tu mirada es un puente a mi pasado

Tema en 'Fanfics Abandonados de Inuyasha Ranma y Rinne' iniciado por nazhuna, 2 Mayo 2009.

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  1.  
    nazhuna

    nazhuna Guest

    Título:
    tu mirada es un puente a mi pasado
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    4552
    tu mirada es un puente a mi pasado

    konnichi waaa spero0 k se enkuentren de lo merjo aunke soi nueva en el foro y este es mi primer fanfic, aki les dejo el prologo y el primer capi, espero0 que les agrade y acepto criticas constructivas n.n .

    Prologo


    Una chica de apenas 7 años es llevada a la fría Suecia , ignorando misteriosamente la actitud cortante de su padre, sin embargo nunca imagino que terribles circunstancias la orillaran a quedar sola en la vida.
    Esto acorrala a la joven a ser transportada a un orfanatorio no teniendo a ningún familiar que se hiciese cargo de ella.
    Las horribles situaciones que vivió la persiguen durante 8 años hasta que una pequeña familia proveniente de Japón la adopta, encontrándose con un hermano algo peculiar y grandes amistades.
    Pero no todo es color de rosa en esta historia en esta historia, su oscuro pasado aun la persigue provocándole extraños sueños mortales.
    Desde su confusión y miedo un chico con mirada dorada e inquietante como el fuego la hacen caer hasta la desesperación y porque no hasta la más pasional relación de engaño para salvar a su propio corazón del desgarrado amarre en la que la hunden.
    Circunstancias extrañas y misteriosas ocurren con aquel chico y aquella secundaria, porque no es para simples personas, y ella lo descubrirá.




    CAPITULO 1 : Mente atormentada

    El helado viento recorrió mi rostro y mi cuerpo lo sintió al instante, no obstante trate de que no me afectara lo suficiente,



    ------Flash-Black----------------
    Kagome: —oye mama ¿qué raras son las calles aquí verdad?- le pregunte con curiosidad
    m.kag: —es que estamos en otro país kagome, es diferente a Japón-
    ( solo la mire y me fije en la sonrisa tierna que siempre había tenido mi madre, siempre tan calurosa solo que, esta vez, había algo diferente… un semblante de tristeza que percibí)
    Mi pequeña familia caminaba por las frías calles de Estocolmo, era una ciudad muy grande para la cual era fácil perderse sin embargo mi papa parecía seguro de a donde se dirigía, finalmente llegamos a la casa del abuelo donde cenamos y sucesivamente mi mama me dijo que me durmiera. El abuelo dijo que yo dormiría sola ya que era muy grande para dormirme con mis papas, me llevo hacia una habitación en la planta alta, en cuanto entre me di cuenta que despedía un distintivo calor y era muy acogedora, tenía una cama individual al centro, al lado había un pequeño tocador al que me dirigí, encima se encontraba una fragancia en un contenedor de forma circular y de un tono azul celeste, destape el perfume y me acerque a oler la fragancia, un fresco olor despedía a jazmines, pensé en llevárselo a mi mama y preguntarle si esta habitación era suya y si me podría quedar con la fragancia, pero pensé que tal vez estaría dormida, tome mi mochila amarilla y guarde el fresco perfume, decidí mostrársela en la mañana, por lo que regrese al tocador y me fije en todos esos frascos de toda clase de tamaños que contenían cremas y productos de belleza, voltee hacia el lado izquierdo de la cama donde había un pequeño buro donde reposaba una lámpara, había tres pequeños cajones, abrí el primero donde se encontraban distintos papeles y cartas y en efecto esa habitación era de mi madre solo pude leer una, al parecer la ultima que quedaba porque todos los demás sobres estaban rotos al parecer alguien había tomado las cartas, lentamente me senté en la cama y abrí el sobre, comencé a leer:

    Mi querido Señor:

    Le ruego me disculpe por mi imprudencia, se que, al igual que usted yo tengo grande culpa, ya que por mis descuidos usted enfrento muchos problemas y no me perdonaría si algo le pasara…..Pero sin embargo, quiero que sepa que nuestros sacrificios no fueron en vano ya que yo estoy…….


    Era todo, al parecer habían arrancado la mitad inferior de la hoja, me decepcioné un poco, no sabía porque pero deseaba saber que decía la segunda mitad de la hoja, volví a doblar la carta y sucesivamente la metí en el sobre después me dirigí hacia mi mochila para guardarlo. Sabía que eso no me concernía pero me importaba de cierta manera… era como si fuera parte de mi…
    Después me frote un poco los ojos y bostece, decidí ya dormirme por lo que me metí a la cama y me acobije, cerré poco a poco los ojos hasta que esos extraños pensamientos desaparecieron de mi mente, quede totalmente en blanco.
    En medio de esa oscuridad, no sabía cuánto tiempo había permanecido así, solo recordé un horrible ruido ensordecedor, me levante de golpe, estaba muy agitada al parecer estaba sudando, trate de que mis respiros fueran más lentos pero me era imposible, después me levante lentamente de la cama, mis pies reaccionaron al tocar el frio suelo y trate de soportarlo, camine lentamente, doble hacia el pasillo dirigiéndome al baño y me pare enfrente de la puerta, sentía un terrible presentimiento, subí mi brazo lentamente y toque la bisagra la gire al mismo tiempo que se oía un pequeño sonido y abrí la puerta.
    Mis pulmones pudieron respirar tranquilamente otra vez, el baño era normal y al parecer no había nadie ahí, así que me pose enfrente del lavabo y me lave la cara, cuando cerré la llave me di cuenta que todavía sonaba como si un chorro de agua callera asi que trate de seguir el sonido me di cuenta que provenía de la tina, pensé que a lo mejor alguien se había duchado y no habría cerrado bien la llave por lo que abrí la cortina y me quede inmóvil.
    Era mí…. mi papa, ¿estaba dormido? …. Y además tenía…. tenía… sangre en el rostro…. Se me hizo un nudo en la garganta, di pasos torpes hacia atrás…. me tape el rostro con las manos…. Estaba temblando y veía borroso….una ola de confusión recorrió mi mente, corrí pero resbalé con el agua que caía de la tina, rojiza por la sangre….…. cerré los ojos y al instante sentí punzadas de dolor por todo mi cuerpo hasta que algo retumbo en mi cabeza, cuando apenas pude abrirlos estaba en el primer piso, me había caído por las escaleras, alce mi mano y la puse en mi nuca, un liquido vital resbalaba por mis dedos al instante los sentí húmedos, el dolor era agonizante ….
    Mama…... abuelo...… -Mi voz era apenas un susurro, me sorprendí que llegara a eso ya que sentía tanto dolor que apenas si podía formar palabras- mama.... abuelo

    Gatee hacia la sala donde yacía un cuerpo inerte, en la alfombra….
    A ti… a ti también…. No... a ti.. No… mama reacciona, mama, mama!- a pesar de que todo estaba quieto sentía que todo el mundo me daba vueltas,
    Me apoye en su pecho y la abrace con todas mis fuerzas, pero esta vez era diferente, ya no sentía más su calor, si no el frio cuerpo de un cadáver
    Kagome: mama….
    * Que conmovedor……
    Voltee a todas partes pero no sabía de dónde provenía la voz, sin dejar de abrazar el cuerpo de mi madre pregunte
    ¿ Quién eres?.-
    ¿?: Eso no tiene sentido que te diga porque pronto llegara tu fin………
    Todo ocurrió muy rápido, de repente estaba rodeada de llamas, tenía que escapar pero como lo iba a hacer, no podía dejar los cuerpos de ellos en aquella casa bajo las llamas, no podía no quería hacerlo.
    Me aferre al cuerpo de mi mama y cerré los ojos, si… me di por vencida…
    No tenía el corazón para dejarlos ahí y escapar como una cobarde. Todo lo que recuerdo es que cerré los ojos , tenía mucho dolor tanto en mi cuerpo como en mi corazón, ya no podía soportarlo más, hasta que me… desmalle…….
    Después desperté en un hospital y me preguntaron sobre mi familia, sólo... Permanecí en silencio…
    **________________________________fin de Flash Black__________________________________


    De ahí me trasladaron a Blekinge, un pequeño condado al sureste de Suecia donde me quede en un orfanatorio cristiano llamado Barnhemmet, ahí he vivido desde entonces y a veces me dejan visitar las tumbas de mis papas y mi hermano, sin embargo siempre me he preguntado porque fue tan cruel el destino conmigo.
    Sentí el viento sobre mi cara nuevamente ahora mas frio y helado, reconocí una voz que gritaba a lo lejos mi nombre así que voltee en aquella dirección.
    ¡Kagome!.- escuche a una voz conocida gritándome a lo lejos
    por aquí anciana kaede.- Alce un brazo y lo moví para que me viera, a lo lejos la vi girando su cabeza hacia mí.
    kagome rápido ya tenemos que irnos.- me apresuro
    ya voy, solo espéreme un segundo.- susurre.

