Relatos mentales

La realidad supera a la ficción, esa es una frase totalmente conocida, ahora veras porque. Antes de leer esta historia quiero advertirte que el contenido que se encuentra aqui es ficción, pero la enfermedad mental no lo es, es cien por ciento real y las personas que lo viven bajan los escalones hacia la locura, si eres una persona ultrasensible te pido que quites esta historia y que no vuelvas a intentar leerla.

La enfermedad que representa este relato corto es simplemente horrida, se le llama Insomnio Familiar Fatal (IFF). Esta enfermedad mental consiste en la pérdida total de la capacidad de dormir y sin más preámbulo comencemos.

Alex es una joven de 21 años con un carácter simple, sociable e increíblemente carismática, estudia leyes y sus calificaciones son sobresalientes, su vida es plena y agradable, hace unos meses dio uno de los pasos más grandes para independizarse, ella con su trabajo de medio tiempo logro conseguir pagar un apartamento mientras estudia, su novio es un año mayor que ella y por el momento vive sin problemas.

Un dia Alex caminaba hacia su trabajo, una pequeña empresa en la que ella trabajaba de secretaria desde la 1 Pm hasta las 9 Pm, cada dia para ella es un sacrificio entre el estudio y el trabajo pero ese es el estilo de vida que eligió, ese dia iba retrasada ya que debió de asistir a una pequeña reunión en la universidad y mientras corría a su trabajo choco con un hombre y ella cayó al suelo, el hombre solo la observo en el suelo mientras ella recogía sus pertenencias en el suelo, luego sin ningún modal continuo su camino mientras reía a carcajadas.

Ella se paró y siguió su camino, llego con veinte minutos de retraso pero ella explico lo sucedido y su jefe le dijo que al ser su primera ocasión con problemas en un año, ella le dio las gracias y se dispuso a trabajar, organizo su escritorio y comenzó a atender las llamadas telefónicas y a hablar sobre la repartición de los productos que la empresa a la que trabaja ofrece.

En un momento entre las 4 y las 5 Pm el teléfono sonó y al contestar nadie respondió, Alex pregunto:

-Alex: Buenas tardes quien habla.

Nadie respondió el teléfono y siguió así unos quince segundos, luego ella sentía un poco de pavor y colgó, el teléfono sonó de nuevo y esta vez con pavor ella escucho una voz de un hombre mayor que le persiguió durante todo el dia:

Extraño: Te he estado observando, sé que nos divertiremos esta noche.

Alex colgó el teléfono de inmediato y ella se sentó en su silla y tomo un largo y tenso respiro mientras decía:

Alex: Todo está bien, era número equivocado.

Llegaron las 9 Pm y era momento para que Alex se retirara de su lugar de trabajo, ella salió del edificio y ya que su hogar está a unos 20 minutos de su lugar de trabajo ella acostumbra a caminar a casa. Ella veía que la calle estaba totalmente vacía pero algo la perturbaba, sentía que estaba siendo observada, comenzó a acelerar el paso, y antes de llegar a su apartamento a unos 100 metros un hombre estaba parado en una pared de un edificio, el camino frente a ella.

El hombre se comenzó a reír y ella intento dar otro paso pero al intentarlo el hombre soltó un puñetazo e hizo que Alex retrocediera casi dos metros tras el golpe, ella con sangre goteando de su nariz y con lágrimas clamo por ayuda pero nadie hacia ni siquiera un simple sonido, el tipo la tomo del cabello y en el callejón más cercano le dio una golpiza sin sentido y cuando sus intenciones eran más profundas e intentaba cruzar la frontera de agresión física a la agresión sexual un patrulla se parqueo frente al callejón y mientras ella gritaba del dolor el tipo intento escapar pero los policías lograron atrapar al tipo.

Alex paso días en el hospital, la golpiza fue horrida, sufrió contusiones, costillas rotas, moretones en muchas partes del cuerpo y perdió dientes, la paliza fue monstruosa, ella estuvo sedada durante días para no sentir dolor.

