One-shot de Naruto - Taxi [ShikaTema Song-fic]

Historia de un taxista.

Otra vez, otra vez, yo trató de llegar temprano a la casa, pero ella… siempre es así, trató de hacer un tiempo para poder verla y nunca esta.

Salí, para ver si ya había llegado… si, ahí estaba, con su falda morada y blusa holgada. Mi mujer, como siempre, a las 9:56 de la noche, se acerco a mí, pero estaba tan enojado que no la recibí con un beso. Ella me vio mientras yo me subía al taxi, la mire por última vez, ella nada más me miraba mientras pasaba sus dedos en su larga melena rubia y sus ojos azules me comían.

Me despedí con la mano y arranque el taxi, no se adonde me dirigía, pero… no la quería ver, por ahora no. Siempre era lo mismo, hago un tiempo para verla y pasar un tiempo con ella antes de dormir y ¿Qué hace ella? Llego y no está. Por ahora no pensaré en eso, es demasiado problemático, pero mi madre me advirtió, me dijo: ``Ne te cases ´´, pero yo no le hice caso, yo he ese momento amaba ciegamente a Ino…

Ya pasaron 4 minutos desde que me fui de m casa, no tengo ni la menor idea de a donde me dirijo y pensar en ello es muy problemático.

Eran las diez de la noche, piloteaba mi nave.​

Era mi taxi un Volkswagen​

Del año 68​

Era un día de esos malos,​

Donde no hubo pasaje.​

Las lentejuelas de un traje, ​

Me hicieron la parada.​

Era una rubia preciosa,​

Llevaba minifalda.​

El escote en su espalda,​

Llegaba justo a la gloria.​

Yo no esperaba esto, una hermosa rubia, a simple vista muy problemática, pero eso no le quitaba lo hermosa, se sube al taxi. Le pregunte a donde quería que la llevara, me respondió amablemente y con la voz triste que a donde fuera, no le importaba, pero no quería estar ahí, por ahora no.

Yo nada más traté de no mirar su bello cuerpo, recordándome que, aunque sea problemático, soy casado y debo serle fiel a mi mujer.

Una lágrima negra rondaba en su mejilla.​

Mientras que el retrovisor decía:​

Ve que pantorrillas…​

Yo vi un poco máaas.​

Eran las diez y cuarenta zigzagueaba en reforma.
Me dijo "me llamo Temari"
mientras cruzaba la pierna.
Saco un cigarro algo extraño de esos que te dan risa.
Le ofrecí fuego de prisa
me temblaba la mano​

–Puedo preguntar ¿Por qué llora? –Le pregunte amablemente, de seguro no me contestara, se lo pregunte hace más de treinta segundos, en los cuales ella me ignoro.

–Esto no debería decirlo, es privado –Dijo con los ojos cerrados –. Pero tengo que desahogarme con alguien, por un tipo, que se cree que por rico, puede venir a engañarme…

–No caiga usted por amores, debe de levantarse –Le dije, viéndola de rejo por el retrovisor –. Cuente con un servidor si lo que quiere es vengarse –Y me sonrió.

¿Qué es lo que hace un taxista seduciendo a la vida?
¿Que es lo que hace un taxista construyendo una herida?
¿Que es lo que hace un taxista enfrente de una dama?
¿Que es lo que hace un taxista con sus sueños de cama?​

Me pregunte...​

–Lo vi abrazando y besando a una humilde muchacha –Me dijo –. Es de clase muy sencilla, lo note por la facha.

Nada más me sonreía y yo le regresaba el gesto. Dios, en verdad es hermosa esta mujer, no cabe duda pero… yo soy casado y no debo fijarme tanto en su belleza de mujer, aparte, todo esto es demasiado problemático. También debí hacerle cao a mi madre de estudiar y poner más esfuerzo a todo lo que hago, así no tendría que ser taxista y darme lujos con dinero. Pero, en fi, paso, y por algo debió ser. Aunque hay veces que me pregunto qué pasaría si no me hubiera casado con Ino tan joven… todo comenzó por un supuesto embarazo, semana después descubrimos que era una falsa alarma.

Pero, si, hubiera pasado tanto si no me hubiera casado con tan sólo 23 años… pero ya no hay vuelta atrás, soy feliz, ella también. O, al menos, eso aparentamos ser.

Me sonreía en el espejo y se sentaba de lado.
Yo estaba idiotizado,
con el espejo empañado. ​

​

–Doble la esquina iremos hasta mi casa –Me digo con una sonrisa en los labios –. Después de un par de tequilas, veremos qué es lo que pasa.