    Me hinque en la tumba de mi madre y deje el último ramo de cerezos ahí. Me pare y persine, me fui corriendo hacia la anciana kaede…
    — ¿Por qué tan rápido anciana kaede?- pregunte extrañada
    — kagome no recuerdas… hoy van a venir una pareja… muy importante y vienen desde tu país preferido a donde tú siempre quisiste regresar, a Japón.
    — ¿enserio? Y porque no me habías dicho eso.- replique
    **—Bueno, en realidad me acabo de enterar, pero eso no importa, rápido vámonos te tienes que arreglar, con un poco de suerte podrían adoptarte.- me alentó.
    —Ojala anciana kaede.-
    Nos dirigimos hacia el orfanatorio, en cierta manera quería que me adoptara alguien de Japón, pero ya había descartado esa posibilidad porque no se habían presentado parejas de Tokio, así que había decidido que cuando tuviera mi mayoría de edad juntaría la mayor cantidad de dinero para así regresar a mi país de origen, no es que no me gustara Suecia, solo que me traía muy malos recuerdos.
    Cuando llegamos me dijo la anciana kaede que me iba a esperar en la sala común del orfanatorio porque ahí iban a estar todos los jóvenes y la pareja que deseaba adoptar. quería ser la primera así que corrí para bañarme rápidamente, me puse el uniforme del orfanatorio, me cepille el cabello, los diente y después busque debajo de mi cama un cofre y tome ese pequeño frasco con fragancia azul celeste, me rocié un poco por el cuello, solo la usaba en ocasiones especiales, así que lo cerré y volví a ponerlo en el cofre me apresure en regresar en la sala común pero oh oh me tropecé en uno de los pasillos y mi falda se rasgo, genial era la primera pareja de Tokio que venia al orfanatorio y mi falda se había roto por un lado de mi pierna era un completo desastre no te desesperes seguro hay modo de arreglar eso me dije a mi misma por lo que corrí de regreso a mi dormitorio me mire en el pequeño espejo del tocador y era un corte largo por lo que me acerque al tocador y rápidamente busque mi pequeño alhajero que prácticamente no tenía casi nada de joyas solo un collar de una pequeña virgen de oro que mis papas me habían comprado cuando era niña.
    Tome los seguros que había guardado ahí y los acomode en el corte de mi falda, cuando termine me mire en el espejo al parecer había hecho buen trabajo ya que no se veía tanto al menos no de lejos; así que mire mi reloj, era tardísimo así que me lance corriendo hacia el pasillo, seguro ya estarían todos ahí todo por mi estupidez me retrase que suerte la mía.
    Cuando llegue a la sala común, en efecto tenía razón; todas las chicas del orfanato estaban formadas horizontalmente a espaldas de mi, en el primer hueco que vi me apure a acomodarme mientras veía a la anciana kaede como me hacía gestos de reprobación; al parecer estaba en sus ya rutinarios discursos cuando llegaba alguien a adoptar a alguna de nosotras, a un lado de ella se encontraba una pareja de casados; la mujer tenía tez morena clara, delgada y alta con rasgos pronunciados su esposo que le llevaba una cabeza de altura, era corpulento y vestía un traje negro, era de tez mas morena que su esposa; en el momento en que llegue los ojos de la mujer se posaron en mí, me vio de pies a cabeza y después vi como le susurraba algo en el oído a su esposo que asintió..

    —muy bien ya que al parecer todas estamos aquí – sus ojos me dirigieron una mirada- comenzaremos. Adelante
    Su rostro se giro hacia la pareja, la mujer dio pasos hacia delante y giro hacia mí, pude admirar su rostro cuando me miro tenia granes ojos cafés y al parecer yo le interesaba
    —hola. Me podrías decir tu nombre jovencita
    —es….kagome, señora
    —kagome que nombre tan bonito tienes podrías venir con nosotros por favor
    Mire su rostro, era de una mujer al parecer muy noble y radiante me tomo de la mano y me dirigió hacia su esposo y kaede.
    —ella es la clase de hija que estábamos buscando... si podríamos arreglar esto lo más pronto posible.- pronuncio dirigiéndose con la anciana kaede
    —Claro señora, con mucho gusto pero, está segura.- dudo
    —Absolutamente.- confirmo la mujer
    Giro su rostro hacia mí y me dedico una linda sonrisa, así que le correspondí con otra de inmediato, apenas podía mover la comisura de mis labios porque no creí que hubiera sido tan fácil, como, si solo me vio y me escogió así nada mas, como si fuera un regalo en una tienda y me escogieran solo al verme.
    —bueno tiene que llenar algunas formas señora, creo que tardara un poco
    —bueno entonces supongo que debemos apresurarnos no
    —será mejor que vallas por tus cosas kagome, terminaremos con esto muy pronto así que apresúrate.
    —de… de acuerdo.- alcance a pronunciar
    La pareja me embozo nuevamente una larga sonrisa, cuando me di cuenta que apenas podía moverme de la impresión, Salí de la sala común y rápidamente fui hacia mi dormitorio, estaba muy feliz, claro iba a extrañar a la anciana kaede pero al fin podría volver a Tokio y deshacerme de ese país que me traía tan malos recuerdos, tome mi vieja maleta gris y puse todas mis posesiones ahí, ni siquiera me preocupaba por llevarlas acomodadas, solo las avente y cuando me fije que no me faltaba nada trate de cerrarlo no se cómo se me ocurrió que podría caber todo así que me senté sobre ella logrando asa que el cierre se cerrara, tome mi bolso y mi maleta y fui lo mas rápido que pude hacia la sala común, ahí me esperaba solo a la anciana kaede…..
    —anciana kaede donde están
    —en su carro kagome, me dijeron que ahí te esperarían..
    Vi unas lágrimas recorrer su rostro. Me apresure a abrazarla
    —Anciana kaede, no llore por favor, le prometo que le escribiré en cuanto llegue, y en cuanto pueda vendré a visitarla.
    Su pálido rostro me miro y luego se separo de mí tomándome por los hombros, dejando que examinara mi rostro.
    —kagome, ya eres toda una señorita, compréndeme los años pasaron muy rápidos para mi, pero no me malentiendas, estoy feliz de que al fin te vayas a un lugar donde los recuerdos no te hagan mas daño, todo lo que te pido es que seas muy feliz allá y espero que me lo prometas
    la mire y me perdí en esos ojos que tantos años habían estado conmigo, le dedique una sonrisa y sus palabras me abrumaron, no estaba muy segura de que esa promesa valdría la pena.
    — te lo prometo
    —muy bien, ahora vete porque te han de estar esperando, y escríbeme cuando puedas
    —no lo olvidare
    —cuídate
    —adiós
    Me gire al recoger mis maletas y rápidamente fui hacia la salida del orfanatorio ahí había un esplendoroso auto negro, donde rápidamente me dirigí y abrí la puerta trasera.
    —estas lista cielo
    —sí creo que es todo
    —muy bien entonces vámonos
    Le asentí y subí al auto, sentía mucha confusión estaba ilusionada por regresar a Japón pero acaso ellos serian lo que yo estaba pensando, serian buenos padrastros, porque era muy raro que solo me vieran y me escogieran sin preguntarme nada más que mi nombre. De camino no abrí la boca ni ellos me preguntaron nada.
    Cuando entramos al aeropuerto, pasamos unas horas ahí antes de tomar el vuelo donde me compraron comida para que me alimentara, después de comer tomamos el vuelo hacia Japón que duro unas cuantas horas, no estoy segura de cuantas porque la mayor parte del tiempo me quede dormida, al despertar me ofrecieron nuevamente comida a lo que me negué, no tenía hambre más bien nervios de cómo me iba a tratar aquellos desconocidos, estaba muy feliz porque alguien de Japón me había adoptado con suma facilidad, pero nunca me había puesto a pensar como me tratarían o si yo les cubría todas sus perspectivas al respecto.
    Cuando descendimos y bajamos del avión, nos subimos a un taxi, el señor, ajora mi padrastro le explicaba al taxista el camino hacia su casa, a mi casa, al menos ya lo era.
    Vi como el rostro de aquella mujer se giraba hacia mí, a pesar de no tener suma belleza, poseía un rostro tierno y materno, me recordaba a alguien cuya expresión era parecida.
    —te va a gustar mucho nuestra casa kagome, tendrás un cuarto solo para ti, y hay alguien que quiero presentarte cuando lleguemos lo veras.
    —muchas gracias señora
    — por favor dime mama si?
    Dude un poco, no quería desvanecer ese rostro lleno e ilusión, pero era muy pronto para llamarla así, al menos para mí. Al parecer había notado mi expresión, por lo que su mirada ceso y me ofreció una leve sonrisa.
    —te comprendo, perdóname por favor, es que yo solo pude tener un hijo, de por si el parto fue muy difícil, y tenía deseos de tener una hija, y tu eres muy linda… solo prométeme que cuando te sientas con más confianza me llamaras mama por favor
    —claro señora…
    — llámame yasushi
    —señora yasushi
    —Oh.. ya llegamos
    Me baje del coche, y al instante vi una casa grandísima con un enorme jardín al frente, no podía creer que ahora ese lugar iba a ser mi hogar.
    — y que te parece kagome
    — es.. muy linda señora yasushi
    —espera que te sientas cómoda, vamos entra
    Di pasos torpes hacia la enorme casa, atravesé el umbral y me di cuenta que la puerta principal estaba abierta así que pase, había un enorme pasillo que conducía hacia unas largas escaleras, también estaba una sala de estar grandísima y una enorme cocina, me detuve en las escaleras, cuando vi que me habían alcanzado.
    — kouga, kouga hijo ven por favor, ya llegamos
    Se oyeron unos pasos por la planta alta cuando dejaron al descubierto a un chico, calcularía de unos dos años mayor que yo, era muy apuesto y alto, era de tez morena claro como sus papas y tenia rasgos algo toscos pero no demasiado, de pelo negro y lo llevaba recogido por una coleta, a pesar de eso se veía muy apuesto, vi como levantaba una mano hacia sus papas en modo de saludo después prosiguió a bajar las escaleras.
    — así que esta es mi hermanita… genial… soy kouga- tendió una mano hacia mí pero antes de eso me había visto de pie a cabeza, yo diría con unos ojos no precisamente de hermanos. Dude un poco pero después extendí la mano y nos las estrechamos.
    — kouga ella es kagome, kagome el el kouga
    —… mucho gusto
    — el gusto es mío…. Me hablo con una sonrisa cierto picara.
    — Mm…- mirando a su hijo con gestos de sospecha- kouga podrías llevar las maletas de kagome a su habitación por favor… y después quiero hablar contigo
    — Como quieras- tomo mis maletas y me guiño el ojo cuando sus papas no estaban viendo- sígueme por favor
    — está bien..
    Lo seguí escaleras arriba de lado izquierdo, al parecer ahí solo estaban dos habitaciones, la primera era al parecer la de kouga y mas al fondo entramos a la mía, era una habitación bastante lujosa tenía una cama matrimonial con mantas de ceda rosada, de lado izquierdo se encontraba un esplendoroso tocador que contenía ciertas fragancias y muchos productos de belleza, maquillaje, cremas, etc.
    De lado derecho había una repisa con pequeñas mujeres de porcelana bailarinas, al lado del tocador había una cierta puerta la que me imagine debía ser el baño.
    — espero que te guste…
    — parece como si la hubieran arreglado desde antes para….
    — ti… si eso pensaban… estaban muy emocionados o al menos mi madre… a mi no me gustaba tanto la idea... Pero ya veo que no es tan malo
    Volvió a dirigir esa maldita mirada, por alguna razón sentía que este tipo era un maldito libidinoso.
    — bueno… creo que tu mama a de estar esperándote…y necesito cambiarme...
    —A claro tienes razón….- se dirigió hacia la puerta después se giro hacia mi- por cierto mi mama me dijo si querías desde mañana podrías ir a la secu si no te importa.
    —qué? Tan pronto…
    —pues es el primer semestre así que estaría bien que fueras lo más pronto posible para que no te retrasaras pero si quieres puedes quedarte…
    — no.. creo que iré… no quiero retrasarme
    —me parece una estupenda idea…
    Otra vez me recorrió con la mirada.
    —bueno… es mejor que te vayas... Adiós
    —Claro- se giro y cerró la puerta después de escuchar los pasos de el por el pasillo me acosté en la cama, era mucho mas cómoda que la del orfanatorio.
    — maldito libidinoso… si me vuelve a mirar así…
    Torcí el gesto, después me reí de mi propio comentario, se suponía que el era ahora mi hermano no?. Tal vez me lo estaría imaginando, mi mente me hacia bromas pesadas últimamente.
    Gire hacia la puerta en un costado de mi nueva recamara, donde la abrí y me encontré con un lujoso baño cubierto de blanco, era muy grande y fresco y mantenía un olor a rosas.
    Volví hacia la puerta ya estando adentro y cerré la puerta con seguro, si fuera de mi imaginación o no, más valdría estar preparada contra ese libidinoso; después me comencé a desvestir lentamente y abrí la llave de la tina para que comenzara a llenarse.
    Hecho esto me recosté en la tina y relaje completamente todo mi cuerpo, solo sentía el cálido vapor recorrer mis poros y los pequeños movimientos del agua pasar por mi cuerpo, a pesar de que no oía nada ese silencio se extendió mas, ya no veía nada solo una enorme capa de densa oscuridad donde no habitaba nada, solo mi ser o al menos eso creía.
    De pronto distinguí a lo lejos una tenue luz que se fue acercando haciéndola mas fuerte y visible en lo que pude distinguir era una puerta, me acerque con pasos lentos hacia allí. Cuando estaba a la suficiente distancia, estire mi mano hasta que pude tocar la perilla; la gire y abrí lentamente.
    Era un habitación bastante fresca y lujosa, era un baño, otra vez ese sueño esos recuerdos? Los mismos que siempre me atormentaban? Que acaso mi mente no me dejaba olvidar eso?, no era muy justo, que mi propia mente me jugara bromas, pero no, no, esa habitación no era la misma en la que había pasado minutos incluso horas de agonía, si no que era ya mi reciente baño, el de mi habitación, mi nueva habitación.
    Mis músculos se relajaron y de mi cuerpo pude sacar un profundo suspiro, no iba a tener ese espantoso sueño que siempre reinaba en mi mente, no ese día tenía que ser diferente, mi vida había cambiado solo en unas cuantas horas, ahora mi mente podía ocuparse de nuevos pensamientos. Pero algo pasaba, la tina estaba llena de agua, tanto que se desbordaba y todo el suelo estaba cubierto, hasta cubrir mis cálidos tobillos, llegue hasta la tina y cerré la llave del agua hasta que no callo ni una sola gota.
    Después me incorpore…
    No acabes con más vidas, solo queremos la tuya..
    Un leve escalofrió recorrió mi cuerpo, gire para ver de dónde provenía aquella voz, me quede paralizada…
    Mi familia, mi verdadera familia yacía en el suelo, todos estaban muertos, como yo los recordaba, en su expresión notaba un vacio. Pero no eran los únicos, también estaban aquellas buenas personas, que me habían adoptado, aquella tierna mujer y su esposo, aquel chico que era su hijo y ahora mi hermano o al menos los era.
    El agua de torno roja, como la misma sangre..
    No.. por favor no… basta… no quiero que sigan muriendo por mi… no es justo… no lo es.
    Quería moverme, pero no podía, todos mis músculos se habían tensado, parecía que me hubieran clavado los pies al suelo, quería gritar pero no podía, ni siquiera había podido pronunciar una palabra... porque hasta ahora lo notaba..
    Sentía una quemazón en la garganta y no podía respirar; hasta que pude abrir mis ojos con dificultad; primero pude divisar una figura que poco a poco pude distinguirla mejor aunque no conocía a aquella persona;