Días después ella logro salir del hospital, pero su vida no fue igual, al primer dia después de llegar del hospital ella vivió un dia normal pero el horror comenzó en la noche al descubrir que aunque ella intentaba cerrar los ojos, no conciliaba el sueño, ese dia paso despierta hasta la 1 am cuando se acostó en su cama casi a las 11.

Ella al dia siguiente pensó que al haber estado dormida tanto tiempo no tiene tanto deseo de dormir. Al medio de la clase ella sentía un leve deseo de dormir pero ella se empeñó en el catedrático dando clases así que ignoro el sueño, al terminar su jornada diaria ella se acostó casi a las 10:30 pero se volvió a llevar la sorpresa de no dormir hasta la 1:30 Am lo cual le fue indiferente.

Una semana después su rostro era pálido, sus ojos con ojeras remarcadas y cuando la gente le decía que dejara de trabajar tanto ella decía que no le quedaba de otra y continuaba su vida, tenía casi 14 días durmiendo de manera terrible, ese dia ella se acostó a las 10 Pm y se llevó la horrida sorpresa de no conciliar el sueño, vio como el sol salía, su mente, su cuerpo y su subconsciente estaba agotado ella no podía dormir.

Al dia siguiente ella estaba sola sentada en una banca almorzando antes de ir al trabajo, mientras almorzaba ella escuchaba a alguien llamarla pero al voltear nadie estaba llamándola, es más el patio estaba vacío.

Ella lo ignoro y siguió comiendo su refrigerio, esa noche ella se acostó en su cama pero no logro dormir y los próximos días tampoco lo logro, tenía casi 13 días seguidos sin dormir bien y 4 sin dormir.

Ella ignoro todo y seguía su vida pero cada dia era peor, al dia 19 ella recibe una llamada por teléfono.

-Su novio: Amor como este hoy.

-Alex: Ehh… Bien si bien, por qué motivo debería estar mal aunque no lo creas estoy perfectamente bien (hablo velozmente)

-Su novio: Alex relájate, no te entendí nada, que te sucede.

-Alex: Nada de nada no te preocupes.

-Alex: mejor iré a dormir un momento no te preocupes.

Al momento de decir eso ella colgó y se dispuso a dormir, pero el intento fue en vano.

Ella comenzó a halar su cabello con tanta fuerza que arrancaba mechas completas, lloraba, gritaba y pataleaba sin control.

Después de eso no hablo con nadie durante días, su aspecto empeoro, cada dia ella tomaba unas 10 pastillas para dormir pero no la ayudaron en nada, llevaba casi 10 días sin dormir, de pronto ella escucho en su departamento una voz llamándola.

Y vio sombras moverse ella comenzó a retroceder unos pasos por el susto, las sombras se acercaban a ella, escuchaba voces clamando su nombre y se tropezó con una silla y al caer vio cerro los ojos, levanto la mirada y frente a ella había una niñita, una niñita llorando, la niñita y la niñita exclamaba:

-Niñita:¿Por qué has dejado que me hagan esto? ¿Por qué no me defiendes?

Luego una sombra se acercó y una mano tomo del cabello a la niñita y mientras ella gritaba fue llevada a la cocina.

Alex entro y al ver la cocina grito y lloro del horror, las sombras masacraban a las niñas, habían niñas tiradas sangrando sin control, niñas sin brazos y piernas, niñas atadas con cuerdas y siendo abusadas, las niñas lloraban y gritaban de sufrimiento, luego eran arrojadas a un monte lleno de cadáveres, Alex seguí gritando horrorizada y salió gritando de su apartamento, su vecino salió a ayudarla pero este no vio nada al entrar y Alex lloraba fuera de su apartamento mientras otros vecinos la socorrían.

Esa misma noche fue a casa de sus padres, ellos preocupados organizaron su antiguo cuarto y lo prepararon para que pasara la noche ahí, cuando ella sentía que estaba a punto de caer en sueño sintió que algo tocaba su brazo y observo era la misma niñita, pero hoy no tenía ojos, eran huecos obscuros y negros con goteos de sangre.

