sonrojó e ignorándolo se acercó a la mesa para acomodarse y cenar con sus amigos.

—Al parecer al señor Inuyasha le gusta como se ve—Dijo el monje sentándose en la mesa no sin antes ayudarle a sus hijas y a su querida esposa a sentarse.

Inuyasha quien también ya se encontraba listo pues antes de que sango, miroku, Shipoo y las gemelas llegaran la anciana Kaede había dicho al semi-demonio que se arreglara.

Este vestía un traje parecido al de siempre aunque en color azul, combinando a la perfección con la azabache, se acercó a la mesa para cenar con sus amigos, aunque antes de sentarse quitó a Shipoo ya que se encontraba sentado alado de Aome.

—Quítate enano, aquí voy yo— Dijo aventando a Shipoo de su lugar, y sentándose el ahí.

La castaña estaba a punto de mandarlo al suelo pero el monje le hiso un gesto indicándole que no lo hiciera.

—Eres malo Inuyasha—Le contestó Shipoo levantándose del piso y acomodándose alado de Inuyasha.

—Discúlpalo Shipoo, el solo quiere sentarse alado de la señorita Aome, ¿no ves que son pareja?— Dijo el monje mirando a la pareja que en ese momento se encontraban con toda la cara roja, a causa de la sangre que había subido a sus caras.

—Si, además, hay algo que Inuyasha quiere decirle a Aome, ¿verdad?— Comentó Kaede mirando a Inuyasha indicándole que era momento.

—Eh…y-yo…— Tartamudeo el aludido.

—Anda Inuyasha dilo…—Alentó Sango.

El hanyou, se encontraba rojo, realmente rojo, no había ningún rojo que se le comparara al que el tenia en ese momento, de haber tenido su traje rojo, se hubiera camuflageado en el.

—Eh….si…— Tartamudeaba el semi-demonio, aun no creía lo que estaba por hacer, ¿en que momento se le pego esa loca idea?—Aome…—continúo, mientras se ponía de pie, indicándole a la azabache que lo hiciera también, —Yo…—Y antes de continuar tomo aire y se arrodillo frente a la azabache, tomando las manos de Aome entre las suyas.

Metiendo su mano en el bolsillo de su traje prosiguió, — ¿t…te c…c-asas conmigo?— tartamudeo viendo hacia el suelo, pues el jamás había hecho algo así y además el saber que sus amigos eran testigos de aquella escena le hacia sentir mas vergüenza.

Aome al igual que Inuyasha se encontraba roja, sorprendida, por lo que el hanyou había dicho, no sabia que hacer así que miró hacia donde el monje y su esposa estaban y estos hicieron un ademan con su cabeza indicándole que contestara al realmente sonrojado Inuyasha.

—S…s-si— Contestó la azabache con lagrimas en sus ojos, Inuyasha al escuchar la respuesta levanto su mirada y poniéndole un hermoso anillo.

—E…es por eso que se me olvido lo que me habías pedido, es que.. Yo…. —

—El estaba nervioso, por que no sabia como hacerlo, y de tanta presión se le olvido lo que le habías pedido— Interrumpió el monje.

Inuyasha se puso de pie y aun sonrojado abrazó a la azabache correspondiendo esta el abrazo.

Luego de ello se dispusieron a cenar todos juntos, no sin antes felicitar y aplaudir a la pareja de prometidos.






por favor dejen sus comentarios, quisiera saber que les pareció, ademas ayudaran a salvar la navidad. :D jeje...