    sze ke esta un poco largo pero spero0 les guste cuidenzze
    sayonaraaa *-* ^^

     
  2.  
    zayreth

    zayreth Usuario común

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    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    hola!

    acabo de leer tu fic, y esta un poco fuerte me dio miedo ja ja que cruel fuiste
    kagome esta sufriendo desde el inicio lo bueno esque encontro alguien que la
    adoptara y al parecer son buenas personas pero ese lividinoso de kouga, deberas
    que se pasa, espero y le pongas algo de felicidad ya que sus papas y su hermano
    los mataron que crueldad, pero bueno espero la continuacion pronto ja ja
    bueno eso es todo
    adios
    cuidate, besos
    a y bienvenida a cemzoo y para ser tu primer fic te quedo muy bien ja ja
    espero y seamos amigas atte. Zayreth.
     
  3.  
    NutS

    NutS Entusiasta

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    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    holaa¡¡¡

    pobre kagome que pena que le hayan pasado todas esas desgracias u.u
    no me da muy buena espina kouga ¬¬
    que intriga quien esta con kagome espero que no sea nada malo....

    tengo una duda ¿cuantos años tiene ahora kagome?

    bueno espero la conti ^^

    IxK NutS :vacabaila:
     
  4.  
    Heather

    Heather Fanático

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    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    Waoo sin palabras....
    Me gusto tú fic, osea es unico en el sentido de qué la historia es un poco
    fobica, pero te esta quedando estupendo. Una recomendación por parte mía ;) Quisiera qué separases más los parrafos ya qué ostina leer algo tan pegado y pues para alguno
    como para mí suele ser aburrido leer algo tan largo "osea" los parrafos
     
  5.  
    Heather

    Heather Fanático

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    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    Otra cosa x'D sí vas a usar el formato script no lo mezcles con el de diálogos ya qué forma un complot x'D
     
  6.  
    nazhuna

    nazhuna Guest

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    tu mirada es un puente a mi pasado
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    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    konnichi waa jojo aki de nuevo pa publikar el segundo kapi un poco menos corto k el anterior
    zaireth arigatou x tu postt i jojo nunka kreia k asustaria a la gente o_O pro bno klaro ke kambiara aunke kiero mantener la trama misteriosa
    am y ixk nuxs grax x el postt y kagome tiene 14 pro0 sta por cumplir 15 es algo k aparecera mas adelante.
    barbie girl arigatou x tu postt zep aver si ahora lo hice bien -_- la vdd nunka antes habia entrado a un foro de usuario asi ke esto es muy nuevo para mi .
    tkm arigato x el postt no t preocupes ia no sufrira tanto empezo algo fuerte pro va a ser algo light en el desarrollo y en este capi biene algo relacionado con la conversacion de kouga

    spro0 les guste disfrutenlo ^^

    Capitulo 2 : Mi fobia a los baños
    Sentía una quemazón en la garganta y no podía respirar; hasta que pude abrir mis ojos con dificultad; primero pude divisar una figura que poco a poco pude distinguirla mejor aunque no conocía a aquella persona;
    Era un chico, estaba incado a mi lado en la bañera tenía un poco mojada su camisa blanca, al parecer yo lo había salpicado, era de tez blanca ligeramente bronceada de suaves y finos rasgos, una reluciente cabellera plateada y larga caía sobre su camisa, además de unos ojos color miel que primero me miraron con gesto de preocupación, después su mirada se torno un tanto picara.
    —Valla, entiendo que el maldito de kouga desespera mucho pero tampoco es para que te quieras suicidar – no respondí, mi garganta aun me dolía pero en cuanto pasaron unos segundos en los que el cambio de nuevo la mirada.
    Kagome: pero quién diablos…yo no… no intente nada ….

