CAPRICHOSO DESTINO

Hola, disculpen la tardanza, se que no hay escusas para mi demora pero veran los trabajos y el instituto bueno ya saben absorbe todo mi tiempo pero por suerte los examenes ya han terminado y las contis seran más seguidas, ahora sin más les dejo el capi esperando que sea de se total agrado. :)

CAPITULO 6
“DESCUBRIMIENTO”

El clima de este lugar me agradaba, con lo encapotado del cielo los rayos del sol no podían pasar y de esa forma tenía la oportunidad de caminar entre los patéticos humanos y por un momento podía engañarme. Suspiré triste, lejos de Chealsy todo el dolor de mi pasada vida volvía, cada herida se abría de nuevo y a pesar de saber que mi corazón ya estaba muerto podía sentir como lentamente se rompía.

¿Cómo podía vivir una existencia vacía?, ¿realmente valía la pena seguir luchando?, todo lo que alguna vez tuvo valor para mi, ahora ya no existía, todos estaban muertos mientras yo, impasible al tiempo, estaba destinada a vagar por el resto de la eternidad, intentando buscar desesperadamente algo que le diera un nuevo sentido a mi existencia.

Seguí caminando, siendo presa de la mirada curiosa y lujuriosa de todos los que a mi lado pasaban, no importaba que tan discreta fuera mi vestimenta, esta nunca sería suficiente para disimular la belleza sobrenatural que ahora poseía. Indiferente observe la luz de sus mentes, notando al instante y con cierto aburrimiento que eran comunes y corrientes, inservibles para mi propósito.

Frustrada por no encontrar algo que me fuera de utilidad, entre a un callejón para desaparecer pero antes de que me delatara note que un mortal me había seguido hasta aquí, su corazón latía con rapidez, transportando adrenalina por todo su torrente sanguíneo. Fastidiada giré para encararlo y al observarlo una gran sorpresa me lleve.

Lo primero que atrapó mi mirada fueron sus intrigantes y hermosos ojos grises, de un color tan intenso que, de haber sido humana, me habrían dejado sin aliento y lo segundo fue el peculiar brillo que su mente poseía, lo mire con atención, analizando la luz que su mente tenía mientras deducía que don obtendría al ser transformado, muy probablemente sería el los dones de los demás puesto que conmigo lo había hecho.

Generalmente necesitaba solo un par de segundos para saber que habilidad extra tendría, pero con este chico de cabello oscuro e intrigantes ojos me era imposible cual sería su don, no estaba bloqueándome lo que solo dejaba la posibilidad de que me estuviera anulando.
–Lo siento mucho –musitó luego de que el silencio se hiciera demasiado largo.

Me causo gracia el sonrojo que por sus mejillas se extendió y no pude evitar que a mis labios acudiera una media sonrisa, ese humano, de saber lo que yo era, no estaría disculpándose conmigo en este momento y en sus ojos no brillaría esa curiosidad cuando me miraba. Por alguna extraña razón ese pensamiento hizo que una punzada de dolor atravesara mi pecho, estaba cansada de ser un monstro y saber que la única mirada de la cual sería merecedora seria una de repulsión.

–¿Es de caballeros seguir a una dama? –le cuestioné decidiéndome por seguir su juego, tratando por un momento de engañarme y olvidar mi condición.

–No, es por esa razón que me disculpo –respondió al dedicarme una encantadora sonrisa.

Sonreí de vuelta pensando en lo fácil que era coquetear con el peligro pues él sin saberlo, al encontrarse conmigo había sellado su destino. Su habilidad me sería útil para cumplir mi propósito, al anular los dones de los protectores de esa humana y encubrir las mentes de los nómadas… claro si estos decidían aceptar la propuesta antes realizada. James y Victoria, dos cazadores de cuidado que me serian de gran ayuda para completar mi misión, la respuesta seria dada en unos días y entonces sí, la cacería comenzaría.

–Y también quería recompensarte, ¿Quisieras ir conmigo a tomar un café?

