One-shot de Inuyasha - UNA BODA, UN CORBADE Y UNA TRAICIÓN.

Tema en 'Inuyasha, Ranma y Rinne' iniciado por Tony kvar, 17 Marzo 2024.

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    Tony kvar

    Tony kvar Iniciado

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    15 Marzo 2024
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    Escritor
    Título:
    UNA BODA, UN CORBADE Y UNA TRAICIÓN.
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Comedia
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    4707
    Los personajes de esta historia no son míos.
    Esta historia la subí en Fanfiction y Wattpad. Las historias si son mías, los personajes no.
    .no
    ..
    ...
    • UNA BODA, UN CORBADE Y UNA TRAICIÓN.

    .
    La ceremonia transcurría con tranquilidad, no había aparecido ningún loco que parece ni interrumpiese el enlace.
    La novia de blanco veía todo como si no fuese ella, como si su espíritu estuviera a kilómetros viéndolo todo por sus ojos, y otra voluntad guiase su cuerpo.
    A su lado estaba el novio, estaba contento, al fin lograría lo que siempre había querido.
    Akane estaba inquieta, no estaba haciendo lo que quería. Dentro de ella, todo su cuerpo y mente se revelaba contra esa boda. Estaba segura que se equivocaba. Miró al novio, se lo veía tan guapo con el traje de novio… pero no…
    Ella recordó la conversación con su hermana. “Si no estás segura no te cases. No lo quieres, aún recuerdas a…”- le había dicho Kasumi mientras la ayudaba a vestirse.
    Akane miró a su hermana, Kasumi la miró y asintió, Akane captó lo que quiso decirle su hermana.
    Miró al novio y suspiro.
    En ese momento, el sacerdote dijo ciertas palabras.
    -Si alguien tiene algo en contra de este enlace que hable ahora o calle para siempre.-todo guardaron un silencio tenso. El cura siguió…
    -Yo tengo algo que decir en contra de esta boda-se oyó decir.-todos miraron con sorpresa a quien pronunció esas palabras .-Esta boda no puede continuar… por qué … yo no te quiero… ¡Ryoga!- Acabó Akane delante la sorpresa de todos.
    El chico la miró sorprendido. Y reaccionó furioso.
    -¿No me quieres?... ¿Entonces por qué te casa conmigo?-Dijo Ryoga, el supuesto novio.
    - Por qué me obligaron a casarme contigo, mi padre se quiso vengar de mi ex prometido.
    Los padres de su ex prometido bajaron las cabezas avergonzados. El comportamiento de su hijo los llenaba de vergüenza, su hijo fue un cobarde a huir la noche anterior a su boda con Akane y no volvió a aparecer.
    -Aun lo quieres, aun quieres a Ranma. Él se fue con Shampoo, huyó con ella.-dijo Ryoga con rabia- pero no, te casarás conmigo… lo quieras o no. Tu padre lo prometió, me lo prometió.
    Y la cogió de la mano y la intentó arrastrar al lugar donde se celebraba la ceremonia, la chica se resistió.
    -¡Déjame o te arrepentirás!- amenazó la chica. Cumpliría su amenaza, eso era seguro.
    -De eso nada, te casarás conmigo. Él te abandonó por alguien que no se podía igualar a ti. Te dejó una carta, decía que no te quería, que nunca te quiso. Se rió de ti, sólo estuvo contigo por divertirse.
    Akane se lo quedó mirando. ¿Cómo podía saber eso? A nadie le dijo el contenido de la carta, ni siquiera su existencia. Una carta que siempre le pareció rara, algo le extrañaba de ella, no parecía escrita por…
    Iba a preguntarle cuando la puerta de la iglesia de abrió de golpe y entró alguien. Todos se sobre saltaron al ver quien era. Hacía meses que nadie veía esa persona.
    -¿A que has venido?-inquirió Ryoga enfadado- Me voy a casar con Akane y nadie lo impedida y menos tú… Shampoo.
    La joven china se acercó. Akane la miró con rabia y odio. Vio a la joven… asustada, terriblemente asustada. La chica temblaba de miedo.
    -¡Se… se ha… se ha escapado!-dijo Shampoo- él ha huido y está en Japón. Vendrá por ti… vendrá por los dos…Acabará con los dos. Se ha desecho de muchas de mi tribu. Cuando se escapó prometió vengarse de mi… y de ti. Aseguró que nos mataría a los dos, por lo que le hicimos vivir. Y los sabemos que cumplirá esa promesa.
