Para la actividad: Días de Abecedario 3.0 O de: Ocaso El ocaso de un laborioso día, ¡qué cansado es! Pero existe uno que no se compara, es otro que también se ve. Es el ocaso de la vida, en el que los años se han acumulado, cuando los dos luceros a la luz no dan cabida y el resto de los sentidos se han eclipsado. En la piel abundan las líneas marchitas, las hebras plateadas han coronado, resulten estas benditas, porque la sabiduría han albergado. La parte externa se ve cansada, pero la interna satisfecha está por lo vivido, no importa pues si el tiempo se acaba, porque ya la misión se ha cumplido. ¡Oh, ocaso de la avanzada vida, que ceda el paso a la funesta noche! Que por fortuna no será eterna, porque se despertará para vivir la vida que sí es.