En verdad me impresionaba el valor de este mortal pues casi podía asegurar que su instinto de preservación le gritaba que saliera corriendo pero él seguía ahí, de pie frente a mí esperando con cierto nerviosismo mi respuesta. Sonreí con tristeza pues si iba con él, ese joven no volvería a su vida humana, renacería en la inmortalidad.

–¿Qué dices? –inquirió insistente.

Moví la cabeza ligeramente, incrédula de lo que estaba a punto de hacer, pero la tentación que este mortal me ofrecía era grande y yo deseaba, aunque fuese por momentos recuperar la humanidad que hace mucho perdí.

–Encantada de acompañarte –susurré con una sonrisa al mismo tiempo que caminaba a su lado. Solo por esta tarde olvidaría mi misión, mi condición y disfrutaría de la pequeña mentira que este humano me ofrecía.

–¿Cuál es tu nombre? –le cuestione presa de la curiosidad.

–Ethan… ¿y el tuyo? –lo mire dudosa, ¿sería conveniente decirle mi nombre o, por el momento inventar alguno?, después de todo el se convertiría en mi compañero en esta misión.

–Gianna

–Mucho gusto

Sonreí con melancolía, él dejaría de pensar eso al final del día cuando lo transformara.

 

Hola, luego de una larga, larga ausencia por fin les traigo la conti, espero sea de su agrado :)

CAPITULO 7
“CONFUSIÓN”

Habían pasado dos semanas desde aquella escena que fue protagonizada por Gabriel, los Cullen y yo. Aun no era capaz de entender del todo el comportamiento de mi mejor amigo y de tan misteriosa familia que tan bien me había acogido, ahora me sentaba con ellos a la hora del almuerzo, casi todos ellos me aceptaban exceptuando a tan extraño y enigmático miembro de esa familia, Edward Cullen.

–No te preocupes por él –exclamó Alice uno de los tantos días en los que notaba la tristeza en mis ojos al darme cuenta su ausencia.

Me sentía una intrusa entre ellos al alejar a uno de sus hermanos con mi sola presencia, no sabía el por qué pero estaba segura de que yo era la razón por la cual el repentinamente se alejó de su familia. Suspiré cansadamente al sentir la tensión en mis hombros y la pesadez en mis parpados, las pesadillas eran más frecuentes y más fuertes cada día logrando así robar mi sueño, la mayoría de las noches me aterraba cerrar los ojos y volver a ver tan nítidamente esa mirada carmesí.

–Bella, ¿te encuentras bien? –abrí los ojos al escuchar la voz de Alice.

Le dedique una media sonrisa al asentir, tratando de ocultar todo el miedo y dolor que esos recuerdos me traían, había veces en las que soñaba con la abuela y entre las sombras aun veía a tan extraño ente que le robo la vida Renee, en otras veces me encontraba sola en medio del bosque, a merced de todas esas miradas teñidas de sangre que anhelantes esperaban atraparme y algunas veces, en la que tenia suerte, solo recordaba aquel accidente ocurrido hace tantos años.

Suspiré de nueva cuenta antes de sobresaltarme al sentir la mano de Jasper sobre mi hombro, me sorprendió de sobremanera pues el único que tenía esa clase de cercanía conmigo era Emett y por esa razón lo veía como el hermano mayor que nunca tuve.

–Te acompaño a tu siguiente clase –susurró haciéndome notar que todos los estudiantes comenzaban a salir ya de la cafetería.

Mire a Alice temerosa de que esto la pudiese hacer enfadar, recibiendo como respuesta a mi silenciosa pregunta una encantadora sonrisa. A ella no le molestaba, claro estaba, pero aun así no era capaz de comprender que era lo que con esto se proponían, ¿Por qué de pronto se comportaban más extraño que lo usual?

–Gracias, pero puedo ir sola –musité lo más firmemente posible.

–Insisto –dijo y derrotada asentí.

Él nunca despegó su mano de mi hombro, haciendo que distraídamente me preguntara a que se debía la temperatura tan anormal que ellos tenían y la preocupación y el miedo me invadieron cuando de improviso esos ojos carmesí aparecieron en mi mente. Cerré los ojos nuevamente pero antes de reprimir ese recuerdo, este ya se había ido y una ola de tranquilidad me inundo obligándome a involuntariamente a mirar a Jasper, ¿Por qué repentinamente me sentía más tranquila en su compañía? Él simplemente sonrió al dejarme en la entrada el laboratorio.

