Pokemon: El Esperado Reencuentro

Tema en 'Fanfics Abandonados Pokémon' iniciado por darkhunter, 28 Julio 2008.

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    darkhunter

    darkhunter Guest

    Pokemon: El Esperado Reencuentro

    HellsKnight: no se extrañen de que este post sea de darkhunter, ya que HellsKnight es el apodo que uso para mis obras y no siempre como nombre de usuario.

    Este es el primer fanfic que hago de pokemon, de hecho es el primero que hago; aunque no es el primero que se me ha venido a la mente. Hace Mucho que deje de ver esta serie, siendo exactos desde que sacaron a Misty. Por alguna razón quise ver en que continuaba, pero lamentablemente todo sigue igual, Misty aun no regresa. Por esa razón quise hacer este fanfic, para tener mi propio final de la serie, uno que a mi me gustará.
    Hablando un poco de este fanfic podrán ver que es una historia de romance, es lo único que encontrarán, pero aun así espero que les guste y compartan aquel sentimiento de ver a Ash y Misty juntos. Es bastante corta pero muy emocionante.
    Espero sus comentarios.

    P.D: Lamento si no corresponden ciertos nombres, precisamente el de la Sra. Ketchum, hace unos años atrás vi que en un fanfic la llamaban Vilma, así que coloque el mismo nombre aquí.



    EL ESPERADO REENCUENTRO

    Han pasado 8 años desde que Ash inició su viaje para convertirse en el mejor maestro pokemon. Incontables han sido sus aventuras, donde ha conocido a muchas personas, formando amistades que han perdurado hasta el día de hoy. A pesar de que muchas las ha dejado atrás, siempre las recuerda con gran cariño, especialmente a una. Pero ahora su viaje se acerca a su fin, ha recorrido todo el vasto territorio del mundo pokemon, y en unos días será su prueba final. El torneo de mayor envergadura y el más importante, aquel que reúne solo a los mejores maestros pokemon, se aproxima a su fin. A llegado lejos, mucho le ha costado llegar a la final, sacrificios enormes ha hecho, a empleado todo su conocimiento, y era hora de que demostrara ser el mejor, su sueño estaba cerca…pero algo le hacía falta.


    Solo falta 1 día para la final, después de toda una semana sin batallas, un merecido premio, después de 3 meses de duras batallas. Por supuesto un merecido descanso para sus pokemon, quienes han hecho un gran esfuerzo. Ahora solo desea descansar en el hotel, y recordar lo vivido. Cruzan por su mente los recientes recuerdos de las batallas, cuando desde afuera escucha vitorear su nombre; solo esboza una sonrisa. Su fama se ha vuelto enorme, una gran cantidad de seguidores ha obtenido. Pero ellos solo les recuerda a sus amigos, que han estado en estos duros momentos con él. Ríe, sabe que sin su apoyo no estaría aquí. Muchos han venido, como Brock, Tracey, Gary, Richie, Duplica, May, Max, Maya, otros le han dado apoyo desde la distancia. Es entonces cuando vuelve a sentir ese vacio, ese que le ha acompañado desde varios años, desde que comprendió lo que había estado aconteciendo en su corazón desde hace mucho tiempo; más de lo que él había imaginado.
    -Por qué? por qué no está aquí ahora?- Se pregunta, y no logra obtener respuesta.
    Si es cierto le ha llamado y dado su apoyo constantemente, pero no se encuentra a su lado. Sigue sin encontrar razón.
    -Si tan solo lo hubiera comprendido antes, ella seguiría aquí- Se queda en silencio, al paso de unos segundos razona
    -No, no estaría aquí, de haberlo querido, ella habría vuelto.-
    Ya no quiere seguir pensando, ese vacío se ha hecho más fuerte, tal vez el dormir se lo quite. Sabía que no sería así, pero de todas formas se durmió.


    Yo… yo… te amo….tu me amas, verdad?... espera a dónde vas?, vuelve, no me dejes no otra vez…vuelveeeeee.- Despierta exaltado, ha vuelto a soñar con ella, sabe que la extraña, sabe que la ama, pero solo se resigna a secar las lágrimas, que en las noches lo suelen acompañar. Porqué no es capaz de ir en su búsqueda y decirle lo que siente, de abrir su corazón, tal como debió haberlo hecho hace mucho tiempo. Se levanta, aun se encuentra en una profunda oscuridad la ciudad, pero las estrellas la iluminan. Más aun su reflejo en el mar era precioso , al igual que ella.
    -No, no otra vez, porque no puedo?- Se cuestionaba
    –Debo poder quitarme su imagen, sino...sino moriré…-
    A pesar de que conocía muy bien lo que le acontecía, no era capaz de mitigar aquel vacío, aquel dolor.
    –Ya no puedo más, quiero estar con ella- Dicho esto tomó su mochila, y se dirigió a la puerta, al tomar el picaporte, se detuvo
    -No, no puedo- pensó, continuó
    –No saco nada al ir, si ella me amara, ya me lo habría dicho-
    Retrocedió,dejo su mochila y esta vez se quitó la ropa y puso la pijama. Acostado dispuesto a dormirse solo pensó
    –Quisiera estar a tu lado-
    A pesar de comprender lo que estaba viviendo, no era capaz de comprender que la razón de que ella no le dijera nada, era la misma razón que la suya.


    Ya no podía dormir, su cama estaba hecho un desastre de tanto moverse. Aquellos últimos 3 meses, no había parado de pensar en él. Recordaba placenteramente las conversaciones que han tenido por teléfono, pero no era lo mismo que estar a su lado y sentir su calidez. Han pasado 5 años, desde la última vez que se vieron personalmente, pero aquella vez no fue capaz de decirle lo que sentía. Era tan difícil más aun cuando no era posible encontrar un momento en que estuvieran solos.
    –Pero él no puso mayor énfasis a nuestro reencuentro- se dijo así misma,apenándose de sobremanera,
    nuevamente las lágrimas recorrían sus mejillas. Las noches se habían convertido en el deshago de sus penas. Durante el día, en su cara siempre se encontraba una sonrisa, pero eran las noches las confidentes de su tristeza. Cada una de las noches desde que comenzó el torneo se cuestiona si debe ir o no, cada noche concluye alegre antes de dormir que a la mañana partirá a su encuentro, pero cada vez se encuentra con lo mismo.
    –Si lo veo, no podre soportar estar con él sin decirle lo que siento...- A pesar de no querer reconocerlo, su miedo eterno era que él no sintiera lo mismo que ella,
    -…Solo me ve como su amiga, nada más.- terminaba por concluir, en la mañana, dejando de lado la idea de ir a por él.


    -Buenos días hijo- lo saludo su madre, el no respondió, solo atino a sentarse a desayunar.
    –Buenos días- dijeron al unísono Tracey y Brock, quienes también se hospedaban en el mismo departamento que Ash, nuevamente no hubo respuesta.
    –Buenos días te hemos dicho- aseveran los 2 muchachos; Ash despierta de sus pensamientos
    -Ohh… buenos días, no los había escuchado- atinó a decir, siguiendo con su desayuno.
    -¿Qué piensas hacer hoy?- continuo Brock
    -Aun no lo sé- respondió Ash, continuó
    -Quizás salga a pasear un poco, para relajarme-
    –Te acompañamos- sugirió Tracey.
    –No se molesten, estaré bien- respondió Ash,
    -Si tu lo dices- concluyeron sus amigos.
    El desayuno continuó normal, pero con un silencio reinante, distante de ser como los que solían tener durante sus viajes.