Todo esto era realmente problemático, soy hombre casado y no me puedo dar el lujo de andar con una hermosa rubia, la verdad, seré sincero, hace tiempo que ya no siento nada por Ino, ni atracción física, pero no por eso le seré infiel. No, eso no va conmigo, por más problemático que sea.

En fin, el que paga manda, la lleve a su casa. Mi intención era buena, llevarla a casa, dejarla ahí y regresarme con mi mujer a arreglar la pelea de hace unos minutos atrás. Simple, pero las cosas no siempre salen como yo espero. Me tomo de la mano y me guio a su hogar, efectivamente, tomamos.

Platicamos un buen rato, reíamos, parecíamos amigos de toda la vida. Nunca antes me había sentido así, ni siquiera con Ino, que es mi esposa. La verdad, todo estuvo bien, hasta que ella se acerco a mí, y me beso. Primero fue tierno, luego empezamos a lamer nuestros labios inferiores, hasta que nuestras lenguas terminaron en una lucha a muerte.

Para que describir lo que hicimos en la alfombra.​

Si basta con resumir​

Que le bese hasta la sombra.​

Y un poco máaaas.​

Todo era problemático, pero en fin, como si no hubiera pasado nada empezamos a platicar como amigos que llevan demasiado sin verse.

–No se sienta usted sola, sufro aunque no es lo mismo. Mi mujer y mi horario, han abierto un abismo.

Problemático, esa era la palabra más adecuada. Mientras yo hablo, ella le da un sorbo a su bebida y me mira, escucha y comprende. Difícil creer que esa hermosa mujer es tres años mayor, claro, me lo dijo de camino a su casa. Pero, si, no parecía de 33, más bien, parecía menor que yo, aparte de ser más bajita, su cuerpo l ayudaba a verse joven y no hablar de su hermoso rostro, todo esto es problemático, y no quiero que acabe.

Como se sufre en ambos lados,​

De las clases sociales.​

Usted sufre en su mansión,​

Yo sufro en los arrabales.​

Me miro un rato con cariño, luego me digo que nos fuéramos a divertir un poco, para dejar el estrés y tristeza. Se hizo en el pelo una cola, y nos dirigimos al bar donde estaba.

En el taxi, ella ahora se sentó al lado mio, yo la miraba de reojo, ella era perfecta. Todo lo que mi madre hubiera querido en una mujer para mi, lamentablemente, me case muy chico y sin pensar. Viví 10 años de horrible matrimonio, ya era hora de darme un descanso, aunque no me hiciera feliz el echo de serle infiel a Ino, pero… lo que antes era amor, ahora es lastima, ara ambos.

Llegamos al bar y entramos.

Entramos precisamente,​

Él abrazaba una chica.​

Mira que es grane el destino,​

Y esta ciudad es chica.​

Era mi mujer.​

Mire al hombre moreno, alto, pero no más fuerte que yo. Luego vi a su compañera una rubia, de ojos azules… mi mujer. Eso explicaba todo, el porque no estaba alas 9 de la noche y el porque la distancia en la relación.

¿Que es lo que hace un taxista seduciendo a la vida?
¿Que es lo que hace un taxista construyendo una herida?
¿Que es lo que hace un taxista cuando un caballero
coincide con su mujer en horario y esmero?
me pregunte...​

Tome la mano de Temari y salimos de ahí. Ella acariciaba mi coleta que, para entonces, ya estaba desecha, la rubia de mi lado nada más tuvo que desatarlo, eso hizo. Cuando mi cabello estuvo suelto, ella acaricio con ternura, yo nada más le regalaba una sonrisa de lado.

La lleve a su casa, nos despedimos de beso y me dirigí a mi hogar, si es que así se le puede llamar al infierno.

Al llegar, ella estaba ahí, si que es rápida, se acercó e intento besarme, yo la ignore, lo que menos quería ahora era verla y sentirla cerca de mi, ya no más.

Me acosté en mi cama, pensando, este día fue muy problemático y apuesto a que así seguirán los días, sin más, cerré los ojos y me dormí, a esperar el mañana.

Desde aquella noche ellos juegan a engañarnos.
Se ven en el mismo bar...​

Al día siguiente lo más temprano que pude me levante, que problemático, me dirigí al taxi y me fui de la casa. Al cuarto para las nueve me dirigí a un lugar en especial…

– ¡Taxi!

Y la rubia, para el taxi, siempre a las diez (je)
en el mismo lugar.​

Abrí la puerta y ella se sentó al lado mío, si Ino es feliz con alguien que no soy yo, no le veo lo malo a serlo con alguien que no sea ella. Si bien, Temari es rubia y más problemática, tal vez, ella, si me ame, cosa que Ino, nunca hizo en verdad…

–Donde siempre, por favor.

–Donde mande… Luego, ella, me beso.