Vamos al cine. Seis jóvenes se encontraban pasando el rato en el Café Reddo mientras esperaban que una séptima chica se les uniera. El lugar era muy frecuentado por el grupo de amigos, además de poseer cierta popularidad entre los usuarios del foro. Era famoso por el amplio menú que ofrecía, teniendo una gran variedad de postres y minutas. Un ambiente agradable y relajante que invitaba a la plática (cuando no intentabas estafar al dueño yéndote sin pagar la cuenta). Tres de los roleros estaban sentados cómodamente en un living, uno al lado del otro. Lucas tenía una taza de café humeante en las manos; a su izquierda, Liza le daba sorbos pequeños a su refresco recostada en el respaldo del sillón, mientras que Amane estaba ya a la mitad de su segunda taza de café, tipeando en su móvil. —Vale, lo último que me dijo Sweet antes de que el móvil se le quedara sin pila fue que llegará tarde y que lo siente—explicó haciendo una mueca sin apartar la mirada de la pantalla de su celular. Finalmente levantó la vista y se dirigió al grupo— ¿Qué hacemos, chicos? —Y luego me dijo “Maldito, nunca más me fiaré de tus palabras”—contó Miguel terminando su anécdota para luego estallar de risa, ajeno a la pregunta de Amane. A su risa le siguieron la de Liza y otros dos jóvenes. —Weón, pedí un refresco y me dieron un café—se quejó EliLover de repente, tras haberle dado una probada a su bebida y comprobar que no era lo que había ordenado— Es la tercera vez que me hacen esto, así no funciona la vida. La rolera estaba sentada en el reposabrazos derecho del sofá individual en el que estaba sentado Miguel. El chico estaba con las piernas cruzadas con el tobillo sobre la rodilla opuesta y disfrutando de un té. —Sí, este lugar tiene un pésimo servicio—asintió Juanjomaster, quien había traído las bebidas y cambiado la suya por la de Eli al antojársele algo más dulce— Ajám, pésimo servicio. Juanjo degustó “su refresco”, cómodamente sentado en otro sillón individual similar al primero. Estaba situado justo enfrente de Eli y Miguel, separados por una mesita de madera en la que había un azucarero pequeño y una botella de vidrio con un par de flores como decoración. —Toma, te doy mi refresco si quieres—ofreció Liza sonriéndole a Eli. —Gracias, Liza—agradeció el gesto y aceptó la bebida— Liza, yo te amo—agregó con una voz tierna. —Pfff, te la da nada más porque ya no tiene sed, no pienses que es por amabilidad—se metió Lucas mirando a Liza de perfil, para luego darle un sorbo a su café—. O porque tiene miedo de que le entren ganas de ir al baño en medio de la película y pase lo que pasó la última vez. —Jo, tío, ya vas a empezar, ¡que fue sólo una vez!—protestó la muchacha, exasperada. Era el día del estreno de la película más esperada por los roleros, se trataba de “Pokémon Rol Championship 3: Batalla en el Mundo Espejismo”. Desde que la anunciaron, el grupo de amigos había organizado la salida para ir a verla y todos estaban muy emocionados. — ¡Eh, no me ignoren!—interrumpió Amane, molesta porque no habían respondido a su pregunta. Todos se callaron y le prestaron atención a la chica, que rápidamente se encogió en su asiento, avergonzada al darse cuenta que todos la miraban. —Que Sweet llegará tarde y la película empieza en 30 minutos...—dijo en voz baja tomándose el resto de su café— Se quedó sin batería y ya no tenemos modo de avisarle que vaya directo al cine... —A pie llegamos al cine en más o menos 10 minutos y debemos entrar a la sala otros 10 minutos antes—calculó Juanjo. —Le dejamos una nota a Reddo y que él se la dé a Sweet cuando llegue, ahí le explicamos todo—sugirió Eli tomando su refresco. —Uhm... no lo sé, Reddo no es muy...—empezó Lucas, inseguro. —De hecho es una muy buena idea, Eli—dijo Miguel, antes de que el chico pudiera terminar su oración. — ¡Sí, tiene razón! ¡La es!—dijeron entusiastas Amane, Liza y Juanjo. —Lo sé, lo sé, gracias—sonrió Eli. —¡Eh, no pueden decidirlo así nada más! Creo que deberíamos esperar a Sweet—intervino Lucas. — ¡Decidido entonces, nos vamos al cine!—lo interrumpió Juanjo con un dedo señalando la salida y una amplia sonrisa, a lo que todos se pusieron de pie y se dirigieron hacia la puerta apurando lo último que les quedaba de café y chocolate. *** —Esta historia continuará... El grupo de antes y el resto de ellos se encontraba en el perfil de Bruno EVF, reunidos en la sala del moderador de la Zona de Roles tras haber disfrutado de la cena. Ya era entrada la noche y los roleros se pusieron a contar anécdotas para pasar el rato y compartir algunas risas. —Bruno, ¿qué hacés?—preguntó Miguel, mirándolo confundido. —Le doy dramatismo a tu historia siendo el narrador omnisciente—respondió con un tono sereno. —Pfff, Onurb idiota—farfulló Sweet por lo bajo. —Deja a Bruno, Mary emboliosa—atajó Lucas. —Andá a dormir, Sweet, que bien te va a venir—se unió Bruno. —Vaya tipejototes con los que me junto...—se quejó con voz infantil. —Ya sigue con la historia, senpai—exclamó Amane, estirándole la manga del suéter a Miguel. —Esperemos que vuelva Liza—dijo antes de darle un trago a su refresco. —Seguro no tarda en volver—agregó Nekita, con su usual forma tranquila de hablar. —Esa no va volver, se tomó como 2 litros de refresco—aseguró Lucas, mirando a Miguel y a Neki. — Psst... ¿Pero pudieron ver la película o no?—le preguntó GalladeLucario a Juanjo, queriendo saber el final antes de tiempo. —No, de hecho nadie la vio. Sweet llegó al lugar y desde una cabina telefónica en la entrada del cine, nos llamó para avisarnos que había llegado, todos salimos a buscarla por más de una hora. Nunca la encontramos—le susurró al Game Master— Resulta que entró al cine equivocado. Contenido oculto Café Reddo Contenido oculto
Mejor tarde que nunca(? Te lo dije por privado y te lo vuelvo a decir por aquí, he amado cada una de las palabras que ha habido en este escrito. Ha sido terriblemente lindo, y encima, has clavado las personalidades. Si bien es cierto que ya llevábamos bastante tiempo conociéndonos entre todos, el hecho de que hayas dado en el clavo con todas las personas me parece algo fascinante y que merece muchos halagos. Además, la situación es muy graciosa. Nos imagino sin ninguna dificultad en el café, tomando algo mientras hablamos de todo tipo de cosas. Y el hecho de que me hayas puesto por la segunda taza de café... gracias, ¿no? Porque ahí se nota mi amor por la bebida y aslkna me encantó ese detalle <3 Y bueno, el despiste legendario de Sweet, lo amo. Podría pararme a destacar todo lo que me ha gustado del escrito pero es que, simplemente, lo amé todo así que no acabaría nunca. Deberías seguir escribiendo cosas, de este estilo o de lo que quieras, porque tienes una narración muy linda, y no te lo digo por ser tu amiga. Debes mostrarle más al foro lo bonito que puedes llegar a escribir~ Sigue así ^^