    Una vez Ash salió, su madre y amigos comenzaron a discutir su situación.
    –Desde hace días que está así, siendo más preciso desde los primeros días del torneo- Comentó Tracey, la Sra. Ketchum continuó
    –Bueno supongo que estará concentrado en el torneo después de todo es lo más importante que ha deseado en la vida-
    Tracey y Brock no asintieron, ambos tenían una misma idea de lo que le ocurría, pero sabían que era imposible entablar esos temas con Ash, conocían bien su temperamento.
    -Solo espero que se encuentre bien y no sea nada grave- concluyó la Sra. Ketchum, Tracey agregó
    -Estará bien, cuando termine el torneo, volverá a ser el mismo de siempre-
    -No hay de qué preocuparse- terminó por decir Brock.
    Pero en el interior ambos muchachos sentían que no era el torneo el principal problema que aquejaba a Ash.


    -¡¡Bulbasaur ve!!-
    -¡¡Ve Starmie!!-
    Las batallas se estaban convirtiendo en un martirio para ella, todas las batallas le recordaban a ese persona tan especial. Esta última semana ya apenas podía concentrarse en las batallas; al final terminaba siendo derrotada fácilmente. Sus hermanas ya comenzaban a sospechar que algo le ocurría. Sin embargo eran conscientes que sería imposible obtener la razón que la deprimía.
    –Starmie vuelve-
    Una vez más fue derrotada, su imagen no quería marcharse de aquellos ojos nublados por las lágrimas.


    Caminaba sin destino alguno, ya era insoportable el vacio que tenía, el cual le ocasionaba un dolor enorme. Mañana era la esperada final, pero él no podía pensar más que en ella. Lo único que deseaba era que ella estuviese a su lado ahora y para siempre. Ya no sabía si sería capaz de ganar el torneo, a pesar de haber arrasado en las batallas anteriores. Estaba pasando por el momento culmine de su dolor, ella era todo lo que se encontraba en su mente y en su corazón. Decidió dirigirse a la playa, el mar era lo que más le recordaba a ella. Una vez allí, se sentó en la arena, miró al horizonte y su vista se nublo, bajo la cabeza mientras las lágrimas recorrían su cara hasta caer en la arena para filtrarse en ella.
    –Ash, Ash…- esa voz le sonaba conocida
    -¿Te encuentras bien?- seco rápidamente sus lágrimas y volteó. Se llevo una sorpresa al ver que eran Jessie, James y Meowth.
    –Hola muchachos- atinó a decir. Los tres se le acercaron, sabían que algo no andaba bien.
    -¿Vamos dinos que sucede chimuelo?- insistió James,
    -No es nada- respondió Ash con clara inseguridad.
    –Vamos, confía en nosotros- lo animó Jessie.
    -Vamos, por favor habla, que no aguanto verte así- Meowth, con su clásico sollozo.
    –Son persistentes ehh- rieron, Jessie continuó
    –Claro sino no te hubiéramos seguido durante 5 años- rieron nuevamente.
    Aquellos que persiguieron a Ash durante 5 años y que hace 3 se habían convertido en fieles amigos y compañeros de viaje, lograron obtener la razón que lo afligía.


    -Pues qué esperas ve por ella!!!- Le incitó Jessie
    -Acaso crees que Jessie y yo seguiríamos juntos si no le hubiese dicho lo que sentía- cuestionó James, Jessie se sonroja
    –Ja..mes…-
    En ese momento Ash comprendió lo que debía hacer, había sido un tonto no se había dado cuenta de que él tenía la clave para acabar con el vacío que lo estaba matando. Solo atinó a levantarse y agradecer al ex team rocket. Luego corrió en busca de sus pokemon al centro pokemon, necesitaba de su ayuda para llegar rápidamente a ciudad Celeste. Jessie al verlo correr comentó
    -Lo logrará-, James afirmó mientras abrazaba a su amada.


    Al llegar al centro pokemon, Joy se sorprendió de la repentina visita de Ash, y más aun cuando éste le pidió sus pokemon, puesto que aun no se habían recuperado plenamente. Una vez llegaron, pikachu se dirigió corriendo a él saltando a su hombro.
    –Vamos pikachu, estoy seguro te alegrarás de verla- le dijo Ash mientras tomaba el resto de sus pokemón y salía del centro.
    Afuera llamó a Charizard, rápidamente montó en él, y le dio la orden de volar a ciudad Celeste. Era realmente agradable volver a montar en él, le traía bellos recuerdos. Se alegraba a la vez de haber vuelto a reunir todos sus pokemón, incluso a aquellos que se quedaron para cuidar de otros. En el torneo había necesitado de ellos.

    Pikachu aun no reaccionaba, incluso él se cuestionaba de que le ocurría a su entrenador, estaba en estado de confusión, pero no quiso cuestionar a Ash, lo veía demasiado animado como para interrumpirle. Pocas veces lo había visto así, pero está vez era diferente, la emoción que lo desbordaba no era la misma que en otras ocasiones.

    El viaje era más largo de lo esperado, charizard estaba agotado y ya estaba atardeciendo, pero faltaba tan poco. Ash le pidió que resista, pues era muy importante llegar lo más pronto posible. Charizard comprendió a su entrenador y siguió su marcha, con vuelo firme. A Ash le temblaba el cuerpo, pero no era de frío, a la vez las manos le sudaban demasiado. Estaba ansioso lo único que deseaba era llegar lo más pronto posible para verla. Vinieron derepente a su mente las palabras del ex-team tocket, luego reflexionó
    -Parece imposible que de quien menos te lo esperas, recibas el mejor consejo- pensó, continuó
    -Falta poco, pronto estaré allá y podre decirle lo que siento- Pikachu se apoyo en él, queriendo compartir su alegría.


    -A donde se ha ido???- gritó la Sra. Ketchum , estaba preocupada porque aun no llegaba Ash.
    Brock y Tracey no tenían respuesta, pero si al menos una idea de dónde podía estar, sin embargo no quisieron decirla.
    –Cálmate Vilma- le sugirió el Prof. Oak.
    –No puedo!!, mi hijo se fue, y no sé dónde diablos está- gritó nuevamente.
    Mañana era el torneo y Ash no se encontraba en ningún lado. Su madre no podía calmarse, su único hijo había desaparecido justo antes de lo que ella pensaba era lo más importante para él. Lo único que tenía cabida en su mente eran los más trágicos sucesos. No pudo sostener más el nudo en la garganta y rompió en llanto, tenía miedo de perderlo para siempre, lo único que tenía. El Prof. Oak hizo que se apoye en él.
    –Ash, mi niño dónde has ido?- se preguntó a sí misma.
    –Él ha ido a buscar lo que más quiere en la vida- dijo Jessie irrumpiendo en escena y contestando a la pregunta de la Sra. Ketchum, a lo que ella preguntó
    –A que te refieres? Él lo que más quiere es ganar este torneo.- Brock interrumpió ignorando la pregunta
    –Entonces han sido ustedes quienes lo ayudaron?- James respondió
    –Claro, no podíamos verlo sufrir, quedándonos de brazos cruzados-. La Sra. Ketchum algo más calmada, volvió a insistir
    -No entiendo, ¿a dónde se ha ido?- Meowth subió a la mesa de la cocina para poder ver de frente a la Sra. Ketchum.
    -Señora, Ash ya no es un niño, él ha comprendido que hay cosas más importantes que la fama, el orgullo, la gloria. Él ha ido a buscar el amor-
    La Sra. Ketchum quedo atónita, será verdad lo que decía Meowth, será verdad que su hijo ha ido en busca del amor, al final sólo se limitó a decir.
    –Pero.. a quién?- Tracey le contestó
    –Ya lo sabrá-

    La noche comenzaba a caer, una hermosa noche estrellada se comenzaba a estampar en el cielo.
    -Estamos cerca charizard ya puedo ver la ciudad- Ash daba animó a su pokemon,
    éste estaba agotado, pero faltaba tan poco, unos minutos más y vería a la persona que más ama. Se confundían los corazones agitados de ambos, solo se diferenciaban por el sentido de su rápido latir. Luego de unos minutos más de viaje pudo divisar el gimnasio. Descendieron, una vez en tierra Ash guardo a charizard.
    -Gracias amigo, has hecho un gran trabajo-
    Estaba aquí, lo había logrado, por fin podría dar fin al dolor que lo ha seguido más de 5 años. Corrió a la casa aledaña al gimnasio, estaba tan ansioso de verla que aquel pequeño tramo fue tan largo como el viaje realizado. Tocó a la puerta, sentía que el corazón le iba a estallar, ya no tenía cabida en su pecho. Cuando se abrió la puerta solo gritó…
    -Misty!!!!-

    -Misty no se encuentra- Se limitó a decir una de sus hermanas. No…era imposible, no era verdad, solo balbuceo:
    -No…no…puede...ser-
    Sintió sus piernas temblar, apenas se sostenía en pie, las fuerzas le fallaban, su respiración era entrecortada, su corazón se había detenido, se sintió desfallecer. La chica lo sujetó antes de que cayera
    -Misty se acaba de ir hace unos minutos- atinó a decirle la chica. Entonces las fuerzas le volvieron, todavía había oportunidad de encontrarla, solo debía apurarse.
    –A dónde se ha ido?- preguntó Ash, la chica se encogió de brazos
    -No lo sé, no dijo a dónde se dirigía…- antes de que Ash desfallecerá nuevamente, continuó
    –Pero puedes alcanzarla en la estación-. Dicho esto Ash solo corrió, aún recordaba donde quedaba la estación. Mientras la chica se preguntó:
    –Ese era Ash?-, solo esbozó una sonrisa como respuesta.


    Pikachu apenas podía mantener su ritmo, estaba corriendo lo más a prisa que podía, si la dejaba ir en ese momento él no sabría qué hacer. En su mente sólo se encontraba el bello rostro de Misty, todo lo que deseaba estaba a punto de marcharse, y sería su culpa. Lo único que quería en aquel momento era poder encontrarla, y decirle lo que lleva guardado más de 5 años. Ya se estaba acercando a la estación
    -Solo un poco más- Se dijo a sí mismo.


    Quedaban solo 10 min para que partiera el expreso, de pie mirando la hermosa noche solo podía pensar en él, a la vez que se preguntaba si sería lo mejor. Lo había decidido repentinamente, pero estaba segura de que era la mejor opción que podía tomar si es que de verdad quería hallar la felicidad.
    -Ash …si solo supieras lo que siento- Se dijo Misty mirando al cielo, observando aquellas resplandecientes estrellas.
    –Si solo lo supieras que te…-
    -Si solo supiera qué?- La interrumpió una cálida voz.
    Podía ser?, sería verdad?-Su corazón latía exageradamente, sentía que se saldría de su pecho . Giro lentamente, y solo pensaba
    -Fue mi imaginación, fue mi imaginación, fue…-
    Pero ahí estaba de pie frente a ella, no podía creerlo, era Ash, de verdad era Ash. Lo único que reaccionó a hacer fue abrazarlo tan fuerte como pudo, no quería dejarlo ir. Ash solo se limitó a acariciarle el cabello, ella mantenía su cabeza apoyada en su pecho, no quería que la viera llorar, así era mejor ella tampoco vería rodar el par de lagrimas que derramaba. Después de unos minutos se soltaron, ambos estaban ruborizados, pero no les importaba, pues estaban con la persona que más amaban.
    –Misty…- comenzó Ash,
    apenas salían las palabras de su boca, estaba temblando, nunca le había sido tan difícil hablar con Misty, pero ahora apenas podía articular palabra.
    –Yo…yo- continuó, ella le tomó las manos queriendo darle fuerzas, estaba esperanzada en que sería lo que quería escuchar.
    -Yo no…quiero que te vayas… quiero… que te quedes conmigo- se limitó a decir Ash.
    No era precisamente lo que ella esperaba, pero aun así se alegraba.
    -Si eso es de verdad lo que quieres entonces volveré a viajar contigo- le dijo Misty sonriéndole, a la vez que bajaba la vista, ya no estaba segura si él de verdad la amaba.
    -Hay algo más…- continuó Ash,
    -No solo quiero que me acompañes en mis viajes, quiero que sea para toda la vida porque …te amo.-
    Las palabras de Ash calaron hondo en Misty, tocaron sus corazón, lo que acababa de decir era lo que había querido escuchar desde que le conoció. Sus ojos se llenaron de lágrimas mientras se lanzaba al cuello de Ash, eran lágrimas de alegría. Se separaron un poco, para poder verse detenidamente a los ojos, acercaron sus rostros lentamente, sus labios fueron rozándose con suavidad hasta quedar atrapados en un beso eterno. El mundo había desaparecido para ellos, estaban sumergidos en un mar de sensaciones que ninguno de los dos podía definir, solo deseaban que no terminara jamás.
    Pero el expreso los despierta de su sueño eterno, era hora de partir. Misty se separa de Ash.
    –Vamos, debemos darnos prisa-, le dijo mientras lo llevaba de la mano a tomar el expreso.
    Pikachu que había estado observando toda la escena corrió tras ellos. Una vez dentro, tomaron asiento en una cabina solitaria, Ash estaba confundido, no sabía porque Misty le hizo tomar el expreso, si le dijo que se quedaría con él. Solo se limitó abrazarle, luego de unos instantes le preguntó
    –Por qué hemos tomado el expreso, a dónde vamos?- Misty le sonrió
    –Vamos a ver la final de un torneo-. Ash quedó dubitativo,
    -Te refieres a…- Misty lo interrumpió
    -Sí, a tu final- luego le besó, se apoyo en su pecho y continuó
    -No podía soportar más estar lejos de ti en un momento tan crucial, pero no quería estarlo como amiga- con un tono más lúgubre prosiguió
    –Siempre he querido estar a tu lado más que como un amiga, pero siempre había tenido miedo de que no me correspondieras-. Ash acarició su cabello se limitó a agregar
    -Yo quería decirte hace mucho tiempo lo que sentía, pero lo único que me detenía era el que tu nunca quisieras volver a viajar conmigo- concluyó la frase con tristeza.
    –Hemos sido tan ciegos, no hemos visto lo que cada uno sentía por el otro.- Terminó por concluir Misty, Ash asintió. Al internarse más en la noche ambos se quedaron dormidos.


    -Ash aun no ha llegado!!-
    -Calma Vilma, tal vez ya está en el estadio- Trató de aliviarla el Prof. Oak,
    -Eso espero- dijo apenada la Sra. Ketchum.
    Solo faltaban un par de horas para la gran final, pero aun no había señales de Ash. Decidieron entonces ir al estadio, con la esperanza de hallarlo ahí. En el camino Conversan Tracey y Brock.
    –Crees que lo haya logrado?- preguntó Tracey,
    -No lo sé, si no ha vuelto, creo que es lo más probable-respondió Brock.
    –Ese par necesitan estar el uno con el otro- siguió Tracey,
    Brock asintió, en el interior ambos querían que así fuera, ya no soportaban ver mal a sus amigos.


    Ash despertó, ya estaba claro, el sol se encontraba en lo más alto del cielo. Dirigió la vista a su amada, ahí se encontraba durmiendo aún placenteramente sobre su regazo. Decidió echar un vistazo a la hora.
    -Diablos!!!- gritó. Misty despertó exaltada
    – Que? qué pasa??- solo atinó a decir.
    -Es hora de irnos- Dijo Ash algo agitado. La tomó de la mano y se dirigieron al final del expreso.
    -Qué vamos a hacer??!!- preguntó Misty ya más despierta.
    Él no respondió solo llamó a charizard y montó en él, luego le ofreció la mano para que ella también subiera, pikachu subió también. Emprendieron así vuelo hacia el estadio. Debían llegar rápido por lo que charizard se exigió al máximo. Misty abrazaba fuertemente a Ash, eso a él le traía grandes recuerdos de cuando viajaban juntos, recuerdos que guardaba con mucho cariño.