    Hasta ese momento me di cuenta lo que pasaba, estaba semidesnuda en una bañera de la cual un chico (en que estoy pensando) me estaba tomando de los brazos para que no me sumergiera en la bañera.
    —¡¿Qué te pasa?¡ largo de aquí!!!...
    Tome la toalla rosada que posaba sobre el estante de al lado de la bañera y rápidamente cubrí mi semidesnudo cuerpo..
    —Creo que en tu orfanato no te enseñaron nuevos modales princesita…- su mirada se torno disgustada y luego me reviso de arriba abajo
    — ¿¡OYE DONDE ESTAS!? MÁS TE VALE QUE NO ESTES EN LA HABITACION DE KAGOME.- la voz de la señora yasushi se escucho gritando en el piso de abajo.
    —Maldita vieja, quería conocerte más a fondo tal vez en otra ocasión o la mujer loba me mata…
    Se paro ya que estaba incado y se dirigió hacia la puerta al estar en el tope paro y se giro hacia mi…
    —por cierto, si quieres que te siga visitando más vale que no le digas a esa vieja que vine, además seria una desilusión no volver a mirar esa hermosa cara...-
    Sentí como la sangre se me subía a la cabeza y percibí un leve calor en mi cara, me dirigió una leve sonrisa burlona y después continuo caminando, poco después oí el sonido de la puerta abrirse y después cerrarse.
    Por dios era mi imaginación o ese tipo era un engreído, libidinoso, cerdo y lo peor se había burlado de mi, a pero no lo pensaría dos veces para decírselo a yasushi maldita sea si lo vuelvo a ver lo mato.
    Me toque la cabeza al recibir una punzada de dolor al parecer me había pegado la cabeza en la tina cuando estaba casi ahogándome además de lo enojada que estaba, Salí del baño y me apresure a ponerle seguro a la puerta no me iba a arriesgar a que ese tipo se metiera de nuevo en mi habitación.
    Camine hacia la cama y solté un leve suspiro, es cierto ese tipo me había rescatado de no ser por el probablemente estaría muerta o por lo menos inconsciente porque no estaba segura de que me había dormido así de la nada, o será porque soy muy distraída, de todas maneras me salvo y punto, lo peor es que no le había agradecido y si nos volviéramos a ver seguro el engreído me estaría molestando, de todas formas tenía que hacerlo tarde o temprano, bueno de algo estaba segura mas valía tarde que temprano, no le iba a dar el gusto a ese maldito chico, que por cierto ¿Quién demonios era?, ¿otro hermano? no lo creo porque yasushi no me había contado de él y al parecer no se llevaban nada bien.
    Me seque el cabello con la toalla y después la deje en el baño, saque de mi pequeña maleta la pijama o al menos eso usaba para dormir era unos pans y una playera que me quedaba demasiado holgada, cuando termine fui a verme al espejo, esa ropa no me favorecía en lo absoluto pero claro era ropa del orfanato solo de una huérfana como yo lo era, torcí el gesto y en mi rostro se curvo una leve sonrisa al parecer yo desentonaba con toda la habitación que era de color rosada y blanco en cambio mi “pijama” era negra y gris, el sonido de la puerta me saco de mis pensamientos.
    —Kagome… hija puedo pasar.- su voz, ahora tranquila me llamaba detrás de la puerta.
    —Claro… ahora le abro la puerta- me encamine hacia esta y quite el seguro de la puerta para después abrirla
    —señora yasushi..
    Yasushi: disculpa kagome te desperté… podría entrar
    —oh, claro
    La deje pasar y sucesivamente cerré la puerta cuando voltee ya se había sentado en la cama así que copie la acción.
    —que se le ofrece señora yasushi?
    —ah, bueno veras, solo pasaba por aquí y… pensé en preguntarte si te gusto la habitación….o si… no se… has tenido alguna molestia- dijo torciendo el gesto y dirigiendo su mirada a todas las partes de mi cuarto, supuse de lo que se trataba así que abrí un poco la comisura de mis labios pero me detuve, no estaba segura de decirle, es cierto que ese tipo se había propasado pero de cualquier manera el me salvo de una muerte segura.
    — ¿Qué pasa kagome? Acaso… paso algo...- dijo hablando a lo bajo al ver mi expresión
    —ah, no, por supuesto que no señora yasushi, ¿debería?…
    —Soltó un leve suspiro que al parecer creía que no lo había escuchado- no, por supuesto que no…
    Kagome: pues la habitación me encanto está muy hermosa.- dije rápidamente cambiando de tema, tenía la sensación que ella dudaba de mi.
    —ah, enserio me alegra que te haya gustado, ya veo que te instalaste- dijo recorriendo el cuarto con la mirada y luego lo que me había puesto- ay… no puede ser... Que tonta soy… no recordaba…. Oh kagome no te he comprado nada de ropa….
    —oh, no se preocupe tengo algunas prendas del orfanato y…
    —tonterías, ya no estás en el orfanato kagome, mañana después de que vayas a la escuela tu y yo iremos de compras, necesitas un nuevo guardarropa
    —pero yo….- musite
    —ningún pero kagome, ah por cierto hablando de la escuela más vale que pongas tu despertador a las 7:00 ya que a las ocho comienzan las clases ¿de acuerdo?
    —está bien
    —escúchame si tienes algún problema, habla con kouga el cursa el tercer año y si no le tienes la suficiente confianza llámanos- dijo sacando algo pequeño de su bolsillo y dándomelo en la mano, era un celular muy pequeño y negro.
    —es muy bonito, pero porque…
    —tómalo como un pequeño regalo de bienvenida, en la agenda tiene todos los números de emergencia, el mío el de tu padrastro y el de kouga.
    —de acuerdo, muchas gracias
    —no es nada, bueno te dejo dormir ya que mañana te levantaras algo temprano, que descanses
    —si, buenas noches- dicho esto se levanto y se dirigió hacia la puerta se giro y me dedico una tierna sonrisa a la que por supuesto correspondí, salió del cuarto después de haber cerrado la puerta.
    Abrí con delicadeza el celular tenia de fondo una rara flor rosada y teclee algunos botones, la verdad es que no sabía usar uno, en el orfanato no eran tan caritativos, como para dar semejante celular de sabe cuántos miles de pesos. Supuse que no llegaría a nada por lo que lo cerré y luego lo puse en el buro del lado izquierdo de la cama individual, sucesivamente fui al baño a lavarme los dientes y me acosté en la cama. Mientras pensaba en mi nueva vida... después como de costumbre todo se torno oscuro.
    Un ruido me despertó, abrí poco a poco los ojos y espere un momento para levantarme, después me senté en la cama individual y mire la habitación, era la primera pero no ultima vez que dormía en esta habitación, permanecía tan tranquilo y pacifico, era una habitación para mí y eso todavía no me quedaba muy claro, era eso, que no lo podía creer pero tenía que hacerme a la idea ya que ese era mi hogar de ahora en adelante, mire el pequeño reloj de mi buro y eran las 7:05, así que me apresure a levantarme, me dirigí hacia el baño, me lave la cara y cepille mis dientes, después Salí del baño y busque mi maleta donde guardaba mi pequeño “guardarropa” , al ver que la única prenda en “mejor estado” era mi falda cortada y arreglada con seguros, recordé las palabras de yasushi, es cierto necesitaba un nuevo guardarropa, me sentiría como bicho raro si todos los integrantes de mi nueva “familia” fueran personas de alta clase social, bien vestidos y yo con mis trapos, era lo mismo que pensé cuando mi “pijama” y mi nueva habitación desentonaban demasiado. En ese momento no desee otra cosa más que ir a un centro comercial, solté un leve suspiro y tome la falda y una blusa en buenas condiciones que pude traer, me cambie rápidamente y después me mire en el enorme espejo de cuerpo entero que se hallaba en mi habitación, mi piel blanca hacia juego con mi ropa y el cabello, mi falda era lisa al principio con pequeñas ondulaciones al final de un color verde pasto, llegaba a ¾ partes de mi muslo, mi blusa era de manga larga y blanca, y por último, mis zapatos eran negros y de suelo.
    Me cepille el cabello y decidí dejarlo suelto a ambos lados de mis hombros, recogí mi mochila amarilla y metí unos cuantos bolígrafos, dos libretas y el pequeño celular que me había regalado la señora yasushi, luego termine y la cerré.
    —Kagome, estas lista?, baja a desayunar- escuche la tierna voz de yasushi hablándome desde el primer piso
    —Si, ahora bajo- respondí imitando el tono de voz, después tome la mochila y me encamine escaleras abajo, al bajarlas pase por la sala y después pase al comedor, donde se hallaba kouga y yasushi, al parecer no se encontraba su esposo.
    —Buenos días kagome- me di cuenta de el tono diferente en su voz, supuse que la señora yasushi había hablado con él.
    —Buenos días kouga- le respondí un tanto extrañada
    —Y dormiste bien kagome, vamos siéntate- al mismo tiempo que me dedicaba una sonrisa
    Por lo que me senté al otro lado de la mesa al lado de la señora yasushi. Ya habían puesto la mesa, empecé a probar bocado.
    —Kouga, hijo me gustaría que ayudaras a kagome, claro si necesita ayuda..- dijo un tanto preocupada
    —Descuida, no dejare que le pase nada, claro que ella no quiera…- dijo con una sonrisa socarrona en su rostro
    —Valla, creí que habíamos hablado claro ayer kouga- le replico su madre.
    —Descuida, solo bromeo- cambio un poco su rostro al tiempo que se metía mas comida en la boca.la señora yasushi lo miro de reojo y después me miro ami.
    —Recuerda que tienes que llevar tu celular a todas partes kagome, no dudes en llamarme si se te ofrece algo- me dijo otra vez mostrándome su sonrisa
    —Descuide, lo hare, no hace falta que se preocupe tanto por mi- respondi
    —Bueno, bueno, a todo esto, si no nos apuramos llegaremos tarde, así que vamos kagome- me dijo levantándose de la mesa, tomo su mochila y se la colgó en un hombro, por lo que me apresure en pararme, tomar mi mochila y seguirlo. Nos dirigimos hacia la salida principal donde se hallaba estacionado un esplendoroso auto, era negro y reluciente, kouga se apresuro y me abrió la puerta de copiloto.
    —Adelante- me dijo un tanto presuntuoso
    Me subí al auto y me cerró la puerta en el interior pude apreciar los asientos de piel negros, todo se veía lujoso. kouga rodeo el auto y se subió de otro lado después se apresuro a arrancar.
    —Es un bmw m6, 10 cilindros y 507 caballos de potencia- me dijo apartando su mirada del volante y dirigiéndomela ami.
    —Valla, no sabes las ganas que tenia de saberlo- le respondi ante su acto de mocoso rico presumido, me volteo a mirar y luego a mis piernas
    —No deberías de ir así a una secundaria, además me pondrías muy celoso, y no quiero estar cuidándote todos los días- el maldito otra vez hizo que me ruborizara.
    —Yo me visto como quiera a donde sea que valla, ese no es tu problema, y además para tu información no necesito niñero- le conteste poniendo mis manos sobre mis muslos y volteando la mirada hacia la ventana. Después de unos segundos lo oí soltando una leve risita.
    —Tal vez no, pero no dudes en decirme si me... Necesitas- me hablo con cierto tono picaron. Lo mire de reojo y el también me miraba, sentí que el auto disminuía velocidad hasta que paro.
    —De todas formas te acompañare con las secretarias para que te digan tu horario y todo lo que necesites saber, si quieres te puedo esperar y..- no termino porque sabía sus intenciones
    No hace falta, preguntare por las aulas- le respondí interrumpiéndolo, vi que me miraba.
    De acuerdo, te estaré vigilando- dicho esto salió del coche y me abrió la puerta del copiloto por lo que también Salí del auto.
    El colegio era demasiado grande, había estudiantes por todas partes, unos que salían de sus autos, otros caminando y apresurándose a entrar a clases, grupos, personas, parejas, de todo, pero el ruido de un auto en especial me robo la atención y estoy segura que no era la única; era un lamborgini rojo resplandeciente, freno de repente, parece que iba muy rápido, pero se estaciono perfectamente y en silencio.
    La puerta trasera de lado derecho se abrió y salió un chico alto y de complexión delgada y cuerpo trabajado, tenia cabellera negra como el carbón y larga recogida en una larga trenza, vestía un pantalón negro de vestir que hacia juego con la trenza que caía por su espalda y una playera morada de manga corta, su mochila del mismo color le hacía juego.

