Long-fic de Naruto - Por personas como tú

POR PERSONAS COMO TU
Advertencias: se encontrara un poco de Ooc en Sasuke, cabe recordar que los personajes no me pertenecen.
Es un NARUHINA y un poco de SasuSaku

Capítulo 1. Llegaste tú

Ahí se encontraba una pequeña niña, en aquel parque, con apenas 10 años estaba ahí sola, sin para de llorar y de preguntarse ¿por qué a ella le pasaban ese tipo de cosas?. De la nada apareció otro niño de tez clara y de cabello negro con destellos azules y ojos tan negros como un pozo sin fondo.

-Oye niña, ¿Por qué no dejas de llorar?- dijo el niño en tono amable pero firme

-¿T-Tu quién eres?- contesto asustada la pequeña niña de ojos aperlados y piel tan blanca como la nieve

-Oooh, mi nombre es Sasuke Uchiha, y… ¿tú eres?- pronunciando esto estiro su mano en símbolo de saludo

-H-Hinata Hyuga… me escape del hospital infantil de Konoha- seguido de esto rompió en llanto nuevamente

-¿Por qué hiciste tal cosa Hinata?, acaso te abandonaron o algo parecido- dijo sentándose frente a ella

-No, ellos me aman mucho, pero yo no quiero verlos sufrir- dijo limpiándose ya sus enrojecidos ojos

-Pero… así sufrirán más tus papás, ¿Por qué te escapaste?- dijo tomando las manos de la pequeña

-Hace unos meses comencé a tener dolores de cabeza, desmayos, poco apetito y muchos síntomas más, papa y mama decidieron llevarme al doctor y me hicieron varios análisis y todas esas cosas, hoy nos entregaron los resultados y resulto que tengo un problema muy extraño en mi sangre y con mis defensas una enfermedad que está en primera etapa y que como consecuencia tengo que estar en eternas visitas al médico y tomar muchas medicinas para controlarlo, no entendí si no es curable o tarda mucho en irse…. Y yo… yo no me quiero morir y menos quiero ver llorar a mis papás…- y dicho esto rompió en llanto

-Oye Hinata pero no puedes hacerle esto a tus padres, ven vamos a mi casa y le decimos a mis papás y ellos nos pueden ayudar- dijo en tono amable y atento

-No Sasuke, no quiero morirme- dijo sin parar de llorar

-Hinata, mira no te conozco, pero si el destino decidió que nos conociéramos es por algo, y Hinata yo te prometo estar contigo desde hoy y ¡jamás! Dejarte- dijo decidido y estirando la mano hacia ella

-Sasuke- dijo en tono dulce y con cariño- Está bien, acepto, pero, yo también te prometo estar contigo siempre a partir de hoy- y dicho esto estrecharon sus manos y comenzaron a caminar.

Años después…

 

Hola, muchas gracias por los comentarios, ahora el segundo capitulo, espero lo disfruten :3

Capítulo 2. Necesitabas ayuda

Años después…

—Hinata, porque no entiendes que el sol por mucho tiempo te hace daño, llevas aquí mucho tiempo, ¡en pleno sol! — dijo un Sasuke en tono molesto

—¡Sasuke no me regañes! — dijo tomándolo de la mano y poniendo una cara dulce-—me gusta estar aquí me recuerda cuando tu llegaste a mi vida y me ayudaste y aunque ya pasaron 8 años tú sigues aquí conmigo de manera incondicional—dijo con los ojos cristalinos

—Te lo prometí, pero por favor, sabes que esto te hace mal hace años que no tienes una recaída, anda te invito un helado de queso— pronuncio jalando a la chica del brazo

—Acepto tu propuesta si me cuentas como van las cosas con Sakura— dijo en tono dulce y haciendo muecas

—Vamos, te cuento lo que quieras— dijo resignado y en su habitual tono serio

— Pues comienza a hablar, ¿Cómo te ha ido?, ¿No me odia por ser tu amiga verdad? — dijo mientras comenzaban a caminar

—Todo va bien, es linda y muy amorosa, y ya le deje bien en claro que tú eres mi mejor amiga, que eres como mi hermana y que ¡JAMAS! Te voy a dejar sola y que ante todo estas tú y tu salud, ella solo respondió que no tenía nada que dudar de nosotros, que tú le inspiras demasiada confianza— pronuncio serio pero al final se le dibujo una sonrisa característica de el

—Sasuke, Te quiero mucho, pequeño tonto—y le sonrió de manera dulce y burlona

—También te quiero Hinata — pronuncio seco y sin si quiera demostrar sentimiento alguno, pero Hinata en el fondo sabía que el solo era así y punto—y tu dime ¿Cómo van las cosas con el Naruto?, ¿Ya le hablaste? —dijo algo curioso pero firme ante la Hyuga

—¡NO!... no puedo hacerlo, me da mucho miedo y pena y…. jamás podre— dijo en tono triste y decepcionado

—Hinata… que te pasa llevas años luchando contra una enfermedad que sigue en la primer fase, pero tú le gustas de hogar y no puedes hablarle a ese torpe— dijo algo molesto, en verdad era molesto que ella se comportara asi- a veces siento que el debió de haber llegado a tu vida aquel día, y no…-pero no pudo continuar porque el grito de la chica lo interrumpió

—¡SASUKE!... no digas tonterías, yo te amo, te quiero y te adoro eres muy importante para mí no me digas esas cosas—dijo colgándose de su brazo

—Yo también Hinata, pero tienes que armarte de valor—pronuncio mientras se ponía pensativo y serio

—Ya lo sé pero tengo miedo—dijo mostrando sus nervios

—Hinata, mañana mi mama hará pie de limón, ¿Te parece si vas a comer? — dijo perdido en el cielo

—Mmmmm… pie de limón, ¿a qué hora es requerida mi presencia? — dijo con cara de decisión

—A las 3:00 pm ¿te parece bien? —dijo sin si quiera prestarle atención, o al menos eso parecía

—¡Claro! — dijo con entusiasmo

Y así los jóvenes siguieron el camino a casa de Hinata, Sasuke solo se encargaba d cuidar de Hinata. Así la joven llego a su casa y Sasuke siguió su camino hacia la suya.

 

¡Hola! aqui les traigo el tercer capitulo, espero sea de su agrado, he tratado de pulir cada detalle que me han dicho y espero no les defraude este capitulo :3
Capítulo 3 ¿Una cita?

A la mañana siguiente…

Nos situamos en una casa bastante amplia, con un hermoso jardín y un poco al estilo japonés, se podía respirar un aire tranquilo y muy relajante. En una de las habitaciones Hinata estaba durmiendo tranquila y plácidamente cuando una tonada la despertó, al cobrar conciencia, tomo su celular y se encontró con un mensaje que decía:

Hinata, recuerda que hoy comes conmigo, ponte un vestido bonito y ponte aún más hermosa de lo que ya eres. Te quiere tu amigo Sasuke

Hinata con una sonrisa en el rostro y un aire de grandeza se dispuso a levantarse. Era muy raro que Sasuke se comportara así pero así era su amigo, y no le cambiaria nada. Bajo a la cocina y se encontró una nota que decía:

Hinata, tu papa y yo nos fuimos al trabajo, desayuna algo y que tengas un hermoso día con Sasuke, Te queremos

La joven se preparó el desayuno, que tal vez parecía algo excesivo pero ella sabía que así debe ser su alimentación. Eran ya las 10:30 am, así que fue y encendió el calentador y subió a buscar la ropa que usaría, tardo más o menos una hora buscando la ropa y probándose varios vestidos hasta que encontró el indicado, según ella, que consistía en un vestido azul marino con lunares blancos y unos zapatos de piso azules, básicamente ella era bonita con lo que quisiera, pero pocas veces usaba vestido, decía que eso era de señorita de clase alta y no era que ella no lo fuera, solo que ella estaba acostumbrada a convivir con hombres, pero los vestidos simplemente no eran de su agrado.

Eran alrededor de las 2:00 pm cuando sonó su celular, cuando vio el celular aparecía el nombre de Sasuke y una foto de ellos dos.