Alex grito con todas sus fuerzas y al hacerlo sus músculos se tensaron y ya no podía gritar, no podía moverse y veía como los niños se acercaban, ella vio su antiguo escritorio y salto con todas sus fuerzas de la cama y antes que esta perdiera más la cabeza tomo una tijera larga y se cortó las muñecas, pero ella no dejaba de ver esos espectros, pero poco a poco comenzó a sentir un profundo sueño y antes de quedarse dormida vio como la niña le decía adiós con la palma de su mano.

 

La realidad supera a la ficción, esa es una frase totalmente conocida, ahora veras porque. Antes de leer esta historia quiero advertirte que el contenido que se encuentra aqui es ficción, pero la enfermedad mental no lo es, es cien por ciento real y las personas que lo viven bajan los escalones hacia la locura, si eres una persona ultrasensible te pido que quites esta historia y que no vuelvas a intentar leerla.

Hoy hablaremos sobre una horrenda enfermedad mental, es conocida como el síndrome de Cotard, pero, ¿En qué consiste? Simple es un trastorno en el que las personas creen que están muertos, además creen que su cuerpo se pudre.

Steven Anderson es un joven de 19 años, vive en Florida, cada dia es rutinario para él, trabaja en una pequeña tienda de antigüedades de su padre con la que es fácil mantener el ritmo y la vida de la familia de dos hijos, entre cajas con artículos viejos y el polvo que se acumula es fácil contraer alergias, asma y enfermedades de esa magnitud.

Un dia al salir de su turno diario los padres deciden llevar a Steven a cenar después de un arduo dia de trabajo, entre quejas y risas llegaron a una pequeña pero reconocida cafetería a pocos kilómetros de la tienda. Al llegar Steven pidió el mismo licuado de chocolate de siempre, la misma hamburguesa con patatas fritas y el mismo helado de postre.

Los padres de Steven le platicaron sobre lo bien que va la tienda y sobre lo mucho que se podrán expandir si continúan de tal manera, Steven es el posible heredero ya que es seis años mayor que su hermano así que por el momento es el único con dicha capacidad.

La noche crece desmesuradamente y se preocupan por la hora, son las 10 Pm y es hora de partir a casa y descansar, en el camino el padre de Steven le hablaba sobre un Cadillac que desea comprar pero que quiere un precio más cómodo para sacar mayor provecho del automóvil.

Mientras hablaban del tema la madre de Steven comento:

-Madre: Yo no creo prudente lo que haces, solo buscas llenar tus bolsillos y olvidas que aquí no solo es el dinero lo importante.

El padre de Steven de una manera tosca y molesta responde:

-Padre: Pues por este motivo cree este negocio, para llenar nuestros bolsillos y en veinte años no te ha faltado un techo o un plato de comida los tres tiempos y una merienda así que te exijo tener un poco más de respeto a mis decisiones.

La madre lo observo con furia y al escuchar eso su madre estallo en ira y exclamo fuertemente:

-Madre: En ese caso deberías llevarte tu negocio al infierno, me aburre pensar que solo piensas en dinero y dejes de lado el resto de tu vida.

El padre comenzó a hablar al mismo tiempo que ella y llego un punto en que no se lograba entender ya que los dos discutían en voz alta y no dejaban al otro hablar tranquilamente.

Steven intentaba calmar la tensión de la discusión y al ver que no funcionaba exclamo con toda su fuerza:

-Steven: Cállense ya ambos, son familia y parecen un par de perros y gatos callejeros peleando por un trozo de carne.

Sus padres no dejaron de discutir y cuando la discusión se tensó más su padre logro observa que estaba a unos pocos metros de chocar con una pared y antes de chocar giro el volante con todas sus fuerzas al lado izquierdo, al hacerlo chocaron de manera horizontal contra la pared, él y la madre de Steven estaban a salvo, pero, Steven estaba inconsciente y su frente sangraba sin control.

Los padres de Steven llamaron a una ambulancia. Su estado era crítico, se rompió tres costillas, una contusión en el cráneo, el cuello y su brazo izquierdo quedo hecho trizas, además de dos hemorragias internas.

El joven despertó después de varios días, pero, al despertar él se asustó y grito despavoridamente. Las enfermeras y el medico de turno corrieron a la habitación del joven no notaron nada mal, no vieron a nadie, no vieron que el estuviera en el piso, solo vieron a un joven gritando sin sentido.

Steven les gritaba de manera eufórica mientras lloraba sin control:

-Steven: Estoy muerto, ayúdenme, estoy muerto.

El doctor lo vio despavorido mientras intentaba explicarle a Steven que su condición era estable y que había logrado sobrevivir al accidente, pero Steven no cedía, el creía que estaba muerto.

Los días pasaron y cada dia Steven era sedado fuertemente para que no gritara y no molestara a otros pacientes, a las dos semanas después de estar hospitalizado dejaron que Steven saliera del hospital, pero al llegar a su hogar comenzó el horror.

Cada dia era un tormento para él, pero todo detono seis meses más tarde, cada dia Steven sentía que algo en su cuerpo no funcionaba y el seguía creyendo estar muerto. Una mañana él se despertó de golpe, sentía que le dolía el cuello, las lesione fueron graves así que el dolor no cesaría en tan solo 6 meses.

El corrió hacia el espejo y al ver horrorizado grito con toda la fuerza de su garganta y todo el oxígeno dentro de sus pulmones, el veía su piel demacrada y podrida, al abrir su camiseta y observarse en el espejo, el veía gusanos arrancar su piel como si fuesen trozos de corteza de árbol cayendo al suelo solo con tocarlos.

Sus padres entraron rápidamente a su habitación pero cuando el gritaba que había visto su cuerpo descomponerse ellos le dijeron que todo estaba bien y que él no está muerto.

El joven no paraba de gritar y de manera desenfrenada se escabullo de sus padres y corrió hasta salir de su hogar, al salir la gente en la calle lo observaba como a un demente.

Steven al notar las reacciones de cada persona comenzó a temblar y prácticamente se congelo en la calle, sus padres salieron, lo llevaron arrastrándolo hacia su cuarto y al llegar le obligaron a tomar unos calmantes y durmió durante horas, pero, al despertar lo primero que hizo fue verse al espejo pero esta ocasión logro contener el grito pero aun así esto no se terminó, el joven se arrojó al piso mientras lloraba y al caer junto al cayo el frasco de calmantes que estaban en el baño, Steven lloraba mientas observaba el frasco de calmantes, en ese momento tomo el frasco y sin medida comenzó a tomar cada una de las pastillas y cuando se terminó todas y cada una de las pastillas se levantó y encontró un bote enorme lleno de pastillas para dormir, esas drogas son generalmente horridas ya que arruinan tu cuerpo al cabo de unos años de consumirlas, pero Steven tomo 3 de un trago, luego otras y otras, después de varias comenzó a sentir mucho sueño y cayo lentamente en el suelo, el seguía un poco alterado antes de caer al suelo pero eso no lo detuvo al momento de chocar contra el suelo.

Unas horas más tarde, a eso de las 6 Pm, su madre preparo algo para que Steven pudiese comer y no tener que soportar tanto medicamento con el estómago vacío, pero al entrar no llego a sentir más que panico y desesperación, Steven se había rendido, Steven se había suicidado.

 

La realidad supera a la ficción, esa es una frase totalmente conocida, ahora veras porque. Antes de leer esta historia quiero advertirte que el contenido que se encuentra aqui es ficción, pero la enfermedad mental no lo es, es cien por ciento real y las personas que lo viven bajan los escalones hacia la locura, si eres una persona ultrasensible te pido que quites esta historia y que no vuelvas a intentar leerla.

La enfermedad mental de la que hablaremos en esta historia te pondrá los pelos de punta y te deseara jamás estar en los zapatos de aquellas personas las cuales sufren de este mal tan atroz. La autofagia es una enfermedad mental en la cual una persona siente la necesidad de amputarse dedos, manos y extremidades del cuerpo para tragárselos, es como ser un zombi de uno mismo, sin más preámbulo comencemos.

Un dia un pequeño niño de Nueva Zelanda se encontraba jugando con unas figuras de acción en su recamara, el niño de nombre Michael, el pequeño de tan solo 5 años disfrutaba jugar con sus figuras de acción cada dia luego de terminar sus deberes escolares y tomar una corta siesta.

Mientras jugaba su madre se acercó a preguntarle- Michael, ¿Qué juegas?- Michael no jugaba nada, el niño se aburrió y dejo los juguetes en el piso.

Michael estaba confundido y respondió - Nada mami, no he encontrado nada que jugar todavía.

Su madre le dio un abrazo y le respondió- Iré a lavar la ropa, encuentra algo que jugar y jugaremos juntos- El niño sonrió y asintió con la cabeza mientras su madre cerraba la puerta de su cuarto.

El pequeño tomo una de sus figuras de acción, la arrojo al no idear que jugar y al momento que la figura de acción choco con la pared una de sus piernas que aflojo, el niño al notarlo se acercó al juguete lo observo detenidamente, el niño tomo el juguete y le arranco la pierna que tenía floja, sintió mucho placer al hacerlo, arrojo la figura en repetidas ocasiones, le arranco cada una de las extremidades y al momento que no tenía más que arrancarle tomo otro juguete y repitió el acto hasta que su madre entro y furiosa de la situación regaño al niño intentando hacerle entender que nos juguetes debía cuidarlos, pero, dentro del niño un monstruo comenzaba a crecer.

El chiquillo a diario hacia los mismo con sus juguetes hasta que un dia sus padres se los decomisaron para que no volviera a estropearlos y que aprendiera a cuidarlos, pero, el pequeño se desesperó, comenzó a buscar a que sacarle las extremidades y de pronto, observo sus pequeñas manitas, sus deditos pequeños y el niño comenzó a halarse los dedos sin excito al cortarlos, el niño abrió su habitación, corrió hacia la cocina y al llegar las cosas con filo estaban fuera de su alcance, de pronto observo que dejaron unas tijeras en la mesa, las tomo. Su madre estaba acomodando la ropa en su habitación y de pronto escucho un grito arrasador, lleno de dolor y sufrimiento de su hijo, la madre corrió hasta la cocina y el horror llego a su corazón como latidos descontrolados, a su pequeño hijo le faltaba su dedo índice y su mano estaba cubierta en sangre, el área donde faltaba el dedo no dejaba de sangrar, mientras su madre trajo un pañuelo para limpiar la sangre y llamo a un doctor para atenderlo se llevó otro horror, el dedo de su pequeño no estaba, simplemente desapareció entre el charco de sangre sobre la mesa.

El doctor llego, curo la herida y vendo, pero, él también se llevó un susto al ver que el dedo desapareció, el doctor le pidió a los padres del pequeño que salieran de la habitación, él quería hablar con el pequeño, los padres salieron mientras las dudas los corroen, el doctor cerró la puerta.

El doctor se sentó de frente al niño y sin rodeos le pregunto con un tono frio y lleno de seriedad- ¿Dónde está el dedo que te falta?

Michael lo observo pero no le respondía nada, parecía estar asustado y lleno de horror por lo sucedido, pero, el doctor se impacientaba y pregunto nuevamente- ¿Dónde está el dedo que te falta?

El pequeño lo observo sin responder, el doctor suspiro con desesperación y frustración, pero, el niño levanto su mano y luego se tocó el estómago.

