Crepúsculo Te entregué mi eternidad. JasperxAlice

Te entregué mi eternidad. JasperxAlice

Se los dejo, subí 2 drabbles en originas & NAAADIE me dejó un comentario :aww: ni siquiera para lanzarme tomates xD






La noche parecía tan cerrada sobre mí, me sentía diminuto ante aquel inmenso cielo salpicado de estrellas que no hacían más que recordarme sus dulces ojos ¿Qué es lo peor de fallarle a Alice? Que me recibirá con los brazos más abiertos que antes, con los besos más cálidos que nunca y las palabras más hermosas diciéndome que me ama. No me lo merezco solo soy un asesino, solo sirvo para matar. Por eso me voy, porque este dolor que le causo es el último
Una noche como está la tuve entre mis brazos, una noche como está la besé con todo el amor que no creí posible sentir. Una noche como esta le juré amor eterno… le entregué mi eternidad. ¿Con que ojos voy a verla? ¿Estos? ¿Inyectados en sangre? No puedo verla. No puedo tocar a la mujer que amo si con esas mismas manos he matado. No puedo ni siquiera volver a sentir su aroma
Camino envuelto por una suave brisa digna de la madrugada que parece atormentarme con el dulce aroma de Alice…
-¡JASPER! – gritó tomándome del brazo
-No me toques – gemí.
En cambio ella acunó mi cara entre sus manos y me miró a los ojos profundamente
-No hace falta que te lo diga. Te amo Jasper Hale
Pasó uno de sus dedos por mis labios limpiando la sangre, sentí asco de mi por permitir si quiera que me tocara
-Te amo – dije con la voz ronca y sin poder enfrentarme a su mirada – pero te mereces algo mejor que yo. Me voy
-No – musitó con la voz ahogada – no necesito nada más que tu
-Alice, ya no puedo hacerte daño
Me enfrenté con su mirada, ojala pudiera llorar, ojala pudiera enterrarme en su pecho y llorar como un niño…
-Te amo Jasper, por encima de todo – repitió ¿No se cansaba? ¿Por qué no me odiaba? Era lo único que me merecía
Me besó tiernamente… luché un poco pero no podía resistirme, me besó como si no hubiese pasado nada, como si no hubiese matado a un inocente y no me di cuenta hasta ese momento que no necesitaba nada más que a Alice que este amor no cabía en ninguna canción, que los besos eran escasos para demostrarlo y las palabras parecían reflejos tenues de lo que sentía.
Tomó una de mis manos poniéndola en su pecho, donde debería palpitar un corazón
-Tal vez en mi corazón no hay vida. Pero siempre estarás ahí – susurró meciéndome como niño pequeño – siempre – juró
Deslicé mis manos hasta su cintura pegándola a mí, pegué mí frente a la suya y la besé tibiamente
-Siempre seré tuyo…
-Siempre seré tuya – finalizó fundiendo nuestras miradas