    -No le temo… ya no le temo-contestó Ryoga- que venga y cuando vea que estoy casado con...
    -¿Con quién te vas a casar? ¡Trozo de traidor cobarde!-dijo una voz. Todos se giraron y vieron entrar a Ranma. El joven estaba furioso y miraba a su rival con ganas de matarlo. Ranma estaba mucho más delgado y pálido, como si hubiera estado encerado mucho tiempo- He estado estos seis meses deseando vengarme de ti Pchan. Me traicionaste de la peor forma. Hoy te mataré por lo que me hiciste. Os mataré a los dos. Sois escoria, no os merecéis vivir. Os mataré por todo el daño que me hicisteis.
    -No sé de qué hablas-dijo un creído Ryoga. Aunque todos que estaban allí notaron temor en la voz del joven- te fuiste con Shampoo. Abandónate a Akane la noche anterior a la boda.
    -¿Me fui con Shampoo?-dijo Ranma con ironía. Y añadió con idéntica ironía.- ¿Abandoné a Akane?- miró a su rival con rabia. -No fue por qué yo quise. Te confabulaste con esa... gata callejera para alejarme de Akane. Me tendisteis una trampa, me dijiste que tu novia estaba en peligro, fui a ayudarte a salvarla… era mentira, todo fue una burda trampa en la que caí. Caí como un idiota, me drogasteis. Ayudaste a Shampoo a raptarme y que me llevase a su maldito pueblo, a ese pueblo donde las mujeres son tan débiles que se casan secuestrando prometidos de otras. La ayudaste a esclavizarme y que durante seis meses me torturarse.- El chico gritaba- Pero hoy me vengaré de vosotros, os revolveré todo el mal que me hicisteis… a mí y a más gente.
    -¡Eres un mentiroso Ranma!, te fuiste con Shampoo, le escribiste una carta a Akane diciendo…
    Ranma lo miró con sorpresa. Y todos los asistentes también.
    -¿Una…Una carta? ¿Qué carta?-dijo Ranma con asombró. Todos los asistentes se preguntaban lo mismo.
    -Pues… pues…- dijo con miedo Ryoga.
    Akane se acercó. Y miró a Ryoga.
    -Yo no le dije a nadie lo de la carta, ni siquiera a mi familia. ¿Cómo lo sabes tú?-Inquirió Akane. Notaba que su presunto novio le ocultaba algo.
    -Yo… Ranma me pidió que te la escribiese… si… él me lo pidió.
    Akane miró a Ranma con una sospecha en la cara.
    -No… no lo creas- el chico, al verla vestida de novia, tan guapa se puso nervioso y tartamudeó- no es cierto Aka... Akane.
    -¿Lo ves Akane?, ahora que se ha cansado de Shampoo vuelve a por ti… pero ya es tarde.
    -Ser cierto yo llevarme a Ranma a mi pueblo y ser felices- dijo Shampoo. Y abrazó al joven- nosotros volver a ser felices.
    -¡Suéltame gata o te mato!-gritó Ranma con odio, la chica asustada lo soltó y retrocedió. Ranma miró a la chica china con un odio sin limite- si tu concepto de ser felices es lo que me hiciste durante seis meses, paso. Paso de que me vuelvas a secuestrar. ¡Tú y tu maldita abuela me estuvisteis torturando seis meses!, ¡SEIS MESES! Seis meses de torturas por no querer casarme contigo.
    -¡Es mentira!-se defendió la joven china- fuimos felices.
    -¿Felices dices?-preguntó con ironía el joven. Se empezó a quitar la camisa china. Se quedó con la camiseta de tirantes.
    -Esto es lugar de culto, no puedes…-dijo el cura alarmado.
    -No se preocupe. Sólo me quitaré la camiseta- y así lo hizo. Quienes habían detrás del chico se asustaron al verle la espalda.- ¿quieres ver los felices que fuimos en el pueblo de Shampoo?-preguntó Ranma con ironía a Ryoga-¿quieres ver el concepto de felicidad al que me condenaste a vivir seis meses, vil traidor?- y se giró y le enseñó a su rival, a su ex-prometida y al sacerdote su espalda, que retrocedieron espantados.
