Me he puesto y quitado capas para ocultarme de lo que me hace daño. Un camuflaje me he fabricado, para no darme cuenta lo que he perdido. Ahora soy caparazón , que refleja mi fortaleza. Que no soy la misma de antes, que he dejado cosas para poder ser quien soy hoy. Y duele. Duele mucho, porque sus miradas ya no las conozco. ¡Haz cambiado! Me dice. Y respondo con furia por pintar un poco lo que siento. Hago pensar que no interesa, porque soy lo que soy. Pero en esto me he convertido por ti, y, ¿Aun insistes en que no te quiero? ¿No comprendes que todo lo he dado por ti?