—Hola Sasuke— dijo en tono amable

—Hinata, ¿Ya estas lista? —dijo un Sasuke algo emocionado

—Mmmmm… si Sasuke ¿Pero aún falta una hora? —dijo dudosa

—Paso por ti en 10 minutos por ti ¿sí? — dijo con decisión y mucha autoridad

— Esta bien Sasuke, con cuidado—dijo dulcemente y colgó

Diez minutos más tarde…

TOC-TOC…

—¡Hola Sasuke! — dijo con euforia y emoción

—¡Pequeña! ¿Amaneciste bien? — dijo un tanto asombrado, Hinata verdaderamente era hermosa. Ella vestía aquel vestido azul marino con un toque de elegancia y delicadeza, su cabello estaba ligeramente recogido en una coleta alta con un pequeño moño y un ligero maquillaje tan solo con un poco de mascara de pestañas y un poco de sombra muy tenue, si verdaderamente Naruto era un imbécil por no declarársele a Hinata.

—Perfectamente, yo diría que ya no tengo nada— dijo de manera burlona pero triste, Sasuke sentido al instante el aura negativo de la joven y eso era molesto

—Hinata…—poso sus manos sobre los hombros de la chica y así obligarla a mirarlo a los ojos— tu eres más que esa enfermedad

—¡Pero sigue aquí, en mi cuerpo! —dijo algo molesta y herida, eso de verdad era hiriente, molesto

—Hp…. Vamos Hinata, sube al auto, enciendes el estéreo y no digas nada mas—dijo en tono molesto, Sasuke odiaba la negatividad de Hinata, como si 8 años no bastaran para ella

—Sasuke, no te enojes… perdón Sasuke—dijo con la cabeza gacha y siguiendo su camino al auto,eso era algo que no soportaba, había hecho enojar a su amigo, a su mejor amigo

Así siguieron un camino que ella no estaba muy segura de que los llevase a casa de Sasuke, más bien parecía que los llevaba a otra que le estaba comenzando a causar miedo y así llegaron a una enorme casa que ella conocía perfectamente, y eso verdaderamente la ponía nerviosa.

—¿¡Sasuke que hacemos aquí!? —dijo asustada y bastante alterada para ser una chica bastante pasiva

—Tranquila, me lo agradecerás y por favor no te pongas nerviosa— dijo en tono algo divertido, mientras bajaba del coche y fingía indiferencia ante la reacción de Hinata

Minutos más tarde comenzó a escuchar voces, que claramente provenían de afuera y eran dos voces que ella conocía perfectamente.

—Idiota—

—Torpe—

—Baboso—

—Imbécil— y con esto último dos jóvenes se subieron a aquel hermoso auto, donde se encontraba una ya muy nerviosa Hinata

—¡Hola Hinata! —dijo un Naruto muy emocionado y sonriéndole de manera dulce

—H-Hola N-Naruto—dijo poniéndose nerviosa al ver sus ojos tan azules y es que cualquiera se volvería loca con unos ojos tan azules y un chico tan guapo como lo era Naruto.

El camino a casa de Sasuke se vio solo por las discusiones entre ambos chicos y las risillas de Hinata, tardaron más o menos 15 minutos en llegar a casa del joven.

—Bueno, llegamos a nuestro destino… espero tengan hambre, mi madre cocino algo especial para ustedes dos— dijo en tono burlón y un tanto cortante.

—¿A qué te refieres? —dijeron el rubio y la peli-azul al unisono

—Hp, no pretendo decirles nada más, además yo ni siquiera debería de actuar amable o como si fueran mis amigos—pronuncio bajándose del coche

Naruto y Hinata se miraron y ambos se sonrojaron, así que los dos decidieron bajarse rápidamente del auto y entrar a la casa.

Naruto (pensamiento)

Sasuke-teme, de verdad eres muy poco considerado, me vas a matar con tantas emociones, Hinata me vuelve loco y es que una chica tan preciosa como ella… ¡basta Naruto! Contrólate, ¡SASUKE-TEME!.