    Ya el estadio estaba repleto, la gente está ansiosa por ver la final, la gran esperada final. Habían sido 3 meses de arduas batallas, y era momento de ver quién era el mejor de todos. Pero porqué aun no empezaba la batalla, dónde estaban los entrenadores. Se empezaba a sentir denso el ambiente, el público comenzó a inquietarse. En el subterráneo conversan los organizadores con Rudy, el otro finalista del torneo, ya casi se cumplía el tiempo reglamentario de espera. En aquel momento se escucha al publicó reaccionar. Una gran conmoción se ha creado respecto a algo a la distancia que se acerca a gran velocidad.
    –Es Ash!!!- grito Tracey a sus amigos, luego de mirar por los prismáticos
    –Y viene con Misty!!!- agregó. Todos se pusieron de pie para poder apreciar bien su llegada.


    -Hemos llegado- se limitó a decir Ash, Misty asintió.
    Bajaron directamente a la plataforma, Ash ayudó a bajar a Misty y luego guardó a Charizard. Era momento de despedirse, no sería por mucho, pero sus corazones no querían alejarse, había sido mucho el tiempo que pasaron separados. Un beso fue suficiente aliciente para que soportaran observarse a la distancia. Había llegado el momento, el vacio que lo había estado torturando había desaparecido, su corazón latía aliviado ahora. Aquello se reflejaba en su mirada, era diferente a la que tuvo en las batallas preliminares. Reflejaba confianza, seguridad, pero principalmente regocijo. –Es hora- se dijo a sí mismo.


    Ambos contrincantes demostraron ser merecedores de estar en la final, su determinación los hacía implacables. Sus pokemon lucharon hasta el límite de sus capacidades en cada uno de los combates. Llegado el momento de la batalla decisiva, era hora de elegir a un fiel compañero de viajes y amigo inseparable. Fue pikachu quien salió en búsqueda de la victoria final. Era momento de demostrar que era el mejor. Pero las cosas no empezaron bien, pikachu estaba débil, tal vez no fue pertinente elegirlo, se cuestionaba si habría cometido un error.
    –Vamos Ash!!!!- escuchó a la distancia, era su amada, que lo apoyaba junto a sus amigos. Sonrió, no había error alguno, solo debía confiar.
    –Vamos pikachu!!! Impact trueno!!!-
    El ataque fue devastador, no podía haber pokemon que resistiera un ataque semejante. El pokemon de Rudy yace en el suelo inconsciente.
    –Ash es el ganador – gritó el juez.
    Lo había logrado, se había convertido en el mejor, pero todo aquello no valdría nada de no ser por la persona que corría a él, su amada Misty. Ella lo abrazó fuertemente
    –Lo has logrado, eres el mejor!!!- le dijo, sin poder contener la desbordante alegría que le apoderaba.
    –Todo ha sido gracias a ti- argumentó Ash, mientras acercaba su rostro para besarla.


    Todos aplaudían, era un momento único en la vida, su madre no paraba de sollozar, ella no podía creerlo. En qué momento su hijo se convirtió en todo un hombre, no paraba de preguntárselo, ahora él ya no sería más su bebé. En aquellos momentos el estaba convirtiéndose en el esposo de la mujer que más ha amado en la vida. No había cabida para más emociones en su interior, su corazón latía de sobremanera, le recordaba aquella vez que él la buscó. Ella no sentía nada diferente, sus emociones eran las mismas que él sentía. Apenas podía colocarle el anillo, le temblaban demasiado las manos, pero cuando por fin pudo ella procedió a colocarle el suyo. Una vez sus vidas estuvieron entrelazadas, simbolizadas por esos anillos, el público con picardía solo pedía el beso, que culminaría por demostrar aquel sentimiento único que sentían el uno por el otro. Ash y Misty no podían negar aquella petición, y unieron sus labios en un eterno beso, como aquel primer beso que se dieron 3 años atrás.



    FIN



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    Espero les haya gustado.

    HellsKnight

    "Hail and Kill"
     
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