–Te vemos al final de clases.

Asentí y él con su paso elegante se alejó para dirigirse a su siguiente clase, sonreí al sentir la seguridad y serenidad aun inundando mi interior y entre al aula; coloque el impermeable en el perchero y giré hacia mi mesa de laboratorio, quedando al instante congelada al observar a mi compañero.

Edward Cullen era el alumno que menos imagine que fuera mi pareja en la clase, ¿Acaso estas dos semanas solo había estado ausente por mi causa?, ¿Tanto me odiaba que no era capaz de mirarme por una hora? En el almuerzo lo entendía pero esto era demasiado, enfadada y dolida estuve a punto de tomar mi impermeable y largarme de clase cuando mis acciones se vieron interrumpidas por Mike.

–Arizona –exclamó haciendo referencia a mí, en una especie de apodo cariñoso –me preguntaba si…

El profesor entró salvándome de lo que posiblemente seria una invitación a salir, presurosa fui a mi lugar y suspiré aliviada pero al mismo tiempo frustrada, Mike saboteó mí huida, obligándome a permanecer la hora completa en compañía de Edward. Suspiré nuevamente y pensé con sarcasmo que la hora seria prometedora.

–¿Cómo te ha ido Bella? –inquirió él con su voz aterciopelada, obligándome a mirarlo y a que mi ritmo cardiaco aumentara considerablemente. Miré sus orbes topacio acusatoriamente, tratando de ocultar la tristeza que en ese momento en mi corazón se agolpaba.

–No has estado –murmuré lentamente, esperando una explicación a la pregunta claramente marcada en mi rostro.

Después de todo, Jacob siempre había dicho que yo era un libro abierto, Edward me miró por unos segundos antes de apartar la mirada y dejar que el parloteo del profesor llenara el silencio entre nosotros. Lo miré frustrada, de verdad que no comprendía a este chico, primero desaparece por dos semanas, evitándome únicamente a mí y a su regreso intenta ser amable, a pesar de haber intentado atacarme el día en el que nos conocimos, oh bueno, esa impresión fue la que a mí me dio aquel primer día.

Incluso ahora él se hallaba en la parte más alejada de la mesa aunque su cuerpo permanecía ligeramente inclinado en mi dirección. El parloteo del profesor finalizó, dejándome así, sin saber las instrucciones de la práctica, esto estaba mal, realmente mal, durante estas dos semanas no fui capaz de pensar en otra cosa que no fuera Edward y Jacob y Gabriel comenzaban a sospechar que algo más, a parte de mis pesadillas me mantenía distraída. Me sobresalto la vibración del móvil, lo saque de la bolsa del vaquero y vi que tenía un texto.

“Necesito verte en el patio, es urgente. Atentamente Gabriel.”

El numero no era el de él, si lo hubiese cambiado Gabriel me habría informado, confundida quise contestarle pero mi saldo se había agotado, frustrada fulmine al móvil con la mirada y me mordí el labio. ¿Qué podía ser tan importante para que me pidiera salir de clases? Indecisa trate de ver algo por la ventana, encontrando solamente el ceño fruncido de Edward. Él tenía las manos en puños y una expresión de frustración arruinando su cara de ángel lo que hacía que a veces me preguntara si él era bipolar o sufría de algún trastorno de personalidad múltiple.

Aleje la mirada y considere mis opciones, llegando a la conclusión de que debía acudir a la cita ya que Gabriel jamás se atrevería a pedir que nos viéramos en medio de una clase si no era realmente importante. Suspiré antes de ponerme en pie y fui hacia el profesor.

–Necesito ir al baño –murmuré y espere a que el profesor asintiera.

Cuando lo hizo, salí del aula y me dirigí al lugar que Gabriel me indico por medio del texto.

