Abrió los ojos y la oscuridad persistió, una agonizante angustia manaba de su cuerpo marcando esa expresión torcida de terror, por siempre.
Corto y consciso... tal vez le falta mucho para ser el prólogo de una leyenda amplia como la de las momias pero yo no suelo quejarme... :D. Saludos.
La dulce expresión de una momia. Buenísimo, no conozco mucho de las momias de Guanajuato. Sólo una vez vi una caricatura de ellas (lo sé muy tonto, pero en las escuelas de aquí ni siquiera tocan el tema de otras culturas que no sean las occidentales) pero que fue lo bastante educativo que se los hice ver a mis primitos, y pues nada, parece ser una historia más que interesante porque los rituales estan lejos de ser iguales a los de los egipcios u otras culturas parecidas. ¡Saludos!