Yo no soy poeta Yo no soy poeta Ni anhelo explorar con mis dedos tu hermosa silueta No sueño contigo ni me imagino comer tus labios como a un higo Jamás me envolveré en tu larga cabellera ni tu voz de sirena, detendrá el presuroso caminar de mis piernas. No te amaré, ni te extrañaré no serás mi musa, ni mis suspiros y dulzuras. Caminaré frío hacia el vacío sólo mirándote y cabizbajo eligiendo algún desvío. Por que no soy poeta y no podré enamorarte Solo me queda amarte y abandonarte.
El otro lado de la moneda. Un falso poeta y ahora el que no lo es. El primero que engaña y hace sufrir, el segundo... ¿qué puedo decir? La parte final me hace imaginar ese lado de la moneda, ambos completando un todo... uno que hace todo lo posible por enamorar y el otro que no hace nada por hacerlo y aún así ambos causan sufrimiento. ¿Cómo sabe el que no es poeta que la chica a la que ama no lo ama también y que solo espera un indicio suyo para corresponderle? He aquí los dos extremos, claro, desde mi pobre perspectiva. Mejor arriesgarse que no hacer nada. Saludos.