QUIERO MÁS… Era una tarde tranquila en la casa de los vocaloid, todos se encontraban en la sala viendo la televisión. — ¿Qué hacen chicos? — dijo Miku mientras llegaba después de haber ensayado su nueva canción —Estamos viendo la televisión— le respondió Kaito mientras la volteaba a ver desde donde él se encontraba — ¿Quieres venir? — le pregunto Rin mientras le hacia un pequeño espacio en el sillón —Ammn… sí, claro — le respondió mientras se sentaba —Y díganme, ¿sobre qué trata lo que están viendo, que están muy callados? — pregunto Miku al observar a todos los vocaloid —Es una película de miedo, trata sobre una chica que es esquizofrénica, y ella cree tener a varias personas y que la tiene bajo su control, hasta que esas ideas de su mente le dicen que se convierta en acecina, y después ella empieza a matar gente sin razón… —le respondió Len sin mirar a Miku — ¿Pero no es muy sangrienta? — dijo Miku al ver aquellas escenas de la película —Pues… dicen que sí, pero casi no da miedo —respondió Rin que estaba demasiado atenta a la película —Pues a mí ya me está dando miedo — dijo Gumi mientras se tapaba su rostro con sus manos, para no ver la película —Ayyyyyyy Gumi!! ¡Eres una miedosa! Dijo Luka mientras la miraba seriamente —No le digas así a la pobre de Gumi… ella apenas conoce lo que son las películas de miedo — pronunció Gakupo mientras veía a Luka y a Gumi — ¡Es que… es la verdad! — reclamaba luka al oír las palabras de Gakupo —Luka, es mejor que no te pongas así… y mejor sigue viendo la película— respondió Kaito para tranquilizar a Luka —Ahhhhhhh, mejor me iré a mi habitación para descansar, nos vemos… —pronuncio Luka mientras se levantaba de su asiento y se dirigía a su habitación —Creo que mejor yo también ya me voy a descansar, los dejo chicos… —dijo Gumi en dirección a las escaleras de la casa —Descansa Gumi —respondió Miku mientras le mostraba una pequeña sonrisa —Buenas noches — dijeron Len y Kaito al unisonó —Que no te encuentres a la chica esquizofrénica en tu cuarto… —dijo Rin con una risa burlona al ver a Gumi —Rin, no la asustes más de lo que esta la pobre de Gumi —dijo Len en tono de reclamo — ¡Solo fue una broma! ¡No lo dije en serio! —respondió Rin en un tono casi molesto al ver a Len —Rin, no te pongas así… —pronuncio Miku mientras trataba de relajar a Rin —Miku tiene razón, no hay razón de discutir, por algo insignificante— respondió Gakupo al comentario que había dicho Miku anteriormente —Ammn… Gakupo, ¿por qué mejor no me acompañas a subir? Es que esta demasiado oscuro aquí arriba… ¿si lo harías? —interrumpió Gumi al ver la situación —Sí, vamos —respondió Gakupo al acompañar a Gumi a su habitación Después de unos cuantos minutos, solo se quedaron Miku, Kaito, Rin y Len en la sala terminando de ver la película. — ¡Dios! ¡Esta película está demasiado horrible! — dijo Miku en un tono demasiado asustado — ¿No quieres que te acompañe a tu cuarto? —dijo Kaito dibujando una sonrisa en su rostro, para que Miku dejara de tener miedo — ¡Ayyyyyy Miku, no aguantas nada! ¡Eres igual de miedosa y cobarde que Gumi! — pronuncio Rin en un tono serio — ¡YA DEJA DE ESTAR JUZGANDO A LOS DEMAS RIN! ¿qué tienes en contra de ellos? —reclamo Len mientras veía a Rin molesto — ¿Quieres saber el por qué? — respondió Rin levantándose rápidamente de su asiento —Ammmnn… chicos, saben que no es bueno pelear, así que ya dejen eso —dijo Miku para tratar de arreglar la situación — ¡No te metas Miku! —respondió Rin demasiado molesta —Entonces, ¡que es lo que te ocurre! —dijo Len mirando seriamente a Rin — ¡QUIERO QUE ME DEJES EN PAZ! — respondió Rin mientras se dirigía al cuarto de Len y el de ella Pasaron las horas después de aquel suceso, hasta que Len entro a la habitación, y encontrar a Rin llorando sobre su cama, a lo que el joven, se sentó en la esquine de la cama de la rubia y le acaricio gentilmente su cabello — ¿Estás bien? — le pregunto Len en un tono preocupado —Lo siento si… te hice sentir mal, te juro que no era mi intensión —N-no te preocupes Len, tenías razón, no debo de estar molesta por algo insignificante — respondió Rin mientras secaba sus lágrimas y miraba a Len —Y dime… ¿Por qué te pusiste así? — pregunto Len interesado en lo que le pasaba a la joven — Porque… porque, necesito que me respondas esto… — respondió Rin un poco inquieta — ¿Qué es? —respondió Len con demasiada confusión en el — ¿alguna vez tú… has sentido… ese momento de placer… que tienes con otra persona? —respondió y a la vez pregunto Rin mirando a los ojos de Len — ¿qué quieres decir con “momento de placer”? — volvió a preguntar aun mas confundido —Pues… cuando haces ciertas cosas con la persona a quien amas, y los dos quieren sentir cada vez mas y mas placer que el otro le da… a eso me refiero… —respondió Rin un poco seria y sonrojada — ¿Te refieres a ese contacto que hacen algunas personas? — pregunto Len sorprendido al escuchar aquella respuesta —pues siendo sincero, si he sentido eso, pero no lo he hecho… ¿y tú? —Tampoco, pero dime, ¿quién es esa persona con quien lo quisieras hacer? — pregunto Rin algo interesada en la respuesta que le daría Len —Pues, es alguien demasiado cercana a mí, y en todo este tiempo, he sentido algo muy fuerte por ella —respondió Len empezando a sonrojarse — ¡Pero, aun no me has respondido! ¿Quién es… En ese mismo instante, no pudo terminar la frase, ya que Len la había besado apasionadamente en sus labios, mientras lo apegaba mas a él, a lo que Rin, sin pensarlo dos veces, le correspondió al beso, y así continuaron por un pequeño momento, hasta que terminaron en la cama, Le encima de Rin, solamente sosteniéndose de sus brazos, mientras se miraban fijamente los dos, a lo que después el joven respondió: — ¿Esto… responde…a tu pregunta? — pregunto Len con un tono de lujuria, mientras, trataba de decir lo que quería hacer con Rn en ese momento —Yo quiero… sentir… lo que los demás… lo quiero sentir contigo… —respondió Rin sonrojada y tratando de contener sus gemidos de placer, a lo que casi era inútil — ¿Quieres hacerme sentirlo? — sonrió aun mas con lujuria Len al escuchar aquellas palabras, lo que hizo que aumentara mas el sonrojo que tenia Rin. —Diablos, sí… —admitió Rin tomando las manos de Len y entrelazando sus dedos, hasta que se volvieron a besar con demasiada pasión Cada segundo que pasaba, su beso se volvía más y más apasionado, aumentando la intensidad de querer aun más y más, tan sólo podían pensar en una sola palabra: "deseo aun más…". No podían hacer más que desear más y más el seducir y finalmente poseer al otro. Hasta que los dos se empezaron a aburrir de ese pequeño contacto y decidieron continuar, Len de los labios paso lentamente al cuello de Rin, mientras que ella trataba de desabrochar el pantalón del joven. — L-len… quiero que mas… algo mas... que e-eso —exclamo la extasiada chica, que no dejaba de sacar tentadores suspiros, pero lo que mas excitaba al muchacho, eran los gemidos de la chica, lo que a él cada vez le agradaba y deseaba mas. — En ese caso… — sonrió con un poco de malicia en su rostro Rin empezó a sentir su intimidad contraerse al sentir el leve roce de los dedos de Len en aquella zona delicada, a lo que le siguió que de ella empezara a emanar con gran abundancia, a lo que Len, empezó a beber, para el aquel sabor era la miel mas deliciosa que había tomado, después Len comenzó a mover su lengua en su interior, lamiéndola con intensidad, mientras comenzaba a saborear la deliciosa esencia de la chica, mientras que sus piernas se empapaban más y más cada segundo que pasaba en una mezcla de su néctar con su saliva. Una gota de sudor recorrió su rostro para el momento en el que Len se lamió sus labios. —Tal y como lo imaginé —mencionó buscando sus ojos desde el lugar en donde se encontraba—, eres deliciosa… —afirmó mientras metía uno de sus dedos en su erecto clítoris de Rin, lo que hizo que dejara de fluir por un momento lo que anteriormente estaba fluyendo en gran abundancia, — siempre quise saber cómo sería tu sabor, y cuales serian esos dulces gemidos que emitirías… —siempre he querido saber que se sentiría si te hiciese solamente mía… —revelo Len mientras Rin trataba de recuperarse después de aquella sensación tan grandiosa que le hizo sentir Len en esos momentos, ella pensaba que si el paraba, ella no estaría satisfecha. Después de un largo rato, Rin dejó emanar aquel líquido de su cuerpo, un líquido que Len no se resistió a beber, lo que hizo que Rin se quejara: — ¡P-Perdona Len, no quería d-derramarlo! —Menciono Rin con dificultad, pero a la vez avergonzada, quería seguir que Len siguiera con aquel acto — ¿De qué te arrepientes? — respondió Len con un tono dulce y serio a la vez, pero con una sonrisa de lujuria en su rostro. Se sonrieron mutuamente pero con un poco de dificultad por la culpa de la excitación y la falta de respiración ante su poco entendimiento en el sexo, aunque ellos se estaban dando cuenta de lo bien que se sentía. Rin se levantó para poder quitarse completamente la ropa. Len la imitó, y una vez desnudos, se volvieron a recostar en la cama. Pero Rin musitó: — Es mi turno... Len... — ¿Tu turno?-dijo el rubio confundido. La expresión del joven pasó a sorprendida. Ya que en ese momento, Rin se colocó sobre él y empezó a acariciar el erecto miembro de su hermano. Escuchándolo gemir: — ¡Ah~! ¡Rin! Ahh... Rin... — ¿Te gusta? —pregunto Rin, mientras trataba de entrar en Len, ella no sabía muy bien como tenía que entrar en él. Así que Len tuvo que moverse de arriba hacia abajo para ayudar a Rin para que le fuera fácil. — ¡Más! ¡Necesito más de ti~…! —exclam Len entre gemidos y jadeos, y cada vez que Rin intensificaba sus envestidas, mas fuertes eran los gemidos del chico. Rin aumentó la velocidad en su vaivén. Provocando que la vista del chico se nublara a causa del placer y la excitación. El chico exclamó: — ¡Dame más, Rin, dame más! —Como lo desees… — respondió Rin con un tono lujurioso, se veía en su mirada que quería que Len recordara ese momento que estaban disfrutando, pero sobre todo quería que supiera que cada vez que estaban más en contacto, más lo deseaba. En cada momento que estaban juntos, o más bien en contacto, se sentía que se estaba en el cielo, pero a la vez en el infierno, tener aquellos contactos placentero de cada uno que se daba el otro se sentía tan bien, tan… prohibido, hasta que llego el momento del final del clímax, Rin estaba cerca de aquel orgasmo tan deseado de Len, lo que provoco que Len empezara a tener la vista un poco menos nublosa, y lo que vio fue a la perfecta figura desnuda de su hermana, moviéndose hacia delante y hacia atrás, como una coreografía coordinada, y ver que tenía los ojos cerrados y aumentando la velocidad de sus movimientos, acompañados con los movimientos de sus pechos que se movían al compas del ritmo de Rin, para Len era la imagen demasiado perfecta que había visto en su vida. —L-Len~… —pronuncio Rin desesperadamente una y otra vez por tratar de entrar al orgasmo de Len, en lo que casi ya estaba a punto de llegar. Finalmente, un fuerte grito de los dos significaba que ya llegaron a su deseado orgasmo, y en un gemido demasiado agudo, Len soltó su espeso jarabe en el interior de Rin, haciendo que esta ya no aguantara y callera encima de él, los dos estaban demasiado sudorosos, su respiración a un nivel de vértigo, tratando de hacer un gran esfuerzo por respirar. —Wow Rin… eres demasiado buena para esto— jadeaba Len mientras miraba a Rin con una media sonrisa dibujada en su rostro que seguía sonrojado —Tú también Len… respondió Rin mirando con los ojos entre cerrados por la excitación —Deberíamos hacer esto más seguido… —propuso Len mientras se acomodaba bien al lado de Rin —Qué te parece si… lo hacemos todos los días? Sería como nuestro postre después de cada cena… —pregunto Rin con una risa un poco lujuriosa al imaginarse eso… —Me parece bien, todos los días, después de cenar… —respondió Len en un tono dulce Después de unos minutos, los dos cayeron completamente dormidos. Al dia siguiente, todos los Vocaloid se encontraban en la cocina desayunando, en unos momentos bajaron Rin y Len demasiado apegados, lo que les pareció raro a los demás ya que siempre se estaban peleando. —Buenos días a todos —dijo Rin demasiado feliz y con toda la tranquilidad del mundo —Buenos días —fue la respuesta de todos al ver a Rin, se sorprendieron no verla de mal humor o que se peleara con alguien Después, los gemelos se sentaron a desayunar, pero notaron demasiado rara a Miku, se veía agotada y sin ánimos. — ¿qué te sucede Miku? —pregunto Kaito un poco preocupado por Miku —Awwwwwww, es que a noche no pude dormir bien, porque se escuchaban demasiados gritos y gemidos cerca de mi habitación y no me dejaron dormir. Rin y Len se vieron fijamente por unos segundos, recordando lo que habían hecho a noche, lo que después les siguió un leve sonrojo. Horas despues, llego la hora de la cena, todos se encontraban demasiado tranquilos, a acepción de Miku, Rin y Len, la peli verde se encontraba demasiado soñolienta como para tener un poco de concentración, y Rin y Len, ya tenían planes para lo que pasaría esa noche después de cenar. —Miku, ¿Por qué no te vas a descansar? —sugirió Luka mientras veía a Miku —Está bien… que descansen todos — respondió Miku en dirección hacia su habitación para finalmente descansar —Nosotros también ya nos vamos a descansar— pronuncio Rin mientras se diriia junto con Len hacia su habitación con un poco de ansias —o-ok, descansen gemelos —respondieron todos al ver a los gemelos demasiado apresurados por ir a su habitación, como si no hubieran estado ahí en unos años y no en horas. Y desde entonces, todos los días, después de cenar, Rin y Len se iban a su habitación para repetir su acto que habían hecho esa misma noche, lo que no les cansaba, eso seria como su postre favorito después de la cena de todos los días. FIN