    Casi al mismo tiempo de lado izquierdo en la puerta trasera salió un chico alto, casi de la misma complexión que el anterior, lucía una cabellera negra recogida por una pequeña coleta, llevaba perforadas las orejas en donde unos pequeños aros de oro resplandeciente resaltaban, vestía una camisa negra de manga larga y unos pantalones de vestir negros
    Pasaron unos segundos, pude observar como los dos chicos que se habían bajado del esplendoroso auto volteaban sus rostros hacia adelante y parecían discutir.
    Después de algunos otros segundos la puerta del copiloto se abrió y de ella salió otro chico, era un poco diferente a los otros dos, tenía una cabellera larga hasta la cintura plateada, me pareció ver un ligero aire familiar, tal vez ya lo había visto, pensé, pero sus facciones eran más detalladas y finas que aquel otro chico, vestía un pantalón también de vestir negro y una playera de manga larga y cuello en v blanca, su mochila era de un color blanco.
    Sucesivamente la puerta del conductor se abrió, mi cuerpo padeció de una parálisis momentánea, salió un chico alto y también de cuerpo ejercitado, no demasiado pero si destacaban sus músculos, lucía una cabellera hasta la espalda plateada y vestía una camisa de vestir roja que hacia juego con su lujoso lamborgini con unos pantalones de mezclilla casuales. Lo reconocí en ese preciso instante, era aquel chico, el engreído, presumido, apuesto y justamente ese maldito que me había salvado de una muerte segura, que suerte la mía.
    Los cuatro se encaminaron, el chico que ya había visto caminaba por enfrente y al parecer sus amigos a los lados, por un momento pensé que caminaba hacia la entrada principal del colegio al menos hacia allí se centraba su mirada, pero se paro justo enfrente de mí y kouga, al tiempo que aquel chico se detuvo, los demás lo copiaron…
    --------------------------------flash- black-------------------------------------------------------------------------
    Por la carretera de camino al colegio Shikon, cuatro chicos discutían sobre su segundo curso en el colegio…
    —Por kami, nuevo curso escolar hermanos- expresaba con alegría el ojiazul, extendiendo su brazo hasta tocar la espalda de aquel otro chico.
    —Eres un idiota pervertido Miroku- respondió el chico que se encontraba por el volante, desviando un poco su mirada de ojos ámbares hacia su amigo para luego dirigirle un gesto burlón.
    —Pues no es el único verdad Inuyasha- respondió el chico de pelo negro recogido por trenza.
    —Cállate, no necesito estar detrás de ninguna maldita zorra para conseguir un juguete con que divertirnos- respondió con aires de grandeza.
    —Así, pues no creo que hayas aplicado eso con Kikyo – respondió el que ocupaba el puesto de copiloto, riendo entre gestos.
    —No te incumbe Sesshomaru- respondió con cierto tono de ira.
    —La verdad no, pero, es curioso que digas eso, porque fue lo contrario, la seguiste como un perro faldero hasta que..
    —Sesshomaru si no quieres que te retuerza mi puño en tu maldita boca deja de hablar mierda de mi- respondió el ojidorado con un tono más bajo pero escalofriante.
    —Ja, crees que un perro como tú me da miedo- respondió su hermanastro.
    —Ya los dos dejen de actuar como idiotas quieren?- dijo el de mirada penetrante en el acento trasero de una larga trenza.
    —Vamos Inuyasha, no seas estúpido ay muchas lindas chicas de donde escoger- dijo el chico de coleta negra, esbozando una sonrisa de libidinoso.
    El ojidorado relajo su rostro y se hizo una leve sonrisa- es cierto Miroku, tienes razón, después de todo la escuela es para aprender y divertirse no?- respondió entre risas.
    —Vamos, recuerden que debemos de mantenernos alerta, no pueden distraerse con mujeres de primer grado o ese maldito de Naraku acabara por matarnos- dirigiendo su mirada hacia la ventana y luego al de ojos ámbares y azules.
    —No digas estupideces- pronuncio el ojidorado- a ese maldito primero lo matamos nosotros.
    —Lo sé, pero si ustedes dos se enamoran de una mujer, tengan por seguro que no vivirá mucho tiempo- les explicó el de larga trenza.
    —Bancotsu tiene razón Inuyasha- dirigió su rostro hacia delante inclinándolo hacia Inuyasha- si es que piensan hacerle caso a alguna mujer tienen que tener mucho cuidado
    —Crees que no lo sé Sesshomaru- respondió dirigiendo su mirada, quedando cara a cara con su hermano- pero vamos, de todas maneras nos podemos divertir un poco no crees
    —Jajajaja, valla, si que tienes razón, tenemos que hacer algo de caos en la escuela, o no tendría nada de caso- lo dijo al mismo tiempo que ponía ambos brazos sobre su nuca.
    —Coquetos, nunca cambiaran- respondió entre risas el ojiazul
    —Oye Inuyasha, que te parece una pelea, es más te reto hoy mismo.- reto el de trenza con entusiasmo
    Primero el ojidorado permaneció en silencio concentrando su vista hacia adelante con un mano en el volante y otro libre, pasaron unos segundos;
    —Que pasa Inuyasha, pensé que no me tenias miedo, claro si quieres puedes negarte- respondió con aires de grandeza
    Silencio idiota, si lo hacemos llegando no será divertido, es mejor hacerlo en clases- respondió el ojidorado alzando un poco la voz
    Ah, es cierto, supongo que tienes razón – lo dijo al mismo tiempo que se rascaba la cabeza.
    ------fin de flash black-----
    Vi como su mirada se dirigía hacia mi, sus ojos permanecían igual que como los recordaba un color ambar, comenzó a hablar.....




    continuara....

    bno spro les halla gustado, esta algo mas corto pro0 espero0 me sigan diciendo mis errores para tratar de corregirlos
    arigatou y sayonara *-^
     
  7.  
    zayreth

    zayreth Usuario común

    Acuario
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    257
    Pluma de
    Escritora
    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    hola!

    no se si es mi imaginación pero pusiste soble vez la misma continuación ji ji
    bueno a lo que vine ja ja me gusto mucho la continuación esta muy buena
    dios me encanta tu fic, esta muy bueno me gusta bastante ja ja bueno lo
    que queria saber el que salvo a Kagome es Inuyasha cierto? o no ? bueno
    espero y me lo aclares en el procimo capitulo ja ja bueno creo que eso es
    todo
    adios
    cuidate, besos
     
  8.  
    diana vianey

    diana vianey Iniciado

    Capricornio
    Miembro desde:
    7 Octubre 2008
    Mensajes:
    26
    Pluma de
    Escritor
    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    hola!!!!!!!
    soy nueva en tu fic y me encanto como describes cada detalle la historia de Kagome es triste que se le murieran así sus padres y luego que llego kouga esta como pervertido igual un poco Inuyasha pero le salvo la vida y ahora como le agradecerá que harán kouga e inuyasha pelearan como siempre hayyyyyy me muero por saber que pasara bueno espero el siguiente capitulo

    bye besos
     
  9.  
    nazhuna

    nazhuna Guest

    Título:
    tu mirada es un puente a mi pasado
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    6069
    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    KONNICHI WA JEJE AKA STA EL TERCER CAPI UN POCO TARDE PERO BUENO ARIGATOU X SUS POSTT ESPERO0 LES GUSTE SAYONARA ^-^




    Capitulo 3: CONOCIENDO NUEVA GENTE Y NUEVAS INSTALACIONES ¿la enfermeria cuenta?