Hinata (pensamiento)

Sasuke, porque me haces esto, seguramente me voy a morir muy pronto y por eso haces esto ¡SASUKE!.

Naruto comenzó a sentirse incomodo por el irrompible silencio, así que decidió romper el hielo y comenzar con su conquista, como Sasuke le había mencionado.

—Hinata… ammm yo, tu… esto—suspiro y tomo aire y valor—quiero conocerte más, desde que te vi por primera vez llamaste mi atención, pero bueno aunque no lo parezca soy tímido, bueno tú me intimidas, me pones algo nervioso —termino agachando la cabeza, eso verdaderamente lo ponía nervioso y es que Hinata es una chica como ninguna otra.

—Bueno, yo… Naruto a mí me encantaría tratarme más contigo— dijo tomando la mano del joven y sonriéndole dulcemente, aunque ella estuviera muriéndose de los nervios, lo hizo, Sasuke tenía razón no perdería a Naruto por timidez

Así Sasuke, se dedicó a ser el mesero más grosero y patán de todos (o por lo menos con Naruto) de los jóvenes. El resto de la tarde Hinata y Naruto se la pasaron riendo y contándose todo lo que pudieron y hablando de temas relevantes y tan solo por escuchar la voz del otro, mientras Sasuke se mensajeaba con Sakura y este le platicaba de su plan que al parecer tenía mucho éxito, y es que el no se daría por vencido hasta ver a sus amigos juntos. El sabia que ambos se querían, pero la timidez y el miedo al rechazo les impedía decir sus sentimientos.

Más tarde…

—¡SASUKE-TEME! Gracias, eres verdaderamente el mejor de los amigos y sin duda el más gruñón y enfadoso, pero lograste que tuviera una cita con Hinata— menciono un Naruto muy emocionado y lleno de felicidad, y es que acababa de pasar toda un tarde con la chica más hermosa en cuerpo y alma de todo el mundo.

—Naruto-Dobe, deja de llamarme así, y no tienes nada que agradecer, ella se lo merece y bueno tu igual, pero ella se lo merece aún más—dijo con cierta diferencia en sus palabras, pero era algo que a nadie le extrañaba de el joven.

 

¡Hola! vengo a dejarles el cuarto capítulo de esta historia, espero sea de su agrado y no defraudarlos, muchas gracias :D

Capítulo 4. Yo siempre te he querido


Hinata llevaba varias semanas sin tener el cuidado que solía tener con su salud, Sasuke se estaba preocupando por dos situaciones: uno Hinata no le había dicho a Naruto sobre su enfermedad y dos Hinata estaba descuidando su salud de manera inconsciente., el como buen amigo de la jovencita tenía que hacerla entrar en razón a ese paso su enfermedad empeoraría, sabiendo que lucho mucho para que esto no pasara y el no dejaría que nada afectara a su amiga, así que ese día en la mañana la llamo y quedo de pasar más tarde a su casa para platicar con ella. Al llegar se encontró con una chica ya arreglada y al parecer lista para irse al trabajo de su madre.

—Hinata, te has descuidado, te veo decaída y no con la misma energía de antes—dijo preocupado mientras veía como se encargaba de dejar las cosas lo más ordenadas posibles en su casa

—Mmmmm… ¿A qué te refieres? — dijo sabiendo hacia donde iba el pelinegro

—Sabes bien, Hinata entiende me preocupas, tu enfermedad, por favor no quieras hacerte la tonta y otra cosa habla con el baka, él no se merece que le mientas, el necesita saber la verdad— dijo serio y algo irritado, Hinata estaba tratando de evadir cualquier regaño

—Ya lo sé, pero no lo quiero lastimar, no me quiero morir y que…—Alguien la interrumpió

—¡Hinata no digas estupideces! —grito un Sasuke molesto

—Sasuke….— apenas pronuncio su nombre y agacho la cabeza, Sasuke tenía razón si no hablaba con Naruto y le pasaba algo, el claramente se enteraría y si hacia las cosas como ella quería de igual manera el saldría sufriendo