 

Hola, después de lo que al parecer es casi un mes, se termina el suspenso!!!!
Traigo la conti la cual espero sea de su agrado ;)


CAPITULO 8
“ATAQUE”

Habían pasado dos semanas desde mi llegada aquí y solo me quedaban otras dos semanas del plazo que Jane me dio para cumplir mi misión. El primer paso ya estaba hecho, mis aliados, los nómadas James y Victoria junto con mi nueva adquisición, Ethan quien efectivamente al ser transformado desarrolló esa habilidad que yo sospechaba, él era capaz de suprimir los dones de los otros inmortales.

Desde su transformación no habíamos tenido una conversación como la de aquel día en el que nos conocimos, muchas veces me veía tentada a preguntarle si me odiaba pero siempre desistía pues no deseaba escuchar su afirmativa, tratando de deshacerme de esos pensamientos, corrí más rápido, liderando la marcha hacia el instituto donde esa humana asistía. Me detuve a una distancia prudente, para llevar a cabo la siguiente parte del plan, Ethan sacó un móvil de su jeans y mandó un texto para la humana, suspiré frustrada al pensar en el hibrido y sentir esa característica punzada de dolor al recordar al humano que fue, hace tantos años, mi prometido.

–Divídanse y perturben a los inmortales que se encuentran aquí a fin de que no descubran la trampa hasta que sea demasiado tarde.

–Recuerda lo que prometiste –siseó Victoria antes de correr en compañía de su compañero.

–Vamos –le dije a Ethan y corrí hacia el aula en la que la humana se encontraba.

A una distancia prudente nos colocamos y dejé que él suprimiera el poder del cobrizo; con satisfacción miré como fruncía el ceño al ser incapaz de escuchar los pensamientos de los que a su alrededor se encontraban, sigilosamente nos alejamos y buscamos a la otra inmortal, debíamos eliminar la posibilidad de que con una de sus visiones fuera capaz de sabotear mi plan, sonreí al pensar que, después de doce años, sería capaz de volver a casa con la joya tan anhelada por Aro y con una nueva que más que probarle mi lealtad le remarcaría el cariño que por él sentía.

Cuando la duendecillo quedó inmunizada por los próximos veinte minutos, fuimos al lugar del encuentro, notando al instante a la humana que con paso inseguro caminaba hacia el lugar acordado y que con la mirada buscaba al estúpido hibrido. Me tensé al instante al inhalar la fragancia de Bella que el viento trajo hasta mi, obligándome a tomar con fuerza la mono de Ethan al saber lo que este olor causaría en él, gruñó pero no intentó deshacer mi agarre, ni de salir corriendo en su dirección.

–¿Crees poder quedarte aquí? –no respondió inmediatamente, cerró los ojos y dejó de respirar un momento en el que lentamente negó.

Internamente me debatí, no podía dejarlo solo pero tampoco debía dejar que la humana escapara y aun no confiaba lo suficiente en James como para dejar que él se hiciese cargo de este asunto; debía actuar rápido antes de que todo se fuera por la borda. Una idea relampagueó en mi mente y decidí intentarla por absurda que esta pareciera ya que no tendría otra oportunidad, de la bolsa del vaquero de Ethan saqué el móvil y le envié otro texto, pidiéndole encarecidamente que nos encontráramos en los límites del bosque. Con una sonrisa noté su indecisión y rogué que siguiese las instrucciones dadas, los segundos por un momento me parecieron eternos hasta que ella, tomando una decisión siguió con su camino, feliz estuve a punto de emprender la carrera hacia ella cuando una voz irrumpió obligándome a parar y anunciando el fracaso de mi plan.

–¡Bella! –gritó ese vampiro de cabello oscuro y rizado arrancándome un gruñido, él giró hacia donde nos encontrábamos pero rápidamente regresó su atención a la humana.

James y Victoria pronto se unieron a nosotros, todos estábamos dispuestos a atacar cuando la fastidiosa e inoportuna alarma de incendio se activó y todos esos patéticos y estúpidos humanos salieron a toda prisa del edificio; siendo seguidos por los inmortales, los dos híbridos y el hombre lobo. Mi mirada se cruzó con la de Gabriel y por un momento el dolor volvió a hacer mella en mi muerto corazón, ¿Qué había hecho para ser merecedora de este castigo? Me di la vuelta y comencé a alejarme, furiosa, frustrada pero sobretodo dolida.

