Dejaría todo para vivir eternamente en Tu Presencia. Sin que nada ni nadie me separe de Tu Amor. Sin que nada ni nadie más importe. Solo Tú, Señor. Daría todo, aunque nada me pertenece. Porque lo que fui, lo que he sido y lo que soy es por ti. Porque sin ti nada soy ni nada puedo ser. Solo por Tu Gracia puedo ser salva. No por mis méritos, sino por los tuyos. Porque no hay justo ni aun uno. Porque no hay nadie bueno. Solo Tú, Señor. Porque cielo y tierra pasarán, mas Tu Palabra nunca pasará. Porque Tú eres Rey de Reyes y Señor de Señores. Porque Tú eres el Camino, la Verdad y la Vida. Porque en ningún otro hay salvación. Porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.