    ——Valla, lobito, que gusto que vinieras……- dirigió su mirada hacia kouga- …. Con semejante compañía
    —Ni se te ocurra perro,- respondió con un tono de voz fuerte.
    —Los ángeles caen del cielo!- aquel chico de ojos azules ya estaba enfrente mío tomando mis dos manos con las suyas- pero que preciosa mujercita tenemos aquí!, no te gustaría salir algún día conmigo?
    —Déjala maldito mujeriego- vi como una chica alta de tez blanca, con ojos color caoba y cabello recogido en una coleta también del mismo color se interponía entre aquel chico y yo, su rostro parecía muy irritado. En cuanto aquel chico la miro un aire de pánico le paso por su rostro.
    —Sanguito!, querida Sanguito, como te fue estas vacaciones lindura?- respondió el chico soltando mis manos y tomándole las suyas, a lo que la chica negó.
    —Déjame pervertido, como si te importara, en cuanto a ti Inuyasha déjala en paz quieres- dijo amenazadoramente dando pasos hacia aquel chico con mirada dorada quedando cara a cara con él, el primero la miro con ojos de sorpresa y luego su rostro torno una sonrisa socarrona.
    —Querida sango, no me estas dando ordenes verdad?- dijo al mismo tiempo que tomaba su mentón con una mano y acercaba cada vez mas su rostro contra el suyo, lo que provoco que unos rubores le aparecieran.
    —No… te… atrevas…- dijo lenta pero firmemente la castaña con mirada fulminante al mismo tiempo que ponía sus dos manos sobre el pecho de este para alejarlo.
    —Jaja ay sango se ve que no me conoces-. Dijo apartándose de ella al mismo tiempo que crusaba sus brazos, siguió caminando por lo que todos sus amigos lo siguieron, se detuvo del lado que yo estaba.- bueno kagome parece que no vamos a poder concluir lo de la otra noche.
    Todas las miradas se posaron sobre mi, la de sus engreidos amigos con sonrisas en sus rostros y aquella chica con sorpresa en su cara, toda la sangre se fue a mi cabeza y sentía que ardia no sabia si del coraje o de la maldita vergüenza, pero no me dio tiempo decirle ni hacer nada a ese estúpido porque vi como kouga se acercaba hacia el y le lanzaba el puño en la nuca de Inuyasha. El se quedo inmóvil, no aparentaba dolor ni solto algún alarido, todos al parecer atonitos miraban a Inuyasha.
    —Que pasa kouga? Dije algo que no te gusto?- dijo en el mismo tono engreído, lamente que kouga no le hubiera pegado mas fuerte. Vi como kouga le lanzaba una mirada llena de odio, Inuyasha se dio la vuelta y notaba su expresión mas dura.
    —Te crees muy valiente verdad, pues veamos de que puedes ser capaz,, te veo a la salida, cachorro…-. Pronuncio al tiempo que dio media vuelta.- si tienes miedo es mejor que me lo agas saber ahora, no te tendre compasión si peleamos.
    —Perrucho te voy a callar de una vez esa maldita boca-. Exclamo kouga amenazadoramente.
    Inuyasha solto una leve risita pero no volteo para verlo, supuse que ya se imaginaba su expresión, después comenzó a caminar por lo que todos sus amigos lo siguieron.
    Mis pulmones pudieron respirar sin atrancarse, mi corazón volvia a tener aquellas palpitaciones relajadas. Mi cabeza todavía no asimilaba muy bien la situación, pasaron unos segundos donde pude darme cuenta, acaso kouga iba a pelear con inuyasha?, es que se llevaban tan mal?, y yo.., yo que iba a hacer?, quedarme callada sin hacer nada?, claro que tenia que hacer algo, impedirlo a toda costa.
    —Oye kouga-. Mis pies entumecidos dieron pasos firmes hacia el.- no vas a seguirle el juego a ese idiota verdad?.- pronuncie tratando de llamar la atención de kouga.
    —Solo le dare una lección a ese perrucho-. Dijo con aire de confianza en su voz.
    —Pero, te meteras en problemas kouga, y que tal si sales herido.- exclame con preocupación en mi voz lo cual el lo noto.
    —Que te pasa kagome, no me digas que piensas que el bestia me puede ganar?... además te gusto lo que dijo sobre ti.- dijo estas ultimas palabras con rudeza en su voz. Creo que a el le habían enojado mas que ami.- no se lo voy a perdonar.
    —Quieres ya olvidarlo, si peleas con inuyasha, al final no será un idiota si no dos.- dije al tiempo que caminaba hacia la entrada de la secundaria.
    —Espera.. a donde vas?
    —Pues con las secretarias tonto a donde mas?.-exclame algo enojada.
    De camino hacia las secretarias, le pedi miles de veces a kouga que no peleara pero o se burlaba de mi o me ignoraba, era demasiado terco. cuando por fin de lado izquierdo del pasillo se encontraba trabajo social, los dos entramos, había un pequeño escritorio donde se encontraba una señora regordeta, que al vernos nos dedico una grande sonrisa.
    —Buenos días chicos.- dijo con una voz chillona.
    —Buenos días, disculpe ella es de nuevo ingreso, me podría dar los horarios de el grupo de 2°b -. Dijo kouga con una tonalidad diferente.
    —Claro.- pronuncio, después saco de un pequeño cajón de su lado derecho un papel para luego entregármelo.- bienvenida.- exclamo agrandando aun mas su sonrisa.
    —Gracias-. Exclame.- después salimos de las oficinas. En cuanto dieron el toque de campana.
    —Bueno kagome, yo me tengo que ir a mi salón, según tu horario te toca matematicas en el aula 8, luego te veo ok?.
    —Esta bien-.dije, kouga se dio media vuelta y subió hacia unas excaleras. Busque en la primera planta el aula 8 pero no la encontré asi que subi al segundo piso. Cuando al fin la encontré me di cuenta que ya había empezado la clase.me pare enfrente de la puerta al mismo tiempo que soltaba un suspiro, toque tres veces con mi mano.
    Pasaron 5 segundos cuando la puerta se abrió dejando ver al profesor, era alto de tez blanca y delgaducho, su rostro expresaba severidad.
    —Si señorita?-.esclamo
    —Soy estudiante de nuevo ingreso.- pronuncie con algo de nerviosismo.
    —Ya veo, pero eso no le da derecho de llegar tarde señorita.- me dijo con incredulidad.
    —Lo siento-. Dije torpemente.
    —Esta bien, puede pasar, espero que no se vuelva a repetir.- me dijo abriéndome paso.
    Camine hacia la única silla desocupada y me sente, me di cuenta que a mi lado estaba aquella chica castaña de antes que me había defendido.
    —Esta ocupado?- pregunte
    —No, adelante.- me dijo al mismo tiempo que me dedicaba una sonrisa.
    —Bien señores, como iba comentando después de una innecesaria interrupción.- comento al mismo tiempo que me lanzaba una desaprobatoria mirada.- les aviso jóvenes que en mi clase no permito ninguna interrupción, tendrán que apagar celulares, y no quiero que a mitad de la clase me interrunpan alumnos que no tienen sentido de la puntualidad.- dijo volviéndose de nuevo ami.- como algunos sabran y les aviso a los que no saben, yo les impartiré la clase de matematicas, alguna duda?.
    —Todos guardamos silencio.
    —Muy bien.- dijo con su fría voz al tiempo que se daba la vuelta y en el pizarrón comenzaba a escribir el encuadre, todos sacamos nuestras libretas y solo se escuchaban las lapiceras rasgando con su tinta al papel, después de un rato el maestro, quedando todo el pizarrón lleno con su diminuta y cursiva escritura se sento en su escritorio solo observándonos.
    Me pareció una eternidad, ya que la mayoría había acabado de anotarlo, sono la campana, todos guardaron las cosas y se encaminaron a la salida, solte un leve suspiro.
    —Es un pesado, pero no te preocupes al final del bimestre si pones atención en su clase te pasa.- me dijo la castaña con la que me había sentado.
    —Ya veo, resulta un poco difícil adaptarse.- le respondi
    —No te preocupes, soy sango si necesitas algo dime.- me dijo amablemente.
    —Gracias, yo soy kagome.- le respondi
    —Bueno vamos , tenemos que escoger los deportes que vamos a practicar en la materia, te puedes inscribir a tres máximo.- me dijo viendo un papel que había sacado de su mochila.
    —No soy muy buena para los deportes.- le respondi avergonzada.
    —Seguro hallaras uno adecuado para ti.- me respondió
    Nos encaminamos hacia el pasillo principal donde había una gran cantidad de alumnos de segundo y tercer grado, haciendo fila para anotarse a los deportes.
    ----------------------------------------------------flash black------------------------------------------------------
    Cuatro alumnos resaltaban de una enorme multitud de alumnos en especial porque iban empujando a los demás para llegar ser los primeros de la fila.
    —Y ahora a que te vas a meter inuyasha.- dijo al mismo tiempo que cruzaba los brazos Bancotsu
    —No lo se, creo que soy demasiado bueno para todo.- dijo engreídamente.
