"Querida Prima Política" [Advanceshipper]

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Hola :)

Les presento mi nuevo fic, que constará de siete capítulos y este primer prólogo. Está basado en el desafío literario propuesto por Rebort hace ya algún tiempo, sin embargo, tiene algunas partes ligeramente cambiadas. Agradezco a Heros la revisión del mismo y su ayuda para mejorarlo... en la medida de lo posible xD

Espero que les guste y dejen sus comentarios, dudas, preguntas, quejas y anécdotas.

[FONT=&quot]Querida Prima Política[/FONT]​

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[FONT=&quot]Prólogo: Día Cero. [/FONT]​

[FONT=&quot]“Querida prima política:[/FONT]

[FONT=&quot]No sabes el placer que siento al releer tu nota, y enterarme de que próximamente volverás a estar entre nosotros. Anhelo ya tu llegada, el verte de nuevo y poder conversar a solas como antes solíamos hacerlo; para así tener la oportunidad de apretar mis manos entorno a tu cuello… ¡Y estrujarlo hasta que te quedes sin aliento!” [/FONT]

[FONT=&quot]Este, sin duda, sería un pequeño párrafo de la carta de May. [/FONT]
[FONT=&quot]Si tan solo se atreviera a enviarlo… [/FONT]

[FONT=&quot]Las gotas de lluvia martilleaban sin cesar el frágil techo de la residencia Ketchum, produciendo un sonido sordo al impactar contra el mismo. El día era horrible. Una manta de oscuridad y esporádicos relámpagos envolvían a Pueblo Paleta, quebrantando así, toda posibilidad de que hubiese movimiento en las calles. La gente del lugar, que solía ser lista, procuraba no exponerse a las inclemencias del clima como aquella. [/FONT]

[FONT=&quot]May observó a través de la ventana con expresión apática, y luego alzó la nota que estaba escribiendo para que sus ojos azules pudiesen divisarla. Le parecía que quizá se había excedido un poco, pero al reflexionar sobre el asunto comprendió que más bien se había quedado corta. Aquella visita que esperaban era lo peor que podía haberle pasado en el transcurso de aquella semana, que de por sí ya era bastante mala. [/FONT]

[FONT=&quot]Eran vísperas de navidad; todo Pueblo Paleta salía a las calles cada noche entonando villancicos, obsequiando bastones de caramelo, pero sobre todo, conviviendo felizmente con su familia. Casi se le llenaron los ojos de lágrimas al pensar que quizá, en todo el mundo ella sería la única excepción. Amaba a su novio, Ash Ketchum, por supuesto, y estaba de acuerdo en llevar un orden para pasar las festividades con las respectivas familias. Pero era navidad, y por desgracia, esta vez le había tocado ceder a ella. Iban a pasar la celebración con Delia y el año nuevo en Ciudad Petalburgo, con sus padres. [/FONT]

[FONT=&quot]Y como si no fuera poco, ahora la esperaban a ella. [/FONT]

[FONT=&quot]La sangre le corría velozmente por las venas al pensar en “esa” persona que arruinaría su navidad, pues en verdad, su visita no podía tener otro motivo. Quería fastidiarla, quería pelear, quería amargar su vida y hacer que ella terminase con Ash. Pero no, May era valiente, estaba decidida a seguir con el joven Ketchum aunque tuviese que morderse la lengua y cerrar los puños cada vez que ella la humillaba. [/FONT]

[FONT=&quot]Anya Ketchum era, en pocas palabras, el ser más detestable sobre la tierra. Su rango como coordinadora pokémon de la región de Jotho era quizá un poco más elevado que el de May. La superaba en todo; tenía mejores pokémon, más dinero, mejor vestuario, más listones ganados y una sorprendente Copa Listón que reposaba en la vitrina de la sala de su elegante casa. Con amargura, May reconoció que sus logros jamás podrían equipararse con los de ella. [/FONT]

[FONT=&quot]Pero no todo era miel sobre hojuelas con Anya Ketchum. Ante el mundo (y especialmente ante su tía, Delia) aparentaba ser la niña más adorable del universo. La de mejores modales, la de mayor cortesía, la chica perfecta. Y sin embargo, cuando decidía dejar atrás las apariencias, distaba mucho de ser siquiera una buena chica. Anya era presumida, o por lo menos eso recordaba May. Su comportamiento distaba mucho de ser humilde, incluso Drew se quedaba corto en semejante comparación. Y eso que el peliverde había hecho notables méritos… Suspiró. Anya era también una chica envidiosa. No toleraba el hecho de que ella fuera la novia de su primo, con el que tan bien se llevaba. A May le hubiese gustado en poco más de una ocasión sacudirle la cabeza a Ash, para que se diese cuenta de las “enormes” cualidades de su prima. Pero todo lo que hacía siempre resultaba inútil. No podía borrar esa tonta sonrisa del rostro a Anya, no podía delatarla con la señora Ketchum, pues no le creería. No podía acusarla con Ash, dado que este sentía un gran cariño hacia la muchacha, y era bastante seguro que le rompiera el corazón. Y no, ella no era tan malvada como para lastimar a su amado. [/FONT]

