Not evertything is whats is believed

Hola, buenos días/tardes a todos, este fanfic lo habia publicado en otra página, Foros Dz, pero fue eliminado (por un problema de sevidor) Espero que les guste, lo he mejorado un poco ya que lo escribi hace meses. Tenia el mismo titulo pero en español, que seria "No todo es lo que se cree" pero no me gustaba como sonaba.

Aclaraciones: No tendra SasuSaku ni NaruHina, la chica con quien terminará Sasuke sera inesperada (para ustedes, no para mi haha).

Parejas:
NaruSaku.
KakaSaku.
SasuHina
KibaHina

Not evertything is whats is believed

Capítulo 1.

Era una hermosa tarde en Konoha, los pájaros cantaban y el sol brillaba; una tarde perfecta para muchos pero para otros era el peor día de sus vidas, con esto me refiero a Sasuke Uchiha, un joven de 25 años, cabellos de color negro azulado, ojos negros, piel nívea y cuerpo atlético, esposo de una bella mujer y padre de dos hermosas criaturas, Kaisuke Uchiha Haruno, un niño de 4 años de edad, idéntico a su padre pero con ojos color esmeralda como los de su madre, y, Saruki Uchiha Haruno, una bebe de apenas 1 año de edad, igual a su madre pero sus ojos idénticos a los de su padre, negros. La madre de estas dos criaturas y esposa del joven es Sakura Haruno de Uchiha, una joven un año menor que él, hermosos ojos color verde esmeralda, piel clara y un bonito cuerpo.

La razón por la cual era el peor día de la vida de Sasuke era porque acababa de ser despedido de su trabajo como vicepresidente de la compañía más importante de la ciudad, “The Kyubi”, la empresa de la familia de Naruto Uzumaki, su mejor amigo, un rubio de ojos azules, piel bronceada, cuerpo atlético, con tres marquitas en cada mejilla lo cual lo hacía parecer un gatito, la misma edad de Sasuke, se conocen desde el jardín de niños, no había sido despedido por el sino por su padre, Minato Namikaze Uzumaki, igual a su hijo a excepción de que tiene el cabello más largo y no posee esas marcas en el rostro.

El Uchiha no sabía cómo tomaría su esposa la noticia, si la tomaría tranquilamente, o no, tenía que encontrar un trabajo pronto para poder mantener a su familia, tanto esposa como hijos.

Manejaba su Ferrari en dirección a su casa, muy bonita por cierto, dos pisos, cuatro habitaciones, cinco baños, su cocina, sala y comedor, un bello jardín al frente y una piscina detrás. Al llegar metió su auto en el garaje y se dispuso a entrar a su hogar, debía contarle a Sakura lo que había sucedido. Entró y pudo notar que la joven estaba haciendo el almuerzo, no había señal del pequeño Kaisuke, seguro estaba tomando una siesta como acostumbraba a hacer todos los días a la misma hora, ya eran las 12: 45 pm, tal vez de despertaría pronto. Dejó su maletín en uno de los sofás de cuero, caminó hacia la cocina y la vio, la mujer con la que llevaba casado 5 años, la madre de sus hijos, esta volteo al sentir la presencia de su marido.

-Oh, buenas tardes cariño- saludó Sakura con una dulce sonrisa mientras dejaba algunas ollas en la encimera- ¿Por qué llegaste tan temprano? – le preguntó curiosamente sin quitar su sonrisa.

-Buen día- saludó Sasuke bajando la mirada angustiado.

-¿Qué sucede?- preguntó la Haruno acercándose al pelinegro- todavía no respondes mi pregunta- le dijo poniendo delicadamente su mano derecha en el mentón del joven para levantar su rostro y mirarlo a los ojos.

-Sakura, tengo que decirte algo muy importante- dijo Sasuke haciendo énfasis en las últimas dos palabras, la tomó del brazo derecho y caminaron hasta la sala, se sentaron en los sofás quedando uno al frente del otro.

-¿Qué está pasando Sasuke?- preguntó la pelirrosa preocupada.

-Es que…- dijo Sasuke haciendo una pausa para tragar un poco de aire- me despidieron- terminó poniendo ambas manos alrededor de su cabeza con expresión de desespero, mientras bajaba su rostro, Sakura se quedó en shock, esta noticia fue muy mala para ella.

Despertó del trance y en su rostro se formó una mueca de enfado.

-¿Estás loco?- preguntó la mujer levantándola voz, algo que hizo que el pelinegro se sorprendiera.

-Pero…- trató de hablar Sasuke muy sorprendido.

-¿Cómo dejaste que te despidieran?- preguntó la chica de ojos esmeralda levantándose del sofá muy enojada mientras gritaba lo que decía- eres un estúpido- esto hizo que el joven se sorprendiera más ¿Cuándo aquella mujer tan amable y cariñosa, de la cual se había enamorado y casado había cambiado su manera de ser?

-Sakura, tranquilízate- trato de calmarla el Uchiha, levantándose y acercándose a ella.

-¿Cómo quieres que me calme? Imbécil- le gritó- aléjate de mí- le dijo empujándolo suavemente.

-Esto se puede solucionar- dijo Sasuke seriamente.

-Si claro- gritó sarcásticamente la pelirrosa, levantó su brazo derecho rápidamente para darle una bofetada a su esposo pero este la detuvo apretando la muñeca de la chica fuertemente con su mano izquierda.

-Papi…- llamó el pequeño Kaisuke bajando las escaleras con un osito de peluche, su favorito, en su mano derecha ya que con la otra se sujetaba de la barandilla de las escaleras.

-Kaisuke, sube a tu habitación- le ordenó Sasuke con voz autoritaria mientras seguía sosteniendo la muñeca de la pelirrosa.

-¿Están peleando?- preguntó el niño con una voz angelical- verdad- les afirmó, dejando caer una lagrima de sus ojos.

-No estamos peleando- dijo Sasuke tratando de cambiar su mirada seria y enojada por una llena de cariño, algo que solo le demostraba a su pequeño primogénito.

-Kaisuke- gritó Sakura tratando de soltarse del agarre de Sasuke- vete a tu cuarto, ya- le gritó al pequeñín volteando para mirarlo, el niño subió corriendo las escaleras y dejo caer su peluche- Sera mejor que arregles esto- dijo la pelirrosa en voz alta logrando soltarse del agarre de Sasuke que la miraba muy molesto por cómo había tratado a Kaisuke; caminó hasta la cocina a seguir haciendo la comida; por otra parte Sasuke subió rápidamente las escaleras, recogió el osito de peluche y entro en la habitación de su hijo.

El pequeño se encontraba en una esquina de su cama, recostado en la pared y abrazando una almohada mientras lloraba en silencio.

-Kai- llamó Sasuke cerrando la puerta y acercándose al niño, se sentó en la cama y le entregó el osito a Kaisuke- no llores- dijo con una voz extrañamente dulce y tierna, mientras le sonreía, el pequeño seguía llorando, el pelinegro mayor se acercó un poco más y recostó al menor en su pecho mientras acariciaba sus azabaches cabellos.

-Papi, tengo miedo- dijo Kaisuke entre sollozos.

-Shhh- calló Sasuke tratando de calmar a su pequeño- nada malo va a pasar- le dijo acostando al nene para que se durmiera- duérmete ya- dijo empujando su frente suavemente tal y como lo hace su hermano mayor Itachi, le sonrió y planto un beso en su está. Se quedó con él hasta que se durmió, luego salió de la habitación y fue a la sala de la casa.

-Sakura, tenemos que hablar- le dijo Sasuke seriamente a la pelirrosa que se encontraba sirviendo el almuerzo en el comedor.

-Yo no tengo nada que hablar contigo- dijo Sakura terminando de poner solo dos platos en la mesa, el de Kaisuke y el de Sasuke- Ve buscando trabajo rápido o te juro que no vuelves a ver a los niños nunca más- amenazó la mujer al Uchiha llevándose otro plato de comida y un biberón a su habitación la cual compartía con su esposo.

Sasuke se quedó pensando en lo que su esposa le dijo ¿será posible que se atreva a separarlo de sus hijos?, un rato después fue a donde se encontraba su hijo durmiendo, con la comida para comer los dos juntos.

Continuara…