    —Calmate galan, según esto solo puedes inscribirte a tres deportes.- le dijo miroku leyendo un volante que habían pegado en el pasillo de la escuela.
    —Solo tres, por kami que dificil.- dijo al mismo tiempo que ponía su mano en su cabeza.
    —Pues yo me voy a meter al futbol seguro.- dijo con estrellas en los ojos y poniendo cara de libinidoso.
    —Si yo también que seria de las porristas sin mi.
    —Yo voy por el fut, atletismo y espadas.- dijo bankotsu al mismo tiempo que aventaba a unos nerds que estaban primero.
    —Mm si yo tambien- dijo inuyasha al mismo tiempo.
    —Pues yo este año me meteré a la yoga-. Dijo miroku con una sonrisa en su rostro
    —Pero si hay puras mujeres en ese deporte miroku.- dijo inuyasha, en unos segundos se dio cuenta de lo que había dicho.- claro, pero que obvio.
    —Por favor inuyasha, lo que importa es el crecimiento espiritual.- dijo miroku con una cara de cinico.
    ------------------------------------------fin de flash black--------------------------------------------------------
    —Mmm y bien kagome a que te meteras.- pregunto la caastaña al tiempo que veía todos los deportes a los que el alumnado podía inscribirse.
    —No lo se, ni siquiera pienso que sea buena idea esto de inscribirme en un deporte sango.- le dije algo insegura.
    —Mmm, ya se, pues que te parece si en la clase de gimnasia, haces las pruebas y en los deportes que seas mejor te inscribes.
    —Pues, estaría bien pero ya te dije que no soy buena para los deportes.- dije resignada.
    —O vamos tendras que ser buena en algo.- me dijo al mismo que me dedicaba una tierna sonrisa.
    —Justamente pasamos a recreo y después vamos a clase de gimnasia.- me dijo revisando su horario.
    —Que!, pero sango, es demasiado pronto, yo no podre.- caminábamos hacia el jardín central de la secundaria.
    —Calmate kagome, solo da lo mejor de ti.-
    Pasamos al jardín era demasiado grande todo estaba lleno de enormes arboles pero el mas frondoso estaba al centro, los demás eran arboles de cerezos, me hicieron recordar, de nuevo recordar, me pare a mirarlos,sus flores tan lindas de colores pastel, me recordaban mi duro pasado
    —Que kagome?- voltee a mirarla, su rostro desconcertado me despertó del duro trance.
    —Ah, disculpa, es que son muy bonitos verdad.- le dije con una sonrisa un poco forzada, por lo que me había dado cuenta mi rostro se había tensado.
    —Eh, pues si, segura que no te pasa algo.- me miro con mirada preocupada.
    —Claro que no, bueno que e parece si nos sentamos aquí.-
    Me acerto con la cabeza, por lo que nos sentamos debajo de la fresca sombra de aquel frondoso árbol de cerezos. No quería permanecer en silencio, ya que sango me seguiría preguntando si estaba bien, asi que decidi romperlo.
    —Ah, por cierto, muchas gracias por defenderme en la mañana.- voltee a mirarla.
    —no fue nada, además ya me e acostumbrado.- su rostro de torno irritable.
    —De que hablas?.- le pregunte extrañada.
    —Pues es que es mi primo kagome.- la mire aun extrañada.
    —Pero… pero si te coqueteo en la mañana sango…-le conteste conundida. Eso era completamente absurdo si es que eran primos.
    —Exacto, por eso es que lo hizo, quería ponerme nerviosa.- me contesto enojada.
    —Pues que cerdo…-
    —Que no te asombre kagome, el y miroku son mujeriegos de primera, todas las chicas quieren tener citas con ellos.- . note como su cara se tensaba y la bajo.
    —Pero porque, si tuvieran cerebro…-
    —Exacto, no lo tienen, solo se dejan llevar porque son los mas populares de la secundaria ellos dos y su grupito solo cortejan a las chicas estúpidas y superficiales.
    —Quieres decir, que solo juegan con ellas, no toman a ninguna encerio
    —Asi es.- las dos permanecimos en silencio por un minuto.
    —Por cierto kagome, tu de donde vienes.-me pregunta voltee a mirarla y dude un poco, pero como podía ocultárselo
    —pues veras…- no pude continuar, el toque de la campana resonó en toda la escuela.
    —Vamos a gimnasia.- me contesto, después se paro y me ayudo a levantarme.
    Fuimos directo a gimnasia donde se hallaban todos los grupos de segundo grado, fuimos a los vestidores y nos cambiamos con el uniforme de deporte. Consistía en unos shorts a dos cuartos del muslo color tinto y una blusa blanca de manga larga. Caminamos hacia los patios donde se eran realizadas las pruebas, la mayoría de los estudiantes permanecían ahí.
    —Muy bien jóvenes, la primer prueba será arquería femenil, todas las interesadas sigan a la profesora midoriko.-exclamo por el altavoz.
    —Que tal si tomamos esa prueba kagome.- me contesto sango.
    —Eh?, pero arquería, no estoy segura….- sango ya me había tomado por la mano para jalarme hacia la profesora.- sango.. pero…
    —Vinimos aquí para tomar pruebas no?, pues eso vamos a hacer.- me respondió ignorando mis jaloneos.
    Llegamos a donde estaba la profesora, era alta y delgada, calcularía de unos 28 años, por su espalda caída una larga cabellera negra, estaba vestida con ropa de templo, pero a mi parecer era muy hermosa.
    —Muy bien, veo que se han reunido bastantes.- exclamo amablemente. Después dio media vuelta y comenzó a caminar por lo que todos la seguimos.
    —Salimos hacia los pasillos para llegar a un campo lleno de blancos, la profesora se detuvo y continuo.
    —Bueno, comenzaremos por las pruebas, les voy a pedir que se formen horizontalmente hacia mi, si no les molesta, en estaturas.- nos anuncia al mismo tiempo que nos dedicaba una gran sonrisa.
    La larga fila de jóvenes nos comenzamos a formar, tal y como lo había pedido, yo y sango estábamos casi al ultimo, en estatura media.
    La joven profesora comenzó a caminar, a algunas, les susurraba al oído y a otras simplemente las ignoraba, se estaba acercando hacia mi, cuando los nervios se me subieron a la cabeza, le susurre algo a sango.
    —Que es esto?.- pronuncie a lo bajo
    —No lo se, tal vez solo nos esta poniendo a prueba.- me dijo copiando mi mismo tono
    No lo comprendía, ni una sola palabra, a que se refería sango.
    La profesora se detuvo en mi, las manos me sudaban, ella me miro fijamente. Después se acerco hacia mi.
    —Pon atención, y escucha todo lo que hay a tu alrededor.- después se alejo de mi y me sonrio. Cuando termino, se coloco de nuevo en el centro de la fila.
    —Bien, las chicas a las que no les dije nada pueden retirarse.- anuncio despreocupadamente y con amabilidad. En algunas se escucharon unos bufidos, otras soltaron un suspiro atrancado entre ellas yo, y otras simplemente se fueron resignadas.
    De las treinta chicas que eramos quedamos solo siete, una vez que reino el silencio de nuevo la profesora continuo.
    —Bueno, chicas felicitaciones, estan en el curso de arqueria .- anuncio alegremente.
    —Eso.- el silencio lo interrumpió otra voz.- eso era, quiere decir que esas eran las pruebas.- dijo una chica, de entre las 7.
    —Pues claro, como creían- exclamo la profesora alegremente.- bueno, les voy a pedir que me den sus nombres para que se puedan retirar.- dijo tomando un bolígrafo y una libreta.
    Todas las chicas le dijimos nuestros nombres al cabo de un rato.
    —Por ahora, eso seria todo, las espero mañana, puntuales por favor.- nos anuncio otra vez con una sonrisa en su rostro.
    Todas nos dirigimos de nuevo a los deportes, donde pude ver a sango de entre la multitud.
    —sango, por aquí.- dije entrecortadamente. Ella dio media vuelta y me sonrio.
    —Ah, kagome, como te fue?.- me pregunto emocionada.
    —Estoy dentro.- le conteste.
    —Genial, yo hice la prueba en artes marciales y entre.- me dijo con estrellas en los ojos
    —Encerio, que bien.- le conteste algo desconcertada.- no sabia que te gustaban las artes marciales.-
    Si me encantan.- me respondió.- bueno, ahora que te parece si hacemos las pruebas de gimnasia.
    —Eh, pues, es que sango..
    —Vamos.- me ignoro y me arrastro nuevamente hacia el gimnacio, donde ya todo estaba instalado para las pruebas. Un profesor nos vio.
    —Ah, señoritas vienen a la prueba de gimnasia.- nos pregunto desconcertado.
    —Pues es que nosotras ……- estaba apunto de negarme cuando sango tubo que abrir su gran bocota.
    —Si, las dos.- recalco esa maldita palabra “dos”
    —Bien entonces vengan por aquí, tomen su estatura y fórmense donde les corresponde.-
    —Creo que me suena a manada lo que dijiste sango.- la fulmine
    —Y no escuchaste mal kagome.- me dijo satisfactoria por su acción.