El doctor con una expresión de horror y nauseas salió rápidamente del cuarto, camino con el rostro pálido hacia los padres del pequeño y tomo un respiro mientras intentaba explicarle a los padres del pequeño lo que había sucedido, ellos reaccionaron de la peor manera, un susto prácticamente mortal, la madre lloro durante horas y todas las cosas con filo fueron guardadas en lugares altos para que el pequeño no volviese a hacer esa locura de nuevo, era vidente, esto podría volver a sucedes y es posible que suceda de nuevo.

Pero los años pasaron y no sucedía nada, el pequeño creció, termino la escuela y la universidad, comenzó a trabajar, pero, jamás olvido lo vivido, cada dia de su vida el deseo de amputarse miembros crecía desmesuradamente.

Un dia a sus 25 años Michael llego a un consultorio, estaba completamente saludable, pero, le propuso algo que lleno de horror al doctor.

Michael con felicidad le propuso al doctor- Doctor, desde hace mucho años he tenido una manía que no puedo controlar, desde pequeño he tenido el incontrolable deseo de amputarme todas mis extremidades, por favor ayúdeme y ampúteme mis miembros.

El doctor lleno horror respondió- Discúlpeme, pero, me niego cumplir su petición, usted no tiene problemas en ninguno, no puedo amputar miembros sanos, si lo hago estaría yendo en contra de todos los principios de la medicina.

Michael furioso se levanta y le responde- Entonces debería de ir contra los principios de su medicina, un doctor debe procurar mantener la felicidad de sus pacientes, no sus principios.

El doctor se levantó tranquilamente de su asiento y respondió sin preámbulos- El deber de un doctor es velar por la salud de sus pacientes, en este momento es un tontería cumplirte ese deseo, mientras tu cuerpo no tenga problemas en esas áreas no podemos hacer nada.

Michael se levantó indignado y salió del consultorio sin decir alguna otra palabra. Días después Michael en su hogar se encontraba sentado en una esquina dentro de su recamara, se sentía impotente por no lograr que alguien cumpliera su descabellado sueño de amputar sus miembros, comenzó a llorar sin control y no se le ocurría que podía hacer, de pronto se le ocurrió tomar todo por su misma mano, se levantó de la esquina, abrió la puerta y corrió a la cocina, tomo un cuchillo y sin dudarlo se cortó y trago casi todos los dedos de su mano derecha, los vecinos llamaron a la policía tras escuchar los alaridos de dolor con una mezcla de risas desorbitantes y enfermizas.

Pero la cuando la policía llego Michael escondió lo sucedido, limpio todo rápidamente así cuando llego la policía no había nada que ellos creerían que sería sospechoso, la policía entro en su hogar pero no encontraron nada, en específico porque no sabían que buscar en primer lugar, observaron que a Michael le faltaban dedos, los convenció con una historia algo convincente, pero algo convincente no fue suficiente.

La policía se retiró pero dejaron una patrulla fuera de su hogar, Michael no parecía importarle y el mismo dia mas tarde volvió a bajar a la cocina, pero esta vez iba en grande, tomo un enorme cuchillo de carne, lo levanto con todo su brazo extendido y sin esperar se cortó su mano completa, los alaridos de dolor eran extensos y en su punto más álgido tan ruidosos que toda la calle podía escucharlos, los policías en la patrulla intentaron entrar en su casa pero bloqueo todas las puertas de la casa con muebles pesados y muchas cajas. Luego volvió a tomar el cuchillo y se cortó el pie izquierdo, los gritos eran bestiales, sacaban sustos hasta al más escéptico.

La policía logro entrar mediante una ventana cerca de la puerta de entrada, pero era inútil, la hemorragia estaba a punto de terminar con la vida de Michael, la policía llamo a una ambulancia y llego en poco menos de 10 minutos, pero, no fue suficiente, murió de camino al hospital, dentro de todo lo que cabía dentro de la enferma mente de Michael, jamás creyó morir por sus deseos.

Gracias a todos los que comentan esta historia, espero que este capitulo les guste a quien lo lea :D