Sangre [K-ON] Título: Sangre Summary: Hacía mucho tiempo que no la veía, y le fascinaba. Clasificación: M Famndom: K-ON Advertencias: Violencia, Muerte de personaje, Ooc justificado, Sin Beteo, los errores son sólo míos. Género: Horror. Cantidad de palabras: 1.579 ------------------------------------------------------- Ese sonido, lo detestaba. El despertador sonando le destrozaba los tímpanos, con la mano débil y temblorosa detuvo ese tintineo. Se levantó lentamente, dejando ver su bella cabellera marrón chocolate; que aunque alborotada, era muy brillante y agradable al tacto. Se miró en el espejo un momento y la peinó, logrando que quede prolija; luego tomó el uniforme y se lo puso con pereza, odiaba esa primera parte del día. Al final, simplemente se puso un par de broches amarillos en uno de los mechones del flequillo, dándole ese toque de orden y estilo. Se descubrió repentinamente bajando las escaleras que daban al comedor, donde la esperaba su queridísima hermanita con el desayuno listo. —Buenos días, Yui— saludó alegre—. ¿Cómo has dormido? —Bastante bien... —respondió llevándose una mano a la cabeza para rascarse—, tuve un sueño muy extraño, Ui. Había unos aliens sobre unos robots que quería esclavizar a la raza humana, pero luego apareció Ritsu y, y... les puso unos tutús rosas. Después Mio-chan se acercó y los derribó, fue muy valiente... — relataba mientras hacía gesticulaciones con las manos. La menor largó una pequeña risita, era normal que su hermana tuviera sueños descabellados—. ¡Ah, sí! También estabas ahí, tú me salvaste cuando me caí en un pozo.<img src=" /> —¿Un pozo...? Pues me alegro de haberte salvado —contestó sonriente—. Ah, mira la hora, ya se te hace tarde... —¡Cierto! — exclamó fuertemente. Tomó una tostada que llevaba queso untado y se la llevó a la boca, acto seguido salió corriendo. Llegó al instituto unos minutos más tarde de que la campana sonara, a pesar de que había corrido todo el camino y tenía el estómago revuelto. Sin embargo, cuando entró al salón, agitada y desalineada, la profesora estaba ausente, aún no había llegado, así que aprovechó y se sentó en su lugar. No sin antes, claro, saludar a Nodoka. —Ah, Yui... —dijo la castaña señalando la pierna derecha de su compañera—, mira, parece que tienes raspado. Y en efecto, así era. En su rápida salida su media se había trabado con algún alambre o fierro salido y eso la había roto. Y esto no era lo único, tenía un pequeño raspón en la parte rasgada, no era muy grande, pero lo suficientemente profundo como para sangrar. Aunque su compañera pensaba que iría corriendo a la enfermería, Yui se quedó quieta mirando el raspón, aún más específicamente, la sangre. Hacía mucho que no la veía, pues nunca se lastimaba profundo, siempre eran heridas superficiales. El líquido era más rojo de lo que recordaba, del mismo color que las pelotas que se ponen en los árboles de navidad; era también un poco espesa, pero eso no evitaba que corriera por la parte visible de su piel, bajando descendentemente como una cascada a sus ojos. La joven se excusó y salió rápidamente para la enfermería, o eso dijo; pues en realidad fue al patio donde pasó toda la hora mirando el líquido rojizo, ahora coagulado. Recordó que hoy le tocaba ensayo con las chicas, así que se apresuró a llegar al salón donde el Club de Música Ligera llevaba a cabo sus actividades. Cuando abrió la puerta fue recibida por las otras tres integrantes, que la miraron sonrientes. —¡Tu pierna, Yui! —exclamó la rubia alarmada —Está bien, Mugi-chan. Es solo una cortadita —fue la réplica—. Mejorará rápido. Un poco más tranquila, la tecladista cortó para la recién llegada una porción de un suculento pastel de crema con fresas, a la castaña ya se le hacía agua la boca cuando Tsumugi cortó su dedo con el cuchillo. Llevó inmediatamente el dedo a su boca, no porque le doliera, sino que el resultaba desagradable que otros vieran la sangre ajena. A su parecer, era algo descortés. Ritsu y Mio le brindaron ayuda inmediatamente, lavaron la cortadura con un poco de agua embotellada –haciendo un gran desastre en el suelo- y luego poniéndole una bandita encima. Mientras estas tres se dedicaban a esto, Yui no había apartado sus ojos del dedo mayor de la mano derecha de Mugi: el accidentado. De la nada, una pequeña risa resbaló por sus labios entrecerrados y rascó con pesadez la sangre coagulada de su pierna, causando un nuevo sangrado. —Ahora que veo esto recuerdo que en una revista dijeron algo impactante sobre la sangre—dijo Ritsu de repente, mirando el dedo de la rubia, pasando a la pierna de la guitarrista y viceversa—. Mencionaron que el color rojo era diferente en cada ser humano. Mira, La sangre de Yui es un poco más chillona que la de Mugi. —No hablemos de esto... —pidió la bajista—, no es necesario saber el color de... eso... —Vamos, Mio... sabes que quieres descubrir el color de tu... sangre —lo último lo había dicho en tono tenebroso, susurrado en el oído de su amiga de cabello negro. Ésta se estremeció y salió corriendo del cuarto mientras lagrimeaba, como era de esperarse. Pero Yui continuaba mirando ese dedo herido. Podía ver la parte