Ouran High School [One-shot|Song-fic] Se esfuma el amor [TamaHaru]

Es un song-fic. La canción es Se esfuma tu amor, de Marc Anthony.

Tamaki / Haruhi.​

Quiero decirte que creía en tu palabra
Quiero explicarte que la vida era a tu lado
Que había puesto yo mis sueños en tus manos
Que sin dudar te seguiría
Sin preguntarte confiaría​

Suspiró dejando descansar el mentón en su mano vacía, observaba con tranquilidad el incómodo y lujoso anillo que llevaba en el dedo, símbolo de un matrimonio recientemente consumado. Sonrió en silencio. Ser la señora Suou era un orgullo para ella ahora, significaba tantas cosas..., Tamaki le dijo que todo estaría bien, que no le importaba su familia con tal de estar a su lado y así era.

Vivían en un poco lujoso apartamento en el centro de la ciudad, fácil de conseguir gracias a los contactos de su actual esposo. Seguía siendo no más que una plebeya, pero el completamente feliz.

Con el correr del tiempo te fuiste alejando
Como quien parte poco a poco y para siempre
Dejando atrás lo que fue parte de tu vida
Tomando lo que no era tuyo
Lo que no te correspondía ​

Por favor...

Él le había rogado y ella había accedido. Después de todo, era su familia y entendía que él no podía darles la espalda. Vio como sus ojos azules brillaban con nostalgia y emoción al traspasar las amplias puertas de la mansión principal de su familia, algo en su pecho dolió, se podía ver a simple vista, que él al fin estaba en casa.

Los días pasaron volando, nuevamente entre el lujo y los caprichos. Cada día se acostaba muy entrada la noche a su lado; pero, nuevamente lo entendía, su abuela estaba muy enferma, tenía que hacerse cargo de todo puesto que su padre estaba atendiendo unos negocios en América.

Y todo todo queda en cero amor
Y nada nada queda en su lugar
Ahora mi corazón se parte en dos
Se quiebra mi vida
Profunda la herida
Que deja ciega toda la ilusión
Que deja abandonado un sentimiento
Se parte, se quiebra, se pierde en el tiempo
Se escapa, se vuela, se esfuma tu amor ​

Tomó en una maleta todas las cosas con las que había traspasado esas puertas y se marchó. Sabía que Tamaki la buscaría para otra tediosa cena, pero ella no estaría esperándolo esa noche en la habitación. Para cuando él lo notara, ella estaría ya muy lejos de él y todo su venenoso mundo.

Día tras dia soportó ver como volvía a ser el chico rico que solía ser, que le pidió que no siguiera trabajando para no empañar el nombre de su familia, que ahora ella portaba, que llegaba tarde a casa, y que no dejaba de dar órdenes y no hacía nada por sí mismo.

En la mesa de noche brillaba su anillo de compromiso; ya no le pertenecía a ella.

Con las manos tan vacías que.....

Como matar de un día para el otro
Lo que con tanto empeño he protegido
Y quedarme con mis sueños en pedazos
Armarlos y recuperarlos
Saber que soy un hombre que ha perdido ​

La esperanza traicionera le decía que él correría tras ella. Pero pasaron tres largos meses antes de que la puerta sonara, y al abrirla, su cabello rubio junto a una jovial sonrisa la sorprendieron.

—Hola, Haruhi.

Ella se hizo a un lado, para dejarle pasar, pero él negó suavemente.

—No, vine por ti. Volvamos a casa... pensé que necesitabas espacio y pensarlo bien. Pero te extraño, quise venir antes, pero estaba ocupado, mi abuela empeoró, debo estar a su lado...—comenzó a explicar, y tras de esa siguieron muchas excusas. Y con cada palabra, el corazón de Haruhi se fracturó más.

—Adiós. —Sin decir más, le cerró la puerta en la cara, mientras se recostaba de la fría madera y se dejaba caer en el suelo, mientras de sus ojos brotaban lágrimas.

Todo había terminado.