[FONT=&quot]Tocó el cristal de la ventana, y recorrió con sus blancos dedos la trayectoria de una gota de lluvia. Cerró los ojos e inspiró profundamente. [/FONT]

[FONT=&quot]Sí, definitivamente aquella navidad sería la peor de su vida… [/FONT]

 

Re: "Querida Prima Política" [Advanceshipper]

Ignoro cuantas veces antes me he disculpado por no continuar un fic antes, pero vuelvo a hacerlo, porque la mayoría de ustedes sigue leyendo mis escritos y es importante para mí. Esta vez les traigo el primero de siete capítulos, y espero que sea de su agrado.

[FONT=&quot]Querida Prima Política. [/FONT]​

[FONT=&quot]Capítulo 1: El Día de Recibir. [/FONT]​

[FONT=&quot]Ante los gritos impacientes de Delia Ketchum, May no tuvo otra opción más que levantarse. La coordinadora torció la boca en una mueca mientras se ponía sus zapatos deportivos: ni siquiera había amanecido. Se encaminó hacia el baño para lavarse la cara, y de paso, dejar de escuchar el estridente ruido que causaban las pisadas de su suegra, que subía y bajaba las escaleras presa del nerviosismo. [/FONT]

[FONT=&quot]¿Es que acaso estaba loca?[/FONT]

[FONT=&quot]No le gustaba hablar, o más bien, pensar de esa manera en la madre de Ash, pero no podía evitarlo ante su comportamiento. Ese día llegaría Anya de visita, no la reina de Inglaterra. No entendía siquiera como podía estar despierta a aquellas horas de la mañana, cuando era probable que su “adorada” prima política llegara pasadas las doce. Y por supuesto, inventaría una excusa magistral para explicar su retraso, misma que Delia, sin margen de duda, se creería. [/FONT]

[FONT=&quot]Siempre era lo mismo.[/FONT]
[FONT=&quot]Todos le creerían, la disculparían y asunto arreglado. [/FONT]
[FONT=&quot]Ella era el único individuo pensante en Pueblo Paleta tras la llegada de Anya Ketchum. [/FONT]

[FONT=&quot]Abri[/FONT][FONT=&quot]ó el armario para buscar uno de sus vestidos favoritos. Se quitó el camisón apresuradamente y deslizó entre sus curvas un vestido ceñido al cuerpo de color blanco. Luego se colocó un cinturón azul marino no muy ancho para resaltar. Ese atuendo la hacía ver bien, en opinión de Ash. Y ella se complacía en gustarle a su novio. Además, ya pensando un poco en la competencia, quizá Anya no le sacara demasiada ventaja vestida de aquella forma. Se anudó un pañuelo de color blanco que minutos antes había sacado de su equipaje y luego se miró al espejo. Era bonita, y el color blanco hacía resaltar sutilmente sus ojos azules. No podía negarse a sí misma que poseía un buen grado de autoestima, aunque este solía hacerse pedazos en presencia de la señorita perfección. Sacudió la cabeza ante aquellos pensamientos, era mejor que bajara cuando antes. [/FONT]

[FONT=&quot]En las escaleras se encontró con Ash, quien curiosamente se había vestido de tal forma que quedaban perfectamente coordinados: Pantalón azul marino, playera blanca y chaleco también azul. El entrenador le dio un beso en la mejilla y soltó una risita. Luego, graciosamente hizo una referencia a la vestimenta de ambos. May entrelazó sus dedos a los de su novio, y luego lo atrajo hacia sí para besarlo. [/FONT]

[FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot] ¡¿Pero qué creen que están haciendo ustedes dos?![/FONT][FONT=&quot] —[/FONT][FONT=&quot] gritó la señora Ketchum, justo antes de que sus labios se rozaran. Muerto de pena, Ash soltó a May.[/FONT][FONT=&quot] —[/FONT][FONT=&quot] ¡Anya está apunto de llegar y ustedes no han terminado con sus jueguitos! No he de repetirte Ash que es una falta de respeto hacia la gente tratarte de esa manera con tu novia. [/FONT]

[FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot]Lo… lo siento mamá[/FONT][FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot] La voz del joven sonaba entrecortada. Se rascó la nuca nerviosamente y luego comenzó a bajar las escaleras. [/FONT]

[FONT=&quot]May apretó los puños. [/FONT]
[FONT=&quot]1-0 a favor de Anya. [/FONT]
[FONT=&quot]Y eso que todavía no llegaba a la casa. [/FONT]

[FONT=&quot]El desayuno no fue precisamente tranquilo para la coordinadora. Delia Ketchum, preocupada por el retraso de su sobrina se revolvía en la mesa. [/FONT]

[FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot]Mam[/FONT][FONT=&quot]á…—Llamó Ash— ¿Quieres, por favor, tranquilizarte?[/FONT]

[FONT=&quot]— ¿Y si le sucedió algo? — Inquirió ella— Quizá sería mejor que la esperara afuera. [/FONT]

[FONT=&quot]—Llegará— fue la única respuesta de May. Comenzaba a malhumorarse muy temprano. Delia jamás le había puesto tanta atención a alguien, ni siquiera a su hijo. [/FONT]

[FONT=&quot]Al terminar de desayunar, Ash y May se encargaron de lavar los platos. Mr Mime barría la casa, mientras que Delia, con la excusa de que su jardín necesitaba mantenimiento se escabulló hacia afuera para esperar a su sobrina. El resto de la mañana transcurrió tranquila, con la señora Ketchum asemejando a una estatua frente a la puerta de la casa. Se le unió Ash a eso de las diez, y May decidió pulir su recién ganado trofeo del concurso de coordinadores. No era tan grande ni tan reconocido como la Copa Listón, pero por lo menos la declaraba como la mejor coordinadora pokémon de Hoenn. Le había sacado suficiente brillo y Beautifly aleteaba felizmente dentro de la casa cuando el sonido de un claxon llegó hasta sus oídos. Era fácil adivinar de quien se trataba. Dedicó una rápida mirada a todos los objetos de la sala donde estaba. Quizá podría esconderse detrás de uno de ellos…[/FONT]

[FONT=&quot]Pero no, ella no era una cobarde. [/FONT]

[FONT=&quot]Tomó su tiempo para alisar las inexistentes arrugas de su vestido, fue a la cocina a buscar alimento pokémon para su Beautifly y la observó comer; luego la guardó en su pokebola. Y al fin, con un suspiro, abrió la puerta hacia el exterior. [/FONT]

[FONT=&quot]La sonrisa maliciosa de Anya Ketchum le nubló la vista. Era tan… desagradable que tuvo que apretar los puños para evitar írsele encima. Cerró los ojos y después fabricó el esbozo de una amable sonrisa. Una de esas tantas, falsas, que siempre utilizaba para ganar el favor de sus padres. Desvió la vista hacia el auto convertible de último modelo que su enemiga conducía, pero su sorpresa fue grande al ver que no era el único aparcado delante de la residencia Ketchum. Otros dos, negros, se situaban justo detrás. [/FONT]

[FONT=&quot]—Por supuesto tía— le oyó decir con esa horrible voz chillona— Papá quería que estuviera mucho más segura que antes. ¿No te dije que intentaron secuestrarme? [/FONT]

[FONT=&quot]¿Quién, en su sano juicio intentaría secuestrar a Anya Ketchum? Sin duda el maleante que lo intentara ¡sufriría demasiado! May no dudaba que aquello fuese una mentira. Ella era tan insoportable, tan mentirosa y tan arrogante, que el secuestrador más necesitado en la faz de la tierra devolvería a la chica con todo y recompensa, en vez de pedir dinero por ella. Y sin embargo, una vez más, el asentimiento de Ash y Delia probaba que le creían. [/FONT]

[FONT=&quot]—No te preocupes por eso tía— continuó la chica— Mis guardaespaldas sólo tenían encomendado asegurarse de que yo llegara con bien. [/FONT]

[FONT=&quot]Y como si eso fuese una orden, los autos negros dieron media vuelta y se marcharon a toda velocidad por el camino, con el polvo tras ellos. [/FONT]

[FONT=&quot]— ¡May! Querida…— exclamó con obvia falsedad Anya, antes de correr y abrazarla con fuerza— ¡Hace tanto que no nos hemos visto![/FONT]

[FONT=&quot]—Por suerte…— murmuró la coordinadora.[/FONT]

[FONT=&quot]—Pero ahora que estoy aquí podr[/FONT][FONT=&quot]emos ajustar cuentas, queridita[/FONT][FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot] le susurró al oído. May se volvió hacia Ash y Delia para enterarse de que no habían escuchado. Como siempre, Anya lograba aparentar dulzura ante su familia, y luego sacaba su hostilidad con ella. [/FONT]

[FONT=&quot]Ash, a una orden de su madre, se encargó de llevar las maletas de Anya a la habitación de huéspedes. Ella, muy cómodamente se instaló en el sofá a ver la televisión. [/FONT]

[FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot]Estoy exhausta[/FONT][FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot] dijo, llevándose la mano derecha a la frente, en un ademán exagerado.[/FONT]

[FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot]Ay, hija, lo siento. No sabes lo feliz que me hace tenerte aquí. ¿Quieres una almohada en los pies?[/FONT][FONT=&quot] —[/FONT][FONT=&quot] preguntó Delia. Anya asintió con una sonrisa mientras la señora Ketchum situaba la almohada en su lugar. [/FONT]

[FONT=&quot]May se cruzó de brazos. Perfecto. Viviría como una reina, también ahí. Si aquello continuaba; si Ash se decidía a obedecer a su madre, era probable que ella misma terminara haciendo los mandados de Anya. Dio un pisotón fuerte, que ni Ash ni Delia oyeron puesto que estaban demasiado entretenidos con el relato del viaje de Anya y subió a su habitación hecha una furia. [/FONT]

[FONT=&quot]Ya se las cobraría…[/FONT]

[FONT=&quot]El resto de la tarde, tanto Ash como Delia estuvieron al pie del sillón donde la presumida Anya descansaba. Al bajar de su habitación con su Delcatty al lado, May no pudo evitar observar a su rival. Era una joven bonita, debía admitirlo. El cabello, rubio y largo le caía hasta mitad de la espalda, dándole un aspecto casi de diva. Sus ojos eran verdes y con una gran chispa de arrogancia, imperceptible para la mayoría de la gente. Tenía las facciones delicadas; vestía ropa costosa pero elegante y se expresaba con propiedad. Aparentaba ser una educada y preciosa niña de sociedad, pero en realidad era una víbora rastrera, pensó May. [/FONT]

[FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot] ¡May![/FONT][FONT=&quot] —[/FONT][FONT=&quot] Exclamó Anya, utilizando un tono dulce que le provocó asco a la coordinadora de Petalburgo[/FONT][FONT=&quot]—[/FONT][FONT=&quot] ¡Evolucionaste a tu Skitty! Cuanto me alegro por ello, amiga. Te había dicho que ese pequeño gatito era un pokémon poco apto para las peleas.[/FONT]

[FONT=&quot]En realidad, ella había dicho que Skitty era un pokémon debilucho que no podría pelear ni para salvar su existencia. Pero Anya tendía a suavizar las cosas si estaba presente alguien más que May. [/FONT]

[FONT=&quot]—Sí, por supuesto. Seguí tus consejos y gracias a eso gané el concurso de coordinadores el otoño pasado. [/FONT]

[FONT=&quot]— ¿Concurso de coordinadores? —Inquirió Anya con falsa sorpresa. — ¿Y desde cuando existen? Digo… ¿Siquiera son avalados por el Consejo Pokemon? [/FONT]

[FONT=&quot]—Por supuesto. —Contestó la castaña apretando los dientes.[/FONT]

[FONT=&quot]— ¡Oh, debes perdonarme querida! —Se excusó la prima de Ash, llevándose una mano a los labios para reprimir una risita. —Yo sólo conozco competencias de alta calidad, como la Copa Listón.[/FONT]

[FONT=&quot]¡Por supuesto que era lo [/FONT][FONT=&quot]único que conocía! ¡Solamente la Copa Listón de Jotho aceptaba el dinero de su padre a fin de coronarla campeona! May pensaba que Anya estaba desperdiciando sus aptitudes, porque, después de todo, no era tan mala coordinadora. Si el equipo pokémon del que había hecho gala la última vez que se vieron continuaba con ella, definitivamente sería capaz de presentarse a una competencia decente y ganarla. Claro, una competencia donde no estuviera ella. [/FONT]

[FONT=&quot]—No hay problema, querida. Aunque quizá deberías ampliar un poco más tus horizontes. —Fue la respuesta de May.[/FONT]

[FONT=&quot]— ¡¿Y cómo quieres que lo haga?! —Gritó Delia, apagando el televisor de golpe. — ¡Por dios, May, sus movimientos están muy restringidos! ¿Sabías que quisieron secuestrarla? La pobre chica ahora está atemorizada y su padre se encarga de que la cuiden día y noche. En el mundo, todo el tiempo suceden cosas similares cuando se trata de personas importantes, ¡pero es algo que tú jamás comprenderás porque tu vida se limita a ir de un lado a otro con la protección de mi hijo! [/FONT]

[FONT=&quot]May se quedó paralizada. Si bien, sabía que Delia no aceptaba abiertamente su relación con Ash, jamás habría creído que fuera tan cruel como para restregarle en la cara su situación. Era verdad. Desde los diez años, en cuanto Ash la había conocido se había convertido en su protector inseparable. Habían viajado juntos por toda la región de Hoenn y de Kanto, pero su independencia había tomado forma en la región de Jotho, hacía más de dos años, cuando él estaba en Sinnoh en compañía de otra coordinadora llamada Dawn. May había estado sola en Jotho, viajando a veces con personas que estaban tan dispuestas como Anya a apuñalarle por la espalda al menor descuido. Delia estaba equivocada si pensaba que después de todas esas aventuras aún seguía protegida en la burbuja de cristal que Ash había creado para ella. Pero su mente estaba llena de ponzoña, envenenada por el mordisco de aquella víbora rubia que le sonreía descaradamente mientras jugueteaba con un mechón de pelo. [/FONT]

[FONT=&quot]May salió corriendo de la sala, subiendo la escalera de dos en dos hacia su habitación. Por ningún motivo le daría la satisfacción a esa arpía, o a la señora Ketchum de verla derramar una sola lágrima.[/FONT]

[FONT=&quot]—May…—Susurró el entrenador. Pikachu, en su hombro, bajó la mirada entristecido. Ash alzó una vez más la vista hacia la escalera y se limitó a sentarse porque aquel no era un buen momento para hablar con su amada. [/FONT]

[FONT=&quot]Sin embargo, Delcatty no pensaba lo mismo. Estaba a punto de saltar el primer escalón para seguir a la coordinadora cuando Anya lo tomó en brazos. [/FONT]

[FONT=&quot]—Está un poco afligida, cosita. —Dijo tiernamente, y la piel del pokemon se erizó, porque tampoco él confiaba en la prima de Ash. —Te llevaré a la cocina para que comas algo.[/FONT]

[FONT=&quot]Dicho esto, Anya se llevó a Delcatty, y Delia se quedó sentada junto a Ash en la sala. La mirada del entrenador estaba perdida observando algún punto inexistente en la habitación. Era muy probable que sus pensamientos versaran sobre su novia y sobre el trato que su madre le había dado. Al poco rato, Delia salió con Mr. Mime a continuar arreglando el jardín y Ash se quedó profundamente dormido en el sofá. [/FONT]

[FONT=&quot]Cuando May se decidió a bajar, un par de horas más tarde, la sala estaba vacía. Casi estaba anocheciendo y no se veía por ninguna parte a Ash o a la señora Ketchum. La coordinadora subió nuevamente las escaleras y descubrió que su novio tampoco estaba en la habitación, pero su suegra dormía plácidamente en la suya. De pronto, como si un rayo le atravesara de hemisferio a hemisferio del cerebro, recordó que había dejado a Delcatty en la sala al subir apresuradamente a su cuarto. Así que bajó nuevamente y comenzó a buscar. Nada. Delcatty no estaba recostado sobre ninguno de los sillones, ni en la alfombra del suelo, ni detrás del mueble del televisor. Entonces fue cuando un lamento llamó su atención. Haciendo uso no solamente de su oído sino de todos sus sentidos, siguió el débil lamento que parecía llamarla. Y todas las maldiciones que conocía se repitieron tres veces en su mente contra Anya. Deseaba que se le cayera el pelo, las uñas. Que un día su padre se quedara en la ruina y por consiguiente, también ella. Porque sí, eran rivales, pero sólo de crueles era hacer uso de la alevosía y la ventaja para enfermar a un pokemon.[/FONT]

 

Re: "Querida Prima Política" [Advanceshipper]

Si bueno, sigo reiterando mis eternas disculpas por haber tardado TANTO (más de medio año!) para publicar el capítulo. Intentaré seguirlo tan pronto como me sea posible. Después de todo, es un desafío literario y le dije a Rebort que lo haría. En cuanto a Delia, es posible que suene bastante OC pero ¿Quién no preferiría a su sobrina respecto a su "nuera"? Especialmente contando que la mayoría de las suegras parecen tener una aversión natural hacia las novias de sus hijos xD