    Nos formamos y el profesor nos tomo nuestros nombres, para luego llamarnos a realizar la prueba, las primeras en ser llamadas lo hicieron sin dificultad alguna, mis piernas comenzaron a temblar de solor ver la gran cantidad de obstáculos y piruetas que teníamos que hacer, fue el turno de sango y realizo todo perfectamente, incluso aseguraría que mejor que todas las que habían pasado, recibió un asentimiento del profesor y un aplauso de las chicas. El silencio retorno en el gimnasio.
    —Higurashi kagome.- pronuncio claramente, para mi perecer.
    —Animo kagome, tu puedes.- me susurro sango.
    —Comenze a caminar hacia la serie de obstáculos, trate de normalizar mi respiración y di un leve suspiro, comenze a correr………..
    --------------------------------------------------flash black--------------------------------------------------------
    Un escandaloso ruido provenía de una de las aulas del tercer grado de aquella gran escuela shikon, era el aula 13 por supuesto no había ningún profesor que recobrara el orden. En el interior, algunas parejas aprovechaban para degustar el amor adolescente o como se diría popularmente “faje”, algunos otros aprovechan para realizar sus riñas.
    —Oye inuyasha ven a ver esto, bankotsu esta peleando con jacotsu.- exclamo el ojiazul desde la escandalosa riña donde solo se oian gritos como “pelea”, o “dale en su madre”.
    —Keh, esas estúpidas peleas ya me tienen aburrido, además estoy guardando energias para callarle la boca a ese idiota de kouga.- pronuncio el ojidorado.
    —Hombre, pero si solo te la has pasado sentado ahí como no ibas a estar aburrido.- le comento el ojiazul.
    El ojidorados abrió los ojos en gesto de molestia, después se rasco un poco la nariz, y se bajo de aquella mesa en la que estaba sentado.
    —Vale, tienes razón, vamos a echar un vistazo a la escuela miroku.- dijo poniendo las manos en los bolsos a lo que el ojiazul lo siguió resignado.
    —Por cierto, ahora que me acuerdo, no iban a hacerse las pruebas para deportes ahora, para los de segundo y primer grado.- dijo rascándose la cabeza el ojiazul.
    —Porque no vamos a echar un vistazo puede que consigamos algo divertido.- exclamo con una sonrisa socarrona el ojidorados.
    ---------------------------------------fin de flash black-----------------------------------------------------------
    La cabeza me dolia, sentía punzadas en la muñeca sin contar que sentía mi tobillo ardiendo. Abri un poco los ojos y trate de pararme torpemente, todas aquellas personas a mi alrededor me hacían sentir como una atracción de circo si no fuera porque sus semblantes desembonaban. A mi lado se encontraba sango con un gesto de preocupación en su rostro, y también estaba el profesor incado excaminando mi tobillo. Lo movio un poco y una punzada hizo que mi cara hiciera un pequeño gesto de dolor.
    —Te lo torciste, lo mejor será que te lleven a la enfermería.-me anuncio.
    —No, estoy bien, solo me lo doble, nada mas.- lo ignore y de nuevo trate de ponerme en pie pero ese maldito tabillo volvió a punzarme.
    —Nada de eso kagome, yo te llevare.- me dijo sango aun preocupada.
    —Tu sola no podras, y son puras mujeres será mejor que llame a …..- el profesor giro hacia la entrada del gimnacio, no pude ver lo que había mirado ya que estaba en el suelo y las chicas no me dejaban ver.- oigan ustedes dos vengan para aca.- grito, esto comenzaba a asustarme.
    De entre las chicas, por fin pude ver, dos chicos, llegaron hacia donde estaba el profesor, me di cuenta, era inuyasha, se paso la mano por el cabello y llego con una expresión de molestia. Lo acompañaba solo uno de sus amigos, el llamado miroku, quien me miro y después llamo la atención de inuyasha, quien por fin giro mirarme, su expresión cambio.
    —No hace falta, me puedo apoyar en sango, tampoco soy paralitica.- me queje.
    —Deja la modestia higurashi, si haces esfuerzos ese tobillo se puede poner aun peor.- voltee a mirarlo con amargura y después desvie la mirada.- taisho y uzumaki lleven a la señorita higurashi a la enfermería.
    —Voltee a lanzarle una mirada a sango de ayuda.
    —Yo voy.- dijo ayudándome a pararme.
    —Se olvida de las pruebas señorita miyatzu.- maldito profesor comenzaba a odiarlo.
    —Yo me encargo, no hace falta que vengas miroku.- todos volteamos a verlo, inuyasha por fin había hablado, dio pasos hacia mi después se agacho y me tomo por el costado, su otra mano tomo la ultima parte de mi muslo, para luego levantarme con suma facilidad.
    Pude oir algunos murmullos, y de repende todas me miraban con resentimiento, desvie mi cabeza y cuando por fin salimos del gimnacio no había nadie en los pasillos, ya que todos se encontraban en clase.
    —Cuidado con lo que tocas.- le dije aun sin mirarlo, seguro que lo aprovecharía para ponerme nerviosa.
    —Keh, en lugar de enojarte deberías agradecerme, que seria de una distraída como tu si yo no estuviera cerca.- dijo engreídamente.
    —Estaría mucho mejor.- le conteste enojada.
    —Jah, claro, especialmente para caminar.- me dijo con gesto burlon.
    —Porque me molestas, yo ati ni te conozco.- le conteste.
    —Yo?, si eres tu la que no quita esa cara tan fea.-
    —Ya basta, suéltame.- lo empuje y forceje con mi otra pierna cuando me solto, me apoye en la pared.
    —Yo ire sola, no te necesito.-
    —Ajajaj, a si?,
    —claro.
    —Eres una tonta, ni siquiera sabes donde esta la enfermería.- me detuve,
    —Preguntare, no eres el único que sabe donde esta la enfermería
    —Si, como hay tanta gente en el pasillo.-
    Lo ignore, sabia que tenia razón pero no le iba a dar el maldito gusto.
    —Eres una terca.- vino hacia mi y me cargo de nuevo forceje todo lo que pude cuando lo recordé, lo había olvidado por completo, el y kouga iban a pelear, hoy.-
    —Oye, todavía piensas pelear con… con kouga.- por fin lo mire, el también lo hizo sus ojos color ambar me miraron con confusión pero después comenzó a reir.
    —Se puede saber que es tan gracioso.- le dije tratando de no gritarle
    —No me digas que te preocupa.- me dijo riendo entre dientes.
    —Porque no me preocuparía.- le dije de nuevo desviando la cara.
    —Peleare con kouga quieras o no, esto no te concierne.- me detuve a pensar, como demonios iba a interrumpir una estúpida pelea de dos orgullosos, eso si que era difícil.
    —Claro que me concierne.- pronuncie en voz baja casi como susurro a lo que me resulto extraño que el reaccionara, poniéndose cada vez mas tenso, ocasionando que me apretara con sus duros brazos un poco mas.
    —Esta es la enfermería, si no eres tan inútil podras entrar tu sola.- me había parecido milagrosamente corto el recorrido, su voz sono fría y seca, me solto yo diría toscamente por lo que di un traspiés y me sujete de la pared.
    —Que demonios te pasa.- le pregunte desconcertada y furiosa.
    —Desde cuando me hablas asi?.-
    —Desde que se me pega la gana idiota.- le conteste furiosa, primero me trata cínicamente y ahora me insulta y me deja caer?, parpadee y el estaba muy cerca de mi, tomandome de las muñecas aprisionándome hacia la pared.
    —Que has dicho?.- su mirada busco la mia, pero no era la de antes, su mirada parecía dorada, su rostro se hizo mas tenso, trate de no mostrar temor, pero no podía, mis piernas temblaban mas aun con mi tobillo dañado, en cualquier momento podría caerme, sentí lagrimeos en mis ojos.- zorrita, conmigo no se juega.- pronuncio lentamente. Mis ojos se cerraron con fuerza, cuando sentía su respiración sobre mi voca......


    bueno espero ke les alla gustado y sigan apoyandome en mi historia *-^
    sayo ^^




     
  10.  
    zayreth

    zayreth Usuario común

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    Escritora
    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    ola!

    dios que idiota es Inuyasha como que decirle zorrita que le pasa :( es un tonto
    a ya me cayo mal je je pobre de Kagome aparte tiene lastimado su tobillo bua
    es un tonto, bueno me gusto la continuación esta muy buena, pero te tardaste
    mucho en ponerla, bueno espero y pongas la continuación pronto, bueno ya me
    voy
    adios
    cuidate, besos
     
  11.  
    NutS

    NutS Entusiasta

    Acuario
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    4 Abril 2009
    Mensajes:
    72
    Pluma de
    Escritora
    Re: tu mirada es un puente a mi pasado

    hola¡¡¡

    me encanto la conti
    muy genial jeje
    pobre kagome que se cae jajaj
    que onda ese inu como trata así a kagome
    que se trae ?...
    espero la conti ^^

    IxK NutS :vacabaila:
     
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