Sin ti Bueno este un poquito distinto al anterior. Es mas.... ya lo veran jaja xP... por otro lado gracias a Lupaa (Cyannara) y Mikuu (Miikuuz) por leerlo y ayudarme un poquito mucho en este one shot que estaba pensado para ser drabble. Bueno sin mas espero que les guste. Sin ti Nunca supe cómo expresar lo que siento… o quizás sí pero un tremendo sentimiento de vergüenza y timidez me invade el cuerpo entero. Aunque generalmente, el miedo a su reacción es lo que más me aterra. Ella y yo somos vecinos de siempre, desde que tengo memoria nunca nos separamos. Es más baja que yo, más delgada, de cara muy linda y tierna. Su voz es suave al igual que dulce, sus ojos son lo que más me gustan porque muestran su pureza, lo que en verdad es ella, lo que siente, que jamás te ocultará algo. Sus rasgos son suaves y delicados al igual que todos sus movimientos. En verdad es muy hermosa… tanto, que parece un ángel. Ya hace poco he empezado a sentir otra cosa por ella y cómo es mi gran amiga no quiero perderla por lo que siento, por solamente ser rechazado y no saber si me volverá a hablar. Además nunca tuvo novio. A todo aquel que se le acercaba y le preguntaba lo rechazaba al segundo, eso es lo que más me aterra. Ahora, sentado en mi pequeño escritorio de mí habitación, veo el interior de su pieza por mi venta abierta mientras el dulce viento me refrescaba. Aunque no se veía mucho, ya que las luces estaban apagadas, veía su solitario escritorio apenas alumbrado por la luna. Viéndolo, me puse a pensar en todos es momentos felices que hemos pasado desde que nos conocimos hasta ahora. En ese pensamiento me mantuve por minutos pero de repente las luces se encendieron. Era ella que entraba a su habitación tirando su bolso de mano, el sombrero y el abrigo a la cama. Sin más espera ella se empieza a desvestir y con acto rápido ella me ve, grita y colorada corre las cortinas. Por mi parte; un poco alegre emito una leve sonrisa de gracia cerrando los ojos y a los segundos una almohada me pega en la cara. —¡¿Qué veías?!— grita ella desde su ventana un poco furiosa pero a la vez en tono de broma. —Nada, nada… solamente tus… —antes de que pudiera terminar mi oración una lluvia de objetos empezaron a entrar misteriosamente en mi cuarto. —Okey… más te vale que no lo recuerdes —me aclaró con un tono medio amenazador. —Además, te tengo que decir algo —dijo cambiando repentinamente su humor y bien seria —. Mis padres tienen un trabajo por un tiempo en otro país y me mudaré —terminó de explicarme deprimida. Unos segundos pasaron entre que terminó de hablar y asimilé las palabras. —¡¿Cómo que te vas?! ¡¿cuando?! —le pregunté nervioso, desesperado por no poderle haberle dicho lo que sentía y que no la vería por quien sabe cuanto. —Mañana a la noche sale el barco. Te estaré esperando para despedirme —fue lo último que dijo antes de cerrar las ventanas, correr las cortinas, apagar la luz e irse a dormir. Yo me quedé duro sobre la ventana. No podía ir mañana y ver cómo se me iba así cómo si nada y menos sin que sepa mis sentimientos. Lo decidí mientras dormía. Mañana a la mañana iría a buscarla para salir todo el día con ella. Y eso hice. Pasé por su casa bien temprano y me atendió su madre. Me dijo que se había ido sola, sin decir nada, solamente que volvería a la noche. Triste me encerré en mi cuarto, me puse a llorar, no sabía qué hacer. Quería una respuesta, una solución a mi problema pero nunca imaginé que eso llegaría. Un pequeño viento, cómo arte de magia, trajo el pequeño papelito que me había dado la madre. Cuando se apoyó sobre mi almohada lo levanté, lo abrí y lo leí. “Muelle ocho a las veinte horas”. Estaba decidido, a las veinte horas iría a ese muelle. Llegué media hora antes. En mi casa no podía esperar más, estaba inquieto, molesto. Ahora no veía llegar el momento en que ella llegue. Y ésta media hora se me hizo un infierno. No paraba de ver el reloj cada minuto, segundo, centésima que pasaba hasta que al fin llegó. Lucía un vestido rosa pálido, con el calzado combinándole, las uñas pinadas y bien peinada. Pero parecía triste. Llegó a mí. Se paró justo en frente mío mirándome fijamente a los ojos. Parecía cómo si ella esperara algo de mí, cómo si en verdad supiera que le tenía que contar algo importante o quizás solamente ella esperaba eso sin saber que en verdad le quería hacer. Al escuchar a los padres que la esperaban abordo y que no se tardara tanto la sujeté de las manos rápidamente y agaché mi cabeza. —Te voy a extrañar —le dije firme pero en un tono bajo. Parecía que no me había escuchado y aunque no era exactamente lo que quería decir estaba feliz. Por fin dije algo a otra persona de lo que siento por ella. Al no escuchar respuesta levanté la cabeza y la vi. Tenía los ojos llenos de lágrimas a punto de brotar de sus ojos y salir con toda libertad. —Tonto —me dijo limpiándose los ojos con los dedos. De un impulso la agarré y la abrasé fuertemente para que no dijera nada, para que no se vaya, para que ese momento dure para siempre y nunca se aleje de mi lado. La solté un poco, la miré y sin pensarlo dos veces la besé apasionadamente. Nos quedamos así por unos segundos para luego decirle… —En verdad… te amo —susurré mirándola fijamente. —Te diste tu tiempo —me contestó con una leve sonrisa y con los ojos iluminados—, Yo también te amo —concluyó para luego besarnos otra vez y quedarnos bajo la luz de la luna por un buen tiempo.
Re: Sin ti ¡Josecito! :'3 Bueno, me encantó sinceramente. La trama estuvo interesante, además, de que demuestra que es mejor perder el miedo a perder a la persona que uno quiere ¿no? Bueno, me encanta cómo escribís, es medio raro pero... no sé; me gusta. La narración estuvo interesante, sencilla; fácil de leer pero para nada aburrida. Muy linda la historia ¡he! Espero que vuelvas a publicar otro, che :'3 Espero leer más trabajos tuyos (Osinoveremoslaformadeconvencerteparaquepubliques xD) Bye~Bye :3 PD: Asdf; me había olvidado esto. xD No me agradezcas *-*
Re: Sin ti JoseIto... Estuvo hermoso. Una trama cotidiana pero encantadora. Siempre escribiendo cosas de este tipo, x'D Te digo que te harás famoso por escribir así!. Debes decir lo que debes decir, pero en su momento, no esperes a que se muera para decírselo (? Mika tiene razón: ¡Y yo estaré con ella! xD Nos vemos, Te cuidas,