Este es un relato para la actividad "No eres mi tipo..." del pokerecreo, aunque ni me gusta el romance ni se me da bien, he hecho un intento de historia, a mi juicio tiene muchos fallos, y lo se, ademas me cuesta mucho expresarme por lo que... aunque la idea me ha gustado, pero siempre fallo en la narrativa y eso me enfurece un poco, XD, pero bueno, aqui esta y me encantaría que no fuerais suaves conmigo, creo que cuando mejor mejoro es cuando me hacen una crítica dura, aunque pase 1 o 2 días mal, luego vuelvo mas fuerte, y creo que me hace falta mejorar bastante. —¿Padre como era mama? —Dijo la pequeña lapritas nadando en el lago mientras un rampardos la vigilaba. —Justo como tu, lapras. —¡Pero tu eres muy parecido a mi!¡Además tengo tu ataque! —Expreso con queja. —¿Te cuento como conocí a tu madre? —Dijo acercándose a la orilla para que la pequeña también lo hiciera. Esta se acerco con rapidez salpicando agua. —¡Cuidado! —Grito el padre alejándose de golpe. —Lo siento papa. —Expreso apenada dándose cuenta de lo que había echo. —A los tipo roca el agua no nos mola, ¿De acuerdo pequeña? —¡Si papi! —Dijo girando sobre si misma alegremente pero teniendo cuidado de salpicar agua. —Entonces papi, ¿la historia? —Si, escucha atentamente, Cuando papi era un cranidos…—La pequeña interrumpió. —¿Entonces papi no fue siempre papi? —Papi fue siempre papi pero existe algo llamado evolución. —¿Yo evolucionare?¿¡papi!? —No, pero crecerás. —¡Jo! Quería evolucionar como papi—Expreso apenada. —¿Seguimos la historia? —¡Seguimos la historia! —Repitió animada girando sobre si misma. —Al principio cuando papi era un cranidos era un fósil, como una roca, entonces papi fue revivido pero al parecer fallo algo y me desecharon, aunque dentro de esa caja pude completar el tiempo que debería y al final salí yo, antes de desecharme podía escuchar a esos humanos, son horribles pequeña, no confíes en ninguno. Entonces salí de esa gran caja llena de roca y huesos rotos y despojos de carne teniendo cuidado de que no me vieran, y así escape. —¡Que genial, papi! ¿Pero no iba sobre mami? —Dijo confundida la pequeña lapras. —Si, pero tendré que contar todo desde el principio. Entonces sobreviví varios días en un bosque comiendo bayas, aunque habían muchos pokemons no se me acercaban, y un día llegue a una playa, había cerca varios arbustos de bayas así que me quede viviendo allí un pequeño tiempo, aunque intente probar el agua, ¡puaaf! No me gustaba, entonces se acerco una manada de lapras. —¿La manada de mami? —Si, la manada de mami. Entonces había una lapras pequeña un poco mas mayor que tu, y la maldita disfrutaba de dispararme rayo hielo. —¡Papa! ¡mala palabra! —Lo siento hija. —¿Entonces que hacías? —Se lo devolvía con un poder oculto, al final acabamos siendo compañeros de juegos. En ese entonces se me ocurría llevarle ramilletes de bayas, aunque ella no las aceptaba, me decía, ¡Yo como otra cosa!, Entonces me las tenia que comer yo, aunque ella me acompañaba al lado comiendo algas. Pero luego descubrimos que me podía poner en su lomo, eso fue cuando ella creció un poco mas, entonces yo me subía a su lomo y ella me llevaba, nos divertíamos mucho pero a veces era difícil por que odiaba el agua, pero a ella le encantaba, como a ti, por lo que aunque tuviera cuidado al final me acababa salpicando y eso me enfurecía, por eso a veces me iba solo, pero cuando volvía ya estábamos de nuevo bien. Otro día, se le ocurrió usar rayo hielo en el agua para que yo anduviera, pero se quebró a los pocos pasos y tuve que volver lo mas rápido que tuve, pero mientras yo le decía, ¡por poco me matas!, ella reía y reía, nuestra diferencia de tipos era la verdad un problema, pero nada que no pudiéramos resolver. Pero entonces un día llego la despedida, su manada viajaría a otro lugar, pero tu madre se negaba, y entonces decidimos no separarnos, en ese entonces yo ya le llevaba flores, gracias a que no las podía ver desde el mar. Al final nos fuimos los 2 a buscar un lugar donde vivir y descubrí que podía permanecer un ratito fuera del agua, aprovechamos ese ratito y al final ella puso un huevo azul. El sitio era este, pero no había cueva, y el rio que se adentra en la cueva tampoco, lo descubrimos por que decidimos ir por un rio que tenia bastante vegetación, entonces pensamos en hacer una cueva. Pero un día yo estaba en la cueva, era temprano y tu madre dormía, el huevo yacía abajo suya, unos humanos vinieron, malditos humanos, que me arrebataron a mi amada, cuando pude darme cuenta se estaban yendo, corrí lo que pude, te saque del agua aun mojándome y corrí hacia la cueva, ellos me descubrieron pero entonces le di un cabezazo a la cueva, cerrándola por completo, al tiempo, decidí entonces que si hubiera sido mas fuerte la hubiera salvado, pero y si me perdías a mi y te quedaba sola? Era mi mayor duda. Entonces decidí trabajar en la cueva, y mientras cavaba el futuro rio a cabezazos evolucione, entonces tuve que agrandar la cueva pero todo es por tenerte segura. —Jolín papi que trabajazo te tuviste que dar. —Dijo bostezando. —¿Nos vamos a dormir? —La pequeña no contesto pero se empezó a desplazar hasta la cueva, por el rio que la adentraba, pero antes de que se adentrara mas el rampardos, este golpeo con su cabeza levemente el principio, tapiándola como cada noche hacia, y luego ambos se desplazaron al interior. @Jhosep Zar @LizzaRade
Porque esto no tiene comentarios, pinches lectores que no saben apreciar buenas historias, ha pero mírame a mí que llego a estas horas, eso también me lo digo, pinches trabajo que me quita todo el tiempo. En fin, yo me esperaba una historia romanticona, pero esta no fue de ellas, ojo que no quiero decir que no me gusto al contrario tiene un gran encanto en los detalles de toda la trama, faltaron algunos, pero en general la idea principal de toda la historia fue bien trasmitida y recibida para el lector. Un tipo roca como Cranidos un joven que sintió soledad desde que tiene memoria, pero más que eso un odio hacia aquellos que lo usaron y lo desecharon como un objeto que ya no sirvió, era clara su razón de ser para odiar a la raza humana. Vagaba solo por el mundo buscando algo que llenara ese vacío de su ser, un pokémon diferente y único a los demás, quien pensaría que sería una Lapras divertida y quizás un poco loca por quien comenzaría a sentirse bien de tener compañía, aunque fue difícil tener algo de convivencia entre dos opuestos, Cranidos no podía llevarla con ella a donde quisiera, salir del agua era una completa locura y arriesgar no era una opción, no lo podía hacer, quizás esa era una razón por la que Lapras también quería que viera el mundo como solo ella lo ve, esa idea de usar rayo congelante sobre el agua resulto bástate útil para comenzar, aunque si Cranidos no fuera tan pesado no la habría pasado mal de esa forma, debería dejar de comer vallas pero un tipo roza sí que es pesado. No sé si los pokémon tiene huevos por cuenta propia pero eso no era motivo para que Cranidos dejara a Lapras, después de todo encontró un buen lugar para estar con ella… pero la paz no es eterna, y el caos llego tras los humanos que capturaron a Lapras ( esos malditos reokests, si debieron ser ellos) Cranidos no pudo hacer nada, solo salvar el único recuerdo que ella le dejo, el preciado hubo y a alguien a quien llamaría su hija, la cual por el temor de perderla la mantiene oculta en esa cueva fuera de la vista de aquel ser que tanto más desprecia en su vida, los humanos. La historia es adorable y algo triste que los sucesos fueran de esa forma, sobre todo porque refleja un bello amor como amistad, el amor de padres es bástate grande como cualquier otro y cuidar de esa pequeña es la forma en que Cranidos demuestra que tenía un gran amor por aqeul pokémon que un día llamo amiga, quien sabe quizás algún día pueda encontrar a su amada. En resumen, esto estuvo muy bueno y bástate lindo, nos vemos en el próximo comentario. PD: Yo digo que esta historia se merece una continuación.
¡Hola! Gracias por tomarte el tiempo en participar. Procedo con mi evaluación. Los puntos buenos, es que se puede apreciar la inocencia de la pequeña Lapras. Y poner que el padre sigue hablando en párrafos separados para no hacer pesado su relato fue un punto positivo, pero pudiste colocar el cierre comillas (») al comenzar el párrafo, así haces ver que el personaje sigue hablando. Debo decir que tu forma de narrar está bien, y en especial si va dirigido a una niña pequeña que quiere saber cómo era su madre. Los puntos neutrales. En primera, estoy notando que faltan tildes, y es más notorio en las palabras “mamá, papá” o cuando faltan tildes en los pretéritos como “expresó” o “gritó”, ya que la narración está en pasado. Además de que los nombres de los Pokémon siempre llevan mayúscula. Un punto malo, es que el formato no es estable; en la primera mitad, no hay espacios entre párrafos, y lo hace un poco difícil de leer. Y recomiendo poner las imágenes grandes en spoiler o centradas. Lo mencionado arriba no le quita lo adorable al relato, pero hay que pulir algunos detalles. ¿Puedes hacer una especie de precuela? Porque un one-shot es poco para una historia así de adorable.