    La espalda de Ranma estaba llena de cicatrices y cardenales. Había sido golpeado por un látigo y una barra. Y no sólo una vez. En los brazos llevaba señales de cadenas, Akane se asustó, Ranma estuvo encadenado seis meses, los ojos de la joven se llenaron de lagrimas. Una cicatriz en la hombro izquierda de su ex prometido, esa herida era de…
    Akane se acercó a Ranma y alargó la mano a la espalda del chico, pero no se atrevió a tocarla, esas heridas se las veían tan recientes, algunas sangraban. Sus ojos se llenaron de lágrimas.
    -¡Dios míos!, ¿Qué te han hecho? ¿Qué has tenido que vivir?, ¿Por qué has pasado?- dijo la joven con mucha amargura, se le escapaban las lagrimas. Se giró a Ryoga y lo miró con rabia-¿Por qué? ¿Por qué lo has hecho?
    Ryoga miraba horrorizado la espalda de Ranma y a Akane.
    -Yo… yo… no sabía esto. Yo no sabía que pasaría esto- se defendió el chico.
    -¡Sí que lo sabias!-contestó Ranma furioso-Te escribías con Shampoo. Esa arpía te explicaba lo que me hacía. Y tú la animabas, vi las cartas, Shampoo me las enseñó. Le robé algunas.-El chico se metió la mano en el pantalón y sacó unas cartas y se la lanzó a Ryoga en la cara- niega ahora lo que hicisteis conmigo tú y esa gata callejera.
    Los dos acusados se quedaron blancos. Ya todos en la iglesia sabían que eran culpables.
    -Yo… yo…- empezó el chico de la cinta en el pelo.
    -¿TÚ QUE? – Preguntó con rabia Akane.-Me separaste de Ranma. Por tu acción y la de esa arpía lo difamaron. Quedó como un cobarde, y un aprovechado. Tiraste su honor y él de su familia por el suelo.-se acercó al novio con ganas de matarlo-hiciste sufrir a Ranma, me hiciste sufrir a mi, eres… un traidor. No me casaré contigo ¡nunca! ¡Te odio!-
    Ryoga miró a su ya ex novia con desesperación y después a su rival con rabia.
    -¡RANMA ERES UN…!-Dijo el chico con rabia-¿no te podías haber quedado en China?, ¿Por qué has vuelto?.. Akane ya era mía, ahora me has alejado de ella. Eres… eres un miserable.
    -¿Yo un miserable? Me vendiste a esa arpía. Me robaste seis meses de vida. Me intestaste robar mi prometida. Como ha dicho Akane arrojaste mi honor al barro. Y todo… ¿por qué? por qué el señor Ryoga se encaprichó de Akane y no concibió que yo estuviese con ella. Sólo por eso me engañaste, me arrojaste a la esclavitud. ¿ Quien realmente es un miserable? Y no fue lo peor que hiciste… ¿verdad Ryoga?, ¿has contado todo?- preguntó con sarcasmo.
    Ryoga retrocedió. Miró a Akane, a la familia Tendo… y a sus padres. Todos lo miraban con horror.
    -No… no te la merecías, era muy buena para ti. Se merecía a alguien mejor-contestó con rabia el exnovio.
    -¿Alguien como tú? ¿Alguien que traicionó a su amigo?-dijo Ranma-¿alguien que traicionó a sus…? ¿amigas?-Ranma miró a Ryoga con rabia- eres cruel Ryoga, muy cruel. No voy a dejar que te cases con Akane… ni con nadie. Tú si no te mereces a nadie. ¿Dónde está Akari?, ¿Dónde está Ukyo? Seguro que nadie las ha vuelto a ver desde hace seis meses. ¿Qué hicisteis con ellas?
    El joven de la cinta se asustó. Ya nadie lo miraba de forma agradable. Todos lo miraban con horror y odio.
    -¡No sé nada!-dijo Ryoga asustado- ¡no sé dónde están!.
    -Mientes muy mal- dijo Akane- se nota que sabes algo.
    -¡No es cierto!, debes creerme…-iba a decir algo más pero Ranma lo cogió por la solapas de la camisa.
    -Ya nadie te cree. Me traicionaste a mí. Sedujiste a Ukyo y se la entregaste a Shampoo. Vi como ella la mató y entre los dos hicisteis desaparecer su cuerpo, no contaré aquí lo que hicisteis con ella, hay mujeres y no quiero que tengan un desmayo-Ranma miró a su rival, el joven de la trenza aun no se creía lo que Ryoga hizo con el cuerpo de Ukyo.- Eres un sádico, no tienes derecho a vivir-dijo Ranma con odio-¡Era mi amiga de la infancia! Yo aunque drogado vi como Ukyo moría… ¡NO PUDE HACER NADA POR ELLA! Entregaste a tu propia novia a la tribu de las amazonas como esclava. Akane se salvó por qué tú prometiste casarte con ella, sólo por esto último te debo matar. Te lo mereces. Has cometido muchos crímenes. Hoy recibidas tu castigo.
    Ranma empujó contra el suelo a su rival, este se quedó en él y no se levantó. Ya no tenía ni fuerzas para hacerlo.
    -Pero al menos Akari está viva.- dijo Ryoga riendo con falsedad.
    Fue eso lo que colmó el vaso de la paciencia de Ranma. Lo cogió de nuevo por la solapa. Y lo golpeó con violencia.
    -No vuelvas a pronunciar el nombre de Akari, ni el de Ukyo, ni el de Akane o los de sus hermanas. Están por encima de ti.-Ranma lo volvió a soltar y Ryoga cayó al suelo. No se quejó de los golpes recibidos-¡Akari murió!, ¡fue asesinada por Shampoo mientras huíamos!. Aun recuerdos nuestra última conversación mientras ella moría.

    SEMANAS ANTES…
    Ranma huía llevando en sus brazos a una chica moribunda. Había derrotado a varías amazonas. La chica que llevaba en sus brazos moriría lejos de su familia, pensando que el chico al que quería iría a rescatarla.
    Ranma estaba furioso. No había logrado salvar la chica. Le había fallado.
    -¡Ryoga!- oyó exclamar la chica. Ranma se acercó a un árbol y dejó la chica sentada en el suelo.- ¡Ryoga! Has venido a salvarme. Ayuda a Ranma, está cerca.
    La chica acarició la cara del chico de la trenza. Ranma lo comprendió, Akari lo confundía con su novio.
    -Si Akari, he venido a salvarte… -dijo Ranma haciéndose pasar por Ryoga.
    -Volvemos a estar… juntos-la chica hablaba entrecortada. Le costaba respirar- ya nada nos separará. Ni las amazonas ni nadie.
    Akari acarició la cara del que creía su novio… y murió. Ranma la estuvo abrazando un rato, lloraba, se sentía frustrado-. Alguien pagaría por eso. Por la muerte de Ukyo, por el tiempo que vivió como esclavo… y por la muerte de Akari. Shampoo sufriría por todo el mal que le hizo… pero Ryoga, sufriría más mucho más.
    Delante del cuerpo sin vida de Akari prometió venganza.
    -Los culpables pagaran por el mal que han hecho. No descansaré ante nada ni ante nadie, hasta quien haya hecho tanto daño lo pague.

    ………………………………………………………
    -La incineré. Metí sus cenizas en una urna que robé a una amazona. Y volví con sus restos a Japón. Tuve que huir de muchas emboscadas de Shampoo y sus amazonas. Tuve que acabar con algunas. Me costó mucho encontrar un transporte a Japón. Al llegar aquí entregue los resto de Akari a su familia, y les prometí vengarla. Llegué ayer a Nerima. Y me enteré lo de la boda. Fui al dojo, escuché escondido y supe que Akane no quería casarse, la oí hablar con Kasumi y expresar sus dudas. Cuando vinieron a la iglesia me metí en el maletero del coche que la trajo aquí. Sabía que Shampoo me seguía. Me escondí esperándola. Así pillaría a las dos ratas juntas, y así fue.
    Akane miró a los dos culpables con asco. Había llegado a confiar en Ryoga, tanto que estuvo a punto de casarse con él, aunque obligada. Ahora sabía que sus dudas tenían fundamento. Ahora sabía que siempre sospechó algo… pero nunca algo tan retorcido.
    -¡Eres despreciable!. Sólo por qué pensabas que estabas enamorado de mi? traicionaste a muchas personas. A Akari, a Ukyo… pero sobre todo a Ranma y a mí. Akari murió por tu culpa. Su muerte también es responsabilidad mía, por qué la traicionaste para tenerme a mí. Murió en brazos de Ranma pensando que eras tú. Murió pensando que la salvaste. Mejor eso que descubrir que fuiste tú quien la traicionó. ¡NOS HAS HECHO RESPONSABLES DE SU MUERTE!… ¡Y LA DE UKYO! Las dos murieron por vuestros deseos insanos hacía mí y mi prometido,- Ryoga la miró sorprendido- ¡SI, MI PROMETIDO, ANTES, AHORA Y SIEMPRE!-miró con mucho desprecio al chico con quien estuvo a punto de casarse. Se acercó a él y lo abofeteó varias veces con rabia.
    El ex novio escupió sangre.
    Ranma se puso su camiseta y su camisa, se acercó a su ex amigo. Y mirándolo con odio.
    -Levántate y sígueme, no me obligues a arrastrarte fuera. Te debo dar la gran paliza que te mereces. Salgamos de aquí. Esto es un recinto sagrado y no debemos pelear aquí. A parte tú y esa gata callejera contamináis con vuestra presencia este recinto. ¡Seguirme los dos!-ordenó el joven. Los dos culpables lo siguieron a la calle. Y los asistentes a las boda también los siguió- ahora os mandaré a hacerle compañía a Akari y a Ukyo. No, no iréis con ellas, a vosotros os espera el infierno. Aunque este sitio es muy bueno para vosotros.
    -Lo tuvimos que hacer-dijo Shampoo- vosotros estar equivocados. Ranma ser mí…
    -¡NUNCA!- gritó Akane furiosa.- Siempre lo viste como un objeto. Jamás vistes más allá de sus músculos. No estabas allí cuando estaba enfermo. Cuando él se sentía mal. Cuando necesitaba apoyo moral. Siempre que aparecías lo presionabas. No lo dejabas en paz. Lo querías obligar hacer lo que tú querías, sin pensar en lo que él quería. Antes de que lo raptarais él y yo hablamos. Ranma estaba cansado… de vosotros, de vuestro egoísmo, de que no lo dejaseis tranquilo. Y lo mismo digo de ti Ryoga, no me viste como una persona sino como un objeto. Nunca pensantes en lo que yo quería. Sólo en quitarle a Ranma lo que más quería… y casi lo consigues.
    -Yo te amo Aka…-empezó a decir Ryoga. Pero Ranma le dio un puñetazo en la nariz.
    -Te dije que no volvieras a decir su nombre nunca-dijo Ranma furioso. Miró a su rival- La pelea comienza ahora- y atacó.
    Ryoga se preparó para defenderse, confiaba en darle a su contario una buena lección. Ranma había estado seis meses sin entrenarse y no podía con él, pero le esperaba una buena sorpresa. La rabia que sentía Ranma le daba una fuerza increíble.
    Ranma se movió a una velocidad endiablada. Esquivó el golpe de Ryoga y lo golpeó en la boca. Al joven de la cinta le saltaron los colmillos. Se tambaleó, los golpes de Ranma era más certeros que antes, era más rápido y más fuerte. Huir de las amazonas lo habían sobre entrenado.
    -Al cerdito le faltan los dientes.- dijo Ranma con sorna-Akane te quitó la mitad y ahora yo la otra mitad- el joven se rió.
    -¡Esta humillación me la pagas!- dijo el otro joven. Se acercó corriendo a su rival. Pero este lo esperó y le golpeó en el estómago.
    Ryoga se llevó las manos al estómago, retrocedió unos pasos y cayó de cuatro patas al suelo y vomitó. Levantó la cabeza y miró a Ranma con odió.
    -¡Te mataré Ranma!-contestó Ryoga- utilizaré mi nuevo ataque, una nueva versión del ataque de la explosión que actúa sobre las personas.
    -Ya lo conozco. -Contestó Ranma- Lo utilizaste conmigo. Mi cicatriz en el hombro izquierdo. Ya sé como páralo… pero no te gustará como lo haré. La última vez me atacaste a traición, por la espalda, cuando estaba drogado, hoy no la harás. No lo volverás a lograr ni hoy… ¡ni nunca!
    Ryoga se lanzó sobre su rival con los dedos índice extendidos.
    -¡Prepárate para morir! Hoy veras a Ukyo y Akari- gritó el joven de la cinta.
    Ranma se preparó para recibirlo. Y en ese momento. Se retorció de dolor. Sus heridas le dolían en el peor momento. Ryoga sonrió.
    -¡No Ranma!, ¡Nooo!-gritó Akane asustada. Ranma estaba en peligro, se imaginó viéndolo extrañar en pedazos. Y corrió ayudarlo, pero sabía que no llegaría a tiempo. Y…
    Ryoga seguía corriendo hacía su víctima y… en último momento Ranma se repuso y esquivó el ataque y con una pierna le barrió el pie a su rival y este cayó al suelo. El chico de la cinta en el pelo gritó con horror. Su ataque iría al suelo, con esa potencia sería demoledor. Y al estar tan cerca de la exposición sería el mismo el afectado. Ya nada podía salvarlo de sufrir un daño irreparable.
    Así fue, la explosión fue tremenda y Ryoga gritó de dolor. Su rival se acercó y lo levantó. Tenía las manos destrozadas, jamás volvería a poder combatir, se había cavado su propia tumba.
    -No te la mereces, pero me das lastima. No tenías que haber acabado así, si no nos hubieras querido separar a Akane y a mí a cualquier precio. Hoy has pagado por todo el mal causado. Te merecías morir. Pero no lo haré, sufre la vergüenza por las muertes en la cuales colaboraste. Espero no verte más. Me avergüenzo de haberte considerado un amigo y un rival digno.
    El vencido miró a su rival con odio.
    -Mátame. Ya no soy nada-gritó con rabia.
    -No, no soy un asesino. No me rebajaré a tu nivel.-contestó Ranma. Y negó con la cabeza- aunque tengo ganas de hacerlo, no te mataré.
    -¡Pero yo sí!- se oyó decir una voz furiosa- lo debo hacer por el daño que me hizo. Por el que te hizo a ti. Por todo el mal que causo… a Ukyo… a Akari… a mi familia y a la tuya… - miró a Ranma-… nuestra familia.
    -¡NO AKANE!-dijo Ranma con determinación- con él ya está bien, no eres una asesina-Ranma se acercó a Akane y la miró a los ojos.-Ahora empezaremos de nuevo, olvidaremos el dolor y recuperemos la felicidad que nos negaron. Sé que será distinto, pero juntos los dos lo lograremos.
    Ella lo miró y asintió.
    -Tienes razón, los dos juntos recuperaremos
    -¡No permitirlo!-gritó Shampoo- y lanzó su bombori contra Akane.
    Ranma empujó a Akane alejándola del peligro. Y cuando el artilugio estuvo a punto de darle. Le pegó una patada al objeto devolviéndolo contra su dueña.
    El arma le dio a Shampoo en la espalda, la chica huía y el golpe la lanzó unos metros. La chica china cayó encima de Ryoga.
    -Las dos ratas están juntas- dijo Ranma- se merecen una a otra.
    Akane miró a Ranma emocionada y se lanzó encima de él y lo abrazó.
    -¡Ranma, como te he echado de menos!- dijo la chica llorando.
    -¡Suéltame Akane!, tengo la espalda mal. Me duele que me la toquen aunque sea con una caricia.
    -Lo siento Ranma, ha sido la emoción.
    -Lo sé- la miró emocionado- en un par de meses estaré a punto y me pondrás abrazar con libertad- dijo el chico riendo.

    A los pocos minutos llegó la policía y se llevaron los dos culpables. Los padres de Ryoga no quisieron saber nada más de su hijo. El pueblo de Shampoo pidieron la extradición de la chica. El gobierno japonés pidió explicaciones al chino, por la muerte de una joven camarera, el secuestro y esclavitud de otros dos jóvenes y la muerte uno de ellos. Shampoo provocó un conflicto internacional, y la tribu de las amazonas tuvieron que prometer que la joven de su pueblo y su abuela serían ajusticiadas, para no ser borrada del mapa por el propio gobierno chino. También en esa tribu se elevaron voces en contra del clan de Cologne. Habían provocado la muerte de varias amazonas, y la desaparición de Mousse, al que no fue visto de nuevo, al final Ryoga confesó que lo mató y lo hizo desaparecer, todo por hacer caso a Shampoo y sus locas ambiciones.

    Por la tarde, después de hacerse una revisión en el hospital, Ranma fue al Dojo Tendo. Entró en el dojo y se sentó en el tatami, lo había echado mucho de menos, entrenar allí con Akane, era lo que más echó a faltar. Se le escaparon las lagrimas. Akane entró y se sentó enfrente suyo. Estuvieron hablando, bromeando y riendo toda la tarde, se habían echado de menos y querían recuperar el tiempo perdido. Muy pronto dejarían atrás los malos tiempos. Los dos juntos se ayudarían a dejar atrás esos horribles seis meses.