–¿No piensas hacer nada? –me cuestionó la pelirroja claramente enfadada.

–No hay nada que hacer, atacar ahora seria exponernos y los Vulturis no tendrán ningún problema en acabar con nosotros –exclamé sin siquiera mirarlos –prometí una venganza pero justo ahora seria estúpido intentarlo.

De mala gana aceptaron, perdiéndose al instante en el bosque, suspiré y seguí caminando, tratando de idear un plan porque rotundamente me negaba a perder la vida por culpa de una simple niña, aunque la mayoría de las veces las sombrías dudas me asediaban, ¿tenía algún caso vivir una existencia que hace mucho perdió el sentido?, ¿había alguna razón para continuar sufriendo por toda la eternidad? La mayoría de las veces todas estas cuestiones tenían una respuesta negativa pero luego la esperanza que me traía vivir, como lo había hecho desde que renací en esta nueva vida, encontrando el bálsamo a mi dolor en la manipulación de emociones de Chealsy me hacia querer vivir.

–Gianna… –esa voz que se hizo más atractiva después de su cambio, llamó mi atención, giré con asombrosa lentitud y encare lo que debía haber enfrentado hace algunos días –¿Qué caso tiene todo esto?

–En este preciso momento no lo sé –exclamé con una melancólica sonrisa surcando mis labios –Lo vale todo pero al mismo tiempo no vale nada…

Sin proferir una palabra más, corrí sabiendo perfectamente que él vendría detrás de mí, en momentos como este deseaba tanto poder cambiar las cosas, encontrar alguna salida, era imposible tratar de existir viendo a diario aquel que era tan parecido al que alguna vez mi amado fue, era tortuoso intentar llevar a cabo mi misión sin lastimarlo; era improbable que alguna vez me atreviese a terminar con su vida porque parte de mi corazón humano aun seguía presente, evitándome acabar son él por la simple y sencilla razón de amar aun a aquel de me traicionó.

–Déjame ayudarte –musitó Ethan tomándome fuertemente de la mano, obligándome a detenerme en el acto.

Sorprendida lo miré, intentando comprender que era lo que se proponía y al ver la forma en la que me miraba, por primera vez en mucho tiempo, pude sentir calidez en este muerto corazón, quise evitar lo que veía venir pero para cuando quise alejarme Etahn, él ya había ganado. Sus labios se movieron cerca de los míos, apresando estos en un beso que provocó que una corriente eléctrica corriera por todo mi cuerpo, dándome aquella chispa de vida que hace mucho no sentía.

Asustada me alejé, mirando fijamente aquellos ojos que en antaño fueron grises, deseando repentinamente nunca haberlo conocido, deseando regresar el tiempo antes de que esto sucediera y evitarlo; lo había condenado a esta vida pero no deseaba esclavizarlo a mí, no a esta mujer que atrapada en el pasado era incapaz de olvidar al hombre que solamente la uso. Lo miré disculpándome con la mirada, siéndome confundida y abrumada, aquella chispa de vida aun danzaba por mi cuerpo haciéndome sentir extraña.

–Lo siento –exclamé aterrada a la nueva posibilidad que él me ofrecía, a este pequeño descubrimiento que acababa de hacer.

Ethan no me odiaba pero lo que me ofrecía y quería a mi me estaba prohibido, yo aún estaba atrapada en esta misión que probablemente me costaría la vida, no tenía nada que ofrecer… Suspiré tristemente, no podía deshacerme de las cadenas que me mantenían atada a un pasado y menos si...millones de recuerdos se arremolinaron en mi mente, rompiendo de nueva cuenta este muerto corazón que buscaba desesperado una nueva razón para seguir existiendo.


¿Y bien que les ha parecido el capi?
¿Que creen que es lo que pueda pasar?
Gracias por su tiempo y lindo día!!!