de Inuyasha - Una visita puede cambiar todo

Una visita puede cambiar todo

Hola!, bueno aquí mi fan fic :)
Les voy a dar un resumen de lo que se trata, decidí agregarle una prima a Kagome (lo sé, idea usada, pero todas agregan algo diferente) gracias a que cuando era más pequeña junto con mi prima (Giigiie aquí) continuamente jugabamos a Inuyasha y ella siempre era Kagome, por lo que yo optaba por ser simplemente prima de ella y me colocaba el nombre "Sayo", así que esto va a estar inspirado en ello :).
Espero que les agrade!.
P.D: Comenten, digan que les parecio ¿siiii? :saltarin:
Capítulo 1
Una visita y una caída.

Kagome se encontraba corriendo a toda velocidad, no había dicho nada, simplemente había comenzado a correr en dirección al pozo, obviamente Inuyasha se le adelantaba ya que su velocidad era mucho mayor a la de Kagome.
Inuyasha se encontraba tapando el camino de Kagome hacia el pozo.

- Hasta que no me cuentes el porque de tu marcha no te dejaré ir - soltó con su clásica cara de "Voy a ganarte".

- Inuyasha, abajo - dijo Kagome mientras saltaba por encima de él y se lanzaba al pozo - ¡te traeré Ramen! - agregó mientras caia al pozo para trasladarse hacia su época.

Inuyasha aún en el suelo murmuró - Espero que no sea hecho por ti -

.::En la era moderna::.

Una chica de cabello oscuro miraba su reloj con impaciensia - Me dijeron que no tardaría - murmuró mientras se amacaba en una silla del comedor.

Kagome corrio hacia la casa, arrojo sus zapatos en algún lugar y entró como una bala - ¡PRIMA! - exclamó abriendo sus brazos, aunque no pudo recivir ningún abrazo gracias a que su prima estaba contra el suelo.

- Para la próxima avisa que llegaste, casi muero de un infarto y de un golpe - dijo bajito mientras se levantaba y se sobaba - ¿Dónde habías estado? -

Kagome comenzó a pensar - Ammm ¿Ayudando en una florería? - dijo dudosa

- Y como voy a saberlo, eres tú la que no estaba -

- Ya, no me molestes, si no tu estadía será un infierno, Sayo - Kagome mostró una sonrisa aunque su sonrisa se borro rapidamente al observarla detalladamente. El cabello de Sayo había crecido notoriamente, lo llevaba un poco más de la cintura, sus ojos no eran dulces si no que se habían vuelto frios - ¿Hay algo que deba saber, prima? -

La chica miro el suelo y asintió - Papá sufrió un accidente y murió hace unas semanas, por lo que tu madre quiere cuidarme... -

Kagome corrió a abrazarla - No lo sabía, hace mucho que no estoy en casa -

- Si, seguramente pasas semanas en la florería - dijo irónica Sayo.

Kagome sufrió un escalofrío al escucharla, era sarcástica como Kikyo incluso sus ojos eran igualitos a los de Kikyo - Suerte que Inuyasha nunca vera a mi prima... - pensó Kagome.

- Prima...¿Porque el pozo no tiene más los pergaminos? - preguntó la chica de cabello negro con curiosidad.

Continuará.​