de afuera de la bandita tornarse rojiza por la cantidad de líquido que brotaba del corte. Las otras dos intercambiaron miradas fugazmente, su amiga se estaba comportando muy extraña, ¿sería que también le pasaba lo que a Mio? ¿Le tenía tanto miedo a la sangre que se había quedado tiesa? —¿Te encuentras bien Yui? — preguntó la tecladista. Sin embargo, lo que ambas escucharon como respuesta fue solo un murmuro— ¿Qué has dicho? —¡Déjenme verla! — gritó. Y en un arrebate de furia golpeó a la más hiperactiva con su guitarra, pero no pasó mucho tiempo para que le pegara a la otra. Eran golpes secos, el único sonido que podía distinguirse era el de las cuerdas de la guitarra que sonaban irregulares, el de algún que otro hueso quebrado y el vano intento de sus amigas por gritar, pues solo podía escucharse un pequeño silbido. La castaña sentía cada impacto en los vellos de sus brazos, corrientes eléctricas por el cuerpo, piel de gallina, se sentía viva. Cuando se cansó pudo ver a las dos jóvenes tendidas en el suelo, con las extremidades rotas y la cabeza hacia un costado, que no dejaba ver su rostro ahora desfigurado por los fuertes golpes. El instrumento también se vio dañado por la violencia con la que se lo trató, el cuello de ésta tenía como tres o cuatro fracturas, y la cuarta cuerda al igual que la segunda se habían roto. Además de que en una de ellas había un mechoncito de pelo amarillo, pero no podía determinar en cuál ya que al romperse ambas se habían enrollado entre ellas. El piso estaba, ahora, no solo mojado con el agua sino también manchado con sangre de las jóvenes, al igual que el arma suicida, que gota por gota depositaba el suero en el piso. Solamente en ese momento pudo apreciar realmente la diferencia entre los tonos de ambos fluidos. Era cierto lo que había dicho la baterista, pues a la luz se podía notas que el matiz de uno y de otro era totalmente diferente. Mientras que la de Ritsu era de un color brillante, casi chillón que hizo dar un pequeño salto a la asesina, la de Mugi era más oscura, pero no menos bella, ya que ese tono apagado le daba un hermoso toque de elegancia. Era inmedible el júbilo de Yui en ese momento, no conocía esa parte suya, pero le gustaba que estuviera tan alegre. Entonces, detrás suyo pudo oír la puerta abrirse, seguido de la voz de Mio. —Espero que hayan dejado de lado el tema de la sangre y todo eso —exclamó con los ojos cerrados mientras entraba en el cuarto—. Si van a seguir avisen que me... Fue entonces cuando vio los cuerpos frente a ella. Desfigurados, deformes, sin vida. Se llevó las manos a la boca, aunque lentamente. No podría definir que tanto temor sintió, pero sea cual sea la cantidad no se comparaba a la confusión. Diez minutos habían pasado desde que se fue hasta que volvió al salón, ¿tanto tiempo había sido? ¿Cómo para cometer un asesinato? Escuchó pasos firmes a sus espaldas. No quería darse vuelta, de hecho, no lo habría hecho de no haber sido por la petición que escuchó acompañada de esos pasos. Era un tono conocido... —Mírame, Mio-chan. Lo único que diviso fue una cabellera marrón alborotada, pero brillante. También un reflejo anaranjado, a causa de la luz impactando en la guitarra. Después de ese milisegundo, su vista se nubló completamente y sintió un punzante dolor en su cabeza, luego en sus piernas y por último en su garganta... ------------------------------------------------------------------ Pudo escuchar entonces a su hermana gritándole desde abajo. Miró el reloj y se dio cuenta del poco tiempo que el quedaba antes de llegar a la escuela. Se vistió y peinó tan rápido como pudo y aún así ni siquiera terminó de hacerlo, ya que dos de los botones de la camisa quedaron sin abrochar, el cierre de la falda estaba bajo aún y una de sus medias estaba rasgada en el costado. Bajó las escaleras a toda velocidad, tomó una tostada que tenía mermelada encima y abrió la puerta, sin embargo se detuvo al oír hablar a Ui. —¡Auch! Me he cortado con el papel... La Hirasawa mayor dio una media vuelta lenta sobre su pie y bajó la cabeza. Se acercó con pasos resonantes a su hermana y apoyó una de sus manos en su hombro. —Déjame verla.
Re: Sangre [K-ON] *Babea *_* Awwwwww me encanta xDDD, no he visto K-ON pero se quienes son los personajes, y solo el leer algo tan bello hace que me imagine todo *o* Escribes bien, falta un poquito de detalle pero te quedo bien aswqas, nunca habia leido un escrito 'sadico' en el foro <3
Re: Sangre [K-ON] Antonio♥: Ya sé que no te gusta, por eso te lo mostré, LOL. Gracias por leerlo, de todas formas xD Ivan Braginski: Si... Yui Yandere es como una utopía. Es normal que falte detalle, pienso yo, pues no solo es el priemro en el foro, es el primero que escribo también xD. Michas gracias por leer y comentar :3
Re: Sangre [K-ON] no soy adepto al gore y el horror (pero en cierta forma son divertidos xD) bien, me gusto en si el relato, fue corto pero suficiente para que me pareciera bueno. Es bueno ver de ves en cuando este tipo de facetas en un personaje y si se espera sentir ñañaras con un fic, este ayuda... y mucho xD me pareció bien narrado y todo. es todo por ahora... :banana: