Un adiós inolvidable

Un adiós inolvidable​

(Drabble)​

​

Esa noche, con truenos, lluvia y viento que arrasaba con todo a su paso.

Estaba él y yo, en una habitación, solos sin nadie más en él mundo que nosotros. Lo miraba muy nerviosa, él sólo me acariciaba suavemente cómo si nadie más que él me pudiese tocar. Me besaba con mucha delicadeza cómo si se tratase de una flor, cómo si cuidase los pétalos para que no se desprenda ninguno. Ya en un abrir y cerrar de ojos tenía su cuerpo sobre él mío, su pelo largo acariciaba mi cuerpo, sentía cómo su pulso se aceleraba junto al mío, cómo su respiración aumentaba junto a la mía.

Nuestras manos juntas, y nuestros dedos entrelazados cómo si nunca quisiéramos que esas manos se soltasen. Me abrazaba cómo si fuera el fin del mundo, con tanta fuerza y ternura a la vez.

Éramos un solo cuerpo, una sola alma en busca de calor, de amor, nuestros pensamiento estaban concentrados en ese momento, éramos sólo nosotros dos, compartiendo el mismo deseo.

— Te amo — me susurró al oído.

Cuando abrí mis ojos al día siguiente ya no estaba a mi lado. Me dí cuenta de que ya se había marchado al extranjero y que nunca más lo vería de nuevo.

Tomé la delgada sabana que cubría mi desnudo cuerpo y me eché a llorar.

 

Un noticia inesperada​

(Drabble)​

La habitación era blanca y bastante amplia, llena de cuadros con diplomas, con un escritorio repleto de papeles, fotografías y medicinas en frente del escritorio una silla donde me encontraba sentada, una camilla que se ubicaba en una esquina de la tétrica habitación, y un extraño aparato junto a mi que por un instante estaba apagada...

— Señorita... — el doctor hizo una pausa preocupante — ¿Estamos listas par empezar? — pensaba que era fin del mundo, estaba bastante nerviosa que ni hablar podía así que asentí con la cabeza, me recostó en la camilla y movió el extraño aparato junto a mi. Tiritaba, apretaba la mano del medico tan fuerte como podía tan sólo quería que esa maldita maquina contradijera toda mis sospechas, cerré los ojos, respire profundo…

— Señorita .... — el médico dejando de recorrer mi vientre con una especia de control remoto — Mire la pantalla — y señala con el dedo índice un punto negro — ¿Ve ese diminuto bulto negro? ese es su hijo ... — me levante de la camilla para apreciar mas la imagen y las lagrimas recorrían mi rostro, sentí como la sensación de estar muerta me invadía. Tomaba mi cabeza con ambas manos y sollozando, en ese instante el doctor comprendió, mientras me sobaba la espalda con su mano, que ese bebe era un hijo no deseado y lo delicado que era el tema…

— Creo que lo mas apropiado es que busque al padre del bebe… — y antes de que terminara cerré la puerta de la habitación.

Quien podría aceptar que este embarazada fuera del matrimonio, una madre soltera era menospreciado, que el padre del bebe se encuentra lejos y mas encima con 15 años ....
Creo que es algo que nadie … tan solo me queda una salida… una opción… un escape...

 

Desear la muerte​

(Drabble)​

Después de un mes de la visita al doctor seguia encerrada en mi habitación sola, sin nadie a mi lado sin nadie que me diga “Tranquila todo estará bien” o “No te preocupes estoy aquí para ti”. No tengo a ningún amigo que me consolé. Estoy sola, sola , sólo tengo la compañía de la oscuridad, soledad y el silencio que invade mi habitación.

Me siento entupida – Grite – Le entregue a un chico lo mas apreciado para mi, lo que tanto atesore por tanto tiempo… Mi … Virginidad. Siempre pensé que … mi primera vez seria con un chico que amara con locura que cada ves que me toca , mi mundo gira en torno a esa acaricia, que cada beso fuese único y mágico, que después de un año, hablar de ese acto tan maravilloso “hacer el amor” y por fin concretarlo un día. Pero, pero no fue así, después de una semana, ni muchas cosas hicimos juntos, voy y le entrego eso… Me enamore de las hermosas cosas que decía… me siento tonta, una estúpida… Ahora cargo con este estúpido bebe, cada ves siento que crece mas cada día… Quien me podría amar estando embarazada… - no sabía que hacer la sensación de querer estar muerta invadió mi corazón y enveneno mi alma. Lo único que estaba en mi mente era el suicidio nada más que eso, pensaba las diferentes formas de quitarme la vida, tirando de una escalera, tomar veneno de ratas y muchas otras formas. En ese entonces mi cara se deformo, mis pupilas se dilataron, mis ojos se abrieron, tomaba mi cabeza y me jalaba el cabello, soltando una risa maquiavélica al ver una tijera encima del velador o la ventana abierta…

- Quiero morir… Quiero morir… Quiero morir… - repetía una y otra vez

Pero muy dentro de mi quería que alguien me salvara, muy dentro gritaba “Ayúdenme” “sálvenme” pero….nadie iba a mi auxilio…

 

Adiós... te amo... perdóname ​

(Drabble)​

Estaba parada en el marco de la ventana, lista para tirarme al vacío con las manos ensangrentadas por los cortes con las tijeras. Al principio no podía soltar mis manos del marco, algo me detenía creo que era el bebe , pero la tentación suicida era mas grande… Respire profundo y me lance.

En ese instante toda mi infancia paso por mi cabeza en un segundo. La noche que me acosté con el padre del bebe y lo maravilloso que seria haber tenido al bebe. Como me hubiera gustado saber si era hombre o mujer, sentir y ver como crecía dentro de mi vientre, sentir tus pataditas, el no poder dormir por las noches debido al inquieto feto, sentir las contracciones, sentir el dolor de dar a luz y después de tan largo trabajo de parto, al fin poder verlo, abrazarlo y darle de amamantar. Creo que hubiera sido magnífico pero ya era demasiado tarde, el bebe no tenia culpa de lo que sufría pero ya no me podía echarme atrás.

Esa caída transcurrió tan lenta … Cuando ya tenia a 10 centímetros el piso de mi cara decidí cerrar los ojos

- Te amo hijo mío, perdona a tu madre- Fue lo ultimo que dije antes de…

Cuando abrí los ojos me encontraba en mi habitación, parada en la ventana.

- Fue un sueño – suspire aliviada, pero me preocupe, tenia cortes en mis muñecas del los cuales no me acordaba, había perdido mis cabales – ¿Cómo pude haberme echo esto?... ¿Estas bien? – le pregunte al feto mientras sobaba mi vientre

En ese momento me retire del marco de la ventana.

- Te amo – le dije a mi hijo