Drabble de Naruto - Muéstrame una salida. [kakashi x sakura x itachi]

—¡Kakashi! —Pronunció la pelirrosa al ver al peligris alejarse de ella. Su mirada pareció distante cuando ella se hundió y de su boca no salió palabra alguna. Sus piernas temblaron y sus rodillas se doblaron, haciéndola caer hincada. A su mente regresaban los recuerdos de las caricias que Kakashi proporcionaba en su cuerpo. Venían las palabras que él le decía. Cuando le explicaba cuánto la amaba. Cuando ella decidió entregarle su virginidad.

Pero a nadie le importaban los sentimientos de Sakura, puesto que había sido tachada como una fácil por toda la aldea. Ella empezó una relación con quien era su sensei, mucho mayor que ella y un pervertido en todos los sentidos de la palabra. Fue ignorada por sus amigos y humillada por sus amigas. Ya no tenía nada y cada vez su corazón se partía más. Pero había un solo hombre que no pudo darle la espalda a la pelirrosa; Itachi Uchiha.

Ella sentía protección cuando se encontraba al lado del joven Uchiha, que era tan solo unos años menor que Kakashi. Pero había algo en Itachi, que no podía encontrar en Kakashi. ¿Esa mirada fría pero acogedora? No, Kakashi también la tenía. ¿Esos ojos que inspiraban odio pero que luego se mostraban tiernos? No, Kakashi también los tenía. ¿Esa distancia y la cercanía a la vez? Puede ser. ¿Sus manos en el delicado cuerpo de la joven que le decían que esperaba más que una simple fiera? Eso era.

Aunque Itachi fuese un hombre a quien solo lo veían como obsesionado al sexo, Sakura encontró a alguien que era diferente, un corazón blando, hermosos sentimientos y una buena perspectiva de la vida. Aunque se mostrase como lo contrario.

—No lo llames más, Sakura. —Dijo de manera seria el Uchiha mientras posaba sus grandes manos en los hombros de la chica.— No lo vale. —Agregó Uchiha fijando su mirada en los pasos de Hatake que quedaron marcados en la arena del camino.

Sakura lo miró con los ojos empañados y juntó las fuerzas suficientes para poder levantarse. Se aferró al brazo de Uchiha, justo cuando sintió a alguien detrás de ambos. Sakura volteó y a sus ojos se reveló la presencia de Kakashi Hatake, quien revelaba un kunai en sus manos apuntando hacia la espalda de Itachi.

—No toques a mi mujer de nuevo, Uchiha. —Mencionó Hatake en tono de odio mientras apretaba el kunai con demasiada fuerza.

—Ella es mi mujer. —Pronunció Itachi apretando el puño mientras le daba una mirada rápida a Sakura.— Haruno, aléjate.

Los ojos de Sakura miraron extrañados el panorama mientras se alejaba de esos dos hombres que prendían su sistema al mil por hora. A la mente de Sakura vino la proyección del tacto de Kakashi, suave y salvaje a la vez. Ella amaba cuando podía ver su rostro y cuando sus labios tocaban su piel. Recordaba la sensación de despertar en sus brazos, recordaba cada parte de su anatomía y cuando con la suya, se unían, cuando eran uno solo. Recordaba el tacto de Itachi, frío y cálido a la vez. Ella adoraba cuando sus manos viajaban por su cuerpo buscando nuevo territorio. Recordaba sus besos, sus caricias, cuando se unían. Sin embargo no era lo mismo que con Kakashi, ni con Kakashi con lo que era Itachi.

A la mente de Sakura regresó lo que había hablado con Tsunade el día que fue al hospital porque su período no había bajado por tres meses seguidos. Ella estaba embarazada y no sabía de quien. Pero no era su culpa, no era su culpa haber caído en los brazos de ambos hombres. Fueron ellos, era su culpa por enamorarla con cada mínimo detalle.

Kakashi llevó el kunai de vuelta a su bolsillo y se acercó a Sakura. Los ojos de Itachi se llenaron de furia pero se limitó a quedarse parado, observando.

—Sakura, ¿tú me amas? —Preguntó el peligris tomando las manos de la chica. Ella se limitó a asentir con su cabeza mientras que de sus verdes ojos brotaron unas cuantas lágrimas.

—Kakashi, yo... —Estaba por decir la pelirrosa cuando Itachi se acercó con desinterés y separó las manos de la chica de las del peligris.

—Creo que te dije que te alejes de mi mujer o si no... —Pronunció el Uchiha con la mirada perversa. La pelirrosa decidió interrumpirlo.

—Estoy embarazada.

Kakashi miró con asombro a la chica, extrañado sin saber como reaccionar, acudió a abrazarla mientras de los verdes ojos de Sakura brotaban unas cuantas lágrimas.

—Dime que es mío. —Dijo Itachi tocando el cabello rosa de la chica.

Sakura negó con la cabeza, causando silencio entre los dos hombres a su lado. Kakashi besó la cabeza de la chica y la aferró a él. Itachi pronunció un par de palabras que Kakashi y Sakura ignoraron y se fue.

—Prometo no volver a hacerte daño, Sakura. Voy a protegerte hasta la muerte...

Las palabras de Kakashi llegaron al corazón de Sakura y ella se aferró a él. No importaba ya lo que los demás dirían de su relación. Ella tenía todo lo que deseaba, fuese a costa de perder el amor y la pasión de Itachi Uchiha.