—Lamento hablarte así, pero Hinata, es tu decisión si empeoras o no, es tu decisión si hablas con Naruto sobre esto, pero sé que eres sensata y harás lo mejor — término ya más calmado, después de esto él le hizo una seña y esta avanzo hacia él y lo abrazo

—Nadie se merece algo así, hoy hablare con Naruto y seguiré con mis cuidados Sasuke, digo no eres la persona más cariñosa ni nada de eso, pero que tú me gritas así, no es la mejor sensación— y es que, que Sasuke le gritara era una sensación verdaderamente incomoda

—Lo siento Hinata— dijo serio, sabía que en el fondo ella no quería que nadie sufriera, pero tampoco podía aislarse de todo el mundo

—¿Puedes llevarme al trabajo de mi mamá? — pregunto algo decaída

—Vamos— y después de pronunciar esto el abrió la puerta de la casa

El camino hacia el trabajo fue tranquilo y algo agitado para Hinata pues cada minuto que pasaba ella se sentía más débil, Sasuke lo podía notar, pero no dijo nada. Cuando finalmente llegaron Hinata se bajó del auto haciendo una seña de despedida, pero ella no duro mucho de pie, solo dio un par de pasos y cayó al suelo sin que nadie la pudiera detener. Sasuke bajo del auto lo más rápido que pudo, la tomo en brazos y la subió al auto, para así poder llevarla al hospital.

Ya en el hospital, Sasuke llamo a los padres de Hinata y a Naruto, pensó mucho en llamarlo, pero el merecía saber lo que estaba pasando de una vez por todas.

— Sasuke ¿Qué sucedió?, ¿Hinata está bien? — Naruto sentía nervios, miedo… mucho miedo, no quería perderla ahora que estaba tan cerca de que ella fuese su chica

—Naruto… ella tiene que hablar contigo, espera a que puedas pasar a verla— dijo un Sasuke pensativo

Así pasó un rato, hasta que salió un doctor preguntando por los familiares de la joven, y así pasaron los padres de Hinata a verla y al salir Sasuke se ofreció a llevarla a su casa y a esperar a que llegara Hanabi, y pasó Naruto, estaba nervioso pues tenía un presentimiento, algo nada bueno.

—Hola Hinata — pronuncio el chico en un tono apagado, se sentó en la silla que estaba a un lado de la cama y Hinata se incorporó y suspiro. Ambos estaban nerviosos, pero no nerviosos por estar cerca eran nervios combinados con miedo y eso, se podía sentir hasta en el aire que respiraban.

—Naruto yo… estoy enferma, tengo leucemia— pauso, tomo aire y noto como Naruto dejo de mirarla y se perdió en la inmensidad de la ventana, pero ella sabía que estaba atento — no te lo quise decir antes porque tenía miedo y no quería que sufrieras, pero te lo dijera o no… sufrirías y por más que te quiera proteger no te puedo ocultar la verdad — volvió a tomar aire y vio como los ojos del chico se humedecían y sintió cono sus ojos también — Naruto, no se si valla a curarme o no, no sé si valla a morir o no… sin embargo sea como sea quiero estar contigo — termino y de sus ojos ya estaban saliendo cristalinas lágrimas.

—Yo… Hinata — Naruto se tallo los ojos y comenzaron a salir lágrimas, trago saliva — tengo que asimilar todo esto, no lo tomes a mal, no pretendo dejarte, no quiero, no podría hacerlo — Naruto se levantó de la silla y se inclinó hacia ella— solo déjame asimilar todos esto — sin dudarlo besó la frente de la chica y pronuncio — Siempre te he querido, desde que te conozco y no dejare de hacerlo ahora — dio media vuelta y salió de la habitación sin si quiera despedirse de Sasuke solo siguió su camino.

Sasuke entro a la habitación y rato después el doctor les dijo que ya se podían retirar, así con el corazón hecho pedazos Sasuke llevo a Hinata a su casa y se quedó hasta la hora de la cena, parecía que la joven acababa de perder su razón de vivir pero al mismo tiempo parecía que tenía aun una esperanza.