    Esa noche en la casa Tendo se celebraba el regreso de Ranma. Toda la familia le pidió disculpa por acusarlo de algo que no hizo. Todo volvía a ser como seis meses antes, salvo que Ranma necesitaría meses para recuperarse de todo. El chico estaba agotado y se dormía en la mesa.
    -Mañana celebraremos la boda de Ranma y Akane.
    -¡Nooo!-gritó Ranma. Todos lo miraron asustados.
    -¿No quieres a mi hija?. No la consideras apta para ti.
    Ranma miró a su prometida, esta estaba furiosa, ese joven volvía a ser un insensible.
    -No, no es eso- miró a Akane y sonrió- piensas que soy un insensible. Y tienes razón. No tengo sensibilidad en algunas partes de mi cuerpo… aun. Debo recuperarme. Necesitaré algunos meses para eso. Para volver a ser… a estar a punto como antes… entonces… para ser yo apto para ella y sólo entonces me casaré con Akane… si ella quiere.
    El chico la miró.
    -Si quiero ahora y siempre, esperaré hasta entonces. Cuando te encuentres en forma me casaré contigo. Pero por mi puede ser mañana mismo.
    Los dos se miraron y sonrieron.
    Toda familia estaba contenta, todo se había solucionado.
    -¿Akane me ayudas a subir a mi habitación?- pidió Ranma, y la joven accedió.
    Cuando llegaron a la puerta de habitación del chico.
    -No me necesitabas para subir-dijo la chica sonriendo.
    -Pero si para esto- y el chico, la besó en los labios. Ella se sorprendió, pero no lo rechazó y acabó respondiendo el beso.
    No supieron cuánto tiempo estuvieron besándose. Pero al separarse sonrieron. Sus caras estaban sonrojadas y no sólo por la falta de aire.
    -Akane mañana nos vemos, debemos entrenar para volver a ser el de antes… y para mejorar en esta técnica que hemos aprendido hace unos momentos.
    Ella lo miró y se sonrojó, sabia a qué se refería como nueva técnica a mejorar.
    -Nos vemos mañana. Te ayudaré a recuperarte y también a mejorar en esa técnica nueva nuestra.
    Los dos se miraron y sonrieron, se abrazaron y se volvieron a besar.
    -Mejor que antes, pero debemos seguir entrenándonos- dijo el chico.
    -Si. Mañana seguiremos mejorando-contestó ella.
    Se fueron a separar para dormir cada uno en su habitación. Pero ella lo cogió por la mano, y con una sonrisa tentadora que él no se pudo resistir.
    -¿Podías dormir conmigo esta noche?- preguntó ella con timidez- no quiero que me vuelvas a dejar sola nunca. Ahora tengo miedo… mucho miedo. Tengo miedo que desparezcas de nuevo.
    Él la miró asustado.
    -¿Y la familia? ¿Y si nos encuentran durmiendo juntos?-preguntó el chicho.- Mañana nos casaran.
    -Ya te lo he dicho antes, me importa poco casarme mañana contigo. No quiero esperarme ya.
    Él la miró y sonrió.
    -A mí tampoco me importa casarme mañana contigo. Tampoco quiero esperar unos meses más. Y no voy a desaparecer nunca. Siempre estaré contigo. Pero hoy sólo dormir, estoy agotado. No creo que aguante más de cinco minutos despierto-advirtió él.- en unos meses estaré listo para dar lo mejor de mi.
    Ella le tendió la mano y él la aceptó y entraron en la habitación de ella.
    -Sólo dormir- dijo ella riendo- no pienses en cosas malas, ¡pervertido!.
    Él la miró y rió. Volvía a estar animado y contento, por qué estaba de nuevo con ella.
    Al cerrar la puerta de la habitación, desde el pasillo alguien comentó.
    -Debemos hacer como no supiéramos que duermen juntos- dijo Nabiki al resto de la familia.
    -Mañana nos haremos los sorprendidos. Dejemos a mañana para preparar la boda.
    Y todos bajaron al comedor.
    Cuando se fueron se abrió la puerta de la habitación de Akane. Y se asomaron los dos jóvenes, se miraron y sonrieron. Sabían que los espiaban. Su familia había caído en la trampa. Mañana tendrían boda como ellos querían. Entraron en la habitación y se acostaron juntos, ese día no era la primera vez que dormían juntos. A partir del día siguiente empezaba para ellos un largo camino por él cual caminarían juntos.
    .
    ..
    FIN
     
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