TerceraDos se dice que es el número de la felicidadque la pena, o dolor, quizás ansiedadtodo lo borra y calla con un soplido de amor.Pero en este juego hay tres, y mucho horror.Besos a escondidas,caricias suicidas.De pronto aquella que era feliz, se condenóimaginó que el amor no se desmoronó.Sin embargo, aquel tango no la incluíaes más, la melodía no la quería.¿Acaso no sabe que no dejará de ser la otra?Es que no aprende que las caricias compartidasson una muestra de asquerosa piedady con ella crece su indeseada soledad.El deseo de tenerlo sólo para sí,crece.Sus lágrimas y ruegos ya no hacen efecto.Es que nada cambiará por el momento.Ingenua, tonta, desvalida y desgraciada,Su cercanía no es más que autodestrucción.Los besos hacen crecer a la dura traición.¿Lo dejarás?¿Lo olvidarás?Responde rápido tercera danzanteporque las rosas rojas de tu vidaDejarán caer sus pétalosTe verás vieja y sola ante tus suspirosy él con sus libres respirosquedará.Elije:¿Libertad o sufrimiento constante?Tres se dice que es el número de la perfecciónpero para ti, dulce damisela es la perdición.
Si, nada mala...Creo que en mis expectativas me dicen que tu poema es un especie de escrito que tiene talento por el que muchos obtendrán duda,Así que fue muy bueno me gusto mucho.Además la parte donde le diste gran aclaraciones fueron las que más me emocionaron como: